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Análisis Del Artículo n166

Este documento analiza el artículo 166 del código penal sobre la perturbación de reuniones públicas. Explica que los derechos de reunión y manifestación son constitucionales siempre que se realicen de forma pacífica y sin armas. Define una reunión pública y explica que el delito se comete cuando alguien impide o perturba una reunión lícita a través de la violencia o amenazas.
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Análisis Del Artículo n166

Este documento analiza el artículo 166 del código penal sobre la perturbación de reuniones públicas. Explica que los derechos de reunión y manifestación son constitucionales siempre que se realicen de forma pacífica y sin armas. Define una reunión pública y explica que el delito se comete cuando alguien impide o perturba una reunión lícita a través de la violencia o amenazas.
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ANÁLISIS DEL ARTÍCULO N° 166 DEL CODIGO PENAL

Los derechos de reunión y manifestación son de orden constitucional, por lo que no se


pueden impedir estos derechos, si las personas que participan, actúan conforme las
estipulaciones de no portar armas y en forma pacífica; de lo contrario dichas
conductas resultan ilegales. Para ejercer los derechos de reunión y manifestación, se
notifica a Gobernación Departamental, sin importar que las manifestaciones sean de
carácter político, social, educativo, entre otros. Los medios masivos de comunicación,
son importantes para advertir preventivamente a los ciudadanos, acerca de las
consecuencias que se originan si las manifestaciones no se practican de forma 6
pacífica y sin armas, y que las fuerzas de seguridad pueden restringir el ejercicio de
tales actividades, para garantizar el orden público

Evidentemente hablar de libertad de reunión y manifestación, es hablar de un derecho


fundamental autónomo, pero no aislado; por un lado, se relaciona con la libertad de
asociación y por otro con la libertad de expresión. Con el primer concepto, tienen en
común consistir en un grupo de personas que comparten un mismo fin y la diferencia
con éste, es que la asociación tiene carácter permanente mientras que la reunión o
manifestación es temporal o eventual. Con la libertad de expresión se asemejan que
ambos tienen por fin la difusión de ideas y opiniones, es decir, ambos poseen un
carácter comunicacional; pero la diferencia estriba en que mientras la reunión y
manifestación son de naturaleza eminentemente colectiva, la libertad de expresión es
de naturaleza individual.

CARACTERISTICAS DEL DERECHO DE REUNION Y MANIFESTACION

Dicho lo anterior, cabe señalar algunos rasgos característicos que distinguen la


libertad de reunión y manifestación, el Profesor Pérez Royo destaca cinco elementos o
características:

• El elemento subjetivo: una agrupación de personas que deciden congregarse


con previo acuerdo

• El carácter público: la convocatoria de personas debe hacerse en principio de


forma indeterminada

• El elemento temporal: como su nombre lo indica es algo transitorio

• El elemento finalista: su objeto primordial es la transmisión e intercambio de


ideas y opiniones entre el grupo social congregado
• El elemento espacial: se refiere que se desarrollará en un lugar determinado
de manera fija o en forma de movilización como antes se dijo.

La conducta delictiva que se traduce en impedir o perturbar la realización de una


reunión pública, aparece regulada en el tipo penal del artículo 166 del Código Penal
que indica:

Perturbación de reunión pública Artículo 166.-

El que, con violencia o amenaza, impide o perturba una reunión pública lícita, será
reprimido con pena privativa de libertad no mayor de un año y con sesenta a noventa
días-multa.

Teniendo en cuenta que de acuerdo al Diccionario de la Real Academia de la Lengua


Española, impedir significa imposibilitar la ejecución de una cosa, para efectos de
interpretar el tipo penal debe entenderse por impedir tanto el hecho de que el agente
haciendo uso de la violencia (fuerza física) o la amenaza (anuncio de causar un mal)
impide que la reunión convocada lícitamente llegue a ejecutarse, es decir, los
convocados lleguen a reunirse, o, mejor dicho, se dé inicio a la reunión; así como, que
una vez reunidos imposibilita su desarrollo, esto es, impida que la reunión llegue a
concluir normalmente. En suma, impide que la reunión cumpla sus fines para la cual
fue organizada y convocada.

En efecto, el supuesto de impedir puede materializarse hasta en dos circunstancias


claramente diferentes

 El agente puede desarrollar su conducta punible antes de que se lleguen a


reunir las personas interesadas en la reunión pública convocada. Por ejemplo,
colocarse en la puerta de acceso al local donde se tiene previsto realizar la
reunión e impedir ya sea haciendo uso de la violencia física o la amenaza, que
las personas ingresen,
 El agente puede desenvolver su conducta criminal llevándose a cabo la reunión
pública, impide que concluya. Por ejemplo, se configurara objetivamente el
ilícito cuando estando ya reunidas las personas, el agente haciendo uso de la
violencia física o amenaza grave logra dispersar a las personas, desactivando
de ese modo la reunión. Es decir, logra que la reunión no cumpla sus objetivas.

