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Ensayo de Credito Publico 1

Este documento describe la evolución del régimen legal del crédito público en Venezuela. Explica que originalmente las leyes se alineaban con la naturaleza de la deuda pública como una fuente extraordinaria de financiamiento para obras públicas. Sin embargo, reformas posteriores ampliaron su alcance a entidades privadas vinculadas al estado y redujeron los controles. Recientes reformas buscan limitar el endeudamiento a niveles sostenibles considerando la capacidad de pago del país.

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Ensayo de Credito Publico 1

Este documento describe la evolución del régimen legal del crédito público en Venezuela. Explica que originalmente las leyes se alineaban con la naturaleza de la deuda pública como una fuente extraordinaria de financiamiento para obras públicas. Sin embargo, reformas posteriores ampliaron su alcance a entidades privadas vinculadas al estado y redujeron los controles. Recientes reformas buscan limitar el endeudamiento a niveles sostenibles considerando la capacidad de pago del país.

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REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DE GUAYANA

PROYECTO DE CARRERA LIC. EN ADMINISTRACION DE EMPRESAS

ASIGNATURA .ADMINISTRACION PUBLICA

ENSAYO

El Crédito Público en Venezuela.

Facilitadora.

Leira

Aldana Alumna: Camacho Génesis

C.i.26691512
El Crédito Público en Venezuela.
Régimen Legal. 2.1. Fuentes de financiamiento del Estado. La Ley Orgánica de la Administración
Financiera del Sector Público en su artículo 7° distingue entre las dos fuentes tradicionales de
financiamiento del Estado, a saber, los ingresos ordinarios y los ingresos extraordinarios. El
numeral 5 del mencionado artículo define como ingresos ordinarios, los ingresos recurrentes.
Estos, a su vez, se definen como aquellos que se prevé producir o se haya producido por más de
tres años (numeral 10 artículo 7°), es decir, los ingresos provenientes de los impuestos y la regalía
petrolera. El numeral 6 señala que se entiende por ingresos extraordinarios, los ingresos no
recurrentes, tales como los provenientes de las operaciones de crédito público y de leyes que
originen ingresos de carácter eventual o cuya vigencia no exceda de tres (3) años.

Son, pues, las operaciones de crédito público la fuente principal de ingresos extraordinarios del
Estado para el financiamiento de la infraestructura pública. De allí su importancia, unido al hecho
de que aquellas representan una carga financiera importante para las generaciones futuras, en el
sentido de que un gobierno se endeuda hoy para que otro pague mañana. Basta considerar los
efectos que aún sentimos de aquel endeudamiento desbocado del V Plan de la Nación contraído
en la época de la bonanza petrolera. Por ello, el crédito público representa el contrato de mayor
interés nacional que un Estado puede contraer, dadas sus consecuencias en cuanto a los
presupuestos futuros y a la economía de la Nación. Por ende, las operaciones de crédito público se
encuentran controladas expresamente por la Constitución de los diferentes países, estableciendo
para su realización una serie de controles y limitaciones legales especiales.

Lo relativo al crédito público estaba contemplado en Venezuela, en los artículos 231 y 232 de la
Constitución Nacional de 1961 y en la respectiva Ley Orgánica. Dice la Constitución: “No se
contratarán empréstitos sino para obras reproductivas, excepto en caso de evidente necesidad o
conveniencia nacional” y que “el Estado no reconocerá otras obligaciones que las contraídas por
órganos legítimos del Poder Público, de acuerdo con las Leyes”. Por otra parte, la Constitución
Nacional de 1999, en su artículo 312, establece lo siguiente: “La ley fijará límites al endeudamiento
público de acuerdo con un nivel prudente en relación con el tamaño de la economía, la inversión
reproductiva y la capacidad de generar ingresos para cubrir el servicio de la deuda pública.

Las operaciones de crédito público requerirán, para su validez, una ley especial que las autorice,
salvo las excepciones que establezca la ley orgánica. La ley especial indicará las modalidades de las
operaciones y autorizará los créditos presupuestarios correspondientes en la respectiva ley de
presupuesto. La ley especial de endeudamiento anual será presentada a la Asamblea Nacional
conjuntamente con la Ley de Presupuesto. El Estado no reconocerá otras obligaciones que las
contraídas por órganos legítimos del Poder Nacional, de acuerdo con la ley.

