Tomo 13 PDF
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Grohmann                         13
HISTORIA DE LA REPÚBLICA DEL PERÚ [1822-1933]
   Jorge Basadre
      Grohmann                    [13]
HISTORIA DE LA REPÚBLICA DEL PERÚ [1822-1933]
Historia de la República del Perú [1822-1933]
Tomo 13
Elaboración de contenidos
Dirección general: Bernardo Roca Rey Miró Quesada
Planeamiento y desarrollo: Raúl Castro Pérez
Realización ejecutiva: Jorge Cornejo Calle
Redacción e investigación: Jenny Varillas Paz
Asistencia: Francisco Izquierdo Quea, Alejandra Velarde de Romaña,
Ana Paola Durand Schinkel, María Jesús Geiser Reyes
Diseño: Veruzka Noriega Ruiz, Claudia Burga-Cisneros Pizarro
Diagramación: Gerardo Cristobal Pacheco
Infografías: Raúl Rodríguez Rodríguez, Grafitti
Fotografía: Cecilia Durand Torres, Paola Nalvarte Abad
Investigación fotográfica: Erick Devoto Bazán
Coordinación de fotografía: Carolina Cáceres Cáceres
Reproducción y fotografía: Jaime Gianella Malca
Corrección: Ana Loli Chau, Rosella di Paolo Ferrarini
Asesoría histórica: Héctor López Martínez
Coordinación de actualizaciones historiográficas: Carlos
Contreras Carranza
Redacción e investigación de actualizaciones historiográficas
para este tomo: José Carlos de la Puente Luna (páginas 26, 44, 52,
68, 102, 136, 148, 212, 232, 236, 252)
                                                                                                                   [ INDICE ] TOMO 13   5
    66 El atentado en la casa del presidente del Senado, el asalto a la    [ IX ]
       del ex presidente Leguía y la prisión de este. Dimisión del         95 Los vuelos de Ramón Montero
       Gabinete Sousa                                                      95 Otros vuelos
    66 El segundo Gabinete Varela
    67 El atentado en la imprenta de La Crónica
    67 El personal del Concejo Provincial de Lima y los incidentes de      CAPÍTULO 34
       setiembre de 1913                                                   LA ADMINISTRACIÓN DE BILLINGHURST (II)
       [ II ]                                                              EL CONFLICTO ENTRE EL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA
    67 La ley electoral de 1912. En qué se diferenció su texto del         Y EL CONGRESO, Y LA REAPARICIÓN DEL EJÉRCITO EN
       proyecto original                                                   LA POLÍTICA.
    70 La Corte Suprema y los procesos electorales de 1913                 La segunda crisis en la República Aristocrática
    70 Los resultados de la reforma de 1912
       [ III ]                                                                 [I]
    72 La negociación Hunneus-Valera                                       98 La demora en la aprobación del Presupuesto para 1914 por el
    72 El mensaje secreto de Billinghurst el 30 de noviembre de 1912           Congreso
    73 La oposición contra la negociación Hunneus-Valera                   98 La dimisión de los ministros Tudela y Maldonado
    74 Las interpelaciones al ministro de Guerra y la política             99 La vigencia del Presupuesto para 1914 por decreto. No hubo
       armamentista                                                            rebaja en el pliego de guerra
    74 El ambiente de confraternidad popular peruano-chilena                   [ II ]
    76 Las cuestiones con Colombia y el Ecuador                            100 El conflicto entre el Presidente y el Congreso. El supuesto
    76 El arbitraje sobre las reclamaciones francesas                          decreto con la desautorización de este y las causales aducidas
       [ IV ]                                                              101 Las reformas constitucionales
    76 El establecimiento de la jornada de ocho horas para los             103 Las reformas constitucionales en el proyecto de Javier Prado y
       trabajadores portuarios                                                 Mariano H. Cornejo
    77 El primer decreto sobre reglamentación de las huelgas               103 El plebiscito
    79 La sección obrera, base de la inspección general del trabajo        104 El armamento del pueblo
    79 La reglamentación de la ley sobre accidentes del trabajo            105 Casos latinoamericanos de armamentos del pueblo como
    80 La represión del Callao                                                 contrapeso al poder militar
    80 Las huelgas de 1913                                                     [ III ]
    81 Casas para obreros                                                  105 La conspiración
    81 La escuela de enseñanza doméstica                                   106 El intento de efectuar el pronunciamiento el 18 de enero
    81 El fomento de la extensión cultural entre el pueblo                     de 1914
    82 El decreto para reglamentar el arrendamiento de las fincas de       108 Los diarios. La actitud del Partido Civil Independiente
       la Beneficencia                                                     108 Los distintos sectores de la conspiración
    82 Billinghurst y los indios. Las matanzas de Chucuito y Azángaro      108 Los fundamentos de la propaganda subversiva
    82 El informe Villena sobre los atropellos a los indios en la          108 ¿Hubo el intento de obtener la renuncia de Billinghurst por
       provincia de Lampa                                                      medios pacíficos?
       [V]                                                                 109 La propaganda contra el Congreso y a favor del plebiscito
    84 Las ideas de Billinghurst sobre la educación primaria y el          109 El ambiente en Lima al empezar febrero
       decreto sobre la enseñanza religiosa                                110 ¿Abandonó Billinghurst a última hora la idea del plebiscito?
       [ VI ]                                                              112 El pronunciamiento militar del 4 de febrero. Asesinato del
    85 El departamento de Madre de Dios                                        general Enrique Varela,
    85 El informe Forbes sobre el guano                                    112 Homenajes al general Varela
    86 La supuesta existencia de salitre en Arequipa                       112 El proceso por el asesinato del general Varela
    86 Iniciativas del gobierno de Billinghurst sobre el borato de cal y   115 La musa popular y el asesinato del general Varela
       el carbón                                                           115 La dimisión y la expatriación de Billinghurst
    86 La unión de La Punta con San Lorenzo y el proyecto sobre                [ IV ]
       Matarani                                                            116 Apreciaciones sobre el conflicto constitucional de 1914. El
    88 La ruta Huánuco-Pucallpa                                                significado histórico de Billinghurst
    88 Los basurales del Tajamar, la Dirección de Salubridad y la          118 La segunda crisis de la República Aristocrática
       Asistencia Pública                                                  118 El plan de Billinghurst. La sublevación de Leguía en 1919 y el
    88 El ferrocarril a Chilca                                                 plebiscito de 1939
    88 La ley de colonización e irrigación de la costa                     120 La suerte de la reformas propugnadas por Billinghurst
    89 El fomento de la arboricultura frutal                               120 La legalización de la aprobación del Presupuesto por decreto
    89 La difusión de la higienización y del agua potable                      en 1962
    91 La expropiación de los derechos de la Empresa del Agua                  [V]
       de Lima                                                             120 Formación de la Junta de Gobierno
       [ VII ]                                                             121 La reunión de los senadores y diputados residentes en Lima
    91 Los mensajes de Billinghurst al Congreso. La condenación de         122 La aprobación de la clase dirigente a la subversión militar en
       la historia hacendaria de la República y la denuncia del                1914
       anómalo crecimiento presupuestal                                    122 Los ascensos por la subversión del 4 de febrero
    92 El Presupuesto para 1913                                            123 La tranquilidad pública después del 4 de febrero
    93 La Compañía Recaudadora de Impuestos
    94 Los empréstitos de Billinghurst
       [ VIII ]
    94 El Porvenir compañía de seguros de vida
    95 El cultivo del té
6   TOMO 13 [ INDICE ]
CAPÍTULO 35                                                           [ III ]
EL CONATO DE TERCER MILITARISMO (1914-1915).                          156 Los cheques circulares
Aspectos políticos, administrativos y sociales.                       160 La publicación del estado de caja de los bancos
La cuestión La Brea y Pariñas                                         160 La moneda de plata y de cobre
                                                                      162 La exportación de oro y de plata
    [I]                                                                      [ IV ]
126 Los sangrientos sucesos de Napo                                   162 La reducción de los gastos públicos
    [ II ]                                                            163 Las nuevas leyes tributarias
126 La pugna entre los partidarios del vicepresidente Roberto         163 El Presupuesto de 1915
    Leguía y los partidarios de nuevas elecciones populares           164 Las obligaciones a cargo del Erario entre 1908 y 1915
128 La mediación de Isaías de Piérola                                        [V]
128 La fórmula de la presidencia provisoria                           165 El decreto sobre despido de obreros
130 La sesión del Congreso el 15 de mayo de 1914                      165 La legislación sobre artículos de primera necesidad
130 La elección del coronel Benavides como presidente provisorio             [ VI ]
132 La resolución legislativa sobre la presidencia provisoria         165 La apertura del canal de Panamá
134 Apreciaciones sobre los sucesos del 15 de mayo
134 La acusación parlamentaria por los sucesos del 15 de mayo
134 El ascenso del presidente Benavides                               CAPÍTULO 37
135 El Gabinete Muñiz. La Proclamación de Roberto Leguía y las        LA CONVENCIÓN DE PARTIDOS Y LAS ELECCIONES DE
    conspiraciones de mayo y junio de 1914                            1915. EL OCTAVO GOBERNANTE CIVIL EN LA REPÚBLICA
135 El asilo y la deportación de Augusto Durand y Alberto Ulloa       ARISTOCRÁTICA
135 La prisión de Víctor Larco Herrera y Rafael Villanueva y el
    funcionamiento del hábeas corpus                                      [I]
137 Renuncia de González Prada a La Lucha                             168 La ley electoral de 1915
138 La instalación del Congreso ordinario de 1914 y el                168 El proyecto de reformas constitucionales
    acercamiento del leguiismo al régimen de Benavides                    [ II ]
    [ III ]                                                           169 La iniciativa para la Convención de Partidos de 1915
138 El Gabinete Carvajal y el estallido de la guerra europea          169 Organización de la Convención de Partidos
138 El Gabinete Sousa                                                 170 La candidatura Muñiz
139 El Gabinete Schreiber. El incidente entre el ministro de Guerra   171 Retiro de la candidatura Prado y unificación civilista en torno
    y la Cámara de Diputados                                              de José Pardo
139 Las gestiones para que los señores Billinghurst y Durand          172 Reunión de la Convención. Designación de Pardo
    fuesen expulsados de Tacna y Arica                                172 Las vicepresidencias
140 Los sangrientos sucesos de Vitarte en enero de 1915               172 Significado de la nominación y de la elección de Pardo
142 La matanza de Llaucán                                             174 Ricardo Bentín
142 Los proyectos sobre impuestos a las utilidades del comercio y     175 Melitón Carvajal
    la industria y a los sueldos de los empleados. La matanza de          [ III ]
    Arequipa                                                          177 La Corte Suprema y las elecciones de 1915
143 Dimisión del Gabinete Schreiber                                   177 Los sangrientos sucesos de San Jerónimo. Asesinato de
143 El Gabinete Abrill                                                    Leonidas Samanez
143 Las características de los gabinetes de Benavides                 178 Elección de Pardo
143 El anticipo de las leyes de excepción                             178 El debate sobre la fecha de transmisión del mando
144 Los sucesos de Margos                                             178 La frustrada convocatoria a elecciones suplementarias. El
    [ IV ]                                                                Gobierno y el proceso de 1915
144 La ley de situación militar                                       179 La rebelión de Huaraz. Comienzo de la segunda
146 La ley de cuadros                                                     administración de Pardo
146 El tiro de guerra                                                 179 Viaje de Benavides a Europa
    [V]
147 Planteamiento de la cuestión La Brea y Pariñas
    [ VI ]                                                            CAPÍTULO 38
147 El guano y los derechos de la Peruvian Corporation y de la        LA VUELTA A LA NORMALIDAD CONSTITUCIONAL
    agricultura nacional                                              (1915-1919).LA PRIMERA PARTE DEL SEGUNDO
149 El muelle de Salaverry                                            GOBIERNO DE JOSÉ PARDO.
150 El muelle de Malabrigo                                            Política interna. Gabinetes Riva-Agüero y Tudela 1ro.
    [ VII ]
150 El agua de Lima                                                       [I]
150 Los servicios de agua y desagüe y de agua potable                 182 Carlos de Piérola, director de la Casa de Moneda
151 El alumbrado eléctrico en el Cuzco                                182 El Gabinete Riva-Agüero
                                                                      182 El asesinato del comandante Ferreccio
                                                                      183 Las leyes de amnistía de 1915 a 1917
CAPÍTULO 36                                                               [ II ]
LOS EFECTOS INMEDIATOS DE LA PRIMERA GUERRA                           184 El comienzo de la oposición a Pardo. Luis Ulloa
MUNDIAL                                                               186 El intenso contenido político de las elecciones parlamentarias
                                                                          de 1917
    [I]                                                               186 El asesinato de Rafael Grau
154 Los efectos inmediatos de la guerra de 1914                       189 Los sangrientos sucesos de Cutervo y Chumbivilcas
    [ II ]                                                            189 Las proyecciones del crimen de Palcaro
154 Las moratorias                                                    191 Los desórdenes del Cuzco
                                                                      191 La actitud de Javier Prado
                                                                                                                        [ INDICE ] TOMO 13   7
    191 Renuncia del ministro García Bedoya                               224 La tesis peruana de 1918 sobre la solución del conflicto con
    192 La acusación al Gabinete Riva-Agüero                                  Chile
    192 Miguel Grau                                                       224 El Perú y la conferencia de Versalles
    192 Óscar Grau                                                        224 La demanda boliviana sobre Tacna y Arica
    192 La ley N° 2584                                                    225 La Liga de Naciones y la preparación de la demanda peruana
    193 Alejandrino Montesinos                                                [V]
    193 El retiro del apoyo del partido constitucional al Gobierno.       225 La visita a Tumbes del Presidente del Ecuador
        El primer Gabinete Tudela
    194 Las elecciones para diputados por Lima en 1917
    196 La Corte Suprema y las elecciones parlamentarias de 1917          CAPÍTULO 41
        [ III ]                                                           LAS CONSECUENCIAS ECONÓMICAS DE LA GUERRA
    197 La dimisión de Maldonado relacionada con el problema del          MUNDIAL ENTRE 1915 Y 1918.
        aumento de los sueldos por el Legislativo                         Política monetaria y tributaria de la segunda
    197 La junta directiva del Partido Civil                              administración de José Pardo. El aumento de las
    197 El ardoroso debate parlamentario sobre la ley de ferrocarriles    exportaciones
    199 La dimisión del Gabinete Tudela y el problema constitucional
        de la insistencia en una ley                                          [I]
    200 El segundo Gabinete Tudela                                        228 Política monetaria de la segunda administración de Pardo
    200 El problema ferrocarrilero en la legislatura de 1918              229 El pago de jornales en vales de papel y la lucha contra el
        [ IV ]                                                                billete
    201 Las creaciones políticas de provincias                                de tipo pequeño y por la moneda de plata
                                                                          230 El acaparamiento de la plata y los sangrientos sucesos del
                                                                              Cuzco en enero de 1918
    CAPÍTULO 39                                                           232 Las leyes sobre ampliación de la emisión de cheques circulares
    LA FASE FINAL DEL SEGUNDO GOBIERNO DE                                     en 1918
    JOSÉ PARDO.                                                               [ II ]
    Política interna. Gabinetes Tudela 2do., Arenas y                     235 El aumento de las exportaciones
    Zuloaga                                                               237 El algodón Tangüis
                                                                          238 La popularización del automóvil y del tractor
        [I]                                                               239 El valor de las importaciones y exportaciones
    204 El incidente de Nuestra Época y la renuncia del ministro              [ III ]
        La Fuente                                                         239 El disloque económico provocado por la guerra
        [ II ]                                                            240 El desplazamiento de los mercados
    205 El movimiento subversivo de Ancón. La protesta estudiantil            [ IV ]
        por la suspensión de garantías y el ministro Sayán y Palacios     240 La nueva legislación tributaria
        [ III ]                                                           242 Las deficiencias en la tributación del estado patrimonial
    206 La dimisión del segundo Gabinete Tudela. Tudela y su                  oligárquico reveladas por el ministro Víctor M. Maúrtua
        antecesor
    207 El Gabinete Arenas
        [ IV ]                                                            CAPÍTULO 42
    208 El distanciamiento entre el Partido Liberal y el Gobierno         LAS CONSECUENCIAS ECONÓMICAS DE LA GUERRA
    208 El homicidio frustrado de Augusto Durand en Punta de la           MUNDIAL ENTRE 1915 Y 1918 Y OTROS PROBLEMAS DE
        Esperanza                                                         ESA ÉPOCA.
    210 El Gabinete Zuloaga                                               II. El Presupuesto, otros aspectos hacendarios, la
        [V]                                                               legislación sobre subsistencias y sobre transportes
    210 Las facultades legislativas de los Congresos extraordinarios      durante la segunda administración de José Pardo.
        [ VI ]
    211 El Partido Nacional Democrático                                       [I]
                                                                          246 La evolución del Presupuesto de la República
                                                                          246 La prórroga del Presupuesto de 1916 para 1917 sin voto del
    CAPÍTULO 40                                                               Congreso
    EL PERÚ ANTE LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL Y                              247 Los reintegros a los empleados
    OTROS ASPECTOS INTERNACIONALES DEL SEGUNDO                            247 Los emolumentos de los representantes a Congreso
    GOBIERNO DE JOSÉ PARDO                                                247 Las obligaciones a cargo del Erario
                                                                          248 La aplicación de los mayores ingresos y el restablecimiento del
        [I]                                                                   crédito fiscal
    216 El hundimiento de la Lorton                                       250 Las ideas conservadoras de José Pardo sobre política
    217 Las ideas de Enrique de la Riva-Agüero sobre la guerra europea        presupuestal
    218 La ruptura de relaciones con Alemania                                 [ II ]
    218 Las naves alemanas                                                250 La Caja de Depósitos y Consignaciones
        [ II ]                                                            250 La Compañía Administradora del Guano
    219 La ilusión peruana ante las doctrinas de Wilson y ante la etapa       [ III ]
        postrera de la Primera Guerra Mundial                             251 La ley sobre títulos de la deuda interna
    220 La oposición a Pardo y la Guerra Mundial                              [ IV ]
        [ III ]                                                           251 La legislación sobre subsistencias
    222 José García Calderón
                                                                              [V]
        [ IV ]
                                                                          254 El problema del transporte marítimo
    223 El rompimiento de relaciones comerciales con Chile
                                                                          255 Las “listas negras”
    223 Conversaciones sobre un posible arreglo peruano-chileno
8   TOMO 13 [ INDICE ]
CAPÍTULO 43                                                            CAPÍTULO 44
ASPECTOS JURÍDICOS Y SOCIALES DURANTE LA                               LAS RAMAS DE DEFENSA NACIONAL Y DE FOMENTO Y
SEGUNDA ADMINISTRACIÓN DE JOSÉ PARDO HASTA LA                          LOS ASPECTOS LOCALES EN LA SEGUNDA
IMPLANTACIÓN DE LA JORNADA DE OCHO HORAS.                              ADMINISTRACIÓN DE JOSÉ PARDO. LA AVIACIÓN
El arbitraje en la cuestión La Brea y Pariñas                          ENTRE 1915-1918
    [I]                                                                    [I]
258 La libertad de cultos                                              290 Los institutos armados. La creación del servicio de
258 Los adventistas en Puno                                                aviación militar
258 La provisión del obispado de Puno                                  291 La jurisdicción militar
259 Monseñor Emilio Lisson, arzobispo de Lima                          291 El estado de la marina de guerra
259 El reconocimiento de la jurisdicción eclesiástica en los asuntos   291 El premio Gildemeister
    a ella inherentes                                                      [ II ]
    [ II ]
                                                                       292 El ramo de fomento. Aspectos generales
259 El asunto La Brea y Pariñas en el Senado
                                                                       292 Carreteras y ferrocarriles
262 José Pardo ante el problema de La Brea y Pariñas en el
    mensaje de 1918                                                        [ III ]
262 La cuestión de La Brea y Pariñas en la Cámara de Diputados         294 Salud pública
264 La ley N° 3016                                                         [ IV ]
267 ¿Era procedente en 1918 el arbitraje internacional?                294 El desarrollo de Lima. El destino de los fondos creados para el
    [ III ]                                                                Teatro Nacional
269 La ley de hábeas corpus                                            295 El impuesto a los terrenos sin construir
269 La ley de la liquidación de prisiones preventivas                  295 Pedro de Osma, Aurelio Sousa, y Juan Francisco Pazos Varela,
    [ IV ]                                                                 alcaldes de Barranco
270 La colonia del Frontón                                             295 Luis Miró Quesada, alcalde de Lima
    [V]                                                                297 Los tranvías en el jirón de la Unión
270 La prenda agrícola, la hipoteca naval y los almacenes generales        [V]
    [ VI ]                                                             297 El agua y desagüe y el agua potable
270 La supresión de los tratamientos                                   298 El alumbrado público
    [ VII ]                                                            298 La pavimentación
270 La ley sobre trabajo de mujeres y niños y la ley sobre descanso
                                                                       298 La aviación entre 1915 y 1916. Un avión en las maniobras
    obligatorio dominical
                                                                           militares de 1915
271 La ley ampliatoria de la de accidentes de trabajo
271 La ley sobre casas para obreros                                    299 Los pilotos peruanos en El Palomar
271 La ley sobre embargo de sueldos y pensiones y sobre agio y usura
272 La ley seca                                                        ÍNDICE DE CONTENIDO ADICIONAL
272 Las obligaciones sociales de los establecimientos industriales
272 Otras normas sobre trabajo y previsión social                      RECUADROS
274 La ley sobre sociedades anónimas                                   26 La Pro Indigena y la "cuestión del indio"
    [ VIII ]                                                           44 Juan Bielovucic y el biplano Voisin
274 El censo de empleados públicos                                     52 Las jornadas de mayo de 1912
    [ IX ]                                                             68 Los funerales del "Califa"
274 Domingo Olavegoya                                                  102 El manifiesto de 1914
274 Augusto E. Pérez Araníbar                                          136 Suluque II, González Prada y la oposición a Benavides
275 Víctor Larco Herrera                                               148 Heraldo de modernidad: electricidad para Cuzco
    [X]                                                                212 El PND: ¿grupo de amigos o partido pluriclasista?
277 Las huelgas de obreros portuarios y ferrocarrileros, de            232 Caña de azúcar y billetes de hacienda
    campesinos en la zona de Huacho, de trabajadores del               236 Tangüis: innovación en la adversidad
    petróleo y de obreros de Smelter en 1916                           252 El problema de las subsistencias
278 La huelga de empleados de la Biblioteca Nacional y la huelga
    de telegrafistas
280 La huelga de motoristas y conductores de 1917 y el arbitraje
                                                                       LÍNEAS DE TIEMPO
                                                                       186 Mandatarios del Perú (1904-1930)
280 La huelga petrolífera de 1917
280 La ley sobre extranjeros indeseables                               268 El paro general de 1919
    [ XI ]
280 La organización sindical y la lucha por la jornada de ocho horas   INFOGRAFÍAS
281 El paro general de enero de 1919                                   40 Los pioneros de la aviación en el Perú
281 La jornada de ocho horas                                           78 La creación de Madre de Dios
283 La agitación sindicalista                                          276 Las donaciones benéficas
    [ XII ]
283 Rumi Maqui                                                         PERSONAJES
284 La reglamentación de los trabajos de los indígenas. El             170 José Pardo y Barreda
    proyecto de Capelo sobre tierras                                   206 José Carlos Mariátegui
286 El informe Maguiña sobre Urcón                                     260 Víctor Larco Herrera
286 La granja modelo de Puno
    [ XIII ]
287 Adolfo Rondón y Luis Igreda
                                                                                                                        [ INDICE ] TOMO 13   9
[ tomo 13 ]
capítulo 30 ● I El Código de Proce             Pardo en agosto de 1908 ●  El debate          Senado. La nulidad del reglamento de
dimientos Civiles y las leyes anexas II
                                            ●      parlamentario de 1908. “Bella tarde la de   locación de servicios para la minería ● El
La organización de los colegios de abo      hoy, señores...” ● La ley de accidentes de   indígena Lorenzo Zacarías y su monu
gados ● III La ley de consolidación de        trabajo en el Senado ●  La ley N° 1378 ●      mento ●  La prohibición de la interven
enfiteusis ●  La ley sobre adquisición de   El paro general de abril de 1911 ● El Sin     ción de las autoridades políticas en la
tierras de montaña ●  Los bienes o ren        dicato Textil de Vitarte ● Las huelgas de   contratación del servicio de peones
tas afectas al pago de dotes y otras res       1912. La huelga de 1912 en Chicama. El         para trabajos públicos o particulares ● 
ponsabilidades del patronato nacional    informe Osma ● VI La Asistencia Pública    “El contrato de enganche” ●  Los horro
●  IV El VII Concilio Provincial Limense y   ● VII Los accidentes de los bomberos ●       res de Samán ● La catástrofe de Goylla
el obispado de Cajamarca ● V El debate      VIII Los escándalos del Putumayo ●  Sir     risquizga ● El decreto sobre explotación
en 1905 sobre el proyecto de ley relati      Roger Casement: ¿traidor o héroe na         de minas ●  X La muerte del bandolero
vo a accidentes del trabajo ● El proyecto   cional? ●  IX La Asociación Pro Indígena    Luis Pardo ● Luis Pardo en el cancionero
en 1907 y las gestiones del presidente        ●  La la
                                                           bor pro indígena de Capelo en el     criollo ● XI El Parque Zoológico.
ASPECTOS JURÍDICOS, ECLESIÁSTICOS Y SOCIALES
   EN LA PRIMERA ADMINISTRACIÓN DE LEGUÍA
  CAPÍTULO
            30
           [ ]
E
                                   [I]
                                   L CÓDIGO DE PROCEDIMENTOS CIVILES Y LAS LEYES ANEXAS.- La ley N° 1510 de 15
                                   de diciembre de 1911 aprobó los proyectos de Ley Orgánica del Poder Judicial, Ley de Notariado
                                   y Código de Procedimientos Civiles formulados por el Comité de Reformas Procesal y declaró
                                   que sus miembros habían comprometido la gratitud nacional.
                                       El Código de Procedimientos Civiles se inspiró principalmente en la ley española de 1881.
                                   Derogó algunos artículos del Código Civil (sobre declaración de ausencia, restitución por entero
                                   y venta de objetos pignorados). Además, modificó el Código de Comercio en lo relativo a la pren-
                                   da mercantil y a la cuenta corriente. Pero, sobre todo, reemplazó al Código de Enjuiciamiento en
                                   lo civil expedido en 1852. Caracterizáronle la claridad y la precisión de su lenguaje y la brevedad
                                   de su contenido. En el dictamen aprobatorio de la Cámara de Diputados existe una frase digna
                                   de recuerdo que viene a ser un gran homenaje: es la que afirma que nadie de buena fe podría
                                   dar gramatical y lógicamente una interpretación distinta del texto nítido de sus artículos. Sin
                                   embargo, en su aplicación práctica, no ha impedido las maniobras dilatorias de la justicia, los
                                   trámites excesivos, los ardides de tinterillos y escribanos.
                                       Como se ha dicho anteriormente, el Código y sus leyes conexas provinieron de una comisión
                                   de juristas reunida espontáneamente en 1904 para preparar la reforma procesal. Ni el Poder Eje-
                                   cutivo ni el Parlamento ni las universidades ni el Colegio de Abogados participaron en esta obra.
                                   Llegados los proyectos a la Cámara de Diputados, fueron aceptados sustancialmente por la
                                   Comisión de Legislación, con solo ligeras enmiendas. Hizo el dictamen de esta Comisión (presi-
                                   dida por Mariano Nicolás Valcárcel) un minucioso estudio del asunto y fue el documento discu-
                                   tido y aprobado en el salón de sesiones. Así se evitó el examen moroso de artículo por artículo.
                                   Cuando el proyecto pasó al Senado, el procedimiento fue idéntico. El dictamen de la Comisión
                                   constituyó también la materia del corto debate que surgió y que se redujo a unos cuantos minu-
                                   tos. El Senado introdujo apenas tres modificaciones de redacción, otra sobre la fecha en que
                                   debía empezar la vigencia del nuevo Código y la última para declarar embargable el sueldo de
                                   los militares en la tercera parte por razón de alimentos.
                                       Cuando se discutió el proyecto de Presupuesto de 1958 en la Cámara de Diputados, el minis-
                                   tro de Educación de entonces se refirió a la necesidad de que las leyes de carácter técnico fuesen
                                   elaborados por organismos también técnicos. Refutó esta teoría Mario Alzamora Valdez, diputa-
                                   do por Cajamarca, a cuya insistencia se había debido antes el rechazo de un proyecto del mismo
                                   ministro para crear una comisión especial que debía preparar el proyecto de una nueva Ley
                                   Orgánica de Educación. Una vez más alegó el elocuente diputado por Cajamarca acerca de la
                                   necesidad del origen puramente parlamentario de todas las leyes, a pesar de lo cual, cuando
                                   gobernó poco después el país una Junta Militar, aceptó integrar comisiones para preparar decre-
                                   tos-leyes sobre asuntos tan vitales como la organización local y otros. Se refirió, para sustentar su
                                   tesis, al Código de Procedimientos Civiles y mencionó un discurso de Joaquín Capelo en el Sena-
                                   do a propósito de este documento. Joaquín Capelo que no fue jurista sino ingeniero, tuvo una
                                   intervención que ocupa catorce líneas en el Diario de Debates correspondientes a la sesión del
                                   6 de octubre de 1911 para aludir apenas a la embargabilidad de los sueldos.
12   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 30 ]
    El caso del Código de Procedimientos Civiles, de la Ley Orgánica del Poder Judicial y de la Ley               EL CÓDIGO DE
de Notariado que entraron simultáneamente en vigencia, señala, pues en realidad (como los de                      PROCEDIMIENTOS
                                                                                                                  CIVILES
los Códigos Penal de 1924 y Civil de 1936 y como las leyes orgánicas de educación), un saludable
método de trabajo legislativo. El Parlamento, organismo político por antonomasia, tiene aptitud
indiscutible para ocuparse en detalle de las grandes cuestiones políticas así como de vitales
asuntos de carácter hacendario, internacional y otros de análogo significado. La formulación de
proyectos de códigos y leyes orgánicas en materias técnicas y su debate, artículo por artículo,
debe corresponder, en cambio, a organismos y personas de carácter especializado.
[ II ]
LA ORGANIZACIÓN DE LOS COLEGIOS DE ABOGADOS.- La ley N° 1367 de 20 de diciem-
bre de 1910 declaró instituciones oficiales al Colegio de Abogados de Lima y a todos los que se
establecieran en la República.
    Esta ley tuvo su génesis en un proyecto presentado por el diputado Eduardo I. Bueno en
octubre de 1899. Sobre él recayeron la opinión de la junta del Colegio de Abogados, la vista de
los fiscales de la Corte Superior que reprodujeron, con modificaciones, esa opinión y, finalmen-            Preparado por una
te, un informe de la Corte Suprema favorable al proyecto presentado por el fiscal Juan José                 comisión de juristas en
Calle. El Poder Ejecutivo emitió luego su parecer el 14 de agosto de 1909. El dictamen de la                1904, este conjunto de
Comisión de Legislación de la Cámara de Diputados fechado el 7 de octubre de 1900 fue sin-                  normas empezó a regir
gularmente valioso.                                                                                         oficialmente desde el 28
    El carácter oficial otorgado al Colegio, que hasta entonces carecía de él a pesar de su antigüe-        de julio de 1912.
dad mayor de cien años, implicó el propósito de hacer más efectivos sus fines primordiales. Ellos           El Código de
tenían relación con la enseñanza de la práctica forense, la vigilancia de la moral profesional a            Procedimientos Civiles
través de medidas disciplinarias para quienes la transgredieran, la defensa de la Orden, la divul-          agrupaba a la Ley
gación de la ciencia jurídica y el empleo de la jurisdicción arbitral o de la función consultiva en         Orgánica del Poder
los casos que le fueran encomendados. El ejercicio de la abogacía quedó unido a la inscripción              Judicial, la Ley de
en el Colegio del distrito judicial respectivo.                                                             Notarios y leyes sobre
                                                                                                            reformas procesales.
                                                                                                            El documento modificó
[ III ]                                                                                                     además el Código de
LA LEY DE CONSOLIDACIÓN DE ENFITEUSIS.- La enfiteusis consistía en el derecho de reci-                      Comercio vigente y
bir o exigir el pago de un canon por la cesión que se había hecho del aprovechamiento de un                 ordenó las funciones
inmueble. El propietario cedía a otra persona el aprovechamiento, llamado dominio útil, a cam-              legislativas.
bio de un pago periódico (canon) que se le debía en reconocimiento del señorío o dominio
directo que conservaba. En su origen fue una cesión a perpetuidad y después se pactó a largo
plazo, o sea cincuenta, cien o ciento cincuenta años. A lo largo del siglo XIX y en los primeros
años del siglo XX resultó la enfiteusis una institución anacrónica, un fósil jurídico que no corres-
pondía a la organización moderna de la propiedad, si bien había sido útil cuando ella se concen-
tró en pocas manos y cuando los dueños no podían atender a la explotación de sus tierras.
     El desdoblamiento del dominio producía no solo conflictos legales sino también entorpeci-
mientos y perjuicios en el régimen de los bienes inmuebles urbanos y rústicos con los consi-
guientes trastornos económicos.
     En agosto de 1896 el senador Juan E. Lamas presentó en su Cámara un proyecto para prohi-
bir la celebración del contrato de enfiteusis y señalar los medios para la consolidación del domi-
nio. Quedó pendiente esta iniciativa durante algunos años. Cuando tuvo lugar la apertura de la
avenida de la Colmena, pudo comprobarse que la mayor parte de los terrenos afectados por ella,
pertenecían a la Beneficencia que conservaba el dominio directo mientras el dominio útil perte-
necía a distintas personas. Las dificultades para la expropiación fueron grandes. No se pudo
                                                                                                       [ CAPÍTULO 30 ] PERÍODO 6   13
                                       consolidar el dominio. Los interesados pedían cuantiosas sumas para vender su derecho. Surgió
                                       así palpable la necesidad de una ley como la que propiciara Juan E. Lama.
                                            La ley N° 1447 de 7 de noviembre de 1911 prohibió la creación de derechos enfitéuticos y
               (...)EN                 señaló las normas para la consolidación de ellos con lo cual puso fin al desdoblamiento del dere-
COMPENSACIÓN DE                        cho de propiedad, en beneficio del dueño del dominio útil, es decir del que trabajaba. También
                                       fijó las pautas para el procedimiento a seguir en estos casos.
 LA CONSTRUCCIÓN                            Tuvo una gran importancia histórica. Contribuyó al empobrecimiento de la Iglesia en el Perú.
DE UNA CARRETERA                            En años recientes ha renacido la enfiteusis en algunos países, sobre todo en relación con el
                                       aprovechamiento o explotación de tierras del Estado o de instituciones públicas. La ley sobre
  POR LA RUTA DEL                      tierras de montaña que se menciona en seguida, al establecer entre las distintas formas de
     PROYECTO DEL                      adquisición de ellas el denuncio con la obligación de abonar al Estado una contribución semes-
   fERROCARRIL DE                      tral, ha establecido una figura jurídica semejante a la de la enfiteusis que bien podría ser aplicada
                                       en otros casos.
  TAMbO DEL SOL A
      PUCALLPA, EL
          GObIERNO                     LA LEY SOBRE ADQUISICIÓN DE TIERRAS DE MONTAÑA.- Las tierras de montaña son
                                       del Estado, pero está permitido que puedan ser adquiridas por particulares. La ley N° 1220 de 31
      PERUANO, EN                      de diciembre de 1909 señaló entre otras formas de esa adquisición: la venta, indicando sus con-
     DICIEMbRE DE                      diciones y sus límites; el denuncio, la adjudicación gratuita, con obligación de cultivo de una
                                       parte, la concesión para obras públicas y colonización o en compensación de la construcción de
  1953, CELEbRÓ UN                     vías férreas y caminos.
    CONTRATO CON                           En nombre de la ley N° 1220, y en compensación de la construcción de una carretera por la
          RObERT LE                    ruta del proyecto del ferrocarril de Tambo del Sol a Pucallpa, el Gobierno peruano, en diciembre
                                       de 1953, celebró un contrato con Robert Le Tourneau por el que le adjudicó la propiedad de 400
    TOURNEAU POR                       mil hectáreas de terrenos de montaña que debían ser colonizados y parcelados, para dar prefe-
           EL qUE LE                   rencia en los repartos a colonos nacionales.
                                           Al amparo de esta misma ley, que permite ventas de tierras de selva hasta de mil hectáreas
       ADJUDICÓ LA                     para cultivos y de 30 mil hectáreas de gomales, se han formado grandes latifundios, la mayoría
         PROPIEDAD                     de los cuales no es explotada en toda su amplitud. Los terrenos son adjudicados al precio de un
         DE 400 MIL                    sol la hectárea; y si, al cabo de diez años, no fueran trabajados, se establece la obligación del
                                       pago de un centavo anual por cada hectárea cultivada. La ley ha servido de estímulo para que
     hECTÁREAS DE                      hayan proliferado las grandes propiedades con desmedro de las medianas y pequeñas.
      TERRENOS DE
     MONTAñA qUE                       LOS BIENES O RENTAS AFECTAS AL PAGO DE DOTES Y OTRAS RESPONSABILIDADES
        DEbÍAN SER                     DEL PATRONATO NACIONAL.- El decreto de 1° de octubre de 1838 adjudicó a la Beneficen-
    COLONIzADOS Y                      cia de Lima los capitales pertenecientes a patronatos, obras y buenas memorias. Esta situación
                                       existió durante más de setenta años.
PARCELADOS, PARA                           La ley N° 1227 de 21 de enero de 1910 dispuso que el servicio de dotes y otras responsabili-
 DAR PREfERENCIA                       dades del Patronato Nacional fuera desempeñado por la Dirección del Crédito Público del Minis-
EN LOS REPARTOS A                      terio de Hacienda.
                                           Invocó el Gobierno la ley N° 1227 para expedir la resolución de 15 de febrero de 1910 por la
           COLONOS                     que se declaró derogado el decreto de 1° de octubre de 1833 y se puso término a las adminis-
       NACIONALES.                     traciones por las Sociedades de Beneficencia, de los bienes o rentas afectas al pago de dotes y
                                       otras responsabilidades del Patronato Nacional.
                                           Con motivo del planteamiento hecho por la Sociedad de Beneficencia de Lima para sostener
                                       que el decreto de 1° de octubre de 1838 tenía carácter irrevocable, se expidieron las resoluciones
                                       de 22 de marzo y 12 de abril de 1910 que ratificaron la doctrina legal en materia de ejercicio del
                                       derecho de Patronato correspondiente al Gobierno con carácter exclusivo.
    14   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 30 ]
[1]   LA HUELGA TEXTIL.
      En abril de 1911, los
      obreros de la fábrica
      de tejidos de Vitarte
      (2) iniciaron una
      manifestación con el
      propósito de obtener
      mejoras laborales.
      Exigían, entre otras
      cosas, la disminución
      de las horas de
      trabajo y el aumento
      de los salarios. A esta
      huelga se plegaron
      diversos gremios
      obreros de la capital.
      En esta imagen (1)
      vemos a un grupo de
      obreros textiles
      llegando a Lima
      durante la protesta.
[2]
      [ CAPÍTULO 30 ] PERÍODO 6   15
    RAFAEL GRAU                            La Beneficencia pretendió basar su alegato en la ley de 24 de agosto de 1838 que sancionó,
    CABERO (1876-1917)                 en general, los actos administrativos del general Gamarra, uno de los cuales fue el citado decre-
                                       to de 1° de octubre; y también en la ley de 2 de octubre de 1893. El Gobierno sostuvo el carácter
                                       político de la primera en relación con la actuación de un Gobierno de facto; y en cuanto a la
                                       segunda afirmó que no había reconocido a la Beneficencia un derecho de propiedad sobre los
                                       bienes recibidos en administración, sino simplemente sobre aquellos que le eran propios, es
                                       decir sobre los muebles, inmuebles, derechos, acciones, rentas temporales y perpetuas adquiri-
                                       dos por causa de donaciones, herencias u otro título.
                                       [ IV ]
                                       EL VII CONCILIO PROVINCIAL LIMENSE Y EL OBISPADO DE CAJAMARCA.- En 1912
                                       tuvo lugar la celebración del VII Concilio Provincial Limense, presidido por el arzobispo García
                                       Naranjo. Desde el VI, patrocinado por Carlos III y supervigilado por el virrey Manuel de Amat, no
                                       se habían reunido los obispos en concilio provincial. He aquí una muestra de cómo, por encima
     Este abogado limeño;              de sus discontinuidades, la Iglesia católica tiene una esencial solidez.
          hijo del héroe de                Por iniciativa del ministro Rafael Villanueva se creó el obispado de Cajamarca. El primer obis-
  Angamos, se inició en la             po fue el cura de Santa Catalina Presbítero Grozzo.
     política en el Partido
   Unión Cívica, gracias al
           cual fue elegido            [V]
           diputado, por la            EL DEBATE EN 1905 SOBRE EL PROYECTO DE LEY RELATIVO A ACCIDENTES DEL
               provincia de            TRABAJO.- De los proyectos de ley preparados por José Matías Manzanilla, el de accidentes
      Cotabambas en 1905               de trabajo comenzó a ser debatido aisladamente el 18 de noviembre de 1905. Lo fundamentó
        Grau ejerció dicha             con brillo su autor. Entre los oradores que tomaron entonces la palabra se destacaron Mariano
  diputación a lo largo de             Ignacio Prado y Ugar teche y Rafael Grau. En principio favorable al riesgo profesional, el prime-
    doce años. En 1914 fue             ro insinuó la posibilidad de que las nuevas leyes comprometiesen las reser vas industriales del
    designado ministro de              país y destruyeran las fuentes de la producción y del trabajo. El segundo orador calificó al
Justicia y al año siguiente            proyecto de exagerado, dijo que mezclaba en forma contradictoria e inconveniente la ley fran-
   fue elegido alcalde del             cesa y la española y se declaró par tidario de que fueran adoptados los principios de esta últi-
 puerto del Callao. Murió              ma. También se opusieron Manuel Bernardino Pérez y Mariano Nicolás Valcárcel. Entre los
         asesinado en 1917,            oradores que se pronunciaron a favor del proyecto estuvo Ramón Espinoza. Manzanilla refutó
             presuntamente             minuciosamente a sus adversarios. El 30 de noviembre de 1905, por moción de Prado, a base
por adversarios políticos.             de una anterior de Pérez, el proyecto fue aplazado. Se le remitió a las Comisiones de Industrias
                                       y de Legislación.
    16   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 30 ]
    El 1° de agosto de 1908 el presidente Pardo reunió en su despacho al personal de ambas en                       EL MINISTRO
la dación de la ley y anunció el envío de un nuevo proyecto que recogía algunas de las observa-                     DE FOMENTO
ciones emitidas en el curso de la discusión, pero mantenía el principio del riesgo profesional.
                                                                                                         [ CAPÍTULO 30 ] PERÍODO 6   17
                 [1]
[2]
                       LA PARALIZACIÓN DEL TRANVÍA. Una de las huelgas más sonadas del año 1912 fue la protagonizada por
                       los motoristas y conductores del tranvía eléctrico en la capital. Entre sus peticiones, se encontraban la
                       estabilidad laboral y el aumento de salarios. En estas fotografías de la época podemos apreciar a los
                       huelguistas en la estación del tranvía, impidiendo su salida (1). Tras una breve negociación, que
                       incluyó al presidente Billinghurst como mediador, los trabajadores llegaron a un acuerdo. La noticia
                       fue celebrada por muchos huelguistas congregados en el Parque de la Exposición (2).
18   PERÍODO 6    [ CAPÍTULO 30 ]
     Cuando la discusión sobre los principios generales parecía terminada, se produjo la interven-                      MANUEL
ción de Manuel B. Pérez, mucho más conservadora que la de Prado. Pérez presentó algunos                                 BERNARDINO
                                                                                                                        PÉREZ (1856-1922)
datos, que pueden ser interesantes desde el punto de vista histórico, sobre el estado de las
industrias en el país para refutar en este asunto, y en muchos otros, a Manzanilla. Tocó entonces
hacer una amplísima defensa del principio del riesgo profesional y de sus aplicaciones a Luis Miró
Quesada. Fue este diputado, sin duda, junto con Manzanilla, el más enérgico y tenaz vocero de
las ideas que provocaban el debate. No debe ser omitido tampoco el nombre del diputado obre-
ro Carlos Lora y Quiñones que hizo algunas revelaciones importantes acerca de la situación de
los trabajadores en el Perú.
     La discusión continuó sobre cada artículo, hasta el 5 de setiembre. Hubo importantes cam-
bios de ideas sobre asuntos tales como la frase “ocasión directa” que acababa de mencionarse,
la definición del accidente de trabajo, la cuestión de la pequeña minería, la de la industria de
construcciones y las fábricas, la indemnización por la incapacidad parcial y temporal, la culpa
inexcusable, el embargo y la cesión de indemnizaciones, los procedimientos judiciales, la decla-
ración del accidente, los accidentes marítimos, la preferencia para el pago de las indemnizacio-
nes, los seguros.
     Al día siguiente de haber sido aprobado el proyecto íntegramente, el 6 de setiembre de 1908,                 En agosto de 1908, este
se realizó una gran fiesta obrera para celebrar el triunfo, con un homenaje a José Matías Manza-                  abogado lambayecano,
nilla y a Luis Miró Quesada. Hablaron allí además de estos parlamentarios, Manuel Bachman,                        entonces diputado por la
Rosendo Vidaurre, Juan Goachet, Alfredo J. Pimentel, Manuel A. Juárez, Rosendo Sánchez, Carlos                    provincia de Pomabamba,
Lora y Quiñones, José V. Cahuas y Francisco Berdejo.                                                              participó del debate
                                                                                                                  parlamentario por la ley
                                                                                                                  sobre accidentes de
LA LEY DE ACCIDENTES DE TRABAJO EN EL SENADO.- El Senado comenzó a discutir este                                  trabajo, con una posición
asunto el 5 de agosto de 1910. Diómedes Arias pronunció un discurso favorable a él, pero adver-                   bastante conservadora
so a las limitaciones establecidas en la segunda parte del artículo 1°. Joaquín Capelo se refirió al              sobre el tema de los
hecho de que en el Perú, suprimida la esclavitud, existía la servidumbre de las clases desvalidas                 derechos de los
y llamó a la ley con la adición antedicha “ley de mentira que no le da nada al obrero, que no le                  trabajadores durante la
garantiza nada”. A favor del artículo aprobado en su integridad estuvieron, en cambio, entre otros                jornada laboral. Pérez fue
oradores, Amador del Solar y Matías León. Por tres veces se repitió la votación sin alcanzar el                   miembro del Partido Civil
número suficiente de sufragios. Al fin, el 2 de setiembre, triunfó la tesis avanzada de Arias y Cape-             y ocupó en repetidas
lo y se rechazó la segunda parte del artículo primero por 21 votos contra 16.                                     ocasiones el cargo de
     La Cámara de Senadores suprimió, adicionó y modificó otros artículos, en algunos casos por                   diputado: por su tierra
cuestiones de forma y en otros fundándose en principios de justicia y equidad.                                    natal (1886-1894), por
                                                                                                                  Jaén (1895-1902), por
                                                                                                                  Pomabamba (1903-1910)
LA LEY N˚ 1378.- La Comisión de Industrias de la Cámara de Diputados, integrada por Ramón                         y por Cajamarquilla
Aspíllaga, Mario Sosa, Mariano Ignacio Prado y Ugarteche, L. B. Castañeda y Carlos Lora y Quiño-                  (1916-1918).
nes, en dictamen de 28 de setiembre de 1910, optó por la insistencia. Igual fue la conclusión de
la Comisión Auxiliar de Legislación de la que formaban parte Plácido Jiménez, José Matías Man-
zanilla, Arturo Rubio, F. E. Villacorta y L. A. Carrillo. “Todas las leyes (afirmaron estos diputados, sin
duda inspirados por Manzanilla) constituyen verdaderos experimentos; y es la realidad social la
que suministra los datos para corregir con eficacia la obra del legislador. El carácter experimental,
fondo inadvertido de toda legislación, domina necesariamente las leyes sobre el trabajo”. Al mis-
mo tiempo, expresaron la certidumbre “de alcanzar en el porvenir las ampliaciones y los perfec-
cionamientos, fruto inevitable y deseable de la experiencia”.
    La Cámara de Diputados aprobó sin debate ambos dictámenes en la sesión del 18 de octu-
bre de 1910. Se inhibió así de recurrir al Congreso pleno para solucionar el disentimiento que se
había producido.
                                                                                                             [ CAPÍTULO 30 ] PERÍODO 6   19
                                          La ley, compuesta de 82 artículos fue expedida por los presidentes de ambas ramas del Con-
                                      greso, Ántero Aspíllaga y Antonio Miró Quesada, el 31 de diciembre de 1910 y promulgada por el
                                      presidente Leguía y su ministro Julio Ego-Aguirre el 20 de enero de 1911 con el N° 1378. Fue la
LOS OPERARIOS DE                      primera en un país americano, si se exceptúa el Canadá. Precedió cronológicamente a la que sobre
    LA fÁbRICA DE                     la misma materia se dieron en la Argentina y Colombia en 1915, en Chile en 1916 y 1924, Cuba y
                                      Panamá en 1916, Uruguay en 1920, Costa Rica y Paraguay en 1927, Venezuela y Ecuador en 1928.
        TEJIDOS DE                        Hasta entonces los accidentes del trabajo no eran indemnizados, ya que, en lo concerniente
        VITARTE SE                    a ellos, regían los dispositivos del Código Civil de 1852. De acuerdo con estos preceptos quien
                                      por sus hechos, descuido o imprudencia causaba perjuicio a otro, estaba obligado a repararlo,
  DECLARARON EN                       pero la culpa no se presumía sino que debía ser probada. El artículo 1° de la ley N° 1378 quedó
         hUELGA A                     con el siguiente texto: “El empresario es responsable por los accidentes que ocurran a sus obre-
    PRINCIPIOS DE                     ros y empleados en el hecho del trabajo o con ocasión directa de él”.
                                          Entre las cuestiones judiciales que surgieron de la ley N° 1378 ostenta interés singular la que
     AbRIL DE 1911.                   planteó la Peruvian Corporation cuando quiso eludirla dentro del concepto de que tenía su con-
  SOLICITAbAN LA                      cesión desde una época en que los patronos estaban libres de soportar el gravamen de resarcir
                                      por los accidentes del trabajo. La Peruvian Corporation perdió este juicio ante los tribunales
 DISMINUCIÓN DE                       peruanos y cumplió la ley.
     LAS hORAS DE                         Aníbal Gálvez denunció en la Cámara de Diputados en la legislatura de 1915 que, expedida
           LAbOR Y                    dicha ley, las empresas de Cerro de Pasco y de Yauli crearon una contribución extraordinaria lla-
                                      mada el derecho de hospitalidad por el cual se hacía un descuento mensual o quincenal a los
    AUMENTOS DE                       obreros, se creaba un fondo y cuando había una víctima de los accidentes del trabajo, se daba
        JORNAL. EN                    de allí una pequeña indemnización a la viuda. En la sesión del 16 de setiembre de 1916 insistió
  AqUELLA éPOCA                       en su denuncia. Esta anomalía fue luego reparada.
 SE TRAbAJAbA EN
   VITARTE, MÁS O                     EL PARO GENERAL DE ABRIL DE 1911.- Los operarios de la fábrica de tejidos de Vitarte se
                                      declararon en huelga a principios de abril de 1911. Solicitaban la disminución de las horas de
  MENOS, DE SIETE                     labor y aumentos de jornal. En aquella época se trabajaba en Vitarte, más o menos, de siete de
 DE LA MAñANA A                       la mañana a nueve de la noche, con una hora de descanso para el almuerzo y otra para la comi-
      NUEVE DE LA                     da. Los obreros de Lima acordaron, como muestra de solidaridad, el paro general para el 10 de
                                      abril. Era la primera vez que se utilizaba esta arma por la clase proletaria. Tomaron parte en el paro
 NOChE, CON UNA                       casi todos los obreros de la capital, con excepción de los motoristas y conductores de los tran-
          hORA DE                     vías, a pesar de que ellos habían recibido el apoyo de sus compañeros en anterior oportunidad.
                                      Los huelguistas se reunieron desde las primeras horas de la mañana en las plazas Italia, Bolog-
  DESCANSO PARA                       nesi y Dos de Mayo, donde escucharon fogosos discursos, para distribuirse después en numero-
     EL ALMUERzO                      sos grupos por las calles con el fin de efectuar manifestaciones y practicar actos hostiles contra
      Y OTRA PARA                     los operarios de los servicios eléctricos, lo cual dio lugar a que interviniera la gendarmería sable
                                      en mano. La huelga se solucionó al día siguiente, ya que la empresa de Viajarte accedió a las
       LA COMIDA.                     demandas interpuestas. En esta fábrica habían trabajado, bajo la dirección del subgerente Lino
                                      Conroy, unos 130 obreros, traídos de Lima en su mayor parte.
