Resumen Sociologia 1er Parcial
Resumen Sociologia 1er Parcial
El nacimiento de la sociología (siglo XIX) como disciplina autónoma para analizar la sociedad y los lazos que unen a sus
miembros, coincide con el momento en que esos lazos parecen ausentes, y esta ausencia es vista como la raíz de la crisis
social.
El feudalismo, puede definirse, como un sistema económico, social y político en el cual la principal relación de
producción era la servidumbre. La sociedad podía dividirse en entre los hombres libres y aquellos que no lo eran, se
trataba de una sociedad de tipo estamental, asentada sobre tres órdenes: los miembros de la iglesia, los guerreros
(nobleza) y los trabajadores. Dentro de los hombres sujetos a la servidumbre se diferencia entre los siervos domésticos,
de los siervos de la gleba. La pertenencia a la nobleza o a la gleba era establecida por la sangre, por lo que la movilidad
social era escasa.
La relaciones que los hombres establecían entre si se basaban en el vasallaje, cuando una persona libre, pero de
condición social inferior, buscaba protección en el más fuerte. Este le otorgaba poder al señor sobre la persona del
vasallo, y simultáneamente creaba obligaciones entre ambos.
Por otro lado, la iglesia, constituía unos de los órdenes sobre los que se asentaba el mundo feudal, por lo tanto se
consideraba que parte de la producción llegara a las manos de los eclesiásticos para ser ofrecida a Dios.
El núcleo de producción era el señorío, conjunto de tierras sobre las que el señor feudal ejercía derecho, y sobre cuya
base se podía exigir el pago de tributos o el trabajo para el de los que la habitaban. En el caso de la iglesia existía un
tributo especial, el diezmo (la décima parte de lo producido), pagado por todos y usado en parte para el sustento de los
más pobres.
Las tierras de gran dominio se dividían en:
Reserva: era la tierra de la que vivía en señor, explotada generalmente por trabajadores domésticos.
Mansos : eran las parcelas donde vivían los campesinos
Tierras de uso común o bienes comunales : formadas por los prados, las dehesas y los bosques
Región de casa: comúnmente reservada al señor, pero aprovechada por muchos clandestinamente.
La característica crucial del feudalismo fue su condición de sistema de producción para el uso, no para el mercado. Este
al basarse en el uso se volvía altamente inestable e inseguro. Las pérdidas de las cosechas provocaban grandes
hambrunas y estas favorecían las epidemias. Estos ciclos fueron una de las causas de la generación de grandes cambios
sociales. La reducción de población, afecto las condiciones de producción.
A partir del siglo XIX, desapareció en forma casi total el sistema de servidumbre y se expandieron los pequeños
propietarios. Los siervos lograron la disolución de los lazos que lo ataban al señor.
El mundo feudal inicio una transformación estructural que significo con el tiempo su disolución y surgimiento del
capitalismo. En líneas generales significo el traspaso de una vida rural a otro tipo de vida urbana. La orientación
económica pasa de la agricultura a la cría de ovejas, para utilizar su lana en los telares y a la consiguiente alza de precios.
Durante esta etapa se produce la Reforma protestante, la cual establecía una ética de la acción, donde la idea del
hombre laborioso y ahorrativo seria elementos para una nueva moral económica, que anunciaba el nacimiento del
capitalismo.
Otro acontecimiento importante fue la llegada de Europa a América, lo cual significo la solución a la falta de metal
moneda y también genero una lenta pero profunda transformación de la visión que tenían del mundo los europeos.
Por el florecimiento del comercio, producto de la conquista de nuevas tierras, los mercaderes comenzaron a organizar la
producción por fuera del control de los gremios de artesanos. Una vez avanzado el proceso, el mercader burgués, se va a
trasformar en el dueño del taller y de las herramientas manuales para realizar la producción, y va a contratar a los
obreros, pagándoles un salario.
En lo político se produce la denominada revolución gloriosa, esta revolución clausura todo intento de monarquía
absoluta e instaura la monarquía parlamentaria, limitando a futuro el poder el poder del rey y de la alta nobleza, y
favoreciendo el poder parlamentario, representante de la nobleza media y baja de la burguesía. Se conforma ahí la
alianza de clases entre la nobleza y la burguesía.
A partir de este momento la economía se desarrolla de forma tal que posibilita la revolución industrial .Todo este
proceso culmino en la modificación de los lazos que unían a los hombres entre sí y con los medios de producción y con la
aparición de nuevas clases sociales, el proletariado y la burguesía.
Revolución industrial: consistió en una revolución productiva generadora de transformaciones económicas, sociales y
políticas que afectaron al conjunto de la sociedad. Fue acompañada de un aumento de la población, la aplicación de la
ciencia a la industria y el empleo del capital simultáneamente en forma extensa e intensa. Una de las características más
importantes de este periodo es el acelerado crecimiento de la población, relacionado con un abrupto descenso de los
índices de mortalidad.
Desde el punto de vista económico, el aumento de los precios y la posibilidad de obtener grandes ganancias fueron el
aliciente necesario para la inversión de capitales en la industria.
