Ensayo sobre la segunda
guerra mundial
Introducción:
 Considerada la guerra más importante de la historia por su enorme
influencia en los acontecimientos políticos y militares, la Segunda Guerra
Mundial duró de 1939 a 1945. Esta guerra fue precedida por la Primera
Guerra Mundial, que dio lugar a un acuerdo de paz entre los Aliados y
Alemania en virtud del Tratado de Versalles. Esto provocó resentimiento
cuando el país fue derrotado y se convirtió así en una de las principales
causas de la Segunda Guerra Mundial. Adolf Hitler, político, militar y dictador
alemán, fue uno de los principales protagonistas de la guerra, que buscaba
destruir a la Unión Soviética con sus ambiciones de poder y conquista. La
guerra se desencadenó cuando Gran Bretaña y Francia declararon la guerra a
la Alemania nazi tras su invasión de Polonia. Los dos grupos implicados en el
conflicto eran el “Eje”, formado por Alemania, Suiza y Japón, mientras que
Francia, Gran Bretaña, Estados Unidos y la Unión Soviética formaban los
“Aliados”.
Resumen:
 La Segunda Guerra Mundial (1939-1945) fue una contienda armada
internacional que involucró a prácticamente todas las naciones del mundo.
Se desarrolló durante seis años y un día —comenzó el 1 de septiembre de
1939 y finalizó el 2 de septiembre de 1945— enfrentando principalmente a
las potencias del Eje (Alemania, Italia y Japón) contra los Aliados (Francia
y Reino Unido), a los que acabarían uniéndose en 1941 Estados Unidos
(tras el ataque japonés a Pearl Harbor) y la Unión Soviética (después del
intento de Alemania por conquistar Stalingrado).
La guerra tuvo una causa similar al de la Primera Guerra Mundial: el afán
de Alemania, Italia y Japón de expandir sus dominios territoriales.
El desencadenante oficial que hizo estallar el conflicto fue la invasión de
Alemania a Polonia el 1 de septiembre de 1939 (una Alemania a la que se
le prohibió rearmarse después de causar/ser derrotada en la PGM), lo que
provocó la declaración inmediata de guerra de Francia y el Imperio británico.
En este punto, el avance de la contienda se dividió en tres grandes frentes:
- El frente continental: Alemania contra los Aliados por el control de
Europa.
- El frente en los Balcanes y el Norte de África: Italia (con la ayuda
alemana) contra los Aliados por la conquista de estos territorios.
- El frente en el Pacífico: Japón contra los Aliados (más la incorporación de
los Estados Unidos en el conflicto después del ataque japonés a la base
militar estadounidense de Pearl Harbor el 7 de diciembre de 1941) por el
control del Pacífico y Asia Oriental.
Los tres focos de batalla acabaron con victoria aliada. Las primeras
derrotas del Eje llegaron en los Balcanes y en el Norte de África, donde los
Aliados los obligaron a replegarse. Al mismo tiempo, Alemania, alentada
tras conseguir conquistar gran parte de Europa continental, traicionó su
pacto de neutralidad con la Unión Soviética y trató de invadirla; acabando
derrotada en la Batalla de Stalingrado. Mientras, en Europa Occidental, la
unión de fuerzas aliadas consiguió recuperar el dominio europeo y
conquistar Berlín (capital de Alemania), entre otras ofensivas, con el
famoso Desembarco de Normandía. Por último, en el pacífico, Japón perdía
cada vez más territorios, especialmente después de la inclusión de Estados
Unidos en la guerra tras el ataque a Pearl Harbor. Este último frente se
sentenció con el bombardeo nuclear estadounidense de Hiroshima y
Nagasaki el 6 y 9 de agosto de 1945, forzando al Imperio japonés a declarar
su rendición incondicional el 2 de septiembre de ese mismo año, dando por
finalizada así la guerra más mortífera de la historia.