   20   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 30 ]
    Ahora Vitarte alberga una población de 15 mil habitantes siempre vinculados a la industria
textil; el Sindicato cuenta con un magnífico local donado por la fábrica y la armonía predomina
en las relaciones entre patronos y obreros.                                                                 [ 1912 febrero 26 ]
                                                                                                              INAUGURACIÓN DE LA
LAS HUELGAS DE 1912.- Entre las huelgas de 1912 en Lima tuvo importancia especial la de                       ASISTENCIA PUBLICA. En
setiembre proclamada por los motoristas y conductores del tranvía eléctrico. Hicieron entonces                la edición del 26 de
diversos reclamos por el trato que les daba la empresa y pidieron aumento de jornales y estabi-               febrero de 1912,
lidad en los cargos. Duró este conflicto dos semanas. El presidente electo Guillermo Billinghurst             El Comercio anunció la
actuó directamente y contribuyó a darle un tranquilo arreglo. En los primeros días de octubre se              inauguración de este
produjo el paro de los tejedores que tuvo poca duración. El movimiento obrero de aquel año                    beneficio social de la
apareció, por lo demás, caracterizado por una intensa preocupación política.                                  siguiente manera: “Se ha
                                                                                                              satisfecho ayer, con el
                                                                                                              establecimiento de la
LA HUELGA DE 1912 EN CHICAMA. EL INFORME OSMA.- En abril de 1912 se produjo una                               asistencia pública en
huelga en el valle de Chicama con motivo de haber llegado a la hacienda Casa Grande algunos                   Lima, una generalidad
empleados de nacionalidad alemana a quienes trajo consigo el nuevo administrador de la nego-                  sentida y con urgencia
ciación, señor A. París, para que se hicieran cargo de determinados servicios. Algunas personas               reclamada en múltiples
residentes allí cuyos intereses, surgidos a la sombra de la bondadosa administración del señor                ocasiones por los
Alfredo Gildemeister, resultaron mellados por las medidas de orden y economía puestas en prác-                órganos de publicidad,
tica por la nueva dirección del negocio, soliviantaron a la masa obrera, a base de un sentimiento             que abogaban por la
antialemán. La huelga estalló violentamente en Casa Grande y se extendió a las haciendas Car-                 instalación de un
tavio y Chiquitoy. Las turbas en rebelión, enfurecidas por el alcohol que sacaron de los depósitos            servicio cuya
de los alambiques, cometieron muchos excesos, incluso el saqueo y el incendio de algunas casas                importancia indiscutible
y la destrucción de varios campos de caña. Hubo encuentros sangrientos entre los huelguistas y                nos releva de todo
la fuerza pública con 500 obreros muertos.                                                                    género de apreciaciones.
     El fin principal de la huelga (según el informe que redactó Felipe de Osma, comisionado del              En el principal cómodo y
Gobierno para estudiar el conflicto) fue imponer cambios de personal en la administración de                  espacioso de la finca
Casa Grande. La exigencia para que se elevasen los salarios y se redujesen las tareas apareció                Nº0 18 de la calle de León
como un medio de producir la conflagración general en los valles de Chicama y Santa Catalina.                 de Andrade, quedó
La masa fue empujada al desorden por los intereses de los contratistas que, previendo el término              inaugurada en la tarde
de su negocio, quisieron audazmente expulsar de Casa Grande a quien había demostrado el                       de ayer la casa central
propósito de no renovar las contratas a plazo vencido y también por los intereses de los emplea-              de asistencia pública y
dos despedidos que quisieron vengarse de quien los había separado a causa de mejor servicio                   con ella los dispensarios
o de probada incompetencia.                                                                                   de profilaxia
     El informe Osma es un documento importante para conocer la condición del trabajo agríco-                 antivenéreas de hombres
la en los valles del norte en esta época y tiene franqueza y comprensión ante la tragedia campe-              y mujeres, enfermedades
sina, a pesar del rango social del autor.                                                                     de niños y lucha contra
                                                                                                              la tuberculosis pulmonar
                                                                                                              y el alcoholismo”.
[ VI ]
LA ASISTENCIA PÚBLICA.- El 25 de febrero de 1912 se inauguró en Lima, estando presente
el presidente Leguía, la Asistencia Pública. El servicio fue instalado con seis puestos de socorro,
correspondientes a los seis cuarteles en que estaba dividida la capital. La oficina central tuvo su
sede en la calle de León de Andrade. Allí hubo un consultorio general, una sala de cirugía, una
sala para niños y el servicio de camillas con el fin de acudir a las llamadas en casos de accidentes.
Los automóviles para el transporte de los accidentados no habían llegado todavía
Además de tener la finalidad de suministrar inmediato socorro de quienes necesitaran auxilio, la
Asistencia Pública surgió para ayudar a la educación higiénica de las madres en el consultorio
                                                                                                        [ CAPÍTULO 30 ] PERÍODO 6   21
 ENERO
   1913
 [ perú ]   16
  LA bENEfICENCIA DE
                                     gratuito destinado a los menores de edad y también para efectuar la propaganda en pro de la
                                     profilaxia de las enfermedades venéreas. Le correspondió, asimismo, el control técnico de la pros-
                                     titución.
                                         Iniciador del servicio de la asistencia pública fue el director de Salubridad Lauro A. Curletti. Lo
                                     tuvo primero a su cargo Enrique León García.
  22   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 30 ]
[1]   	 Los problemas del
        Putumayo. Desde
        1899, el comerciante
        Julio C. Arana se
        dedicaba a la
        explotación del
        caucho en las orillas
        del río Putumayo.
        Para la recolección
        del material, empleaba
        la barcaza Preciada,
        que vemos en esta
        fotografía (1). En 1904,
        Arana trajo a la región
        a trabajadores negros
        procedentes de la
        colonia británica de
        Barbados, para que se
        dedicaran a esta
        faena. Aquí vemos a
        algunos de estos
        trabajadores, en una
        postal titulada “La
        Fiesta en Punchana.
        Iquitos” (2).
[2]
       [ capítulo 30 ] período 6   23
   JULIO C. ARANA                         Al ensanchar sus operaciones, Arana consignó caucho en Europa, especialmente en Londres.
   (1864-1954)                            En 1907 formó la compañía Peruvian Amazon Co., nominalmente inglesa.
                                          En el Perú hubo quejas esporádicas sobre la situación en la zona cauchera en general y en la
                                      del Putumayo en especial desde 1903. Algunas de ellas provinieron de misioneros católicos. Otra
                                      estuvo consignada en un informe del ingeniero Jorge von Hassel en febrero de 1905. El Comercio
                                      de Lima acogió en febrero de 1906 denuncias sobre abusos en el Madre de Dios. C. Reginald
                                      Enock se hizo eco de análoga protesta en la región nororiental en su libro The Andes and the
                                      Amazon (Londres, 1907). Pero las atrocidades de la Peruvian Amazon aparecieron con una publi-
                                      cidad escandalosa en 1907 y en 1908 merced a la campaña de La Felpa y La Sanción de Iquitos
                                      por obra principalmente de Benjamín Saldaña Roca. Según declaró Arana ante la comisión inves-
                                      tigadora de la Cámara de los Comunes, empleados despedidos por su compañía y algunos
                                      aventureros suministraron estas noticias después de que él había rechazado comprar su silencio.
                                      Apresados unos cuantos de los presuntos culpables de maltratos a los indios ese mismo año,
                                      fueron puestos en libertad por el prefecto Carlos Zapata, según se dijo, coludido con la casa Ara-
                                      na. Este prefecto y el cónsul del Perú en Manaos Carlos Rey de Castro dieron al Gobierno de Lima
           Establecido en             informes favorables a dichas casa. En febrero o marzo a 1909 el jefe de la mencionada empresa
 Yurimaguas desde 1881,               fue visitado por Thomas W. Whiffen, aristócrata inglés que pretendió obtener libras esterlinas a
   este cauchero riojano              cambio de un informe al Gobierno de Londres favorable a la negociación del Putumayo. El perió-
 extendió la explotación              dico de aquella ciudad Truth inició una escandalosa campaña sobre la esclavitud y las iniquida-
  y comercio del caucho               des en esa región. Allí actuó W. E. Hardenburg, acusado por Arana también por chantage y,
      por la zona del río             además, por falsificación. Hardenburg publicó en 1912 en Londres el libro The Putumayo, the
  Putumayo. En 1902 fue               Devil’s Paradise. Travels in the Peruvian Amazon Region and account of the Atrocities committed upon
       elegido alcalde de             the Indian herein.
         Iquitos, y al año                Desde 1907 ejercía el cargo de cónsul de la Gran Bretaña en Pará, Roger Casement, nacido en
  siguiente expandió sus              Kingstown, Dublín, el 1° de setiembre de 1864. Miembro del servicio consular en África, un infor-
negocios hasta la ciudad              me por él suscrito había alcanzado en 1903 por sus denuncias sensacionales repercusiones al
      de Manaos (Brasil).             enfrentarse al propio rey de los belgas Leopoldo y había provocado un cambio del estado de
 Además, abrió agencias               cosas en el Congo. En junio de 1910, Casement fue encargado de hacer una investigación de la
   de su firma comercial              Anglo Peruvian Amazon y viajó al Putumayo. La prefectura de Loreto le otorgó facilidades.
         en Nueva York y                  De las versiones por él recogidas y de las cosas por él vistas, Casement llegó a la conclusión
 Londres. En 1912, Arana              de que lo indios huitotos, horas, andokes y ocaínas eran esclavos de la compañía. Se habían
        se vio obligado a             cometido con ellos y, en su concepto, seguían cometiéndose asesinatos, flagelaciones y otros
declarar ante la Cámara               atropellos, y se habían generalizado la prostitución, el concubinato y el uso de aparatos de tor-
      de los Comunes, de              tura. En aquellos bosques ilimitados de tierra virgen, disputados por tres Repúblicas, faltaban
  Gran Bretaña, acusado               autoridades policiales, militares, jurídicas o administrativas y habíanse consumado con impuni-
        de explotar a sus             dad absoluta escenas más horribles de las que Casement podía haber sospechado. De 1900 a
            trabajadores.             1911, según su informe, la producción del caucho de Putumayo había alcanzado 4 mil toneladas
                                      de caucho; pero con el costo de 30 mil vidas.
                                          La aventura en el Putumayo le ocasionó a Casement, más que la del Congo, una fuerte depre-
                                      sión nerviosa. Tuvo que afrontar un clima muy difícil y circunstancias asaz desagradable con
                                      despliegue de energía, fuerza física, coraje. El Gobierno británico lo premió con el título de “Sir”
                                      en 1911. Oficialmente comunicó las denuncias al del Perú y le envió una lista negra de los peores
                                      delincuentes. Una comisión investigadora peruana viajó al Putumayo; pero acaso no tuvo la sufi-
                                      ciente entereza y algunos de los más inculpados lograron escapar. La compañía negó algunos
                                      cargos, echó la culpa de otros al personal subalterno, insistió en el carácter individual de las res-
                                      ponsabilidades desvirtuando su alcance institucional o nacional; y ofreció cambiar algunos de
                                      sus procedimientos que habíanse basado en un régimen de porcentaje a los intermediarios.
                                          Un nuevo viaje de Casement al Putumayo tuvo lugar en agosto de 1911. Su informe se publi-
                                      có en julio de 1912. Las labores de la comisión especial que nombró la Cámara de los Comunes
   24   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 30 ]
y la publicación oficial de un Libro Azul en Londres contribuyeron al desprestigio internacional
del Perú. Un informe de Charles Eberhardt, cónsul de Estados Unidos en Iquitos, fue también
desfavorable; si bien en 1907 el mismo funcionario visitara el Putumayo y no tuvo sino palabras
cordiales para la compañía.
    ¿Por qué se desencadenó el escándalo? Según Carlos Rey de Castro, defensor de la casa de
                                                                                                           22
                                                                                                          EL PRESIDENTE
                                                                                                                           fEbRERO
                                                                                                                           1913
                                                                                                                           [ méxIco ]
Arana, coincidieron diversos factores. Colombia, por codicia del territorio disputado, realizó una
intensa y dispendiosa labor de propaganda. Algunos accionistas británicos de la Peruvian Ama-             MExICANO fRANCISCO
zon participaron en la intriga. Intervinieron también las conveniencias políticas del Gabinete de         MADERO MUERE
Londres. Casement fue calificado como hombre neurótico, poseído de un morboso afán de
notoriedad y (según Rey de Castro y Arana) estuvo a sueldo de Colombia. La entidad religiosa              ASESINADO A LOS 39
llamada “Sociedad Anti-Esclavista y de Protección de los Aborígenes” realizó una campaña de               AñOS. MADERO fUE
carácter humanitario; pero, detrás de ella, se escondió (según Rey de Castro) el propósito de ani-        AUTOR INTELECTUAL DE
quilar a toda importante empresa gomera no británica para favorecer así a la producción de la
India. En Saldaña Roca, Hardenbug y otros influyeron (de acuerdo con las mismas fuentes) móvi-
                                                                                                          LA REVOLUCIÓN
les de estafa. Los negros barbadenses hicieron declaraciones ominosas a veces por odio a los              MExICANA DE 1910, CON
blancos y con la esperanza de recompensas. Algunos colombianos empleados de la Peruvian                   LA PUbLICACIÓN DEL
Amazon procedieron de análoga manera por patriotismo. No faltaron tampoco las voces de
                                                                                                          LIbRO LA SUCESIÓN
empleados rebeldes, díscolos o alborotadores. Los indios salvajes se les sumaron por chismes,
amor a la mentira, o rencor contra sus jefes o patrones. La prensa de todo el mundo se apoderó            PRESIDENCIAL. fUNDÓ
del asunto por sensacionalismo.                                                                           EL PARTIDO
    Arana insistió una y otra vez en que no dio órdenes para las tropelías ni ofreció recompensas
                                                                                                          ANTIRREELECCIONISTA,
para ellas y agregó que no podía haber sacrificado a los indios porque hubiese sido contrario a
sus propios intereses.                                                                                    qUE LO LLEVÓ AL
    Es posible que en las denuncias hubiese un determinado porcentaje de exageración, de                  PODER EN 1911.
mala fe o de impureza; pero la aceptación de ello no aminora, en conjunto, las graves respon-             DURANTE SU
sabilidades contraídas ni lava las manchas del Putumayo. El Gobierno del Perú estuvo ante ellas
durante mucho tiempo remiso o impotente. Para explicar esta ineficacia funcionaron múltiples              GObIERNO, SIN
razones. Se trataba de una región remota a donde no llegaba la administración del poder                   EMbARGO, NO PUDO
nacional o existía de modo inepto o corrompido. El país vivía entonces absorbido por graves               LLEVAR A CAbO LAS
preocupaciones internacionales internas. Las oficinas gubernamentales en Lima (sin excluir al
Ministerio de Relaciones Exteriores) tenían simpatía para Arana. La Peruvian Amazon era orga-
                                                                                                          REfORMAS POLÍTICAS
nización poderosa en el territorio disputado; simbolizaba de modo tangible la soberanía nacio-            PLANTEADAS.
nal, había colonizado y explotado la zona como entidad peruana. La tradición de maltratos a               ESTALLARON VARIAS
la raza indígena se había desenvuelto en la vida republicana en forma impune. Arana fue acu-
                                                                                                          REVUELTAS EN EL PAÍS.
sado de influir sobre un ministro, los parlamentarios, las autoridades y los funcionarios de la
región. El fiscal de la Corte Suprema José Salvador Cavero, en agosto de 1910, denunció a base            EN fEbRERO DE 1913,
de una publicación hecha en Barcelona, los crímenes del Putumayo y propuso el nombramien-                 UNA DE ELLAS,
to de una comisión judicial que se constituyera en la región para averiguar los hechos. Com-
                                                                                                          LIDERADA POR fUERzAS
probada la exactitud de las denuncias gracias a la enérgica actitud de los jueces Rómulo Pare-
des y Carlos A. Valcárcel, de los 215 criminales del Putumayo, la mayor parte fugó y se capturó           MILITARES, CAPTURÓ A
apenas a unos 10 ó 12 subalternos. Poco después el juez titular Carlos A. Valcárcel tuvo graves           MADERO Y LO ASESINÓ
desacuerdos con la Corte Superior de Iquitos. Esta ordenó que se siguiesen tantos juicios como            JUNTO A SU
enjuiciados había.
    Las atrocidades en el Putumayo fueron bochornosas; pero no representaron, por lo demás,               VICEPRESIDENTE, JOSé
un hecho histórico aislado ni pueden ser imputadas al Perú como un baldón exclusivo o singular.           MARÍA PINO SUÁREz.
Basta recordar lo ocurrido en Irlanda, África del Sur, Australia y Jamaica para mencionar solo unos
cuantos casos en el imperio británico donde tanto abundaron las protestas en aquella oportuni-
dad; así como el sojuzgamiento de los pieles rojas en Estados Unidos, el otro país donde halló
estentóreos ecos el escándalo.
                                                                                                      [ CAPÍTULO 30 ] PERÍODO 6   25
                                   La Pro Indígena y la “cuestión del indio”
               Uno de los
              principales
      redescubrimientos
       del Perú del siglo
                                   “   Indio” era, en sí misma, una catego
                                       ría problemática. Reposaba, a fin de
                                       cuentas, en un estereotipo que ima
                                   ginaba una “raza” auténticamente
                                   nacional, degenerada en sus valores
                                                                                      enseñaba historia, geografía, derechos
                                                                                      y obligaciones, educación moral y con
                                                                                      tra el maltrato de la mujer.
26   período 6   [ capítulo 30 ]
     En diciembre de 1912, litigios periodísticos, judiciales y personales apasionaron a Iquitos.                 PEDRO S. ZULEN
Rómulo Paredes, Carlos A. Valcárcel y otros fueron acusados de constituir una sociedad llamada                    (1849-1924)
“la cueva” que encontró su portavoz en El Oriente. “La cueva” se enfrentó a Arana cuando Valcár-
cel, en sus funciones de juez, ordenó la prisión de Arana; hubo una asonada a favor de él según
se dijo, dirigida por la Peruvian Amazon Company. El gerente de este en Iquitos, Pablo Zumaeta,
fue apresado. En la polémica, El Heraldo, La Corte de los Milagros, El Latero defendieron a la casa
tan combatida.
SIR ROGER CASEMENT: ¿TRAIDOR O HÉROE NACIONAL?.- Sir Roger Casement regresó
a Irlanda en 1913. Al estallar la guerra europea en 1914, se manifestó opuesto a que su tierra natal
participara en ella. El antiguo cónsul de Su Majestad en África y en América del Sur habíase vuel-
to un revolucionario. En 1915 publicó folletos antibritánicos. Viajó a Alemania e intentó desde allí
una expedición sobre Irlanda para lo cual se embarcó en un submarino. Fue capturado el 24 de
abril de 1916 junto con un barco con municiones y armas que lo acompañaba. Sufrió la pena de
la horca como traidor el 3 de agosto de aquel año, en Pentoville, Londres. El nacionalismo irlan-           El filósofo limeño fundó
dés ha reivindicado amorosamente para sí la memoria del exaltado defensor de los negros en el               en 1909 la Asociación
Congo y de los indios en el Putumayo.                                                                       Pro Indígena, cuyo
     En marzo de 1965, el cadáver de Casement, sorprendentemente intacto, fue trasladado a                  objetivo era defender los
Irlanda en una tardía concesión a su último deseo hecha por el Gobierno laborista de Harold                 derechos indígenas
Wilson. Funcionarios, militares, escolares, veteranos de la revolución irlandesa y una inmensa              contra la explotación de
multitud rindieron homenaje en Dublín a quien fue ahorcado como traidor. No mermó este tri-                 latifundistas y empresas
buto la publicación de los “diarios negros” de Casement en los que este confiesa ser un homose-             mineras. En 1916, al
xual compulsivo y constante.                                                                                desaparecer la
                                                                                                            asociación, viajó a
                                                                                                            Estados Unidos para
[ Ix ]                                                                                                      seguir estudios de
LA ASOCIACIÓN PRO INDÍGENA.- El 13 de octubre de 1909 el estudiante limeño Pedro S.                         filosofía. Volvió
Zulen, mestizo de chino y criolla, fundó en la capital la Asociación Pro Indígena, “para la defensa         brevemente para
de los intereses sociales de la raza indígena del Perú”.                                                    postular a la diputación
    Según sus estatutos, esta sociedad debía emplear principalmente los siguientes medios:                  de Jauja. Al ver frustrado
“Organizar un servicio de vigilancia con delegaciones en toda la República bajo la dirección del            su proyecto, regresó a
comité central; apoyar en la opinión, en la prensa y ante los poderes públicos las justas quejas y          Estados Unidos, donde
los reclamos motivados de los indígenas para que no se les rehúse el beneficio de las leyes del             estudió además
país; designar, siempre que sea necesario, abogados que se encarguen gratuitamente de la                    psicología y
defensa de los indígenas; poner en acción todos los medios que estén a su alcance para obtener              bibliotecología. En 1922,
la mayor garantía en la designación del personal de autoridades políticas hasta conseguir el esta-          de vuelta en Perú, fue
blecimiento de condiciones determinadas y especiales de admisión y ascenso; enviar comisio-                 nombrado bibliotecario
nados especiales que se constituyan en cualquier punto del país en el que ocurra algún conflic-             de la Universidad de
to, abuso o anormalidad respecto de los indios, con el encargo de efectuar las indagaciones del             San Marcos.
caso y referirlas al comité central. Mientras los recursos de la Asociación no permitieran rentar a
dichos comisionados y subvenir a sus gastos de viaje, podían encomendarse las comisiones de
inspección a miembros de las delegaciones o comités auxiliares residentes en el lugar o próxi-
mos a él. Por medio de un órgano especial o por publicaciones en la forma que consulte la mayor
difusión, propagar los fines perseguidos por la Asociación y dar a conocer a los indígenas las
garantías legales de seguridad personal y respeto a la propiedad; promover por medio de deba-
tes públicos y certámenes el estudio de todas las cuestiones relativas al mejoramiento social de
la raza indígena, gestionando ante los Poderes del Estado todo aquello que tienda a protegerla
y, especialmente, a facilitar su desarrollo físico, moral e intelectual, y disminuir su mortalidad”.
                                                                                                       [ CAPÍTULO 30 ] PERÍODO 6   27
  DORA MAYER                             La Asociación tuvo carácter privado y no oficial. Se propuso un apoyo y no un tutelaje en
  (1868-1959)                        favor de la raza indígena. Se caracterizó por la pureza idealista de sus dirigentes Pedro S. Zulen,
                                     Dora Mayer, Joaquín Capelo. Fue como la voz de la conciencia nacional, muchas veces débil,
                                     constantemente desoída y, en algunas ocasiones, recibida con mofa.
                                         Después de una campaña tenaz, se declaró la Asociación en receso en mayo de 1916.
  28   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 30 ]
la sesión del 19 de octubre en la que fueron conocidos también varios documentos ministeria-
les sobre el mismo asunto.
    En la sesión del 14 de diciembre leyéronse informes de las autoridades políticas y judiciales
de Junín. Según el subprefecto, la denuncia de Capelo era falsa, no existían las quejas alegadas y
los indios insistían en vulnerar los derechos de Carranza. A una controversia particular juntában-
                                                                                                             19              MARzO
                                                                                                                             1913
                                                                                                                             [ grecIa ]
se razones políticas para tratar de desprestigiar al Gobierno. Los acusados, o sea las autoridades,         MUERE ASESINADO EN
emitían testimonios calificados como imparciales. “Zacarías (exclamó Capelo en la sesión del 15             LA CIUDAD DE
de diciembre de 1909) llegará a tener estatua en el Perú porque representa a la raza indígena               SALÓNICA EL REY
vituperada y desamparada eternamente”.
    Setenticinco días después de las primeras denuncias, nada se había hecho en pro de los                  JORGE I (1845-1913),
comuneros y (mientras estaban ellos fugitivos y Zacarías preso bajo la temible jurisdicción mili-           PRIMER MONARCA DE
tar) el deslinde se produjo.                                                                                LA CASA REAL DE LOS
                                                                                                            GLüCkSbURG,
LA PROHIBICIÓN DE LA INTERVENCIÓN DE LAS AUTORIDADES POLÍTICAS EN LA CON-                                   PROVENIENTE DE
TRATACIÓN DEL SERVICIO DE PEONES PARA TRABAJOS PÚBLICOS O PARTICULARES.-                                    DINAMARCA. JORGE I
Esta ley fue promulgada con el N° 1183 el 23 de noviembre de 1909. Se basó en un proyecto pre-
                                                                                                            ASUMIÓ EL TRONO
sentado en 1907 por el senador por el Cuzco Severiano Bezada. El diputado Víctor Criado y Tejada
pretendió, en la sesión del 21 de marzo de 1909, adicionarlo con un artículo que prohibía el servicio       TRAS LA AbDICACIÓN
de mitas o pongos y sancionaba a las autoridades o los patronos que obligasen a los indios a tra-           DEL GObERNANTE
bajos gratuitos contra su voluntad, o a recibir salarios que no guardaran proporción con el trabajo
                                                                                                            TURCO OTÓN I, EN
ejecutado. En el debate que esta adición suscitó, se dijo que los pongos y las mitas ya estaban
abolidos desde 1821, Juan Manuel La Torre expresó que no existían en el Cuzco, Federico Martine-            1862. EL PRÍNCIPE
lli que idéntica era la situación en Apurímac, José María Miranda que lo mismo ocurría en Puno. La          DANéS fUE ELEGIDO
Cámara dio curso al proyecto primitivo y mandó el artículo adicional al estudio de una comisión.            POR LA ASAMbLEA
     Joaquín Capelo (que al ser aprobada la ley antedicha había creído erradamente que suprimía
el contrato de enganche) denunció en la sesión del 17 de enero de 1910 que las autoridades de               NACIONAL GRIEGA,
Jauja continuaban apresando indígenas para amparar este contrato.                                           CON LA APRObACIÓN
                                                                                                            DE GRAN bRETAñA,
“EL CONTRATO DE ENGANCHE”.- En 1910 Jesús M. Salazar presentó ante la Facultad de                           fRANCIA Y RUSIA, LAS
Jurisprudencia de Lima una tesis sobre el contrato de enganche. Este contrato estaba fuera de la            TRES POTENCIAS
ley; pero tenía sometidas bajo su régimen a grandes masas de indígenas, principalmente en las               PROTECTORAS DEL
zonas aledañas a las minas del centro del país. En dicho pacto intervenían cinco factores: el
                                                                                                            PUEbLO GRIEGO. SU
empresario o dueño de la negociación en que se iba a realizar el trabajo, el agente encargado de
la colección de obreros, el subagente o interventor inmediato, el obrero enganchado y el fiador             MUERTE OCURRIÓ
que lo garantizaba. Además de la fórmula escrita del contrato, aparecían documentos accesorios              POCO DESPUéS DE LA
como los vales que se entregaban al enganchado y que este hacía efectivos en mercaderías y las
                                                                                                            VICTORIA qUE
letras de cambio o documentos de compromiso que firmaba él para satisfacer y garantizar al
agente o al fiador. En la práctica, el enganche se prolongaba, a veces indefinidamente, en bene-            ObTUVO CONTRA LOS
ficio exclusivo del empresario y de los interventores pero con daño para el indígena que no                 TURCOS EN LA
podía regresar a su hogar y que no obtenía ninguna ganancia en el balance de los meses de                   GUERRA bALCÁNICA
trabajo. El enganche era una nueva mita.
     También se ocupó valientemente de este contacto Francisco Mostajo (Arequipa, 1913).                    DE 1912.
     El Estado no hizo nada para extirparlo o moderarlo. Solo el paso del tiempo lo alivió.
LOS HORRORES DE SAMÁN.- “Antes de 1910 (escribe José Frisancho en su libro Del jesuitismo al
indianismo) las indiadas de Samán, distrito de Azángaro en el departamento de Puno, sobrepujaban
                                                                                                        [ CAPÍTULO 30 ] PERÍODO 6   29
                                     a los vecinos en intensificación de labores indígenas y en actividad comercial, pues recorrían lejanos
                                     parajes haciendo intercambio de productos. Por aquel año, un hacendado que los explotaba, pro-
                                     cedió a despojarlos de sus tierras ejidales. Entonces los indios se irguieron en actitud defensiva. Tan
 OCULTOS EN UNA                      legítima actitud –considerada por los hacendados como crimen de rebelión– dio lugar a que acu-
   CUEVA, PARDO                      diera un numeroso destacamento de soldados a batir a los indios. Después de la refriega en que los
                                     indios fueron deshechos despiadadamente irrumpió la tropa, auxiliada por la gente mercenaria
      Y GAMARRA                      propia del hacendado, sobre las diseminadas viviendas de los vecinos entrando a ellas a saco para
     RESISTIERON                     apropiarse de cuanto podían y quemar lo restante en la hoguera crepitante de la pajiza cabaña. Por
                                     supuesto que, por derecho de conquista, los expedicionarios se adjudicaron todo el ganado de los
            A UNA                    indios. Después de la tragedia, sobre las lomas de la escueta pampa de Samán surgieron, como
  MUChEDUMbRE                        espectros, centenares de hombres, mujeres, niños: eran los que, por haber huido se salvaron del
    qUE LLEGÓ DE                     exterminio...”. “En Samán la indiada resolvió la dubitación que conflagró su conciencia, lanzándose a
                                     la criminalidad. La hasta entonces pacífica comarca sería en adelante guarida de bandoleros. De allí
       CAJACAY Y                     saldrían, en noches de horror, ululantes matones que, en pos de presa, matarían y robarían, no
MURIERON AL fIN,                     importa que a sus propios hermanos, otros indios asaltados en sus viviendas. En una ocasión, mata-
                                     ron nueve sujetos entre hombres, mujeres y niños, dentro del mismo templo de la parroquia”.
      DESPUéS DE
     DEfENDERSE
  bIzARRAMENTE.                      LA CATÁSTROFE DE GOYLLARISQUIZGA.- El 10 de agosto 1910 se produjo en este lugar la
                                     horrible muerte de gran cantidad de obreros; la cifra exacta de ellos no se precisó pero no bajó
LAS CAMPANAS DE                      de 67. El accidente fue debido a que se hizo explotar tiros de dinamita sin adoptar previamente
     ESTE PUEbLO                     un cuidado elemental, como el de hacer salir a los operarios a una distancia conveniente. La acti-
 REPICARON PARA                      tud de la empresa minera fue condenable, el auxilio de las víctimas tardío y las indemnizaciones
                                     burladas. Los muertos llegaron a ser arrojados a los pesebres, de donde los hizo extraer el prefec-
DAR LA NOTICIA Y                     to. Dora Mayer denunció los hechos mencionados en su opúsculo La conducta de la compañía
  LOS CADÁVERES                      minera de Cerro de Pasco (Callao, 1914). Esta catástrofe se produjo antes de que fuese promulgada
                                     la ley de accidentes del trabajo.
          fUERON                          Una resolución de 26 de agosto de 1910 reglamentó el trabajo en las minas de carbón de
 ExhIbIDOS EN LA                     Goyllarisquizga, estableció medidas permanentes de seguridad y estableció la forma en que la
   PLAzA PúbLICA                     empresa debió de indemnizar a los sobrevivientes y a los familiares de los fallecidos.
                                          Un decreto expedido el 28 de enero de 1910 había dispuesto medidas de seguridad para las
     DE ChIqUIÁN                     minas de carbón en general.
         DURANTE
        48 hORAS.                    EL DECRETO SOBRE EXPLOTACIÓN DE MINAS.- También fue de fecha 28 de enero de
                                     1910 para prescribir medidas destinadas a garantizar la vida y la seguridad de los operarios dedi-
                                     cados a la explotación de minas.
                                     [x]
                                     LA MUERTE DEL BANDOLERO LUIS PARDO.- El Comercio del 27 de enero de 1909 dio cuenta
                                     de la muerte del bandolero Luis Pardo. Ella ocurrió en Cajacay el 5 de ese mismo mes. Desde días
                                     antes el mayor Toro Mazote había estado persiguiéndolo con sus gendarmes. Luis Pardo luchó solo
                                     contra cuatro hombres, logró matar a dos y huyó herido. En su fuga lo acompañó su amigo Celedonio
                                     Gamarra. Un hombre que había visto el asesinato de un pariente suyo perpetrado por el bandolero
                                     con un fútil pretexto, lo denunció. Ocultos en una cueva, Pardo y Gamarra resistieron a una muche-
                                     dumbre que llegó de Cajacay y murieron al fin, después de defenderse bizarramente. Las campanas
                                     de este pueblo repicaron para dar la noticia y los cadáveres fueron exhibidos en la plaza pública de
                                     Chuiquián durante 48 horas. Hubo ante ellos un desfile interminable de amigos y enemigos.
  30   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 30 ]
      [1]
[2]
[3]
  EL ENGANCHE. A principios del siglo XX, el tipo de relación laboral conocido como “enganche” estaba muy extendido
  por todo el país. Los dueños de las haciendas pagaban a sus trabajadores no con dinero, sino con vales que después
  podían ser canjeados en bazares ubicados en la propia hacienda, por artículos de primera necesidad. De esa manera,
  negándoles un salario real, les impedían abandonar su trabajo. En otras palabras, los “enganchaban”. Aquí vemos un
  bazar perteneciente a la hacienda Roma (1); un vale de compra de la hacienda Laredo (2) y a los trabajadores de la
  hacienda Angostura, en el Cuzco (3).
                                                                                                 [ CAPÍTULO 30 ] PERÍODO 6   31
                                     LUIS PARDO EN EL CANCIONERO CRIOLLO.- Muchos huaynos y chuscadas han quedado
                                     en la provincia de Bolognesi, alusivos a Luis Pardo. Pero ninguna canción ha sido tan popular
                                     como el vals conocido por “La andarita” que es un fragmento del “Canto de Luis Pardo” publi-
         MUChOS                      cado, por primera vez, en 1909 en el periódico Integridad de Abelardo Gamarra.
      hUAYNOS Y                          La musa popular ha recogido en un poema que tiene la belleza del romancero clásico espa-
                                     ñol, la figura del bandolero para identificarlo con la idea de la desgracia:
 ChUSCADAS hAN
  qUEDADO EN LA                         A mi padre lo mataron,
                                        mi madre murió de pena
    PROVINCIA DE                        ella ¡ tan buena, tan buena!
      bOLOGNESI,                        ellos ¡que tanto me amaron!
  ALUSIVOS A LUIS
                                        Otra idea que prima en esta evocación es, junto con la de la fatalidad, la del odio:
     PARDO. PERO
        NINGUNA                         De entonces ¿qué hube de hacer?
                                        Odiar a los que me odiaron
CANCIÓN hA SIDO                         matar a los que mataron
    TAN POPULAR                         lo que era el ser de mi ser;
    COMO EL VALS                        en torno mío no ver
                                        sino la maldad humana
   CONOCIDO POR                         esa maldad cruel, insana
   “LA ANDARITA”                        que con el débil se estrella
       qUE ES UN                        que al desvalido atropella
                                        y de su crimen se ufana.
 fRAGMENTO DEL
  “CANTO DE LUIS                        Frente a la maldad enseñoreada surge la idea de la justicia:
          PARDO”                        Por eso yo quiero al niño,
 PUbLICADO, POR                         por eso yo amo al anciano
 PRIMERA VEz, EN                        y al pobre indio que es mi hermano
                                        le doy todo mi cariño.
       1909 EN EL                       No tengo el alma de armiño
       PERIÓDICO                        cuando sé que se le explota
                                        toda mi cólera brota
  INTEGRIDAD DE                         para su opresor; me indigna
       AbELARDO                         como la araña maligna
       GAMARRA.                         que se aplasta con mi bota.
                                        Yo aborrezco la injusticia,
                                        yo quiero al que es desgraciado,
                                        al que vive abandonado
                                        solo por torpe malicia;
                                        yo maldigo la estulticia
                                        de tanta gente menguada.
  32   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 30 ]
   del que me busca las breñas.
   Hasta las ramas son señas
   de que la suerte merezco;
   ni me asusta ni padezco,
   yo soy como el aguacero
                                                                                                           23              JUNIO
                                                                                                                           1913
                                                                                                                           [ perú ]
                                                                                                      [ CAPÍTULO 30 ] PERÍODO 6   33
[ tomo 13 ]
CAPÍTULO
            31
           [ ]
             J
                                   [I]
                                   ORGE CHÁVEZ.- Jorge Chávez Dartnell nació en París el 13 de enero de 1887. Su familia era
                                   peruana y acaudalada. Su madre, María Rosa Dartnell y Guise, tenía entre sus abuelos al almiran-
                                   te Jorge Martín Guise, prócer de la Independencia y fundador de la marina de guerra del Perú.
                                   En 1910 egresó de la Escuela Violet de electricidad y mecánica industriales con su diploma de
                                   ingeniero. Se interesó con viva curiosidad por la mecánica, cultivó el dibujo y la caricatura y llegó
                                   a ser figura sobresaliente en las carreras, el salto y el fútbol, sin perder su condición de aficionado
                                   aristocrático. Logró ser campeón de 400 metros planos y triunfó en eventos de 1.500 metros y
                                   de 1.200 metros en steeple-chase. Así reunió cualidades que raramente se juntan en un mismo
                                   deportista para destacar en pruebas de fondo y de velocidad. También fue un apasionado del
                                   turismo automovilístico.
                                       Pero su afición favorita llegó a ser la aviación. En 1910 participó en varios meetings aéreos: los
                                   de Biarritz, Niza, Tours, la semana de Lyon, Verona, Budapest, Rouen, Champagne, Blackpool y
                                   Lanark. Después de estas múltiples competencias de distancia hechas alrededor de una tribuna
                                   o por encima de ellas en espirales descendentes o ascendentes, le preocupó el afán de subir a
                                   las que entonces eran consideradas las más elevadas regiones del aire. Llegó a batir en Issy-Les-
                                   Moulineaux el record mundial de altura, pues ascendió a 2.652 metros como un ensayo para su
                                   gran proyecto ulterior. Sus observaciones de vuelo fueron hechas con un espíritu de investiga-
                                   ción y curiosidad científicas y llegó a esbozar problemas que hoy siguen siendo materia de estu-
                                   dio. Al ser analizados los caracteres de su personalidad física y sicológica desde el punto de vista
                                   de la actual Medicina de la Aviación, aparece (según lo ha demostrado el doctor Guillermo Garri-
                                   do Lecca Frías en un documentado libro que ha suministrado sus datos básicos a esta reseña)
                                   con características singulares en su estatura y peso, en sus cualidades de atleta, en su carencia
                                   de defectos corpóreos o enfermedades, en su fácil adaptación a actividades como las del auto-
                                   movilismo, las carreras y el fútbol. Las excelentes caricaturas y dibujos que dejó son, además,
                                   muestras de la finura y la agilidad de su espíritu. Otra evidencia de su aptitud fue la habilidad que
                                   tuvo para hacer o sugerir modificaciones en su avión. Constantemente apareció dominado, ade-
                                   más, por la voluntad de hacer algo útil, por el afán de cumplir bien las tareas que a sí mismo se
                                   encomendaba, por el sentido de la seriedad ante los compromisos contraídos.
                                       En la reunión internacional de aviación efectuada en Milán en setiembre de 1910 la prueba
                                   principal consistió en un vuelo de Suiza a Italia con el paso de los Alpes por el cuello del Simplón.
                                   De los tres concursantes, un italiano fue eliminado por no haber presentado a tiempo su aparato
                                   y un norteamericano se retiró después de dos tentativas infructuosas. Quedó únicamente Jorge
                                   Chávez. En su monoplano Bleriot, después de un ensayo infortunado, salió el 23 de setiembre de
                                   Briga en Suiza, tramontó los Alpes y apareció en el valle de Domodossola. Había triunfado. Era
                                   “un joven del siglo XX cruzando por la ruta azul en cima de aquellos Alpes por donde se arrastra-
                                   ron César y Napoleón”, según el verso de Hugues Lerroux. Nadie había hecho eso antes.
                                       Aproximadamente a 5 metros de altura, las alas del aparato se desprendieron y doblaron “co-
                                   mo las de una paloma” y aquel cayó al suelo para estrellarse por la parte delantera. Luego se
                                   descubrió que una pieza de unión entre el fuselaje y un ala presentaba señales de rotura anterior
36   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 31 ]
y de una reparación imperfecta hecha con clavos. El piloto no tuvo la culpa del accidente produ-                    JORGE CHÁVEZ
cido en el instante previo al aterrizaje, no por falla en el motor sino en la armazón de la endeble                 (1887-1910)
y primitiva aeronave. Quedaron la cola, los timones y las ruedas de bicicleta intactos y las alas no
deformadas mayormente.
    Transportado al hospital de Domodossola, llegaron hasta Chávez mensajes de felicitación por
su proeza del Rey de Italia, el Presidente de Francia y numerosas personalidades de todo el mun-
do. En aquella época el paso de los Alpes apareció con un significado análogo al que más tarde
logró el vuelo de Lindbergh de Estados Unidos a Europa, y en nuestro tiempo ha alcanzado la
hazaña espacial de Gagarín.
    Chávez no tuvo perdida de conciencia y su casco de cuero quedó intacto. Tampoco sufrió
lesiones internas, aunque sí se le encontraron fracturas en las piernas y pequeñas laceraciones y
contusiones en la cara. Fue la suya una larga agonía. En ella pronunció, según Luigi Barzini, frases
entrecortadas como “La altitud, la altitud”, “El motor, el motor”, “Quiero levantarme”. Parece que
sus últimas palabras fueron “No, no, yo no me muero”, si bien por versión de Juan Bielovucic, han
sido difundidas estas otras: “Más arriba, más arriba todavía”. El poeta italiano Giovanni Pascoli con-
cluyó la elegía que escribió con motivo de este sacrificio que conmovió profundamente al mun-                 El joven francés de
do, con los siguientes versos:                                                                                padres peruanos fue uno
                                                                                                              de los primeros aviadores
   Cae con su gran alma sola                                                                                  europeos. Tras haber sido
   siempre subiendo. ¡Y ahora sí, él vuela!                                                                   corredor de autos, se
                                                                                                              inscribió en la Escuela de
    Murió el 27 de setiembre.                                                                                 Electricidad y Mecánica
    ¿Por qué falleció Chávez? Su caída se produjo a baja altura. La muerte no sobrevino por las               Industrial, y luego en la
heridas. No hubo infección. Garrido Lecca diagnostica, a la luz de los conocimientos actuales, un             Escuela de Aviación de
shock traumático y hemorrágico al hacerse insuficiente la cantidad de sangre circulante y al                  Henri y Maurice Farman.
desangrarse en los tres puntos de fracturas en las piernas. Dentro del estado de la medicina de               Realizó su primer vuelo
entonces, no fue posible una transfusión que hubiera sido salvadora, o sea la administración del              en 1910. Ese año adaptó
líquido en forma endovenosa para reemplazar la sangre perdida. Se le aplicaron purgantes y se                 un avión Bleriot, con el
le hizo tomar café y un poco de champán. Él clamaba por beber abundante líquido.                              cual sobrevoló los
    La repatriación de los restos de Chávez tuvo lugar, con solemnes ceremonias, en setiembre                 balnearios ingleses
de 1957. En los honores que se le rindieron en Francia, donde ellos habían sido sepultados, par-              de Bournemouth y
ticipó el ministro de Relaciones Exteriores, Christian Pineau. Los restos reposan en la Plaza Mayor           Blackpool. Allí, estableció
de la Escuela de Oficiales de la FAP en Las Palmas.                                                           un récord de altura: 1.775
                                                                                                              metros, y luego otro, de
                                                                                                              2.600 metros. El 23 de
EFIGIE DE JORGE CHÁVEZ.- Los que mueren jóvenes, impulsados a la acción por un ideal,                         setiembre, en un vuelo
suelen ser favoritos y mimados por la posteridad. Jorge Chávez ha seguido, a través de los años,              desde Suiza a Italia, su
vivo y gallardo en el recuerdo y en la evocación colectivos, porque puso en su existencia breve               aeroplano se precipitó
ese algo de quimera con que cier tas almas privilegiadas se ennoblecen. No había conocido                     a tierra. Murió luego
jamás una existencia penosa o áspera. No había sabido lo que es luchar con furia desde el fon-                de cuatro días.
do del pozo como otros lo han hecho, para salir al sol. No fue la suya la for tuna de la pobreza,
buena madre de tantos hombres útiles. Por el contrario, había parecido que todas las hadas
estuvieran presentes en la hora de su nacimiento, ya que, desde la niñez, disfrutó de los dones
gratos del mundo. Así, pudo haber sido uno más entre quienes gozaron del encanto y del pri-
vilegio de vivir en ese lugar feliz que, para muchos, fue Europa antes de la primera gran guerra
civil de Occidente iniciada ciegamente en julio de 1914. Marchó a la osadía y al peligro sin que
lo arrastrara una ola multitudinaria o lo empujase el uniforme de una rígida profesión; y cuan-
do sus manos tomaban el timón de su endeble aeroplano, lo hacían con una finura creada por
varios siglos de guante.
                                                                                                         [ CAPÍTULO 31 ] PERÍODO 6   37
                                            Casi tan joven como él era la actividad a la que se consagró. Pertinaz, metódico, eficiente en
                                       ella resultó un peruano. Victorioso y lisonjeado en un vasto escenario internacional, un embaja-
                                       dor sin credenciales, una gloria que le vino al Perú de afuera, en contraste con tantos prestigios
            SI bIEN LA                 de camarilla. Sus compatriotas, que aún veían al lado de ellos el fantasma del desastre total en
        AVENTURA DE                    una guerra que no podían olvidar y se sentían sumergidos en el empequeñecimiento que esa
                                       catástrofe dejó, miraron con asombro y con jubilo a este muchacho que llevaba una gorra sen-
       JORGE ChÁVEz                    cilla y una gran chompa cerrada hasta el cuello, por muchos hasta ahora imitada. El sacrificio
       OCURRIÓ MUY                     surgió como una rúbrica para sus hazañas y para pagar el precio alto e inevitable demandado a
                                       los precursores y a los que abren caminos. En la vida y en la muerte apareció así como el heraldo
          LEJOS DE LA                  de una raza naciente y anunció una época trascendental para la humanidad toda. Estuvo entre
         PATRIA, Y LA                  los que crearon una nueva frontera, la frontera no horizontal sino vertical. Creó un mito porque
      TIERRA DONDE                     todo gran cambio histórico genera su propia mitología.
                                            Implicó este cambio el tránsito del ciclo oceánico abierto en el mundo occidental en el siglo
    CAYÓ NO ERA LA                     XV, al ciclo aeronáutico de las primeras décadas del siglo XX que ya se ha convertido en nuestro
   SUYA, SU úLTIMO                     días en el ciclo astronáutico y cuyas realizaciones, cuando hayamos muerto, parecerían imposi-
                                       bles, así como los contemporáneos de Jorge Chávez no vislumbraron que ahora, cotidianamen-
        VUELO MARCA                    te, de día y de noche, millones de pasajeros cruzan por los aires los océanos y los continentes
          UNO DE LOS                   mientras se deleitan con sus lujosas bebidas, con sus comidas prefabricadas y con el cine sonoro
      INSTANTES DEL                    y en colores. Esta transición se ha operado superando las demarcaciones geográficas y, por cier-
                                       to, ha dejado sentir intensamente sus efectos en el Perú.
   PRIMER SIGLO xx                          Desde Pizarro hasta Bolívar los transportes y las comunicaciones en nuestro suelo fueron
          Y TUVO LOS                   escasos como en el resto del mundo. El caballo hizo atravesar la costa y los Andes a conquista-
   ALCANCES DE UN                      dores y a libertadores con similar lentitud. El barco a vapor que trajo a las costas del Pacífico
                                       William Wheelwright y los ferrocarriles que contrató tan onerosamente Henry Meiggs fueron
            LLAMADO                    apenas el comienzo incipiente de una revolución más auténtica que las algaradas políticas. Ella
     UNIVERSAL CON                     fue acelerada más tarde por el empleo del motor a explosión, por los nuevos usos hallados para
                                       el pueblo y el caucho, por el vasto empleo de los materiales sintéticos y por la aparición y el auge
             ESPECIAL                  del automóvil y, sobre todo, del aeroplano. Si bien la aventura de Jorge Chávez ocurrió muy lejos
 SIGNIfICADO PARA                      de la Patria, y la tierra donde cayó no era la suya, su último vuelo marca uno de los instantes del
UNA COLECTIVIDAD                       primer siglo XX y tuvo los alcances de un llamado universal con especial significado para una
                                       colectividad tan difícil geográficamente como la del Perú.
          TAN DIfÍCIL                       Antes que Bleriot y que Lindbergh, ajeno a las complejidades y a las ventajas de la tecnología,
GEOGRÁfICAMENTE                        Jorge Chávez enseñó que la vida es una travesía solitaria, difícil, azarosa contra todos los vientos
                                       y sobre implacables abismos. Fue el símbolo del espíritu humano orientado hacia el infinito que
             COMO LA                   puede estar en el cielo como también en las profundidades del mar, en la estructura de la vida
            DEL PERú.                  misma o en los misterios de los fenómenos síquicos. Vivió unos cuantos momentos que luego
                                       resultaron inmortales en una cabina estrecha pero llena de una belleza no cantada antes y cir-
                                       cundada en cada segundo por el peligro.
                                            La cualidad que enaltece sobre todo a nuestro héroe es su sentido de la dignidad como per-
                                       sona, como deportista, como profesional. En su caso se demuestra, una vez más, lo que Andrés
                                       Gide afirmaba cuando escribía acerca de los personajes de Saint-Exupéry y sobre los primeros
                                       vuelos de noche: la verdadera felicidad para los seres humanos radica no en la libertad sino en
                                       la aceptación voluntaria de un hondo compromiso. Como en los personajes preferidos por Saint-
                                       Exupéry, en Chávez dominó “el oscuro sentido del deber, más grande que el del amor”. O, repi-
                                       tiendo una frase de W. B. Yeats, él tuvo, como los mejores ejemplares de nuestra especie, la fasci-
                                       nación de lo que es difícil. El hombre no está para buscar un bien en sí mismo sino para some-
                                       terse y sacrificarse a esa cosa extraña que manda en él y que vive a través de él. Fue para referir-
                                       se a ese “oscuro sentido” que también suelen tener algunos religiosos, algunos científicos,
                                       algunos artistas, algunos militares, algunos marinos y quienes albergan, sin lacras, el ideal de la
    38   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 31 ]
[1]   	 La llegada de la
        aviación. En la década
        de 1910, los primeros
        pilotos peruanos, todos
        ellos con educación en
        escuelas de aviación
        europeas, volvieron al
        país a demostrar sus
        habilidades en los cielos
        de Lima. Uno de ellos fue
        Juan Bielovucic, quien
        realizó el primer vuelo
        público en nuestro país.
        Aquí lo vemos
        sobrevolando el
        hipódromo de Santa
        Beatriz el día de su
        despedida (2). Otro
        destacado piloto peruano
        fue Carlos Tenaud, a
        quien se le debe además
        el diseño de un
        monoplano. Aquí lo
        vemos en una
        fotocomposición junto a
        su avión (1).
[2]
           [ capítulo 31 ] período 6   39
                                                                                                                                                                                                                       L
                          LOS PIONEROS DE LA AVIACIÓN EN EL PERÚ                                                                                                                                                       h
       1760
                                                                                                      LOUIS BLÉRIOT (1872-1936)
       En Lima, don Santiago de Cárdenas,
       conocido como “Santiago el Volador”,                                                                                         Este diseñador de aviones y piloto
       redacta un manuscrito dirigido al rey                                                                                        francés es conocido no solo por
       de España, titulado Nuevo sistema de                                                                                         ser el primero en cruzar
       navegación por los aires sacado de las                                                                                       exitosamente sobre un avión el                       Timón de dirección
       observaciones de la naturaleza volátil.                                                                                      canal de la Mancha, sino también                     Tenía costillas de madera
                                                                                                                                    por diseñar el monoplano Blériot                     forradas con tela, al igual
                                                                                                                                    XI, el más exitoso de su tipo. Lo                    que las alas
                                                                                                                                    utilizaron los primeros aviadores
                                                                                                                                    peruanos, como Jorge Chávez,
                                                                                                                                    José Ramón Montero y Carlos
                                                                                                                                    Tenaud, quien fue discípulo de
                                                                                                                                    Blériot en su escuela de pilotaje.
       1878
       El teniente coronel Pedro Ruiz Gallo                                                           CARACTERÍSTICAS DEL BLÉRIOT XI
       (1839-1880) publica el folleto Estudios
       generales de navegación aérea y resolución de
       este importante problema, donde presentó el
       diseño del ornitóptero, una máquina que
       imitaba el vuelo de las aves.
                                                                                                                                                                                         Estabilizador
                                                                                                      Envergadura                                                                        Estaba dispuesto horizon-     L
                                                                                                         8,54 m                                                                          talmente y albergaba al       E
                                                                                                                                                                                         timón de profundidad          a
                                                                                                                                                                                                                       M
                                                                                                                                                                                                                       A
                                                                                                                                                                                                                       B
       1895                                                                                                                          Longitud: 7,32 m
                                                                                                                                                                                                                       s
                                                                                                                                                                                                                       v
       Pedro Paulet (1874-1945) desarrolla un motor
                                                                                                      Tipo de motor:                                        Ghome Omega
       cohete que funciona con una mezcla de gasolina
       con peróxido de nitrógeno. Fue la base para su                                                 Caballos de fuerza:                                                           50
       diseño de un “avión torpedo” que podría, según
       sus planos, desplazarse verticalmente (para el                                                 Velocidad máxima:                                                 65 km/h
       despegue) y hacia adelante.
                                                                                                      Peso máximo:                                                        349 kg
                                                                                           1909
                                                                                            Carlos Tenaud (1884-1911) diseña y
                                                                                            construye el primer avión peruano, un
                                                                                            monoplano cuyas alas se asemejan a las
                                                                                            de una mariposa. El avión nunca despegó,
                                                                                            sin embargo, y Tenaud se marchó a
                                                                                            Francia a estudiar con Louis Blériot.
Fuentes: Empresa Editora El Comercio. Enciclopedia temática del Perú Tomo XI / Primeras planas del siglo XX / Museo Aeronáutico del Perú FAP. Infografía: Raúl Rodríguez.
40   período 6         [ capítulo 31 ]
La historia de la aeronáutica peruana abunda en acontecimientos que hablan de la pericia de nuestros pilotos, del
heroísmo de la fuerza aérea y de la destacada labor de nuestros científicos e inventores.
                                                                               Alas                                                                   Motor
                                                                               Eran estructuras de madera                                             Tenía siete cilindros.
