INTRODUCCIÓN
La realización de este trabajo ha sido con el fin de rastrear elementos semiótico-lingüísticos que
se presentan en un corpus específico y a partir de ellos, identificar las relaciones que surgen entre
estos elementos y las diferentes interpretaciones que pueda sugerir dicho corpus.
Este análisis discursivo se presentará, en primer lugar, haciendo una recopilación de elementos
que pertenecen a la textualidad, es decir, que contribuyen a la cohesión y coherencia del corpus.
Teniendo en cuenta estos aspectos, pasaremos a revelar breves inferencias hechas a partir de la
discursividad, sustentadas desde el corpus. Finalmente, se hará una descripción del plano
narrativo del discurso, utilizando planteamientos de la semiótica.
El corpus escogido para este trabajo es una canción titulada ‘Las habladurías del mundo’,
perteneciente al álbum ‘Artaud’, lanzado en 1973 por el músico de rock argentino Luis Alberto
Spinetta, conocido como ‘El Flaco’. La selección de esta canción fue motivada por la importancia
que tiene para el rock latinoamericano, pues hace parte del mejor álbum de rock argentino según
la revista Rolling Stone.
Aunque el álbum fue lanzado bajo la interpretación de Pescado Rabioso, es en realidad el
resultado de un trabajo de Spinetta como solista, quien debido a malentendidos con los demás
integrantes de la banda, decidió demostrarles que él era ‘Pescado Rabioso’ y podía hacer música
con o sin ellos.
Esta canción, la última del álbum, tiene relación con una serie de sucesos que tuvieron gran
impacto en la vida del ‘Flaco’, quien, como muchos artistas, fue centro de habladurías y mentiras.
Por esto él escribe una canción donde se proyecta como un enunciador desinteresado por dejarse
afectar negativamente por dichos eventos.
CUERPO DEL TRABAJO
Existen elementos que pueden identificarse en este corpus y le aportan una organización que lo
caracteriza, permitiendo al enunciatario una comprensión más óptima del texto. O también, darle
más estética a través de figuras literarias que ayudan a estilizar las oraciones en él. Pero, ¿aportan
a la interpretación del discurso estos elementos?
Se puede rastrear ciertas relaciones referenciales que son utilizadas para evitar, por ejemplo, la
repetición de una misma palabra, como es el uso de la cuasi copia, encontrada entre las palabras
‘trinos’ y ‘voces’.
También se destaca la utilización de una elipsis donde son suprimidos los pronombres personales:
“[Ø] no estoy atado a ningún sueño ya…”, “[Ø] veo [Ø] veo las palabras nunca son…” y, en
“Mientras [Ø] oigo trinos voces [Ø] oigo más…”.
Igualmente, se encuentra el uso de elementos que pueden reunirse bajo una sinonimia contextual,
como parte/carne y trinos/voces. Por añadidura, se resalta un encapsulador que también puede
considerarse sinonimia contextual, y está subrayado en el siguiente verso: “…son aquellos, los
dioses que nos escuchaban, nena”.
Paradójicamente, en el corpus se identifica el uso de la copia, que es lo contrario a lo anterior
pues lo que se da es la repetición de la misma palabra, y en esta canción se da de una manera muy
particular, veamos estos versos a continuación:
“Toda toda la ternura me darás…”
“Veo veo las palabras nunca son…”
“Mientras oigo trinos voces oigo más…”
“Ni ni la anaconda es como el buey…”
En estos ejemplos de copia, se percibe una clara intensión de enfatizar dichas palabras al
repetirlas de tal manera que puede confundirse con un error de coherencia, al estar
completamente seguidas.
Una de las figuras literarias presentes en el corpus es el hipérbaton; aparece en la primera frase de
la canción: “Toda toda la ternura me darás…” Y en el coro: “No estoy atado a ningún sueño ya”.
La utilización de recursos estilísticos, como lo es esta figura literaria, se da por el deseo de
embellecer lo que se dice para que suene más estético.
En efecto, la canción analizada puede verse como un discurso lírico, ya que el enunciador se
expresa a través de numerosas metáforas, siendo este el recurso más utilizado por el enunciatario.
A continuación, algunas de las imágenes e inferencias de lo que probablemente representan:
- “No estoy atado a ningún sueño ya”: el adverbio ya permite afirmar que el enunciador
estuvo atado a aquel sueño en un pasado pero ahora eso cambió. Por lo tanto, se puede
decir que ya nada lo obliga a seguir viviendo en un pasado, es decir, seguir adelante sin
mirar atrás.
