Reflexión Teológica
SINODALIDAD, se. La jerarquización de la Iglesia
no es un pecado, es una estructu-
PERO EN UN ra organizacional que favorece el
CRISTIANISMO clericalismo y muchos otros males
que han llegado a hacer inviable el
NO SACERDOTAL amor evangélico que hace posible
caminar a las/os cristianas/os con
otras/os.
P. Jorge Costadoat, SJ*
Más precisamente, la sinodalidad
Resumen:
es imposible mientras ella dependa
en última instancia del estamen-
La tesis de este artículo es la to sacerdotal que opera mediante
sinodalidad1. Imposible realizarlo separaciones entre lo sagrado y lo
mientras predomine en la Iglesia la profano, entre personas superiores
versión sacerdotal del cristianismo. e inferiores, y entre Iglesia y mun-
La sinodalidad se propone como re- do. Estas separaciones son el resul-
medio al clericalismo2 pero el cle- tado exacto de las religiones cen-
ricalismo tiene raíces profundas en tradas en el templo, el sacerdote y
un tipo de sacerdocio que se intro- el sacrificio3. Si de víctimas se trata,
dujo en el cristianismo por la ven- es de recordar que Jesús fue asesi-
tana y que nada tiene que ver con nado y no inmolado a un Dios nece-
la entrega personal que Jesús hizo sitado de sangre para perdonar.
de su vida en favor de todo tipo de
víctimas. El clericalismo es un pe-
Palabras clave: Sacerdocio, for-
cado del que hay que arrepentir-
mación, seminarios, crisis sacerdo-
tal, laicado.
1
El concepto de sinodalidad significa,
en breve, caminar juntas/os laicas/os, ESCISIÓN IGLESIA-MUNDO
pastores y el obispo de Roma (Ver a
Schickendantz, "A la búsqueda de una
“completa definición de sí misma”. 1. La Iglesia se resta del mundo
Identidad eclesial y reforma de la Igle-
L
sia en el Vaticano II", 99-130; Luciani
y Silveira, Reflexiones para contribuir a a sinodalidad debe ubicarse
la reforma eclesial La sinodalidad en la en el más amplio de los pla-
vida de la Iglesia).
2
Hervé Legrand, "Les dimensions sys- nos. La humanidad entera se
témiques de la crise des abus dans encamina junta a su cumplimiento
l’Église Catholique et la réforme de escatológico. La voluntad del Vati-
l’ecclésiologie courante", 551-87. 570.
* Jesuíta chileno (1958). Centro Teo-
lógico Manuel Larraín. Pertenece a la 3
Trigo, “II Seminario Internacional de
Pontificia Universidad Católica de Chi- Teología del Grupo Iberoamericano de
le. Publicaciones: Trazos de Cristo en Teología sobre la renovación eclesial
América Latina (2010). Francisco: un en clave sinodal y ministerial” (ma-
papa que mira lejos (2017). Jesús, an- nuscrito, 6); Greschake, Ser sacerdote
tes y después de Cristo (2019). hoy, 90-91.
Asamblea Eclesial 125
Sinodalidad, pero en un cristianismo no sacerdotal
cano II ha sido que la Iglesia, como Digo que la separación ha sido
pueblo de Dios, haga este camino perjudicial. La institución eclesiás-
con los otros pueblos de la tierra tica y los cristianos en general han
(LG 13). Este deseo del Concilio causado daño cuando han conside-
ha salido al paso de la eclesiología rado a las culturas no-cristianas o
anterior que veía a la Iglesia como a la misma modernidad como rea-
sociedad perfecta ante un mundo lidades ajenas, menospreciables u
imperfecto. Este anhelo, sin embar- objetos de apropiación. En América
go, se ha cumplido a medias, sea Latina la Iglesia aupó una coloniza-
porque el Concilio no especificó sufi- ción devastadora para los pueblos
cientemente las condiciones que ha- originarios. Y, por otra parte, esta
rían posible una apertura tan gran- separación ha sido corrosiva para
de a las/os otras/os y a los tiempos, la misma Iglesia. Su enfrentamien-
sea porque las generaciones ante- to con la modernidad, para dar
riores resistieron el cambio. otro ejemplo, le ha costado la clase
obrera, la confianza de las mujeres
Esta separación de la Iglesia del y, desde hace poco, las nuevas ge-
mundo ha tenido consecuencias ne- neraciones de jóvenes que la miran
gativas para ambos. Por cierto, la como una institución anacrónica y
Iglesia es mundana en ambos sen- peligrosa. Su esfuerzo evangeliza-
tidos de la palabra. Ella, como el dor es percibido cada vez menos
mundo, es creatura de Dios; la Igle- como una buena noticia.