                                                                               con dos largueros y costillas                                          Se ubicaba en la parte
                                                                               forradas con tela                                                      delantera y se encargaba
                                                                                                                                                      de mover la hélice
                                    El piloto
                                    Solo disponía de un
                                    indicador de aceite del                                                                                                Hélices
                                    motor y un reloj de bolsillo                                                                                           Hechas de madera
                Largueros
                longitudinales
           Patín de madera
           que formaba parte
           del tren de aterrizaje
                                                                                                                                                                     [ capítulo 31 ] período 6   41
   JUAN BIELOVUCIC                    reforma social, que Gide escribió en su Prometeo: “No amo a los hombres, amo aquello que los
   (1889-1949)                        devora”. O, como dice uno de los aviadores retratados por Saint-Exupéry: “Procedemos como si
                                      hubiera algo de más valor que la vida misma. Pero ¿qué cosa? Quizá hay algo más, algo más per-
                                      manente que debe ser defendido y salvado”.
                                          Cuando Jorge Chávez murió, fue como un naufragio; pero él sigue en su monoplano
                                      como en un puente de mando, con una bandera al tope. Desde allí saluda e incita para siem-
                                      pre a los incontables varones y mujeres que, a través de los años y de las décadas, ofrendan
                                      sus vidas sin coraza en la diaria lucha por la aviación en las que no se conoce ni se conocerá
                                      tregua ni armisticio.
                                      [ II ]
                                      JUAN BIELOVUCIC Y LOS PRIMEROS VUELOS EN LIMA.- Juan Bielovucic nació en Lima
                                      el 30 de julio de 1889. Fue hijo de un comerciante francés avecindado en esta ciudad. Hizo sus
                                      estudios en el Liceo Jeanson de Sailly, París, hasta el bachillerato de Filosofía. Apasionado de los
Gracias a sus estudios en             deportes, practicó como estudiante las carreras a pie, el ciclismo y el motociclismo. De allí pasó
       Francia, este joven            a la aviación. Alcanzó, como Jorge Chávez, la época en que el público se cansaba de los llama-
        limeño fue uno de             dos meetings y en que concluía la moda de los carrouseles. El aeroplano debía alejarse ya de los
 nuestros precursores de              terrenos y ascender en el aire, y nuevos aparatos eran requeridos. Bielovucic hizo diversas prue-
   la aviación. Regresó a             bas con los “Voisin” y desempeñó un importante papel en la historia de la aviación deportiva y
      Lima en 1911, con el            de la aviación de transporte. En 1910 venció en la carrera aérea con escalas Burdeos-París.
      brevete número 87.                  El 8 de enero de 1911 llegó Bielovucic a Lima invitado por la Liga Pro Aviación. Fue recibido
        En nuestra capital,           en entusiastas manifestaciones populares. Trajo dos máquinas, una “Voisin” y una “Farman” que
      realizó las primeras            fueron llevadas al hipódromo de Santa Beatriz. Estos artefactos desarrollaban 50 caballos de fuer-
  demostraciones aéreas               za y llegaban a otros tantos kilómetros por hora.
      en el hipódromo de                  El 15 de enero de 1911 realizó Bielovucic el primer vuelo que se vio en Lima. Encontró dificul-
       Santa Beatriz, para            tades por la inactividad en que había estado la máquina y por falta de elementos en el improvi-
       deleite de miles de            sado aeródromo de Santa Beatriz lleno de espectadores fervorosos. Sin embargo, logró remon-
   espectadores. En 1912,             tarse a la altura de 40 metros con la duración de un minuto. Catorce días después, el 29 de
 volvió a Francia, donde              enero, cruzó el cielo de Lima en el monoplano “Farman” en varias direcciones. Fue el primer
     participó en diversas            aviador nacional que navegó en el espacio de América Latina.
    competencias. Tras el                 Repetidos vuelos de instrucción, pese a que las máquinas no eran de doble comando, y vue-
      inicio de la Primera            los de paseo se sucedieron. En ellos participaron militares y civiles, hombres y mujeres.
          Guerra Mundial,                 Las primeras damas que ascendieron a un avión en Lima fueron, el 3 de marzo de 1911, María
 Bielovucic se incorporó              Luisa Guislain, Ana Navarro, María Caridad y María Laura Agüero Bracamonte. En un viaje aéreo
en el cuerpo de aviación              de Lima a Ancón, Bielovucic demoró 58 minutos y recibió con este motivo una tarjeta de oro (29
       francés. Durante la            de enero de 1911).
           Segunda Guerra                 Cuando había trasladado su hangar a Bellavista recibió, en abril de 1911, un llamado de Euro-
        Mundial, colaboró             pa para que interviniera en un concurso internacional y partió del Perú.
         en el movimiento
            de resistencia.
                                      EL PASO DE LOS ALPES POR BIELOVUCIC Y SU ACTUACIÓN EN LAS DOS GUERRAS
                                      MUNDIALES.- De regreso a Francia, Bielovucic participó en diversos eventos. Pero su preocu-
                                      pación esencial fue pasar los Alpes, repetir y completar la hazaña de Chávez o, como él dijo:
                                      “vengarlo”. Se preparó para esta empresa cuidadosamente y hubo necesidad de construir para
                                      ella un avión especial, un monoplano Henriot de tipo militar con un motor de 24 caballos. El 25
                                      de enero de 1913 voló de Briga a Domodossola por la ruta del túnel del Simplón en 28 minutos.
                                      Ascendió a cerca de 10 mil pies y recorrió 25 kilómetros. Pero se había producido un cambio de
                                      clima espiritual en el público y la proeza de Bielovucic fue recibida casi con indiferencia.
   42   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 31 ]
    Al estallar la Primera Guerra Mundial, el glorioso aviador peruano participó en ella como                      CARLOS TENAUD
voluntario en el ejército francés. Se distinguió en los vuelos de reconocimiento a gran distancia                  (1884-1911)
y obtuvo la Legión de Honor y la Cruz de guerra con palma. Firmada la paz, tuvo todavía actua-
ción dentro de la aviación y el automovilismo y también realizó exploraciones en los ríos amazó-
nicos. Durante la Segunda Guerra Mundial se unió a la Resistencia y efectuó importantes dona-
tivos para las víctimas de aquella catástrofe. Entre ellos figuraron objetos raros y recuerdos pre-
ciosos. Volvió a la patria en marzo de 1930. En 1947 hizo su último viaje al Perú. Falleció en París,
a los sesenta años, el 14 de enero de 1949.
[ III ]
CARLOS TENAUD.- Desde 1908 y 1909 había hecho en Lima experimentos para ascender a los
aires Carlos Tenaud Pomar. Diseñó con esta finalidad un monoplano cuyo propósito era imitar el
dispositivo de vuelo empleado por las aves. Este aparato sufrió una caída que impidió su empleo
en lo sucesivo. Pese a tan dramático contraste, Tenaud mantuvo su fe, su entusiasmo, su cons-
tancia. Se dirigió a Francia e ingresó en noviembre de 1910 a la Escuela de Etampes, dirigida por            El joven parisino de
el famoso Bleriot para obtener su brevete de piloto aviador que le fue otorgado el 23 del mismo              ascendencia peruana
mes, por el Aero Club de aquel país. Bleriot lo llamó el más aprovechado de sus discípulos pues              construyó el primer
solo necesitó de ocho lecciones sin haber deteriorado accesorios más que por el valor de tres                aeroplano de nuestro país
francos y medio. Posteriormente hizo práctica más intensiva y llegó a volar entre Etampes y                  con planos y diagramas
Reims.                                                                                                       traídos desde Francia.
     Llamado, como Bielovucic, por la Liga Pro Aviación, ambos se embarcaron para el Perú, con               Ensamblado en la Escuela
su material, en diciembre de 1910. Al llegar a Lima en enero de 1911, fueron objeto de entusias-             de Artes y Oficios, la
ta recepción. Tenaud se instaló en el campo de Limatambo. No tenía este las condiciones indis-               aeronave quedó
pensables para que la máquina pudiera despegar, el terreno era pequeño y estaba rodeado de                   destrozada tras
surcos cuya nivelación parecía indispensable. El entusiasmo de Tenaud trató de superar todos los             su primera prueba. El
obstáculos y un vuelo de prueba tuvo lugar el 27 de enero de 1911. Pero, en el momento del                   gobierno peruano envió
despegue, el aparato Bleriot no llegó a alcanzar la altura suficiente para salvar unos postes del            entonces a Tenaud a
servicio eléctrico en el extremo del campo, y se produjeron el choque y la caída. Tenaud quedó               perfeccionar sus
herido y fue trasladado a una clínica primero y a la casa de sus padres después; y allí afrontó              conocimientos en la
durante varios meses una incesante y valerosa lucha contra la muerte. Falleció el 7 de setiembre             Academia Bleriot. En 1911,
de 1911. Fue la primera víctima de la aviación caída en el Perú. Hermano de Pedro Ruiz Gallo al              de regreso en Lima,
inventar un aparato original, fue hermano de Bielovucic al volar en el cielo de Lima y hermano               ensambló el avión
de Jorge Chávez al ofrendar la vida por su purísimo ideal.                                                   comprado en Europa y
     Una cruz colocada el 4 de febrero de 1912 en el lugar donde cayó Tenaud, ha desaparecido.               realizó una serie de
                                                                                                             demostraciones. En
                                                                                                             febrero de 1911, durante
[ IV ]                                                                                                       un vuelo, el ala de su
LA RADIOTELEGRAFÍA EN EL PERÚ: SUS PRIMEROS EXPERIMENTOS.- En 1903, en el                                    aeronave se enredó en un
puerto del Callao y en el crucero italiano Elba, fueron invitados a bordo el día 2 de setiembre el           poste de luz y sufrió un
canciller Eugenio Larrabure y Unanue, el ministro de Guerra contralmirante Villavicencio, el inge-           grave accidente. Falleció
niero electricista Alejandro Guevara, así como otras personalidades que debían presenciar las                tras larga agonía.
primeras experiencias de la comunicación inalámbrica con Lima. Ellas se efectuaron por haberse
colocado un receptor de propiedad de I. Varese, en la espalda de la Penitenciaría.
    Los trabajos de instalación de estaciones radiotelegráficas que debían poner en contacto la
capital con el Oriente empezaron en 1904. Este servicio comenzó a funcionar en 1906.
    Con el objeto expresado, quedaron establecidas emisoras en la vía del Pichis bajo la dirección
técnica del ingeniero Augusto E. Tamayo. Entre estas emisoras pueden ser mencionadas las de
Puerto Bermúdez, Masisea, Orellana, Requena, El Encanto, Leticia y, finalmente, Ytaya en Iquitos.
                                                                                                        [ CAPÍTULO 31 ] PERÍODO 6   43
                                   Juan Bielovucic y el biplano Voisin
       En enero de 1915,
              el aviador
           peruano Juan
     Bielovucic realizó
                                   E       nero de 1915. Por primera vez los
                                           habitantes de Lima presenciarían
                                           un vuelo sobre la ciudad, merced
                                   al aviador peruano Juan Bielovucic y a
                                   su biplano Voisin. El suceso conmocio
                                                                                       mo derecho de la esplanada, desde
                                                                                       donde debe tomar la velocidad conve
                                                                                       niente para la asención. [...]
44   período 6   [ capítulo 31 ]
   El servicio radiográfico del Estado dependía del Ministerio de Fomento. Esta situación fue
modificada en 1921 en que, por decreto de 22 de enero, quedó constituida la Administración
General de Correos, Telégrafos y Radiotelegrafía, dependiente del Ministerio de Gobierno.
                                                                                                           LA
                                                                                                           COMUNICACIÓN
AUGUSTO E. TAMAYO, LA COMUNICACIÓN LIMA-IQUITOS Y LA ESTACIÓN DEL
CERRO SAN CRISTÓBAL.- Durante varios años Augusto E. Tamayo prosiguió tesoneramente                        LIMA-IqUITOS
sus estudios y trabajos sobre comunicaciones inalámbricas.                                                 ENTONCES
    Un contrato celebrado con la compañía alemana Telefunken dio lugar a la erección de una
estación radiotelegráfica en el cerro San Cristóbal. La inauguración de esta torre se efectuó el 16
                                                                                                           ESTAbLECIDA
de junio de 1912. El presidente Leguía subió al lugar de la ceremonia a caballo. El representante          MARCÓ UN
de la Telefunken Holmwang en su discurso pronunció, entre otras, las siguientes palabras: “La              ACONTECIMIENTO
estación de San Cristóbal, siendo por su peculiar ubicación en la cumbre de un cerro, la única de
su clase en el mundo, es también la más poderosa y la más moderna de todas las que existen en              SENSACIONAL.
América del Sur. Debo, así mismo, hacer especial mención de que gran parte del éxito alcanzado             ERA LA VICTORIA
se debe a la competencia y actividad del ingeniero peruano Augusto Tamayo”.
    La comunicación Lima-Iquitos entonces establecida marcó un acontecimiento sensacional.
                                                                                                           DE LA CIENCIA
Era la victoria de la ciencia sobre las distancia y sobre una accidentada topografía. Otros experi-        SObRE LA
mentos similares en diversos lugares del mundo habían fracasado.                                           DISTANCIA Y
    La estación de San Cristóbal tenía 10 kilowatts de potencia y utilizaba una antena de para-
guas sostenida por una torre de 108 metros que descansaba en un aislador de vidrio. La torre
                                                                                                           SObRE UNA
estaba dotada en su parte superior de crucetas o escaleras de 12 metros. Empleaba ondas de                 ACCIDENTADA
1.500, 2.000, 3.000 y 4.000 metros de longitud para comunicarse con Ytaya (Iquitos). La recepción          TOPOGRAfÍA.
se verificaba con aparatos de cristal.
                                                                                                           OTROS
                                                                                                           ExPERIMENTOS
                                                                                                           SIMILARES EN
                                                                                                           DIVERSOS
                                                                                                           LUGARES DEL
                                                                                                           MUNDO hAbÍAN
                                                                                                           fRACASADO.
                                                                                                      [ CAPÍTULO 31 ] PERÍODO 6   45
[ tomo 13 ]
                 CAPÍTULO
                            32
                           [ ]
E
                                   [I]
                                   L PROCESO ELECTORAL DE 1912. LA CANDIDATURA ASPÍLLAGA- El panorama de la
                                   sucesión presidencial de Leguía en 1912 presentó nubarrones que parecían presagiar inevitables
                                   tempestades. El Partido Civil gubernamental, dueño de la mayoría en las Cámaras y de los órga-
                                   nos del sufragio, lanzó el 10 de diciembre de 1911, en una asamblea, la candidatura de Ántero
                                   Aspíllaga cuyo leal apoyo al Gobierno había contribuido a que este resistiera incólume las dificul-
                                   tades creadas por la beligerante oposición parlamentaria en 1910 y 1911.
                                       Ántero Aspíllaga nació en Pisco en 1849. Fue hijo de Ramón Aspíllaga, de nacionalidad chile-
                                   na, y de Melchora Barreda. Hizo sus estudios en el colegio francés de Loiseau y Fontain, en Lima.
                                   Después de que terminó su instrucción media se dirigió a Lambayeque. Eran los días en que se
                                   cultivaba el algodón en muchas haciendas de la costa por las altas cotizaciones de este produc-
                                   to con motivo de la guerra civil en Estados Unidos. Al concluir ella, la baja de precios motivó que
                                   los hacendados de la costa se dedicaran a plantar caña de azúcar. Entre los que más descollaron
                                   en esta actividad estuvieron Enrique Swayne en Casa Blanca, José Unanue en Gómez valle de
                                   Cañete, Luis Albrecht en Casa Grande y la familia Aspíllaga en Cayaltí. Ántero Aspíllaga llegó a
                                   viajar a Europa antes de la guerra con Chile para adquirir maquinarias, arados y otros implemen-
                                   tos y para estudiar los más recientes adelantos en la industria a la que se había dedicado.
                                       En 1886 fue elegido diputado por Chiclayo. Dos años después Cáceres lo nombró ministro
                                   de Hacienda. Como tal celebró el famoso contrato con los acreedores extranjeros que general-
                                   mente es llamado el contrato Grace; y precipitó la desaparición del billete fiscal depreciado. En
                                   1892 formó parte de la Cámara de Senadores como representante por Lima. Fue reelegido en los
                                   comicios sucesivos de 1895, 1903 y 1909. Presidió dicha Cámara en 1902, 1903, 1909 y 1910.
                                   Alcalde de la capital en 1910, renunció por razones éticas. Ese mismo año hizo un segundo viaje
                                   a Europa y allí estudió los últimos progresos industriales y adquirió nuevos y perfeccionados arte-
                                   factos para la hacienda Cayaltí.
                                       En su programa de Gobierno ofreció Aspíllaga que se “esforzaría por constituir un poder tran-
                                   quilo y moderador que, respetando todas las opiniones, contribuyese a la espontánea y fecunda
                                   acción de los ciudadanos”. Entre los puntos concretos que trató estuvieron: la armonía entre los
                                   poderes Ejecutivo y Legislativo; la búsqueda de soluciones para las cuestiones internacionales
                                   que tenía el país, sin menoscabo para su honra y su dignidad; la atención a la defensa nacional;
                                   el respeto a las garantías individuales; la reforma de la ley electoral con la colaboración de todos
                                   los partidos; el ordenamiento del Presupuesto; las garantías para el capital y el trabajo; la mejora
                                   de los puertos; el encauzamiento de los ríos y la derivación de sus aguas en la costa dentro de
                                   los estudios hechos; el desarrollo de la salubridad; la política ferrocarrilera a base de vías de pene-
                                   tración para cumplir la aspiración nacional de enlazar la costa y el oriente; la defensa de la raza
                                   indígena; la mejora de las condiciones de la clase obrera con casas para ella, planes generales de
                                   higiene y de salubridad urbana y rural y de policía sanitaria en las fábricas, en los campos y en las
                                   minas, fomento del ahorro y seguros de protección e indemnización por los accidentes de tra-
                                   bajo; el estímulo de las industrias útiles; la organización de una Compañía Nacional de Obras
                                   Públicas “a la que encargase el Estado la ejecución de las construcciones que
48   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 32 ]
reclaman los servicios de la administración” sobre la base del capital privado y de las intervención                  ENRIQUE BARREDA
y fiscalización del Gobierno; la ayuda a las sociedades de Beneficencia; el mejoramiento de los                       Y OSMA (1847-1929)
institutos armados; la reforma y el progreso en el campo educacional; la inclusión de los estudios
pedagógicos en la Universidad de San Marcos y el contacto entre las Universidades de los depar-
tamentos con las industrias correspondientes a su región; la atención al Poder Judicial y el respe-
to a su independencia y a sus iniciativas; el impulso a los municipios y a las juntas departamen-
tales dentro del “provechoso equilibrio de la autoridad central y de la independencia comunal”.
     Era, en conjunto, un programa de tipo conservador cautamente progresista. Aspíllaga tenía
fama de ser un hombre circunspecto, elegante, honesto, caballeroso y maduro. Sus vestidos eran
confeccionados por el sastre Poole de Londres. A su larga actuación política en los más altos car-
gos (solo le faltó la presidencia de la República) unía una considerable fortuna y su mansión
señorial era un gran centro aristocrático en Lima. Pero en su contra surgía la circunstancia que
representaba, de un lado, la continuidad de un régimen político duramente combatido a lo largo
de sus cuatro años de existencia y, de otro, el predominio de un partido que de hecho goberna-
ba el país ya trece años. No fue la suya una candidatura popular aunque estuvo provista de
abundantes recursos económicos. Aspíllaga, a pesar de todo, acaso hubiera triunfado en 1903 o                   En enero de 1912, el
en 1904 o en 1908; pero en 1912 encontró dificultades insalvables.                                              político limeño, miembro
                                                                                                                activo del Partido Civil,
                                                                                                                realizó duras críticas al
EL INTENTO DE UNIFICAR A LA OPOSICIÓN.- El 6 de enero de 1912 se reunieron en el                                gobierno de Augusto
colegio de Santo Tomás de Aquino poco más de 200 caballeros, escucharon un discurso de Enri-                    B. Leguía, de esa misma
que Barreda y Osma que fue de franca crítica al Gobierno y eligieron la junta directiva del Partido             orientación partidaria.
Civil Independiente. La presidió Enrique de la Riva-Agüero y lo acompañaron José Matías Man-                    Barreda organizó una
zanilla, Vicente Maúrtua, Francisco Tudela y Varela, Amador F. del Solar, Antonio Miró Quesada,                 junta directiva
Enrique Barreda y Osma, Manuel B. Pérez, Leoncio Samanez, Juan E. Ríos, Víctor Eguiguren, Matías                independiente
León, J. C. Peralta, E. A. Calderón, Domingo Olavegoya, Germán Schreiber, Julio R. Loredo, Francis-             y buscó un acercamiento
co Mendoza y Barreda y Germán Arenas. Poco después se organizó una serie de conversaciones                      de su movimiento con el
entre demócratas (cuya personería ejerció Nicolás de Piérola) civilistas independientes (represen-              Partido Demócrata,
tados por Enrique de la Riva-Agüero y Enrique Barreda), liberales (con sus personeros Augusto                   liderado por Nicolás de
Durand y Wenceslao Valera) y constitucionales (cuyos delegados fueron el general Pedro E.                       Piérola; con el Partido
Muñiz y David Matto) para buscar un candidato presidencial común.                                               Liberal, encabezado por
                                                                                                                Augusto Durand; y con el
                                                                                                                Partido Constitucional,
LA ACTITUD DE PIÉROLA.- Pero en la conferencia celebrada el 11 de febrero, se produjo la                        fundado por Andrés
ruptura entre Nicolás de Piérola, y los demás delegados. Piérola planteó una serie de condiciones               Avelino Cáceres.
para el pacto tales como: la protesta por las mutilaciones territoriales; el respeto a la Constitución,
sobre todo en cuanto a las garantías ciudadanas; la exigencia de penas para quienes las violaran;
el reajuste del Tesoro nacional; la negativa ante el empréstito exterior; el cuidado en la adminis-
tración del dinero público; la libertad y verdad del sufragio; la lucha contra las candidaturas ofi-
ciales y en pro de la designación de autoridades y organismos dignos de la confianza ciudadana;
la elección de un candidato común; la autonomía de cada partido que no debía ser incompati-
ble, sin embargo, con la designación de un jefe para la alianza.
    Acerca de los temas tratados en la reunión del 11 de febrero hubo aclaraciones y rectificacio-
nes hechas públicamente por los participantes en ella. Pero se deduce que Piérola se negó a
firmar el acta al encontrar inaceptable la fórmula planteada por Riva-Agüero para elegir un can-
didato a la presidencia que no ofreciese resistencias ante el presidente Leguía; y que, además
pretendió la unidad del mando en la coalición. Una vez más, como en 1903, en 1904 y en 1908,
la aristocracia civilista le cerraba el paso. Y él una vez más también, con criterio vertical y no hori-
zontal, se negaba a ceder y apoyar a otros.
                                                                                                           [ CAPÍTULO 32 ] PERÍODO 6   49
                                           Profunda era la amargura de Piérola en aquellos días crepusculares de su vida. El 3 de enero
                                      publicó una carta para declinar el homenaje que iba a realizarse en su honor con motivo de su
                                      cumpleaños y para hacer apreciaciones sobre la actualidad. Empezaba diciendo: “Ah! lo sabéis bien,
  LA INSTANTÁNEA                      señores. La situación de la Patria es de gravedad aterradora. El Perú se hunde día a día, hora a hora;
 POPULARIDAD DE                       y se hunde exhibiendo la inconcebible inercia de sus hijos ante el asombro desdeñoso de los extra-
                                      ños. La acción letal sobre este pueblo de un largo período de su envenenamiento. Atmósfera de
bILLINGhURST fUE                      peste lo rodea trayéndole inacción de letargo…”. Y después de varias consideraciones amargas
           LA DE UN                   exclamaba: “¡El imperio de Manco Cápac y Atahualpa! ¡El primero de los pueblos de la España suda-
                                      mericana! ¡El primero después de su independencia!… ¿a dónde has sido traído?... ¿Qué lugar
   PIEROLISMO SIN                     ocupa hoy? No, ningún pueblo atravesó jamás y por culpa exclusiva por los propios, período más
        PIéROLA. LA                   doloroso ni más negro de su historia. No, no son las personas lo que necesitamos cambiar, son las
         REITERADA                    cosas”. Y después de señalar las bases de un programa de dignificación interna y externa, sanea-
                                      miento moral y económico, reconquista de la respetabilidad y vuelta a la legalidad auténtica afir-
    MALAVENTURA                       maba que, para transformar el estado de cosas existente, no era necesaria la fuerza si los partidos
       POLÍTICA, LA                   se unían y no buscaban candidatos de acomodo después de “un gobernante desagraciado cuyo
                                      error capital fue encaramarse en un puesto que la nación no le confió, para reemplazarlo con otro
     DESERCIÓN DE                     que será inevitablemente tanto o más desgraciado que él, consumando la ruina de la Patria”.
    VARIOS DE SUS                          Ante una manifestación pública que se realizó el 5 de enero pronunció Piérola desde su casa
           ADEPTOS                    uno de sus últimos discursos públicos. Allí dijo: “Compatriotas: Durante 50 años he vivido la vida
                                      de este pueblo sin perder jamás la fe en sus destinos ni la confianza en que sabría alcanzarlos; y
 PROMINENTES, LA                      no la he perdido porque los latidos de mi corazón y los anhelos de mi alma han vibrado junto con
    PObREzA Y LOS                     el alma del Perú. Es en ella que se ha encendido mi fe y mi confianza en el día de mañana. Sombras
 INCONVENIENTES                       de muerte han pasado por este pueblo creando noche espesísima; pero esas sombras se disipan
                                      y van a desparecer y el Perú se levantará. Sí señores, el Perú se levantará sin otra fuerza que la suya
        DE LA EDAD                    propia. Asociados a él para levantarlo tened confianza en que habremos de lograrlo”.
            hAbÍAN                         En una circular a los presidentes de los comités del Partido Demócrata en el país publicada
                                      el 8 de mayo, después de consideraciones sobre la situación caótica del país, la falta de seguridad
    ORIGINADO LA                      para el voto, la necesidad de renovar la estructura política y la conveniencia de no presentar al
    EROSIÓN DE LA                     partido “en complicidad con el profundo daño que va a hacerse a la nación”, negó Piérola toda
fUERzA POPULAR,                       ayuda a las elecciones o a sus actos preparatorios y otorgó el calificativo de desertores a quienes
                                      la prestaran.
    úNICO CAPITAL
      POLÍTICO DEL
          CAUDILLO                    [ II ]
                                      LA CANDIDATURA DE BILLINGHURST.- Los partidos Civil Independiente, Liberal y Consti-
      DEMÓCRATA.                      tucional no llegaron a nominar un candidato común, a pesar de que, según se dijo, hubo una
                                      propuesta a José Pardo, entonces todavía en Europa, que el ex Presidente rechazó. Probablemen-
                                      te, resistencias con el militarismo y dificultades económicas impidieron que encontrase vasto
                                      apoyo un candidato que, a la distancia, parece hoy lógico: el general Pedro E. Muñiz. Tampoco se
                                      produjo un movimiento nacional para ungir al anciano caudillo demócrata. Hubo mucha gente
                                      que creyó inevitable la victoria de Aspíllaga. La Junta Electoral Nacional reconstituida, que presi-
                                      dió Alejandro Deustua como personero del Poder Ejecutivo, se componía, en su gran mayoría,
                                      de partidarios del candidato oficial. No parecía imposible que se repitieran en 1912 con éxito y
                                      en relación con el sistema de sufragio los métodos que habían hecho posible la formación de un
                                      Parlamento propicio al Gobierno el año anterior. Si la maquinaria electoral estaba dominada y si
                                      no podía esperarse rebeldías de la mayoría del Congreso, para muchos no había cómo forjar una
                                      victoria de la oposición. Este sector aparecía además, dividido y sin pugnacidad. El tiempo cada
                                      vez resultaba más estrecho para organizar una acción contra una candidatura activa y provista
                                      de toda clase de recursos.
   50   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 32 ]
     Sin embargo, por un milagro cívico, el Perú, una vez más pareció despertar súbitamente. A
comienzos de mayo de 1912, poco menos de un mes antes de las elecciones, comenzó a circu-
lar la noticia de que en provincia se hacía propaganda a favor de Guillermo Billinghurst, ex alcal-        [ 1912 mayo 19 ]
de de Lima y presidente del Partido Demócrata pocos años antes. El 4 de mayo publicó en La
Crónica el redactor de dicho diario José Gálvez una entrevista al nuevo personaje que tuvo efec-             LAS MANIFESTACIONES
to sensacional sobre la opinión pública. Declaró allí ese político que, en caso de lanzarse su can-          POLÍTICAS EN LIMA. El 19
didatura a la presidencia, su deber claro era “aceptar indudablemente lo que la libre voluntad de            de mayo de 1912 se
los pueblos le pidiera, dejando constancia de la espontaneidad libérrima de tales ofrecimientos”.            realizaron las
También anunció que había postergado su proyectado viaje a Estados Unidos.                                   manifestaciones políticas
     La candidatura de Billinghurst, alcanzó así vasta publicidad y tomó rápidamente considerable            de los candidatos a la
impulso. El 9 de mayo fue conocido un manifiesto del nuevo candidato en el que expresó que                   presidencia de la
había entregado al Presidente de la República un memorial para que fueran convocadas nuevas                  República. Al día
elecciones. El proceso ya iniciado tenía (según él) las tachas de no haberse dejado inscribir a              siguiente, El Comercio
muchos ciudadanos en el registro del corto plazo disponible para el acto del sufragio, de estar              informó: “Desde antes de
todo el aparato de este organizado al servicio de intereses personales de los partidos que repre-            las 2 de la tarde
sentaban los diversos matices de la opinión. Párrafos especiales consagraba a los deberes que,               comenzaron a reunirse
cualesquiera que fuesen sus afecciones personales y sus vínculos proselitistas, tenían los miem-             en la plazuela de la
bros del Congreso ante la opinión pública.                                                                   Exposición los clubs
     La instantánea popularidad de Billinghurst fue la de un pierolismo sin Piérola. La reiterada            aspillaguistas. (…) En las
malaventura política, la deserción de varios de sus adeptos prominentes, la pobreza y los incon-             solapas de los sacos
venientes de la edad habían originado la erosión de la fuerza popular, único capital político del            llevaban los
caudillo demócrata.                                                                                          manifestantes insignias
                                                                                                             de cartulina roja con el
                                                                                                             retrato del señor
“PAN GRANDE”.- Puede afirmarse que la imponente manifestación pública de las fuerzas                         Aspíllaga. (…) La casa del
bilinghuristas, realizada el domingo 19 de mayo de 1912, decidió la victoria de esta candidatura.            señor Billinghurst, desde
El comicio se inició en la Alameda de los Descalzos y recorrió las principales calles de la capital.         horas de la mañana,
En él se exhibieron unos carteles con el “pan descomunal” que sería vendido a 5 centavos si                  estaba invadida por
Billinghurst llegaba a la presidencia, así como el pequeñito cuyo precio sería de 2 reales si subía          grupos de partidarios,
Aspíllaga; así fue como nació el apodo de “Pan Grande” puesto a aquel hombre público.                        que ocupaban el hall
     Este nombre ha perdurado en el recuerdo colectivo mucho más que las diversas iniciativas y              central, las aceras y el
los variados planes de Billinghurst, unidos a problemas económicos, hacendarios, sociales y                  crucero de la calle. (…)
constitucionales. Es el símbolo de las excesivas promesas electorales que luego los candidatos               En carruajes llegaban
triunfantes no cumplen, de los anuncios tentadores y magníficos lanzados sobre la eterna credu-              muchos de los amigos
lidad del pueblo para conquistar sus votos y sus simpatías.                                                  políticos del señor
     El número de los manifestantes, calculado en 20 mil personas, pareció, en aquella época,                Billinghurst y al
gigantesco, y contrastó con el del comicio a favor de Aspíllaga ese mismo día en la Plaza de la              aproximarse las dos de
Exposición. Billinghurst expresó en su discurso entre otras cosas: “El sufragio popular no es sola-          la tarde, centenares de
mente soberano, es un medio de orden en la sociedad. Cierto es que el sufragio no ha encontra-               personas se hallaban
do todavía su instrumento de precisión; pero el ardiente anhelo de los pueblos de llegar a la                reunidas en la casa del
organización política de las democracias presagia el próximo advenimiento de esos ideales gra-               candidato. En esos
cias a la instrucción primaria y a la enseñanza de la prensa difundida por todos los que piensan             momentos fue
y hablan en una nación. Nuestra Carta fundamental consagra con más o menos latitud el dere-                  despejando la
cho del sufragio; pero una dolorosa experiencia nos ha demostrado que, en la práctica ese dere-              concurrencia para acudir
cho no existe. Y por raro que parezca el problema de la representación parlamentaria que en                  al paseo de los Descalzos,
otras partes se contrae a dar cabida a las minorías, entre nosotros consiste en que se respeten los          punto de cita de la
derechos y las representaciones de las mayorías”. Más adelante agregó: “Nunca debemos perder                 manifestación”.
de vista decía el presidente Mackinley, el hecho de que el sufragio del ciudadano, el sufragio
constitucional es la base de todo poder y autoridad en un gobierno como el nuestro; el sufragio
                                                                                                       [ CAPÍTULO 32 ] PERÍODO 6   51
                                   Las jornadas de mayo de 1912
     En mayo de 1912, el
      pueblo impidió la
        celebración de
     elecciones y llevó
                                   E      n el discurso político del Perú
                                          republicano, la categoría “pueblo”
                                          exhibió, las más de las veces, una
                                   clara ambigüedad. Al “pueblo” se podía
                                   aludir como a aquel colectivo social
                                                                                         Para Torrejón, un factor clave para
                                                                                         entender las Jornadas de Mayo reside
                                                                                         en las diferencias de percepción que
                                                                                         tuvo el “pueblo” de los dos opositores.
                                                                                         En Billinghurst se quiso ver a un exitoso
             al poder a            compuesto por ciudadanos, pilar de un           salitrero proveniente de la zona “cauti
             Guillermo             régimen representativo y democrático.      va” del sur del Perú –los deportados de
       Billinghurst. El            Pero el “pueblo” podía ser también                Tacna y Arica se hallaban en la capital
                                   aquella plebe furiosa e ignorante, ver        en mayo de 1912–, a un caudillo piero
        fenómeno, que
                                   dadero lastre para el desarrollo del país,     lista, a un combatiente de la guerra del
          para muchos              capaz de cometer los peores excesos,            Pacífico y a un benefactor de los pobres.
            significó el           carente de cultura política y necesitada   Sobre Aspíllaga, en cambio, candidato
          ingreso de la            de educación y civilización.                    oficialista, pesaba el lastre de ser hijo
     masa popular a la                                                                   de un chileno y de que su fortuna la
                                   Tales tensiones se hicieron patentes en        hubieran construido los braceros de sus
          vida política            sucesos co mo los de ma      yo de 1912,          haciendas.
        nacional, se ve            cuando el “pueblo” impidió las eleccio
      claramente en el             nes presidenciales y llevó al poder a           Para algunos observadores de época,
       siguiente texto.            Guillermo Billinghurst. Luis Torrejón           especialmente los civilistas, no fueron
                                   ("Lima 1912: el caso de un motín popu            más que “manifestaciones callejeras de
                                   lar urbano". En: Panfichi y Portocarrero,     la ‘plebe’” envalentonada. Para otros, en
                                   eds. Mundos interiores [Lima: Universi        cambio, las heroicas Jornadas de Mayo
                                   dad del Pa     cí
                                                     fi
                                                       co, 1998]) y Ali  cia del        representaron la oposición de la volun
                                   Águila (Callejones y mansiones [Lima:          tad popular al continuismo encarnado
                                   PUCP, 1997]) se han avocado a recons              en el candidato leguiista y la opción por
                                   truir y analizar la coyuntura.                   el candidato de los pobres. Se trató, en
                                                                                         parte, de un grito desarticulado que
                                   Los clubes billinghuristas que salieron a      reclamaba ciudadanía, siempre dentro
                                   las calles –asociaciones de simpatizan        de los límites de una sociedad tradicio
                                   tes sin carácter permanente ni ideario          nal. En pa      la
                                                                                                            bras de Del Águi      la, “la
                                   sistematizado, compuestos en su mayo         coyuntura de 1912 significó la entrada a
                                   ría por obreros y artesanos– tomaron las        la escena política de la masa urbana. [...]
                                   mesas de sufragio y persiguieron a sus          Pero, como hemos dicho, no es que pro
                                   miembros, a los “soplones” (la policía           pusiera un sistema democrático alter
                                   leguiista) y a los simpatizantes del candi      nativo. Persistieron más bien las direc
                                   dato Aspíllaga. La ciudad se paralizó por     trices de la República Aristocrática:
                                   varios días. Se sucedieron los saqueos,          mezclar los ideales jerárquicos de
                                   las golpizas, las balaceras, el cierre de       nobleza con los democráticos moder
                                   negocios, el allanamiento de los más             nos, de tal forma que se constituya un
                                   célebres prostíbulos, los enfrentamien       estado nacional de ciudadanos, pero de
                                   tos con la policía, el miedo y la muerte.         diversa ‘calidad’” (pp. 185-86).
52   período 6   [ capítulo 32 ]
debe ser libre de toda coacción, libre de todo cohecho y venalidad, libre de la fuerza e intimida-
ción, debe ser la expresión espontánea, sin trabas ni cortapisas de la opinión de los ciudadanos”.
Terminó con el pedido de que la patria dejara de estar inquieta, atormentada e imponente y
volviese a recobrar la fe en sí misma y marchara hacia sus grandes destinos, por encima de las                LLEGADA LA
facciones apoderadas del Gobierno y en actitud de burla a la voluntad popular.                                fEChA DE LOS
    Ese mismo día fue entregado al presidente Leguía un memorial en el que se solicitaba la
nulidad de los actos del sufragio. A la misma demanda se sumaron los partidos civil indepen-                  COMICIOS, EL 25
diente, liberal y constitucional y una asamblea de universitarios.                                            DE MAYO, Y AL
                                                                                                              DÍA SIGUIENTE,
EL PARO GENERAL Y LA FRUSTRACIÓN DE LOS COMICIOS.- Llegada la fecha de los                                    LOS PARTIDARIOS
comicios, el 25 de mayo, y al día siguiente, los partidarios de Billinghurst organizaron un paro              DE bILLINGhURST
general en Lima, el primero que se conocía en la capital, y recorrieron las calles el día inicial de
las elecciones para romper las mesas y poner en fuga al personal de las comisiones receptoras                 ORGANIzARON
de sufragio. Tuvieron la tolerancia y quizá el oculto apoyo del Gobierno. En la noche hubo inci-              UN PARO
neraciones públicas de enseres de “soplones” y serenatas en casa de Billinghurst. Por vez primera
en el siglo XX el pueblo apareció como actor decisivo en la escena política. Fue la primera grave
                                                                                                              GENERAL EN
crisis de la República Aristocrática.                                                                         LIMA, EL PRIMERO
                                                                                                              qUE SE CONOCÍA
[ III ]                                                                                                       EN LA CAPITAL, Y
LA EVENTUALIDAD DE LA PRÓRROGA DE LEGUÍA.- Leguía, en realidad, en contra de lo                               RECORRIERON LAS
que muchos esperaban, no puso ni la influencia ni la fuerza del poder gubernamental al servicio               CALLES EL DÍA
de la candidatura Aspíllaga. Sin duda pensó en la prórroga de su mandato presidencial o, con un
eufemismo, en “la fijación de una nueva fecha para la trasmisión del mando”. Análoga maniobra                 INICIAL DE LAS
había utilizado poco antes para permanecer durante algún tiempo en el poder el presidente de                  ELECCIONES PARA
Bolivia Ismael Montes. “Dentro de ese año (de prórroga), afirmó el publicista Luis Ulloa en su libro
La situación política, traerá Leguía sus buques y sus sumergibles que sabemos son muchos, pre-
                                                                                                              ROMPER LAS
tenderá colocar sus empréstitos, firmará una segunda funesta alianza con Bolivia, buscará una                 MESAS Y PONER
aproximación, a espaldas del Ecuador, con el sanguinario tiranuelo Plaza; y, en fin, excitará con             EN fUGA AL
nuevos alfilerazos a Chile, sin intención seria, desde luego, de ir a la guerra pero con serio peligro
de encontrarla no queriéndola… Derroches en armamentos no utilizados, desvaríos y desplan-                    PERSONAL DE LAS
tes diplomáticos y acaso un guerra: he allí el programa de la prórroga presidencial de Leguía”. Así,          COMISIONES
con caracteres alarmantes y funestos, presentaban los adversarios del Presidente la perspectiva
de que urdiera su mantenimiento en el poder en una maniobra que resulta un vago conato de
                                                                                                              RECEPTORAS DE
la reelección llevada a cabo en 1924 y 1929; y en esa zozobra evidenciaron hasta qué punto lo                 SUfRAGIO.
consideraban hombre audaz, emprendedor, resuelto e inescrupuloso.
                                                                                                         [ CAPÍTULO 32 ] PERÍODO 6   53
     NICOLÁS DE                        presidente por ambas Cámaras). La prórroga del mandato significaba doble atropello por la dura-
     PIÉROLA (1839-1913)               ción perentoriamente señalada para él en la Carta y por la prohibición de la reelección que ella
                                       contenía. Tampoco resultaba, en su concepto, viable la fórmula de elegir un presidente proviso-
                                       rio. Quien sacara al país de la órbita constitucional no debía ser obedecido por el ejército. Frente
                                       a todas estas negativas, ofrecía una salida. Era la convocatoria a elecciones para el 24 y el 25 de
                                       agosto, o sea dentro del plazo de poco más de un mes. Piérola creía que tan estrecho término
                                       era suficiente para la campaña y para el acto del sufragio, seguro de que la voluntad popular
                                       podía superar las deficiencias de las juntas y los registros electorales. El nuevo Jefe del Estado
                                       debía inaugurar su administración el 24 de setiembre, que era la fecha señalada para que entre-
                                       gara el poder Leguía.
                                            Este manifiesto señaló el distanciamiento entre Piérola y Billinghurst con la pérdida de una
                                       nueva oportunidad, después en 1909, para que el Partido Demócrata lograra injerencia directiva
                                       en la vida política del país. No tuvo eco en la opinión pública, si bien contribuyó al desprestigio
                                       de la fórmula de la presidencia provisoria y de la prórroga.
 El ex presidente falleció
en la ciudad de Lima el 23             EL PROBLEMA ELECTORAL ANTE EL CONGRESO.- Aspíllaga se dirigió al Poder Legislativo
     de junio de 1913. Tras            para remitirle las actas de varias provincias cuyos escrutinios arrojaban un total de más de 60 mil
      dejar el gobierno en             votos a su favor. Al mismo tiempo llegaron a ambas Cámaras otras actas de diversos lugares de
          1899, se dedicó al           la República en las que les pedían que declarasen la nulidad del proceso y efectuaran la elección
     ejercicio profesional             de presidente y vicepresidente.
 particular en la empresa                   La comisión parlamentaria correspondiente tachó varias de las elecciones provinciales y afirmó
constructora La Colmena,               que los votos computables no llegaban a la tercera parte de los ciudadanos hábiles para sufragar.
       hasta 1909. Piérola                  Se calculaba que el país tenía entonces 143.766 electores. La mayoría leguiista en ambas
 estuvo siempre presente               Cámaras había resuelto, deslealmente, abandonar a Aspíllaga y abrir el camino a la candidatura
    durante los problemas              Billinghurst. Por ella trabajaban también los civilistas “bloquistas” o independientes y los liberales.
         coyunturales de la                 Si se ponían de lado las elecciones hechas fragmentariamente en el país, había tres fórmulas
 política peruana, ya que              para resolver el problema constitucional. Una era acudir al recurso de la prórroga del mandato del
             gozaba de gran            presidente Leguía, acusado de intentarla de modo subrepticio. El segundo punto de vista era el
    popularidad entre sus              de quienes sostenían que el Congreso debía elegir al presidente y vicepresidente en cumplimien-
 conciudadanos. Además,                to del artículo constitucional que otorgaba esa atribución al Poder Legislativo cuando no hubie-
   se mantuvo a la cabeza              ran elegidos según la ley y dentro de la teoría de que esa facultad tenía carácter absoluto. Aducían
  del Partido Demócrata,               quienes así pensaban que las manifestaciones populares eran una prueba abrumadora de la
   que él mismo fundó en               existencia de una mayoría nacional a favor de Billinghurst, ante la cual el Congreso debía ser res-
        1882. Sus funerales            petuoso. Por el contrario, otros opinaban que la única manera de solucionar el problema era ape-
            reunieron a una            lar, una vez más, al sufragio popular por medio de nuevos comicios. Para esto sostenían que el
  multitud de partidarios              artículo mencionado por sus adversarios no tenía carácter amplio y hallábase restringido por otros
                 y personas            dispositivos de la Carta; es decir, su tesis era, dentro de la letra de ella, que la facultad del Congre-
               de diferentes           so para elegir solo funcionaba cuando, del escrutinio general de los votos populares, resultara que
       bancadas políticas.             ninguno de los candidatos había alcanzado la mayoría absoluta, para limitarse entonces a escoger
                                       entre los dos que hubiesen obtenido la mayoría relativa en las urnas. Así, pues, según este criterio,
                                       la designación del Congreso suponía, en todo caso, el previo sufragio popular y tenía carácter
                                       supletorio y limitado al modo y forma específicamente señalados en el texto constitucional.
    54   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 32 ]
[1]                                                             [2]
[3]
LA CANDIDATURA DE ASPÍLLAGA. El Partido Civil, lanzó en 1911 la candidatura presidencial de Ántero Aspíllaga. Entre las
actividades de promoción al candidato estuvo la manifestación política realizada el domingo 19 de mayo de 1912, que
aparece aquí anunciada en el diario El Comercio (2). Ese mismo día, se realizó también la de su opositor, Guillermo
Billinghurst. Aquí vemos a partidarios de Aspíllaga frente al Instituto de Vacuna (3), el día de la convocatoria. Esta, sin
embargo, no le fue favorable. Una portada de la revista Variedades (1) caricaturiza el resultado de las manifestaciones
de apoyo a Aspíllaga (a la izquierda) y a Billinghurst (a la derecha).
                                                                                                    [ CAPÍTULO 32 ] PERÍODO 6   55
   MIGUEL ECHENIQUE                       Entre los pocos fundamentos de votos adversos al acuerdo adoptado merece referencia
   (1863-¿?)                          especial el del representante Juan Manuel Peña y Costas. “Estoy plenamente convencido (afirmó
                                      Peña y Costas) que las elecciones que han favorecido a Aspíllaga con más de 60 mil votos en un
                                      total de 140 y tantos mil electores son tan legales como las que han favorecido a los últimos
                                      presidentes y que han sido aprobadas por el Congreso; habiéndose efectuado con el mismo
                                      mecanismo electoral y las mismas juntas y registros. En idéntica condición están las elecciones
                                      que han favorecido a todos los H. H. senadores y diputados aquí presentes; y al anular las últimas
                                      elecciones presidenciales lógicamente deberíamos también considerar nulos nuestros manda-
                                      tos”. Denunció también Peña y Costas que los miembros de las comisiones de cómputo se
                                      habían puesto de acuerdo sobre la nulidad antes de examinar un solo pedazo de papel de las
                                      elecciones, sin tiempo para el examen de las actas. Se declaró, además, sorprendido de que el
                                      número de votos mermados fuera el preciso para que los sufragios no alcanzaran sino a un poco
                                      menos del tercio necesario para anularlos. “Más franco y más correcto (agregó) habría sido decla-
                                      rar simple y llanamente que estas últimas elecciones no convenían y proceder a anularlas”.
                                          El mismo día el Congreso eligió presidente de la República a Guillermo Billinghurst por 132
 El político limeño, aquí             votos contra 30. No pudo luego resolver en problema de las vicepresidencias por no haberse
     en una fotografía de             producido mayoría. Pero en la sesión siguiente llegó a ser designado primer vicepresidente
     1912, fue elegido ese            Roberto Leguía, hermano del Jefe del Estado. Así resultó este premunido de un importante divi-
       año como segundo               dendo político con el acuerdo adoptado para el triunfo parlamentario de Billinghurst. El número
        vicepresidente de             de votos obtenido por Roberto Leguía llegó a 94 contra 59 por Lizardo Alzamora, 4 en blanco y
  Guillermo Billinghurst.             2 dispersos y reveló el gran volumen de la mayoría leguiista en el Congreso. Para la segunda
            Echenique, que            vicepresidencia fue elegido Miguel Echenique, perteneciente a la misma filiación política. De
    pertenecía al Partido             Echenique se dijo que había votado contra Billinghurst. Los dos vicepresidentes no llegaron nun-
    Civil desde principios            ca a jurar sus cargos, pues (seguramente por maniobras que inspiraron personas allegadas al
       del siglo XX, había            Presidente) se frustraron las sesiones dedicadas a esa ceremonia.
     ocupado el cargo de                  En resumen, el candidato auspiciado por la simpatía popular fue ungido, al margen de la
 senador suplente por el              Constitución, por un Parlamento de origen discutible pues, en su mayoría, era fruto del acto de
   departamento de Lima               fuerza efectuado en Lima en 1911 y no de procesos democráticos. Esta vez en que el pueblo no
     entre 1907 y 1912. Su            votó, fue elegido irregularmente un candidato popular, en contraste con otras ocasiones en que
  principal actividad, sin            el sufragio ungió, en apariencia, a figuras impopulares o indiferentes.
           embargo, fue la                El Congreso había nombrado presidente de la República anteriormente solo en pocas opor-
       agricultura. Poseía            tunidades. Como mandatarios en propiedad fueron elegidos Riva-Agüero en 1823, Tagle ese
       diversas haciendas             mismo año y La Mar en 1827. Como provisorios: Tagle en 1823, La Fuente en 1829, Orbegoso en
        azucareras que le             1833, Gamarra en 1839, Castilla en 1855, Prado en 1867. El caso de la elección también parlamen-
          rendían grandes             taria de García Calderón en 1881 fue excepcional por haberse realizado cuando se había produ-
  beneficios económicos,              cido la ocupación chilena. Pero la facultad concedida a ambas Cámaras para calificar las actas
            y más adelante            electorales las habían convertido, consuetudinariamente, en árbitro para decidir en última ins-
expandió sus intereses a              tancia acerca de quién debía ser el llamado a la jefatura del Estado y, en algunas ocasiones, como
             actividades de           en 1862 y en 1872, quiénes debían ocupar las vicepresidencias. En 1890 surgieron dudas sobre
           tipo financiero.           la sucesión presidencial por haber sido muy estrecho el margen de la votación obtenida por el
                                      coronel Remigio Morales Bermúdez y Francisco Rosas, el primero apoyado por la mayoría de la
                                      Cámara de Diputados y el segundo por la del Senado; pero, ante elocuentes pruebas acerca de
                                      la actitud del ejército, la decisión parlamentaria se inclinó hacia el primero de esos candidatos.
                                      [ IV ]
                                      BILLINGHURST.- Guillermo E. Billinghurst tenía una larga y agitada trayectoria. Nació en Arica
                                      el 27 de julio de 1851, es decir había pasado de los sesenta años en 1912. Su abuelo fue el patrio-
                                      ta inglés Roberto Billinghurst a quien el Gobierno de las Provincias Unidas del Río de la Plata dio
   56   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 32 ]
la primera ciudadanía argentina por sus servicios a la independencia y llegó a ser diputado unio-                  LA ELECCIÓN DE LOS
nista contra Rosas, para ser recordado hoy en una calle de Buenos Aires que lleva su nombre. El                    VICEPRESIDENTES
padre de Guillermo Billinghurst murió ahogado en Arica en 1868, a causa del maremoto.
     Inició este personaje sus estudios en Lima y los completó en Chile, con una educación de tipo             En 1912, tras la
británico. Se dedicó luego al comercio en las provincias de Tacna y de Arica y a la industria mine-            designación presidencial
ra en Tarapacá. Junto con su entrañable amigo Alfonso Ugarte, tuvo una juventud borrascosa.                    de Guillermo
Acompañó a Piérola en la expedición del Talismán, en la revuelta del Yacango y en la aventura del              Billinghurst, el Congreso
Huáscar en 1877; pocas veces se ha visto en el Perú una lealtad igual en la rebeldía tenaz y en el             de la República nombró
fracaso invariable. En 1878 fue elegido diputado por Tarapacá. Cuando Manuel Pardo fue asesina-                al primer y segundo
do, se creyó generalmente que al crimen seguiría una revuelta y, para facilitar al Gobierno los                vicepresidentes. El
medios de conjurarla, fue presentada en el Congreso una moción para declarar a “la Patria en                   resultado final de la
peligro” y suspender las garantías constitucionales. La proposición quedó sancionada casi por                  votación para la
unanimidad, pues solo tres representantes osaron votar en contra; uno de ellos fue Billinghurst.               elección del primer
     Durante la guerra con Chile obtuvo el título de coronel temporario y después el de jefe del               vicepresidente fue la
Estado Mayor del Ejército del Norte. Hizo, además una arriesgada visita al interior de Bolivia para            siguiente:
estudiar la posibilidad de una ofensiva sobre el territorio chileno, que consideró practicable. Estu-
vo entre los defensores heroicos del Morro Solar, después de la batalla de San Juan. Prisionero,
llegó a ser enviado a Chile.                                                                                   CANDIDATO        N0 DE VOTOS
     Después de firmada la paz, sirvió el puesto de cónsul del Perú en Iquique. Su padre había                 Roberto Leguía       94
muerto como socio de la casa Campbel Outran sin que fueran luego reclamados sus derechos.                      Lizardo Alzamora     59
Hacia 1887, era esta una entidad millonaria y Guillermo Billinghurst inició un pleito que llegó                En blanco             4
hasta los tribunales de Santiago y fue luego objeto de una transacción en 1889. Cada uno de los                Dispersos             2
tres hermanos Billinghurst, Guillermo, Roberto y Celia, recibió unas 20 mil libras esterlinas y 7 mil
correspondieron a su abogado Carlos Walker Martínez. Más tarde Guillermo heredó a sus dos
hermanos. Asimismo, ayudaron a darle una holgada posición económica el producto de la ven-
ta de las aguas de Pica a la compañía de agua potable de Iquique y las acciones de varias salitre-
ras, así como otros negocios.
