La española del siglo XVl
El siglo XVI comenzó el 1 de enero de 1501 y terminó el 31 de diciembre
de 1600. Es llamado el «Siglo de las Colonias».
España se instauro como la superpotencia de ese siglo y reunió un imperio
gigantesco, con posesiones por todo el mundo. Alcanzó su apogeo al anexionar
el Imperio portugués. Dominó grandes territorios americanos, desde los actuales
Estados Unidos hasta la zona de Chile y Argentina, posesiones alrededor de
África, numerosas colonias en Asia fruto de la conquista de Portugal. Además de
media Italia, los Países Bajos, la Borgoña, etc.
La decadencia española en el siglo xvi
La Situaron Internacional para la Isla La Española comenzó su decadencia en el
inicio de la segunda mitad del siglo XVI debido a varios factores externos e
internos que impidieron el desarrollo de la industria azucarera.
La Decadencia española fue el proceso paulatino de agotamiento y desgaste
sufrido por la Monarquía Hispánica a lo largo del siglo XVII, durante los
reinados de los denominados Austrias menores (los últimos reyes de la Casa de
Austria. Felipe III, Felipe IV y Carlos II); proceso histórico simultáneo a la
denominada crisis general del siglo XVII, pero que fue especialmente grave
para España, hasta tal punto que la hizo pasar de ser la potencia hegemónica
de Europa y la mayor economía del mundo en el siglo XVII a convertirse en un
país empobrecido y semiperiférico.
La decadencia se reflejó en todos los ámbitos:
Demográfico: (recrudecimiento de la peste y otras epidemias, despoblación),
Económico: (cronificación de los problemas fiscales, las alteraciones monetarias,
la inflación y el descenso de las remesas de metales preciosos de América),
Social: (mantenimiento de la tensión religiosa e inquisitorial, expulsión de los
moriscos, refeudalización, búsqueda de salidas escapistas como
el ennoblecimiento, la compra de cargos, el incremento de la presencia de
las órdenes religiosas y la picaresca),
Político territorial: (iniciada con la tregua de los doce años y las maniobras
del valimiento del Duque de Lerma, manifestada espectacularmente a partir de la
denominada crisis de 1640
La decadencia española coincidió con las manifestaciones más brillantes del arte
y la cultura, en lo que se ha denominado Siglo de Oro Español. En muchas de
esas manifestaciones artísticas y culturales hay una verdadera conciencia de la
decadencia, que en algún caso ha sido calificada de introspección
negativa (Quevedo, los arbitristas). Concretamente, el Barroco
español (el culteranismo o lo churrigueresco) ha sido interpretado como un arte
de la apariencia, escenográfico, que oculta bajo los oropeles exteriores la
debilidad de la estructura o la pobreza del contenido.
Antecedentes
Las raíces de ésta decadencia, nacen con las alianzas matrimoniales concertadas
entre Fernando el Católico y Maximiliano de Habsburgo que determinaron la
introducción de la dinastía Habsburgo austriaca en el trono español, que
buscaban aislar y rodear a Francia, potencia hegemónica en el final de la Edad
Media. Fue Carlos de Gante, nieto de ambos, el que reunió las herencias,
convirtiéndose en rey de Castilla y de Aragón (con sus posesiones americanas y
mediterráneas) en 1516.
Esta compleja herencia fue la que determinó la política de Carlos I (V de
Alemania) y sus sucesores, con tan pobres resultados para Castilla, y que ya
habían apercibido los interesados en la época, con las rebeliones
de Germanías y Comuneros. Tuvo que enfrentarse a Francia, Papa Clemente VII,
la República de Venecia, Inglaterra, el Ducado de Milán, y Florencia que
formaban la Liga de Cognac para defender las posesiones aragonesas en Italia, y
tuvo otros frentes contra los principados alemanes rebeldes, la amenaza turca en
el Mediterráneo y la extensión del protestantismo en Europa, que deshizo el lazo
de unión del Sacro Imperio Germánico, reduciendo aún más la funcionalidad del
gobierno Imperial. Todos estos problemas mantuvieron a España constantemente
ocupada en guerras, a los que se añaden los problemas internos por la Guerra de
las Comunidades de Castilla y las Germanías, al sublevarse la nobleza media
contra las exacciones fiscales y la imposición de gobernantes flamencos y de las
mercedes, al frente de los cuales figuraba el regente Adriano de Utrecht,
despreciando a las Cortes, tanto castellanas como aragonesas.
Causas y consecuencias de la decadencia española en el siglo xvi
Causas
En ella se aúnan varios factores:
El debilitamiento económico y financiero que viene anunciándose desde
mediados del siglo XVI.
Una decadencia militar marcada por la definitiva derrota de los tercios españoles
de Flandes en 1643, en la batalla de Rocroi.
Un declive intelectual, social y espiritual que se producirá a mediados de siglo.
Por otro lado, debido a las grandes epidemias y períodos de hambre, se produce
una baja demográfica espectacular. La población emigra hacia la periferia,
despoblando el centro, debido a la enorme presión fiscal imperial. La fecha clave
del declive es el año 1588, cuando se produce el hundimiento de la marina
española en la derrota de la Armada Invencible. Otra de las causas del declive fue
la intransigencia religiosa, al acabar con la coexistencia
de judíos, musulmanes y cristianos que había enriquecido la cultura peninsular a
lo largo de la Edad Media
Consecuencias
Las consecuencias fueron la pérdida del control total, muchos criollos se
mostraron molestos con las medidas tomadas, como el maltrato, la falta de
inclusión en la distribución política, y con el pasar de los años las revueltas
tuvieron auges que terminaron con la independencia de muchas colonias.
El expreso esfuerzo bélico tuvo un coste económico y humano incalculable. Las
rentas procedentes de la exportación lanera y otros productos de la rica Castilla a
Flandes, y la plata que venía de América, se dedicaban a pagar gastos de guerra
olvidando cualquier inversión en España, pero no siempre eran suficientes o no
llegaban a tiempo, y el rey recurrió a numerosos préstamos de banqueros
alemanes y genoveses, lo que comprometió e hipotecó gravemente el futuro
económico de sus reinos. Así, su hijo Felipe II tuvo que declarar
la bancarrota tres veces a lo largo de su reinado, en 1557, 1575 y 1597.