La revolución no fue solo una cuestión tecnológica, sino también económica, consistió en cambios en el volumen y en la
distribución de riquezas.
Desde el punto de vista de las relaciones sociales, significó el favorecimiento y la ampliación de una nueva clase social, la
clase capitalista, la cual comienza a tener influencia suficiente para incidir en la creación de las bases institucionales y
jurídicas necesarias para permitir su expansión. Esta nueva clase necesitaba para su desarrollo la disolución de las
relaciones sociales existentes, también requería condiciones para poder comerciar libremente con otros países.
El acontecimiento histórico que representa las aspiraciones de esta nueva burguesía en ascenso es la revolución
francesa.
Revolución Francesa: ésta significó el desmantelamiento final de las viejas estructuras jurídicas que legitimaban un
ordenamiento social de índole estamental y del antiguo régimen en su conjunto. Fue en el ámbito de las ideas en donde
la revolución germino. La ilustración consistió en un amplio movimiento, que básicamente sostenía la igualdad universal
de la condición humana y defendía el respeto de derechos naturales inalienables, la libertad política y la movilidad social
del individuo en contra del ordenamiento estrictamente estamental, típico del antiguo régimen. Sin embargo la
república naciente de 1789 se vio acorralada por divisiones intestinas y presiones de distinta índole lo que derivó en la
instalación del directorio y posteriormente al imperio napoleónico.
Saint-Simón: en su visión la ciencia debía partir de una actitud constructiva y aportar a la creación de un ordenamiento
renovado de la sociedad.
Analizo la situación sociopolítica pos revolucionaria signada por los conflictos derivados de la división moderna del
trabajo y de la posibilidad de una reacción restauradora del antiguo régimen. Le preocupaba esencialmente la inequidad
social del nuevo orden económico-productivo, y en especial, las condiciones laborales y de vida degradadas que sufrían
los trabajadores. Una sociedad más justa erigida sobre el cimiento del sistema industrial, procuraría una cierta unidad
integrativa en dirección al logro de una cohesión social avalada por los valores positivos, aportados a la humanidad
mediante el progreso del conocimiento científico en distintas áreas de investigación.
Consideraba como productores al conjunto formado por empresarios y obreros, incluyendo a ambos dentro de la
categoría indivisa de industriales. Proponía una coalición de los sectores de la producción, al margen de su condición
patronal o proletaria, para la consecución de tal alianza, el conocimiento auténticamente científico, debía reemplazar la
actitud meramente cuestionadora, de los valores tradicionales.
Dentro de su concepción, el termino industrialismo, reflejaba los objetivos legítimos trazados por la sociedad y la
naturaleza autentica del camino hacia el progreso de la humanidad. Sostenía tres momentos atravesados por la
evolución intelectual humana: LA TELEOLOGICA, LA METAFISICA y POSITIVO. En este sentido la ciencia desplazaría a la
religión en el rol orientador intelectual y la vez cohesionador social.
Este orden propio del sistema industrial se alcanzaría una vez que los científicos, integrados en la clase productiva, se
constituyeran en una elite gobernadora que condujera hacia un desarrollo equilibrado de la sociedad moderna, a través
de la alianza de los sectores intelectuales e industriales se formaría un sólido bloque de poder, este se asienta en un
ordenamiento más equitativo de las relaciones laborales. En consecuencia, la elite mencionada, debe presentar ciertos
rasgos autoritarios, debido a que el logro del disciplinamiento de la sociedad, demanda un gobierno fuerte que
sustituyera, la histórica y prolongada coalición establecida entre iglesia y nobleza terrateniente.
El objetivo final a que apuntaba la visión santsimoniana consistía en la concreción de una sociedad armónicamente
organizada por la división industrial del trabajo, sostenida sobre valores fundacionales laicos y seculares.
La concepción positivista se presenta como alternativa controlada y moderada respecto de la filosofía iluminista, implica
de cierto modo su continuación, y re conceptualiza sus componentes “critico – negativos” en dirección a un
ordenamiento positivo. Son las ciencias físicas, el soporte natural de la sociología en su estadio avanzado, porque el
hombre solo conoce fenómenos, no conoce la esencia ni el modo real de producción de cualquier hecho, sino solamente
las relaciones con otros factores.
El positivismo evoluciona en bloque abarcando la esfera intelectual, política y social en respuesta a una necesidad
invariable, teniendo en cuenta que cada rama de nuestro conocimiento pasa sucesivamente por tres etapas: teológico,
el metafísico y el científico.
Las ciencias sociales se debaten con una serie de pares de conceptos que tienden a hacernos ver el mundo social de
manera dicotómica e invitan a los investigadores a colocarse de un lado o de otro. Estas formas de pensar binarias
resultan catastróficas para la comprensión y la explicación de fenómenos sociales complejos.
Idealismo/Materialismo → el idealismo consiste en reducir toda la existencia al pensamiento, mientras que el
materialismo es la doctrina según la cual no existe más sustancia que la materia. Esta forma binaria trata de
oponer una realidad más “superficial” (falsa) a una realidad más “verdadera” (dura o determinante). Marx
intenta minimizar esta polaridad.
