POEMA DE RICARDO MUJIA
“EL CAMINO DE LOS CISNES”
“Crespas olas adheridas a las crines
de los ásperos corceles de los vientos;
alumbradas por rojizos resplandores,
cuando en yunque de montañas su martillo bate el trueno.
Crespas olas que cobijan los amores
de los monstruos espantables en su seno,
cuando entona la gran voz de las borrascas
su salvaje epitalamio, como un himno gigantesco.
Crespas las olas que se arrojan a las playas
coronadas por enormes vestiqueros,
donde turban con sollozos convulsivos
el silencio indiferente de la noche de los hielos”.
POEMA DE MARIA JOSE MUJIA
A BOLIVAR
Aquí reposa el ínclito guerrero:
Bolivia triste y huérfana en el mundo,
Llora a su padre con dolor profundo,
Libertador de un hemisferio entero.
Al resplandor de su invencible acero,
Cayó el león de Iberia moribundo;
Nació la libertad, árbol fecundo,
Al eco de su voz temible y fiero.
De los soberbios Andes el coloso
Yace en la tumba, mas su ilustre nombre,
Grande cual ellos inmortal, glorioso.
Honra a la historia y enaltece al hombre
¡Bolívar! Genio de eternal memoria,
Nombre que dice: ¡Libertad y gloria!
POEMA DE ADELA ZAMUDIO
PROGRESO
Hubo un tiempo de amor contemplativo en que el saber,
muy poco positivo,
confundiendo la tierra con los cielos,
ensalzaba las vírgenes modelos.
Y en que inspirándoles horror profundo
la realidad prosaica de este mundo,
las muchachas de quince primaveras
se arrobaban en místicas quimeras.
Pero desde que el hombre sabio y fuerte,
compadecido de su incierta suerte,
discute con profundos pareceres
la educación moral de las mujeres;
Desde que ha definido su destino,
no señalándole más que un camino,
y ni virtud ni utilidad concilia
sin la maternidad en la familia;
Ya saben ellas desde muy temprano
que amar un ideal es sueño vano,
que su único negocio es buscar novio
y quedar solterona el peor oprobio.
Ninguna ha de quedar chasqueada
hoy día por elegir
-como antes sucedía-
que hoy ocupa el lugar de la inocencia
la prematura luz de la experiencia.
Hoy del amor, preciso es no hacer caso,
porque el amor es pobre y pide plazo,
y por salir cuanto antes del apuro
se acepta lo más próximo y seguro,
De modo que todo hombre hoy al casarse
podrá con la certeza consolarse de que
-a no serlo suya-
siempre fuera su adorada mitad de otro cualquiera.
POEMA DE RICARDO JAIMES FREYRE
LA MUERTE DEL HÉROE
Aún se estremece y se yergue y amenaza con su espada
cubre el pecho destrozado su rojo y mellado escudo
hunde en la sombra infinita su mirada
y en sus labios expirantes cesa el canto heroico y rudo.
Los dos cuervos silenciosos ven de lejos su agonía
y al guerrero las sombras alas tienden
y la noche de sus alas, a los ojos del guerrero, resplandece como el día
y hacia el pálido horizonte reposado vuelo emprenden.
POEMA DE FRANZ TAMAYO
NUEVOS RUBAYAT
PROVERBIO
Luz de la tarde, tórtola que añora
Plañir del mar, otoño que se dora!
Nada hay más dulce ni más triste a un tiempo
Que ese amor de mujer que ruega y llora!
Ni lloro trágico ni heroica risa
No soy alud. Por qué vivir de prisa?
La vida, alegre o desdichada, tiene
Un refugio supremo, la sonrisa!
Fue la sabiduría una cadena
Donde coda eslabón era una pena,
Y antes que jugo de sus ñudos brote
Cantó el peñasco y floreció la arena!
El viejo Segismundo que el beleño
De vivir y saber bebió en su empeño,
Hoy sabe ya la clave del enigma:
Se sueña todo, y quien lo sueña es sueño!...
Como enjambre de víboras canoras
Pasó ante mí la danza de las Horas,
Y en mi redor hiciéronse sus giros
Fúnebres noches, trágicas auroras!
Para siempre! es el canto de la vida,
Y todo són es són de despedida.
Brota un adiós de cada boca abierta,
Y es toda boca en flor boca de herida!
Tendida como un arco el alma tuve
Y un deseo como águila que sube.
Partió la flecha y se perdió en el aire;
Lanzóse el ala y se perdió en la nube!
POEMA JAVIER DEL GRANADO
El horno
Combando el cielo en olorosa tierra
alza su nido el laborioso hornero,
que convierte las pajas en lucero,
y en miel, el barro que su pico aferra.
Por eso el hombre que en su ser encierra
todo el saber del universo entero,
con gran acierto lo imitó al hornero,
y horné en el horno, el trigo de la sierra.
Bendice Dios, la casa en que se amasa,
y en el hogar hay un calor de nido,
si a cada niño se le da su hogaza.
Y si Natalio brinda a su familia
pascual cordero y pan recién cocido,
¡canta el horno en campanas de vigilia!