sia es el mismo mundo en cuanto
cree en Jesucristo pero, al igual que 2. El seminario separa a los
el mundo, ella es pecadora. Así las seminaristas del mundo real
cosas, y siguiendo el paradigma del
Concilio de Calcedonia, el cual reza La causa decisiva de la separa-
que el Hijo de Dios, a partir de la En- ción señalada ha sido el seminario
carnación, solo pudo ser reconocido tridentino, en el que la institución
en Jesús de Nazaret, ella no puede eclesiástica ha formado a sus mi-
pretender hacerse valer sino a tra- nistros. La formación del clero,
vés de testigos que, como al mismo desde el concilio de Trento hasta
nazareno, unos los reconocen como la actualidad, ha sustraído a los
“nacidos del agua y del Espíritu” y seminaristas de sus lugares ori-
otros no. La Iglesia no puede con- ginarios de vida, insertándolos en
fundirse con el mundo, pero tampo- espacios cerrados, protegidos, a
co separarse de él; la trascendencia veces autárquicos, donde han sido
de su misterio solo es registrable y capacitados por una casta sacerdo-
discernible en su mundanidad. Ella tal autogenerada para evangelizar
misma una y otra vez ha de conver- y otorgar los sacramentos. Según
tirse al Cristo que se le manifiesta Camilo Barrionuevo, a propósito
en aquellos otros con quienes com- de la ratificación del celibato obli-
parte una misma humanidad. gatorio para los clérigos en Trento,
126 Revista CLAR No. 4 de 2021 - Revista CLAR No. 1 de 2022
Reflexión Teológica
se siguieron consecuencias nega- nuevo concepto de seminario. Por
tivas: “La primera de ella fue que entonces Medellín quiso capacitar
Trento decretó la instauración de a los seminaristas para el discerni-
‘seminarios’ o centros oficiales de miento de los signos de los tiempos
formación y entrenamiento moral- pero las últimas conferencias gene-
intelectual para los futuros sa- rales del episcopado terminaron por
cerdotes. Si bien, el apartar a los abandonar una apertura a la reali-
futuros sacerdotes –adolescentes dad contemporánea tan importan-
en su mayoría– a ambientes ho- te. A pocos años de comenzadas,
mosociales ‘retirados del mundo’ los experimentos más interesantes
en que recibían una elitista forma- de seminarios abiertos a la realidad
ción intelectual, tuvo el efecto de de los contemporáneos fracasaron.
disminuir momentáneamente las
transgresiones al celibato, también Entretanto, también se debilitó el
tuvo una serie de efectos colatera- progreso más importante del Vati-
les indeseados –asociados a refor- cano II en relación a la concepción
zar una cultura de soberbia cleri- de la identidad y misión de los mi-
cal– que, a la larga, fue inefectiva nistros. El Concilio quiso volver a los
para transformar a los candidatos orígenes. En vez de “sacerdotes”
al sacerdocio”4. recuperó del primer cristianismo la
denominación de “presbíteros” para
El Vaticano II entrevió el proble- sus ministros. Reordenó los tria
ma y, en línea con su propósito de munera5. Priorizó la misión evange-
achicar la distancia Iglesia-mundo, lizadora de los presbíteros sobre la
la del sacerdocio ministerial y el sacramental (sacerdotal) y la real
sacerdocio real, la de la eucaristía (de gobierno) (Presbyterorum or-
como ara y como mesa, entregó a dinis 4). Si se acostumbraba hablar
los episcopados nacionales la po- de sacerdotes-profetas-reyes, des-
sibilidad de innovar en la forma- de ahora debía hacérselo en térmi-
ción de los seminaristas (Optatam nos de profetas-sacerdotes-reyes.
totius 1). Estos pudieron ensayar Estas tres funciones del ministro
otro tipo de seminarios. Lo forjaron ordenado, en todo caso, debieron
en su mente Rafael Tello, argenti- ser puestas al servicio de la misión
no, y el beato salvadoreño Rutilio de toda la Iglesia. A este efecto, el
Grande. Los hubo en México, Brasil Vaticano II rebajó la importancia
y Centroamérica. En Chile, se inau- cristológica del ministerio presbite-
guraron pequeñas comunidades de ral, basada en la idea del sacerdo-
formación como expresión de un te como alter Christus que actúa in
persona Christi, orientándoselo en
clave eclesiológica, a saber, ponién-
4
Camilo Barrionuevo Durán, Una Igle- dolo al servicio de la comunidad.
sia devorada por su propia sombra.
