Taller # 2.1.
Objetivo General:
Recordar y aprender todo sobre la materia.
Objetivos Específicos:
- Definir los estados físicos de la materia.
- Identificar los cambios que sufre la materia.
- Reconocer los tipos de energía que existen y como se transforman.
- Aprender las leyes de conservación y transformación de la energía.
¿Qué es materia?
La materia es la sustancia que forma los cuerpos físicos. En otras palabras, se trata de todo
aquello que tiene masa y que ocupa un lugar en el espacio. Al hablar de masa nos estamos
refiriendo a la materia que tiene un cuerpo, por lo que se trata de una magnitud fundamental a
la hora de entender y trabajar con la materia. Otro aspecto importante que tenemos que tener
en cuenta a la hora de estudiar la materia es el volumen, que se puede definir como el espacio
que ocupa un cuerpo en relación a la masa que tiene. De este modo, según lo densa que sea la
masa de un cuerpo, es decir, lo junta que esté su materia entre sí, estaremos anta materia en
un estado u otro. Aunque existen diversos estados de la materia definidos que van más allá de
los estados clásicos, los más conocidos son el estado sólido, el líquido y el gaseoso.
- Composición de la materia
La materia está compuesta por moléculas, siendo la molécula la parte más pequeña en la que
se puede dividir una sustancia sin perder su naturaleza y propiedades. A su vez, una molécula
está compuesta por átomos. Cada uno de ellos posee unas propiedades diferentes en el
interior de la molécula que constituyen. Sustancias simples y compuestas:
- Sustancia simple es aquella porción más pequeña en que puede dividirse, sin perder su
naturaleza y propiedades, es un átomo. o Ejemplos: Cloro (Cl), Oxígeno (O), Carbono
(C).
- Sustancia compuesto es aquel cuya parte más pequeña en que puede dividirse sin
perder sus propiedades es una molécula. o Ejemplo: Agua (H2O), cuya molécula
incluye dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno.
Estructura del átomo.
El átomo está constituido por un conjunto de partículas que proporcionan a cada elemento
unas características que lo diferencian de todos los demás. De estas partículas, las tres más
importantes son:
Protones (p+) o Tienen carga eléctrica positiva cuya magnitud es de aproximadamente
1,59 x 10- 19 Culombios. o Su peso es de 1,67 x 10 -27 kilogramos.
Electrones (e-) o Tienen carga eléctrica negativa de igual valor absoluto que la del
protón, aunque de signo contrario. o Su peso es 1,840 veces inferior al del protón.
Neutrones (n.º) o Tienen carga eléctrica nula. o Su peso es igual al del protón.
- Estados físicos de la materia
Estado sólido
Cuando un cuerpo está en estado sólido, sus átomos están muy juntos y tan apretados que
lo convierten en un cuerpo firme, de forma regular y volumen definido. Por esta razón,
los sólidos no se pueden comprimir. Las partículas que forman la materia en estado sólido
apenas pueden moverse, solamente vibran alrededor de posiciones fijas. No obstante, un
aumento de la temperatura incrementa la vibración de las partículas, por lo que el sólido
se dilata.
Estado líquido
En estado líquido los átomos y las moléculas están más separados y tienen una fuerza de
cohesión menor, lo que permite a los líquidos fluir y adaptarse al recipiente que los
contiene. Por lo tanto, tienen volumen constante y, aunque su forma varía, no llena todos
los espacios del recipiente, como ocurre con los gases.
Como curiosidad, ¿sabías que el vidrio es un líquido? Aunque no lo parezca el vidrio
fluye. Lo que pasa es que lo hace tan lentamente que no podemos verlo a simple vista. Sin
embargo, los científicos lo han demostrado al medir los grandes ventanales de catedrales
antiguas y comprobar que son más gruesos en la parte inferior que en la superior. Es
decir, a lo largo de los años el vidrio ha ido fluyendo hacia abajo.
Estado gaseoso
El último de los estados clásicos de la materia es el gas. En un estado gaseoso las
partículas que forman la materia están muy apartadas, tanto que la única manera de
mantenerlas juntas es encerrándolas en un recipiente. Los gases ocupan todo el espacio
disponible porque no hay cohesión entre sus átomos. Además, pueden comprimirse y
adquieren la forma del recipiente que los contiene.
- Cambios de materia
Con frecuencia observamos los cambios de estado de la materia; por ejemplo, al sacar hielo
del congelador, que no es otra cosa que agua sólida, se convierte en agua líquida, o cuando se
calienta agua líquida se transforma en vapor (gas). De acuerdo con la teoría cinética, el
aumento de la movilidad de las partículas de un sólido incrementa la temperatura. Si continúa
aumentando la temperatura, las partículas adquieren energía suficiente para liberarse de sus
posiciones fijas, y el sólido se convierte en líquido.