¿Qué entendemos primero por reunión? En principio supone la conjunción de varias


personas en un determinado espacio físico, que de forma concertada se reúnen para
la concretización de un fin lícito.
En la doctrina constitucional, distingue cuatro caracteres básicos. En primer lugar, la
previa concertación, que la diferencia de las meras agregaciones espontáneas, y que
lleva aparejado un elemento subjetivo, de conocimiento de la reunión a que se asiste y
de la finalidad que esta persigue, así como de consciente voluntariedad de la
asistencia; la temporalidad, que la distingue tanto de la coincidencia momentánea
cuanto de la más prolongada, que estará constituida por la asociación; la concordancia
de objetivos, o finalidad perseguida por la reunión, sin la cual carecería de sentido; y,
en fin, el carácter público más o menos abierto o restringido, que la diferencia de la
reunión o celebración puramente privada.

Ahora bien, ¿Qué debemos concebir por “REUNIÓN PÚBLICA?, serán todas aquellas
agrupaciones de personas (colectivo), que se materializa en espacios físicos no
privados de forma planificada, persiguiendo un propósito revestido de licitud.
Siguiendo a Mesías Ramírez, la reunión es pública, cuando reúne las siguientes
condiciones:

 Si se realiza en lugar destinado al uso público, como: las plazas, las calles o
los parques.
 Si se realiza en un lugar abierto al público, pero al cual puede asistir cualquiera
en cierto momento y bajo determinadas condiciones, como: la iglesia, un
cinematógrafo o una discoteca.
 Cuando se realiza en un lugar privado pero al cual puede asistir cualquiera sin
necesidad de invitación especial. Es de verse, que dicha reunión puede
caracterizar una serie de connotaciones: cultural, religiosa, deportiva, política y
laboral, lo importante a todo esto es que se desenvuelva de forma pacífica, es
decir, sin que se ponga en riesgo de lesión, otros bienes jurídicos de relevancia
constitucional. Cuestión importante a saber, es que la reunión pública sea.

¿Cuándo una reunión ingresa al campo de la legalidad?, primero debe anotarse, que
la reunión para estar revestida de protección jurídica, debe realizarse de forma
pacífica, es que si bien, el derecho de agrupación, constituye una expresión
plenamente democrática, no es menos cierto, que precisamente bajo los cánones
democráticos, el ejercicio y uso de las libertades individuales y públicas, tiene ciertos
límites y, éstos vienen informados por el reconocimiento de otros derechos
constitucionales.

De forma concreta, el orden jurídico proscribe el uso abusivo de un derecho, es que el


derecho de reunión, no puede colisionar con el derecho de todos al libre tránsito, al
libre desplazamiento de un lugar a otro, al derecho al trabajo; el ejercicio del derecho
de reunión, aún legítimo, puede perturbar el ejercicio, por parte de terceros, no ya de
sus derechos, sino, incluso, de sus actividades normales. Máxime, no podrá reputarse
a la reunión como “PACÍFICA”, cuando sus integrantes emplean una serie de medios
contundentes, como palos, piedras y otros, para abrirse el paso entre los transeúntes.
De ninguna manera, el uso de los derechos constitucionales consagrados, ha de
materializarse con arreglo a los principios de razonabilidad y ponderabilidad,
descartando cualquier tipo de manifestación violenta.

Los medios empleados que hace alusión la construcción normativa, son el uso de la
violencia y/o la amenaza; los primeros se viabilizan con el empleo de una fuerza física
bastante, que recae sobre la integridad de los manifestantes, por lo que puede
ingresarse a un concurso delictivo con los tipos penales de lesiones, inclusive con los
de, homicidio y derivados; cuando se lanzan piedras, palos, quemando llantas, u
dispersando sustancias tóxicas. Por los segundos, importa una presión psicológica
intensa, mediando la amenaza de un peligro inminente, para los interese jurídicos más
importantes del ciudadano; ésta debe ser sería, inmediata y efectiva. El mal se
anuncia por el medio verbal que sea gráfico, sonoro, etc. y puede estar dirigido tanto a
los oradores, organizadores o un sector de manifestantes.

Impedir una reunión, lo que importa es evitar su efectiva realización, a partir de la


violencia y/o la amenaza, de obstaculizar si iniciación, frustrando el evento. Se impide
una reunión, cuando se la imposibilita o cuando se la disuelve una vez comenzada y
antes de haber dado fin como reunión. Por su parte, la perturbación de la reunión,
toma lugar, una vez ésta iniciada hasta antes de su culminación, mediante una serie
de actos, sea de hostilidad, de protesta, que tienden a. alterar su normal
desenvolvimiento; cuando se abuchea al orador o, se lanza contra él una serie de
objetos.

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