- “Ya no hay más reyes de la selva”: la expresión reyes de la selva sugiere una regulación o
norma que estaba impuesta pero, de nuevo el adverbio representa que esto cambió, ya no
es así, no existe quien gobierne.
- “Las habladurías del mundo ya no pueden atraparnos”: en un lenguaje más coloquial, la
palabra habladurías puede entenderse como el ‘qué dirán’, del mundo nos indica la
procedencia y, el adverbio ya, reaparece para indicar que en algún momento fueron un
problema o inconveniente pero ahora, en el presente, no lo son más.
- “Toda la ternura me darás/si te ofrezco ser parte de tu cuerpo”: esta es una metáfora que le
da a la canción, desde el principio, una atmósfera erótica, asumiendo el acto sexual como
la consumación de los cuerpos.
- “Toda la ternura me darás/si te ofrezco ser carne de tu cuerpo”: aquí es más explícito el
deseo sexual; la palabra carne revela un querer más intenso.
- “Veo veo las palabras nunca son/lo mejor para estar desnudos”: es posible que en este
verso el uso de la palabra desnudos se refiera a la desnudez como virtud de genuinidad, es
decir, sin aparentar nada pues se muestra quien es en realidad. Entonces, lo que se expresa
es que las palabras no permiten esto pues es muy fácil mentir.
- “Mientras oigo trinos voces, oigo más/son aquellos los dioses, que nos escuchaban, nena”:
en este verso se mantiene el aire erótico, trinos voces son una imagen que representa los
sonidos que pueden surgir durante el acto sexual, que son como un cantar, e igual las
palabras que se puedan decir. Cuando dice oigo más, se refiere a que eso tiene un
significado que va más allá de lo superficial, y luego, al usar la palabra dioses, es posible
inferir que esos trinos o voces que oye, son tan fuertes que hasta ellos los escuchan,
siendo esto sinónimo de un gran placer.
Ahora bien, estas aproximaciones permiten proponer dos campos semánticos que se hallan en el
corpus, el primero corresponde al Erotismo o deseo sexual, y está conformado por las siguientes
expresiones o, en su defecto, palabras: “…toda la ternura me darás/si te ofrezco ser parte de tu
cuerpo”, “…si te ofrezco ser carne de tu cuerpo”, “al acariciarme…”, “desnudos” y, “…los
dioses que nos escuchaban, nena”.
Las expresiones agrupadas en esta isotopía advierten al interpretante sobre ese deseo sexual por
parte del enunciador, que estiliza las palabras mediante figuras literarias para darle más sutileza a
su intención.
El segundo, se denomina Humano-Animal: “anaconda”, “buey”, “…reyes de la selva”, “…trinos
voces”, “carne” y, “alma”. Esta isotopía es, claramente, un contraste donde se comparan
características humanas con elementos del mundo natural. Por ejemplo, al utilizar la palabra
‘trinos’, que es el canto de los pájaros, está dando a entender que los gemidos o incluso las
palabras proliferadas durante el acto sexual (voces) son como un cantar hermoso que es natural
en el ser, es decir, no tiene nada de negativo o fuera de lo común.
Algunos elementos de este campo semántico han de ser interpretados tomándolos desde el verso
donde se encuentran: “Ni ni la anaconda es como el buey/ya no hay más reyes de la selva”. Toda
esta frase es una metáfora que se puede decir, fue la que permitió considerar la isotopía de
Humano-Animal.
Se están comparando dos animales que son completamente diferentes: un reptil y un mamífero,
pero lo interesante es que la anaconda es un animal completamente salvaje, mientras que el buey
no lo es del todo pues ha convivido junto al hombre y en muchos casos, ‘criado’ o ‘domesticado’
para servirle.
Entonces, el enunciador compara estos animales pero para hacer énfasis en que no son similares,
y en el verso siguiente, como se analizó en la metáfora, el adverbio ya demuestra que antes había
un ‘gobierno’ (reyes de la selva), sin embargo, en el presente no está. Este ‘reinado’, bien fuese
del salvajismo de la anaconda o en algunos casos, de la sumisión del buey, no existe más.
Cabe mencionar una relación exofórica presente en el corpus, antes de finalizar el nivel de
análisis textual; Se trata del siguiente verso: “Veo veo las palabras nunca son/lo mejor para estar
desnudos”. Retomando un poco la breve contextualización hecha sobre el corpus y su
proveniencia, se ha de resaltar que el nombre del álbum (‘Artaud’) guarda una estrecha relación
con el poeta francés Antonin Artaud, quien representó para Spinetta una fuerte influencia
artística.