     Militó también Billinghurst en el periodismo y lo fomentó. Cooperó en 1882 a la fundación
del diario de Iquique La Industria que redactó el escritor colombiano Justiniano de Zubiría. En
1888 fue fundador y director del Ateneo de aquel puerto. Escribió varias obras de interés local
como Estudio sobre la geografía de Tarapacá (Santiago, 1886), Abastecimiento de agua potable
para el puerto de Iquique (Lima, 1887), Condición legal de los peruanos nacidos en Tarapacá (San-
tiago, 1887), Los capitales salitreros de Tarapacá (Santiago, 1889), La irrigación en Tarapacá (Santia-
go, 1893), Legislación sobre salitre y bórax en Tarapacá (Santiago, 1903). Por esa época redactó
también una Historia de la provincia de Tarapacá con datos muy valiosos y que nunca llegó a ser
editada. Ya antes de la guerra con Chile había publicado Rápida ojeada sobre la cuestión salitre
(Valparaíso, 1875) y Compendio de la legislación municipal del Perú 1873-1877 (Iquique, 1878) y,
durante aquella contienda, Alfonso Ugarte, corona fúnebre (Lima, 1880) y Reconocimiento militar
del río Desaguadero y de la altiplanicie andina (Lima, 1880).
     Con su aporte político y económico contribuyó a la victoria de la revolución de 1894-1895.
Vicepresidente de la República y senador, promovió la colonización del departamento de Loreto
con el fin de establecer una corriente mercantil hacia el Atlántico. Recorrió y estudió personal-
mente la región de la Amazonía para obtener un concepto objetivo acerca de su potencial. En
1898, firmó el protocolo para el plebiscito de Tacna y Arica. Pagó de su peculio todos los gastos
ocasionados por la misión que entonces presidió en Santiago; del mismo modo, nunca cobró el
dinero por él entregado a la causa revolucionaria de 1894-1895. En 1898, su candidatura presi-
dencial ahuyentó el apoyo de Piérola y del Partido Demócrata cuando lanzó enconados ataques
al Partido Civil y, en diversas oportunidades, habló con acrimonia y desdén contra el jefe de esta
agrupación Manuel Candamo.
                                                                                                          [ CAPÍTULO 32 ] PERÍODO 6   57
                                            En 1899 tuvo Billinghurst concomitancias con la aventura subversiva de Augusto Durand.
                                       Retirado de la política, volvió a ella ostensiblemente para reconciliarse con Piérola en 1904 en el
    [ 1912 setIembre 24 ]              afán de luchar contra el civilismo pardista. Partidario de la tendencia hacia la conciliación que
                                       propiciaba “ubicaciones” para las candidaturas de senadores y diputados tanto demócratas como
EL NUEVO MANDATARIO.                   civilistas en 1909, se alejó otra vez de su viejo jefe cuando este la desautorizó puritanamente. Fue
       En la edición de la             progresista alcalde de Lima en 1909 y 1910, elegido en reemplazo de Ántero Aspíllaga que
            tarde del 24 de            renunció. Su obra en este cargo que se prolongó hasta fines de 1910 cuando lo reemplazó el
    setiembre de 1912, el              teniente alcalde Nicanor Carmona fue múltiple. Como antes a Manuel Pardo, ayudó a su ulterior
       diario El Comercio              candidatura presidencial. Ordenó la incineración de los barracones inmundos que servían como
          informó sobre el             hospital de variolosos y que constituían un peligro de infección en los barrios de Maravillas y el
        cambio de mando                Prado, y erigió un parque en aquella zona. Hizo demoler el viejo y sucio callejón de Otaiza, “anti-
     presidencial. Tras el             higiénico edificio, especie de ciudad china donde todos los vicios tenían su asiento” y abrió una
        juramento de ley,              calle limpia y ventilada entre Rectora y el Capón para dar comunicación a dos populares barrios
  Billinghurst dijo: “Con              y facilitar el tráfico hacia el mercado de la Concepción. Instaló puestos de venta de carne a pre-
 noción perfecta de mis                cios al alcance de los pobres en diversos barrios de la capital; y, en los altos del mercado central,
   deberes cívicos, tenía              habilitó varios locales para el expendio de raciones formadas por diversos víveres en proporcio-
       perfectamente que               nes convenientes y a precios cómodos. Persiguió a los vendedores que defraudaban a sus clien-
 respetar la voluntad de               tes en el peso de sus artículos. Tuvo la iniciativa de los juegos florales de 1909, realizados por
        la nación y no he              primera vez en Lima. Hizo innovaciones en las obras de agua potable e inauguró las de Magda-
   trepidado un instante               lena del Mar. Adquirió un coche eléctrico regador de calles y una máquina para la pavimenta-
            en obedecerla.             ción. Pavimentó las avenidas que conducen al Cementerio y varias calles. Consolidó la deuda
      Peruano, antes que               municipal y pagó los déficits de ella. Inauguró el tranvía eléctrico a La Victoria. Realizó en las
  todo, he procedido de                Fiesta Patrias de 1910 un sorteo de casas para obreros. Dejó abierto el Polígono Municipal de tiro
           acuerdo con los             de San Jerónimo. Inauguró el monumento a Antonio Raimondi en la nueva Plaza Italia en agos-
             dictados de mi            to de 1910. Esta fue una obra del escultor milanés Tancredi Pozzi.
           conciencia y las                 Al margen del gobierno de Leguía, aunque en buenos términos con este hombre público,
   inspiraciones del más               alejado también de la beligerante oposición civilista y del pierolismo, Billinghurst apareció en
 puro patriotismo; y así,              1912 a la cabeza de un vasto movimiento que implicaba, como en los días de 1872 y de la inicia-
               al prestar mi           ción de Manuel Pardo como jefe de partido, así como en los días de 1894, la franca revuelta del
   juramento, dominado                 “país popular” contra el “país legal” que no había llegado a madurar ni en 1899, ni en 1903, ni en
  tan solo por el interés              1904, ni en 1908.
        de la república, y                  A pesar de su actuación heroica en la guerra con Chile y de su permanente inquietud como
contrario, como soy, en                ciudadano y como patriota, tenía algo de extranjero para la clase dirigente limeña. Representa-
         lo absoluto, a los            ba una fortuna que acababa de incrementarse y no estaba basada como la de los grandes
      antiguos y gastados              señores de la vida peruana de entonces, en la agricultura de exportación de la costa ni en la
 métodos, he prometido                 renta de bienes inmuebles urbanos, sino en la provincia de Tarapacá. Conocía muy bien acon-
              y he de serlo,           tecimientos como los ocurridos en Iquique en 1907, cuando se produjo una huelga en la que
     honorables señores,               participaron no menos de diez mil trabajadores para solicitar el pago de jornales, al tipo de
completamente extraño                  cambio de 18 peniques, el comercio libre que debía de evitar el abuso de las llamadas pulperías
          a las sugestiones            y medidas de seguridad en las peligrosas labores a que estaban dedicados; y cuando el general
      partidaristas y á las            Silva Renard ordenó una matanza en gran escala. Para el pueblo no fue solo, como para los
  influencias de círculo,              teóricos liberales del siglo XIX, el individuo premunido de sus derechos ni como, para Piérola,
      por seductoras que               estuvo integrado por los vastos sectores de la ciudadanía ignorados electoralmente por las oli-
                ellas sean”.           garquías. Al espíritu cívico del Partido Demócrata peruano juntó algo del sentido social del
                                       Partido Demócrata chileno, fundado en 1887, dentro de un proceso que fue sincrónico con la
                                       multiplicación de las sociedades de artesanos. Sin renegar de su condición de hombre acauda-
                                       lado y sin acercarse ni siquiera remotamente a la doctrina socialista, mostró interés, preocupa-
                                       ción, solicitud hacia los pobres. Podría considerársele como un precursor del capitalismo “ilus-
                                       trado” demagógico.
    58   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 32 ]
[1]                                                 [2]
[3]
      EL CANDIDATO BILLINGHURST. Por su parte, el Partido Civil Independiente, ala separada del Partido Civil, lanzó la
      candidatura de Guillermo Billinghurst a la presidencia. En el aviso publicado en el diario El Comercio del 18 de mayo de
      1912 se hace un llamado a la manifestación del día siguiente (1). El candidato opositor, Ántero Aspíllaga, también realizó
      un acto político ese día. Aquí vemos una imagen de la Alameda de los Descalzos, donde se congregaron más de 15 mil
      partidarios de Billinghurst (2). El día de las elecciones, sus simpatizantes salieron a las calles e impidieron los comicios,
      como se ve en esta fotografía de la época (3).
                                                                                                            [ CAPÍTULO 32 ] PERÍODO 6   59
   FRANCISCO                              Hubo la versión de que, siendo presidente, su lenguaje fue, a veces, campechano y mordaz,
   MOREYRA Y RIGLOS                   con palabras malsonantes cuando estaba de mal humor o quería expresar su descontento.
   (1856-1942)
                                      Cuéntase, por ejemplo, que ante un grupo de importantes personajes de la vida limeña explica-
                                      ba, como Jefe del Estado, las características y las proyecciones de la unión de La Punta y de la isla
                                      de San Lorenzo y uno de los presentes exclamó: “Es tan importante esta obra que, cuando ella
                                      concluya, habrá que bautizar de nuevo a la isla y llamarla Billinghurst”. Don Guillermo (como se
                                      decía entonces) siguió en su charla con diversos planos e informes en la mano y, al cabo de unos
                                      minutos, se interrumpió para exclamar: –¿Y quién fue ese “huevón” que habló de cambiar el
                                      nombre de la isla?(1).
                                          Sin embargo, poseyó una cultura seria y variada, a pesar de no haber conocido las aulas uni-
                                      versitarias. Su biblioteca fue una de las más ricas entre las de los personajes de aquella época.
                                      Publicaciones suyas como las que dedicó a la historia del salitre o a la condición de los peruanos
                                      nacidos en Tarapacá pueden leerse aún ahora con provecho. Había efectuado traducciones
                                      directas de algunos pasajes de diversas obras de Shakespeare, descontento con los textos en
                                      español que conoció y sin ánimo de publicarlas.
 En setiembre de 1912, el
  político limeño integró             LA INAUGURACIÓN DEL GOBIERNO DE BILLINGHURST. EL GABINETE MALPARTI-
   el primer gabinete del             DA.- El nuevo presidente asumió sus funciones el 24 de setiembre de 1912. En la sesión de
    presidente Guillermo              Congreso en que prestó juramento, entre denuestos al Jefe del Estado saliente, hubo fer voroso
       Billinghurst, con el           entusiasmo y se cantó con júbilo el himno nacional. Pero la nueva administración no alcanzó a
     cargo de ministro de             durar dos años.
   Justicia e Instrucción.                El primer Gabinete de Billinghurst fue el siguiente: Elías Malpartida, presidente del Consejo y
   Tres meses después de              ministro de Gobierno; Wenceslao Valera (Relaciones Exteriores), Baldomero F. Maldonado (Hacien-
        su nombramiento,              da), el general Enrique Varela (Guerra y Marina), Francisco Moreyra y Riglos (Justicia e Instrucción)
 ocurrió una grave crisis             y Fermín Málaga Santolalla (Fomento). Aunque hubo en este Gabinete relación entre el Ejecutivo
  ministerial, tras la cual           y el Parlamento y uno de sus miembros, Valera, había tenido destacada actuación en la alianza
renunció la mayor parte               Civil Independiente-Liberal-Constitucional, no constituyó un equipo político sino administrativo.
  del gabinete. Moreyra,
               sin embargo,
            permaneció en             EL PROGRAMA DE BILLINGHURST.- Después de jurar la presidencia, Billinghurst dio lectura
           su cartera hasta           a su programa. Anunció el gobierno del pueblo por el pueblo y para el pueblo. Prometió que
              junio de 1913.          haría un régimen nacional, extraño a las sugerencias partidaristas y al influjo de los círculos, y se
                                      declaró contrario en lo absoluto a los antiguos y gastados métodos. Hizo el elogio de la paz, del
                                      orden y de las instituciones. Defendió la prosecución de las obras públicas iniciadas para no mal-
                                      gastar caudales y energías. Habló de una política de paz, de decoro y de justicia en el orden
                                      internacional. Reiteró su promesa electoral de propiciar una ley que diera garantías al sufragio y
                                      lo hiciese auténtico, dentro de un mecanismo simple con fiscalización del voto, del escrutinio y
                                      de las comisiones relacionadas con ellos y con injerencia de los partidos y los interesados. Dedicó
                                      un rápido acápite a la lucha contra la desocupación, al impulso de la inmigración europea, a la
                                      necesidad de extender o ampliar la ley de accidentes de trabajo, al desarrollo de la instrucción, la
                                      irrigación y la construcción de casas para obreros, a la reforma de los institutos armados y al
                                      mejoramiento, ensanche, seguridad y servicio de los puertos. Insistió, a continuación, en la
                                      importancia del Presupuesto de la República “gran rueda que dirige el funcionamiento regular y
                                      metódico de toda la maquinaria administrativa”. Más adelante puso énfasis especial en el “manejo
                                      honrado de los caudales públicos, el control y la publicidad de los ingresos y egresos fiscales a fin
(1) Anécdota narrada por Lauro A. Curletti, testigo de la escena, a Guillermo Hoyos Osores y transmitida oralmente por este.
   60   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 32 ]
de que en ningún caso deje de establecerse la respectiva constancia del dinero que satisfacen
los contribuyentes ya entre o salga de las arcas fiscales, así como la regularidad de su recaudación
y del empleo a que se le destina, operaciones que requieren ser comprobadas por administra-
ciones responsables; debiendo ejecutarse la verificación de todos estos procedimientos en la                DESPUéS DE
forma y época que la ley señale por magistrados expertos, severos y de notoria probidad”.                   JURAR LA
    “Las cuestiones hacendarias, que son la piedra angular de los grandes progresos económicos
y administrativos, serán objeto de la predilecta atención de mi Gobierno”, siguió diciendo. Al              PRESIDENCIA,
restablecimiento del crédito consagró tres de sus últimos párrafos. En el último, antes de las invo-        bILLINGhURST
caciones finales, llegó a afirmar, repitiendo conceptos de Piérola: “Equilibrar el Presupuesto de la
República, estudiar los gastos y autorizarlos con juicio y previsión, calcular con exactitud los
                                                                                                            DIO LECTURA A SU
ingresos, cubrir los desembolsos extraordinarios con las entradas extraordinarias, satisfacer los           PROGRAMA.
egresos ordinarios con los ingresos ordinarios y normales, he ahí el ideal hacendario que debe-             ANUNCIÓ EL
mos perseguir de modo invariable para labrar efectivamente la prosperidad, la ventura y el
engrandecimiento del país”.                                                                                 GObIERNO DEL
    Parecía anunciarse, según este mensaje, de acuerdo con una frase de Manuel Pardo, estadista             PUEbLO POR EL
a quien Billinghurst había combatido implacablemente, una “República práctica”. Los problemas
hacendarios iban, según lo prometido, a absorber buena parte de la atención del nuevo manda-
                                                                                                            PUEbLO Y PARA
tario. Una política internacional pacifista y la promoción de obras públicas debían acompañarla.            EL PUEbLO.
En el campo social se anunciaba la lucha contra la desocupación, la ampliación de la legislación            PROMETIÓ qUE
de accidentes de trabajo, las casas para obreros y el cariño al pueblo. Dentro del plano político,
surgían el compromiso de dar autenticidad y limpieza al sufragio y el de hacer un Gobierno de
                                                                                                            hARÍA UN
concordia y de unión. Dícese que entonces expresó privadamente Billinghurst su anhelo de                    RéGIMEN
desempeñar ante los partidos el papel que había cumplido en Inglaterra la reina Victoria.                   NACIONAL,
                                                                                                            ExTRAñO A LAS
                                                                                                            SUGERENCIAS
                                                                                                            PARTIDARISTAS Y
                                                                                                            AL INfLUJO DE
                                                                                                            LOS CÍRCULOS,
                                                                                                            Y SE DECLARÓ
                                                                                                            CONTRARIO EN LO
                                                                                                            AbSOLUTO A LOS
                                                                                                            ANTIGUOS Y
                                                                                                            GASTADOS
                                                                                                            MéTODOS.
                                                                                                       [ CAPÍTULO 32 ] PERÍODO 6   61
[ tomo 13 ]
capítulo 33 ● I La dimisión del Gabinete          peruano-chilena ● Las cuestiones con Co          el guano ●  La supuesta existencia de sali
Malpartida. El cese del Congreso extraor       lombia y el Ecuador ● El arbitraje sobre las      tre en Arequipa ● Iniciativas del gobierno
dinario ● El Gabinete Varela ● El Gabinete   reclamaciones francesas ●  IV El estableci    de Billinghurst sobre el borato de cal y el
Luna y Peralta ● El Gabinete Sousa ● Fa        miento de la jornada de ocho horas para            carbón ●  La unión de La Punta con San
llecimiento de Piérola ● El atentado en la      los trabajadores portuarios ● El primer de      Lorenzo y el proyecto sobre Matarani ● La
casa del presidente del Senado, el asalto          creto sobre reglamentación de las huelgas        ruta Huánuco-Pucallpa ● Los basurales del
a la del ex presidente Leguía y la prisión           ●  La sección obrera, base de la inspección        Tajamar, la Dirección de Salubridad y la
de este. Dimisión del Gabinete Sousa ● El       general del trabajo ●  La reglamentación        Asistencia Pública ●  El ferrocarril a Chilca
segundo Gabinete Varela ● El atentado en      de la ley sobre accidentes del trabajo ● La       ●  La ley de co lonización e irrigación de la
la imprenta de La Crónica ● El personal del      represión del Callao ● Las huelgas de 1913          costa El fomento de la arboricultura frutal
                                                                                                                       ●
Concejo Provincial de Lima y los incidentes ● Casas para obreros ● La escuela de ense ● La difusión de la higienización y del agua
de setiembre de 1913 ● II La ley electoral         ñanza doméstica ● El fomento de la exten        potable ● La expropiación de los derechos
de 1912. En qué se diferenció su texto del         sión cultural entre el pueblo ● El decreto        de la Empresa de Agua de Lima ●  VII Los
proyecto original ● La Corte Suprema y los      para reglamentar el arrendamiento de las         mensajes de Billinghurst al Congreso. La
procesos electorales de 1913 ● Los resulta     fincas de la Beneficencia ● Billinghurst y los   condenación de la historia hacendaria de
dos de la reforma de 1912 ● III La negocia        indios. Las matanzas de Chucuito y Azán           la República y la denuncia del anómalo
ción Hunneus-Valera ● El mensaje secreto        garo ●  El informe Villena sobre los atrope     crecimiento presupuestal ●  El Presupues
de Billinghurst el 30 de noviembre de 1912         llos a los indios en la provincia de Lampa          to para 1913 ● La Compañía Recaudadora
● La oposición contra la negociación Hun        ●  V Las ideas de Bi   llinghurst sobre la edu      de Impuestos ● Los empréstitos de Billing
neus-Valera ●  Las interpelaciones al minis   cación primaria y el decreto sobre la en         hurst ● VIII “El Porvenir” compañía de segu
tro de Guerra y la política armamentista       señanza religiosa ● VI El departamento de      ros de vida ● El cultivo del té ● IX Los vuelos
●  El ambiente de confraternidad popular       Madre de Dios ●  El informe Forbes sobre           de Ramón Montero ● Otros vuelos.
                      LA ADMINISTRACIÓN DE BILLINGHURST (I).
Los gabinetes, la ley electoral, asuntos internacionales, sociales,
  educacionales, económicos y hacendarios. La aviación en 1913
                      CAPÍTULO
                                  33
                                 [ ]
     L
                                   [I]
                                   A DIMISIÓN DEL GABINETE MALPARTIDA. EL CESE DEL CONGRESO EXTRAORDINA-
                                   RIO.- El Gabinete Malpartida, con el que se inauguró la administración Billinghurst, tuvo muy
                                   corta duración. Se publicaba entonces en Lima un periódico satírico llamado El Mosquito, cuyo
                                   director era un hombre venenoso e ingenioso, Florentino Alcorta. Este periódico atacaba al
                                   Gobierno y defendía a Leguía. La imprenta Berrio donde se editaba fue asaltada y destruida
                                   impunemente en la tarde del 19 de diciembre de 1912 por turbas de elementos populares adic-
                                   tos al Presidente, entre las cuales, según se dijo, se encontraban miembros del personal de la
                                   Dirección de Salubridad. También fue asaltado el domicilio de Alcorta. El Senado envió un oficio
                                   al ministro de Gobierno, que era el jefe el Gabinete, sobre este asunto, con una interpelación de
                                   Joaquín Capelo; pero no obtuvo respuesta inmediata. A la extrañeza por esta tardanza de un día
                                   sucedió un voto de censura que la mayoría leguiista sancionó (23 de diciembre de 1912). En la
                                   Cámara de Diputados Rafael Grau dio a conocer, en esa misma fecha, el voto que acababa de
                                   aprobar la colegisladora para expresar que se había adelantado a su propia moción. Su actitud
                                   desafiante al Gobierno dio lugar a las ruidosas protestas de la barra.
                                       Tanto El Comercio como La Prensa expresaron su desacuerdo con la maniobra de los senado-
                                   res leguiistas.
                                       Como represalia por este voto precipitado, el Presidente de la República tuvo el gesto incon-
                                   sulto de retirar los proyectos que había envido a la legislatura extraordinaria: eran ellos un tratado
                                   comercial con Alemania, el proyecto de ley sobre el ferrocarril a Chilca y un empréstito. Cesaron,
                                   por lo tanto, las labores parlamentarias. El Congreso no asumió actitud alguna ante la afrenta que
                                   acababa de sufrir.
                                   EL GABINETE VARELA.- A raíz de la crisis entonces suscitada los ministros, general Enrique
                                   Varela, Wenceslao Valera, Francisco Moreyra y Riglos, Baldomero Maldonado y Fermín Málaga
                                   Santolalla permanecieron en sus carteras. En reemplazo de Malpartida, Abel I. Montes fue desig-
                                   nado ministro de Gobierno.
                                       El presidente del nuevo Gabinete fue el general Varela. Estos nombramientos se produjeron
                                   el 24 de diciembre 1912.
64   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 33 ]
funcionaros de la administración pública. Si bien se dijo que entre los seis consejeros del Presi-                  AURELIO SOUSA
dente había quien tenía filiación liberal, leguiista o billinghurista moderadas, la voluntad del                    (1860-1925)
Presidente aparecía como la fuerza dominante en el régimen.
EL GABINETE SOUSA.- Bajo el Gabinete Luna y Peralta se efectuaron las elecciones del nuevo
tercio parlamentario. Anulados varios procesos por la Corte Suprema, los votos netamente
billinghuristas en el Congreso no pudieron ser aumentados de modo considerable. El 17 de
junio de 1913 el Presidente decidió imprimir un nuevo rumbo político a su gestión y designó
para presidir el Gabinete, en vísperas de la apertura de las Cámaras, a un prominente miembro
del Partido Demócrata, Aurelio Sousa, aunque sin contar con la aprobación del jefe de este par-
tido, Nicolás de Piérola. Acompañaron a Sousa congresales de diversos sectores: Francisco Tude-
la y Varela (Relaciones Exteriores), Alfredo Solf y Muro (Justicia e Instrucción), José Balta (Hacien-
da) y Víctor Castro Iglesias (Fomento). La cartera de Guerra fue asumida por el contralmirante
Melitón Car vajal. Tudela había pertenecido al “bloque” y al Partido Civil Independiente, Solf y
Muro figuró durante la administración de Leguía dentro del llamado “bloque chico”, o sea el                   El abogado cajamarquino
sector de la mayoría gobiernista que a veces votaba con la oposición, y Balta era un miembro                  inició su carrera política
prominente del Partido Liberal.                                                                               en 1886, como diputado
     Esta combinación ministerial fue favorablemente acogida por El Comercio y por La Prensa.                 suplente por su tierra
                                                                                                              natal. Tres años más
                                                                                                              tarde, fue designado
FALLECIMIENTO DE PIÉROLA.- Después de haber sido el primer ciudadano del Perú, Piéro-                         titular del cargo, hasta
la había conocido catorce años de contrariedades. Su biografía íntegra fue de 1899 a 1913 tan                 1899. Luego fue
triste como altiva. Mientras más se adentró en la vejez, más golpes de la vida recibió. Los hom-              acreditado como
bres no nos buscan sino cuando nos temen o cuando tienen algo que pedirnos; y él, sobre todo,                 ministro plenipotenciario
al surgir la avasalladora popularidad de Billinghurst y el triunfal ascenso al poder de este antiguo          en el Ecuador. De vuelta
adepto suyo, pudo sentir quizás a veces que hallábase sumergido en el olvido, helado infierno                 en Lima, en 1902,
para los que aman la gloria.                                                                                  representó a la provincia
     A mediados de junio de 1913 se divulgó la noticia de la enfermedad de Piérola y de la grave-             de Bongará en la cámara
dad que ella revestía. Al domicilio del paciente acudieron miles de personas de toda condición                de diputados (1902-1912),
social, entre las que estuvieron el presidente Billinghurst y (en un gesto que fue muy celebrado)             luego fue elegido alcalde
el ex presidente Leguía. Piérola entró en la etapa de la agonía en la madrugada del 23 de junio.              de Barranco y senador
Sus últimas palabras fueron: “Ya es en vano”. La multitud acudió contrita a la modesta casa de la             por Cajamarca. Durante
calle Milagro, como otras veces se había agolpado jubilosamente ante ella para escuchar su pala-              el gobierno de
bra y aclamarlo. El fallecimiento se produjo en la noche de ese mismo día.                                    Billinghurst, fue ministro
     Muerto, el rostro del viejo caudillo parecía un campo de batalla cubierto de ideas vencidas;             de Gobierno y presidente
toda idea que desde hacía más de medio siglo agitara el océano del espíritu nacional, había mar-              del Consejo de Ministros
cado sus surcos en aquella faz, y estos surcos se ahondaron al convertirse en un estoico él, que              (1913),y tras su
había sido en su mocedad un sibarita. Este hombre para el que tantos tuvieron innumerables                    derrocamiento,
veces mofa y dicterios, era objeto de íntima veneración en el pueblo; como si se transformara en              presidente del consejo
capilla una taberna, y se orase unciosamente en el mismo sitio donde otros blasfemaron, o                     de Ministros y ministro
hablaron de delitos o de negocios sucios, o pidieron vino y dados.                                            de Justicia e Instrucción.
     El 26 de junio tuvo lugar el sepelio. Hubo en él muchos rostros férvidos que con esfuerzo
reprimían las lágrimas, caídos a las manos los sombreros. Este acompañamiento de la muche-
dumbre a Piérola en su último desfile, confundidas gentes de trajes raídos y de ropa buena, sin
distinción de razas, nivel educacional, profesión, procedencia o edad, por mucho tiempo no
debe ser olvidado e históricamente aparece como un póstumo manto de protección para el
nombre, el recuerdo y el honor del caudillo demócrata contra la injuria, la difamación o el silencio
de los intereses y de las pasiones que lo siguen combatiendo o negando después de muerto.
                                                                                                         [ CAPÍTULO 33 ] PERÍODO 6   65
  EL NUEVO GABINETE                      Durante algunos años después todavía se escuchó en labios de humildes gentes o de patrio-
                                     tas fervorosos el grito de “¡Viva Piérola!”.
                                         Dejó el caudillo demócrata una leyenda; pero no un partido organizado.
  66   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 33 ]
resultado infructuosa su candidatura parlamentaria por Madre de Dios, pues la Corte Suprema                                            LA CRÓNICA
anuló las credenciales que lo favorecían) se completó con Tudela y Varela (Relaciones Exteriores)
y Maldonado (Hacienda) del grupo anterior, y con Gonzalo Tirado (Gobierno), Carlos Paz Soldán
(Justicia e Instrucción) y el coronel Pedro Portillo (Fomento). Ministerio de amigos personales del
Jefe del Estado, sin carácter político, Variedades lo llamó Gabinete “incoloro, insípido e inodoro”.
[ II ]
LA LEY ELECTORAL DE 1912. EN QUÉ SE DIFERENCIÓ SU TEXTO DEL PROYECTO ORIGI-
NAL.- Uno de los puntos principales del programa de Billinghurst fue el saneamiento electoral (1).
   El régimen creado en 1895, teóricamente el mejor que hasta entonces había tenido el Perú,
provino de una honda reacción contra el sistema antes vigente de la calificación de las eleccio-
nes por las Cámaras. Partió, según ya se ha anotado en este libro, de una original combinación
de los distintos sectores sociales a través de “grupos” para formar las juntas de registros y
(1) Una información más detallada en el libro del autor Elecciones y centralismo. Lima, Universidad del Pacífico, 1980.
                                                                                                                            [ CAPÍTULO 33 ] PERÍODO 6   67
                                   Los funerales del “Califa”
              Nicolás de
              Piérola, el
                caudillo
            incansable y
                                   L    a muerte se llevó a Nicolás de Pié
                                        rola el 23 de junio de 1913. Con él,
                                        par  tió una épo  ca de la his   toria
                                   republicana en la que resonaban hitos
                                   como la firma del Contrato Dreyfus, las
                                                                                      ban a contemplar el rostro del jefe del
                                                                                      Partido Demócrata (El Comercio, 26 de
                                                                                      junio de 1913).
68   período 6   [ capítulo 33 ]
escrutadoras, con intervención preponderante de la ciudadanía en la maquinaria del sufragio.
Pero los “grupos” no llegaron a constituirse jamás y su falta de organización en los momentos de
elegir las escrutadoras sirvió de pretexto a la Junta Electoral Nacional para simularlos o tolerar su
simulación; y para ungir, mediante ese engaño, a través de su omnímodo poder centralista,                    UNGIDO POR UNA
como diputados o senadores, a los candidatos que el grupo político de sus simpatías determi-                 REACCIÓN CONTRA
nara como más aparentes. La ley electoral resultó así mistificada o incumplida. Las sucesivas
Juntas Electorales Nacionales decidieron desde Lima los resultados de los comicios al crear los              LOS VIEJOS
órganos departamentales y provinciales adecuados para sus propósitos.                                        MéTODOS,
    Los diputados liberales presentaron en la legislatura ordinaria de 1900 un proyecto de ley por
el cual se quitaba a la Junta Electoral Nacional la facultad de hacer los sorteos para la formación
                                                                                                             bILLINGhURST
de las juntas provinciales de registro y escrutadoras de provincia. Confirieron esa atribución a la          RECIbIÓ MUChAS
Junta Departamental en lo administrativo para el primero de los indicados sorteos; y a la Junta              SUGERENCIAS
Electoral de departamentos para el segundo. El proyecto no suprimía a la Junta Nacional ni iba
al establecimiento de la autonomía de la provincia y del departamento en el acto del sufragio.               PARA EMPRENDER,
Se limitaba a buscar un nuevo origen para los organismos más maleados por la Junta Nacional.                 CUANTO ANTES,
Los diputados liberales lo defendieron con tesón; pero fue aplazado indefinidamente.
    En la primera legislatura extraordinaria de 1904, el Poder Ejecutivo, animado del mismo espí-
                                                                                                             LA REfORMA
ritu depurador, presentó un nuevo proyecto de reforma de la ley de elecciones. Los 25 mayores                ELECTORAL.
contribuyentes de cada provincia recibieron en él la facultad de designar, por elección, a los               ENCOMENDÓ
miembros de las dos indicadas juntas provinciales. La Junta Nacional quedó únicamente con la
atribución de formar, publicar y rectificar las listas de dichos contribuyentes. Este proyecto, muy
                                                                                                             PRIVADAMENTE
minucioso en su estructura, fue extensamente discutido en las diversas legislaturas que se suce-             LA PREPARACIÓN
dieron desde 1904 hasta 1907 en que llegó a ser aprobado por la Cámara de Diputados. Pero el                 DE UN
Senado no llegó a ocuparse de su revisión.
    Ungido por una reacción contra los viejos métodos, Billinghurst recibió muchas sugerencias               ANTEPROYECTO
para emprender, cuanto antes, la reforma electoral. Encomendó privadamente la preparación de                 A ALbERTO ULLOA,
un anteproyecto a Alberto Ulloa, Wenceslao Valera y Aurelio Sousa, a cuyo lado colaboró Gerardo
Balbuena. Revisó él personalmente varias veces ese documento y llegó a formular hasta cuatro
                                                                                                             WENCESLAO
proyectos que mandó imprimir; y pidió y consiguió que hicieran observaciones distintos perso-                VALERA Y AURELIO
neros del Congreso cuyos requerimientos, exigencias o súplicas procuró atender en lo posible.                SOUSA,
El proyecto enviado por el ministro Malpartida a la Cámara de Diputados el 29 de octubre de
1912 fue luego convertido en la ley provisional N° 1777 de 16 de diciembre de 1912 para las                  A CUYO LADO
elecciones del tercio parlamentario en 1913. Devolvió, en primer lugar, la autonomía electoral a             COLAbORÓ
las provincias con lo cual destruyó el régimen centralista de la Junta Electoral Nacional. Los
miembros de las juntas provinciales de registro y de las juntas escrutadoras provinieron de la
                                                                                                             GERARDO
elección, por mayoría y minoría de los contribuyentes de la provincia en asamblea pública.                   bALbUENA.
Dichos contribuyentes fueron seleccionados de las listas formadas por el Ministerio de Hacienda
en vista de los padroncillos respectivos. En el proyecto primitivo de Ulloa y sus colegas, las asam-
bleas de contribuyentes debían formarse, para evitar una injerencia plutocrática, con la partici-
pación de quienes pagaban cuotas medianas o bajas; pero las cifras de ellos resultaron elevadas
y el número de contribuyentes quedó reducido en la ley finalmente aprobada. Lima hubiera
tenido, según aquel proyecto primitivo, una asamblea de 1.600 ó de 1.714 contribuyentes. Se
adujo que era una junta demasiado numerosa, que sus miembros no iban a entenderse y que se
corría el peligro de que resultaran elegidos candidatos no designados por los partidos.
    Otra novedad de la ley fue la intervención de la Corte Suprema para resolver acerca de la validez
de las elecciones objetadas. Fueron eliminados los artículos del proyecto para que la Corte Supre-
ma conociera estos asuntos como tribunal de derecho dentro de su facultad constitucional, por
medio de fallos sujetos a revisión y en dos instancias; y para establecer en cualquier momento la
invalidez de la elección y de la credencial del representante a través de un proceso de ilegitimidad
                                                                                                        [ CAPÍTULO 33 ] PERÍODO 6   69
                                      declarado por la misma Corte, antes o después de su incorporación. Según el texto de la ley, la
                                      Corte solo juzgó de las dualidades dentro del plazo de cierto número de días con el carácter de
                                      jurado en una sola sesión y sin más pruebas que las que presentaran verbalmente los interesados.
          LA CORTE                    Durante el debate quedó rechazada la “desincorporación” parlamentaria por ejecutoria judicial.
          SUPREMA                         Una tercera y audaz innovación descartada al expedirse la ley fue la que pretendió implantar
                                      la acción popular, o sea la iniciativa ciudadana, con el fin de solicitar ante la Corte Suprema la
  APARECIÓ COMO                       nulidad de las elecciones ilegales o fraudulentas. El derecho de formular la demanda respectiva
   UN fACTOR ≥qUE                     fue concedido exclusivamente a los candidatos y se exigió la entrega de un depósito pecuniario
                                      para poder presentarla. Y la Corte Suprema tuvo limitación en sus facultades, pues expresamen-
           GRAVITÓ                    te se quiso que no llegaran ellas a convertirla en otra Junta Electoral Nacional y tampoco que
   POSITIVAMENTE                      parte considerable de su tiempo fuese restado a sus habituales tareas judiciales.
    EN EL SENTIDO                         Las mayorías parlamentarias desnaturalizaron así, en parte, el proyecto del Gobierno. A pesar
                                      de todo, las provincias parecieron agradecer el esfuerzo descentralista, que no obstante sus
DEL SANEAMIENTO                       recortes, simbolizó la nueva ley electoral.
     ELECTORAL. EL                        Ella fue imitada en Chile en 1913.
 RéGIMEN CREADO
 EN 1912 PRESENTÓ                     LA CORTE SUPREMA Y LOS PROCESOS ELECTORALES DE 1913.- La Corte Suprema llegó
         VENTAJAS                     a revisar, en 1913, 46 procesos electorales dentro del plazo limitado de tiempo que la ley le fijó.
                                      En fallos cuidadosos y detallados los vocales Eguiguren, Ortiz de Zevallos, Seoane, Lavalle, Alza-
  INICIALES SObRE                     mora, Villagarcía, Barreto, Eráusquin, Gadea, Leguía y Martínez, Washburn y Quintana evidencia-
               LAS                    ron su espíritu jurídico, su dialéctica, su independencia y su probidad. Merecen el homenaje de
  VILIPENDIADAS Y                     la historia del Perú.
                                          Los fallos estudiaron, sobre todo, la legalidad o ilegalidad en el funcionamiento de las juntas
       PECADORAS                      de mayores contribuyentes, las nóminas en las listas de estos, la constitución de las juntas de
   PRÁCTICAS qUE                      registro y de las juntas escrutadoras, la autenticidad de los actos electorales y la injerencia de las
                                      autoridades políticas en ellos. También resolvieron acerca de las tachas formuladas a los candi-
    fUNCIONARON                       datos. En algunos casos mandaron instaurar juicios criminales contra algunas autoridades como
ENTRE 1896 Y 1912.                    el prefecto de Ica, coronel Guillermo Ferreyros, y los subprefectos Adolfo Valdivia, de Caylloma;
                                      Félix M. Camino, de Bongará; Valentín Aguinaga, de Paruro; Bernardo Montesinos, de Quispican-
                                      chis; Federico Arrieta, de Castilla. Con obvia imparcialidad, en otros fallos absolvieron a las auto-
                                      ridades acusadas. También hicieron recaer la responsabilidad señalada por la ley a diversos cul-
                                      pables de delitos de falsificación de votos, suplantación de firmas (en este último estuvo incurso
                                      un juez de primera instancia) y homicidio. No faltó la sanción a quienes tomaron parte en más
                                      de una asamblea. Uno de los procesos más complicados y sangrientos fue el de Huamachuco
                                      que favoreció a Abelardo Gamarra, cuyas credenciales fueron aprobadas. Nombres que han figu-
                                      rado hasta hace poco en la política aparecieron en las ejecutorias de 1913, como el de Octavio
                                      Alva, ratificado como diputado por Contumazá y Celestino Manchego Muñoz, cuya demanda
                                      sobre nulidad de las elecciones de Castrovirreyna fue rechazada.
                                          En la práctica, muchas de las medidas dictadas por la Corte Suprema para escarmentar a los
                                      delincuentes electorales, quedaron burladas.
   70   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 33 ]
	 El gobierno de Billinghurst. El comerciante tarapaqueño Guillermo Billinghurst asumió la
  presidencia de la República el 24 de setiembre de 1912, gracias al apoyo de las masas
  populares. Su gobierno, sin embargo, fue hostilizado por la oposición. En 1914, ante su plan
  de disolver el Congreso de la República, surgió en el seno de esta institución un
  levantamiento encabezado por el coronel Óscar R. Benavides, que lo depuso del cargo.
                                                                                     [ capítulo 33 ] período 6   71
    RAMÓN                              consuetudinaria mentira convencional del sufragio en el Perú. La experiencia demostró, después
    BARROS LUCO                        de la caída de Billinghurst, que las asambleas de mayores contribuyentes tenían errores y defi-
    (1835-1919)
                                       ciencias hondas. Abundaban los fraudes en los padroncillos mediante inclusiones u omisiones
                                       indebidas y maliciosas. Si antaño, en el período anterior a 1896, fueron decisivos el acto de tomar
                                       las mesas y el privilegio de contar con la mayoría de la Cámara para obtener una calificación
                                       favorable de las credenciales, en cambio, después de 1912, dominar la mayoría de la asamblea
                                       resultó la clave de la elección, pues por ese conducto se lograba disponer de los llamados “ele-
                                       mentos legales”. Dicha asamblea nombraba mesas receptoras propicias y junta escrutadora com-
                                       placiente. En rigor, la asamblea elegía y los votos populares adornaban la elección y honraban al
                                       candidato; pero no eran indispensables para el triunfo.
                                           Lo que debió hacerse fue aumentar las atribuciones de la Corte Suprema, resguardar la pure-
                                       za del sufragio en sus actos preparatorios, en su ejercicio mismo y en su escrutinio, crear órganos
                                       imparciales de supervigilancia y sanción para la integridad de los procesos.
                                       [ III ]
       El abogado chileno,             LA NEGOCIACIÓN HUNNEUS-VALERA.- Billinghurst recibió severas críticas por la política
     presidente de su país             que pretendió adoptar, en forma personal y fuera de los canales diplomáticos usuales, en rela-
entre 1910 y 1915, intentó             ción con el problema de Tacna y Arica. A su viejo amigo, el ministro chileno Antonio Valdés
  un acercamiento con el               Cuevas, cuñado del presidente Barros Luco, le hizo llegar su pensamiento para solucionar este
         gobierno peruano              conflicto sobre las siguientes bases: 1° arreglos directos; 2° postergación del plebiscito hasta
                 durante la            1931; 3° derecho de votar en él para los nativos del territorio y los residentes con cinco años; 4°
         administración de             entrega de Chile al Perú de 30.000 libras esterlinas anuales hasta 1931; 5° garantías amplias para
     Billinghurst. Este, sin           los peruanos de Tacna, Arica y Tarapacá; 6° pago por el Estado que ganara el plebiscito de una
 embargo, no se concretó               suma que se fijaría oportunamente.
           debido a que el                 El canciller chileno Antonio Hunneus modificó las mencionadas bases en la siguiente forma:
       presidente peruano              Voto en el plebiscito para los residentes de un año y para los extranjeros; juntas y comisiones
        recibió numerosas              para este acto, formadas por un chileno que las presidiría, un peruano y un delegado del cuerpo
    críticas del pueblo. La            consular; pago de 500.000 libras por Chile al Perú bajo la condición de que devolviera las provin-
      gestión de Barros se             cias si le era desfavorable el plebiscito.
        caracterizó por no                 Verificado este trueque de propuestas con suma reserva y aceptadas, en parte, las enmiendas
contradecir los mandatos               chilenas, se produjo un cambio simultáneo de cablegramas entre los cancilleres Hunneus y Wen-
        del congreso y por             ceslao Valera el 10 de noviembre de 1912. Estos cablegramas indicaron los puntos de arreglo: apla-
         gobernar con una              zamiento del plebiscito hasta 1933 en que sería presidido por el presidente de la Corte Suprema
  fórmula multipartidaria              de Chile con dos delegados chilenos y dos peruanos, voto para los residentes de tres años y para
      conformada por dos               los nativos excluyéndose en todo caso a los analfabetos, pago por Chile de 500.000 libras esterlinas.
     bandos: por un lado,                  Hubo algunos obstáculos en el curso de la negociación así iniciada, al debatir el Senado chi-
     radicales, liberales y            leno la entrega de ese medio millón que fue eliminado por último.
         demócratas; y por
     otro, conservadores,
   liberales democráticos              EL MENSAJE SECRETO DE BILLINGHURST EL 30 DE NOVIEMBRE DE 1912.- Billinghurst
              y nacionales.            expuso en un mensaje secreto que envió al Congreso el 30 de noviembre de 1912 las razones
                                       que tuvo para celebrar las negociaciones con Chile.
                                           Expresó allí, en primer lugar, que la solución del problema de Tacna y Arica en armonía con
                                       los derechos y con las expectativas del Perú venía alejándose cada vez más, bajo el imperio de
                                       una guerra afortunada para Chile, del peso y las manifestaciones de su fuerza material, de la acti-
                                       vidad y los recursos de su Cancillería, de la tibieza, la indiferencia y la tolerancia de los demás
                                       Estados del continente, entre los cuales si alguno llegó cautelosamente a intervenir, como expre-
                                       sión de simpatía a la causa peruana, fue para apoyar la idea, sustentada por Chile y acogida por
    72   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 33 ]
la Cancillería de Lima, de resolver el conflicto mediante la división del territorio ocupado, con
Arica para Chile y Tacna para el Perú. En su manifiesto de 1914 Billinghurst aclaró que se refería
aquí a una propuesta de partición hecha por el canciller Porras en 1910 al Brasil.
    Después de hacer ver que era opuesto a esta fórmula que calificó como una abdicación de                                       bILLINGhURST
la dignidad nacional, Billinghurst la consideró fracasada ante las directivas de la política chilena                              RECIbIÓ SEVERAS
de incorporar las dos provincias cautivas mediante un ulterior plebiscito unilateral. La ruptura de
relaciones (en su concepto) creó una situación difícil y azarosa para el Perú porque desde ese                                    CRÍTICAS POR LA
instante contempló en su horizonte internacional todas las sombras, las amenazas y los peligros                                   POLÍTICA qUE
que surgieron a la vez en Bolivia, Ecuador y Colombia. Aquí, sin duda, quiso decir que esos facto-
res negativos se acentuaron, pues habíanse inicado en fecha anterior.
                                                                                                                                  PRETENDIÓ
    El recurso de la fuerza no era posible por la superioridad militar de Chile y por el estado vidrio-                           ADOPTAR, EN
so de las relaciones con los países vecinos, sobre los cuales ejercía poderosa influencia aquella                                 fORMA
República. Solo quedaba, pues, el otro extremo del dilema.
    “El acuerdo diplomático de que tengo la honra de daros cuenta (agregaba) sustituye ipso                                       PERSONAL Y
facto a una solución de hecho incalificable y bochornosa, una situación de derecho que salva al                                   fUERA DE LOS
presente el decoro del país: una situación que significa respeto y garantía a las personas y en
resultado el reconocimiento explícito de nuestra soberanía tantos años discutida”.
                                                                                                                                  CANALES
    Al ocuparse de la postergación del plebiscito por veintiún años opinaba que era necesario al                                  DIPLOMÁTICOS
Perú el transcurso de algún tiempo para consolidar sus instituciones, acrecentar su hacienda,                                     USUALES, EN
robustecer sus energías, levantar su moral, colocarse en aptitud, en fin, de luchar dignamente y
de triunfar. La junta directiva del plebiscito se reuniría después de trascurrido aquel plazo, tiempo
                                                                                                                                  RELACIÓN CON
en el cual los peruanos de Tacna y Arica disfrutarían, como en cualquier punto de Chile, de los                                   EL PRObLEMA
derechos y garantías acordados por la Constitución y demás leyes de ese país a los residentes                                     DE TACNA
extranjeros; lapso que permitiría seguramente, merced a relaciones tranquilas sostenidas por
mutuos intereses y en homenaje a la armonía y civilización del continente, cumplir designios                                      Y ARICA.
inspirados real e hidalgamente en los dictados de la justicia. “En ese plazo (decía en seguida) si
se tienen en cuenta las grandes obras que debemos realizar, preparándonos para la apertura del
canal de Panamá, podrá el Perú obtener, a la sombra de la paz, progreso real interno y acrecentar
sus fuerzas económicas y su poderío político y militar, acortando la distancia que hoy lo separa
de Chile, que se encuentra en un nivel financiero muy superior al nuestro, gracias a la fabulosa
indemnización que tuvimos que pagarle como consecuencia de la desastrosa guerra de 1879”.
    Billinghurst envió una copia de su mensaje al cónsul de Chile en el Callao y cuando este lo
trasmitió a su Cancillería, ella se manifestó en desacuerdo con las afirmaciones y declaraciones
hechas. Demorado el asunto por el Parlamento en Santiago, el de Lima no llegó a ocuparse de él.
(1) “El acuerdo era favorable a los intereses chilenos. Podíamos dar por definitivamente resuelto el problema del nor te y
considerar como seguro nuestro triunfo en el plebiscito, con once años por delante para chilenizar la región” (Manuel
Rivas Vicuña, Historia política y parlamentaria de Chile, Santiago 1964, v. I, p. 330).
                                                                                                                             [ CAPÍTULO 33 ] PERÍODO 6   73
                                         sobre el posible estado de cosas en Tacna y Arica y en el Perú en 1933. Su actitud no solo suscitó
                                         contra él un emocionalismo sincero sino también las maniobras de los políticos opositores. Si el
                                         tratado hubiese sido suscrito en 1912 ó 1913, nada hacía suponer que lo habría aprobado el
       bILLINGhURST                      Congreso o que se hubiera mantenido incólume hasta 1933.
                                             Las dificultades internacionales impidieron que avanzara la tramitación de este asunto. Pero
           ALENTÓ EL                     las huellas que él dejó se hicieron visibles hasta en la misma madrugada del 4 de febrero de 1914.
     ESfUERzO PARA                       Había sido ya depuesto el Presidente y salía preso de Palacio cuando se oyó una voz (se ha dicho
   APROxIMAR A LOS                       que fue la de Rafael Grau) para acompañarlo con una exclamación insultante: “¡Muera Chile!”
      74   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 33 ]
[1]                                                             [2]
[3]
      EL ADIÓS A PIÉROLA. El 23 de junio de 1913 falleció Nicolás de Piérola, uno de los políticos más influyentes de finales del
      siglo XIX y principios del XX. Sus funerales, que duraron tres días, reunieron a representantes de todas las tiendas
      políticas. Aquí, vemos el féretro de Piérola saliendo de la Catedral de Lima (3), a la multitud que asistió a sus funerales
      (2), y el recuerdo de la misa de mes de Piérola (1).
                                                                                                          [ CAPÍTULO 33 ] PERÍODO 6   75
    DELFÍN LÉVANO                      interpelantes la corrección de sus procedimientos e informarles que el obrero Otazú había par-
    (1885-1941)                        tido al Perú y que la autoridad de su país le había encerrado en la Penitenciaría de Lima para
                                       arreglar cuentas que con él tenía pendientes”. (v. I, p. 419).
                                           Billinghurst (en cuyo período no se efectuó, seguramente, la prisión de Otazú) buscó, pues,
                                       la reconciliación de los sectores populares del Perú y de Chile. Resulta así el promotor de la
                                       acción internacional del obrerismo peruano. No dejó de recibir acerbas críticas de los sectores
                                       conservadores o ultranacionalistas.
    76   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 33 ]
     A la asamblea realizada en el Teatro Municipal del Callao concurrieron los principales gremios                  LA PROTESTA
y centros de trabajo del puerto, la Federación Regional del Perú y los grupos anarquistas. Vano
fue el esfuerzo de los delegados de la Confederación de Artesanos Unión Universal para que, en
vez de la acción directa de los trabajadores, se optara por el sistema de memoriales y comisiones
ante el Gobierno. En la segunda asamblea general celebrada el 15 de noviembre, en la antigua
“Carpa de Moda”, los delegados de la Federación Regional del Perú plantearon la huelga por la
jornada de ocho horas. Una tercera asamblea, en el mismo local, aprobó el pliego de reclamos
que debía presentar la Unión de Jornaleros.
     El 5 de enero de 1913 fue el día señalado para que esta entidad demandara la jornada de
ocho horas, aumento de salarios, auxilios médicos en caso de accidentes de trabajo y otras mejo-
ras. Si no se aceptaba el pliego presentado dentro del plazo de veinticuatro horas, se declararía
la huelga. Rechazadas las contrapropuestas de la Empresa del Muelle y Dársena y de las compa-
ñías de vapores, ella estalló en la mañana del 7 de enero.
     La comisión de huelga de la Unión General de Jornaleros llegó a tener una entrevista con el
Presidente de la República el 9 de enero, sin resultados.
     Respaldada esta actitud por las asambleas generales de los gremios, la empresa del Muelle y               Este diario, que circuló
Dársena pactó una solución en la que aceptó la jornada de ocho horas, el aumento del 10%                       entre 1911 y 1926, estuvo
sobre todos los jornales, el auxilio en accidentes del trabajo y algunas mejoras más. Fue una vic-             dirigido por Delfín
toria de los dirigentes obreros anarquistas.                                                                   Lévano y Francisco A.
     El mismo día, 10 de enero de 1913, Billinghurst hizo expedir la histórica resolución siguiente:           Loayza, e integrado por
“Vista la petición formulada por los jornaleros del Muelle y Dársena en la bahía del Callao y encon-           un grupo de obreros.
trándose justificadas las razones que expone; Se resuelve: Desde la fecha la descarga en el Muelle             Desde las páginas de La
y Dársena y en la bahía del Callao tendrá lugar durante todos los días útiles del año desde las 7 a.m.,        Protesta se apoyó la
hasta las 11 y desde la 1 p.m. hasta las 5 de la tarde, derogándose en esta parte el art. 41 del Regla-        huelga obrera de 1913
mento aprobado por la Resolución Suprema de 31 de marzo de 1875. Rúbrica de S. E. Maldonado”.                  en favor de la
     Fue la implantación de la jornada de ocho horas en el Perú. Las compilaciones sobre la legis-             implantación de las ocho
lación del trabajo han olvidado, con frecuencia, este documento.                                               horas de trabajo. Aquí
     En el folleto El anarco-sindicalismo en el Perú (México, 1961) se lee lo siguiente a propósito de         vemos un número de
la conquista de la jornada de ocho horas en el Callao: “Como dato histórico, mas nunca por un                  marzo de 1912, en
prurito de figuración, señalamos que los grupos anarquistas ‘Luz y Amor’ del Callao y ’La Protesta’            el que se anuncia el
de Lima actuaron como elementos animadores y combativos en ese brillante movimiento rei-                       nombramiento de
vindicador. Merece recordar en esta oportunidad a los compañeros italianos José Spagnolli, ora-                Manuel González Prada
dor fogoso, conferencista razonador, sereno y persuasivo, cuando las circunstancias lo requerían,              como director de la
y Antonio Gustinelli, simpatizante de la organización obrera y de la propaganda anárquica,                     Biblioteca Nacional.
ambos compañeros delegado de la Federación Obrera Regional Argentina en gira de propagan-
da por las Repúblicas de este lado del Pacífico”.
                                                                                                          [ CAPÍTULO 33 ] PERÍODO 6   77
                       LA CREACIÓN DE MADRE DE DIOS
        Es uno de los departamentos menos poblados del país. Fue creado oficialmente el 26 de diciembre de 1912.