Hacia una comprensión integral de la
crisis de los abusos sexuales en la Igle- 5
Legrand, "Les dimensions systémi-
sia Católica, 280. ques…", 579.
Asamblea Eclesial 127
Sinodalidad, pero en un cristianismo no sacerdotal
Pero este giro prácticamente no ricordia. Sin embargo, el semina-
se ha cumplido. En vez de ser for- rio continuó orientándolos priori-
mados por el pueblo de Dios –por tariamente a la celebración de la
las comunidades, por las familias, eucaristía como si esta fuera “la
por las mujeres y otros estamen- cumbre” y “la fuente” de toda la ac-
tos–, los seminaristas han conti- tividad de la Iglesia –según el decir
nuado siéndo presbíteros que si- del mismo Vaticano II (Sacrosac-
guieron considerándose en primer tum concilium 10). La espiritualidad
lugar sacerdotes, integrantes de de los seminaristas fue equilibrada
una estirpe que se elige a sí mis- con las obras de teólogos del siglo
ma y no da cuenta (accountibility) XX, que subrayaban la relevancia
a nadie más que los superiores je- de la vida y ministerio de Jesús de
rárquicos de quienes depende su Nazaret. Pero, desde un punto de
promoción en la carrera eclesiás- vista práctico, ellos han continuado
tica. Es así como, en la cúspide de pensando que, antes que nada, son
la pirámide, la figura del Papa aún los representantes de lo sacro en la
es la de un personaje con poder profanidad del mundo.
absoluto (ejecutivo, legislativo y
judicial)6 y sacro (semidivino, into- “Desterrar la clericalización.
cable, peligroso de criticar). Cambiar la visión y misión de los se-
minarios porque es donde se forja
Por cierto, también ha habido el clericalismo”7. “El clericalismo co-
cambios muy positivos en la for- mienza a formarse desde el ingre-
mación. El empeño de ofrecer una so al Seminario de los candidatos
formación integradora en clave al Sacramento del Orden”8. Estas
pastoral de las dimensiones espi- afirmaciones de la reciente Síntesis
rituales y humanas de los semi- narrativa, documento que recabó
naristas, favoreció su crecimiento las opiniones del pueblo de Dios que
personal. Debe destacarse que el prepararon la Asamblea Eclesial, in-
Concilio haya puesto a Cristo en el dican que la cuna del clericalismo
centro de la vida espiritual de los son los seminarios. Por nuestra par-
seminaristas, haciendo de ellos te, afirmamos que el clericalismo es
pastores como Jesús lo fue. Así los un resultado preciso de la forma-
alejaba de la figura del Cristo sumo ción sacerdotal. Esta produce las
y eterno sacerdote dominante en la separaciones indicadas que el cleri-
formación de la primera mitad del calismo necesita para funcionar.
siglo. El sacerdote postconciliar ha
sido “más humano”, pues se consi-
dera seguidor del Jesús que anun-
ció el Reino de Dios a toda suerte
de personas necesitadas de mise- 7
CELAM, “Síntesis narrativa. La es-
cucha en la 1ª asamblea eclesial para
América Latina y El Caribe”, 135-136.
8
CELAM, “Síntesis narrativa…”, 107-
6
Ibíd., 564. 109.
128 Revista CLAR No. 4 de 2021 - Revista CLAR No. 1 de 2022
Reflexión Teológica
CRISIS DE UNA PERSONA misoginia. La distancia de las mu-
ESCINDIDA jeres se agravó con la encíclica Hu-
manae vitae (1968) que reprobó el
1. La separación Iglesia-mundo uso de medios artificiales de con-
alojada en la psiquis de los trol de la natalidad y la exclusión
sacerdotes de la comunión eucarística de las
divorciadas. Entre ellas y los pres-
El Concilio dejó a medio camino la bíteros se formalizó una enemistad.
reforma que impulsó. Por una parte, Muchos de estos han debido cargar
subrayó la condición de hijas e hijos con la pena de verlas alejarse de
de Dios de todos los bautizados; ha- la Iglesia para siempre, pues se les
bló de pueblo de Dios subordinando ha hecho enseñar una doctrina que
el sacerdocio ministerial al sacerdo- les parece gravemente equivocada.