Una de las frases célebres del francés fue “No ha quedado demostrado, ni mucho menos, que el
lenguaje de las palabras sea el mejor posible”. Entonces, en esta canción se hace evidente y
explícita esa influencia que generaba el poeta en el cantautor argentino, dirigido a la concepción
de las palabras y su imposibilidad de ser siempre ciertas pues precisamente una de las
características la lengua es la prevaricación (capacidad de mentir).
A manera de síntesis, para pasar al siguiente nivel de análisis, se puede considerar que el
enunciatario utiliza en su discurso una serie de elementos textuales que le aportan coherencia, no
obstante, prima el uso de figuras literarias que embellecen el discurso sin importar si puede
generar confusión. Por otro lado, se destaca el erotismo y las figuras que representan el acto
sexual como algo natural del ser humano, independiente de las leyes o normas sociales
impuestas.
Es interesante cómo los elementos que hacen al texto más coherente, también pueden tener
influencia en las interpretaciones que pueda sugerir, y ni hablar de los recursos estilísticos que al
ser profundizados revelan información sustancial para el análisis del discurso.
Ahora bien, analizando la discursividad del corpus, se puede formular que predomina una
tonalidad intencional, pues el enunciatario manifiesta un deseo de ‘hacer-hacer’ es decir,
persuadir:
“Toda toda la ternura me darás/ si te ofrezco ser parte de tu cuerpo”
Es notorio que se busca seducir al enunciatario con el discurso que emite. Sumando, se puede
identificar una intencionalidad manipuladora a través de una conjunción condicional si, eso es
interpretable como el deseo de establecer un contrato cooperativo con el enunciatario.
Por ejemplo, observando el coro de la canción analizada:
“No estoy atado a ningún sueño ya
las habladurías del mundo,
no pueden atraparnos”
Se está construyendo un hecho institucional, que sería la existencia de ‘habladurías’, es decir, de
forma más coloquial, ‘chismes’ o ‘inventos’ acerca de algo o alguien. Se concreta como hecho
institucional debido a que depende de la existencia, por ejemplo, de una sociedad, es decir, no
existe independiente de la realidad.
Ahora, lo que se trata de demostrar entorno a este hecho, es que aunque en un pasado tuvo
importancia o afectó de algún modo al enunciador, en el presente no se le otorga ninguna
pertinencia al ‘qué dirán’.
Dicho de otro modo, el enunciador proyecta un deseo erótico hacia el enunciatario, y por esto
recurre a una intención preferencial que trata de proponer para hacer actuar al enunciatario,
persuadirlo a realizar una acción, garantizándole a través del contrato cooperativo una relación de
confianza e informándole que no tiene ninguna importancia la opinión de la sociedad.
Llegado a este punto, es importante presentar la configuración del enunciador y enunciatario, que
nos permite comprender con mayor profundidad la intención del enunciador según su proyección
de enunciatario.
Entonces, el autor/locutor, Luis Alberto Spinetta, proyecta un enunciador cuya identidad
discursiva se constituye, en la cognición, como un sujeto que sabe que le interesa al enunciatario
(“toda la ternura me darás si te ofrezco ser parte de tu cuerpo”), maneja el sistema de
significación para expresar su mensaje, en lo axiológico. Cree que puede persuadir al
enunciatario. Considera las palabras como un lenguaje no siempre tan sincero (“las palabras
nunca son lo mejor para estar desnudos”)
Axiológicamente, valora negativamente las normas que son impuestas por una sociedad (“ya no
hay más reyes de la selva”), valora +/- las ‘habladurías’, es decir, le son indiferentes (“las
habladurías del mundo no pueden atraparnos”), valora positivamente las caricias y la desnudez.
En lo pasional, el enunciador se construye como un sujeto que desea ser parte del cuerpo del
enunciatario, quiere y valora positivamente estar con él y se identifica como alguien que ya no le
da importancia al pasado (“no estoy atado a ningún sueño ya”).
Con respecto al enunciatario, se construye como un sujeto que comprende el sistema de
significación también, sabe que es deseado pues el enunciatario está seguro que obtendrá ‘su
ternura’ por ofrecer ser parte de él, valora positivamente el erotismo, valora +/- las ‘habladurías’
pues en ese verso, el verbo conjugado está en plural (“no pueden atraparnos”).
Valora positivamente la persuasión por parte del enunciador, valora positivamente las caricias y
la desnudez.