Las principales consecuencias de la Segunda Guerra Mundial fueron: la
caída de los regímenes fascistas de Alemania e Italia, el fin del imperialismo
japonés, la destrucción de una importante parte de Europa, Asia y
Oceanía, la muerte de más de 60 millones de personas y la creación de
la Organización de las Naciones Unidas el 24 de octubre de ese año mismo
año para asegurar la paz internacional y la prevención de futuros conflictos.
Desarrollo:
Una de las razones de la guerra fue el final de la Primera Guerra Mundial, que
terminó con el Tratado de Versalles, y Alemania se vio muy afectada por la derrota.
Alemania necesitaba un líder que la ayudara a recuperarse de este golpe, y así
nació el gobierno de Hitler, que convenció a todo el país de seguir adelante y
convertirse en una gran nación. Hitler se convirtió en líder del Partido Obrero
Alemán y lo transformó en el Partido Nacional Socialista, cuya ideología era
totalmente antimarxista. En 1938 inició una política de expansión territorial,
incorporando a Austria a sus posesiones, y fue en este año cuando Hitler amenazó
con la guerra si no conseguía una pequeña parte de Checoslovaquia. Francia, Gran
Bretaña e incluso Italia acordaron evitar el conflicto, pero al año siguiente Hitler
incumplió este acuerdo y se apoderó de todo el territorio.
 La Segunda Guerra Mundial comenzó oficialmente el 1 de septiembre de 1939, cuando las
fuerzas alemanas de Hitler invadieron Polonia y efectuaron los primeros disparos. El ataque
enfureció a Francia y a Gran Bretaña, provocando la muerte de muchos soldados y civiles,
y un grupo de países buscó venganza. Tras la conquista, Alemania suspendió su
reorganización, mientras que Gran Bretaña y Francia permanecieron a la defensiva. Este
periodo se conoce como la “guerra de los espías”. Las tropas francesas y británicas se
refugiaron tras la línea defensiva creada durante la Primera Guerra Mundial, que los
franceses consideraban intocable. Tras este periodo de calma, la Unión Soviética lanzó una
ofensiva sobre Finlandia, una ofensiva que se saldó con numerosas bajas, pero al final el
ejército soviético no logró su objetivo principal de conquistar Finlandia. Poco a poco, Hitler
empezó a jugar bien sus cartas y consiguió atacar varios países, como Luxemburgo,
Holanda, Bélgica e incluso Francia.
Después de atacar simultáneamente Luxemburgo, Bélgica, Holanda y Francia, el famoso
pícaro llegó a su fin en mayo de 1940, cuando utilizó los mismos métodos que había
empleado al atacar Polonia, conduciendo tanques a través del “Bosque de las Ardenas”, que
se consideraba imposible de invadir para un ejército mecanizado moderno. En ese
momento, Francia parecía perdida, y a finales de mes se produjo la “Gran Retirada de
Dunkerque”, considerada una de las mayores evacuaciones de la historia militar: más de
300.000 soldados aliados fueron evacuados a través del Canal de la Mancha. El 22 de junio
se firmó un armisticio entre Francia y Alemania a petición de los oficiales franceses, y la
batalla por Francia terminó. Hitler eligió el mismo vagón de tren en el que se habían
reunido durante la Primera Guerra Mundial cuando se firmó el armisticio con Alemania,
pero esta vez las posiciones se invirtieron, y fue Alemania la que tomó el lado ganador. A
partir de entonces, Alemania atacó intensamente las principales ciudades británicas durante
cinco meses, que soportaron en silencio, lo que dio a Hitler una sensación de victoria.
Hitler consiguió que los nuevos países, Hungría, Rumanía y Bulgaria, se unieran a
las fuerzas del Eje y en 1941, gracias a un cambio de gobierno, invadió también
Yugoslavia. El sueño de Hitler era gobernar un gran imperio alemán, que abarcara
el mayor número de países posible, y fue entonces cuando decidió ampliar sus
fronteras y llevar a cabo la Operación Barba Roja, destinada a invadir la Unión
Soviética. Entre tres y cuatro millones de soldados fueron enviados a la batalla y
poco a poco la operación avanzó con éxito hasta que llegaron a Moscú y llegó el
invierno.