Sujeto/objeto → el objetivismo constituye un objeto, una realidad que subsiste en sí misma, independiente de
todo conocimiento o idea. El método objetivo es la observación exterior y por lo tanto va dirigido al mundo
objetivo o exterior. El objetivismo pretende establecer regularidades objetivas, independientes de las
conciencias y voluntades. Afirma la primacía de lo objetivo en el análisis de los fenómenos sociales. El
subjetivismo afirma la superioridad de lo subjetivo, es decir de lo interno o las conciencias de los sujetos.
Colectivo/individual → La sociedad, el sistema formado por su asociación, representa una realidad que tiene
características propias. Esta sociedad sobrepasa al individuo en el tiempo y espacio y está en condiciones de
imponerle las formas de actuar y de pensar que ha consagrado con anterioridad. Por lo tanto se afirma que la
causa determinante de un hecho social ha de buscarse entre los hechos sociales que le anteceden y no en los
estados de la conciencia individual (Durkheim). Lo colectivo también remite directamente a la idea de presiones
exteriores que se imponen a los individuos y a un ámbito de validez. Lo individual siempre se refiere a la
conciencia de los actores. El individuo es producto de las estructuras sociales, para explicar cualquier fenómeno
social es indispensable reconstruir las motivaciones de los individuos implicados en dicho fenómeno y
considerarlo resultado de la suma de los comportamientos individuales dictados por esas motivaciones. Los
individuos se consideran los átomos básicos del análisis de los procesos sociales y el colectivo un mero resultado
de las actividades individuales.
Problemática constructivista
En una perspectiva constructivista, las realidades sociales se conciben como construcciones históricas y cotidianas de
actores individuales y colectivos. Estos, al no surgir de una voluntad clara, tienden a escapar del control de los diferentes
actores. La palabra construcción, remite a la vez, a los productos de elaboraciones anteriores y a los procesos en curso
de reestructuración. Así la historicidad constituye una idea fundamental para los constructivistas en tres sentidos:
La acción en tanto que es histórica, se sedimenta y se objetiva en una exterioridad que pesa sobre lo existente y que le
abre un futuro real. Los individuos y los grupos se sirven de palabras, objetos, reglas, instituciones, legados por las
generaciones anteriores y los transforman a la vez que crean otros nuevos. Estos recursos objetivados, exteriores a los
individuos, limitan su acción, al tiempo que ofrecen puntos de apoyo a dicha acción. Estas realidades sociales están
constituidas especialmente por formas de sensibilidad de percepción de representación y de conocimiento. Los
constructivismos son nuevas formas de realismo que se distinguen de las formas clásicas de positivismo en que
cuestionan lo dado y dejan margen a una diversidad de realidades cuyas relaciones deben ser objeto de reflexión.
LA SOCIOLOGIA CLASICA: DURKHEIM Y WEBER – Portantiero.
La sociología, como campo definido del conocimiento, recién aparece al promediar el siglo XIX, mientras que la
constitución autónoma de las hoy llamadas Cs sociales se halla en el renacimiento.
El primer precursor de este nuevo conocimiento será Nicolás Maquiavelo, ya que a través de sus escritos, logro la
liberación, para la reflexión de la política, de todos sus condicionantes teológicos y filosóficos. De esta manera el primer
campo secularizado, será la Ciencia política. Lo social y lo político comienza a ser pensado como un proceso de
construcción colectiva en el que el hombre precede a la sociedad, la crea y la organiza. Esta es producto de la
generalización de las relaciones mercantiles.
El segundo movimiento corresponde a la economía política, las etapas de fundación de la economía política siguen
también los ritmos de desarrollo de la sociedad: en un principio se preocupaba de los problemas del cambio, más tarde,
la atención se dirigía a los problemas de producción.
Tanto la ciencia política como la economía política eran concebidas, en realidad, como fragmentos de una única ciencia
de la sociedad. Hechos políticos y hechos económicos eran concebidos como fenómenos que se cruzaban y se
condicionaban mutuamente.
El origen de la sociología
El nacimiento de la sociología se plantea cuando se han generalizado las relaciones de mercado y el liberalismo
representativo. En el interior de la sociedad aparecen nuevos conflictos, diferentes a los del pasado, producto del
industrialismo, el estímulo para la aparición de la sociología es precisamente la crisis social y política producto de
la revolución industrial, con ella aparece un nuevo actor social, el proletariado de las fábricas, indicador de un nuevo
orden social.
Para dar solución a este problema aparecerán dos vertientes opuestas: la del socialismo, y la sociología clásica.
El capitalismo disolverá la identidad entre lo público y lo privado y con ello la idea de armonía de un orden integrado, la
sociología arranca de este dato para intentar reconstruir las bases del orden social perdido. En este sentido, nace ligada
a los objetivos de estabilidad social de las clases dominantes, su función, es dar respuestas conservadoras a la crisis
planteada en el siglo XIX, es una ideología del orden, del equilibrio.