cio común de los fieles; exigió por
igual la santidad a consagradas/os Además de lo anterior, la enor-
y laicas/os, acabando con la idea de me crisis de los abusos de poder, de
“estados de perfección”, a saber, el conciencia y sexuales del clero, y su
concepto de superioridad que pres- ocultamiento sistemático, tiene que
bíteros y religiosas/os tenían de sí ver con una institución eclesiástica
mismas/os9. Pero, por otra parte, que debe censurar forzosamente su
no tuvo la suficiente fuerza teoló- propia mundanidad, sea en razón
gica para suprimir las separacio- de su fragilidad, sea a causa de su
nes señaladas, ya cuando distingue pecaminosidad. El pueblo de Dios
Iglesia y mundo como realidades ha puesto en cuestión la formación
yuxtapuestas, ya modernizando del clero. Las/os laicas/os no creen
simplemente los seminarios triden- en los votos de las/os religiosas/os
tinos. En los años sucesivos, hemos de pobreza, castidad y obediencia.
constatado que estas separaciones Bien parece que impiden la madu-
se alojan tempranamente en la ración de personas que han debido,
psique de los seminaristas y, más como cualquier ser humano, ganar-
tarde, hace entrar en crisis a per- se la vida, establecer relaciones de
sonas que por naturaleza son seres intimidad y tomar sus propias de-
sociales y, por oficio, funcionarios cisiones. Las/os fieles no creen en
de una institución que requiere de sacerdotes muy divinos, pero poco
su escisión para operar. humanos, que les enseñan, pero no
aprenden de ellos cómo es la vida y
La separación respecto de las el mundo real.
mujeres requeriría un capítulo
aparte. En la formación aún hay Escribo desde Chile. En ningún
país latinoamericano “la crisis de
los abusos” ha explotado con tanta
9
Legrand, "Les dimensions systémi- fuerza. En Chile los presbíteros y
ques…", 566. los seminaristas han comenzado a
Asamblea Eclesial 129
Sinodalidad, pero en un cristianismo no sacerdotal
dejar de usar el clergyman para no monio tampoco lo será. Si no dan
ser insultados en la calle o en la señales de arrepentimiento y de
locomoción colectiva. Así las cosas, enmienda teológico-institucional,
han sido forzados a dudar de la for- ¿cómo pueden anunciar la miseri-
mación recibida. cordia de Dios?
No debe extrañar que desde la La conversión del clero, una
década de los sesenta se consta- conversion de corazón por sus abu-
ten crisis sacerdotales10. Muchos sos, es indispensable. La evange-
sacerdotes han abandonado el mi- lización les obliga a dejar atrás el
nisterio; otros han soportado con clericalismo pero lo que realmen-
enormes dificultades la separación te se necesita es una reforma es-
en que se les formó. tructural del gobierno de la Iglesia
universal12, del modo en que sus
Tal vez algún día la institución autoridades se organizan y de las
eclesiástica renuncie al estilo tri- vías a través de las cuales apren-
dentino de formación. Pero si no den de la experiencia de mundo del
lo hace por convicción del exhauri- común de los seres humanos. Los
miento de la versión sacerdotal del obispos y sacerdotes no pueden
cristianismo sino para disimularlo, proclamar el Evangelio si no com-
sus discursos sobre la sinodalidad parten la misma base epistemoló-
se gastarán hasta arruinar la con- gica de las/os cristianas/os y de la
fianza del pueblo de Dios en sus humanidad en general pues, desde
autoridades. En Chile, el episcopa- un mismo punto de vista teológico,
do en pocos años perdió la confian- Cristo resucitado se halla actuante
za que la sociedad le tenía11. por medio de su Espíritu en toda la
creación, en todas las épocas y no
2. Los sacerdotes dificultan a la solo en los creyentes. Nadie pue-
Iglesia anunciar el Evangelio de enseñar y evangelizer sin ser
enseñado y evangelizado por Je-
sús. La distinción Iglesia-mundo es
Continúo con el caso chile-
conveniente para reconocer qué es
no. Los obispos y los sacerdotes
Evangelio y qué no, pero adscribir
hoy en Chile, los ministros de la
la sacralidad a la Iglesia y la profa-
fe, para una inmensa mayoría, no
nidad al mundo va en la dirección
son dignos de fe. ¿Qué Dios pue-
exactamente contraria a la ley de
den anunciar así? Si ellos no son
la Encarnación.
creíbles, el Dios del cual dan testi-
10
Ver a Duquoc, "La reforma de los
clérigos", 355-67; Castilho Pereira, Su-
frimiento psíquico de los presbíteros. 12
Schickendantz, "Fracaso institucio-
Dolor institucional. nal de un modelo teológico-cultural de
11
Ver a Encuesta-Bicentenario- Iglesia. Factores sistémicos en la crisis
2021-Religion.pdf, 8. de los abusos", 9-40. 23-24.