                                                                                                                                     Agua para                                                               A
                                                                                                                                     remover la        Arena y grava
                                                                        Hoja                                                                                                                MADRE DE DIOS                    Bolivia
                                                                                                                                     grava             mezclados con
                                                                                                                                                       oro en polvo              1                B            C
                                                                                                                                                                          17.162 km2
                                                                        Flor
                                                                                                                                                                                       Cuzco
                                                                                                                       Semilla                                                                               Puno
                                                                                                                                                                                                      4
                                                                                                                                                                                                 4.023 km2
                                                                                                                                                                                                                    2
                                                                                                                                                     Por gravedad, la tolva                                   10.914 km2
                                                                                                       Fruto                                         retiene la arena aurífera
                                                                                                                                                                            MADERA
                                                                                                                                                                            Los bosques de Madre de Dios
                                                                                                                                                                            poseen una gran variedad de
                                                                                                                                                                            recursos madereros, como el
                                                                                                                                                                            tornillo y la caoba.
78   período 6        [ capítulo 33 ]
derecho y las organice por medio de la ley, se hace necesario adoptar providencias que respe-
tando los derechos del obrero y del patrón en este orden, devuelvan al mismo tiempo a la acti-
vidad industrial y mercantil y en general a todas las clases sociales las garantías y seguridades           [ 1913 enero 10 ]
que requieren para ello el tranquilo ejercicio de sus derechos para su más amplio y progresivo
desarrollo”. Agregó finalmente que “la Constitución del Estado garantiza el libre ejercicio de todo           LA JORNADA DE OCHO
oficio, industria o profesión que no se oponga a la moral, a la salud y a la seguridad pública”.              HORAS. Tras una
     El decreto ordenó la elección por voto secreto de tres delegados de los obreros de todo esta-            prolongada huelga de los
blecimiento industrial para representarlos ante los patronos o administradores y gestionar las                trabajadores de la
reclamaciones de sus mandantes. Estableció en el caso de conflicto el nombramiento de uno o                   dársena y el muelle del
más árbitros por el patrón y de igual número por los obreros y prescribió que rigiera el laudo por            Callao, el gobierno y los
un plazo no menor de seis meses. Las autoridades de Policía debían reconocer oficialmente las                 directivos del muelle
huelgas y amparar sus derechos en los siguientes casos: Si el patrón dejaba de designar sus árbi-             acordaron ceder a sus
tros dentro de un plazo señalado; si el tribunal arbitral no expedía oportunamente su laudo; si la            peticiones. En la edición
cesación del trabajo se producía sin omitir las circunstancias previstas en el mismo decreto. La              del 10 de enero de 1913,
paralización de las labores en un establecimiento industrial solo podía decidirse con la concurren-           El Comercio informó: “En
cia, a lo menos, de las tres cuartas del número de obreros en activo servicio, por medio de votación          cuanto á las ocho horas
secreta y mayoría de votos, con la obligación de comunicar este acuerdo a la Intendencia de Poli-             de trabajo, el gerente del
cía. Si la huelga era rechazada por la mayoría de los obreros del establecimiento, todo el personal           dársena manifestóse
debía continuar en el trabajo bajo el amparo de la autoridad, salvo los obreros que no desearan               llano para aceptar la
continuar en la faena. Toda huelga, una vez comenzada, no podía continuar sino renovando la                   innovación siempre que
votación cada cuatro días y con aquiescencia de la mayoría absoluta. Si los patronos resolvían clau-          fuera promulgada por el
surar sus establecimientos por causas de carácter económico o industrial o como resultado de                  gobierno. Terminada en
diferencias con sus obreros, debían comunicar por escrito este propósito a la Intendencia de Poli-            esta forma satisfactoria
cía indicando los motivos de la clausura y su duración y acompañado su escrito con una nómina                 la conferencia, el
de los obreros que por esta causa quedaban sin trabajo. El mismo decreto ordenó que las autori-               prefecto señor Velarde
dades de Policía considerasen delincuentes comunes a todos los individuos que, colectiva o indi-              se dirigió á Lima á dar
vidualmente, con amenazas o vías de hecho, impidieran el libre ejercicio de las industrias, el                parte de lo ocurrido al
comercio o el trabajo. Al mismo tiempo prohibió la instalación de los llamados cuarteles o campa-             presidente de la
mentos de huelguistas y las manifestaciones públicas que no se sujetaran a las prescripciones de              república, y el
un decreto expedido el 27 de mayo de 1896. Por último, ordenó el funcionamiento en las Inten-                 subprefecto señor
dencias de Policía de Lima y Callao, de una sección destinada a formar las estadísticas del trabajo.          Cárdenas García se
     Este decreto, aunque muy criticado por los obreros anarquistas, fue avanzado para su época.              apersonó ante los
Obligó a los patronos a admitir la representación obrera. Dio carácter imperativo al arbitraje en             huelguistas reunidos en
los casos de conflicto. Amparó el derecho de huelga. Al mismo tiempo, buscó democráticamen-                   su campamento de la
te para ella un respaldo mayoritario renovado de modo periódico y trató de impedir la violencia               calle Apurímac, á quienes
y la algarada. Fue recibido con aprensión en los sectores conservadores.                                      notició sobre lo
                                                                                                              ocurrido. (...) Por su
                                                                                                              parte, el gobierno
LA SECCIÓN OBRERA, BASE DE LA INSPECCIÓN GENERAL DEL TRABAJO.- El decreto de                                  actuando dentro de lo
30 de enero de 1913 organizó, en las Intendencias de Lima y Callao, una oficina especial, bajo el             prescrito por las leyes y
nombre de Sección Obrera, destinada a centralizar los datos sobre la situación de las industrias y el         los reglamentos vigentes,
movimiento del trabajo en ambas ciudades. Esta medida fue el paso preliminar para el estableci-               dando el siguiente
miento de la Inspección General del Trabajo que Billinghurst propugnó con entusiasmo en su men-               decreto, que significa
saje presidencial de julio de 1913. Forma, pues, el remoto antecedente para el Ministerio de Trabajo.         para los huelguistas el
                                                                                                              más completo triunfo de
                                                                                                              su causa”.
LA REGLAMENTACIÓN DE LA LEY SOBRE ACCIDENTES DEL TRABAJO.- Los decretos
de 4 de julio de 1913 reglamentaron la ley sobre accidentes de trabajo. Fueron señaladas pautas
para el seguro obrero relacionado con ellos; se fijó el salario mínimo para las indemnizaciones,
                                                                                                        [ CAPÍTULO 33 ] PERÍODO 6   79
                                      así como el arancel médico para las visitas en el domicilio de los damnificados; quedaron enu-
                                      meradas las medidas de seguridad en los centros laborales, así como también los grados de
                                      incapacidad que habían de servir como base para el cómputo respectivo.
          DESDE LA                        La fijación del salario mínimo ostenta singular importancia.
  MUNICIPALIDAD
            INICIÓ                    LA REPRESIÓN DEL CALLAO.- En noviembre de 1913 estalló en el Callao una huelga auspi-
    bILLINGhURST,                     ciada por la Federación Obrera Marítima y Terrestre. Se suscitó una gran alarma y personeros de
                                      las grandes empresas en aquel puerto, como la del Muelle y Dársena, las compañías de vapores
    DENTRO DE LA                      y las fábricas acudieron al despacho del presidente Billinghurst para manifestarle que la situación
 MODESTIA DE LOS                      era insostenible y que, si la huelga continuaba, las entidades navieras se retirarían. Los huelguis-
 RECURSOS DE ESA                      tas se extralimitaron porque fueron al mercado a impedir las ventas y comenzaron a destruir los
                                      carros del tranvía eléctrico y a levantar los rieles del ferrocarril. El escuadrón N° 3 los reprimió el
  INSTITUCIÓN, LA                     27 de noviembre. No hubo muertos ni heridos. El orden público fue restablecido. Los dirigentes
CONSTRUCCIÓN DE                       Fernando Vera y Robles quedaron presos. Billinghurst rechazó las insinuaciones que se le hizo
                                      para que los sometiera al fuero militar, prefirió expatriarlos a Panamá y les dio una cantidad de
       CASAS PARA                     dinero por la cual extendieron recibos. Roberto Leguía los protegió y Vera, a su regreso al Perú,
   ObREROS EN LA                      se convirtió en uno de sus agentes. El comercio del Callao ofreció un gran homenaje de recono-
   zONA DE SANTA                      cimiento al prefecto de aquella provincia constitucional, coronel Edgardo Arenas. El diputado
                                      Alberto Secada excusó su asistencia a este banquete.
      SOfÍA. COMO                         Billinghurst había contribuido a la formación de la Federación Obrera Marítima y Terrestre y
PRESIDENTE DE LA                      le había obsequiado el menaje para su local.
        REPúbLICA,
    LÓGICAMENTE,                      LAS HUELGAS DE 1913.- Aunque el decreto de 24 de enero de 1913 canalizó en algo la ola de
         DEDICÓ AL                    huelgas, no la cortó. Entre las que estallaron, aparte de la del Callao en noviembre de 1913 estu-
                                      vieron la de Talara y Negritos en mayo y junio a la que siguieron las de Lobitos y Lagunitas y
     ASUNTO VIVO                      también la de Morococha en diciembre de aquel año. Los obreros de Talara y Negritos obtuvie-
          INTERéS.                    ron un aumento de 20 centavos sobre todos los jornales, salario íntegro en todos los accidentes
                                      de trabajo (la ley respectiva solo otorga el 33%), asistencia médica y medicinas para ellos y sus
                                      familias, comercio libre, reingreso al trabajo de los despedidos y una cláusula sobre que no habría
                                      despidos por el término de seis meses. Cuando la empresa de Negritos no cumplió con este
                                      último acuerdo y expulsó a 60 obreros, hubo, por acuerdo adoptado en Lima y Callao, boicot
                                      obrero de todos los puertos del litoral contra los barcos de la casa Duncan Fox y logró éxito pues
                                      la empresa se manifestó dispuesta a llamar a quienes había excluido de sus nóminas.
                                          Si a estas inquietudes de tipo netamente social se agregan las de las llamadas “jornadas cívi-
                                      cas”, o sea de las algaradas que provocaban los obreros billinghuristas para exteriorizar su fervor
                                      y tratar de intimidar a sus adversarios, cabe afirmar que hubo en esta época un clima de honda
                                      inquietud. Sirvió de vocero al sector conservador de la opinión pública el presidente de la Cáma-
                                      ra de Comercio de Lima, Pedro D. Gallagher cuando en su memoria presentada en marzo de
                                      1913 expresó lo siguiente: “A pesar de la agitación política producida por la transmisión del man-
                                      do supremo y del malestar ocasionado por las últimas y frecuentes huelgas, los resultados en
                                      general han sido buenos para el comercio...”. Y en la memoria de marzo de 1914 manifestó
                                      Gallagher en un tono de mayor pesimismo: “La depresión financiera mundial, cuyos efectos se
                                      han dejado sentir necesariamente en la República, la incertidumbre general ocasionada por la
                                      situación política por la que se ha atravesado y las repetidas e injustificadas huelgas, con su coro-
                                      lario de imposiciones y violencias, no oportunamente reprimidas, han dado lugar a que el
                                      comercio durante el último año, no haya podido obtener todos los provechosos resultados que
                                      indudablemente se habrían conseguido, sin aquellas desfavorables circunstancias”.
   80   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 33 ]
CASAS PARA OBREROS.- “Mientras que en Lima el callejón y el solar inmundo continúen
arrancado el noventa y el ciento por ciento de nuestro capital vivo (afirmó Billinghurst en su
memoria como alcalde de Lima en 1910) no tenemos derecho a llamarnos pueblo culto. Antes                     [ 1913 noVIembre 14 ]
que nada necesitamos higienizar la habitación del pueblo; hacer más alegre y sana la casa donde
nacen y crecen los que trabajan en la paz y defienden a la patria en la guerra”.                               LOS DISTURBIOS
     Desde la Municipalidad inició Billinghurst, dentro de la modestia de los recursos de esa insti-           OBREROS. En noviembre
tución, la construcción de casas para obreros en la zona de Santa Sofía. Como presidente de la                 de 1913, los gremios
República, lógicamente, dedicó al asunto vivo interés.                                                         obreros fueron
     “Uno de los problemas que más directamente atañen a las colectividades obreras (afirmó                    protagonistas de
Billinghurst en su mensaje presidencial de 28 de julio de 1913) es el que se refiere a la cons-                incidentes en Lima y
trucción, con material conveniente, de viviendas sanas, alegres y baratas para reemplazar,                     Callao. Uno se llevó a
cuando antes, las habitaciones insalubres, desprovistas de ventilación y sol, caras y de lúgubre               cabo el día 14, como
aspecto en que actualmente se hacinan los desheredados de la for tuna; albergue que es cau-                    informó El Comercio:
sa directa o inmediata de la alta cifra de mor talidad en nuestras ciudades y especialmente en                 “Con motivo del reciente
esta capital”.                                                                                                 viaje de los delegados
     Para afrontar dicho problema (que ninguno de los Gobiernos anteriores había abordado)                     obreros en Chile, se
empezó por adquirir en el populoso sector de Malambo una extensa superficie de terreno bien                    dirigió también a ese
situado, desde el punto de vista de la ventilación, el sol, el agua y el desagüe, con el fin de formar         país el obrero don
un primer barrio obrero y edificar hasta cuarenta casas según el sistema monolítico Bianchi. El                Eulogio Otazú, sin formar
propósito de Billinghurst fue proseguir e intensificar luego esta política para la que se inspiró en           parte de la delegación
las siguientes ideas fundamentales en relación con el destino de dichos bienes: 1° El obrero que               oficial (…). Las ideas
deseaba comprar alguno de ellos debía ser imponente de la Caja de Ahorros y tener en depósi-                   libertarias de Otazú y la
to una cantidad igual al 15% del precio que debía pagar. 2° El comprador debía tener regular-                  naturaleza de su
mente constituida una familia y comprometerse a ocupar con ella la casa adquirida y no darla en                actuación en Chile, le
arrendamiento. 3° La transferencia a tercera persona solo podía realizarse previo consentimiento               atrajeron la censura y
del Gobierno. 4° Únicamente el 15% del precio de la propiedad necesitaba abonarse al contado.                  animadversión de los
Todo ello se frustró el 4 de febrero de 1914.                                                                  demás gremios y
     Corresponde a este período también la ley N° 1883 de 28 de noviembre de 1913, expedida a                  especialmente de los de
iniciativa de Alberto Secada, por la que se autorizó al Poder Ejecutivo para ceder al Municipio del            este puerto (…) que
Callao cuatro lotes de terrenos ubicados en Chucuito y en La Punta con el fin de que se constru-               había resuelto oponerse
yeran en ellos casas para obreros.                                                                             a toda manifestación
                                                                                                               favorable a Otazú a su
                                                                                                               llegada. (…) A eso de las
LA ESCUELA DE ENSEÑANZA DOMÉSTICA.- El Gobierno efectuó la instalación en la Mag-                              diez de la mañana,
dalena de una escuela de enseñanza doméstica creada por decreto de 29 de abril de 1913. Allí                   llegaron las comisiones y
las mujeres modestas provenientes de todas las regiones del país, debían aprender la cocina                    se congregaron en el
popular, trabajos manuales, lavado y planchado, algunas nociones de higiene y medicina casera,                 malecón (…). En estas
teneduría de libros y contabilidad elemental, cuidado a los enfermos y a los heridos, principios               circunstancias salían de
de la alimentación y valor de los artículos relacionados con ella. El edificio de la Magdalena des-            la dársena los jornaleros
tinado a dicha escuela fue dedicado a otros usos por el régimen que reemplazó a Billinghurst.                  que, rodearon á las
                                                                                                               comisiones, cerrándoles
                                                                                                               el paso y notificándoles
EL FOMENTO DE LA EXTENSIÓN CULTURAL ENTRE EL PUEBLO.- Billinghurst evidenció                                   que se oponían a la
también su vivo interés en el fomento cultural del pueblo al auspiciar funciones cinematográfi-                recepción de Otazú”.
cas gratuitas y conferencias históricas, patrióticas o científicas en Malambo, Cocharcas, Naranjos,
Pacae y otros lugares de Lima. Participaron en estas actuaciones llamadas “teatro popular” Emilio
Gutiérrez de Quintanilla, Carlos Enrique Paz Soldán, Lauro A. Curletti, Ramón Espinoza y otras
personas. Fueron, modestamente, como un antecedente de la extensión universitaria y de las
Universidades Populares.
                                                                                                         [ CAPÍTULO 33 ] PERÍODO 6   81
                                      EL DECRETO PARA REGLAMENTAR EL ARRENDAMIENTO DE LAS FINCAS DE LA
                                      BENEFICENCIA.- El decreto de 17 de agosto de 1913 reglamentó el arrendamiento de bienes
                                      de las Sociedades de Beneficencia. Ordenó que solo pudiera efectuarse en subasta pública y con
 EL 21 DE JUNIO DE                    arreglo a las prescripciones que detalladamente enumeró entre las que incluyó la aprobación final
  1913 EL PREfECTO                    del Gobierno. Señaló pautas, asimismo, para el pago de las mejoras en las fincas arrendadas. Esta-
                                      bleció igualmente la necesidad de la aprobación del Gobierno para los casos de subarriendo.
       DE AREqUIPA,                       El decreto evidenció una tendencia a desconocer la autonomía de las Sociedades de Beneficen-
            CORONEL                   cia y a crear nuevas normas sobre el contrato de arrendamiento, distintas de las prescritas en el
                                      Código de Procedimientos Civiles. Fue severamente atacado por quienes pertenecían a dichos orga-
         AUGUSTO E.                   nismos. Invocaron ellos no solo la ley que los protegía sino también los derechos de los arrendatarios.
             bEDOYA,
       COMUNICÓ AL
                                      BILLINGHURST Y LOS INDIOS. LAS MATANZAS DE CHUCUITO Y AZÁNGARO.- Teodo-
 DOCTOR PEDRO C.                      miro Gutiérrez Cuevas era un jefe del ejército que ocupó la subprefectura de Chucuito en 1904
          VILLENA SU                  ó 1905 y actuó a favor de los indios, con lo cual se suscitó la enemistad de los gamonales y de la
                                      representación parlamentaria. Manuel Gonzáles Prada le dedicó un artículo con el título de
   NOMbRAMIENTO                       “Autoridad humana”, reproducido en el libro Prosa menuda. En 1912 fue jefe militar de Canas.
           PARA qUE                       Cuéntase que Gutiérrez Cuevas llevó al presidente Billinghurst un libro con reclamaciones
     ACTUASE COMO                     sobre la raza aborigen. Acompañado por comuneros, visitó entonces diversas imprentas de
                                      Lima. Fuese por este motivo o por acción propia, Billinghurst lo despachó como emisario perso-
COMISIONADO DEL                       nal para que estudiara la situación social en la sierra del sur. Este delegado, era, a la vez, vicepre-
   GObIERNO PARA                      sidente del Comité de Salud Pública. Un telegrama de Chucuito publicado el 21 de octubre de
    INVESTIGAR LAS                    1913 en Lima, denunció que Gutiérrez “apoya, alborota, excita y subleva nuevamente indios
                                      contra blancos” y que había rechazado los recursos de defensa de los “damnificados”. A la vez,
      qUEJAS DE LOS                   acusó a los indios de Chucuito de bandolerismo y de haber saqueado y talado haciendas con la
  INDÍGENAS EN EL                     victimación de ciudadanos y soldados. Esta acusación halló eco en la Cámara de Diputados al
                                      apoyarla Bernardino Arias Echenique quien aseveró que se había producido la existencia de la
   DEPARTAMENTO                       antropofagia y que el delegado del Gobierno (Gutiérrez Cuevas) decía “que era el Mesías que iba
        DE PUNO. SE                   allá a redimirlos” (a los indios). Anteriormente Arias Echenique había denunciado los desórdenes
  TRATAbA DE UNA                      de campesinos de Samán, Caminaca, Achaya y otros distritos.
                                          Antes de que Gutiérrez Cuevas realizara su misión apostólica, el 7 de febrero y el 6 y 7 de marzo
         ORDEN DEL                    de 1913, hubo matanzas de indios en Azángaro. “¿Qué hicieron las autoridades judiciales y admi-
        PRESIDENTE                    nistrativas ante los hechos criminosos que se acaba de memorar?” (preguntaba el agente fiscal de
                                      Azángaro, José Frisancho, después de referirse a estos desmanes y a los de Escanchuri en 1906, a
 bILLINGhURST (...)                   la matanza de Cuturi en 1911, a las de 1912 y a los horrores de Chupa también en 1911). “En unos
                                      casos (agrega) los subprefectos, por tratarse de delincuentes adinerados, no han hecho otra cosa
                                      que concertar transacciones entre damnificados y agresores para asegurar la impunidad por ese
                                      medio vedado por la ley; y en otros de aquellos casos delictivos, se ha llegado por el juez a incoar
                                      sumarios que no han pasado de actuaciones formulistas y de mera rutina; sin que exista ahora en
                                      el despacho y archivos del Juzgado ni uno solo de estos cuerpos sumariales seguidos sobre los
                                      hechos que, involucrando crímenes concretos, en el anterior parágrafo se ha dejado apuntado”.
   82   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 33 ]
EL ATENTADO CONTRA VILLANUEVA. El 13 de julio de 1913, se registró un atentado contra la vida del presidente del
senado, Rafael Villanueva. Este hecho hizo evidentes las desavenencias que existían entre el Poder Ejecutivo y el
Legislativo. En la edición Nº0 282 de la revista Variedades, se publicó esta caricatura, en la que el presidente Billinghurst
amenaza a Villanueva, y le dice que la bomba puesta en su casa es solo un “cohetecillo chino, comparado con este
petardito que tengo a prevención que sigan ustedes esterilizando la labor de mi gobierno”.
                                                                                                      [ CAPÍTULO 33 ] PERÍODO 6   83
                                     dichas quejas, así como “de las expoliaciones de que han sido y son constantemente víctimas
                                     (los indios) por par te de algunos funcionarios y los par ticulares”. Bedoya le entregó una rela-
                                     ción nominal de algunos de los quejosos.
    bILLINGhURST                         Villena trabajó durante el plazo de un mes con asiduidad y valentía, si bien se limitó a la pro-
    CREYÓ qUE LA                     vincia de Lampa. Su informe, fechado en Arequipa el 14 de setiembre de 1913, fue publicado por
                                     la imprenta del Estado en Lima ese mismo año, con 52 páginas. Estudió las razones generales
       REGIÓN DEL                    que inducían a las exacciones y los casos particulares que llegó a comprobar. Su informe, olvida-
      SUDESTE DEL                    do documento, es un doloroso testimonio sobre el Perú profundo. Deberá ser estudiado por
                                     todo el que quiera conocer la historia de la explotación del hombre por el hombre en nuestro
  PERú NO PODÍA                      país. No se sabe qué actitud adoptó ante él el presidente Billinghurst.
 SEGUIR SUJETA A                         Pero Billinghurst afirmó en su manifiesto de 1914 que se atrajo la mala voluntad de los due-
        SU PROPIA                    ños de haciendas en la sierra (¿eran representantes al Congreso?) por sus exhortaciones para que
                                     dieran un trato mejor a sus peones. No hubo sin embargo, oficialmente, ninguna norma admi-
 SUERTE, CON LOS                     nistrativa de carácter pro indígena.
         PELIGROS
    INhERENTES A                     [V]
        UNA VASTA                    LAS IDEAS DE BILLINGHURST SOBRE LA EDUCACIÓN PRIMARIA Y EL DECRETO
        fRONTERA                     SOBRE ENSEÑANZA RELIGIOSA.- Alguna vez expresó Billinghurst: “Yo quiero a mi pueblo
                                     porque siempre, siempre trabajando, he vivido cerca de él y sé que es noble, generoso y sincero
    AbANDONADA.                      y que si algunas faltas comete es por ignorancia y no por maldad; y de que el pueblo sea igno-
 NO SOLO ExISTÍA                     rante solo tienen la culpa aquellos que, por falta de patriotismo, no hicieron del Perú una sola
  LA AMENAzA DE                      escuela cuyos linderos fueran sus fronteras”. Llegado a la jefatura del Estado tampoco pudo él
                                     “hacer del Perú una sola escuela”.
   INVASIONES DE                         El mensaje presidencial del 28 de julio de 1913 entró en consideraciones acerca de la incon-
LOS VECINOS SINO                     veniencia de que los egresados de los colegios secundarios se vieran obligados a concurrir a las
                                     universidades sustrayendo valiosas energías al comercio y a la industria; y también sobre la nece-
       TRÁfICO DE                    sidad de formar un verdadero profesorado de segunda enseñanza. Y en el mensaje especial de
MERCADERÍAS SIN                      setiembre de 1913 anunció la intensificación y orientación realista de la educación primaria
SUPERVIGILANCIA                      mediante el establecimiento de cursos de artes prácticas en las escuelas primarias para futuros
                                     carpinteros, herreros, hojalateros, etc., escuelas nocturnas para analfabetos y semianalfabetos,
    Y CONSTANTES                     cursos de artes domésticas en las escuelas femeninas de provincias, plazas para doscientas niñas
         RObOS DE                    de los distintos lugares de la República en la Escuela de Enseñanza Doméstica. Las preocupacio-
                                     nes políticas no le dieron tiempo, sin duda, para madurar estas y otras iniciativas. El movimiento
      PRODUCTOS.                     revolucionario del 4 de febrero de 1914 se produjo, por lo demás, antes de que se iniciara el año
                                     escolar que siguió al mensaje de setiembre de 1913.
                                         La medida más comentada en este campo fue la señalada por el decreto de 29 de abril de
                                     1913 que estableció la enseñanza de Religión e Historia Sagrada en las escuelas, en vista de la
                                     ausencia casi completa de toda instrucción sobre ambas materias en el plan de educación del 20
                                     de junio de 1906 que imprimía a las escuelas primarias carácter laico. La suprema resolución del
                                     30 de junio de 1913 creó en las escuelas normales un curso obligatorio de la misma asignatura.
                                         El decreto de 29 de abril de 1914 y su complemento otorga al régimen de Billinghurst un
                                     sentido católico que, para algunos, puede parecer inesperado. Falta averiguar si correspondieron
                                     a una iniciativa propia del Presidente o a la gestión de su ministro Moreyra y Riglos.
                                         No deben ser dejados de tomar en cuenta, por lo demás, la ayuda gubernamental a los
                                     misioneros de la orden de los Pasionistas en las márgenes del Huallaga y a las escuelas de reli-
                                     giosos en la Prefectura Apostólica de Santo Domingo del Urubamba, la creación del Vicariato
                                     Apostólico del Madre de Dios, la entrega de la Escuela de Enseñanza Doméstica a la congrega-
                                     ción de las Hijas de María Auxiliadora.
  84   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 33 ]
[ VI ]                                                                                                             LA CREACIÓN DE
EL DEPARTAMENTO DE MADRE DE DIOS.- El Congreso sancionó el proyecto que le some-                                   MADRE DE DIOS
tió el Gobierno el 5 de diciembre de 1912, en el que fue creado el departamento de Madre de
Dios, compuesto de las provincias de Tahuamanú, Tambopata y Manú. Fue así como expidió la
ley N° 1782 de 26 de diciembre de 1912.
     La primera organización política de esta área fue a través de una simple Comisaría. En 1910
se nombró un Comisionado Especial para estudiar y proponer un plan de administración aplica-
ble a las zonas del Purús, Acre, y Madre de Dios.
     Billinghurst creyó que la región del sudeste del Perú no podía seguir sujeta a su propia suer-
te, con los peligros inherentes a una vasta frontera abandonada. No solo existía la amenaza de
invasiones de los vecinos sino tráfico de mercaderías sin supervigilancia y constantes robos de
productos. La ley N° 1782 no se limitó a crear el departamento de Madre de Dios. Prescribió que
debía impulsarse el istmo de Fitzcarrald y la navegación a vapor en los ríos adyacentes; y también
el camino carretero que partía de Puerto Maldonado en dirección a Iñapari, capital de la provin-
cia de Tahuamanú.
     El ministro de Fomento, coronel Pedro Portillo, recibió la comisión especial de viajar al depar-        El 26 de diciembre de
tamento de Madre de Dios.                                                                                    1912 se creó oficialmente
     Fueron establecidos los servicios que dicha ley señaló y así comenzaron a funcionar las adua-           el departamento de
nillas correspondientes a Puerto Heath, Libertad, Tahuamanú e Iñapari, aunque de una manera                  Madre de Dios, ubicado
imperfecta a causa de la falta de las instalaciones necesarias para el alojamiento de los emplea-            en la zona suroriental
dos de la renta. Organizáronse, igualmente, los servicios de Correo, Policía, Sanidad y Capitanías           del país. Como capital
de puerto. El servicio religioso y el de instrucción quedaron enmarcados dentro del Vicariato                fue designada la ciudad
Apostólico cuyo personal quedó señalado en la misma ley. Instaláronse en el departamento                     de Puerto Maldonado,
mencionado un juzgado de primera instancia, una agencia fiscal y una escribanía de Estado.                   ubicada al margen
     No tuvo continuidad la estación experimental agrícola que fundó el presidente Billinghurst              derecho del río Madre de
con el objeto de introducir el cultivo metódico de los árboles productores de goma y de plantas              Dios y en la margen
alimenticias en las márgenes del Madre de Dios.                                                              izquierda del río
     “La creación del departamento de Madre de Dios fue prematura”, ha escrito en su libro Los hom-          Tambopata. Desde finales
bres de la selva Alberto Ballón Landa después de vivir en la región entre 1912 y 1915. “Al promulgar-        del siglo XIX, se
se la ley (agrega) no existía una sola población formada y ni siquiera se conocían con exactitud las         desarrolló en esta zona
condiciones de lugares en los que se imaginaban pueblos ya constituidos: tal ocurrió con Tacna, río          una importante actividad
Acre, que no era sino una barraca de peruanos de la margen derecha del Yaverija, a la que Bolivia            cauchera, encabezada
llamó Bolpebra al establecer allí sus guarniciones. Sin núcleos poblados, sin caminos, sin líneas de         por Carlos Fermín
comunicación no estaba, pues, la cuenca oriental apta para constituirse en departamento”.                    Fitzcarrald.
                                                                                                             En la fotografía, la boca
                                                                                                             de un afluente del río
EL INFORME FORBES SOBRE EL GUANO.- El gobierno de Billinghurst prorrogó el contrato                          Madre de Dios, a inicios
con el ornitólogo H. O. Forbes, ex director del Museo de Liverpool para que estudiara especial-              del siglo XX.
mente a los camanayes, piqueros, guanayes y alcatraces e, igualmente, la puesta e incubación de
estas y otras aves guaneras, así como el método que debía seguirse para proteger sus nidos y
polladas. Forbes presentó su informe al Ministerio de Fomento, y, para constatar su exactitud,
Billinghurst hizo una visita personal el 8 de junio de 1913 a las islas de Chincha y de Ballestas. No
faltaron comentarios periodísticos jocosos para esta excursión que ningún presidente del Perú
había realizado.
     Pero el viaje tuvo una finalidad práctica. Comprobó Billinghurst personalmente que la incu-
bación de las aves guaneras no había terminado y que, por consiguiente, la extracción y carguío
del guano que efectuaba la Peruvian Corporation eran dañosos a la vida de aquellos pájaros y
perjudiciales para la renovación de ese abono. Y fue así como expidió el decreto de 20 de junio
de 1913 que estableció la clausura de las islas Ballestas.
                                                                                                        [ CAPÍTULO 33 ] PERÍODO 6   85
                                           Forbes estimó que todas las islas, penínsulas y rocas que contenían guano, con exclusión de
                                      las islas de Lobos de Afuera, cuyos depósitos eran destinados a cubrir los compromisos contraí-
                                      dos con la Peruvian Corporation, debían dividirse en cuatro zonas, una de las cuales solamente
   EL CALIfICATIVO                    podría ser entregada cada año a la explotación, mientras se clausuraban rigurosamente las otras.
      DE LOCO fUE                     Aconsejó que se limitara solo a un período, entre junio y setiembre, la extracción del guano.
      OTORGADO A
     bILLINGhURST                     LA SUPUESTA EXISTENCIA DE SALITRE EN AREQUIPA.- Una de las ilusiones de Billinghurst
                                      fue la de que existía salitre en las pampas de Camaná acaso con más riqueza que las de Tarapacá.
POR SU PROYECTO                            Con tal motivo el Congreso discutió en sesiones secretas de la legislatura extraordinaria de
DE UNIR LA PUNTA                      1912 el otorgamiento de una autorización a la empresa Dupont de Nemours para construir
  A LA ISLA DE SAN                    pozos y operar represas y depósitos de agua en las pampas de Camaná; y también para transfe-
                                      rirle cualquier derecho al uso permanente de un puerto o bahía cerca de los yacimientos de
 LORENzO CON UN                       nitrato de soda. También se quiso eximir a la misma compañía de todos los impuestos fiscales o
  ENROCADO PARA                       municipales por veinticinco años. Este asunto quedó como un espejismo más.
                                           El convenio con dicha compañía, aprobado por la resolución legislativa de 27 de noviembre
     CONVERTIR EL                     de 1912 para explorar yacimientos de salitre, que no fue publicada, señaló pagos que crearon
       PUERTO DEL                     obligaciones para el Estado y solo llegaron a ser cancelados en 1917.
   CALLAO EN UNA
          DÁRSENA,                    INICIATIVAS DEL GOBIERNO DE BILLINGHURST SOBRE EL BORATO DE CAL Y EL
   PREPARÁNDOLA                       CARBÓN.- Entre otras de las iniciativas del gobierno de Billinghurst estuvo el proyecto para fomen-
           PARA EL                    tar la explotación de los depósitos de borato de cal de Salinas por medio de un contrato firmado el
                                      5 de agosto de 1913 con capitalistas extranjeros, lo que significaba la implantación de la industria
PROGRESO qUE LE                       boratera en el departamento de Arequipa. La interferencia parlamentaria por intereses políticos o
    CORRESPONDÍA                      regionales, obstruyó este proyecto y pidió una renta especial para la Municipalidad de aquella ciu-
                                      dad para lo cual gravó al borato de cal con derechos de refinación, calcinación o desecación.
         ALCANzAR                          También procuró Billinghurst el desarrollo de la explotación de carbón de piedra de Hatun-
        CUANDO SE                     huasi, por medio de una empresa extranjera y con intervención fiscal. La ley aprobada desvirtuó
AbRIERA EL CANAL                      el plan, en concepto del Presidente, al exigir la condición de que los capitales empleados en esta
                                      industria fuesen forzosamente nacionales.
       DE PANAMÁ.
                                      LA UNIÓN DE LA PUNTA CON SAN LORENZO Y EL PROYECTO SOBRE MATARANI.- El
                                      calificativo de loco fue otorgado a Billinghurst por su proyecto de unir La Punta a la isla de San
                                      Lorenzo con un enrocado para convertir el puerto del Callao en una dársena, preparándola para
                                      el progreso que le correspondía alcanzar cuando se abriera el canal de Panamá. En su mensaje
                                      de julio de 1913 expresó Billinghurst lo siguiente: “La parte que actualmente se utiliza en la bahía
                                      del Callao presenta un fondeadero de 918 hectáreas dentro del veril de 6 a 8 brazas de fondo.
                                      Con la unión en proyecto, la parte de aguas abrigadas contra las mareas del oeste aumentará el
                                      fondeadero en cerca de 3 mil hectáreas con un fondo de 10 a 11 brazas, quedando, por consi-
                                      guiente, un fondeadero seguro y abrigado de 4 mil hectáreas aproximadamente”. El espacio
                                      comprendido entre la cabeza norte de la isla y el enrocado debía ser destinado al establecimien-
                                      to de un puerto franco con el objeto de estimular el tráfico y el comercio. Los estudios técnicos
                                      pertinentes fueron llevados a cabo por el ingeniero holandés Jacobo Kraus que, además, pro-
                                      yectó el establecimiento de un puerto en Matarani. La unión de La Punta con la isla de San
                                      Lorenzo y los trabajos complementarios no debían costar más de 1.400.000 libras esterlinas.
                                          Con motivo de este proyecto se dijo que Billinghurst pretendía también abrir un hueco en
                                      medio del cerro San Cristóbal.
   86   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 33 ]
[1]   	 El tema obrero. Desde
        el inicio de su gobierno,
        el presidente Billinghurst
        entabló una buena
        relación con los obreros
        de Lima, en especial con
        los del Callao. En enero
        de 1913, el mandatario
        emitió un decreto que
        implantaba la jornada
        laboral de ocho horas,
        con lo que atendía los
        reclamos de los
        jornaleros del Muelle y
        Dársena del Callao.En
        estas fotografías
        podemos observar a los
        trabajadores de la
        sección de descarga de
        aduanas de la dársena
        (1). y a los peones y
        guardalmacenes de
        aduanas en el puerto (2)
[2]
           [ capítulo 33 ] período 6   87
                                      LA RUTA HUÁNUCO-PUCALLPA.- Deseoso el presidente Billinghurst de establecer cuál era
                                      la vía más corta entre el oriente del Perú y la capital, destacó una expedición al mando de Meso-
                                      nes Muro que partió de Chiclayo para cubrir la zona del norte. A Augurio Mesa Prellwitz, huanu-
        DESEOSO EL                    queño que conocía las montañas de Chinchao y otras del departamento, le encomendó análoga
        PRESIDENTE                    tarea por la región del centro. Mesa Prellwitz cumplió su misión, hizo el recorrido de Lima por la
                                      vía a Pucallpa en menor tiempo que el empleado por el señor Mesones Muro por la ruta Chicla-
 bILLINGhURST DE                      yo-Bajo Marañón y dejó sus documentos en el archivo del Ministerio de Fomento.
 ESTAbLECER CUÁL                          Este es el antecedente de la carretera a Pucallpa que una ley del Congreso Constituyente de
                                      1932, mandó construir y que se convirtió en una realidad durante la administración del general
   ERA LA VÍA MÁS                     Óscar R. Benavides.
  CORTA ENTRE EL
ORIENTE DEL PERú
                                      LOS BASURALES DEL TAJAMAR, LA DIRECCIÓN DE SALUBRIDAD Y LA ASISTENCIA
     Y LA CAPITAL,                    PÚBLICA.- En relación con la ciudad de Lima, Billinghurst recuperó unos terrenos vendidos por
     DESTACÓ UNA                      el Gobierno anterior en la superficie comprendida entre el río Rímac, y la Alameda de Acho y los
                                      puentes de Balta y de Piedra e hizo un arreglo con La Peruvian Corporation para su relleno y
    ExPEDICIÓN AL                     nivelación. A ellos agregó la destrucción de un depósito de basuras situado en la zona del Taja-
         MANDO DE                     mar, entre las márgenes del Rímac y las espaldas del barrio de Malambo. El trabajo de supresión
   MESONES MURO                       de los basurales del Tajamar debía hacerse por cuenta fiscal, para destinar luego dicho terreno a
                                      plantaciones de árboles. La obra de higiene, ornato y cultura de este barrio popular recibió duros
   qUE PARTIÓ DE                      ataques, pues se supuso que era efectuada solo para mantener a los jornaleros a ella dedicados,
   ChICLAYO PARA                      listos para cualquier emergencia política.
  CUbRIR LA zONA                           Lauro Ángel Curletti, en la Dirección de Salubridad realizó entonces una intensa obra y con-
                                      cedió singular importancia a la educación sanitaria de las masas, por medio de folletos y de
      DEL NORTE. A                    conferencias de divulgación. Fue entonces cuando se intensificó en Lima el trabajo del servicio
   AUGURIO MESA                       de Asistencia Pública cuya dirección siguió encomendada a Echenique León García.
        PRELLWITz,
     hUANUqUEñO                       EL FERROCARRIL A CHILCA.- La resolución suprema de 11 de noviembre de 1912 facultó al
 qUE CONOCÍA LAS                      Ministerio de Fomento para que procediera a la construcción de una línea férrea, de vía angos-
                                      ta, entre Lima y Chilca, como primera sección del ferrocarril de Lima a Pisco autorizado por leyes
    MONTAñAS DE                       especiales.
       ChINChAO Y                          Billinghurst albergó grandes esperanzas sobre este ferrocarril en relación con el problema de
                                      la alimentación de la capital mediante el consumo de los artículos producidos en Surco, Ate y
         OTRAS DEL                    Lurín. También consideró que tenía una finalidad estratégica para movilizar tropas al sur en caso
  DEPARTAMENTO,                       de un desembarco enemigo.
   LE ENCOMENDÓ                            Los trabajos continuaron sin interrupción hasta el mes de marzo de 1914 en que, producido
                                      el cambio de Gobierno, quedaron detenidos por falta de fondos. Hasta la fecha mencionada se
  ANÁLOGA TAREA                       habían construido 26 kilómetros de terraplenes y enrielado 19,5 kilómetros. Existía, además,
   POR LA REGIÓN                      material de superestructura adquirido para 20 kilómetros más.
       DEL CENTRO.                         Cuatro años más tarde, la ley N° 2747 de 20 de mayo de 1918, consignó una partida en el
                                      pliego de Fomento para el servicio de este ferrocarril e incluyó en dicho servicio el pago de las
                                      deudas pendientes y su continuación hasta Lurín.
   88   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 33 ]
Senado acordó aplazar el debate hasta conocer la opinión que respecto de dicho proyecto tenía                         LAURO ÁNGEL
el nuevo régimen. El ministro de Fomento Fermín Málaga Santolalla lo respaldó porque llevaba                          CURLETTI
                                                                                                                      (1881-1949)
“a la práctica uno de los puntos más importantes de su programa de administración nacional”;
pero introdujo algunas modificaciones que el Senado aceptó.
     El proyecto así ampliado, contempló, de un lado, la irrigación de las tierras eriazas no aprovecha-
das y que podían servir de base a la colonización por inmigrantes blancos traídos del extranjero o
por campesinos nacionales; y, asimismo, la irrigación para aumentar el agua en los valles ya cultiva-
dos pero en los que este elemento era insuficiente, a fin de que creciera la producción agrícola.
     El debate parlamentario se produjo dentro de un espíritu de amplia colaboración y con la pre-
sencia del ministro Málaga Santolalla. Este, en armonía con las ideas del presidente Billinghurst, plan-
teó un artículo por el cual, con el propósito de asegurar para la irrigación el mejor aprovechamiento
de las aguas existentes, se autorizaba al Poder Ejecutivo para deslindar los derechos de los particula-
res en cada uno de los valles de la República, “debiendo tener en cuenta, a este respecto, el caudal
de que se pueda disponer, las necesidades reales de las tierras por irrigar y los derechos que se aduz-
can”. Era una medida revolucionaria que afectaba a la situación favorable para muchos propietarios
de la costa. Se opusieron los diputados Alfredo Solf y Muro (hábil defensor del proyecto en otros de
sus artículos), Luis José de Orbegoso, Pedro A. del Solar y otros. Málaga Santolalla tuvo que ceder.            En 1912, el presidente
     La ley fue promulgada con el N° 1794 el 4 de enero de 1913. Para llevarla a la práctica se for-            Billinghurst asignó al
malizó el llamado contrato Brytton que no llegó a funcionar por razones ajenas a la voluntad del                médico y político
presidente Billinghurst y de su régimen. Luego las preocupaciones políticas absorbieron la aten-                chalaco, miembro del
ción de este gobernante. El empréstito que autorizara la ley N° 1794 no llegó a ser hecho.                      Partido Liberal, la
                                                                                                                Dirección de Salubridad
                                                                                                                Pública. Como parte de
EL FOMENTO DE LA ARBORICULTURA FRUTAL.- “La arboricultura frutal ha desaparecido                                su gestión, Curletti creó
casi por completo en Lima”, afirmó Billinghurst en su mensaje del 28 de julio de 1913. “La con-                 el servicio de asistencia
centración de la pequeña propiedad agrícola en pocas manos y la sustitución de los árboles                      pública y realizó una
frutales con la caña y el algodón han suprimido el cultivo de la fruta, no sin daño de la salud                 gran campaña de
pública y de la economía doméstica. Hoy solo la gente acomodada puede adquirir aquella,                         educación sanitaria.
pagando precios crecidos que están fuera del alcance de las clases menesterosas”.                               Entre 1919 y 1930, fue
    La suprema resolución de 28 de noviembre de 1912, relativa al establecimiento en la Escuela de              elegido senador por
Agricultura de una sección especial que debía servir de criadero y aclimatación de árboles frutales             Huánuco. En 1921 fue
seleccionados, quiso ser el comienzo de una política del Estado en pro del cultivo intensivo de ellos.          designado ministro de
                                                                                                                Marina y, ese mismo
                                                                                                                año, ministro
LA DIFUSIÓN DE LA HIGIENIZACIÓN Y DEL AGUA POTABLE.- Corresponden a esta épo-                                   de Fomento.
ca las siguientes leyes que prosiguieron un lento y dificultoso proceso:
    Higienización de Ica, Chincha y Pisco (N° 1873 de 24 de noviembre de 1913). Además la ley
N° 1929 de 23 de diciembre de 1913 modificó una anterior sobre el teatro de Ica para aplicar los
fondos mencionados en ella, a las obras de agua, desagüe y pavimentación de la ciudad.
    Empréstito destinado al agua y desagüe de Trujillo para lo que se habían creado rentas en
1906 y se habían liberado la cañería, maquinaria y demás útiles desde 1896 (N° 1890 de 29 de
noviembre de 1913).
    Inclusión por dos anualidades de partidas en el Presupuesto de la República para la provisión
de agua potable por cañerías de hierro a las ciudades de Cerro de Pasco, Tarma, Jauja, Huancayo,
Yauli y Concepción (N° 1737 de 11 de diciembre de 1912).
    Partida en el presupuesto departamental de La Libertad para las obras de agua potable en
Otuzco (N° 1895 del 1º de diciembre de 1913).
    Partida en el presupuesto departamental de Puno para la adquisición y colocación de una
cañería de hierro y una caja para el agua potable de Ayaviri (N° 1808 de 4 de setiembre de 1913).
                                                                                                           [ CAPÍTULO 33 ] PERÍODO 6   89
     [1]                           	 El paso de los alpes
                                     de Bielovucic. En
                                     1913, el intrépido
                                     aviador peruano Juan
                                     Bielovucic atravesó la
                                     cadena de los Alpes, a
                                     bordo de su
                                     monoplano modelo
                                     Henriot. En dicho
                                     viaje, Bielovucic
                                     repitió la ruta seguida
                                     por Jorge Chávez. Su
                                     aterrizaje se produjo
                                     en la ciudad italiana
                                     de Domodossola, lugar
                                     donde el francés de
                                     origen peruano
                                     encontrara la muerte
                                     unos meses antes. Aquí
                                     vemos a Bielovucic
                                     antes de cruzar los
                                     Alpes (2), y en una foto
                                     tomada cerca de
                                     Domodossola (1).
[2]
90   período 6   [ capítulo 33 ]
    Partida en el Presupuesto general para dotar de agua potable a Azángaro (N° 1739 de 11 de                       CHARLES W.
diciembre de 1912). Los estudios habían sido ordenados en 1909 (Ley 1165 de 12 de noviembre                         SUTTON (1877-1949)
de 1909). Otra ley sobre ellos: 6 de noviembre de 1897.
    Empréstito con el fin de implantar el servicio de agua potable en Huacho (N° 1908 de 3 de
diciembre de 1913).
    Partida en el Presupuesto general destinada a dotar de agua potable al pueblo de Huamalí
en la provincia de Jauja (N° 1755 de 17 de diciembre de 1912).
    Partidas en el presupuesto departamental de Arequipa por dos años para el agua potable de
los distritos de Pampacolca y Viraco (N° 1839 de 8 de octubre de 1913).
                                                                                                         [ CAPÍTULO 33 ] PERÍODO 6   91
                                      cálculos sobre la exportación del guano entre 1841 y 1879 cuyo monto fijó en cerca de £ 80.000.000,
                                      para declarar en seguida que la única inversión justificada de tan enorme suma no pasaba de £
                                      1.836.800 (las naves de guerra, la Penitenciaría, el jardín y el Palacio de la Exposición y el Puente de
    bILLINGhURST                      Balta). Afirmación arbitraria era esta, pues el Presidente no podía ignorar la necesidad de gastos
    CREYÓ qUE EL                      como los que, por ejemplo, fueron hechos con motivo de la agresión de la escuadra española en
                                      1864 y otros muchos. De todos modos, planteaba la cuestión de a dónde fueron a parar £
  AñO DE 1913 ERA                     78.000.000 pertenecientes a la nación y de cómo resultó que el Perú, con una riqueza extraordinaria,
  MERAMENTE DE                        tuvo que apelar a los empréstitos extranjeros para efectuar la construcción de vías férreas. A propó-
                                      sito de ellas, Billinghurst hizo el cálculo del costo aproximado de las que habían sido proyectadas en
        ESTUDIO Y                     su tiempo, para llegar a la conclusión de que no era posible llevarlas a cabo todas juntas.
   ORIENTACIÓN Y                          También incluyó en este mensaje importantes datos y cifras sobre la deuda interna y la exter-
    qUE PARA 1914                     na. Tremenda fue su crítica al contrato celebrado el 11 de enero de 1890 con el representante de
                                      los tenedores de bonos, conde de Donoughmore.
 PODRÍA APLICAR                           Pero la finalidad principal de este documento fue, de acuerdo con principios que, desde el
     CON CALMA Y                      Gobierno había enunciado Piérola, dar la voz de alarma ante el mal y el peligro de la prodigalidad
                                      de los egresos públicos y del desarrollo presupuestal. Al comparar el crecimiento de los gastos
         bAJO LOS                     efectuados entre 1894 y 1906, expresó que había habido un desarrollo de 341%, esto es, más de
  DICTADOS DE LA                      26% por año “sin que sea posible encontrar una explicación satisfactoria de este aumento desde
  ExPERIENCIA DE                      que el número de habitantes de la República en ese lapso no se ha triplicado ni las exigencias
                                      de la civilización han podido aumentar en proporciones tan culminantes. No es posible tampoco
UN AñO, SU VASTO                      atribuir ese inflamiento de nuestro Presupuesto a causa de orden económico o administrativo
            PLAN                      porque, si bien es cierto que el costo de la vida y el precio de las cosas ha aumentado visible-
    hACENDARIO.                       mente durante los diez últimos años, esa alza no ha podido dejarse sentir en la forma tan exage-
                                      rada que haya dado lugar al incremento de los gastos que las precedentes cifras acusan”.
                                          Reanudó, pues, Billinghurst la práctica de los mensajes especiales al Parlamento empleada
                                      por Piérola en su administración de 1895 a 1899.
   92   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 33 ]
    Según sus propias palabras no creyó entonces “prudente suprimir ex abrupto y de raíz todo
el parasitarismo oficial tan íntimamente ligado al elemento burocrático, que constituye la peli-
grosa carcoma de la economía de la nación”.                                                               [ 1914 julIo 28 ]
    Las cifras oficiales dan mayores ingresos y mayores egresos en el año 1913 que en el de 1912:
                                                                                                            LAS RELACIONES
                       Ingresos        Ingresos             Egresos          Egresos                        INTERNACIONALES. El 28
                      calculados       efectivos           calculados       efectivos                       de julio de 1914, el
	                                                                                                           presidente Guillermo
	   1912            Lp. 3.313.936     3.714.480              3.313.396      3.726.426                      Billinghurst dirigió un
	   1913            Lp. 3.313.396     5.334.793              3.313.396      5.409.637                      mensaje al país,
                                                                                                            reproducido por
    Billinghurst creyó que el año de 1913 era meramente de estudio y orientación y que para                 El Comercio al día
1914 podría aplicar con calma y bajo los dictados de la experiencia de un año, su vasto plan                siguiente. Dijo el
hacendario.                                                                                                 mandatario: “Mi
    El porcentaje de los gastos fiscales de Presupuesto en 1913 fue el siguiente en relación con            gobierno no ha omitido
el del año anterior:                                                                                        esfuerzos para revestir
                                                                                                            de la mayor cordialidad
            Congreso      Gobierno    RR. EE.     Justicia,    Hacienda     Guerra      Fomento             las relaciones con los
                          y Policía             Instrucción        y          y                             gobiernos amigos,
                                                  y Culto      Comercio     Marina                          considerándose
                                                                                                            especialmente ligado a
	1912        2,41          18,13      3,18        14,29          31,26     24,75        5,98               ellos por las relevantes
	1913        3,21          16,49      3,98        14,48          30,59     24,88        6,87	              pruebas de deferencia
                                                                                                            con que ha sido
    La impresión que se obtiene al examinar este cuadro es que no hubo entre uno y otro año                 favorecido, pues ni la
variaciones fundamentales. La merma en el pliego de Gobierno y Policía aparece compensada                   junta de gobierno pudo
por el alza, más moderada, en los referentes al Congreso, Relaciones Exteriores, Justicia, Guerra y         estar a los días de
(con mayor intensidad) Fomento.                                                                             instalada en relación
    Las cifras antedichas parecen desmentir la tesis de que el gobierno de Billinghurst descuidó            oficial con los gobiernos
a los institutos armados.                                                                                   que tienen la
    En cuanto al pliego de Justicia e Instrucción, estuvo muy lejos de volver a la posición que             representación
alcanzara en 1906 (15,85%), 1907 (17,24%) y 1908 (16,14%) para declinar en los años siguientes              diplomática, o ante los
al arrebatarse rentas antes destinadas a la educación primaria.                                             que está representado el
                                                                                                            Perú. La administración
                                                                                                            inaugurada el 15 de
LA COMPAÑÍA RECAUDADORA DE IMPUESTOS.- La ley N° 1566 de 28 de marzo de 1912                                mayo último ha recibido
autorizó al Ejecutivo para la organización de una sociedad anónima encargada de recaudar los                (…) sugestivas
impuestos fiscales. Prosiguió en esta forma el régimen inaugurado en 1896.                                  manifestaciones de
    En uso de la antedicha facultad, el Banco del Perú y Londres quedó encargado de organizar               cordialidad debidas a
la nueva empresa. De allí resultó el contrato de 25 de febrero de 1913 con la Compañía Recau-               los gobiernos de la
dadora de Impuestos que entró a ejercer sus funciones el 1° de abril del mismo año, en vez de la            República Argentina,
antigua Compañía Nacional de Recaudación. Su capital nominal fue de Lp. 1.500.000.                          Brasil y Chile, que son
    El nuevo contrato redujo el tipo del premio de recaudación al 1%, permitió girar a cargo de             augurio de los más
la entidad entonces creada por cuenta de rendimientos calculados de los impuestos correspon-                halagadores resultados”.
dientes a tres meses sin abonar intereses y arregló un empréstito de Lp. 1.245.000 a la par, con el
7% de interés anual.