La magnitud de los problemas que plantea la sociedad como objeto de conocimiento requiere un abordaje científico, y
debido a que las demás ciencias no pueden ya dar cuenta de los conflictos colectivos, para la sociología ha llegado el
momento de instrumentar técnicas para el ajuste de los problemas existentes que recorren Europa.
Por otro lado la ciencia social debía constituirse positivamente, es decir que los conocimientos validos procederían de la
experiencia y no de entes filosóficos. Por otro lado, positivismo significa también, reacción contra el negativismo de la
filosofía racionalista de la ilustración, contemporánea de la revolución francesa. Será necesariamente autónoma, pero
unida a la ciencia de la naturaleza, por igual actitud metodológica. De esta manera la sociedad será comparable al
modelo del organismo .Para su estudio habrá que distinguir un análisis de sus partes –MORFOLOGIA O ANATOMIA- y
otro de su funcionamiento – FISIOLOGIA. Es decir una “fisiología social” constituida por los hechos materiales que
derivan de la observación directa de la sociedad y una higiene encerrando los preceptos aplicables a tales hechos.
La sociedad puede incluir procesos de cambio, pero ellos deben estar incluidos dentro del orden, la tarea a cumplir, es
entonces, desentrañar ese orden, completarlo y corregir las desviaciones que se produzcan en él. Así todo conflicto que
tendiera a destruir ese orden debía ser prevenido y combatido, lo mismo que la enfermedad en el organismo.
La sociología se estructura en una doble discusión. En su madurez el adversario es el marxismo, mientras que en su
mocedad lo es el iluminismo.
Los principios del iluminismo encontraran su encarnación política en la Revolución Francesa de1789, pero debido a la
crisis de las monarquías y el desarrollo del capitalismo industrial y el total desequilibrio social que provocaron, nació el
movimiento anti-iluminista, la nostalgia por el orden perdido, la filosofía de la restauración ,en resumen, antinomias
levantadas por la ideología tradicionalista. Detrás de este movimiento se mueve explícitamente una reivindicación del
orden medieval y es uno de los acontecimientos más significativos del siglo xix.
Esto se ve claro en los fundadores de la sociología, que a diferencia de los tradicionalistas, proponían reemplazar a la
religión por la ciencia, considerando esta última, como el principal elemento integrador de la sociedad.
La sociología clásica obtiene del pensamiento tradicionalista una serie de proposiciones acerca de la sociedad,
especialmente la concepción de esta como un todo orgánico, superior y exterior a los individuos que la componen,
unificado en sus elementos por valores que le dan cohesión y estabilidad y que proporcionan sustento a las normas que
reglan la conducta de los individuos y a las instituciones en las que esas conductas se desenvuelven. Si esos valores, esas
normas, se alteran, la sociedad entrara en un proceso de desgarramiento y de desintegración.
Primeramente Saint-Simon sostenía que la política debía convertirse en “física social”, cuya finalidad era descubrir las
leyes naturales de la evolución de la sociedad. Esta “física social” haría ascender al estudio de la sociedad a la etapa
positiva. En él se fusionaban elementos progresivos y conservadores. Tenía sobre la escuela retrograda un doble juicio,
por un lado decía que han establecido de una manera elocuente y rigurosa, la necesidad de reorganizar a Europa de
manera sistemática, necesaria para el establecimiento de un orden de cosas sosegado y estable. Por otro lado, al
intentar restablecer la tranquilidad, reconstruyendo el poder teológico, erran totalmente pues el sentido común
repugna directamente la idea de retroceso en civilización. La pasión dominante del sentido común es la de prosperar
mediante trabajos de producción, por consiguiente no puede ser satisfecha más que mediante el establecimiento del
sistema industrial.
El conocimiento científico deberá ocupar en la nueva sociedad el papel de la religión, el sistema industrial por lo tanto
deberá ser gobernado por una elite integrada por científicos y por “productores”. Esta elite aseguraría la unidad
orgánica de la sociedad. Sin embargo esta concepción no tiene mucho que ver con el socialismo, si no que su mérito es
haber reconocido en las leyes económicas el fundamento de la sociedad.
Una vez que las consecuencias sociales del sistema industrial comenzaron a estar a la vista, los discípulos de saint-simon,
cambiarían de auditorio y empezarían a escribir para los intelectuales y el pueblo. Luego de ellos, esta unidad se
parcelaria y el punto de partida metodológico de la sociología clásica, será el postulado de la independencia de los
problemas sociales con respecto de los económicos.
Una vez definidas autónomamente cada ciencia, ambas se limitaban a una observación de la correlación entre los
hechos. Esta exacerbación de la autonomía puede aportar conocimientos científicos, más allá del carácter ideológico de
la teoría que la sustenta, pero aferrados a los hechos, las ciencias sociales se enfrentaran a preguntas que no podrán
responder, porque su formulación depende de una visión globalizadora. Por lo tanto la única ciencia posible es la de la
sociedad, porque el hecho social es único, no es económico o político.