130 Revista CLAR No. 4 de 2021 - Revista CLAR No. 1 de 2022
Reflexión Teológica
En consideración de todo lo di- II (1992) “insiste cada vez más en
cho, la posibilidad de una auténtica la identidad del sacerdote y en su
sinodalidad exige una descleriza- espiritualidad. De un modo progre-
ción del cristianismo13. La versión sivo, el presbiterado es concebido
sacerdotal del mismo se agotó. No como un estado más que como
parece siquiera reformable. La ins- un ministerio. Por desplazamientos
titucionalidad eclesiástica es seria- sucesivos, se vuelve a considerar el
mente cuestionada por el laicado presbiterado, que se designa más y
más lúcido. No lo es por los fieles más a partir de la categoría sacerdo-
que pervivirán pidiendo a los sa- tal, como un estado de perfección.
cerdotes sacramentos y respues- Después de cincuenta años, prácti-
tas a decisiones que no pueden to- camente se ha invertido la perspec-
mar por sí mismos. Estos pueden tiva señalada por el Vaticano”15.
dar a obispos y sacerdotes la ilu-
sión de la vigencia de sus servicios. Los discursos sobre la sinodalidad
Pero, así las cosas, con la rebelión abundan, pero no conducen a “ninguna
de unos y la sumisión de otros, la traducción institucional significativa”16.
vía sinodal es imposible. La versión sacerdotal del cristianismo
languidece en muchos países tradicio-
EN EL HORIZONTE: UN CRIS- nalmente católicos.
TIANISMO NO SACERDOTAL
En el horizonte, sin embargo, se
“¿Quién removerá la piedra del otean otras formas de eclesialidad:
sepulcro?” (Mc 16,3). ¿Es posible la todavía quedan algunas comunida-
reforma de la institucionalidad ecle- des de base, los bailes religiosos
siástica? El deseo de tantas/os cris- cuentan con una férrea organiza-
tianas/os de caminar juntas/os con ción laical, hay movimientos laica-
la humanidad y con la orientación les en medios altos, abundan las
de sus autoridades se cumple a ve- organizaciones solidarias, surgen
ces gracias a la buena voluntad de grupos de conversación virtual,
las personas, pero no porque las es- la estética religiosa aún apela, se
tructuras eclesiales la favorezcan. ofrecen ejercicios espirituales, di-
plomados y acompañamiento a
El panorama es malo. En la for- parejas que quieren contraer ma-
mación del nuevo clero se dan se- trimonio. Otras versiones de ecle-
ñales incluso de involución hacia sialidad son perfectamente posi-
el autoritarismo14. Según Gilles bles de imaginar. Dependerá de
Routhier, la exhortación apostólica las/os laicas/os crearlas, pero solo
Pastores dabo vobis de Juan Pablo
15
Routhier, "Les décrets Presbytero-
13
Legrand, "Les dimensions systémi- rum ordinis et Optatam totius", 25-51.
ques…". 35-36.
14
Brighenti, O novo rosto do clero. Per- 16
Schickendantz, "Fracaso institucio-
fil dos padres novos no Brasil, 277. nal…", 9-40. 36.
Asamblea Eclesial 131
Sinodalidad, pero en un cristianismo no sacerdotal
el Espíritu puede evidentemente Greschake, Gisbert, Ser sacerdo-
remover la piedra del sepulcro. te hoy. Salamanca: Sigueme, 2003.
Bibliografía: Hervé Legrand. "Les dimensions
systémiques de la crise des abus
Barrionuevo Durán, Camilo. dans l’Église Catholique et la ré-
Una Iglesia devorada por su propia forme de l’ecclésiologie courante".
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Castilho Pereira, William César. Schickendantz, Carlos. "A la
Sufrimiento psíquico de los presbí- búsqueda de una completa defini-
teros. Dolor institucional. Bogotá: ción de sí misma. Identidad eclesial
Celam, 2014. y reforma de la Iglesia en el Vatica-
no II", Teología y Vida 61, 2 (2020):
CELAM. “Síntesis narrativa. La 99-130.
escucha en la 1ª asamblea eclesial
para América Latina y El Caribe”. ______. "Fracaso institucional
(Documento de trabajo, 1 de octu- de un modelo teológico-cultural
bre de 2021). Celam.org, https:// de Iglesia. Factores sistémicos en
p r e n s a c e l am.o r g /wp - c o nt e nt / la crisis de los abusos". Teología y
uploads/2021/09/Sintesis-Narrati- vida 60, 1 (2019): 9-40. 23-24.
va-FINAL-1.pdf (consultado enero
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dad, 1987.
132 Revista CLAR No. 4 de 2021 - Revista CLAR No. 1 de 2022