En esta etapa de la Segunda Guerra Mundial era importante comprender el “eje
romano-berlinés”, que se amplió con la entrada de Japón. Japón estaba muy
avanzado en todos los aspectos y pretendía liberar a las colonias de Europa
Oriental del yugo de Occidente.
Con la invasión de China en 1931, las ambiciones imperialistas de Japón se hicieron
cada vez más audaces hasta que Francia cayó en manos de la Alemania nazi en
1931 y Japón se hizo con el control de la Indochina francesa. La respuesta
estadounidense fue rápida: se congelaron los activos financieros de Japón y se
impuso el embargo de petróleo. Japón sólo tenía dos opciones: retirarse de
Indochina o sufrir una derrota económica. Japón era muy consciente de que no
podía competir con Estados Unidos en una guerra naval debido a su falta de poder
económico y militar, pero decidió ir a la guerra de todos modos. en 1941, Japón
lanzó un ataque sorpresa contra la base estadounidense de Pearl Harbour. El
ataque tuvo éxito y superó sus expectativas, ya que perdieron 64 hombres frente a
los 3.649 que perdió Estados Unidos en esa guerra. Tras este ataque, el deseo de
venganza se reavivó y se escribió el “Discurso de la vergüenza”, que declaraba la
guerra entre Estados Unidos y Japón, pero los japoneses siguieron invadiendo
muchos países, como Hong Kong, Singapur, Tailandia y Filipinas.
Se produjo una batalla naval en el Pacífico, en la que más de 900 barcos fueron
hundidos por un gran número de submarinos alemanes en 12 meses. Fue entonces
cuando Gran Bretaña y Estados Unidos decidieron formar una alianza. Seis meses
más tarde, los estadounidenses consiguieron vengar el ataque furtivo a Pearl
Harbour en la Batalla de Midway, asestando un duro golpe a los japoneses, que
perdieron cuatro portaaviones, e incluso autorizaron un bombardeo masivo de la
población alemana, y la situación empezó a cambiar ciertamente. Mientras tanto,
en el norte de África, los ejércitos alemán e italiano lograron salir victoriosos de
varias batallas, pero luego fueron derrotados en la batalla de El Alamein. Fue en
este momento cuando la guerra dio un giro importante, ya que los alemanes
fueron incapaces de llegar al Canal de Suez y sus planes de capturar las reservas de
petróleo de Oriente Medio fracasaron. Como resultado, los alemanes decidieron
conquistar los campos petrolíferos del Cáucaso. Fue entonces cuando Hitler dividió
sus fuerzas para poner el punto de mira en Stalingrado con el fin de dar un golpe
de estado contra Stalin, que da nombre a la ciudad. Pero fue una decisión
desafortunada, pues, aunque Alemania logró capturar gran parte del Cáucaso, sus
fuerzas decidieron retirarse y desplegarse específicamente para la invasión de
Stalingrado. Al final de esta campaña, en 1943, Alemania se rindió. Como la batalla
más sangrienta de toda la humanidad, marcó la derrota de la Alemania nazi y se
convirtió en uno de los grandes puntos de inflexión de la historia, decisivo para el
resultado de la guerra. A partir de entonces, los rusos fueron conquistando los
territorios cedidos a los nazis.
En julio de 1943 se produjo la “Batalla de Kursk”, conocida como la mayor batalla
de tanques del mundo, en la que los alemanes fueron derrotados porque no
pudieron detener al Ejército Rojo. Ese mismo mes también se produjeron otros
acontecimientos, como el bombardeo aliado de Roma, que inspiró a los italianos
que creían que una ciudad tan sagrada como Roma no sería bombardeada.