La autonomía de la sociología será finalmente fundada por Comte. Lo que hace es contribuir a poner orden en una
situación social que definía como anárquica y caótica, mediante la construcción de una ciencia que pudiera reconstruir
la unidad del cuerpo social. Incorpora a su discurso la idea de evolución y el progreso, pero en tanto conservador,
suponía que los cambios debían estar contenidos en el orden. La sociedad debía ser considerada como un organismo y
estudiada en dos dimensiones, la de estática social (en su orden) y la de dinámica social (de su progreso). El primero es
posible sobre la base del consenso, el segundo a su vez debe ser conducido de tal manera que asegure el mantenimiento
de la solidaridad, porque de otro modo la sociedad se desintegraría.
La idea de evolución es la del desarrollo sucesivo de un principio espiritual de acuerdo con el cual la humanidad pasaría
por tres etapas: la teleológica, la metafísica y la positiva. La etapa positiva marcaria la llegada del estado definitivo de la
inteligencia humana y colocaría, a la sociológica en la cima de ellas. La sociología es la ciencia que tiene por objeto de
estudio los fenómenos sociales, sujetos a leyes naturales invariables cuyo descubrimiento es el objeto especial de
investigación, tal conocimiento permitiría a los gobernantes acelerar el progreso de la humanidad dentro del orden.
La vinculación del positivismo, con los intereses políticos de quienes buscaban conservar el orden social, será todavía
más clara en Herbert Spencer. Para el no existían diferencias metodológicas en el estudio de la naturaleza y de la
sociedad. El principio que unificaba ambos campos era el de la evolución, las leyes de la misma propuestas por la
biología eran universalmente válidas. Señalaba que la sociología debía demostrar que los hombres no debían intervenir
sobre el proceso natural de las sociedades.
Por otro lado en Tonnies la sociología aparece como conocimiento de las relaciones sociales y estas, a su vez, solo
pueden ser concebidas como producto de la voluntad de los hombres. Dos tipos básicos de relación entre los hombres
son los de la “comunidad” y” sociedad” .Ejemplo de la primera es la familia, el grupo de amigos, su característica es estar
fundada sobre lazos naturales. Ejemplo de sociedad seria la ciudad o el estado, fundados sobre el contrato, la
racionalidad.
Durkheim asume una misión: colaborar en la consolidación de un orden moral que le diera a la nación francesa la
estabilidad del antiguo régimen, pero fundado sobre otras bases.
En uno de sus libros señala que la felicidad del ser humano solo es posible si este no exige más de lo que puede ser
acordado. En nombre de su propia felicidad habrá que conseguir que sus pasiones sean contenidas hasta detenerse en
un límite que sea reconocido como justo. Este límite debe ser impuesto a los hombres desde afuera por un poder moral
indiscutido que funde una ley de justicia. Únicamente la sociedad está en condiciones de desempeñar ese papel
moderador, porque ella es el único poder moral superior al individuo y cuya superioridad es aceptada por este. El orden
moral, es entonces, equivalente al orden social, este a su vez, se expresa como un sistema de normas que, se
constituyen en instituciones.
Más tarde, estudiando la relación del individuo y la sociedad, sostiene que hay una primacía de la sociedad sobre el
individuo y que lo que permite explicar la forma en que los individuos se asocian entre sí, es el análisis de los tipos de
solidaridad que se dan entre ellos. Las cuales pueden ser de dos maneras, Solidaridad mecánica en la cual la conexión
de los individuos se obtiene sobre la base de su escasa diferenciación (semejanza) o solidaridad orgánica supone la
diferenciación entre los individuos, y como consecuencia, la recurrencia de conflictos entre ellos. Estos conflictos solo
pueden ser zanjados si hay alguna autoridad exterior que fije los limites, es la solidaridad propia del industrialismo, esta
autoridad es la conciencia colectiva, que está constituida por algo exterior a cada individuo y resumen el conjunto de
creencias y sentimientos comunes al término medio de la sociedad.
El egoísta seria aquel que tipo de suicidio motivado por un aislamiento demasiado grande del individuo con
respecto a la sociedad. Es el suicidio de los que no tienen lazos fuertes de solidaridad social.
El altruista corresponde al individuo que está demasiado fuertemente ligado a la sociedad. Este tipo de suicidio
corresponde al orden militar.
El suicidio anomico, es el más significativo, es aquel que no ha sabido aceptar los límites que la sociedad le
impone, aspira a más de lo que puede y cae en la desesperación.
En los tres casos es la relación entre el individuo y las normas lo que lo lleva al suicidio
El objeto de la sociología es el estudio de los hechos sociales: el método de estudiarlos es considerarlo como cosas. Un
hecho social: consiste en toda forma de obrar, de pensar, de sentir, que ejerce sobre el individuo una presión exterior.
Se expresan en normas, en leyes, en instituciones que aseguran la buena integración del individuo con la sociedad.
La insuficiente integración del individuo con la sociedad es el síntoma patológico de las sociedades modernas, que no
han logrado recuperar los valores de equilibrio de la sociedad preindustrial. Para llegar a esta integración, ya no es la
familia, ni el estado, quienes pueden asegurar esta solidaridad, la principal unidad integrativa es la profesión y la
institución que agrupa a los hombres según sus profesiones: el gremio.