” 2.2. Evolución del Régimen Legal del Crédito Público en Venezuela. La evolución del régimen
legal del crédito público en Venezuela puede dividirse en dos etapas. La primera comprende las
leyes promulgadas hasta 1941, y la de 1959, y se caracteriza por la correspondencia de la
regulación legal con la naturaleza y efectos económicos de la deuda pública. La segunda etapa,
que se inicia con la Reforma de 1970 y sus reformas parciales de 1981 y 1983, finalizó eliminando
la congruencia entre el régimen legal y la naturaleza y fines de la deuda pública. 13Hasta 1944, las
leyes de crédito público fueron formuladas en el marco de la teoría clásica, que postulaba la
neutralidad de la Hacienda: equilibrio presupuestario, neutralidad del impuesto y excepcionalidad
del endeudamiento. Las leyes posteriores continúan con el criterio de que la deuda pública es una
fuente de financiamiento extraordinaria, criterio reflejado en la Constitución de 1961 y en la de
1999. Hasta la Reforma de 1970 los sujetos de la normativa eran, exclusivamente, las personas
públicas. Es a través del carácter público o privado del deudor que se hace referencia a la actividad
que se quiere financiar con el crédito. Desde un punto de vista económico, los entes estatales
producen “bienes públicos”, es decir, construyen obras y prestan servicios que, por lo general, no
son atractivos para los particulares.

En la Ley de 1959 se da por sentado que las operaciones de crédito son las que realizan las
personas de Derecho Público. “Los empréstitos y demás operaciones de crédito tendrán por
objeto arbitrar fondos o recursos para atender necesidades de interés general, realizar obras de
utilidad pública, y cubrir posibles necesidades transitorias de fondos en las cajas de los respectivos
entes públicos” (artículo 2°). El legislador de 1959 estableció un régimen de autorización para la
contratación de deuda pública, a fin de prevenir los efectos de la contratación irresponsable. “Los
contratos de la Nación, Estados, Municipalidades e Institutos o establecimientos autónomos que
originen obligaciones cuyo pago total o parcial por el respectivo ente público se haya previsto en el
transcurso de uno o más ejercicios fiscales, posteriores al ejercicio vigente se considerarán como
operaciones de Crédito Público para los efectos de esta Ley y quedarán sujetos a las formalidades
y requisitos que establece la misma” (artículo 3°). Es decir, que sólo son operaciones de crédito
público, las que realizan las personas de Derecho Público, y, sólo existirá operación de crédito
público si en el contrato se pacta la emisión o la aceptación por el ente público de documentos
negociables, y cuando se ejecute la previsión contractual

. La segunda etapa en cuanto a la normativa del crédito público se caracteriza por la progresiva
desaparición de la especificidad de la materia regulada: la Deuda Pública. Este 14proceso se inicia
con la reforma de 1970, que somete a autorización las operaciones de crédito público a largo plazo
de personas de derecho privado, cuando el capital o patrimonio de las mismas pertenezca al
menos en un 60%, a un ente público. Es decir, se establece una heterogeneidad de operaciones
que a partir de 1976 la Ley declara como de crédito público, que va a impedir que exista un
régimen común para todos los sujetos de la Ley, salvo el requisito de autorización y los supuestos
sancionatorios. Se incluyen las sociedades del Estado dentro del ámbito personal de aplicación de
la Ley de 1976, y se dedica un capítulo a regular las operaciones de sus empresas.

Además, se le somete a la autorización del Ministerio de Hacienda, en razón del incontrolado


endeudamiento a corto plazo de algunas empresas del Estado. En diciembre de 1980 se aprobó la
primera de una serie de reformas hechas a la Ley Orgánica de Crédito Público, orientadas a poner
control al desorden y displicencia que comenzaban entonces a percibirse existían en la
contratación y manejo del crédito público. Consistió dicha reforma, fundamentalmente, en el
establecimiento de mayores controles para la celebración de los contratos de gestión ordinaria por
parte de los ministerios, y en la fijación de límites anuales de endeudamiento para la realización de
operaciones de crédito a corto plazo por parte de los institutos autónomos, vías ambas que para
entonces se había comprobado que constituían fuentes de endeudamiento sin el debido control,
ni previsión para atender posteriormente las obligaciones respectivas.