Si sigue subiendo la temperatura, el material pasa al estado gaseoso y sus partículas se
mueven por todo el volumen del recipiente que lo contiene. Los cambios de estado de los
materiales son transformaciones físicas, ya que no se modifica su composición: tanto en
forma de hielo como líquida o gaseosa, el agua sigue siendo la misma sustancia, de fórmula
química H2O.
Los cambios de estado pueden explicarse a partir del modelo de partículas. Cuando se le
entrega suficiente energía térmica (en forma de calor) a un sólido, la energía cinética de sus
partículas aumenta y las fuerzas de atracción entre ellas disminuye, por lo que comienzan a
moverse más libremente y pueden pasar al estado líquido. Si se sigue entregando energía
térmica, las partículas en estado líquido aumentan aún más su energía cinética, las fuerzas de
atracción se anulan y comienzan a predominar las fuerzas de repulsión; entonces, el líquido
pasa al estado gaseoso. Por el contrario, para que un líquido pase a estado sólido o un gas a
estado líquido, se le debe quitar al sistema suficiente energía térmica.
- Pasaje de sólido a líquido. Las partículas ganan movilidad y, aunque siguen juntas,
pueden cambiar de posición. El sólido pasa al estado líquido.
- Pasaje de líquido a gas. Las partículas ya no permanecen juntas, ganaron movilidad y
escapan del estado líquido, pasan al estado gaseoso.
- Ley de la conservación de la materia
La Ley de conservación de la materia establece que la materia no se crea ni se destruye, sólo
se transforma; de manera análoga, la Ley de conservación de la energía establece que la
energía no se crea ni se destruye, sólo se transforma. Esto significa que en todos los
fenómenos del universo, la cantidad de energía y de materia existentes antes y después de
dicho fenómeno son las mismas, aunque sus formas hayan cambiado. En las reacciones
químicas las sustancias se transforman en otras, pero en estos cambios no se crean o se
destruyen átomos, únicamente se reorganizan.
Lo mismo ocurre con la energía, pues si en una reacción química, al romperse enlaces en una
molécula se libera energía, esta queda en el medio que rodea a la molécula y puede ser
captada por otras moléculas. De la misma manera, cuando agregamos energía (por ejemplo
calentando) para que ocurra una reacción química y se formen nuevos enlaces químicos, las
moléculas absorberán energía y parte de ella quedará atrapada en los nuevos enlaces
químicos formados y el resto se devolverá al medio en forma de calor. En conclusión, la
cantidad total de materia y de energía en el universo permanecen constantes, aunque de
manera permanente se mueven y cambian de formas.
La ley de la Conservación de la Materia, es también llamada ley de conservación de la masa o
Ley de Lomonósov-Lavoisier, en honor a sus creadores.
Postula que la cantidad de materia antes y después de una transformación es siempre la
misma. Es una de las leyes fundamentales en todas las ciencias naturales. Se resumen con la
célebre frase: “nada se pierde, nada se crea, todo se transforma”.
La materia es el término general que se aplica a todo lo que ocupa espacio y posee los
atributos de gravedad e inercia. Fue elaborada independientemente por Mijaíl Lomonósov en
1745 y por Antoine Lavoisier en 1785. Esta ley es fundamental para una adecuada
comprensión de la química. Está detrás de la descripción habitual de las reacciones químicas
mediante la ecuación química. También de los métodos gravimétricos de la química analítica.
La única salvedad que hay que tener en cuenta son las reacciones nucleares, en las que la
masa sí se modifica de forma sutil. En estos casos en la suma de masas hay que tener en
cuenta la equivalencia entre masa y energía.
- Energía : Tipos y clases de materia-transformación de la energía
Al hablar de energía estamos haciendo referencia a una magnitud física, ya que puede medir.
Sin embargo, se trata de algo mucho más difícil de imaginar que la materia, ya que se trata de
una realidad intangible, aunque no por ello menos real. La definición clásica de la energía es
la capacidad para realizar un trabajo.
En este sentido, la energía deberá ser entendida como la capacidad de los cuerpos a la hora de
realizar un trabajo, que podrá implicar un cambio de posición de cuerpos (pasando de estado
estático a uno móvil, al revés, o cambiando su velocidad de desplazamiento), o un cambio de
estado de los cuerpos, por ejemplo pasar de líquido a gaseoso. De este modo, la energía se
entiende como la capacidad intrínseca para realizar estos cambios o trabajos. Esta energía
puede ser de muchas formas, y vendrá definida únicamente por el origen de la misma. Se
puede hablar de energía electromagnética, de energía térmica, de energía química, etc.