Llegando a este punto, es necesario establecer la estructura narrativa, para identificar las
modalidades que mueven al sujeto. El enunciador (S1) está disjunto del objeto de deseo, que es,
como hemos indicado, un enunciatario ya definido y construido (O1). Por esto, su existencia está
virtualizada (se mueve por el querer), como podemos ver en el siguiente diagrama:
S1 O1 (S2 U O2)
La acción que llevaría al sujeto a juntarse con el objeto sería la persuasión, es decir, un hacer-
hacer, dejarse seducir por los deseos eróticos del enunciador.
Específicamente, no es posible realizar una inferencia donde se describa el estado inicial,
transformación y estado final, pues no se ha realizado la acción, es hasta ahora solo un intento, y
S1 se encuentra en una existencia actualizada.
Dicho de otro modo, el enunciatario actúa moviéndose por la intención (querer ser/estar) y esto le
lleva a expresar su deseo de ser parte del cuerpo del enunciatario, un tú configurado
implícitamente en el corpus. Estos elementos de la semiótica orientan el análisis hacia el deseo
sexual del sujeto enunciador, quien a través de la manipulación pragmática establecida en el
contrato cooperativo propuesto explícitamente en el discurso.
CONCLUSIONES
Es muy interesante descubrir tantos elementos que a simple vista no son percibidos por ninguno
de nosotros incluso siendo estudiantes de la lengua y la semiótica, pero una vez los identificamos,
van surgiendo muchas interpretaciones que varían según el enfoque con el cual analizamos un
discurso.
En este trabajo se tuvieron en cuenta aspectos de la semiótica, la lingüística y la semántica para
proponer inferencias sustentadas a partir de la canción seleccionada, lo cual permite hacer
relaciones que no serían establecidas de no llevarse a cabo el análisis de los elementos que brinda
el texto desde las disciplinas trabajadas.
Hemos podido percibir en la canción una connotación muy erótica, es decir, una intención de
persuasión y seducción por parte de enunciador hacia un enunciatario que se configura a lo largo
del texto trabajado. A partir de inferencias hechas desde las metáforas presentes en este corpus,
entre otras figuras literarias y recursos cohesivos, se logró identificar una tonalidad intencional
que confirma el deseo del enunciador en hacer-hacer al enunciatario construido.
Finalmente, este trabajo permitió aplicar desde diversos campos del análisis del discurso, muchos
elementos trabajados en el transcurso de la materia lingüística III, para así dar cuenta de una
interpretación argumentada desde el mismo corpus, acerca del significado profundo detrás de las
palabras escritas por un artista, en este caso, considerado el padre del rock argentino.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Revista Rolling Stone Argentina. 100 mejores discos del rock nacional [en línea]. Argentina:
Edición doble aniversario. [consulta: martes 24 de septiembre 2013]. Disponible en:
http://www.rollingstone.com.ar/899791
Colaboradores de Wikipedia. Artaud (álbum) [en línea]. Wikipedia, la enciclopedia libre, 2013.
[consulta: martes 13 de agosto de 2013]. Disponible en:
http://es.wikipedia.org/wiki/Artaud_(%C3%A1lbum)
Colaboradores de Wikipedia. Antonin Artaud [en línea]. Wikipedia, la enciclopedia libre, 2013.
[consulta: martes 13 de agosto de 2013]. Disponible en:
http://es.wikipedia.org/wiki/Antonin_Artaud
ANEXO
Letra de la canción “Las habladurías del mundo” de Luis Alberto Spinetta
Toda toda la ternura me darás
si te ofrezco ser
parte de tu cuerpo…
Y y al acariciarme me darás
los espejos que son, de tu día del alma
Mientras oigo trinos voces
oigo más…
son aquellos los dioses, que nos escuchan… nena
No estoy atado a ningún sueño ya
Las habladurías del mundo
no pueden atraparnos… no
Veo veo las palabras nunca son
lo mejor para estar desnudos…
Ni ni la anaconda es como el buey
ya no hay más reyes de la selva… nena
Toda toda la ternura me darás
si te ofrezco ser carne de tu cuerpo
No estoy atado a ningún sueño ya
Las habladurías del mundo
no pueden atraparnos
Análisis crítico y semiótico de la canción Las habladurías del mundo de Luis A. Spinetta
Paula Ximena Lizarazo Torres
Trabajo final presentado a:
William Sánchez Amézquita
En el marco de la asignatura Análisis crítico del discurso
PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA
FACULTAD DE COMUNICACIÓN Y LENGUAJE
MAESTRÍA EN LINGÜÍSTICA APLICADA DE ELE
BOGOTÁ
2018