Sin embargo, quedó demostrado mediante las actitudes adoptadas por quienes estaban al frente
de institutos autónomos, que habían estado comprometiendo financieramente al país directa e
indirectamente, que esta Reforma de Ley no sería suficiente para alcanzar el fin perseguido, y así
se procedió en agosto del siguiente año, en 1981, a efectuar otra Reforma de la citada Ley,
dirigida en esa oportunidad, como en efecto se aprobó, a establecer que salvo los institutos
autónomos que específicamente se señalaban en la Ley, ningún otro podría realizar operaciones
de crédito a corto plazo.

Las de largo plazo requerían la aprobación expresa del Congreso mediante ley especial, en cada
caso. 15Entre varias otras limitaciones, en esa oportunidad se estableció que en los casos de
institutos autónomos que realicen operaciones de compra-venta de productos, deberán
comprobar que disponen de los recursos requeridos para cubrir cualquier eventual pérdida que
puedan experimentar como consecuencia de dichas operaciones, así como la nulidad de las
operaciones de crédito público realizadas en contravención de lo dispuesto en la Ley, y las
sanciones para los funcionarios que celebren o autoricen operaciones de crédito nulas.

La situación originada con el problema de la deuda y la búsqueda de medios cada vez más
estrictos y efectivos de control de endeudamiento público, y el deseo de limitar su uso a lo
considerado realmente prioritario y en la medida que pueda responderse por las obligaciones
contraídas cuando ellas se hacen exigibles, lo que nos llevó a la reforma de la Ley de Crédito
Público de 1992. Las acciones se centraron en poner un tope al endeudamiento anual, en función
de la deuda ya contraída y la capacidad presente y futura de pago.

Adicionalmente, se efectuó una Reforma a la Ley Orgánica de Régimen Presupuestario, para evitar
el financiamiento de créditos adicionales al presupuesto utilizando los ingresos provenientes de la
devaluación del bolívar, recursos que sólo se podrían utilizar para el pago de compromisos en
divisas, como los correspondientes al servicio de la deuda externa, salvo en caso de emergencias
nacionales. En esta Ley Orgánica de Crédito Público de 1992 se establece la obligación del
Ejecutivo Nacional de presentar conjuntamente con el proyecto de ley de presupuesto de cada
año, para su autorización mediante ley especial que debe ser promulgada simultáneamente con la
Ley de Presupuesto, el monto máximo de endeudamiento neto que puede contraer la República
durante el respectivo ejercicio fiscal. Dicho monto debe ser calculado teniendo en cuenta de
manera seria y bien ponderada las estimaciones hechas sobre la capacidad de pago tanto presente
como futura de la República, deduciendo, para determinar el nuevo endeudamiento posible, las
obligaciones ya contraídas y por contratar.

Por consiguiente, la Ley que autoriza el endeudamiento neto anual, popularmente denominada
“ley paraguas”, no es una ley de crédito público dirigida a permitir que en ella se incluya cuanta
operación de crédito público se desee realizar, sino sólo aquellas que teniéndose por prioritarias,
encajan dentro del monto neto de endeudamiento permitido en el ejercicio objeto de análisis,
visto el desenvolvimiento económico, fiscal y financiero previsto de manera racional para los años
siguientes

2.3. La Ley Orgánica de la Administración Financiera del Sector Público del 5 de septiembre de
2000. La Ley Orgánica de la Administración Financiera del Sector Público en su Título III regula lo
referente al Sistema de Crédito Público. El artículo 78 de la Ley determina el objeto de las
operaciones de crédito público, los cuales son: arbitrar recursos o fondos para realizar inversiones
productivas, atender casos de evidente necesidad o de conveniencia nacional, incluida la dotación
de títulos públicos al Banco Central de Venezuela para la realización de operaciones de mercado
abierto con fines de regulación monetaria y cubrir necesidades transitorias de tesorería. El artículo
77 de la Ley, ya mencionado en el punto

1.3., determina cuáles son operaciones de crédito público. Son operaciones de crédito:

f) La emisión y colocación de títulos, incluidas las letras del tesoro, constitutivos de empréstitos o
de operaciones de tesorería

. g) La apertura de créditos de cualquier naturaleza

. h) La contratación de obras, servicios y adquisiciones cuyo pago total o parcial se estipule realizar
en el transcurso de uno o más ejercicios posteriores a aquél en que se haya causado el objeto del
contrato, siempre que la operación comporte un financiamiento

. i) El otorgamiento de garantías.

j) La consolidación, conversión, unificación o cualquier forma de refinanciamiento o


reestructuración de deuda pública existente. El artículo 76, ya mencionado, define el crédito
público como la capacidad de los entes regidos por esta Ley para endeudarse. Y, ¿cuáles son estos
entes?