Weber: racionalidad y dominación
Weber considerara, a diferencia de Durkheim, como unidad de análisis a los individuos, precisamente porque son los
únicos que pueden albergar fines e intenciones, en sus actos.
Weber tratara de separar la dicotomía entre las “ciencias de la naturaleza” y “ciencias del espíritu” diseñando un
método de tipo histórico-comparativo que le permitiera recuperar a la vez la particularidad y la universalidad del hecho
social.
Sin embargo el objetivo de Weber era completar la imagen de un materialismo económico, con un materialismo militar y
político, el tema central que le permitirá poner en práctica esa propuesta es el origen y el carácter del capitalismo, en
efecto, ese es su tema central.
Entendía al capitalismo como un “sistema de empresas lucrativas unidas por relaciones de mercado”, las cuales han
existido en numerosas oportunidades, sin embargo solo se desarrolla con plenitud en Europa, debido a que en ese
momento, a los datos económicos, se sumó la aparición de una ética, la protestante, que favorecía en el nivel individual
el desarrollo de comportamientos acordes con el espíritu de lucro y las relaciones de mercado. La ética protestante
aparece como el factor principal para explicar el origen del capitalismo.
El método por el cual llega Weber a aislar la causa fundamental del capitalismo es el Histórico-comparativo , si
comparando sociedades diferentes, logramos igualar las principales variables que aparecen en ellas, quedando una y
solo una cuyas características no son compartidas por la totalidad, queda claro que es la decisiva para explicar la
diferencia especifica. Este análisis llega a ser sociológico cuando el científico construye conceptos-tipo o tipo-ideales. Se
obtiene un tipo ideal al acentuar uno o varios puntos de vista y encadenar una multitud de fenómenos aislados, difusos,
y discretos, que se encuentran en gran o pequeño número y que se ordenan según los precedentes puntos de vista
elegidos para formar un cuadro de pensamiento homogéneo.
El punto de partida para esta construcción es el actor y la acción social, las relaciones sociales y los hombres
interactuando, a diferencia de Durkheim, se interesa en el comportamiento individual.
Por lo tanto la sociología es, una ciencia que pretende atender, interpretándola, la acción social, para de esa manera
explicarla causalmente en su desarrollo y efectos. Cualquier formación social deja de existir sociológicamente cuando no
existen relaciones sociales que le den sentido.
La característica básica de la vida social es la orientación de las acciones humanas hacia la consecución de determinados
fines a través de la utilización de medios adecuados racionalmente para conseguirlos, esta forma de acción
correspondería a la denominada acción racional con arreglo a fines, pero además, Weber, reconoce otros tres tipos de
comportamientos probables: la acción tradicional, la acción afectiva, y la acción con arreglo a valores.
Las regularidades en la conducta humana se deben principalmente al reconocimiento, por los actores, de la existencia
de un orden legítimo que les otorga validez. Esta legitimidad puede estar garantizada por la tradición, la entrega
afectiva, por el acatamiento a valores absolutos o por la adhesión a la legalidad estatuida positivamente.
DE IPOLA
El origen de la teoría sociológica se dio como respuesta para los graves problemas por los que atravesaba la
sociedad a fines del siglo XIX (aumento exponencial de las huelgas y conflictos sociales, incremento patológico del
crimen y suicidio, emergencia de la intolerancia religiosa y racial). Durkheim analizo y planteo soluciones para cada
uno de los problemas; pero previamente busco describir y explicar las causas que daban origen a esos problemas.
No sería un error decir que la sociología intento desde sus orígenes plantear y responder a la pregunta por el vínculo
social, por el lazo social. ¿Por qué hay lo social? Se trata de una pregunta heredada del iluminismo.
Hacia fines del siglo XIX lo social ha declinado, porque hay en cierto sentido una nostalgia de lo social. Con el
desarrollo de la sociedad industrial, de las grandes urbes, del telégrafo y los primeros medios masivos, todas esas
formas “directas” de sociabilidad desaparecen.
Durkheim no es un sociólogo reaccionario y nada lo irrita más que la idea de hacer girar la rueda de la historia hacia
atrás. Está a favor de la industria, del avance (en contra de la sociología retrograda). Le preocupa la falta de
organización de la sociedad industrial. Tiene base iluminista pero le critica la idea de contrato social. Hallaremos en
Durkheim una imagen de la sociedad compuesta por subsistemas (la economía, la política, el derecho, etc.).
Marx Weber tuvo un labor en la sociología muy específico que fue la teorización del concepto de acción y sobre
todo de acción (social) racional. Weber aspiraba, por un lado, a que Alemania se embarcara decidida
acumulativamente, en el camino de la modernización, sin, por otro lado, verse afligida por los contratiempos y los
atolladeros que estorbaron y estorbaban el afianzamiento de la III República.
Representa un modelo para el cual la diferenciación en “instancias” (con jerarquías entre ellas) es un recurso
analítico cognoscitivamente muy poco rentable y la acción es una herramienta invalorable.
La sociología tiene, por así decir, un doble y simultaneo origen, tendencialmente “sistémico” en Durkheim y
decididamente “accionalista” en Weber.