    La Compañía Recaudadora quedó encargada de administrar por cuenta del Estado los
estancos del tabaco, opio y alcohol desnaturalizado. Además tuvo a su cargo la recaudación de
los siguientes impuestos: 1) al consumo de alcoholes; 2) al consumo de azúcar; 3) al consumo
                                                                                                      [ CAPÍTULO 33 ] PERÍODO 6   93
                                     de fósforos; 4) sobre la renta del capital movible; 5) la alcabala de enajenaciones; 6) la venta del
                                     papel sellado; 7) los derechos de timbres y registro; 8) la contribución de minas y timbres por
                                     denuncio de minas; 9) la contribución de patentes de Lima y Callao; 10) el papel de multas; 11)
bENAVIDES ACUSÓ                      el papel de aduanas; 12) el mojonazgo y las rentas especiales de instrucción; 13) los derechos
  A bILLINGhURST                     de capitanía.
                                         La duración del contrato fue de cuatro años, que vencieron el 31 de marzo de 1917, y fueron
   EN SU MENSAJE                     prorrogados de hecho durante algún tiempo después.
DE 28 DE JULIO DE
 1914 DE hAbERLA                     LOS EMPRÉSTITOS DE BILLINGHURST.- El Gobierno obtuvo, en febrero de 1913, de la
  AUMENTADO [LA                      Compañía Recaudadora de Impuestos, un empréstito de Lp. 1.245.000 a la par y al 7% de interés,
 DEUDA PúbLICA]                      como se indica en los párrafos precedentes. Con estos fondos se hicieron pagos por obligaciones
                                     pendientes en relación con la Societé Générale por el empréstito suscrito en 1912, la extinguida
   EN CERCA DE 10                    Sociedad Recaudadora, la casa Schneider por compra de armamento y también para afrontar
     MILLONES DE                     otros saldos deudores, todos ellos provenientes de la administración de Leguía.
                                         La ley N° 1607 de 31 de octubre de 1912 autorizó al Ejecutivo para contratar en el país un
SOLES Y DE hAbER                     préstamo en cuenta corriente. Se realizó, entonces, por convenio de 20 de noviembre de 1912,
        ACEPTADO                     un empréstito con los Bancos del Perú y Londres, Alemán Transatlántico, Popular e Internacional
          fORMAS                     por valor de Lp. 664.800 al 8% de interés y amortización a razón de Lp. 25.000 mensuales, para
                                     cancelar las deudas contraídas con dichas instituciones antes del 24 de setiembre de 1912,
    VIOLENTAS DE                     ascendentes a Lp. 394.800. Esta operación de crédito dio al Gobierno Lp. 270.000 para atender
   AMORTIzACIÓN                      las necesidades fiscales; pero el interés de ella fue considerado muy alto y la amortización exce-
   PARA ALGUNOS                      siva. Los bancos prestamistas recibieron pagarés a cargo de la Aduana del Callao.
                                         La ley N° 1831 autorizó al Poder Ejecutivo para contratar un empréstito por la cantidad de Lp.
            DE LOS                   500.000. Al amparo de esta ley el Gobierno obtuvo de los bancos el 5 de diciembre de 1913, un
 PRéSTAMOS Y EL                      préstamo de Lp. 200.000.
                                         Billinghurst pensó en realizar en el extranjero una vasta operación de conversión de la deuda
 COMPROMISO DE                       flotante que no llegó a hacerse.
      REEMbOLSO                          Su gestión hacendaria se vio dificultada por la necesidad de efectuar numerosos pagos por
       INMEDIATO                     compromisos anteriores, entre los que se contaban onerosas sumas que era necesario cancelar
                                     a los bancos, a la cual se agregó la urgencia de depositar en letras y en dinero diversas cantidades
         DE OTROS                    por cuentas que necesitaban aclaración y la necesidad de atender a egresos mayores que los
      ADELANTOS.                     previstos en el Presupuesto.
                                         La verdadera situación de la deuda pública el 4 de febrero de 1914 es un asunto controverti-
                                     ble. Benavides acusó a Billinghurst en su mensaje de 28 de julio de 1914 de haberla aumentado
                                     en cerca de 10 millones de soles y de haber aceptado formas violentas de amortización para
                                     algunos de los préstamos y el compromiso de reembolso inmediato de otros adelantos. Billing-
                                     hurst en su manifiesto del mismo año se defendió extensa y vigorosamente contra esta acusa-
                                     ción. El tema reclama un estudio especial.
                                     [ VIII ]
                                     EL PORVENIR, COMPAÑÍA DE SEGUROS DE VIDA.- Al margen del Estado y de la política
                                     hubo durante la época de Billinghurst algunos interesantes sucesos de importancia económica.
                                     Uno de ellos fue el establecimiento en 1913 de la compañía de seguros peruana sobre la vida “El
                                     Porvenir”, única en su género. Contribuyó a formarla la acción conjunta de las compañías La
                                     Popular, Rímac y La Nacional, establecidas en 1904, 1896 y 1904, respectivamente. Las inversio-
                                     nes locales del dinero erogado por el público en forma de prima de los seguros sobre la vida
                                     sirvieron para aumentar en forma valiosa la capitalización del país.
  94   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 33 ]
EL CULTIVO DEL TÉ.- Francisco A. Loayza fue un combativo periodista desde su primera                               LOS VUELOS
juventud. A los 16 años, publicó su primer semanario, cuando aún era alumno del Colegio de                         DE MONTERO
Guadalupe. Se llamó El Microbio y apareció en 1901. Editó luego, en 1903, La Picota, “semanario
radial y de caricaturas”. Ninguno de ellos tuvo el éxito popular de Fray K. B. Zon entre 1907 y 1911.
Su vida tomó un nuevo rumbo cuando fue nombrado, parece que por el régimen de Billinghurst,
cónsul en Yokohama. En esta ciudad hizo imprimir en 1913 Simiente japonesa, “leyendas y cuen-
tos antiguos del Japón”.
    Allí y en China hizo estudios sobre el cultivo del té, acerca del cual envió un documentado
informe a Lima. Se ha dicho que promovió la introducción de este cultivo en el valle de La Con-
vención, en la hacienda Huyro. El presidente Billinghurst demostró interés personal en el asunto.
Benjamín de la Torre Mar, dueño de Huyro, fue quien primero plantó semillas de té. Casi simultá-
neamente se hacía análogo esfuerzo en Amaybamba de Ramón María Romero. El té cuzqueño
fue exhibido por primera vez en la Exposición del Centenario de Ayacucho en 1924. El Ministerio
de Fomento solicitó que las semillas fuesen conducidas a Huánuco. El té peruano ostenta una
extraordinaria calidad. Su detallada historia está todavía por ser escrita.
                                                                                                             El aviador peruano José
                                                                                                             Ramón Montero estudió
[ Ix ]                                                                                                       en la Escuela Bleriot
LOS VUELOS DE RAMÓN MONTERO.- Brevetado en Francia en la Escuela de Bleriot, el acau-                        (Francia) y regresó al
dalado propietario de Pisco, Ramón Montero, inició el 2 de enero de 1913 una serie de vuelos                 Perú en diciembre de
sobre Lima que provocaron gran entusiasmo. Alternaron con las carreras de caballos en el hipó-               1912. Trajo consigo un
dromo de Santa Beatriz.                                                                                      avión Bleriot XI con
    El 12 de marzo de 1913 partió Montero del aeródromo de Bellavista para iniciar su raid de                motor Gnome de 80 HP,
Lima a Pisco con escalas en Cañete y Chincha. Por fallas en el motor, tuvo que aterrizar en una              a bordo del cual realizó
de las calles de Cerro Azul. Siguió luego su ruta y bajó en Chincha. De allí emprendió la tercera            varios vuelos sobre Lima,
etapa de su vuelo y pudo llegar a Pisco. Aterrizó en las pampas de San Andrés. Así llegó a cumplir           y en febrero de 1913, el
Montero su propósito. Fue el primer piloto que realizó en el Perú un vuelo de larga distancia con            primer vuelo desde la
escalas, el más largo en la costa del Pacífico en América del Sur.                                           capital hasta Pisco.
                                                                                                             Posteriormente, regaló
                                                                                                             dicho avión al ejército
OTROS VUELOS.- El 25 de enero de 1913 realizó Juan Bielovucic la hazaña de atravesar los Alpes.              peruano. Aquí vemos a
    Casi junto con Montero llegó el piloto chileno Eduardo Molina Lavin que tuvo que afrontar                Montero en una
diversos inconvenientes y solo pudo ascender en el cielo de Lima el 24 de diciembre de 1912 y                fotografía de 1912.
el 6 de enero de 1913 en el hipódromo de Santa Beatriz.
    En julio y agosto de 1913 actuaron con éxito en la capital el aviador italiano Rappini y el chi-
leno Clodomiro Figueroa. Como ocurriera antes en el caso del compatriota de este último Moli-
na Lavin, a la naciente profesión aeronáutica no llegaban los entredichos y las asperezas que
habían perturbado antes tan hondamente las relaciones diplomáticas entre el Perú y Chile.
    Figueroa voló en 1915 en Arequipa, Mollendo y Lima (en esta ciudad el 30 de agosto y el 5
de setiembre).
                                                                                                        [ CAPÍTULO 33 ] PERÍODO 6   95
[ tomo 13 ]
capítulo 34 ● I La demora en la apro             el 18 de enero de 1914 ● Los diarios. La          de Billinghurst ● IV Apreciaciones sobre
bación del Presupuesto para 1914 por el        actitud del Partido Civil Independiente    el conflicto constitucional de 1914. El
Congreso ● La dimisión de los ministros       ● Los distintos sectores de la conspira      significado histórico de Billinghurst ● La
Tudela y Maldonado ●  La vigencia del        ción ● Los fundamentos de la propa             segunda crisis de la República Aristocrá
Presupuesto para 1914 por decreto. No         ganda subversiva ● ¿Hubo el intento de       tica ● El plan de Billinghurst. La subleva
hubo rebaja en el pliego de guerra ● II        obtener la renuncia de Billinghurst por       ción de Leguía en 1919 y el plebiscito
El conflicto entre el Presidente y el Con    medios pacíficos? ● La propaganda con       de 1939 ●  La suerte de la reformas pro
greso. El supuesto decreto con la desau      tra el Congreso y a favor del plebiscito ●    pugnadas por Billinghurst ●  La legaliza
torización de este y las causales aduci     El ambiente en Lima al empezar febrero       ción de la aprobación del Presupuesto
das ● Las reformas constitucionales ● Las    ●  ¿Abandonó Billinghurst a última hora      por decreto en 1962 ●  V Formación de
reformas constitucionales en el proyec     la idea del plebiscito? ● El pronuncia        la Junta de Gobierno ● La reunión de los
to de Javier Prado y Mariano H. Cornejo       miento militar del 4 de febrero. Asesi       senadores y diputados residentes en Li
●  El plebiscito ● El armamento del pue      nato del general Enrique Varela ● Ho        ma ● La aprobación de la clase dirigente
blo ●  Casos latinoamericanos de arma      menajes al general Varela ●  El proceso     a la subversión militar en 1914 ● Los as
mentos del pueblo como contrapeso             por el asesinato del general Varela ●  La    censos por la subversión del 4 de febre
al poder militar ● III La conspiración ● El   musa popular y el asesinato del gene        ro ● La tranquilidad pública después del
intento de efectuar el pronunciamiento       ral Varela ● La dimisión y la expatriación   4 de febrero.
LA ADMINISTRACIÓN DE BILLINGHURST (II). EL CONFLICTO
 ENTRE EL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA Y EL CONGRESO,
       Y LA REAPARICIÓN DEL EJÉRCITO EN LA POLÍTICA.
           La segunda crisis en la República Aristocrática
              CAPÍTULO
                         34
                        [ ]
     L
                                   [I]
                                   A DEMORA EN LA APROBACIÓN DEL PRESUPUESTO PARA 1914 POR EL CONGRESO.-
                                   El 24 de setiembre de 1913, al ser conmemorado el primer aniversario de su gobierno (que los
                                   comités populares celebraron con albazos, bailes, serenatas, desfiles nocturnos, farolitos, cohetes
                                   y otras manifestaciones), Billinghurst ofreció un banquete al Congreso. En el discurso de ofreci-
                                   miento tuvo el insólito rasgo de decir que no se sentía satisfecho con lo que había realizado a lo
                                   largo de ese año. Pero, a pesar del suculento agasajo y a pesar de los votos de confianza emitidos
                                   a los ministros de Guerra y Relaciones Exteriores después de sesiones secretas sobre asuntos mili-
                                   tares y diplomáticos, el desacuerdo entre el Presidente y las Cámaras se volvió crecientemente
                                   grave en 1913. Entre otros de los varios episodios ocurridos entonces estuvo el de las interpela-
                                   ciones sobre organización del ejército y adquisición de elementos bélicos formuladas en sesio-
                                   nes secretas al ministro de Guerra por el diputado Rafael Grau(1). La Cámara convino en que el
                                   ministro las respondiera por escrito; pero cuando esta contestación llegó a ser enviada, acordó
                                   remitirle la copia taquigráfica de la sesión de interpelaciones, lo cual fue considerado como una
                                   manera de expresarle que no se había dado por satisfecha.
                                       El Presupuesto vigente en 1912 había sido prorrogado para 1913, según se ha visto. Junto con
                                   esta prórroga hubo una autorización al Ejecutivo para que introdujera en él las alteraciones con-
                                   venientes en armonía con el plan fiscal trazado. El mensaje presidencial del 5 de setiembre de
                                   1913 fue una exposición de motivos del proyecto de Presupuesto para 1914, que incluyó un
                                   detallado manifiesto sobre el estado de la Hacienda Pública. Billinghurst consideró necesaria la
                                   emisión de un empréstito extranjero de 600.000 soles al 6% para invertirlo en satisfacer los com-
                                   promisos del Estado en orden a diferentes deudas, en la renovación del material de guerra y
                                   marina y en algunas obras públicas premiosas entre las que incluyó la construcción de escuelas,
                                   cárceles y cuarteles, algunos ferrocarriles y habitaciones para obreros. Al mismo tiempo manifes-
                                   tó que era indispensable reformar las finanzas, suprimir para siempre el déficit y los gastos super-
                                   fluos, entrar en el régimen de la más severa economía, simplificar el sistema administrativo, extir-
                                   par los abusos y corruptelas que dañaban al régimen rentístico, trabajar por el acrecentamiento
                                   de la riqueza pública y privada, bajo el imperio de la ley, el orden y la tranquilidad y mediante el
                                   desarrollo de la agricultura, las franquicias comerciales y la protección al trabajo en general.
                                       La discusión sobre el pliego de ingresos de ese Presupuesto se inició en la Cámara de Dipu-
                                   tados solo cuando estaba avanzada la legislatura de 1913. Fueron rechazados algunos de sus
                                   capítulos en bloque. Esta votación fue luego reconsiderada. Cuando empezó de nuevo el deba-
                                   te presupuestal se produjeron las algaradas con motivo del asunto relativo al Concejo Provincial
                                   de Lima de que se dio cuenta en el capítulo anterior. La comisión de la Cámara aumentó las cifras
                                   de los pliegos que el Gobierno había disminuido en contraste con la actitud de otros regímenes
                                   que los inflaron. Se produjo con este motivo una discusión entre el ministro Baldomero Maldo-
                                   nado cuya opinión fue adversa al dictamen y el presidente de la comisión Ernesto Ráez (ex
98   PERÍODO 6   [ CAPÍTULO 34 ]
ministro de Leguía) que lo defendió. El diputado José Balta pronunció un discurso para expresar
la opinión de que los ingresos debían ser mayores si eran científicamente calculados. El debate
quedó sin entrar en los detalles de este asunto. La Cámara pasó a discutir otros temas, muchos
de ellos solo de interés particular o local, al lado de la reforma de un artículo de la Constitución         LA úLTIMA SESIÓN
para permitir la tolerancia de cultos que fue aprobada por gran mayoría. Seguramente aplazó la               EN LA qUE SE
cuestión presupuestal con la expectativa de que fuese convocada una legislatura extraordinaria.
Aunque hubo votos de confianza a los ministros de Guerra y de Relaciones Exteriores después                  TRATÓ DEL
de sesiones secretas en la Cámara de Diputados, no faltaron en aquellos momentos acuerdos                    PRESUPUESTO fUE
que indirectamente fueron desagradables para el Ejecutivo como el relativo a la concesión
hecha a la compañía Borax Consolidated aprobado con la enmienda de facultar a la Municipali-
                                                                                                             LA DEL 23 DE
dad de Arequipa para crear un impuesto.                                                                      SETIEMbRE Y LA
    La última sesión en la que se trató del Presupuesto fue la del 23 de setiembre y la legislatura          LEGISLATURA fUE
fue clausurada el 25 de octubre. Asombra que el Presidente de la República no hiciera gestión
alguna durante este período de un mes. Hubo gran desorden entonces en la labor del Parlamen-                 CLAUSURADA EL 25
to con predominio, como se ha dicho ya, de asuntos de interés local y particular. Billinghurst se            DE OCTUbRE.
negó a convocar la legislatura extraordinaria, ni aun con la finalidad exclusiva de sancionar el
Presupuesto para 1914.
                                                                                                             ASOMbRA qUE EL
                                                                                                             PRESIDENTE DE LA
                                                                                                             REPúbLICA NO
LA DIMISIÓN DE LOS MINISTROS TUDELA Y MALDONADO.- Como los ministros Tudela
y Maldonado, en desacuerdo con sus colegas de Guerra, Justicia, Fomento y Gobierno, conside-
                                                                                                             hICIERA GESTIÓN
raban indispensable dicha convocatoria y no tenían seguramente simpatía a la idea de crear un                ALGUNA DURANTE
nuevo orden político basado en la eliminación del Congreso, estuvieron en la condición de dimi-              ESTE PERÍODO DE
sionarios desde fines de octubre, aunque oficializaron su renuncia solo el 24 de diciembre de
1913. Hubo una larga pausa que al principio se atribuyó a la llegada de personajes eminentes al              UN MES.
país y a la celebración de un congreso científico internacional; pero inmediatamente después
siguió la tensión. Los reemplazantes de los ministros dimisionarios después de tan considerable
demora fueron con carácter interino, dos funcionarios: Emilio Althaus, oficial mayor de Relacio-
nes Exteriores y Armando Vélez, director de Administración en el Ministerio de Hacienda. Así
parchado el Gabinete Varela, acompañó al presidente Billinghurst hasta la madrugada del 4 de
febrero de 1914. La presencia de Althaus señaló, según se dijo, la tendencia del civilismo a no
romper con Billinghurst.
    Se dio a la crisis una solución provisional de aplazamiento, sin incidir, como dijo un periódico,
“sobre la miga, el meollo, el entripado” para detenerse en la corteza.
                                                                                                        [ CAPÍTULO 34 ] PERÍODO 6   99
   LAS OPINIONES                     algunos servicios; mientras que en los demás pliegos aparecieron rebajas en el siguiente orden
   DE CORBACHO                       de prelación: Hacienda, Gobierno, Justicia e Instrucción, Fomento, Relaciones Exteriores. El pliego
                                     del Legislativo continuó idéntico.
                                         La ley N° 1961 del 1° de junio de 1914, expedida después del derrocamiento de Billinghurst
                                     invalidó el decreto del 29 de setiembre de 1913 sobre el Presupuesto y autorizó al Poder Ejecu-
                                     tivo para prorrogar los duodécimos correspondientes del Presupuesto de 1912.
                                     [ II ]
                                     EL CONFLICTO ENTRE EL PRESIDENTE Y EL CONGRESO. EL SUPUESTO DECRETO
                                     CON LA DESAUTORIZACIÓN DE ESTE Y LAS CAUSALES ADUCIDAS.- El conflicto entre
                                     el Presidente de la República y el Congreso se convirtió entonces en una lucha por la supervi-
                                     vencia de uno u otro. No existía precedente en el país de una pugna tan grave, salvo, el caso de
                                     Riva-Agüero en 1823. Parlamentos hubo que, en momentos de gran agitación política, preten-
                                     dieron fulminar al presidente con una acusación como en 1832 o con la declaración de vacancia
El militar y político José           de la jefatura de Estado como en 1857 y 1867; pero sin lograr esos radicales objetivos. En opor-
  M. Corbacho, diputado              tunidad que en 1914 era reciente, o sea en 1911, el Gobierno había incorporado a las Cámaras,
   por la provincia de La            por la fuerza, un tercio de adeptos suyos para obtener mayoría y apaciguar así al Poder Legislati-
 Unión entre 1913 y 1918,            vo que le estaba creando serias dificultades. A principios de 1914 se diseñó una situación distin-
afirmó la convicción del             ta. Ella implicaba nada menos que la posibilidad de que el Presidente de la República pretendie-
  presidente Billinghurst            ra destruir al Congreso.
 de disolver el Congreso                  Billinghurst llegó a madurar, con una lentitud que le fue fatal, una fórmula para adoptar esta
          de la República.           radical medida; pero optó por ir postergándola. En La Prensa del 7 de febrero de 1914 se publicó
        Sus declaraciones            el decreto de disolución que había sido impreso sigilosamente; sus originales y pruebas habían
 agudizaron el conflicto             sido corregidas sin haberse llegado a efectuar el tiraje de la edición. Un análisis de este supuesto
     ya existente entre el           decreto lleva a la conclusión de que es auténtico. Resulta importante para la historia del Perú en
 primer mandatario y el              el siglo XX y para quien estudie el Derecho Constitucional peruano sintetizar los 47 “consideran-
         Legislativo. Años           dos” allí consignados.
  después, Corbacho fue                   Empezaba Billinghurst por recordar “la protesta plebiscitaria contra la inmoralidad política y
         reelegido para la           el exclusivismo burocrático que impidió en 1912 la consumación de las falsificaciones electorales
    cámara de diputados              e impuso al Congreso la proclamación del actual Jefe de Estado”. De ella quería hacer tardíamen-
              (1919), como           te la premisa lógica para la renovación total del Poder Legislativo. En su gran mayoría este hallá-
     representante de las            base integrado por representantes provenientes de la imposición y el fraude que habían conde-
    provincias de Pataz y            nado al retraimiento continuo a los partidos populares y provocado, a veces, la protesta armada
           Cajamarquilla.            de los ciudadanos. No reemplazó el nuevo Presidente (seguía diciendo) a las Cámaras por una
                                     asamblea general emanada del voto popular en la creencia de que, debiendo renovarse los ter-
                                     cios bajo la jurisdicción de la Corte Suprema, podría entronizarse paulatinamente la verdad del
                                     sufragio y en la confianza también de que se introducirían reformas en la Constitución.
                                          En 1913, sin embargo, la Corte Suprema anuló la mitad de los procesos electorales. Las juntas
                                     preparatorias de ese año llegaron a desconocer esos fallos y provocaron una protesta popular
                                     que obligó a rectificar tal actitud. Hacía nada menos que 18 años que se había efectuado la revo-
                                     lución total del Congreso (1895). Durante ese lapso, la experiencia política del país era de eleccio-
                                     nes ilegítimas, arbitraria intervención gubernativa en ella, un sistema que convertía las curules en
                                     el patrimonio de unas cuantas familias seleccionadas por el poder central, prórrogas de manda-
                                     tos fenecidos, postergaciones de plazos eleccionarios, transformación de representantes suplen-
                                     tes en representantes propietarios, incorporación a balazos de un tercio en 1911. La Constitución
                                     ordenaba la renovación bienal del Cuerpo Legislativo y el cambio del presidente de la República
                                     cada cuatro años; pero el fallecimiento de Candamo interrumpió en 1904 la coincidencia de estas
                                     elecciones presidenciales y parlamentarias y rompió el equilibrio constitucional expresado en la
           Luego de que
       fuera obligado a
          abandonar el
            poder, en su
                                    p      ublicado en Santiago de Chile en
                                           1915, El Presidente Billinghurst a
                                           la Nación es un documento valio
                                    so para conocer el punto de vista de
                                    uno de los principales actores acerca de
                                                                                        con toda la energía de una conciencia
                                                                                        honrada, que nunca entró en mi plan
                                                                                        político la disolución del Parlamento,
                                                                                        por ac    to di
                                                                                                        recto del Go    bier
                                                                                                                              no o por
                                                                                        medio del voto plebiscitario, como se
         manifiesto a la            los sucesos que llevaron finalmente a        ha asegurado; no obstante que la opi
                                    un militar, Óscar Benavides, a asumir el     nión pública condena, desde tiempo
      Nación redactado              poder. Publicamos algunos fragmentos        atrás, la composición inconstitucional
                en Arica,           del manifiesto billinghurista; sus consi   de nuestras Cámaras, acusándolas, al
                                    derandos pesan severamente sobre los        mismo tiempo, de hallarse hondamente
              Guillermo             devaneos de los líderes del país.               divididas, sin reflexionar que en este
           Billinghurst                                                                 último concepto quizás, representan el
             ensayó una             “Nunca pasó el Perú por crisis política,     estado del país, pues la anarquía que las
                                    financiera e internacional más aguda,       trabaja, no es sino el reflejo de las luchas
           justificación            intensa y pavorosa que la presente,          que agitan al Perú entero (pp. 3-4).
            acerca de la            cuyas proyecciones no son fáciles de
                                    calcular, aunque ellas se divisan con          Como republicano, no concibo la pro
        necesidad de las
                                    claridad por los que no padecemos de           cedencia divina de los reyes, y como
          reformas que              la incurable miopía de la concupiscen       demócrata no acepto las herencias y
              pretendía             cia, que todo lo altera, descolora y des     dinastías presidenciales que se empe
                                    concierta.                                        ñan en acli    ma tar, en nues  tro país,
          introducir en                                                                 determinadas familias de la sociedad
        aquel Congreso              Si el Perú, enfermo y postrado, no logra      peruana, y precisamente, las que nin
      cuya oposición le             sacudirse, pronto y totalmente, del          gún título tienen a la gratitud de la
                                    régimen imperante de vergüenza, mise       Nación, porque sus nombres se hallan
        había resultado             ria y calamidad pública y privada, en el     vinculados a los más espantosos desas
               tan cara.            que los aventureros políticos explotan      tres del Perú! [...]
                                    la cosa pública, como si fuera feudo que
                                    de derecho les pertenece, nuestro país        En verdad que yo procuré, en todo ins
                                    está condenado a ser el ludibrio de las       tante de mi corto periodo presidencial,
                                    naciones de este Continente, que nada        hacer más administración que política,
                                    dicen, pe  ro que con     tem plan con no       pero no según la abominable fórmula
                                    disimulado desdén, cuánto ha ocurrido       de los tiranos que exhiben su labor
                                    en nuestro país, desde el aciago día en          administrativa como espejismo para
                                    que el militarismo mal aconsejado,           deslumbrar a los pueblos, sino confor
                                    derrocó a bayonetazos al Gobierno           me a la práctica honrada y patriota de
                                    constitucional y civil de la República.     los mandatarios que se desviven por
                                                                                        corresponder a las aspiraciones de sus
                                    Como cuestión previa, y sin perjuicio de       mandantes, empeñándose en realizar
                                    que más adelante me ocuparé en ella             sus más urgentes necesidades” (pp.
                                    detenidamente, cúmpleme declarar,          93-94).
influencia con sus votos que otros; 4° La supresión de las vicepresidencias de la República, ger-          AL TRONO
men de intrigas con alarmas y peligros para la paz pública y origen de expectativas para perso-            AUSTROhúNGARO,
nas inadecuadas que pueden ser repudiadas por la opinión pública y el Parlamento; 5° El reem-
plazo del presidente de la República por el presidente del Senado en los casos de inhabilitación;          fRANCISCO
6° La supresión de la iniciativa parlamentaria en los gastos públicos, con el fin de que se limitase       fERNANDO DE
el Congreso a aprobar, desaprobar o modificar las partidas presupuestales; 7° El decreto exclusivo         AUSTRIA, ES
del Poder Ejecutivo para aumentar o disminuir los sueldos de los funcionarios públicos; 8° La
prórroga automática de la legislatura si el Congreso no aprobara en octubre el Presupuesto
                                                                                                           ASESINADO JUNTO A
nacional, con la obligación de ambas Cámaras de ocuparse exclusivamente en sesión continua                 SU ESPOSA EN
de sancionarlo y expedirlo; 9° La prohibición de premios pecuniarios o gracias otorgados por el            SARAJEVO, POR EL
Congreso sin la previa autorización del Poder Ejecutivo; 10° La inclusión de la asistencia pública
                                                                                                           NACIONALISTA
en favor de huérfanos, inválidos y ancianos como obligación del Estado sin abandonarla “a la
acción siempre deficiente de la caridad individual, administrada por instituciones que no han              SERbIO GAVRILO
logrado sustraerse a la degeneración burocrática”; 11° La incompatibilidad entre la función par-           PRINCIP, qUIEN LES
lamentaria y la administrativa extendida a todos los empleos en instituciones locales o especiales
                                                                                                           DISPARÓ CON UN
y a los dependientes y servidores de empresas o sociedades comerciales que tengan negocios
con el Estado; 12° La autorización para que los ministros de Estado pudiesen presentarse como              REVÓLVER. ESTE
candidatos a representaciones parlamentarias; 13° La responsabilidad política de los ministros             MAGNICIDIO fUE
ante el Parlamento y la necesidad de que gobiernen con la confianza de ambas Cámaras; 14° La               UNO DE LOS
implantación en el Perú del sistema de referéndum o plebiscito nacional.
                                                                                                           DETONANTES DE LA
                                                                                                           PRIMERA GUERRA
LAS REFORMAS CONSTITUCIONALES EN EL PROYECTO DE JAVIER PRADO Y MARIA-                                      MUNDIAL. EN LOS
NO H. CORNEJO.- El proyecto de Billinghurst no fue en esta época el único sobre reformas
constitucionales. En agosto de 1912 habían presentado en su Cámara los senadores Javier Prado
                                                                                                           DÍAS SIGUIENTES, EL
y Mariano H. Cornejo el que establecía la elección del presidente de la República por el Congre-           IMPERIO AUSTRO-
so con un período de cinco años y suprimía las vicepresidencias y también las representaciones             húNGARO DECLARÓ
suplentes. Este proyecto llegó a ser aprobado en el Senado con excepción del artículo sobre la
                                                                                                           LA GUERRA A SERbIA,
designación presidencial. Mariano H. Cornejo tuvo directa e íntima conexión con los planes
constitucionalistas de Billinghurst, mientras el sector de opinión que encabezaban los hermanos            Y EL SEGUNDO
Prado se opuso resueltamente a ellos.                                                                      IMPERIO ALEMÁN
                                                                                                           hIzO LO PROPIO
EL PLEBISCITO.- Solo el acto directo y el mandato imperativo de los pueblos (proseguía                     CON RUSIA.
diciendo el proyecto de decreto de Billinghurst) podía hacer viables las reformas concernientes
a la organización y a las facultades de los Poderes públicos, en especial las concernientes a la
disminución del número de representantes y a la supresión de los suplentes, obstaculizadas ine-
vitablemente por intereses personales y de círculo. La renovación total del Congreso ya había
sido aprobada en la Cámara de Senadores; y para llevarla a cabo era preciso cancelar el mandato
de, cuando menos, dos tercios de sus miembros y de todos los suplentes. No cabía lógicamente
aceptar el absurdo de que fuera posible consultar la voluntad de la nación solo después de un
levantamiento armado, que otorgaba a un caudillo rebelde el derecho que se negaba a un
Gobierno legalmente constituido, personero de la inmensa mayoría del país. Tampoco cabía
 qUE DISOLVÍA EL
   PARLAMENTO.                        LOS DIARIOS. LA ACTITUD DEL PARTIDO CIVIL INDEPENDIENTE.- Los diarios de la
                                      capital, La Prensa, La Crónica, La Unión, y también El Callao, singularmente el primero, estaban
                                      contra el Gobierno, al que apoyaban solo su propio órgano La Nación y el periódico obrero La
                                      Acción Popular. Sin embargo, salvo en La Prensa, la oposición era cautelosa.
                                         El Comercio y el Partido Civil Independiente adoptaron una actitud moderada. El 30 de enero de
                                      1914 publicó ese diario, con un comentario elogioso, una carta enviada al Presidente de la
[2]
        Ante la noticia de           LOS DISTINTOS SECTORES DE LA CONSPIRACIÓN.- Ninguno de los dirigentes oficiales
        que el presidente            del Partido Civil en aquellos días tomó parte en la conspiración. Esta actitud suscitó apasionados
      Billinghurst quería            comentarios de Alberto Ulloa en La Prensa después del 4 de febrero. No es cierto, pues, lo que se
    disolver el congreso,            ha afirmado en el sentido de que el civilismo derrocó a Billinghurst. Los sectores más activos de
    nació en su seno una             la conspiración fueron cuatro: 1) el grupo parlamentario (dentro del que habría que señalar a
       conspiración para             Augusto Durand con sus correligionarios del Partido Liberal y a diversos simpatizantes y amigos,
acabar con su gobierno.              a los constitucionales de Osores, a un cenáculo leguiista encabezado por Rafael Grau y a repre-
  En esta conjura fueron             sentantes sueltos); 2) el grupo de la familia Prado (cuyos antecedentes inmediatos, en cuanto a
 apoyados por el Estado              las elecciones de 1912, eran civilistas aspillaguistas); 3) Ulloa y el personal de redacción de su
      Mayor del ejército,            diario La Prensa como elemento de agitación; 4) los jefes y oficiales del ejército como elementos
       encabezado por el             de acción. Durand publicó a fines de enero una circular telegráfica que era un manifiesto subver-
         coronel Óscar R.            sivo contra el propósito presidencial de rebelarse contra el sistema constitucional.
   Benavides. El teniente
 coronel José Urdanivia,
  aquí en una fotografía             LOS FUNDAMENTOS DE LA PROPAGANDA SUBVERSIVA.- La propaganda subversiva se
tomada en 1914, fue uno              basó en los argumentos aducidos en el manifiesto del Congreso, o sea en la voluntad presidencial
          de los primeros            de cancelar el mandato del Poder Legislativo, el establecimiento de un régimen de carácter perso-
   militares en apoyar el            nalista, la errada política internacional, el desorden hacendario, la usurpación de la atribución par-
      movimiento contra              lamentaria de aprobar el Presupuesto de la República y el empleo de las turbas como arma política.
              Billinghurst.               En el discurso que pronunció para ofrecer el banquete a los señores Jorge y Manuel Prado,
                                     antes citado, Pedro M. Oliveira expresó: “Sobre sus ruinas (las del hogar republicano) surgió un
                                     régimen nacido del eclipse moral de las clases altas y de la audacia irrespetuosa, insolente y
                                     demoledora de las clases bajas, estimulada por la ambición enfermiza de un plutócrata predis-
                                     puesto a la omnipotencia”.
                                          Papeles distribuidos entre los sargentos hicieron resaltar, sobre todo, el peligro patriótico exis-
                                     tente en el aplazamiento del plebiscito en Tacna y Arica, el abandono de la política armamentis-
                                     ta, el descuido ante el ejército y las adulaciones a Chile evidenciadas en el envío de comisiones
                                     de obreros a Valparaíso y Santiago.
  Sin embargo, el coronel Augusto Bedoya, que en aquella época era prefecto de Arequipa, rectificó a Grau en la sesión
(1)
de la Cámara de Diputados del 4 de setiembre de 1916 al afirmar que él no recibió de Lima indicación alguna sobre
Pereyra o sobre la disolución del Congreso, ni oficial ni particularmente. Agregó que la tesorería departamental de Are-
quipa no suministró fondos a Pereyra.
[3]
 	 Los opositores. Desde su inicio, el gobierno de Billinghurst fue atacado por grupos parlamentarios de oposición. Entre
   ellos estuvieron los representantes del Partido Liberal. Aquí, vemos al comité directivo de dicho partido, con Augusto
   Durand, su fundador, al centro (3). Por otro lado, estaba Manuel Prado y Ugarteche (el cuarto, de izquierda a derecha)
   (2), quien junto a su hermano Jorge, tuvo un papel fundamental en la revolución que derrocó al Presidente en 1914.
   También en la oposición se encontraba Javier (1), destacado intelectual de la época.
(1) Versión transmitida por Juan Zegarra Russo. Otra versión habla “del valiente general que una noche lo mataron por
no poderlo vencer”.
(1) Más sobre los aspectos sociales de esta reaparición del militarismo institucional en el capítulo que aparece en la
                                       [V]
                                       FORMACIÓN DE LA JUNTA DE GOBIERNO.- Existen tres versiones sobre lo ocurrido en la
                                       reunión celebrada en Palacio, después de la victoria de la sublevación, con el fin de formar el
                                       nuevo Gobierno. Una de ellas proviene de Alberto Ulloa Cisneros en la historia que publicó en
                                       La Prensa sobre los sucesos del 4 de febrero. Otra es la que dio Rafael Grau en su discurso del 1°
                                       de setiembre de 1916 en la Cámara de Diputados. La tercera, muy breve, es la de Alberto Secada
                                       en su discurso del 6 de setiembre del mismo año en aquel recinto.
capítulo 35         ●  I Los sangrientos su        mayo y junio de 1914 ●  El asilo y la de         ●  Los proyectos sobre impuestos a las
cesos de Napo II La pugna entre los
                    ●                                 portación de Augusto Durand y Alberto         utilidades del comercio y la industria y a
partidarios del vicepresidente Rober         Ulloa ● La prisión de Víctor Larco Herrera      los sueldos de los empleados. La matan
to Leguía y los partidarios de nuevas            y Rafael Villanueva y el funcionamiento      za de Arequipa ● Dimisión del Gabinete
elecciones populares ●  La mediación           del hábeas corpus ●  Renuncia de Gon            Schreiber ● El Gabinete Abrill ● Las carac
de Isaías de Piérola ●  La fórmula de la          zález Prada. La Lucha ● La instalación del     terísticas de los gabinetes de Benavides
presidencia provisoria ●  La sesión del        Congreso ordinario de 1914 y el acer           ● El anticipo de las leyes de excepción
Congreso el 15 de mayo de 1914 ● La camiento del leguiismo al régimen de ● Los sucesos de Margos ● IV La ley de
elección del coronel Benavides como            Benavides ●  III El Gabinete Carvajal y el   situación militar ● La ley de cuadros ● El
presidente provisorio ● La resolución le    estallido de la guerra europea ●  El Ga       tiro de guerra ●  V Planteamiento de la
gislativa sobre la presidencia provisoria   binete Sousa ●  El Gabinete Schreiber. El    cuestión La Brea y Pariñas ● VI El guano y
●  Apreciaciones sobre los sucesos del          incidente entre el ministro de Guerra y       los derechos de la Peruvian Corporation
15 de mayo ● La acusación parlamenta           la Cámara de Diputados ● Las gestiones        y de la agricultura nacional ●  El muelle
ria por los sucesos del 15 de mayo ●  El           para que los señores Billinghurst y Du         de Salaverry ●  El muelle de Malabrigo
ascenso del presidente Benavides ● El         rand fuesen expulsados de Tacna y Arica        ●  VII El agua de Li   ma ●  Los servicios de
Gabinete Muñiz. La proclamación de             ●  Los sangrientos sucesos de Vitarte en       agua y desagüe y de agua potable ●  El
Roberto Leguía y las conspiraciones de         enero de 1915 ● La matanza de Llaucán            alumbrado eléctrico en el Cuzco.
         EL CONATO DE TERCER MILITARISMO (1914-1915).
Aspectos políticos, administrativos y sociales. La cuestión
                                         La Brea y Pariñas
             CAPÍTULO
                          35
                         [ ]
      L
                                    [I]
                                    OS SANGRIENTOS SUCESOS DEL NAPO.- En marzo de 1914 se produjeron en Iquitos graves
                                    sucesos en la guarnición allí acantonada. Debíase dos meses en el pago de las propinas a la tropa.
                                    Dentro de ella existían elementos malsanos. Había además, en aquella ciudad, con motivo de la
                                    crisis del caucho, individuos indeseables en estado de falencia que maquinaron un motín con el
                                    objeto de asaltar los establecimientos comerciales e industriales. Al mismo tiempo, hubo el pro-
                                    pósito de libertar a los presos que se encontraban en la cárcel por los crímenes del Putumayo.
                                         El coronel Benjamín Puente, jefe de la plaza y comandante general de la región que, asimis-
                                    mo, desempeñaba la prefectura, se constituyó en el cuartel y, en un gesto de entereza personal,
                                    debeló el motín que iba a anegar en sangre a Iquitos.
                                         Los autores y responsables de la sublevación, que eran los clases y parte de la tropa pertene-
                                    cientes al batallón que guarnecía la ciudad, fueron embarcados en una lancha que, a su vez,
                                    debía ser vigilada por otra comandada por el oficial de marina argentino Casaval. La finalidad de
                                    esta medida fue la de aislarlos mientras podían ser puestos bajo debida custodia. Las dos lanchas
                                    se dirigieron al río Napo. Los presos eran más de cuarenta y sus guardianes no pasaban de die-
                                    ciocho. Se produjo un amotinamiento de aquellos. Después de querer abordar la lancha que los
                                    custodiaba, los rebeldes se echaron a nado para fugar. Algunos murieron ahogados o bajo el
                                    fuego de sus adversarios.
                                         La suspicacia criolla, el apasionamiento político y el espíritu de sensacionalismo hicieron que
                                    los sucesos de Iquitos fuesen denunciados como si se hubiera tratado de hechos pavorosos. Pero
                                    las personas y entidades representativas de aquellas ciudad obsequiaron al coronel Puente con
                                    un gran banquete en el que, por conducto del presidente de la Corte Superior, testimoniáronle
                                    su gratitud. Entre otras cosas, expresó este magistrado: “Bastaría el hecho de haber, con mano
                                    firme, vibrante palabra y marcial actitud contenido la disolución y la muerte que, tendiendo sus
                                    negras alas, en noche no muy lejana, se apoderaban de este pueblo a los gritos sediciosos, todos
                                    insidiosamente acompañados”.
                                         El diputado Rafael Grau, en la sesión de su Cámara el 6 de setiembre de 1915, hizo una rela-
                                    ción minuciosa de lo ocurrido, para desmentir los cargos imputados. No fue contradicho enton-
                                    ces, a pesar de la amplísima libertad de palabra de que gozaba en aquella época el Parlamento.
                                         Los presos por los crímenes del Putumayo fugaron de la cárcel de Iquitos el 30 de mayo de
                                    1915.
                                    [ II ]
                                    LA PUGNA ENTRE LOS PARTIDARIOS DEL VICEPRESIDENTE ROBERTO LEGUÍA Y
                                    LOS PARTIDARIOS DE NUEVAS ELECCIONES POPULARES.- El mandato otorgado a la
                                    Junta de Gobierno por la reunión de diputados y senadores celebrada el 4 de febrero solo debía
                                    durar hasta la instalación oficial del Congreso. ¿Quién debía ir al mando supremo de la Repúbli-
                                    ca? Según el punto de vista estrictamente legal, después de haber dimitido el presidente, era al
                                    primer vicepresidente Roberto Leguía (completamente ajeno al plan de destruir el Parlamento
vicepresidente debía su elección no al sufragio popular sino al voto de ambas Cámaras; pero en             fRENTE A LAS COSTAS
defensa de ellas habíase llevado a cabo el movimiento revolucionario del 4 de febrero. La ley              DE IRLANDA, UN
acerca de su designación había sido debidamente promulgada con el N° 1572 el 22 de agosto                  SUbMARINO ALEMÁN
de 1912.
     Billinghurst narra en su manifiesto de Arica que en la entrevista que tuvo en Palacio en la           U20 hUNDE EL bARCO
madrugada del 4 de febrero con Jorge Prado, cuando él insinuó que su sucesor podía ser el pri-             DE PASAJEROS
mer vicepresidente, Prado repuso: “Nosotros no hemos hecho la revolución para Leguía”.                     LUSITANIA, qUE
     Era obvio que esta fórmula tenía que hallar grandes resistencias. El entronizamiento de
Roberto Leguía no podía ser visto con beneplácito por quienes consideraban que sería la vuelta
                                                                                                           hAbÍA zARPADO
al combatido Gobierno de su hermano que El Comercio en editorial del 22 de febrero calificó                UNOS DÍAS ANTES
duramente. Lo acusó “de aberraciones administrativas, de escándalos políticos, de despilfarro              DEL PUERTO DE
financiero, de profundas y odiosas luchas internas, de desquiciamiento nacional”. Para este sector
                                                                                                           NUEVA YORk
de la opinión la elección de aquel respetable caballero en 1912, en un acto por el cual arrebató
el Congreso a la soberanía popular la potestad de elegir, había sido una imposición del nepotis-           (ESTADOS UNIDOS).
mo, una transacción circunstancial, sin el arraigo en la opinión pública que amparó el título de           EN EL INCIDENTE
Billinghurst. Convertir a Roberto Leguía en el beneficiario del movimiento del 4 de febrero y
                                                                                                           MURIERON 1.198
entregarle el poder para erigir un nuevo régimen con los despojos del caído implicaba según
decían, provocar una ardiente lucha nacional. Lo que el país debía hacer era (en opinión de ellos)         PERSONAS, DE LAS
restablecer plenamente la constitucionalidad e ir a nuevas elecciones. El 4 de febrero de 1914             CUALES 128 ERAN
había sido depuesto el sistema íntegro que fuera erigido en 1912 sin sujeción al texto preciso de          ESTADOUNIDENSES.
la Carta política. Así, los enemigos de Roberto Leguía se enfrentaban a quienes, con el argumen-
to de los títulos legales y de su poderío parlamentario, pretendían que el Congreso resolviera por         ESTE hEChO MARCÓ
sí solo y de inmediato el problema presidencial; y, al negar la validez o la vigencia de la elección       EL INGRESO DE LOS
hecha por este Poder del Estado en 1912 y al oponerse a su confirmación en 1914, se acercaban,             ESTADOS UNIDOS EN
paradojalmente, a las ideas de Billinghurst sobre la necesidad de restituir al pueblo el derecho de
sufragio, es decir, las prerrogativas ciudadanas, para lo cual afirmaban que, de este modo rom-
                                                                                                           LA PRIMERA GUERRA
pían con una política de círculo exclusivista y cerrada.                                                   MUNDIAL. EN SU
     Roberto Leguía había estado ausente del país cuando se produjo la revolución del 4 de febre-          DEfENSA, LOS
ro y, como ya se ha indicado, no había podido prestar el juramento prescrito por la Constitución
                                                                                                           ALEMANES
para quienes recibieran la investidura vicepresidencial.
     Salvo un grupo pequeño de diputados y senadores incorporados en 1913 (después de la                   AfIRMARON qUE
criba efectuada por la Corte Suprema) el personal de ambas Cámaras era el mismo de 1912.                   EL LUSITANIA
     Al grupo leguiista, muy fuerte, por eso, en el Congreso, se unieron el jefe del Partido Liberal
                                                                                                           TRANSPORTAbA
Augusto Durand y sus correligionarios y amigos. El vocero periodístico de esta alianza fue La
Prensa con todo el prestigio que le daban su director y propietario Alberto Ulloa Cisneros, sus            MATERIAL béLICO, LO
colaboradores y su reciente campaña contra Billinghurst. La propaganda de La Prensa no solo se             qUE fUE
basó en el título constitucional con que hallábase revestido Leguía sino también en el repudio             CONfIRMADO EN
al “bloque” que pretendía apoderarse del poder. El Partido Civil (antes llamado Partido Civil Inde-
pendiente), secundado por el Constitucional y un sector del Partido Demócrata propugnaron la               INVESTIGACIONES
convocatoria a elecciones generales. Dentro de esta corriente de opinión se distinguieron Joa-             POSTERIORES.
quín Capelo, Fernando Gazzani y José María de la Jara y Ureta en la agrupación fundada por
Piérola; David Matto, Manuel Irigoyen Canseco y Mario Sosa como personeros constitucionales y
Luis Pardo y Barreda, Germán Arenas y Vicente Maúrtua en su calidad de delegados del Partido
Civil Independiente. A ellos se agregaron personajes como Alejandro Deustua, Augusto E. Pérez
una salva de aplausos y vivas. Acto continuo, prestó el siguiente juramento. “Yo Óscar R. Benavi-           PLAzUELA DE LA
des, juro por Dios y estos Santos Evangelios que desempeñaré fielmente el cargo de Presidente               MERCED EL
Provisorio que me ha confiado el Honorable Congreso; que protegeré la Religión del Estado,
conservaré la integridad, independencia y unidad de la Nación; y guardaré y haré guardar la                 MONUMENTO
Constitución y sus leyes”. Inmediatamente después pronunció las siguientes palabras: “Reitero mi            CONSTRUIDO EN
juramento, honorables señores, diciendo a los pueblos del Perú, ante el Congreso de mi Patria:              hOMENAJE AL
que el coronel Benavides no está banderizado ni lo estará nunca. Las elecciones se verificarán,
puesto que ellas deben verificarse, en la forma más legal que armonizando los intereses del Esta-
                                                                                                            PRESIDENTE RAMÓN
do, den una idea completa del querer de los pueblos, y en este caso y en ese camino el coronel              CASTILLA. LA
Benavides será el más imparcial entre los imparciales. Acepto, pues, honorables señores, esta               ESCULTURA fUE
banda con que en mí honráis al ejército; en nombre del ejército os digo que el Perú tiene un
                                                                                                            REALIzADA POR EL
poder militar que sabrá sostenerlo en cualquier momento, que ni lo ha perdido; que el Congreso
puede contar con él y que los pueblos en general sabrán que tienen quien lo haga respetar: el               ARTISTA DAVID
ejército y la marina del Perú”.                                                                             LOzANO Y DEVELADA
    En seguida el coronel Benavides se retiró de la sala y el presidente dio por terminada la sesión.
                                                                                                            POR EL GENERAL
Eran las 5 y 10 de la tarde.
    A las 5 y 30 de la tarde regresó al Palacio de Gobierno el coronel Benavides, investido con la          ANDRéS AVELINO
banda presidencial. Le acompañaban los miembros de la casa militar. El carruaje de gala y los dos           CÁCERES EN UN ACTO
restantes que ocupaban los edecanes, venían precedidos por cuatro batidores, seguidos por el                OfICIAL DIRIGIDO POR
Escuadrón Escolta. Instantes después llegaron al Palacio los representantes adictos para felicitar-
le. En esos momentos un grupo de gente se estacionó en la Plazuela de los Desamparados                      EL PRESIDENTE ÓSCAR
delante de los balcones de Palacio que daban a esa plazuela, y pidió a gritos y palmadas que                R. bENAVIDES. DESDE
saliese al balcón el “general Benavides”. El coronel Benavides se asomó entonces al balcón y fue            EL fUERTE SANTA
muy aplaudido. Dirigió la palabra a los manifestantes en estos términos: “¡Pueblo! ¿Qué queréis
que os diga? Si queréis que os hable de patriotismo, esta casaca lo dirá mejor que yo; si queréis
                                                                                                            CATALINA, SE SALUDÓ
que os hable de honradez, estos galones son honradez; si queréis que os hable de garantías, ahí             LA CEREMONIA CON EL
está el juramento que acabo de hacer para que vosotros, ese pueblo que yo amo tanto, elija su               DISPARO DE VEINTIúN
Presidente; y si queréis que os hable de sacrificios, varias veces me he sacrificado, y, ahora mismo,
                                                                                                            CAñONAzOS.
estoy dispuesto a dar lo más preciado: la vida por la Patria!”.
    Cuando entró nuevamente al recinto presidencial, recibió las felicitaciones de los representan-
tes y de algunos otros amigos suyos. Luego procedió a tomar el juramento a los miembros de su
Gabinete. Lo integraban el general Pedro E. Muñiz, como ministro de Guerra y Marina y presidente
del Consejo; Fernando Gazzani, ministro de Relaciones Exteriores; Hildebrando Fuentes, de Gobier-
no y Policía; Luis Julio Menéndez, de Justicia; Luis Felipe Villarán (hijo), de Hacienda; y Joaquín
Capelo, de Fomento. Terminado este acto que fue presenciado por las personas ya mencionadas
y los miembros de la Casa Militar, los circunstantes aplaudieron. A las siete de la noche se celebró
un Consejo de ministros presidido por el coronel Benavides, el cual concluyó una hora después.
    Después se dio comienzo al desfile de las tropas, que habían formado con motivo de la ins-
talación del Congreso desde las dos de la tarde. Mandaba la línea el coronel Gerardo Álvarez, jefe
de la zona militar de Lima. Fue presenciado desde los balcones de Palacio.