La materia puede clasificarse en dos categorías principales:
- Sustancias puras, cada una de las cuales tiene una composición fija y un único
conjunto de propiedades.
- Mezclas, compuestas de dos o más sustancias puras.
Las sustancias puras pueden ser elementos o compuestos, mientras que las mezclas pueden
ser homogéneas o heterogéneas:
- Ley de transformación de la energía
La transformación energética, transformación de la energía, conversión energética o
conversión de la energía es el proceso de cambiar la energía de un tipo de energía a otro. En
física, la energía es una cantidad que proporciona la capacidad de realizar un trabajo (por
ejemplo, levantar un objeto) o proporciona calor. Además de ser convertible, de acuerdo con
la ley de conservación de la energía, la energía es transferible a una ubicación u objeto
diferente, pero no se puede crear ni destruir.
La energía en muchas de sus formas se puede utilizar en procesos naturales o para
proporcionar algún servicio a la sociedad, como calefacción, refrigeración, iluminación o
realizar trabajos mecánicos para operar máquinas. Por ejemplo, para calentar una casa, el
horno quema combustible, cuya energía potencial química se convierte en energía térmica,
que luego se transfiere al aire de la casa para elevar su temperatura.
El estudio de las transformaciones de la energía que se producen en un conjunto de materia se
denomina termodinámica. Los científicos emplean la palabra sistema para designar a la
materia en estudio; se refieren al resto del universo -todo lo que se encuentra fuera del
sistema- como el entorno. Un sistema cerrado, como el de un líquido en un termo, se
encuentra aislado en su entorno. En un sistema abierto, la energía (y, con frecuencia, la
materia) puede ser transferida entre el sistema y su entorno. Los organismos son sistemas
abiertos. Absorben energía -por ejemplo, la energía lumínica o la energía química en forma
de moléculas orgánicas- y liberan calor y productos de desecho metabólico, como el dióxido
de carbono, al entorno. Dos leyes de la termodinámica gobiernan las transformaciones
energéticas en los organismos y en todo el resto de los conjuntos de materia.
La primera ley de la termodinámica
De acuerdo a la primera ley de la termodinámica, la energía del universo es constante. La
energía puede transferirse y transformarse, pero no puede ser creada o destruida. La primera
ley también se conoce como el principio de conservación de la energía. La compañía de
electricidad no fabrica la energía, simplemente la convierte en una forma que es conveniente
para su uso. Al convertir la luz solar en energía química, una planta actúa como un
transformador de energía, no un productor. El guepardo convertirá la energía química de las
moléculas orgánicas de su alimento en formas de energía cinética y otras formas de energía a
medida que lleva a cabo sus procesos biológicos.
La segunda ley de la termodinámica
Si la energía no puede destruirse ¿por qué los organismos simplemente no pueden reciclar su
energía una y otra vez?. Resulta que durante cada transferencia o transformación energética
parte de la energía se transforma en energía inservible, no disponible para efectuar trabajo. En
la mayoría de las transformaciones energéticas, al menos parte de las formas más utilizables
de energía se convierten en calor, que es la energía asociada con el movimiento aleatorio de
los átomos o de las moléculas. Únicamente una pequeña fracción de la energía química del
alimento se transforma al movimiento del guepardo; la mayoría se pierde como calor que se
disipa rápidamente a través del ambiente.
En el proceso de realización de reacciones químicas que llevan a cabo varias formas de
trabajo, las células vivas inevitablemente convierten formas organizadas de energía en calor.
Un sistema puede poner calor al trabajo solamente cuando hay una diferencia de temperaturas
que determina que el calor fluya de una localización más caliente a una más fría. Si la
temperatura es uniforme, como ocurre en una célula viva, entonces el único uso para la
energía calorífica generada durante una reacción química es calentar un cuerpo de materia,
como el organismo. (Esto puede transformar una habitación llena de personas en un sitio
poco confortable por lo caliente, ya que cada persona está llevando a cabo una multiplicidad
de reacciones químicas).
Conclusión:
En física, la materia es todo aquello que se extiende en cierta región del espacio-tiempo, que
posee energía y está sujeto a cambios en el tiempo y a interacciones con instrumentos de
medida. Se considera que es lo que forma la parte sensible de los objetos perceptibles o
detectables por medios físicos. Un gran porcentaje de lo que nos rodea es materia, para no
decir que todo, entonces, es fundamental conocer las propiedades de la materia para lograr
usar la misma y resolver muchas de nuestras necesidades. Es importante la materia en el
sentido epistemológico y ontológico. La materia es todo lo que forma el mundo exterior e
incluso nosotros mismos por lo tanto comprender la importancia de la materia es como decir,
entendamos a nosotros mismos y al origen y naturaleza del mundo físico.
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