Modelo agroexportador
Modelo justicialista
Modelo desarrollista
Gobierno radical
- Periodo: 1983 – 2002
- Características:
o Raúl Alfonsín
o Hiperinflación y déficit
o Estado neoliberal
o 1989 derrocan a Alfonsín
- Estructura social: drástica desalarizacion (cuentrapropismo). Retracción del volumen de clase media. Aumento
del volumen de clase obrera y del estrato marginal.
- Movilidad social: descendente.
- Empleo: desalarizacion de fuerza de trabajo. Informalización de los asalariados. Desempleo y subempleo.
- Ingresos: momentánea recuperación parcial de las remuneraciones reales. El poder de compra de las
remuneraciones vuelve a descender en 1987 y aun más luego del Plan Austral.
Gobierno justicialista
- Periodo: 1989 – 1999
- Características:
o Carlos Saúl Menem
o Intento de control de inflación
o Plan de convertibilidad
o Deuda externa en expansión
- Estructura social: disminución de clase media y del peso de la clase obrera estable. Aumento del estrato
marginal. Empobrecimiento absoluto.
- Movilidad social: intenta movilidad social descendente.
- Empleo: subutilización de la mano de obra. Empleo precario. Hiperdesmpleo. Para conseguir empleo se necesita
más educación pero para reciclarse se necesitan ingresos que no se obtienen porque se es desempleado.
Cambios profundos en la legislación laboral reduciendo la estabilidad del empleo, promoviendo el empleo legal
precario, tolerando el empleo en negro, bajando costos de contratación y de despido, aliviando las
responsabilidades del empleador frente a accidentes de trabajo y quiebras empresarias.
- Ingresos: perdida de los sectores más desfavorecidos afectados por el desempleo.
Gobierno de la alianza
- Periodo: 1999 – 2002
- Características:
o Fernando De la Rúa
o Retroceso del PBI
o Desempleo
o Desigualdad de ingresos
o Incidencia de la pobreza en aumento
- La caída vertiginosa en tan corto lapso no permite cuantificar los efectos sobre la estructura de clases ni sobre la
movilidad social.
Clientelismo político
El autor se inspira en el libro “Capitanes de la Arena” de Jorge Amado para crear la figura de cazador urbano.·
Características del cazador urbano:
La inestabilidad y la falta de regularidad invaden la vida cotidiana en el barrio popular a niveles desconocidos para otras
clases sociales.
“Considerar que la inestabilidad gobierna lo cotidiano en muchos de los barrios populares exige responder a una
cuestión metodológica de orden general: esos ambiente son ciertamente precarios, pero ¿con respecto a qué definimos
esa precariedad? La inestabilidad se expresa en la vida cotidiana, pero encuentra su origen en la forma en la que las
instituciones organizan la cohesión social.” Aquí plantea el problema del método sociológico de tratar de ponerse en el
lugar del estudiado para comprender su realidad y tratar de no relativizar sus observaciones.
El autor plantea que en las sociedades europeas las instituciones funcionan de forma constante y pareja. LAS
INSTITUCIONES PÚBLICAS TIENEN UNA INFLUENCIA MUY GRANDE EN LA SOCIALIZACIÓN. Durante el pleno empleo, los
ciudadanos se integran en la sociedad y esto lleva a la inserción en otras instituciones (educación). (Esto tiene relación
con la división de trabajo que plantea Durkheim). En cambio, cuando una sociedad está en crisis se produce una fractura
en las instituciones, expulsando a gran cantidad de individuos del sistema. “Me refiero a esas situaciones en las que le
Estado no regula, o lo hace de manera laxa”.
“Es así que la vida en los márgenes exige acostumbrarse a la inestabilidad como componente de la vida cotidiana. La
inestabilidad institucional se vuelve entonces uno de los dos ejes centrales de esta situación específica de individuación
que puede ser regularmente observada en los barrios populares de las grandes ciudades (…) No diría que las “sociedades
de riesgo” son la característica de la modernidad contemporánea, sino, antes bien, que la incertidumbre estructura la
experiencia contemporánea de la mayoría de los medios populares, ya que constriñe a los individuos a una mezcla de
compleja de iniciativa y de espera, algo difícil de controlar”. (P. 192 – 193)
El barrio constituye la base principal de la estabilización de la experiencia. Cuando las familias son “nómadas” se sienten
a la deriva tanto en lo económico como en lo habitacional y educativo. Entonces, cuando se asientan, pueden superar de
forma colectiva los problemas sociales derivados de la precariedad de su situación y ser menos vulnerables.
Comprender la cuestión del nomadismo nos permite ver el gran valor que es la inscripción territorial.
El nomadismo urbano es individual, se da por la búsqueda de una mejor situación económica, un mejor ingreso. Rompe
lo colectivo, separando al individuo del grupo, manteniendo como mucho su familia más cercana, pero pierden el
vecinazgo y la relación con su ciudad.