    A las ocho de la noche, se oyeron algunos vivas delante de la puerta de honor de Palacio,
dados a Javier Prado y Ugarteche, que acompañado de su hermano Jorge, entraban a felicitar al
coronel Benavides, con quien departieron por breves momentos.
             fue Manuel
         González Prada
              uno de los
          escritores más
                                    m           otivado por la vuelta del mili
                                                tarismo, González Prada publi
                                                có el periódico La Lucha. El
                                    editorial del primer y único número se
                                    iniciaba con las siguientes palabras: “El
                                                                                          Se ha dicho que los hombres nos pare
                                                                                          cemos a ciertos animales, ya por los
                                                                                          instintos, ya por la fisonomía. Puede
                                                                                          que Suluque guarde algún parecido
                                                                                          con la urraca y el tigre; pero recuerda
                                    nombre de esta publicación nos exime            especialmente a la comadreja y al
            ingeniosos y            del programa. Venimos a luchar por los           búho. A la comadreja, por llevar consi
         certeros en sus            derechos del ciudadano contra las ini          go una lechigada de marsupiales lla
      críticas a la clase           quidades de la soldadesca, por los fue          mados a succionar la leche del Tesoro
                                    ros del racional contra las embestidas          público. Al búho, tanto por los ojos
       política peruana.            del bruto”.                                          cuanto por lo noctámbulo: firma decre
       El Coronel Óscar                                                                   tos a las dos de la mañana y en altas
                                    Aunque a La Lucha le dieron rápida               horas de la noche celebra consejos de
      R. Benavides no se            muerte las medidas represivas del               ministros. [...]
            salvó de los            Gobierno, González Prada continuó sus
           ataques de su            ataques. Sus escritos de esta época fue         Suluque no inventó la pólvora; mas tal
                                    ron publicados póstumamente, en 1933           vez descubra el modo de freír la nieve.
                  pluma.            (Sobre el militarismo (antología): bajo el   No es un analfabeto, aunque lo parez
                                    oprobio [Lima: Horizonte, ed. de 1978]).         ca. Sabe leer y escribir. Sabe contar, no
                                    Ya en La Lucha, y aludiendo a Benavides,        ignorando que 250 libras mensuales
                                    González Prada había escrito: “A los            suman 2.500 soles al mes. [...]. Sabe
                                    noventa años de independencia, no se            también mandar un pelotón de solda
                                    debe admitir el reinado de un segundo          dos y hasta guiarle a la victoria, si va
                                    Behanzín o de un nuevo Suluque”. Fue             sostenido por buques de guerra y,
                                    este, Faustin Élie Soulouque, un negro            sobre todo, si el enemigo es numérica
                                    haitiano que en 1849 se proclamó empe           mente inferior [...]. A falta de valor, le
                                    rador como Faustino I y gobernó tiráni       sobran crueldad y ningún respeto a la
                                    camente hasta 1859. González Prada se           vida ajena. La consigna del Partido
                                    ocupó de “Suluque II” –el coronel Bena         Civil fue negociar; la del Demócrata,
                                    vides–, legándonos fina muestra de la           mentir; la del Constitucional, romper
                                    tradición de sátira política peruana:        la Constitución, la del Liberal, servir
                                                                                          de ra  bo; la de la Unión Na        cional,
                                    “Ese coronel acaba de dar un golpe de             desunirse; la consigna de Suluque es
                                    Estado y proclamarse emperador con el         matar. [...]
                                    nombre, no de Faustino II como parecía
                                    natural, sino con el de Suluque II, varian     ¿De dónde viene Suluque? De donde
                                    do la ortografía de su apellido. Como           viene el roedor de la bubónica y el zan
                                    Suluque II ha llevado la vida oscura de        cudo de la fiebre amarilla. ¿Dónde va
                                    las guarniciones y casi nadie le conoce,       Suluque? Probablemente donde fueron
                                    algunos se preguntan hoy: ¿Qué es? [...]          los Gutiérrez” (pp. 52-53).
grave daño para el porvenir del país”. Carácter irrevocable otorgó a esta actitud, consecuente con
sus ideas sobre la necesaria vinculación entre las corrientes parlamentarias y la función ministe-        DICTADOR MExICANO
rial. Tudela y Varela estaba en desacuerdo con el voto que la Cámara de Diputados dio el 16 de            PORfIRIO DÍAz
setiembre para reformar el proyecto gubernativo sobre ampliación de la emisión de los cheques
circulares a Lp. 2.500.000, con una garantía de oro solo de 20%. El proyecto primitivo fijaba la          DURANTE SU ExILIO
emisión en Lp. 2.000.000 con la garantía de 35%(1).                                                       EN LA CIUDAD DE
     La demora en la provisión del Ministerio de Hacienda, servida por quien tenía a su cargo el          PARÍS. DÍAz SE VIO
de Justicia, dio lugar a una moción del diputado Juan Manuel Torres Balcázar el 21 de octubre de
1914 para que cesara tan notoria anomalía. Esta moción fue rechazada; pero suscitó un intere-
                                                                                                          ObLIGADO A
sante debate sobre los ministros interinos.                                                               AbANDONAR EL
     Aurelio Sousa pasó como titular a la cartera de Hacienda el 22 de octubre, después de ocupar-        PODER EL 25 DE MAYO
la interinamente durante poco más de un mes. Su programa giró alrededor de la reducción de los
                                                                                                          DE 1911, TRAS EL
gastos públicos. Ministro de Justicia fue nombrado el diputado Daniel Isaac Castillo. Pero Sousa no
permaneció en su nuevo portafolio sino un mes. Al agravarse la situación económica creyó nece-            TRIUNfO DE LA
saria la adopción de nuevas medidas y también que era su deber dimitir (5 de noviembre). El 9             REVOLUCIÓN
insistió en su renuncia después de que ella no había sido admitida, y anunció que se había suscita-
                                                                                                          MExICANA INICIADA
do según él dijo “una cuestión enojosa que puede perturbar la serenidad que demanda la hora”.
Sousa aclaró, por lo demás, que estaba de acuerdo con el Presidente. No se hizo público cuál fue          POR fRANCISCO
dicha cuestión.                                                                                           IGNACIO MADERO
                                                                                                          EN 1910. SU
EL GABINETE SCHREIBER. EL INCIDENTE ENTRE EL MINISTRO DE GUERRA Y LA                                      PROLONGADO
CÁMARA DE DIPUTADOS.- La economía en el manejo de los fondos públicos y la libertad                       GObIERNO, AL qUE
electoral constituyeron el programa del Gabinete que el 11 de noviembre de 1914 presidió el               SE CONOCE COMO
senador Germán Schreiber, en la cartera de Hacienda y que, en las demás carteras, estuvo inte-
grado por los mismos miembros del Ministerio Sousa.
                                                                                                          EL PORfIRIATO, SE
    La Cámara de Diputados señaló el término de tres días para el envío de unos datos y docu-             INICIÓ EN 1876,
mentos, algunos de ellos relacionados con los sucesos del 4 de febrero y del 15 de mayo, pedi-            CONTINUÓ ENTRE
dos por Juan M. Torres Balcázar al ministro de Guerra coronel Augusto Bedoya y se dio por
                                                                                                          1877 Y 1880, Y LUEGO
ofendida ante la altiva respuesta de este negándose a cumplir dicho plazo. Con tal motivo se
produjo un voto que insistía en la misma solicitud el 18 de diciembre de 1914. La Cámara subor-           ENTRE 1884 Y 1911.
dinó su posición política gobiernista a una cuestión de espíritu de cuerpo. Al presentar su
renuncia, el coronel Bedoya se declaró satisfecho por haber cumplido el deber de sostener “el
principio de igualdad e independencia de los Poderes del Estado” (19 de diciembre). Lo reem-
plazó el coronel Carlos Abrill.
                                     [ IV ]
                                     LA LEY DE SITUACIÓN MILITAR.- La ley de ascensos de 27 de noviembre de 1901 había sido
                                     promulgada con carácter provisional y necesitaba, además, ser complementada por leyes de
                                     situación, cuadros y organización militares. Su subsistencia aislada había dado lugar a una con-
                                     gestión en todos los grados de la jerarquía produciéndose malestar en las promociones periódi-
                                     cas por falta de vacantes.
                                         El gobierno de Benavides envió al Parlamento, en 1914, un proyecto de ley de situación mili-
                                     tar que señalaba las obligaciones y los derechos establecidos entre el jefe u oficial de los institu-
                                     tos armados y el Estado. Con ella resultaron abiertas las puertas del retiro forzoso a los jefes y
                                     oficiales fatigados por la edad, las enfermedades u otros motivos, rejuveneciéndose los cuadros.
                                     La ley contempló las situaciones de actividad, disponibilidad y retiro.
                                         Con algunas modificaciones de detalle el proyecto llegó a ser aprobado. Fue promulgado el
                                     26 de marzo de 1915 con el N° 2118.
                                         Declaró obligatoria la separación de la actividad del servicio en el ejército en los límites de
                                     edad siguientes que deben ser comparados con los que se han establecido posteriormente:
[2]
 	 La práctica del tiro. En noviembre de 1914, el gobierno provisorio del general Óscar R. Benavides
   estableció la obligatoriedad de la instrucción de tiro para aquellos llamados al servicio militar. A partir de
   dicha moción, la práctica de esta disciplina se difundió aun más entre la población. Se realizaron así
   diversas competencias y prácticas, y se formaron clubes deportivos dedicados al tiro. En estas fotografías
   vemos a la delegación de tiro peruano que participó en los Juegos Panamericanos de 1913, en los Estados
   Unidos (1) y escenas de la práctica de tiro en el ejército en 1917 (2).
                                       LA LEY DE CUADROS.- Con fecha 14 de enero de 1915 el ministro de Guerra, Carlos I. Abrill,
                                       envió a la Cámara de Diputados un proyecto de ley de cuadros de jefes y oficiales del ejército. La
                                       Cámara lo aprobó en la legislatura ordinaria de aquel año, tras breve debate. El ponente para este
                                       acuerdo fue Rafael Grau.
                                           La ley cerró el escalafón, trató de cortar las vías para los ascensos sin merecimientos o por
                                       complacencia y fijó el criterio que debía servir de base para el desenvolvimiento del ejército y
                                       para la movilización cuando llegara la oportunidad de la defensa nacional.
                                           El número señalado para los jefes y oficiales en actividad fue el siguiente: 2 generales de divi-
                                       sión; 5 generales de brigada; 36 coroneles; 63 tenientes coroneles; 88 mayores; 194 capitanes;
                                       241 tenientes; 194 subtenientes. Total: 823 jefes y oficiales. Oficiales de Sanidad: 1 coronel; 1
                                       teniente coronel; 6 mayores; 23 capitanes; 6 tenientes; 6 subtenientes.
                                           El Senado no llegó a aprobar la ley de cuadros.
[V]
PLANTEAMIENTO DE LA CUESTIÓN LA BREA Y PARIÑAS.- En el capítulo acerca de los
aspectos económicos del período 1886-1890 se trató del asunto de La Brea y Pariñas. El aumen-
to en la producción de petróleo iniciado al comenzar a ser trabajados los yacimientos de Lobitos
en 1904, se intensificó cuando en 1913 la empresa inglesa London & Pacific Petroleum Company
se convirtió en arrendataria de aquella concesión.
    En 1911, el ingeniero Ricardo A. Deustua dio una conferencia en la Sociedad Geográfica de
Lima sobre las anomalías existentes en el área de La Brea y Pariñas.
    La resolución suprema de 31 de marzo de 1911 mandó remensurar dicha mina. A nombre de
William Keswick, propietario de La Brea solicitó la casa Duncan Fox y Compañía su reconsidera-
ción. El expediente pasó al Consejo Superior de Minería. El informe del vocal de dicho organismo
José Salvador Cavero desechó los argumentos aducidos por el reclamante. El fiscal de la Corte
Suprema José Antonio de Lavalle y Pardo emitió una vista el 3 de julio de 1912 en el que rebatió            El magistrado limeño fue
ampliamente el punto de vista de Keswick y sostuvo, desde el punto de vista jurídico, el legítimo           designado fiscal de la
derecho del Estado al cobro de la totalidad del impuesto que le correspondía. Ante un nuevo                 Corte Suprema de
recurso de Duncan Fox, la resolución de 25 de abril de 1914, expedida por la Junta de Gobierno,             Justicia en 1898. Como
ordenó llevar adelante la operación de remensura. La resolución de 15 de marzo de 1915, en la               parte de su gestión,
época de la presidencia provisoria de Benavides, aprobó la remensura hecha por los ingenieros               debió hacer frente a la
Alberto Jochamowitz y Héctor Boza. Ella señaló 1.664,5 kilómetros cuadrados y 41.614 pertenen-              disputa por los
cias regulares en vez de 10 irregulares en la zona de La Brea y Pariñas y ordenó el pago del corres-        yacimientos petrolíferos
pondiente canon de superficie a razón de S/.30 por hectárea o, lo que es lo mismo, S/.1.248.420,00          de La Brea, en el
al año en lugar de los S/.300 que se habían estado pagando hasta entonces. Los herederos de                 departamento de Piura.
William Keswick, representados por Milne y Compañía, reclamaron de la resolución de 25 de abril             Lavalle y Pardo reafirmó
de 1914, así como de la remensura y adoptaron igual actitud ante la resolución de 15 de marzo               el derecho del Estado de
de 1915. En esta última oportunidad intervino el ministro de Inglaterra en Lima, Ernest A. Rennie           cobrar todos los
para amparar, tanto a los propietarios de la mina, que eran los herederos del mencionado súbdi-             impuestos
to inglés, como a la empresa arrendataria, o sea a la London & Pacific y Petroleum. El ministro de          correspondientes por la
Estados Unidos también presentó una reclamación por estar conectada dicha empresa con la                    extracción del crudo.
Standard Oil Company.
    Se produjo entonces un informe definitivo del Consejo Superior de Minería, a base del que
emitieron los ingenieros Aurelio Miró Quesada y Michel Fort, con la historia del asunto desde
1826 y con la opinión en el sentido de que fuera declarado sin lugar el pedido de insubsistencia
de la resolución suprema de marzo de 1915.
    A base de este antecedente inmediato llegó a ser expedida por el presidente Benavides y su
ministro Francisco Alayza Paz Soldán la resolución de 22 de mayo denegatoria de la reconsidera-
ción que con tanta insistencia había sido solicitada. Ella denegó el pedido para que el asunto
fuese sometido al Poder Judicial pues la remensura de los yacimientos tenía el carácter esencial-
mente administrativo.
[ VI ]
EL GUANO Y LOS DERECHOS DE LA PERUVIAN CORPORATION Y DE LA AGRICUL-
TURA NACIONAL.- En el contrato de cancelación de la deuda externa de 11 de enero de 1890
el Perú cedió a los tenedores de bonos el guano existente en el territorio nacional hasta la can-
tidad de tres millones de toneladas inglesas y reservó para sí el exceso que pudiera haber sobre
             El indigenista
         moqueguano Luis
       Eduardo Valcárcel
          nos ha dejado en
                                    A         l Cuzco del 900 lo separaba un
                                              mes de viaje de la capital del
                                              país. Si se tomara como indica
                                    dor la modernización urbana que en
                                    Lima se inició en el siglo XIX gracias a
                                                                                       brazos salientes en las esquinas y que
                                                                                       para encenderlos y apagarlos deman
                                                                                       daban la ocupac ión cotid iana de
                                                                                       varios individuos. A las seis de la tarde
                                                                                       los encendedores llevaban una escale
         sus memorias una           los recursos del guano, esta distancia       rita para subir hasta ellos y prenderlos
        interesante visión          se “extendería” mucho más. Sin agua            con cuidado. Despedían una luz opaca
                                    potable ni desagüe, el líquido vital        y tenue. Solo estaba iluminado el
                 del cambio
                                    para los cuzqueños se mandaba traer           cen tro de la ciu     dad, unas seis o
            generado en el          de un manantial que brotaba a una              siete calles en total, todo el resto eran
              Cuzco por la          legua (5 ki  ló
                                                     me tros) de la ur    be. Un     casuchas, como las de barriadas actua
             llegada de la          indio sobre una mula anunciaba el             les, oscuras y lúgubres, hechas de
            electricidad, a         arribo del correo que portaba con el           adobe. Entre nueve y diez de la noche
                                    so nido de su an   tara. De he   cho, las     se apagaban los faroles y la ciudad
      inicios del siglo XX.         comunicaciones, hasta la llegada de        entera quedaba sumida en la más
                                    teléfono (1905) y del ferrocarril (1908),    absoluta oscuridad. Para esa hora no
                                    reposaron, como antaño, casi íntegra     había ya ninguna actividad. A diferen
                                    mente en las cabalgaduras.                    cia de Lima, en el Cuzco no había sere
                                                                                       nos” (p. 13).
                                    Por eso, como si se volteara una página
                                    en la historia de la ciudad, el nuevo          Y he aquí el después: “En la Navidad
                                    siglo trajo consigo los primeros símbo     de 1914 el Cuzco re      cibió una gran
                                    los de la experiencia moderna. Uno de         mejora en sus servicios. Gracias a la
                                    ellos, de notable impacto, fue la instala   iniciativa de un grupo de cusqueños
                                    ción del alumbrado eléctrico. Luis             que formaron una empresa, se instaló
                                    Eduardo Valcárcel, el famoso indigenis    el alumbrado eléctrico y ya entonces
                                    ta moqueguano, fue testigo de excep         la ciudad presentó un aspecto diferen
                                    ción del cambio, pues se mudó al Cuzco          te. Con el alumbrado eléctrico y con la
                                    cuando aún era niño. Dos pasajes de            implantación de los servicios de agua
                                    sus Memorias (Li    ma: IEP, 1981) bien         y desagüe se inició la modernización
                                    pueden ilustrar la honda repercusión         de la ciu    dad. Y, fi
                                                                                                               nal
                                                                                                                  men te, con la
                                    de la luz eléctrica en la transformación      canalización del Huatanay mejoraron
                                    de la vida de los moradores del Cuzco         notablemente sus condiciones higié
                                    imperial. He aquí el antes:                     nicas. A partir de entonces el Cuzco
                                                                                       fue perdiendo esa imagen pueblerina
                                    “El alumbrado público era a kerosene,       que tuvo hasta los primeros años de
                                    en faroles de fierro que pendían de            este siglo” (p. 16).
El ministro de Hacienda              EL MUELLE DE MALABRIGO.- La resolución suprema de 21 de julio de 1915 otorgó a la firma
 Baldomero Maldonado,                Gildemeister y Cía., la construción y explotación a perpetuidad de un muelle en la caleta de Mala-
  aquí en una fotografía             brigo en el valle de Chicama de la provincia de Trujillo, a fin de efectuar embarques y desembar-
     de 1912, defendió la            ques por cuenta propia y de particulares; y le concedió, asimismo, los derechos de propiedad y
   posición del gobierno             explotación perpetuos del ferrocarril que construyera, para lo cual se basó en la ley autoritativa
           de adjudicar a            sobre la constitución de ferrocarriles del 9 de noviembre de 1893. Hubo en este asunto prescin-
  perpetuidad el muelle              dencia de diversos trámites. La casa Gildemeister hizo un préstamo al Gobierno que estaba en
         de Malabrigo en             situación angustiosa en esos días.
         Trujillo. De esta               La Cámara de Comercio, Agricultura e Industrias del departamento de La Libertad se opuso
  manera, se enfrentó a              a la concesión, la calificó de ilegal y sostuvo que perjudicaba a la región.
            los senadores                Los senadores Víctor Larco Herrera, Augusto G. Ganoza y José I. Chopitea llevaron el asunto a
      representantes del             su Cámara con el objeto de sostener el mismo punto de vista. El ministro de Hacienda Baldome-
 departamento, quienes               ro Maldonado defendió, en cambio, la concesión, lo mismo que los senadores Enrique Coronel
    afirmaban que dicha              Zegarra, Miguel Echenique, Ernesto Diez Canseco y Aurelio Fernández Concha, entre otros. El
concesión perjudicaba a              Senado rechazó la declaratoria de nulidad pedida por los senadores por La Libertad; pero redujo
   la región. Maldonado              a 25 años el plazo para construir y explotar el muelle de Malabrigo. La Cámara de Diputados no
 encabezó la cartera de              adoptó acuerdo sobre este asunto.
        Hacienda en tres
    oportunidades: 1912,
               1913 y 1917.          [ VII ]
                                     EL AGUA DE LIMA.- El decreto de 18 de febrero de 1913 dispuso la expropiación de los dere-
                                     chos de la extinguida Empresa del Agua de Lima emanada de un contrato suscrito en 1855; y
                                     puso a la vez el servicio de agua de la capital bajo la administración inmediata del Estado.
                                          Este decreto fue derogado en parte por la resolución expedida por la Junta de Gobierno con
                                     fecha de 4 de mayo de 1914, en virtud de la cual, en acatamiento del derecho del Consejo Pro-
                                     vincial, se le restituyó el indicado servicio con todas sus instalaciones, dependencias y accesorios
                                     que, en efecto, le fueron entregados.
                                          El Congreso concedió fuerza de ley a la resolución suprema antedicha, por resolución legis-
                                     lativa N° 2324 de 6 de noviembre de 1916.
            CAPÍTULO
                      3
                     [ 6]
      L
                                    [I]
                                    oS EFEctoS INMEDIatoS DE la GuERRa DE 1914.- Las guerras de Napoleón I no tuvieron
                                    consecuencias económicas directas e inmediatas en el Perú salvo las vinculadas con el comercio
                                    entre España y sus colonias. La guerra entre Francia y Alemania en 1870 repercutió desastrosamente
                                    sobre el empréstito nacional que en esa época se gestionaba en París. La conflagración europea que
                                    estalló en agosto de 1914 dejó surtir sus efectos, en cambio, automáticamente, en todos los países
                                    americanos. Desde el punto de vista económico esta influencia tuvo una etapa inicial de pánico y
                                    aguda crisis y una etapa posterior de bonanza económica y fiscal por el alza de las exportaciones de
                                    los artículos agrícolas y mineros, por la mayor producción de ellos y por el incremento del comercio.
                                         La primera fase presentó las características siguientes que en forma simultánea gravitaron a veces
                                    las unas sobre las otras: 1) Descenso de precios de las materias primas peruanas de exportación por
                                    la creencia de que la guerra sería corta y de que bastarían los recursos de los beligerantes para la
                                    satisfacción de sus necesidades; 2) Contracción de todo el comercio exterior al producirse la merma
                                    de las importaciones; 3) Reducción del tonelaje marítimo y alza general de fletes; 4) Ocultación de la
                                    moneda metálica y, en especial, de la de oro, con lo que se debilitó o socavó la vida mercantil, el cur-
                                    so de las transacciones y el cumplimiento de las obligaciones, con baja en los efectos cotizables en
                                    las bolsas y retiro del dinero guardado en los bancos; 5) Amenaza sobre estas instituciones que, ante
                                    la fuga de sus depósitos, hubieran quedado sin recursos y habrían presionado para el pago perento-
                                    rio a sus deudores cuyo dinero estaba generalmente invertido en la vida industrial y comercial: 6)
                                    Suspensión de créditos y súbita exigencia para que fueran canceladas las deudas comerciales con el
                                    fin de obtener dinero de inmediato; 7) Baja inesperada y brusca de los ingresos fiscales, provenientes,
                                    en su mayor porcentaje, de impuestos indirectos cobrados en buena parte por las aduanas maríti-
                                    mas; 8) Graves dificultades creadas al Gobierno para el pago de los haberes de los servidores públicos
                                    y para atender a otros gastos del Estado; 9) Encarecimiento de los artículos de primera necesidad.
                                         Dentro de esta situación, los problemas derivados de las características del país como expor-
                                    tador de materias primas y como importador de productos manufacturados y los que se relacio-
                                    naban con el comercio marítimo solo podían resolverse en el transcurso del tiempo. Las medidas
                                    adoptadas de inmediato fueron: 1) Las moratorias para las acreencias bancarias y para el pago de
                                    deudas; 2) La legislación sobre los bancos, sobre la exportación del oro y de la plata y sobre la
                                    moneda de plata y de cobre; 3) La emisión de cheques circulares; 4) El decreto sobre despido de
                                    obreros y la legislación sobre artículos de primera necesidad; 5) La reducción de los gastos públi-
                                    cos y la búsqueda de un aumento en los ingresos del Presupuesto.
                                    [ II ]
                                    laS MoRatoRIaS.- Un movimiento de pánico en los bancos creado por una “corrida” o fuga
                                    de depositantes del Banco Alemán con motivo de la noticia publicada en un periódico sobre un
                                    fenómeno análogo producido en el extranjero, dio lugar a que el Gobierno, a pedido de los geren-
                                    tes de esas instituciones de crédito, por decreto de 2 de agosto, declarase feriados los días 3, 4 y 5
                                    de agosto y luego, por decreto de esta última fecha, prorrogase los feriados al 6 y 7 de agosto.
                                    [ III ]
                                    loS cHEQuES cIRculaRES.- Amargos recuerdos tenía el Perú de los billetes bancarios. Emi-
                                    tidos inicialmente con garantías, formaron parte de un ciclo histórico caracterizado por las deu-
                                    das del Gobierno a los bancos, la inconvertibilidad y la responsabilidad fiscal, para luego no tener
                                    valor alguno, con la ruina de mucha gente pobre o de mediana condición. No se discutía por lo
                                    general, que el patrón de oro fue una de las grandes realizaciones del gobierno de Piérola. La
                                    salud de la moneda dio estabilidad y fijeza al cambio internacional amparado también por una
                                    balanza de comercio favorable basada en la exportación de artículos de consumo o materias
                                    primas que cubría, no solo el valor de la importación, sino también el servicio de las deudas públi-
                                    cas y privadas en el exterior y las utilidades de las negociaciones extranjeras radicadas en el país.
                                        En agosto de 1914 la escasez de numerario, determinada por la ocultación de la moneda
                                    metálica y la clausura de los bancos, provocó la parálisis del movimiento comercial e industrial.
                                    Apareció, con caracteres de urgencia, la necesidad de reemplazar el circulante de oro. La plata,
                                    moneda subsidiaria, dentro del sistema entonces vigente en el Perú, no podía asumir el carácter
                                    de circulante único ni era poseída por los bancos en cantidad suficiente como para satisfacer por
                                    sí sola las exigencias de la vida económica. Se consideró, por lo tanto, que solo podía hacer las
                                    veces del oro, en aquellos momentos, un título que lo reemplazara con carácter temporario y
                                    con las más efectivas garantías. Los bancos precisaban que se les improvisara una moneda para
                                    cumplir sus compromisos con el público porque no la tenían en cantidad necesaria a causa de
                                    las circunstancias. Era preciso acudir a salvar a las instituciones bancarias amenazadas por el páni-
                                    co económico general y para que no arrastraran en su caída intereses comerciales importantes
                                    vinculados estrechamente a la existencia de aquellas entidades de crédito. Había, además, otra
[2]
  loS cHEQuES cIRculaRES. la aguda crisis financiera que atravesaba el perú en agosto de 1914, llevó al gobierno del
  general Benavides a proponer la emisión de cheques circulares, documentos que reemplazaban al dinero en metálico,
  para reactivar así el movimiento comercial e industrial del país. El debate parlamentario para su aprobación fue
  intenso y despertó la atención de la ciudadanía. En estas imágenes de la revista Variedades, vemos a algunos diputados
  llegando al congreso el día del debate (1). Debajo, un ejemplar specimen, sin valor, de un cheque circular de 5 libras
  peruanas de oro (2).
[2]
      CONTINENTE,
   DESPUéS DE LA                      laS oBlIGacIoNES a caRGo DEl ERaRIo ENtRE 1908 y 1915.- La administración de José
                                      Pardo dejó al cesar el 24 de setiembre de 1908, aparte de la llamada deuda interna representada por
 INDEPENDENCIA.                       los vales de consolidación creados en 1889 y por los títulos amortizables emitidos según la de 1898,
                                      solo dos obligaciones a cargo del Estado: el saldo aproximado de 550 mil libras del empréstito de 600
                                      mil que sirvió para la adquisición del Grau y el Bolognesi y otros elementos de defensa, y una deuda
                                      flotante calculada en 274 mil libras, o sea un total de 824 mil libras. Según el mensaje de Billinghurst
                                      al Congreso en octubre de 1912, estas obligaciones llegaron en dicha fecha a 46 millones y 672 mil
                                      soles. La cuantía de tales deudas fue reducida, entonces, según el mismo Presidente. Pero la crisis
                                      derivada de la guerra europea las hizo elevarse nuevamente. Aparecieron los siguientes nuevos ren-
                                      glones de deudas que constan en un memorándum presentado a las Cámaras por el ministro de
                                      Hacienda Aurelio García y Lastres sobre el saldo de obligaciones vigentes al 31 de diciembre de 1915;
                                      Lp. 68.875 por subvenciones no pagadas a la Compañía Peruana de Vapores; Lp. 309.449 por présta-
                                      mo de la casa Grace; Lp. 44.752 por préstamos de Gildemeister y Cía.; Lp. 53.000 por aumento de la
                                      deuda de los bancos, a consecuencia de operaciones con el Banco Alemán y el Banco Popular; Lp.
                                      655.500 por préstamos bancarios en cheques circulares; Lp. 37.926 por adelantos de la Caja de Depó-
                                      sitos y Consignaciones; Lp. 198.615 por giros por cuenta de productos a cargo de la Compañía Recau-
                                      dadora; Lp. 64.702 por anticipos sobre entregas quincenales; Lp. 80.000 por anticipos de la Compañía
                                      Administradora de los Almacenes Fiscales; Lp. 73.880 por anticipos de la Compañía Administradora
                                      del Guano; Lp. 16.000 por préstamos sobre el arrendamiento del muelle de Eten y Salaverry; Lp.
                                      80.000 por anualidad de la Peruvian Corporation; Lp. 65.565, por letras de Tesorería; y Lp. 10.000 por
                                      deudas del Correo. Al lado de estos nuevos renglones de deudas aparecen en el mismo memorán-
                                      dum los saldos de los Presupuestos de 1908 a 1915 elevados a la suma de 1 millón 308.672 libras.
                                          Las obligaciones a cargo del Erario, sin contar la deuda interna propiamente dicha, ascendían,
                                      pues, en 1915, según el memorándum citado, a 68 millones 870 mil soles.
           CAPÍTULO
                      37
                     [ ]
      L
                                    [I]
                                    a lEy ElEctoRal DE 1915.- El país se regía en relación con el sufragio, por la ley N° 1777,
                                    transitoria, de 26 de diciembre de 1912, que creó un régimen descentralizado para la elección de
                                    senadores y diputados y eliminó a la Junta Electoral Nacional. La complementaba, en parte, la ley
                                    orgánica de 20 de noviembre de 1896 sin sus organismos electorales y de registro que fueron
                                    parcialmente modificados para los comicios de 1909, 1911 y 1912 por las leyes N° 861 de 25 de
                                    noviembre de 1908, 1286 de 10 de octubre de 1910 y 1533 de 18 de enero de 1912.
                                        El gobierno de Benavides, durante el período del Gabinete Sousa, remitió al Congreso, por
                                    intermedio del ministro Fernando Fuchs, en setiembre de 1914, un proyecto de nueva ley de
                                    elecciones políticas. Intentó este proyecto armonizar y refundir en un solo cuerpo muchas de las
                                    disposiciones de la ley de 1896 y de la N° 1777, sin excluir la intervención de la Corte Suprema
                                    para juzgar los casos de falsedad de credenciales y de proclamación indebida de candidatos. Fue
                                    mantenida también la autonomía de las provincias y departamentos en la designación de sus
                                    representantes. La novedad fundamental introducida en 1914 estuvo en el empleo del registro
                                    de conscripción militar como base para el mecanismo del sufragio.
                                        Se fundamentó la innovación en el concepto de que los registros electorales habían sido
                                    transitorios, fabricados al calor de las pasiones políticas para cada proceso, para otorgar arbitra-
                                    riamente las boletas de los ciudadanos o para venderlas. La ley de Sáenz Peña que saneó el
                                    sufragio en la Argentina sirvió de modelo para el proyecto peruano.
                                        Otra novedad de la ley de 1915 fue la facultad que concedió a la Corte Suprema para impo-
                                    ner penas graves a los funcionarios públicos culpables de abusos en los procesos electorales.
                                        La nueva ley electoral, que el Congreso discutió en detalle y con libertad, fue promulgada el
                                    4 de febrero de 1915 y llevó el número 2108.
[ II ]
la INIcIatIVa paRa la coNVENcIÓN DE paRtIDoS DE 1915.- Para las elecciones pre-
sidenciales que debían poner fin al gobierno provisorio surgió la fórmula de ir a una convención
de partidos con el propósito de buscar la armonía nacional.
     Al suscitarse dentro del Partido Constitucional un movimiento de opinión favorable a la can-
didatura presidencial del general Pedro E. Muñiz, este expresó en un manifiesto que la aceptaría              El ingeniero limeño se
solo en el caso de que lograra agrupar fuerzas cívicas suficientes para constituir una administra-            integró al gabinete Sousa
ción sólida, y propuso una alianza de todas las agrupaciones políticas entonces en actividad. Sin             como ministro de
embargo, el general Benavides llegó a manifestar públicamente más tarde que fue él quien tuvo                 gobierno en agosto de
la iniciativa de la convención. La invitación oficial para tratar de obtener el acuerdo propuesto fue         1914. un mes después,
hecha por el jefe del Partido Constitucional, general Andrés A. Cáceres.                                      presentó el proyecto de
                                                                                                              una nueva ley de
                                                                                                              elecciones. Esta tenía
oRGaNIZacIÓN DE la coNVENcIÓN DE paRtIDoS.- Aceptó el Partido Civil que presidía                              como base la llamada ley
entonces Javier Prado. Asimismo fue favorable la respuesta del Partido Liberal cuyo jefe, Augusto             Sáenz peña, que se había
Durand (que también se adjudicó la paternidad de esta iniciativa) continuaba desterrado. El                   aplicado en la República
Partido Demócrata estaba en receso, como ya se ha indicado, desde el 27 de abril de 1914; pero                argentina. Su iniciativa,
su comité directivo quedó reorganizado bajo la presidencia de Pedro de Osma con motivo de                     sin embargo, no
las gestiones para la convención, no obstante que Isaías de Piérola se inhibió de pertenecer a él             prosperó. años más tarde,
y de actuar en política. No llegó a ser invitado, sin embargo, ese partido, pues sus dirigentes care-         durante el segundo
cían de la personería reglamentaria. El grupo leguiista, que presidía Rafael Villanueva y se había            gobierno de augusto B.
estado llamando a sí mismo Partido Civil, no daba señales de vida autónoma en 1915 después                    leguía, Fuchs ejerció el
de haber actuado intensamente en 1914, en torno a Roberto Leguía para reconciliarse con Bena-                 cargo de ministro de
vides cuando se abrió la legislatura ordinaria de ese año.                                                    Hacienda (agosto 1919-
     El antecedente inmediato de la Convención de Partidos de 1915 estuvo en las gestiones rea-               marzo 1920).
lizadas en 1912 entre las cuatro agrupaciones de oposición, Civil, Constitucional, Liberal y Demó-
crata, para ir a las elecciones de ese año. Pero como esas gestiones quedaron frustradas, el acto de
la convención no tuvo precedentes en el Perú. No ha vuelto a verse otro acontecimiento similar.
     Los delegados que intervinieron en las reuniones preliminares fueron: David García Irigoyen
y Alfredo Solf y Muro (civilistas), Arturo Osores e Hildebrando Fuentes (constitucionales) y Wen-
ceslao Valera y Gonzalo Silva Santisteban (liberales).
     Las bases acordadas por los delegados determinaron que se congregaran para elegir candi-
datos a la presidencia de la República y a las dos vicepresidencias cien representantes de cada
partido, los senadores y diputados en ejercicio y los ciudadanos que habían ocupado curules
parlamentarias y habían ejercido la función ministerial a partir de 1885. Esta lista era, en realidad,
favorable al civilismo. Todos los convencionales debían inscribirse oportunamente. Las propues-
tas de los delegados del Partido Constitucional para incluir personeros de las provincias, mayores
contribuyentes y presidentes de las sociedades obreras no fueron aceptadas. Los delegados
civilistas se aferraron al principio de dar a la convención un carácter político.
ac tiva par ticipación en el quehacer nacional,         educativas y construyó una serie de ferrocarriles.
como catedrático de la Universidad Mayor de San         En 1908 fue elegido rector de la Universidad
Marcos (1900-1903) y representante de dicha ins-        Mayor de San Marcos, cargo al que debió renun-
titución en el Consejo Superior de Instrucción          ciar cuando volvió a ser elegido presidente de la
Pública (1901-1903), donde preparó una reforma          República (1915).
educativa (1904).                                       Su segundo gobierno se carac terizó por una
Tras la muer te de Manuel Candamo, Pardo asu-           grave recesión económica ocasionada por el esta-
mió por primera vez la presidencia de la Repúbli-       llido de la Primera Guerra Mundial. Fue derroca-
ca (1904-1908). Durante su gestión, reorganizó la       do por Augusto B. Leguía en 1919 y vivió en Euro-
Armada peruana, realizó impor tantes reformas           pa hasta 1944.
[2]
                                     RIcaRDo BENtíN.- Las designaciones hechas por la Convención de Partidos para las
                                     vicepresidencias recayeron sobre dos figuras bien distintas que, a su manera, reflejaban facetas
                                     descollantes aunque muy diversas en la vida peruana en la etapa de la reconstrucción después
                                     de la guerra con Chile.
[2]
 No debe confundírsele con el ministro de Hacienda Manuel Carbajal nombrado por el mismo Presidente en 1891.
(1)
VIaJE DE BENaVIDES a EuRopa.- Acaso como una medida de precaución política, Pardo,
al iniciar su gobierno, envió a Benavides a Europa para que estudiara la organización y el arma-
mento militares.
capítulo 38 ● I Carlos de Piérola, di        Palcaro ● Los desórdenes del Cuzco ● La     de Maldonado relacionada con el pro
rector de la Casa de Moneda El Ga
                                    ●            actitud de Javier Prado ● Renuncia del      blema del aumento de los sueldos por
binete Riva-Agüero ● El asesinato del     ministro García Bedoya ●  La acusación     el Legislativo ●  La junta directiva del
comandante Ferreccio ● Las leyes de        al Gabinete Riva-Agüero ● Miguel Grau       Partido Civil ● El ardoroso debate par
amnistía de 1915 a 1917 ● II El comien       ● Óscar Grau ● La ley N° 2584 ● Alejan         lamentario sobre la ley de ferrocarriles
zo de la oposición a Pardo. Luis Ulloa        drino Montesinos ● El retiro del apoyo     ●  La dimisión del Gabinete Tudela y el
● El intenso contenido político de las   del Partido Constitucional al Gobierno.         problema constitucional de la insisten
elecciones parlamentarias de 1917 ●        El primer Gabinete Tudela ● Las eleccio   cia en una ley ●  El segundo Gabinete
El asesinato de Rafael Grau ●  Los san      nes para diputados por Lima en 1917          Tudela ● El problema ferrocarrilero en la
grientos sucesos de Cutervo y Chumbi      ● La Corte Suprema y las elecciones par     legislatura de 1918 ● IV Las creaciones
vilcas ● Las proyecciones del crimen de     lamentarias de 1917 ● III La dimisión        políticas de provincias.
   LA VUELTA A LA NORMALIDAD CONSTITUCIONAL (1915-1919)
LA PRIMERA PARTE DEL SEGUNDO GOBIERNO DE JOSÉ PARDO.
         Política interna. Gabinetes Riva-Agüero y Tudela 1ro.
               CAPÍTULO
                           3
                          [ 8]
C
                                    [I]
                                    aRloS DE pIÉRola, DIREctoR DE la caSa DE MoNEDa.- Cuando el Partido
                                    Demócrata sufragó por Carlos de Piérola en la elección presidencial de 1915, el hermano del
                                    caudillo de ese partido ejercía el cargo de director de la Casa Nacional de Moneda. Había sido
                                    nombrado por el gobierno de Billinghurst, personaje que en vano quiso hacerlo ministro suyo.
                                    Al ascender José Pardo a la primera magistratura por segunda vez, hizo Carlos de Piérola renuncia
                                    reiterada de su puesto; pero ella no fue aceptada en honrosos términos.
                                    El GaBINEtE RIVa-aGÜERo.- José Pardo ascendió a la jefatura del Estado por segunda vez
                                    sin que existiera contra él una oposición organizada. Formó su primer Gabinete bajo la presiden-
                                    cia de Enrique de la Riva-Agüero en la cartera de Relaciones Exteriores y otorgó participación en
                                    los portafolios a los tres partidos que se habían aliado para la Convención de 1915. Integraron
                                    este ministerio Luis Julio Menéndez, civilista, ministro de Gobierno; Wenceslao Valera, liberal,
                                    ministro de Justicia e Instrucción; Aurelio García y Lastres, civilista, ministro de Hacienda; el coro-
                                    nel Benjamín Puente, ministro de Guerra y Belisario Sosa, constitucional, ministro de Fomento.
                                    Hubo quien se extrañó de que no formara parte de este Gabinete ninguna de las personalidades
                                    del antiguo “bloque”. El 2 de agosto de 1916 Menéndez, que iba a lanzar su candidatura a una
                                    representación parlamentaria, fue reemplazado por José Manuel García Bedoya, diputado cons-
                                    titucional conocido por su filiación pardista.
                                        Víctor Andrés Belaúnde ha escrito en sus Memorias las siguientes palabras, a propósito del
                                    Gabinete Riva-Agüero: “La constitución del primer Gabinete de Pardo en su segundo período no
                                    respondió al sentido nacional que tuvo la Convención. Se dio alguna representación a los partidos
                                    que participaron en aquella; pero la selección no estuvo a tono con el momento y anunciaba una
                                    política rutinaria y de tendencia personalista. Quedaron excluidas las personalidades más prestigio-
                                    sas del Partido Civil: Javier Prado, Manzanilla, Villarán, Antonio Miró Quesada y no se dio ningún
                                    puesto al nuevo partido (el Nacional Democrático). Nadie esperaba que D. Enrique de la Riva-Agüe-
                                    ro pudiera reemplazar a su sobrino en una obra de renovación política. José de la Riva-Agüero había
                                    cumplido 30 años, tenía una brillante carrera universitaria, todos conocían sus cualidades de traba-
                                    jo y su indomable energía. Habría sido un admirable ministro de Relaciones Exteriores, por conocer
                                    los antecedentes diplomáticos y por su clara visión... Esta exclusión de Riva-Agüero con la aparien-
                                    cia de un homenaje colateral, se compaginaba con la suspensión de las elecciones en Arequipa”...
                                        Como se ha anotado ya, los procesos electorales fueron aplazados en toda la República, por
                                    iniciativa parlamentaria que Pardo secundó.
laS lEyES DE aMNIStía DE 1915 a 1917.- La ley N° 2136 de 21 de setiembre de 1915 dis-
puso que los jueces y tribunales castrenses sobreseyeran inmediatamente en los juicios que
estaban pendientes contra particulares o militares por delitos políticos o comunes derivados de
aquellos y de los que resultaban responsables; y concedió, asimismo, indulto general y absoluto
a quienes, comprendidos en la disposición anterior, hubiesen sido ya sentenciados condenato-
riamente. Exceptuáronse de lo preceptuado en esta ley los miembros del ejército que hubieran
sido sentenciados encontrándose en servicio, las personas inculpadas por delitos comprendidos
en la segunda parte del artículo 14 del Código de Justicia Militar y los autores y cómplices del
asesinato del general Enrique Varela. Quedaron así exceptuados tácitamente los asesinos del
            EN LAS
   ELECCIONES DE                     El INtENSo coNtENIDo polítIco DE laS ElEccIoNES paRlaMENtaRIaS DE
                                     1917.- En las elecciones de 1917 fueron renovados no solo el tercio del Congreso de acuerdo
      1917 FUERON                    con la Constitución sino también las curules que, por diversas causas, habían también vacado. En
  RENOvADOS NO                       conjunto, los comicios afectaron al 40% de las representaciones parlamentarias. Las Cámaras así
                                     formadas debían intervenir en la ya cercana elección presidencial de 1919. Todo ello dio al pro-
  SOLO EL TERCIO                     ceso de 1917 una importancia política extraordinaria, aparte de que se anunciaban en la legisla-
   DEL CONGRESO                      tura de ese año enconados choques entre gobiernistas y oposicionistas sobre los más diversos
DE ACUERDO CON                       temas, incluyendo los de carácter hacendario, pues el Presupuesto de 1916 había sido prorroga-
                                     do por acto del Ejecutivo sin sanción por el Congreso.
LA CONSTITUCIóN
    SINO TAMbIéN
      LAS CURULES                    El aSESINato DE RaFaEl GRau.- Rafael Grau, hijo del héroe máximo de la historia peruana,
                                     era un ciudadano capaz, enérgico y caballeroso. Muy joven comenzó a figurar en la política como
         qUE, POR                    organizador del club universitario que apoyaba a Mariano Nicolás Valcárcel. Bien pronto ingresó al
         DIvERSAS                    comité central directivo del partido Unión Cívica que lo designó como su adjunto ante la Junta
                                     Electoral Nacional en 1904. A la Cámara de Diputados se incorporó como representante por Cota-
 CAUSAS, hAbíAN                      bambas en 1905 para empezar así su carrera parlamentaria que duró doce años ininterrumpidos.
          TAMbIéN                    Formó parte de los opositores al proyecto de empréstito de los tres millones durante la primera
          vACADO.                    administración de Pardo y fueron notables las interpelaciones que planteara en el Congreso ordi-
                                     nario de 1908 al ministro de Guerra, general Eléspuru. Secundó al régimen de Leguía y se destacó
                                     nuevamente en los debates parlamentarios sobre asuntos castrenses y también en los de orden
                                     internacional. Tuvo fogosas intervenciones para defender al Gobierno en asuntos como el de la
                                     compra del barco Dupuy de Lome, pero combatió a los ministros Zapata y La Torre. Todos los pro-
                                     blemas relacionados con la defensa del país hallaron en Grau a un orador elocuente, vigorizado
                                     siempre por su preocupación militarista. Al erigirse el gobierno de Billinghurst, se singularizó por
                                     su oposición irreductible, al principio solitaria. Sus interpelaciones y discursos, especialmente los
                                                                    1904-1908                             1908-1912
                                                                 jOSé PARDO y bARREDA                    AUGUSTO b. LEGUíA
            MANDATARIOS                                          Presidente de la República.
                                                                 Tras la muerte de Manuel
                                                                                                         Presidente de la República.
                                                                                                         Durante su gestión, solucionó
       DEL PERú (1904-1930)                                      Candamo, Pardo fue elegido              problemas limítrofes con Brasil y
                                                                 presidente. Durante su gobierno,        Bolivia, pero tuvo
        A PRINCIPIOS DEL SIGLO XX, EL                            dio singular importancia al sector      enfrentamientos con Ecuador,
            PARTIDO CIvIL DOMINó LA                              educativo. También inició una           Colombia y Chile. Gracias a su
                                                                 campaña de reestructuración y           experiencia como ministro de
             COyUNTURA POLíTICA. EL                              modernización del ejército y la         Hacienda de regímenes
             GOLPE DE bENAvIDES, SIN                             marina, pobremente equipados            anteriores, pudo enfrentar la
        EMbARGO, MARCó SU DECLIvE                                desde la guerra del Pacífico.           crisis económica. En este
                                                                                                         período, renunció al civilismo.
          y POSTERIOR DESAPARICIóN.
  de 1915 fue uno de los secuaces más connotados del general Muñiz..                                            SE PUbLICAN LOS
       Simultáneamente con su intensa actividad parlamentaria, Rafael Grau se destacó en la tumul-              RESULTADOS DEL
  tuosa política del Callao y en 1915 ocupó la alcaldía de esa provincia.                                       CENSO DE PObLACIóN
       Al vacar su curul en 1917, se presentó ese año, una vez más, como candidato por Cotabam-
  bas. Estaba separado por un hondo distanciamiento personal con su contendor Santiago Mon-                     DEL 26 DE jUNIO DE
  tesinos y con los tres hermanos de este desde las luchas de 1905 y 1911. Los enconos locales se               1908. ESTOS INDICAbAN
  habían exacerbado a raíz del proyecto que Grau auspiciaba, para trasladar la capital de la provin-            qUE LA PObLACIóN DE
  cia de Cotabambas del pueblo de Tambobamba al de Chuquibambilla. Este proyecto, aprobado
  en la Cámara de Diputados, no contó con el voto favorable del Senado.
                                                                                                                LAS PROvINCIAS EN EL
       La alianza de los partidos gobiernistas, Civil y Liberal, apoyó la candidatura de Montesinos.            PERú ERA DE 172.927
  Asumió así la de Grau el carácter de neta candidatura oposionista. Antes de esta definición,                  hAbITANTES,
  habían sido notorios los vínculos que unían a Grau con el ministro de Guerra general Benjamín
                                                                                                                MIENTRAS qUE LA DE
  Puente (cuya actuación militar y ministerial defendió y a cuyo ascenso contribuyera decisiva-
  mente en su Cámara). También adoptó actitudes en favor del Gabinete presidido por Enrique de                  LIMA TOTALIzAbA
  la Riva-Agüero. Subprefecto de la provincia de Cotabambas fue nombrado Adrián Moreno, ene-                    140.884. CON ESTOS
  migo de Grau, contra quien se formuló la acusación de haber sido reo indultado en 1895. Sus
                                                                                                                DATOS, EL GObIERNO
  defensores adujeron, sin embargo, que el delito había sido de carácter menos grave de lo que
  aducían sus enemigos cuando Moreno era guardia en la cárcel del Cuzco y que había sido come-                  bUSCAbA TENER AL DíA
  tido a raíz de una evasión de presos. Más tarde Moreno tuvo a su cargo diversas subprefecturas                SUS REGISTROS DE
  durante el primer gobierno de Pardo y el de Leguía y ocupó, además la alcaldía de Anta.                       CRECIMIENTO y
       En la provincia de Cotabambas solo había en 1917 una insignificante dotación de gendar-
  mes. Al mismo tiempo, nadie ejercía las funciones de juez de primera instancia por encontrarse                ANTICIPARSE ASí A LAS
  el titular ausente con licencia, en realidad como expulsado o intimidado por la facción de Mon-               NECESIDADES DE LA
  tesinos, pues era partidario de Grau. Este se dirigió a Cotabambas desechando las advertencias                PObLACIóN.
  y ruegos de amigos íntimos que le anunciaron su victimación, impulsado por su notable valentía
                                       del 1° de octubre de ese año: “Quiero dejar constancia de un hecho del que fui testigo presencial: que habiendo estado
                                       en la ciudad de Abancay el prefecto de Apurímac recibió órdenes directas del Presidente de la República para constituir-
                                       se en Cotabambas para prestar toda clase de garantías al señor Grau; pude ver que ese telegrama llegó como una
                                       semana antes de que se realizaran los hechos... No obstante sus peticiones... recibió una reiterada orden terminante para
                                       constituirse en Cotabambas”... Pero no realizó el viaje.
[2]
        	 El asesinato de Ferreccio. El comandante Juan Gerardo Ferreccio fue asesinado durante una revuelta en la provincia de
          Huaraz, en el departamento de Áncash. Encabezado por el prefecto del lugar, el hecho de sangre fue parte de un
          movimiento subversivo militar que el asesinado había ido a sofocar. Los culpables fueron capturados y sentenciados a
          cumplir largas penas. Aquí vemos al grupo de militares enviados a controlar la rebelión y a las autoridades de Huaraz, antes
          del asesinato (1) (Ferreccio aparece de pie en la segunda fila, con el número 18 en el pecho), y el cadáver del oficial (2).
RENuNcIa DEl MINIStRo GaRcía BEDoya.- La renuncia del ministro García Bedoya el 7
de marzo de 1917, un día después de divulgarse en Lima la noticia de los sucesos de Palcaro, y
su reemplazo por un prestigioso magistrado, el vocal de la Corte Superior Ezequiel Muñoz ese
                                       la lEy N0 2584.- La ley N° 2584 de 24 de noviembre de 1917 dispuso que el Poder Ejecutivo
                                       adjudicara a la viuda e hijos de Rafael Grau inmuebles urbanos de propiedad fiscal ubicados en
                                       la ciudad de Lima cuyo valor en conjunto señaló en su cifra mínima; y que el Estado atendiese
                                       a los gastos originados por la educación primaria, superior y facultativa de los menores hijos
                                       antedichos.
(1) Las diputaciones vacantes por Lima en 1917 quedaron reducidas a dos porque la Cámara acordó prorrogar la vigen-
                                    cia del mandato de los suplentes señores Enrique Castro y Ernesto Gianolli, por presión de la minoría. ¿Tuvieron los per-
                                    soneros de ella, miras hostiles a las candidaturas de Riva-Agüero y La Jara y Ureta?
[2]
                                                                                                          UN SUbMARINO
                                                                                                          ALEMáN hUNDE LA
[ III ]                                                                                                   EMbARCACIóN
la DIMISIÓN DE MalDoNaDo RElacIoNaDa coN El pRoBlEMa DEl auMENto
DE loS SuElDoS poR El lEGISlatIVo.- En enero de 1918, durante el debate del pliego                        PERUANA LORTON,
de Hacienda del Presupuesto, varios diputados pidieron aumentos e inclusiones de partidas y su            EN EL MAR
colega Carlos Borda afirmó que podían exigir lo que suplicaban; y para dar el ejemplo, solicitó a         CANTábRICO, AL
su vez, el aumento de los sueldos del Cajero Fiscal y de los auxiliares de la Sección Aduanas. El
ministro Baldomero Maldonado sostuvo la tesis de que la iniciativa en todo lo relacionado con
                                                                                                          NORTE DE ESPAñA.
la ley de Presupuesto correspondía al Ejecutivo. Se produjo un diálogo agrio entre él y Borda. El         EL SUbMARINO SE
24 de enero fue presentada a la Cámara una moción en el sentido de que la iniciativa del Poder            ACERCó A LA LORTON
Legislativo no reconocía taxativa alguna en el momento de discutirse el Presupuesto. No llegó a
                                                                                                          ENARbOLANDO UNA
ser puesta al voto; pero su texto quedó en el acta. El 24 renunció Maldonado. Afirmó en la nota
respectiva que había creído siempre que la iniciativa presupuestal era propia y exclusiva del             bANDERA FRANCESA,
Poder Ejecutivo, que no podían alterarse las partidas sustentadas por leyes si previamente no             DESEMbARCó A LA
habían sido modificadas estas y que no era conveniente, sin consultar primero la jerarquía o la
                                                                                                          TRIPULACIóN y A LOS
igualdad de los empleos públicos, alterar en forma parcial los sueldos pertenecientes a ellos.
Expresó, al mismo tiempo, su propósito de evitar que la discrepancia esterilizara la labor de la          PASAjEROS, y LANzó
legislatura hasta el extremo de obstruir la aprobación del Presupuesto.                                   LUEGO vARIOS
     Sin voto concreto, predominó en la Cámara el criterio opuesto al de Maldonado. El Comercio           TORPEDOS, hASTA
del 25 de enero de 1918 se refirió al problema de Derecho constitucional y administrativo invívi-
to en este asunto. Había surgido este debate, lejos de consideraciones políticas o personales o           hUNDIR LA NAvE.
de una situación peculiar a aquella legislatura. Se derivaba de consuetudinarias prácticas parla-         LOS vECINOS DE LA
mentarias al extremar el ejercicio de funciones no mecánicas sino deliberativas y libres tratándo-        LOCALIDAD
se del Presupuesto que, así resultaba sometido a necesidades circunstanciales o privadas.