Poco después, el dictador italiano Benito Mussolini fue detenido. En 1944, Roma
fue liberada por los aliados y el famoso “Desembarco de Normandía” tuvo lugar el
6 de junio. Un gran número de tropas aliadas desembarcó en las playas de
Normandía para completar la liberación de los territorios de Europa Occidental
ocupados por la Alemania nazi. Avanzando con victorias y conquistas, no llegaron
inmediatamente a París. Cuando los aliados cruzaron la frontera alemana, los
alemanes lanzaron una ofensiva en las Ardenas, conocida como la “Batalla de las
Ardenas”, sin mucho éxito. En enero de 1945, el Ejército Rojo llegó al complejo de
Oswestry, en Polonia, que era un conjunto de campos de concentración de la
Alemania nazi, donde se liberó a un gran número de prisioneros. Como resultado,
el mundo entero comenzó a comprender la realidad de la vida en esa época. El
Holocausto judío tuvo un impacto en la sociedad porque su objetivo era la
aniquilación total de la población judía, en definitiva, un genocidio cuyas víctimas
fueron más de seis millones de personas.
En febrero de 1945, los aliados llevaron a cabo el “bombardeo de Dresde”,
destruyendo toda la ciudad y convirtiéndolo en uno de los mayores bombardeos
civiles de todo el conflicto. En abril, los rusos capturaron Berlín, ganando la última
batalla en Europa, y en el mismo mes Benito Mussolini fue fusilado. Pocos días
después, se produjo el acontecimiento que marcó el final de la Segunda Guerra
Mundial cuando Hitler se suicidó, descrito como “el disparo más importante de la
guerra”, y fue en ese momento cuando la Alemania nazi capituló ante los Aliados,
poniendo fin a la Segunda Guerra Mundial en Europa. A pesar de ello, la guerra
continuó en Asia y Japón. El famoso acontecimiento que acabó con el ejército de
Hirohito tuvo lugar el 6 de agosto, cuando la ciudad de Hiroshima fue
completamente destruida por la primera bomba atómica utilizada contra civiles, y
el 9 de agosto, cuando un dispositivo similar fue utilizado para destruir la ciudad
de Nagasaki. Marcó el final definitivo de la guerra.
Las consecuencias de la Segunda Guerra Mundial fueron brutales, especialmente
para los civiles. La guerra trajo consigo importantes cambios políticos, económicos,
sociales y hegemónicos. Tras varios años de intensa guerra, gran parte del territorio
europeo quedó destruido. Las infraestructuras de varias ciudades, constantemente
bombardeadas por las fuerzas del Eje y de los Aliados, sufrieron graves daños. Al
final de la guerra, Alemania se dividió en dos partes, de acuerdo con las ideologías
de los Aliados y la Unión Soviética.
Esto llevó a la construcción del Muro de Berlín, que marcó la división del territorio
alemán. En 1991, el muro fue derribado y Alemania se reunificó. El Plan Marshall
fue un programa de ayuda económica de 12.000 millones de dólares ofrecido por
el gobierno estadounidense a los países de Europa Occidental para la
reconstrucción y el desarrollo industrial. Después de la guerra, los países que
permanecieron bajo control europeo lanzaron una serie de campañas de
descolonización, y entre 1945 y 1975, estos países obtuvieron su independencia
Conclusión:
En conclusión, la Segunda Guerra Mundial no sólo aportó algo negativo al
futuro de la humanidad, sino que también tuvo un impacto positivo en ella,
ya que hizo que el ser humano tomara conciencia de su potencial benigno y
maligno en ciertas áreas, permitiéndole evolucionar para empezar a dar
respuestas a cosas que antes ignoraba, al tiempo que empezaba a explorar
nuevas áreas de conocimiento. Debe considerarse como una guerra en la
que el hombre ha adquirido experiencia para tomar decisiones en futuros
acontecimientos, ya que el hombre siempre ha aprendido de sus errores y
experiencias a lo largo de su historia