El barrio brinda: una estructura relacional que sirve de soporte; un lazo con los servicios, la ciudad y las instituciones;
yprestigio otorgado por la reputación del barrio. “La PARTICIPACIÓN en la vida social, política y cultural del barrio es una
manera de hacerse de un lugar en el seno de la sociedad y dotarlo de sentido (…) La inscripción en el barrio proporciona
a la vez un marco de estructuración de solidaridades locales y un medio colectivo de relacionarse con el ámbito
institucional a través de la acción colectiva”
Los habitantes de las tierras ocupadas ilegalmente a su vez piden al Estado el derecho a la ciudad, a la tierra, a una
vivienda digna. “Si es verdad que la acción de los ocupantes carece de legalidad, no es menos cierto que también el
Estado está en falta, pues debería garantizar esta serie de derechos y no lo hace”. Así, hay acuerdos políticos: “La acción
colectiva es guiada por una misma lógica “oportunista” del cazador que encontramos en las conductas individuales” =
Los grupos sociales formados en los barrios con el fin de conseguir beneficios, se vuelven un mismo cazador para lograr
lo que se proponen.
ENTONCES = “La estructura relacional del barrio permite así a los habitantes actuar sobre una segunda forma de
inscripción colectiva: la que une más estrechamente a la sociedad a través de las instituciones. (…) De esta manera, la
inscripción territorial de estas clases populares aparece dada por esos dos componentes: una estructura de las
relaciones locales y una forma de movilización colectiva ante las instituciones con las que comparten una base local.”
Sintetizar rasgos característicos de la figura del cazador: individuo conformado entre una doble condición de
individuación: la inestabilidad institucional y la inscripción territorial. Frágiles lazos con las instituciones. Precariedad los
fuerza a la búsqueda permanente de la oportunidad y el intersticio. Barrio como uno de los principales colectivos que
contienen la vida de los individuos frente a esa precariedad. Vivir en los márgenes implica astucia especial, la sagacidad
del cazador. Fuente mínima de estabilidad aportada por la familia y el barrio aparece como uno de los soportes que
hacen posible la aparición de una figura de individuo perfectamente moderna. Si la primera condición de individuación
(la más absoluta precariedad) obliga a los “capitanes” a un movimiento permanente para su supervivencia, la segunda
(su asociación) les proporciona los soportes mínimos para que su movilización sea posible.
Conclusión: pensar las clases populares a través del individuo y el individuo a través de las calases populares.
Concepto de soporte sobre un doble registro teórico: 1) identificar las bases sobre las cuales el individuo puede “asentar
un mínimo de autonomía” 2) identificar los tipos de individuo.
El cazador se mueve entre sus diferentes soportes surgiendo así como una figura de individuo propia de los mundos
populares.
El autor plantea estudiar al mundo popular desde las situaciones de individuación que produce dicho mundo.
Individuo calificado según su tipo de dominación: “bribones”, “héroes” o “pobres tipos”. En esos casos, el individuo
oprimido se moviliza para tenderle una trampa a su dominador.
Individuo inscripto territorialmente pero al que los soportes institucionalizados le fallan en mayor o menor medida:
Barrio como muralla defensiva frente a la pobreza e inestabilidad. Sin embargo, esta inserción es de tipo marginal ya que
se da en los barrios populares. Lo que define la marginalidad es la distancia institucional entre la sociedad (reglas e
instituciones) y el mundo “social” en esos barrios. La inscripción social le permite dejar el “nomadismo” y participar de
un sistema de intercambios y de solidaridad. Construyendo un sistema de solidaridades con la familia como centro. Sin
embargo, los habitantes no se encuentran excluidos de la actividad económica o institucional. El individuo del que
hablamos goza de ciertas formas de afiliación y antes que nada de una inscripción territorial.
La imagen del cazador nos permite articular el comportamiento de los individuos con el comportamiento
colectivo. Barrio vulnerable no puede garantizar estabilidad.
Es frecuente que los individuos de las clases populares sean evaluados por la distancia en la que se encuentran en
relación con el ideal del individuo. “En efecto, la cuestión del individuo aparece mezclada con la del ciudadano. La
tentación, entonces, es querer saber si, por ejemplo, los individuos en situación de precariedad son más o menos
individuos que los de las clases medias (…) Al contrario, se trata de explorar las condiciones históricas y locales en las
cuales observamos a los individuos de las clases populares luchar para conquistar una ciudadanía que encuentran
marchita”.
La confusión de la modernidad
Las clases populares han construido estructuras de solidaridad que los sacan de la inestabilidad. Sin embargo, la
fortaleza de estos vínculos encierran a las personas en un tejido relacional que ahogaría al individuo, impidiéndole
desarrollarse. He aquí el problema.
En la mayoría de las sociedades contemporáneas de las grandes ciudades las clases populares ofrecen al estudio
situaciones de individuación específicas que no pueden en ningún caso identificarse con la preexistencia de una
sociedad tradicional
Propuesta metodológica: Mantener separadas de manera general la ideología moderna del individualismo de los
procesos múltiples de individuación. Identificando así la especificidad de los procesos de socialización o individuación en
el medio popular y cuáles son las modalidades específicas del individuo allí observadas.