Según el artículo 6°, están sujetos a las regulaciones de la Ley, los entes u organismos que
conforman el sector público, enumerados a continuación:

1.La República.

2.Los estados.

3.El Distrito Metropolitano de Caracas.

4.Los distritos.

5.Los municipios.

6.Los institutos autónomos.


7.Las personas jurídicas estatales de derecho público.

8.Lasa sociedades mercantiles en las cuales la República o las demás personas a que se refiere
este artículo tengan participación igual o mayor al cincuenta por ciento del capital social..

. 9. Las sociedades mercantiles en las cuales las personas a que se refiere el numeral anterior
tengan participación igual o mayor al cincuenta por ciento del capital social.

10.Las fundaciones, asociaciones civiles, y demás instituciones constituidas con fondos públicos o
dirigidas por algunas de las personas referidas en este artículo, cuando la totalidad de los aportes
presupuestarios o contribuciones en un ejercicio, efectuados por una o varias de las personas
referidas en este artículo, represente el cincuenta por ciento o más de su presupuesto. En cuanto
a la celebración de estas operaciones, se ha establecido un procedimiento de autorización de las
mismas por parte de la Asamblea Nacional, mediante ley especial, sin el cual los entes regidos por
la Ley no podrán llevarlas a cabo.

18El artículo 80 establece que, conjuntamente con el proyecto de ley de presupuesto, el Ejecutivo
presentará a la Asamblea Nacional, para su autorización mediante ley especial que será
promulgada simultáneamente con la ley de presupuesto, el monto máximo de las operaciones de
crédito público a contratar durante el ejercicio presupuestario respectivo por la República, el
monto máximo de endeudamiento neto que podrá contraer durante ese ejercicio; así como el
monto máximo de letras del tesoro que podrán estar en circulación al cierre del respectivo
ejercicio presupuestario. Las modalidades de las operaciones se indicarán en esta ley especial de
endeudamiento anual

(artículo 83). Igualmente, el mismo artículo 80 estipula en su primer aparte que los montos
máximos se determinarán, de conformidad con las previsiones de la ley del marco plurianual del
presupuesto, atendiendo a la capacidad de pago y a los requerimientos de un desarrollo ordenado
de la economía, y se tomarán como referencias los ingresos fiscales previstos para el año, las
exigencias del servicio de la deuda existente, el producto interno bruto, el ingreso de
exportaciones y aquellos índices macroeconómicos elaborados por el Banco Central de Venezuela
u otros organismos especializados, que permitan medir la capacidad económica del país para
atender las obligaciones de la deuda pública. Se establece además, que el Ejecutivo Nacional
procederá a celebrar las operaciones de crédito público en las mejores condiciones financieras que
puedan obtenerse e informará periódicamente a la Asamblea Nacional.

Por otra parte, el Banco Central de Venezuela será consultado por el Ejecutivo Nacional sobre los
efectos fiscales y macroeconómicos del endeudamiento y el monto máximo de letras del tesoro
que se prevea en el proyecto de ley de endeudamiento anual; así como sobre el impacto
monetario y las condiciones financieras de cada operación de crédito público. Su opinión tendrá el
carácter de no vinculante (artículo 86).

Como excepciones al procedimiento de autorización, tenemos: 191.Por encima del monto


máximo a contratar autorizado por la ley de endeudamiento anual, sólo podrán celebrarse
aquellas operaciones requeridas para hacer frente a gastos extraordinarios producto de
calamidades o de catástrofes públicas, y aquellas que tengan por objeto el refinanciamiento o la
reestructuración de deuda pública, las cuales deberán autorizarse mediante ley especial (artículo
81).

2.No requerirán ley especial que las autorice, las siguientes operaciones:

a) la emisión y colocación de letras del tesoro con la limitación establecida en el artículo 80, ya
mencionado, así como cualesquiera otras operaciones de tesorería cuyo vencimiento no
trascienda el ejercicio presupuestario en el que se realicen, y,

b) Las obligaciones derivadas de la participación de la república en instituciones financieras


internacionales en las que ésta sea miembro (artículo 87).

3.No se requerirá ley autorizadora para las operaciones de refinanciamiento o reestructuración


que tengan como objeto la reducción del tipo de interés pactado, la ampliación del plazo previsto
para el pago, la conversión de una deuda externa en interna, la reducción de los flujos de caja, la
ganancia o ahorro en el costo efectivo de financiamiento, en beneficio de la República, con
respecto a la deuda que se está refinanciando o reestructurando (artículo 88).

4.Están exceptuadas del régimen previsto en este Título: el Banco Central de Venezuela y el Fondo
de Inversiones de Venezuela; las sociedades mercantiles del Estado dedicadas a la intermediación
de crédito, regidas por la Ley General de Bancos y Otras Instituciones Financieras, las regidas por la
Ley de Empresas de Seguros y Reaseguros; las creadas o que se crearen de conformidad con el
artículo 1º del Decreto Ley N° 580 del 26 de noviembre de 1974, mediante el cual se reservó al
Estado la industria de la explotación del mineral de hierro; siempre y cuando se certifique la
capacidad de pago de las sociedades mencionadas (artículo 89).

5. Los institutos autónomos cuyo objeto principal sea la actividad financiera así como las
sociedades mercantiles del Estado, están exceptuados del requisito de la ley especial de
autorización para realizar operaciones de crédito público; sin embargo, requerirán la autorización
del Presidente de la República, en Consejo de Ministros (artículo 90).

20La Ley Orgánica de Administración Financiera del Sector Público establece una serie de
prohibiciones en esta materia:

1.En su artículo 91, se determina que no realizarán operaciones de crédito público, los institutos
autónomos y demás personas jurídicas públicas descentralizadas funcionalmente que no tengan el
carácter de sociedades mercantiles, así como las fundaciones constituidas y dirigidas por algunas
de las personas jurídicas referidas en esta Ley. Se exceptúan de esta prohibición los institutos
autónomos cuyo objeto principal sea la actividad financiera, a los solos efectos del cumplimiento
de dicho objeto.
2.Se prohíbe a la República y a las sociedades cuyo objeto no sea la actividad financiera, otorgar
garantías para respaldar obligaciones de terceros, salvo las que se autoricen conforme al régimen
legal sobre concesiones de obras públicas y servicios públicos nacionales (artículo 92).

3.No se podrá contratar operaciones de crédito público con garantía o privilegios sobre bienes o
rentas nacionales, estadales o municipales (artículo 93).

4.La deuda pública a corto plazo será pagada necesariamente a su vencimiento y no podrá ser
refinanciada (artículo 94).

5.Los estados, distritos y municipios, y las otras entidades reguladas por esta ley y los entes por
ellos creados, no podrán realizar operaciones de crédito público externo, ni en moneda extranjera,
ni garantizar obligaciones de terceros (artículo 95).

Por medio del artículo 96 de la Ley Orgánica de la Administración Financiera del Sector Público, se
crea la Oficina Nacional de Crédito Público como órgano rector del Sistema de Crédito Público, la
cual tendrá como misión asegurar la existencia de políticas de endeudamiento, así como una
eficiente programación, utilización y control de los medios de financiamiento que se obtengan
mediante operaciones de crédito público.

Dentro de sus atribuciones, según lo establecido en el mismo artículo, están las siguientes:

a) Participar en la formulación de los aspectos crediticios de la política financiera que para el


sector público nacional elabore el Ministerio de Finanzas.

b) Proponer el monto máximo de endeudamiento que podrá contraer la República en cada


ejercicio presupuestario

. c)Dirigir y coordinar las gestiones de autorización, la negociación y la celebración de las


operaciones de crédito público.

d)Dictar las normas técnicas que regulen los procedimientos de emisión, colocación, canje,
depósito, sorteos, operaciones de mercado y cancelación de la deuda pública.

Para culminar este conocimiento general del crédito publico vale resaltar que???

Las operaciones del Crédito público tienen como finalidad u objeto, lograr fondos o recursos para
realizar alguna actividad para realizar obras reproductivas.

Atender casos evidentes necesidad o de conveniencia nacional y cubrir necesidades transitorias.


Referencias

Internet. links

https://www.dnp.gov.co/programas/subdireccion-de-credito/operaciones-de-credito-
publico/Paginas/Cr%C3%A9dito-Interno.aspx

https://docs.venezuela.justia.com/federales/leyes-organicas/ley-organica-de-credito-
publico.pdf

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