     Encargado de la cartera de Hacienda el jefe del Gabinete Francisco Tudela y Varela, acudió a
                                                                                                          ESPAñOLA
una interpelación en las sesiones de la Cámara de Diputados del 20 y 21 de febrero de 1918                DE SUANCES
cuando se discutía el pliego de Hacienda y afrontó con entereza los ataques de la oposición.              SOCORRIERON A
     Germán Arenas pasó de la cartera de Gobierno a la de Hacienda el 26 de febrero de 1918. Fue
                                                                                                          LOS NáUFRAGOS.
nombrado ministro de Gobierno Samuel Sayán y Palacios, de filiación liberal.
la JuNta DIREctIVa DEl paRtIDo cIVIl.- En marzo de 1918 perdió Javier Prado la jefa-
tura de la junta directiva del Partido Civil al ser designado, en una asamblea, un nuevo personal
favorable al Gobierno. Resultó elegido presidente Ántero Aspíllaga, quien había pertenecido al
grupo de los amigos políticos de Prado; pero se atribuyó al presidente Pardo el haberle persuadido
para que adopte una distinta posición. Desde entonces comenzó a hablarse de la candidatura a la
presidencia de la República, de Aspíllaga, si bien entre los dieciocho miembros de la junta, nueve
fueron clasificados como “bloquistas”, es decir netamente pardistas, y los nueve restantes no todos
fueron considerados como resueltos a prestar a dicha candidatura una adhesión inconmovible.
[2]
           CAPÍTULO
                      39
                     [ ]
 E
                                    [I]
                                    l INcIDENtE DE NuEStRa Época y la RENuNcIa DEl MINIStRo la FuENtE.- El 22
                                    de junio de 1918 comenzó a aparecer Nuestra Época, periódico de crítica política y social dirigido
                                    por José Carlos Mariátegui. El contenido de esta publicación no tenía carácter literario y se inspi-
                                    raba en el estilo y las características polémicas de las revista España editada entonces en Madrid
                                    por Luis Araquistaín. Sus artículos principales parecían querer contribuir a la formación de un
                                    futuro partido socialista.
                                        Entre los artículos de Nuestra Época hubo uno, firmado por Mariátegui, con un análisis acerbo
                                    del ejército. Mariátegui se declara resueltamente adverso a una política de armamentismo y de
                                    militarización del país. Reservaba frases despectivas para jefes y oficiales, pues creía ver en ellos
                                    elementos de inferioridad personal y social. Recordaba los tiempos en que quien tenía un hijo
                                    bribón, desalmado o idiota lo ponía en el cuartel. Decía que los peruanos no quieren ser solda-
                                    dos. Hacía aparecer a la institución castrense peruana poco menos que como una burocracia
                                    armada de ganapanes y fracasados. Censuraba la intervención del ejército en la vida pública y
                                    denunciaba el hecho de que él se preocupara menos de su progreso interno que de las situacio-
                                    nes y expectativas que de la política podían derivar.
                                        El ar tículo de Mariátegui fue tétrico, precipitado e injusto. El Perú tenía que preocuparse
                                    de armarse y militarizarse porque estaban vivos varios problemas de límites y más de un veci-
                                    no habría aprovechado cualquier ingenuo afán de desarme, por lo demás, no puesto en
                                    práctica entonces por ningún Estado del mundo. Desde la época de Piérola la Escuela de
                                    Chorrillos suministraba una educación técnica y disciplinaria severa más auténtica, en con-
                                    junto, que la de otros establecimientos de enseñanza superior. Había un abismo entre el
                                    ejército institucional moderno y el antiguo. Si las altas clases no sentían vocación por la carre-
                                    ra de las armas, tampoco la tenían para el clero y esta crisis era dañina para ellas, más que
                                    para aquella, exponente de una clase media de genuina raíz nacional. Favoritismos, influen-
                                    cias políticas y otra circunstancias mediaban para impedirle obtener todo el realce que mere-
                                    cía; pero de análogas taras sufrían también los otros grupos y sectores de la vida nacional. Y
                                    en cuanto a la inter ferencia en la vida pública, Mariátegui señalaba una tendencia auténtica;
                                    pero conviene recordar otra vez que quienes en aquella época la acentuaban, con tentacio-
                                    nes reiteradas, eran los civiles.
                                        Un grupo de jóvenes oficiales, en vez de exigir por otros medios la reparación del honor mili-
                                    tar y el restablecimiento de los fueros de la verdad, irrumpió en la imprenta de El Tiempo el 24 de
                                    junio de 1918 y ultrajó a Mariátegui. Este acto presentó todos los caracteres de un hecho de
                                    ofuscación inconveniente y condenable. El 26 del mismo mes tuvo lugar una manifestación de
                                    solidaridad institucional organizada por los oficiales, con expresiones de adhesión al Gobierno y
                                    en ella participó el presidente Pardo en cuyo discurso se reflejó el hondo resquemor que sentía
                                    ante la violenta campaña contra él y su régimen sistemáticamente seguida por El Tiempo. El mis-
                                    mo día renunciaron el ministro de Guerra coronel César A. La Fuente y el jefe de Estado Mayor
                                    coronel Manuel María Ponce a quienes, según parece, disgustaron los acontecimientos que se
                                    habían producido. Reemplazó a La Fuente, el coronel Andrés Cateriano, intendente de Guerra; a
[ II ]
El MoVIMIENto SuBVERSIVo DE aNcÓN. la pRotESta EStuDIaNtIl poR la SuS-
pENSIÓN DE GaRaNtíaS y El MINIStRo SayáN y palacIoS.- El 22 de agosto de 1918
se produjo un movimiento subversivo militar en Ancón con un batallón de zapadores al mando
del comandante Armando Patiño Zamudio. No se ha estudiado este episodio en el que, según
parece, intervinieron, desde lejos, el general Andrés A. Cáceres, jefe del Partido Constitucional y
Arturo Osores, prominente miembro de dicho partido.
    El Parlamento aprobó sin demanda del Gobierno, la ley N° 2767 de 23 de agosto que declaró
en suspenso, por dos meses, las garantías individuales. Surgió la protesta de los universitarios
contra esa ley y el local de la Federación de Estudiantes, en el Palacio de la Exposición, fue alla-
nado en el curso de una sesión por gendarmes y policías en la noche del 28 de agosto, produ-
ciéndose un choque. En los días siguientes la efervescencia juvenil se exteriorizó en un ataque al           Esta publicación,
domicilio del diputado Manuel B. Pérez, dirigente de la mayoría parlamentaria gobiernista, así               denominada “Revista
como también en manifestaciones ruidosas frente al Palacio presidencial.                                     política y literaria”,
    Manuel B. Pérez representaba a la provincia de Cajamarquilla, creada especialmente para él.              apareció el 22 de junio
Bajo de estatura y obeso, con su silueta se ensañaban los caricaturistas. Sus intervenciones par-            de 1918 en la ciudad de
lamentarias eran lo opuesto a la elocuencia florida y galana, a la dialéctica exhaustiva, a la pasión        lima. Su director fue
vociferante. Rompían la tradición de gravedad, retórica y presunción que ha caracterizado a la               José carlos Mariátegui y
oratoria peruana. Resaltaban por su índole campechana, sus comentarios graciosos, sus razones                entre sus redactores se
mondas y lirondas en las que se percibía el eco de la filosofía rústica latente en los adagios, pro-         encontraban abraham
verbios, aforismos, dichos y apotegmas antiguos y modernos que atesora nuestro idioma. A todo                Valdelomar, percy
ello agregó su experiencia parlamentaria, pues ingresó combativamente a la Cámara de Diputa-                 Gibson y Félix del Valle,
dos en 1895 y su experiencia como abogado y como funcionario, pues trabajó muchos años en                    entre otros. En la
la Beneficencia Pública de Lima y tuvo a su cargo una de las sindicaturas de la Municipalidad. Lo            primera edición de
mismo podía participar, con esas características, en un debate sobre el Presupuesto o sobre la ley           Nuestra Época,
contra el agio y la usura o sobre impuestos y, sobre todo, en las cuestiones políticas candentes,            Mariátegui afirmó que la
entre las que descollaron los procesos electorales de 1917 y la suspensión de las garantías indi-            línea editorial del medio
viduales. Manuel B. Pérez tenía, además, a su cargo la cátedra de Historia de la literatura castella-        tenía como premisa decir
na en la facultad de Letras de la Universidad de San Marcos y atraía a gran cantidad de estudian-            la verdad. añadía además
tes propensos a la algazara cuando se ocupaba con singular deleite, del Libro del buen amor del              que: “aunque somos
Arcipreste de Hita y de otras obras de carácter escabroso.                                                   literarios, no haremos
    El 2 de setiembre de 1918 renunció el ministro de Gobierno Samuel Sayán y Palacios. El Tiem-             literatura en la política,
po, con duras frases para los hombres del régimen en general, reconoció que la gestión de Sayán              ni haremos política
no había sido desatenta ni odiosa. El Comercio tampoco encontró culpabilidad directa del minis-              en la literatura”.
tro en los actos de innecesaria violencia practicados con los estudiantes; pero lo halló, parlamen-          Solo aparecieron
taria y políticamente, responsable por no haberlos previsto y por no haber tenido subordinados               dos números.
sagaces pues ya que estaba suspendido el derecho de reunión pudo haberse negado el permi-
so para la sesión estudiantil o limitarse la policía a cuidar el orden. Reemplazó a Sayán, Clemente
Revilla. Ministro de Fomento fue nombrado Manuel Vinelli, miembro del Partido Liberal.
    Entre los puntos incluidos por los facciosos en su manifiesto estuvieron: la disolución de los
Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, además “declarar la guerra al Imperio alemán y sus alia-
dos; enviar un saludo a los pueblos aliados y en especial a Bélgica; entregar todos los buques
nacionales a Estados Unidos; y enviar una división para que se batiera contra las tropas de los
imperios centrales”. Parece que los jefes del movimiento tenían adhesión política al ex presiden-
te Augusto B. Leguía. Felipe Barreda y Laos denunció en la Cámara de Diputados que, entre los
En 1918 fundó con César Falcón la revista Nuestra       Amauta, que reunió a una nueva generación de
Época, donde renunció a su seudónimo. Al año            intelectuales. Dos años más tarde publicó 7 ensayos
siguiente, creó el diario La Razón, desde donde apo-    de interpretación de la realidad peruana, un impor-
yó la reforma universitaria y las luchas obreras. Por   tante análisis de la situación social, económica y
su apoyo a la huelga en pro del abaratamiento de las    política del país. Es aún una fuente de referencia
subsistencias, La Razón fue clausurado y Mariátegui     indispensable.
fue enviado a Italia acusado de “agente de propa-       En sus últimos años, postrado en una silla de ruedas,
ganda periodística”.                                    tuvo gran actividad política: fundó el Partido Socia-
En Europa, se acercó a la doctrina marxista. Regresó    lista Peruano y en 1930, organizó la Confederación
al Perú en marzo de 1923. En 1926, fundó la revista     General de Trabajadores del Perú.
[2]
               De efímera
            existencia, el
       Partido Nacional
       Democrático es el
                                    N         o ha sido Basadre el único en
                                              apuntar, sobre la corta existen
                                              cia del Partido Nacional Demo
                                    crático, el carácter más bien general y
                                    poco práctico de su programa, la relati
                                                                                          caracteriza como partido moderno, aje
                                                                                          no al caudillismo y a fines estrictamen
                                                                                          te electorales.
                                                                                                             Nacido en parís
                                                                                                             (Francia), el periodista
                                                                                                             y diplomático dio el
                                                                                                             nombre de “futurista”
                                                                                                             a un nuevo partido
                                                                                                             político que estuvo
                                                                                                             conformado por amadeo
                                                                                                             de piérola, José María de
                                                                                                             la Jara y ureta, y José
                                                                                                             Gálvez, entre otros.
                                                                                                             cisneros ejerció el
                                                                                                             periodismo en la prensa
                                                                                                             (1903-1915) y luego en El
                                                                                                             comercio (1917-1919). tras
                                                                                                             la muerte de alberto
                                                                                                             ulloa, cisneros asumió la
                                                                                                             dirección de la prensa,
                                                                                                             hasta su destierro por el
                                                                                                             gobierno de leguía. En
                                                                                                             esos años, vivió en
                                                                                                             argentina, colaborando
                                                                                                             con el diario la Nación.
                                                                                                             tras el derrocamiento de
                                                                                                             leguía, inició una intensa
                                                                                                             vida diplomática en
                                                                                                             uruguay (1933), México
                                                                                                             (1939) y Brasil (1945).
* La sección de este capítulo sobre el litigio con Chile ha sido enriquecida con documentos del archivo Felipe de Osma.
                    CAPÍTULO
                                           40
                                          [ ]
 E
                                    [I]
                                    l HuNDIMIENto DE la loRtoN.- La Lor ton fue una barca inglesa que obtuvo un pasa-
                                    vante provisional en abril de 1914 para un viaje a Estados Unidos, mientras estaba pendiente
                                    la solicitud de su nuevo propietario, el súbdito italiano Domingo Loero, para que se le expi-
                                    diese patente definitiva como nave peruana. Al volver de su expedición, que duró alrededor
                                    de once meses, recibió la patente antedicha en marzo de 1915. El 24 de octubre de 1916 se
                                    le otorgó nueva patente a favor de la casa peruana Rocca Miller, que la había adquirido. El 5
                                    de ese mes salió del Callao y se le envió dicho documento a Iquique cuando cargaba nitrato
                                    de soda para el puer to español de Pasajes al ser vicio de unos consignatarios yugoslavos. Un
                                    submarino alemán hundió a la Lor ton en el mar Cantábrico, frente al puer to de Suances, el 4
                                    de febrero de 1917. La Cancillería de Lima, a cargo de Enrique de la Riva-Agüero, envió una
                                    protesta y exigió como reparación el saludo militar a la bandera del Perú por uno o más
                                    buques de la marina imperial de guerra, la desaprobación de la conducta del comandante del
                                    submarino y su sometimiento a una cor te marcial; al mismo tiempo, pidió para los damnifi-
                                    cados el pago del valor estimativo del buque el día del hundimiento, el valor de las dos ter-
                                    ceras par tes del flete del cargamento y una indemnización equitativa de los perjuicios sufri-
                                    dos. La Cancillería de Berlín ofreció efectuar una investigación y prometió que si llegaba a
                                    probarse que el hundimiento había sido causado por un submarino alemán en aguas espa-
                                    ñolas, se darían explicaciones e indemnizaciones. Más adelante, en el curso de la correspon-
                                    dencia diplomática surgida a lo largo de varios meses, el Gobierno imperial dejó constancia
                                    de que la Lor ton había sido atacada por conducir cargamento de guerra y anunció que some-
                                    tería el caso al juicio de un tribunal de presas. También ofreció la entrega de la bandera perua-
                                    na de la barca hundida.
                                         La oposición censuró acerbamente la conducta del canciller Riva-Agüero en el manejo de
                                    este asunto. Lo criticó por haber dejado transcurrir demasiado tiempo desde la protesta del 7
                                    de febrero hasta la segunda quincena de mayo con el motivo de recibir unos documentos; y
                                    por haber redactado tardíamente el 30 de junio un memorándum al ministro del Perú en Ber-
                                    lín para enviarlo por correo y no por la vía telegráfica y solo el 12 de julio. Hizo blanco de sus
                                    ataques, asimismo, a Alejandro von der Heyde que ocupaba ad honórem ese cargo diplomá-
                                    tico. Recibió von der Heyde el 8 y el 13 de agosto (cuando ya Tudela se había hecho cargo de
                                    la Cancillería) instrucciones para rechazar el sometimiento del asunto de la Lor ton a un tribu-
                                    nal de presas y muchos días después, el 21, con motivo de un cable al cónsul del Perú en
                                    Amsterdam, se dio por recibido de dichos mensajes e indicó que no había llegado a su poder
                                    el memorándum del 12 de julio. El 23 de agosto se le impar tió la orden de presentar la recla-
                                    mación sin esperar el memorándum; el 28 se le comunicó la negativa de la Cancillería a admi-
                                    tir el arbitraje; el 4 de setiembre le fueron dadas a conocer con todos los detalles las razones
                                    que el Perú tenía para no aceptar el sometimiento de la controversia a un tribunal de presas;
                                    y el 9 de setiembre se le requirió para que acusara recibo de los despachos a él dirigidos. Pero
                                    solo el 12 dio cuenta de que le habían llegado esos despachos, menos el del 4 que era el más
                                    interesante de todos.
                                      laS NaVES alEMaNaS.- Las diez naves alemanas surtas en puertos peruanos fueron apresa-
                                      das y expropiadas en virtud de la ley general N° 2696 de 30 de enero de 1918 sobre expropiación
                                      de elementos de transporte y de almacenes o depósitos y entregadas en setiembre de 1918 en
                                      arriendo a una entidad fiscalizada norteamericana, la “Emergency Fleet Corporation”. Ellas fueron
                                      los vapores Sierra Córdoba (llamado Callao) de 8.200 toneladas de porte y 8.226 toneladas de
                                      registro bruto; Luxor (Salaverry) de 12.000 y 7.109; Rhakotis (Eten) de 8.500 y 6.982; Anubis (Paita)
                                      de 8.000 y 4.763; Uarda (Pisco) de 9.000 y 5.751; Marie de 3.000 y 1.866. Además los buques de
[ II ]
la IluSIÓN pERuaNa aNtE laS DoctRINaS DE WIlSoN y aNtE la Etapa poS-
tRERa DE la pRIMERa GuERRa MuNDIal.- El presidente de los Estados Unidos Woo-
drow Wilson en los mensajes que leyó el 22 de enero y el 2 de abril de 1917 ante el Congreso de
su país expuso los motivos para su participación en la guerra europea y los ideales que perseguía
de vindicar y poner a salvo los principios de paz y de justicia en la vida mundial. Entre esos prin-
cipios estuvieron la igualdad de las naciones sin diferencia entre grandes y pequeñas, poderosas
y débiles; el consentimiento de los gobernados como origen de los justos poderes de los gobier-
nos; la negativa a que cualquier pueblo fuese sometido a una soberanía bajo la cual no deseaba
vivir; la libertad de los mares; la garantía de la vida y la libertad como base para que los territorios
cambiaran de soberanía.                                                                                         los lineamientos de este
    Al comunicar la Secretaría de Estado de Washington a la Cancillería de Lima la declaratoria de              político, presidente de
guerra al Imperio alemán, el Perú no dio a conocer su neutralidad, ni en su nota de respuesta ni                Estados unidos de 1913 a
en acto alguno posterior. El presidente Pardo expresó la adhesión del país a las doctrinas de Wil-              1921, fueron fuente de
son en su mensaje al Congreso de 28 de julio de 1917. El canciller Tudela y Varela formuló ante                 inspiración para la
la Cámara de Diputados el 5 de setiembre del mismo año una declaración para ratificar el punto                  política exterior del
de vista presidencial y manifestó que “la política externa del Gobierno peruano tiene por objetivo              presidente José pardo.
la solidaridad panamericana, fundada en los principios de justicia internacional que ha proclama-               las ideas de Wilson
do el Presidente de los Estados Unidos”. El 8 de setiembre la Cámara de Senadores votó por una-                 sobre la paz y la justicia,
nimidad una moción también solidaria con el pueblo norteamericano “en armonía con los idea-                     lo hicieron acreedor al
les de justicia internacional proclamados por el presidente Wilson”. El 4 de julio de 1918 fue                  premio Nobel de la paz
declarado día feriado en toda la República como homenaje a la gran República del Norte.                         de 1919. Durante su
    El triunfo de los aliados en noviembre de aquel año provocó explosiones de entusiasmo en                    gestión presidencial,
Lima y en otras ciudades. De día y de noche se sucedieron bulliciosos actos públicos con vítores,               Wilson reformó la
aplausos e himnos en las calles, en especial ante las legaciones y los centros sociales de las colo-            legislación de su país,
nias francesa, italiana, norteamericana y de los otros países vencedores. En las funciones de los               aumentó su participación
teatros, el público pidió los himnos de esas naciones y los representantes diplomáticos de ellas                en la política
fueron clamorosamente ovacionados. Los diarios prodigaron su retórica. La Cámara de Diputa-                     internacional y
dos y la de Senadores escucharon encendidos discursos, seguidos por el texto de diversas y                      contribuyó a la victoria
coincidentes mociones y telegramas. Hubo felicitaciones presidenciales y de Cancillería a cada                  de los aliados en la
uno de los Gobiernos vencedores. Un gran desfile en Lima en la tarde del 12 de noviembre ter-                   primera Guerra Mundial.
minó con un discurso de Jefe del Estado desde uno de los balcones de Palacio. El Congreso
expidió la ley que declaró feriados los días 15, 16 y 17 del mismo mes en celebración de la victo-
ria de los aliados y de los Estados Unidos (Ley N° 2841).
    El día 15 de noviembre se realizó el multitudinario desfile organizado por la Federación de
Estudiantes del Perú con la cooperación del Comité Interaliado y de diversas instituciones obre-
ras y locales en honor de los pueblos antedichos, entre los que fue comprendido de manera
especial el Brasil que celebraba en esa fecha el aniversario de su constitución republicana. Un
gentío nunca visto llevó millares de banderas, pasó por las calles entre música, ovaciones y flores
y se detuvo ante las legaciones de los países a los que se rendía homenaje. Así llegó hasta las
residencias de los ministros de Inglaterra, Bélgica, Francia, Italia, Cuba, Brasil y los Estados Unidos.
También el Presidente de la República dirigió la palabra en esta oportunidad a la multitud.
    En el fervor entonces producido hubo, tanto en los directores intelectuales del país como en
las masas ignaras, una ilusión ingenua. El caso de Alsacia y Lorena, territorios que Francia iba a
[3]
[ IV ]
El RoMpIMIENto DE RElacIoNES coMERcIalES coN cHIlE.- La intensificación de la
campaña peruana para reivindicar Tacna y Arica y aun Tarapacá al amparo de los principios pro-
clamados por los aliados en la Guerra Mundial, trajo como consecuencia la expulsión de perua-
nos de esa zona y de Antofagasta, redadas en masa de jóvenes para alistarlos en el ejército, ata-
ques contra los consulados chilenos de Paita y Salaverry y contra el consulado peruano en Iqui-
que, servido por Santiago Llosa Argüelles, así como también despachos cablegráficos entre los
cancilleres Francisco Tudela y Luis Barros Borgoño. Tras del intercambio de cablegramas procedió
la Cancillería de Lima al retiro de los cónsules en Chile y así complementó la ruptura de las rela-
ciones diplomáticas existentes desde hacía varios años, con daño notorio para los intereses
comerciales que habían subsistido a pesar de las anteriores divergencias diplomáticas (25 de
noviembre de 1918). Luis Barros Borgoño, canciller chileno, replicó a la circular de 2 de diciembre
de 1918 que fundamentó esta actitud, el 6 de diciembre del mismo año. El presidente Wilson                   Fue nombrado canciller
mandó un cablegrama al Presidente del Perú para aconsejarle mantener la paz (6 de diciembre).                en 1918. anteriormente,
El diputado chileno Pedro Nolasco Cárdenas quedó aislado en su Cámara cuando opinó en ella                   García Salazar se había
que Chile debía devolver las provincias retenidas.                                                           desempeñado como
    El distanciamiento peruano-chileno se hizo aún más hondo cuando, a partir de los meses de                encargado de Negocios
noviembre y diciembre de 1918, se produjeron algaradas y atropellos en Tacna y Arica, entre los              de las sedes diplomáticas
que estuvieron la clausura de la antigua y respetable Sociedad Artesanos El Porvenir en aquella              peruanas en Ecuador,
ciudad y expulsiones en masa de tarapaqueños, arequipeños y tacneños. Estos hechos dieron                    chile y colombia.
lugar a la protesta del canciller Arturo García Salazar en su circular telegráfica de 28 de diciembre        Durante su período en el
de 1918. El ministro chileno Luis Barros Borgoño desmintió en circular del 10 de enero de 1919               cargo, protestó ante el
las aseveraciones de su colega peruano y afirmó que los pocos peruanos que habían salido de                  gobierno chileno por los
Tacna lo habían hecho voluntariamente y declarándolo así por escrito; y agregó, además, que se               atropellos cometidos
extrañaba de las protestas por las medidas precautorias de Chile contra agitadores reconocidos,              contra los ciudadanos
cuando el Gobierno peruano había solicitado el alejamiento de políticos de ese país que, a su                peruanos en tacna y
juicio, conspiraban. Como ejemplo citó el pedido del canciller Fernando Gazzani en 1914 para                 arica. Su gestión, sin
que fueran obligados a salir de Tacna y Arica el ex presidente Billinghurst y Augusto Durand.                embargo, fue
Finalmente, Barros Borgoño atribuyó a la crisis salitrera el éxodo de peruanos de Tarapacá, cuyo             desestimada por su
número era muy reducido. La profusa literatura diplomática de esta época aumentó con la cir-                 homólogo chileno.
cular peruana de 12 de enero de 1919 como réplica a la chilena de 6 de diciembre del año ante-
rior y el memorándum del 14 de febrero con una detallada exposición de los atropellos contra
las personas y los bienes de los ciudadanos de este país en la zona materia del litigio.
                                     (1) Cartas de Felipe de Osma, reservadas 2, 9, 17, 26 y 31 de diciembre de 1917. Archivo Osma.
                                     (2) Osma a Relaciones Exteriores, 7 de marzo de 1919. Archivo Osma.
                                     (3) Osma a Relaciones Exteriores, 1° de abril de 1919. Archivo Osma.
                                     (4) Osma a Relaciones Exteriores, 1° de marzo y 1° de abril de 1919. Archivo Osma.
en junio de 1919 el tratado de Versalles, quedó constituida la Liga como organismo esencial de                DE GRIPE SACUDE LA
la flamante Sociedad de Naciones. Alzamora, Maúrtua y F. García Calderón, que debían represen-                CAPITAL. SOLO ENTRE
tar al Perú ante esta entidad, quedaron encargados de organizar una oficina y de preparar una
demanda sobre la devolución de todos los territorios que Chile arrebatara al Perú.                            LOS DíAS 10 y 16, ESTA
     La propaganda peruana fue entonces muy activa en el plano internacional. Hubo, según se                  CObRó 86 víCTIMAS. EL
ha llegado osadamente a afirmar, presión de algunos gobiernos aliados sobre el Departamento                   CONSEjO DE hIGIENE
de Estado para que se obtuviera de Chile, lisa y llanamente, la devolución de Tacna y Arica al Perú.
La fórmula norteamericana parece haber sido propiciar el arbitraje que Chile había rechazado
                                                                                                              DE LIMA EXTREMó LAS
antes y a la que comenzó quizás a inclinarse entonces. Abundaban las opiniones en el sentido                  MEDIDAS DE
de que el litigio debía ser arreglado.                                                                        PREvENCIóN y EL
                                                                                                              MUNICIPIO INICIó UNA
[V]                                                                                                           CAMPAñA DE LIMPIEzA
la VISIta a tuMBES DEl pRESIDENtE DEl EcuaDoR.- A mediados de julio de 1917 el                                y DESINFECCIóN DE
presidente del Ecuador Alfredo Baquerizo Moreno hizo una visita a Tumbes después de haber
                                                                                                              LUGARES PúbLICOS.
efectuado una gira a las islas Galápagos. El crucero Almirante Grau viajó a ese puerto a rendir
honores al ilustre huésped y lo acompañó luego a Guayaquil. Este episodio fue interpretado                    ESTA EPIDEMIA NO FUE
como un síntoma de buena salud en las relaciones peruano-ecuatorianas después de la tensión                   SOLO PERUANA SINO
surgida algunos años antes.                                                                                   qUE AFECTó AL
                                                                                                              áMbITO MUNDIAL y SE
                                                                                                              INCREMENTó DURANTE
                                                                                                              LA GUERRA EN
                                                                                                              EUROPA. EN TOTAL,
                                                                                                              FALLECIERON MáS DE
                                                                                                              20 MILLONES DE
                                                                                                              PERSONAS A
                                                                                                              CONSECUENCIA
                                                                                                              DE ELLA.
                       CAPÍTULO
                                     41
                                    [ ]
P
                                    [I]
                                    olítIca MoNEtaRIa DE la SEGuNDa aDMINIStRacIÓN DE paRDo.- Al iniciar su
                                    segundo período presidencial José Pardo tuvo que afrontar una aguda crisis hacendaria y econó-
                                    mica y la desconfianza surgida ante el temor de que fuesen hechas nuevas emisiones de billetes
                                    que condujeran al papel moneda. El valor de las exportaciones superaba mucho al de las impor-
                                    taciones que habían sido, por una parte, reducidas a consecuencia de la guerra y, de otro lado,
                                    también por las mermas en el tráfico marítimo y las limitaciones puestas al crédito. El cambio exte-
                                    rior era desfavorable para la moneda nacional; parte del dinero de la producción del país quedaba
                                    en el extranjero a consecuencia de aquel mismo fenómeno de recelo. Al hacerse cargo del Gobier-
                                    no, Pardo, como lo expresó en su primer mensaje al Congreso, se encontró durante los primeros
                                    días sin los recursos necesarios “para atender a los gastos más premiosos de la administración”.
                                         En su manifiesto a la nación, el 30 de abril de 1915, al ser proclamado candidato a la presiden-
                                    cia, Pardo enunció los tres puntos básicos de su plan financiero. Consistían ellos en: 1°) La abso-
                                    luta limitación de los gastos públicos a las necesidades más urgentes de la administración; 2°) el
                                    aumento de las rentas públicas en la proporción indispensable para pagar los gastos nacionales
                                    y también para atender al servicio de las deudas del Estado y a la amortización de la deuda flo-
                                    tante; 3°) el cumplimiento estricto del principio de no realizar nuevas emisiones fiduciarias de
                                    papel y de aumentar la garantía efectiva en oro metálico que respaldaba las emisiones ya hechas,
                                    a fin de que, al término de la guerra, se pudiera verificar la conversión en la forma establecida por
                                    las leyes respectivas.
                                         En relación con la moneda, la política de Pardo, secundada por el Congreso de esa época, fue,
                                    pues, de prudencia y continuidad. La desventaja en la cotización del cambio llegó a ser entonces
                                    de corta duración. Para suscitar este fenómeno de alivio influyeron, sobre todo, la confianza ante
                                    el tránsito a un Gobierno legal (que significaba la vuelta a la normalidad y a la tranquilidad de la
                                    vida política), el orden en los servicios administrativos, la reducción de los gastos públicos, el
                                    aumento de las rentas en proporción para atender los gastos indispensables, al servicio de las
                                    deudas acompañado por la amortización de la deuda flotante; el equilibrio del Presupuesto, el
                                    cobro de los derechos de exportación en letras sobre Londres y el alza mayor en los precios de
                                    los artículos de exportación. A mediados de 1916 el circulante no había aumentado, el estado de
                                    los bancos era favorable, los depósitos y cuentas corrientes sumaban cifras crecientes, el billete
                                    aparecía sólidamente defendido por su encaje metálico y hasta el movimiento de las importa-
                                    ciones iba progresando. La moneda nacional no solo se puso a la par de la inglesa sino llegó a
                                    tener un premio que ascendió hasta el 5 1/4%. Para evitar tan elevada prima el Gobierno suspen-
                                    dió la venta de las letras de los exportadores en el mercado y ellas fueron remitidas a Nueva York
                                    para invertir su producto en barras tanto argentíferas como áureas. A su llegaba al Perú, fueron
                                    amonedadas las de plata e ingresaron las de oro a las cajas de la Junta de Vigilancia y así aumen-
                                    tó el encaje que servía como garantía del cheque circular. De esta manera tuvieron respaldo
                                    creciente las emisiones de billetes.
                                         Se adoptó, al mismo tiempo, la política de procurar que buena parte del oro importado por
                                    los particulares fuera puesto a disposición del Gobierno para que este, a su vez, lo entregara a los
[2]
 	 La Hacienda Laredo. Ubicada en el valle de Santa Catalina (La Libertad), Laredo fue un claro ejemplo de
   la prosperidad existente en las haciendas de la época. En 1914, su propietario, José Ignacio Chopitea,
   decidió impulsar la producción de azúcar con la compra de nuevas máquinas y la construcción de un
   nuevo ingenio. Aquí, vemos una vista de la hacienda en 1925 (1) y a sus trabajadores en plena faena (2).
       El caso de Fermín
            Tangüis y del
            algodón que
        lleva su nombre,
                                    L     a historia de Fermín Tangüis y el
                                          descubrimiento del algodón que
                                          lleva su nombre fue bien sinteti
                                    zada por Basadre en su Historia de la
                                    República. Un reciente esfuerzo de
                                                                                      za a los agricultores no tenían que ser
                                                                                      siempre el conformismo, el fatalismo y
                                                                                      la resignación. Más aún, indica que
                                                                                      estas actitudes, que se entendían enton
                                                                                      ces como el ‘sentido común’, eran parte
              es un claro           Marcos Cueto y de Jorge Lossio (Inno        del problema” (p. 125). Como se sabe,
       ejemplo de lucha             vación en la agricultura: Fermín Tangüis    Tangüis pasó cuatro años seleccionan
            frente a una            y el algodón en el Perú [Lima: Universi    do variedades de algodón hasta encon
                                    dad del Pacífico, 1999]), sin embargo,       trar una resistente al temible Cotton
          situación poco
                                    aporta datos e interpretaciones fres      Wilt. Bien hacen Cueto y Lossio en decir
           favorable. Un            cos en torno de la figura del agricultor     que sus desvelos contrastaban con la
        reciente trabajo            puertorriqueño.                               actitud pasiva reinante en la época.
          sobre la labor
          del agricultor            Además de presentar transcripciones         Una segunda consideración es el hecho
                                    de valiosa documentación histórica –     de que Tangüis trabajara de espaldas a
        puertorriqueño              entre ellas, el propio testimonio de Tan    los esfuerzos –muy disímiles– del Esta
             asentado en            güis sobre cómo llevó a cabo sus des         do por superar el Cotton Wilt. Confron
            nuestro país,           cubrimientos–, nuevos datos biográfi      tadas con el problema, las instituciones
           arroja nuevas            cos aportan al conocimiento del perso      especializadas prefirieron imitar las res
                                    naje. Uno de los puntos más valiosos          puestas de otros países. Así, se dispuso
           luces sobre su           del traba jo de Cue   to y Los  sio es la     la importación de algodón estadouni
                  legado.           perspectiva que se asume al presentar       dense, supuestamente resistente a la
                                    el caso de Tangüis como uno de inno          plaga. Los efectos adversos de tal medi
                                    vación en la adversidad.                      da hicieron abandonar la empresa. El
                                                                                      algodón Tangüis, en cambio, era un pro
                                    Una primera consideración al respecto     ducto único en el mundo, pues no se
                                    se sintetiza en el siguiente párrafo:      adaptaba a las condiciones de otras
                                    “Tangüis, como muchos agricultores          latitudes. Entre otras consecuencias, la
                                    peruanos, tuvo que enfrentarse al abis     iniciativa de Tangüis repercutió favora
                                    mo entre las necesidades y los recursos    blemente en posteriores esfuerzos de
                                    existentes. Su persistencia por enfren     investigación. Se fundaron varias esta
                                    tar los problemas fue diferente del fata   ciones experimentales entre 1900 y
                                    lismo y la resignación de la mayoría de     1930: en Moquegua (1905), Lambaye
                                    agricultores que acostumbraban dedi       que e Iquitos (1911), Ica (1912), Madre
                                    carse a otros negocios mientras espera     de Dios (1913) y Cañete (1926). La Socie
                                    ban que pasaran las plagas nuevas que         dad Nacional de Agricultura fundó en la
                                    cada cierto número de años atacaban a       hacienda La Molina una estación experi
                                    las plantas de algodón (s/p)”.                 mental y, en 1926, se fundaría el Institu
                                                                                      to de Parasitología Agrícola. Todos estos
                                    Más adelante, agregan: “La historia de       fueron esfuerzos, quizás con pocos con
                                    Tangüis señala que las respuestas a los      tinuadores, por superar la adversidad a
                                    problemas que presentaba la naturale     través de la ciencia y la tecnología.
    La única excepción a la regla de general crecimiento en los precios de las materias primas
agrícolas nacionales de exportación estuvo en el caucho. Las plantaciones de Java, Sumatra y
Malaca multiplicaron su producción a partir de 1912, en tanto que la de América del Sur descen-
dió inexorablemente.
    Los altos precios obtenidos por los exportadores sirvieron para compensar los mayores gra-
vámenes con motivo de la considerable alza de los fletes a la que se refieren otros párrafos de
este mismo capítulo. También les favoreció la robustez del valor de la moneda fiduciaria nacional
ampliamente garantizada. Fue entonces cuando, por primera vez desde la guerra con Chile, sur-
gieron grandes fortunas.
El alGoDÓN taNGÜIS.- La historia del auge del algodón peruano tenía sus orígenes en los
primeros años del siglo XX cuando las cotizaciones internacionales reflejaron la tendencia alcis-
ta en el precio de este artículo. Había empezado entonces un aumento constante en la deman-
da mundial, mientras que, a la vez, se elevaban los costos de producción en Estados Unidos,
país en el que se reunían las más importantes y vastas zonas de cultivo. De allí provino un estí-
mulo al cultivo algodonero en los valles centrales de la costa peruana. Pronto aparecieron, sin
embargo, unas plagas representadas por una enfermedad fungosa, o sea la marchitez produci-
da por el hongo Verticillium que infectaba el suelo en forma permanente. Los daños causados
por estas plagas llamadas del “decaimiento” llegaron a ser tan considerables que el cultivo estu-
vo en peligro de desaparecer.
    Fermín Tangüis nació en la isla de Puerto Rico en 1851 y pasó su niñez y parte de su juventud
en Cuba. A la edad de 21 años, el año de 1872, vino al Perú y desde entonces hasta
[ III ]
El DISloQuE EcoNÓMIco pRoVocaDo poR la GuERRa.- De un lado la contienda y
las necesidades que la guerra europea produjo, disminuyeron en Europa la producción de artí-
culos alimenticios. De otro lado, surgió la urgencia de armar, vestir, alimentar y equipar a millones
de soldados. Con los derechos de aduanas recaudados por el Estado peruano pudo mejorar, a
partir de 1915, la situación fiscal que en 1914, antes de la guerra, ya marchaba a la crisis con los
                                       [ IV ]
                                       la NuEVa lEGISlacIÓN tRIButaRIa.- El desarrollo económico del Perú impulsado por las
                                       grandes corrientes de orden internacional después del pánico que produjo la iniciación de la
                                       guerra y la nueva política seguida por la administración de José Pardo desde que empezó su
                                       período gubernativo, facilitó el comienzo de una nueva era en la historia tributaria. En ella fueron
                                       promulgadas las siguientes leyes: 1) la N° 2143 de 6 de octubre de 1915 que fijó un gravamen a
                                       la exportación del azúcar, algodón, lanas y cueros; 2) la N° 2174 ampliatoria de la N° 2143 en lo
                                       relativo a los contratos de venta del azúcar; 3) la N° 2187 de 14 de noviembre de 1915 que seña-
                                       ló la forma y proporciones del impuesto creado sobre la exportación del oro, plata, cobre, plomo,
[2]
 	 El mercado automotor. A partir de la década de 1910, los automóviles se popularizaron en todo el Perú. Por una
   parte, eran vistos como objeto de novedad y realizaban todo tipo de demostraciones públicas, como la que vemos aquí,
   ocurrida en Arequipa, donde Fernando Ortiz de Zevallos bajó a bordo de su carro Ford las gradas de la catedral de esa
   ciudad (2). De otro lado, cambiaron las costumbres de la ciudad pues se empezaron a utilizar vehículos motorizados
   para tareas como el recojo de basura (1). Los camiones de la marca Moreland desplazaron rápidamente a las carretas
   usadas hasta entonces.
capítulo 42 ● I La evolución del Presu        del crédito fiscal ●  Las ideas conserva
puesto de la República La prórroga del
                           ●                      doras de José Pardo sobre política pre
Presupuesto de 1916 para 1917 sin voto       supuestal ● II La Caja de Depósitos y
del Congreso ●  Los reintegros a los em      Consignaciones ● La Compañía Adminis
pleados ● Los emolumentos de los repre      tradora del Guano ● III La ley sobre títu
sentantes a Congreso ● Las obligaciones    los de la deuda interna ● IV La legislación
a cargo del Erario ● La aplicación de los     sobre subsistencias ●  V El problema del
mayores ingresos y el restablecimiento   transporte marítimo ● Las “listas negras”.
     LAS CONSECUENCIAS ECONÓMICAS DE LA GUERRA MUNDIAL
          ENTRE 1915 Y 1918 Y OTROS PROBLEMAS DE ESA ÉPOCA
El Presupuesto, otros aspectos hacendarios, la legislación sobre subsistencias
        y sobre transportes durante la segunda administración de José Pardo
                     CAPÍTULO
                                    42
                                   [ ]
      L
                                    [I]
                                    a EVolucIÓN DEl pRESupuESto DE la REpÚBlIca.- Pardo encontró en 1915, primer
                                    año de su segunda administración, el Presupuesto nacional con un pliego de egresos mucho
                                    más reducido que el de los años 1912, 1913 y 1914. Análoga característica era visible en el pliego
                                    de ingresos. En los años siguientes la tendencia fue la que se observa en las siguientes cifras:
                                    la pRÓRRoGa DEl pRESupuESto DE 1916 paRa 1917 SIN Voto DEl coNGRESo.- El
                                    Presupuesto para 1917 fue remitido al Parlamento en agosto de 1916, o sea dentro de un plazo
                                    normal. Las Cámaras no llegaron a aprobarlo en la legislatura ordinaria, absorbidas por las cues-
                                    tiones económicas derivadas de la guerra y por debates y escaramuzas de carácter político. El
                                    Ejecutivo prefirió no convocar a una legislatura extraordinaria y prorrogar el Presupuesto por acto
                                    directo. El director de Administración del Ministerio de Hacienda envió una circular a los conta-
                                    dores de la República para que todos los servicios públicos se hicieran de conformidad con las
                                    leyes que sustentaban los distintos gastos a que se referían los renglones del Presupuesto, para
                                    lo cual invocó la ley de 1874.
                                        Esta decisión del Gobierno fue rudamente atacada por la oposición. El diario El Tiempo repro-
                                    dujo los discursos de los diputados del “bloque” que combatieron análoga medida tomada por
                                    el presidente Leguía. El diputado Alberto Ulloa Cisneros dirigió desde el diario El Perú una carta
                                    abierta al presidente de la Cámara José Matías Manzanilla, que había sido uno de los más elo-
                                    cuentes opositores a la prórroga hecha en 1910, para invitarlo a hacer las gestiones indispensa-
                                    bles con el fin de conseguir la convocatoria del Congreso a sesiones extraordinarias y así sancio-
                                    nar el Presupuesto. Decíase que Manzanilla había procurado privadamente convencer al
                                    presidente Pardo que tomase esa decisión y que había reprobado su negativa. Pero, en carta de
                                    4 de diciembre de 1916, el mismo Manzanilla se declaró “en la imposibilidad de producir, a nom-
                                    bre de nuestra Cámara, el acto oficial y público a que me invita” y declaró que adoptaba la regla
                                    de conducta seguida en idénticas ocasiones por los presidentes de las Cámaras de 1900, 1902,
                                    1910 y 1913 cuando se abstuvieron de requerir al Gobierno a que efectuara la convocatoria a
                                    Congreso extraordinario por carecer de facultades constitucionales para hacer ese pedido(1).
(1) A Manzanilla algunos periodistas le habían dado el apodo de “Gioconda parlamentaria” porque creían ver en su
                                    rostro una perenne sonrisa enigmática. Cuéntase que, años después de 1917, Manzanilla viajó a París y tuvo como
                                    “cicerone” a Francisco García Calderón. Este lo llevó a diversos lugares, entre los que estuvo el Museo del Louvre. Ante el
cuadro de la “Gioconda” de Leonardo da Vinci (narra la anécdota aquí transcrita) el político peruano permaneció largo
rato y al fin tomó del brazo a García Calderón y le dijo: “El gran error de Pardo fue gobernar sin Presupuesto”.
[2]
[ IV ]
la lEGISlacIÓN SoBRE SuBSIStENcIaS.- Al prolongarse la guerra, la atracción que expe-
rimentaron los productores de artículos alimenticios para venderlos en el extranjero a altos pre-
cios, la reducción del área dedicada a los cultivos de panllevar para aumentar el del algodón y la
                                                                                                            AL ESTAbILIzARSE
laS “lIStaS NEGRaS”.- Al estabilizarse y prolongarse la guerra europea, Inglaterra comenzó                  y PROLONGARSE
a aplicar en todo el mundo la política de las “listas negras”. En el Perú hubo negociaciones azuca-
reras nacionales que se encontraron en dificultades para sus transacciones; naves a las que se              LA GUERRA
vedó embarques de azúcar de un ingenio del norte de propiedad alemana; comerciantes a quie-                 EUROPEA,
nes se advirtió que nada de lo comprado a firmas inglesas debía ser revendido a alemanes o que
cualquier negocio con ellos los inhabilitaba para sus relaciones con aquellas; importadores de
                                                                                                            INGLATERRA
carbón y otros artículos que se negaron a cumplir sus compromisos mientras no se garantizara                COMENzó A
que dichos productos no iban a beneficiar a alemanes. Así y en otras formas la libertad comercial           APLICAR EN TODO
dentro del país recibió rudos golpes y siniestras amenazas. Fueron aplicadas las leyes de la guerra
en país no beligerante. Hubo protestas contra la política de las “listas negras” y la Cancillería de        EL MUNDO LA
Lima hizo reservas contra ella (como consta en la memoria de Relaciones Exteriores de 1916),                POLíTICA DE LAS
pero funcionaron con libertad.
                                                                                                            “LISTAS NEGRAS”.
                                                                                                            EN EL PERú hUbO
                                                                                                            NEGOCIACIONES
                                                                                                            AzUCARERAS
                                                                                                            NACIONALES qUE
                                                                                                            SE ENCONTRARON
                                                                                                            EN DIFICULTADES
                                                                                                            PARA SUS
                                                                                                            TRANSACCIONES
                                                                                                            (...)
capítulo 43 ● I La libertad de cultos             ● VI La supresión de los tratamientos ●       trabajadores del petróleo y de obreros
●  Los adventistas en Puno La provi
                                    ●                VII La ley sobre trabajo de mujeres y         de Smelter en 1916 ● La huelga de em
sión del obispado de Puno ●  Monse              niños y la ley sobre descanso obligato      pleados de la Biblioteca Nacional y la
ñor Emilio Lisson, arzobispo de Lima           rio dominical ●  La ley ampliatoria de la    huelga de telegrafistas ● La huelga de
●  El reconocimiento de la jur isdicción     de accidentes de trabajo ● La ley sobre      motoristas y conductores de 1917 y el
eclesiástica en los asuntos a ella inhe        casas para obreros ●  La ley sobre em         arbitraje ● La huelga petrolífera de 1917
rentes ● II El asunto La Brea y Pariñas          bargo de sueldos y pensiones y sobre          ● La ley sobre extranjeros indeseables
en el Senado ● José Pardo ante el pro agio y usura ● La ley seca ● Las obliga ● XI La organización sindical y la lucha
blema de La Brea y Pariñas en el men             ciones sociales de los establecimien       por la jornada de ocho horas ● El paro
saje de 1918 ● La cuestión de La Brea y            tos industriales ●  Otras normas sobre        general de enero de 1919 ●  La jornada
Pariñas en la Cámara de Diputados ● La        trabajo y previsión social ● La ley sobre    de ocho horas ● La agitación sindicalis
ley N° 3016 ●  ¿Era procedente en 1918            sociedades anónimas ●  VIII El censo         ta ● XII Rumi Maqui ● La reglamenta
el arbitraje internacional? ● III La ley de   de empleados públicos ● IX Domingo           ción de los trabajos de los indígenas. El
hábeas corpus ● La ley de la liquidación        Olavegoya ●  Augusto E. Pérez Araníbar     proyecto de Capelo sobre tierras ● El in
de prisiones preventivas ● IV La colonia      ● Víctor Larco Her rera ● X Las huelgas de    forme Maguiña sobre Urcón ● La granja
del Frontón ● V La prenda agrícola, la hi       obreros portuarios y ferrocarrileros, de   modelo de Puno ● XIII Adolfo Rondón
poteca naval y los almacenes generales      campesinos en la zona de Huacho, de           y Luis Igreda.
ASPECTOS JURÍDICOS Y SOCIALES DURANTE LA SEGUNDA
             ADMINISTRACIÓN DE JOSÉ PARDO HASTA
   LA IMPLANTACIÓN DE LA JORNADA DE OCHO HORAS.
           El arbitraje en la cuestión La Brea y Pariñas
            CAPÍTULO
                        43
                       [ ]
      L
                                    [I]
                                    a lIBERtaD DE cultoS.- La ley N° 2193 de 11 de noviembre de 1915 suprimió del artículo
                                    4° de la Constitución de 1860, en la parte acerca del reconocimiento de la Iglesia católica como
                                    religión del Estado, las frases que decían “y no se permite el ejercicio público de alguna otra”. Con
                                    ello estableció, pues, la libertad de cultos. La iniciativa fue del senador Severiano Bezada en 1913.
                                    Cuando quedó sancionada, definitivamente, esta reforma en la sesión del Congreso del 11 de
                                    noviembre de 1915, el sacerdote y diputado por Celendín, José Sánchez Díaz se precipitó a la
                                    mesa de su Cámara para romper el texto de la ley en medio de ensordecedor vocerío.
                                        Se produjo con motivo de este asunto gran agitación pública en Lima. Protestaron algunos
                                    grupos numerosos compuestos, sobre todo, por mujeres contra la reforma. Ella fue promulgada
                                    por el presidente del Congreso Rodrigo Peña Murrieta y respetada por el presidente Pardo. Una
                                    serie de sermones multitudinarios iniciados poco después, en Lima a cargo de los sacerdotes
                                    Hormaechea y Arámburu atrajo gran concurrencia.
                                        En marzo de 1915 tuvo lugar en el Teatro Mazzi la inauguración del primer Congreso Evan-
                                    gélico reunido en el Perú. Asistieron delegados de varios países americanos y alcanzó en él
                                    actuación destacada John Ritchie, gran propagandista del credo que entonces hizo su presen-
                                    tación pública.
                                                                                                             El sacerdote arequipeño
El REcoNocIMIENto DE la JuRISDIccIÓN EclESIáStIca EN loS aSuNtoS a Ella                                      fue designado arzobispo
INHERENtES.- En 1918 surgió un litigio entre el obispo de Arequipa y un cura de esa diócesis                 de lima en 1918. lissón
que fue removido de la parroquia de Vítor. El perjudicado se presentó ante el fuero civil y allí             realizó estudios
declaró que era inhábil el Provisor Eclesiástico ante el que se había entablado la causa, por lo cual        teológicos en la orden de
entabló una contienda de competencia de fuero. Llegado el expediente a la Corte Suprema, el                  San lázaro, en parís. En
fiscal Juan José Calle dictaminó en el sentido de que, como el juicio iniciado ante el Provisor              1895, volvió al perú y se
Eclesiástico versaba sobre materia netamente eclesiástica cual era la separación de un cura por              dedicó a la docencia y al
causas netamente canónicas, la ley no daba intervención a los jueces comunes. Señaló Calle, con              estudio de ciencias en la
este motivo, el artículo del Código de Procedimientos Civiles según el cual la competencia de los            universidad Nacional San
jueces y el ejercicio de la jurisdicción privativa se determina por la ley que designa especialmen-          agustín. En 1909 le
te al juez y por los asuntos que debe conocer.                                                               encargaron la diócesis de
    La Corte Suprema, por resolución de 18 de octubre de 1918, declaró improcedente la com-                  chachapoyas, donde
petencia entablada.                                                                                          realizó una intensa labor
    Se considera que esta ejecutoria tiene interés histórico porque fue la última que rechazó el             pastoral y de
recurso llamado de fuerza por el cual, desde la época colonial, quien se considerase agraviado               construcción de obras
por el exceso de poder del fuero eclesiástico podía acudir a exhibir su derecho ante los tribuna-            públicas. Ejerció el
les civiles.                                                                                                 arzobispado hasta el
                                                                                                             golpe de Estado de
                                                                                                             Sánchez cerro, tras lo
[ II ]                                                                                                       cual se exilió fuera del
El aSuNto la BREa y paRIÑaS EN El SENaDo.- A raíz del decreto sobre la concesión                             país. En 1931 fue
de La Brea y Pariñas expedido por el presidente Benavides quedó planteado un grave conflicto.                designado arzobispo de
Ni el propietario Keswick ni la Compañía London Pacific Petroleum Co., arrendataria de La Brea y             Metimna (Italia), donde
Pariñas, aceptaron ese decreto ni tampoco los de 1911 y 1914. Las pertenencias explotadas por                investigó sobre la historia
la compañía llegaban a mil y las restantes estaban inexploradas; pero, de acuerdo con el decreto             de la iglesia peruana.
sobre empadronamiento, la London debía abonar, como ya se ha señalado, S/.1.248.420,00 anua-
les no obstante que exportaban entonces 180.000 toneladas métricas de petróleo bruto con
solo un valor de s/.3.600.000,00 Así pues, el fisco demandó por contribución territorial más de la
tercera parte del producto bruto; es decir, un porcentaje mucho mayor que el producto neto en
la explotación del petróleo.
    En una nota enviada el 14 de abril de 1915 a la Cancillería del Perú, el ministro inglés en Lima
Rennie manifestó que había recibido instrucciones del Gobierno de Su Majestad para reclamar
con motivo de una queja entablada al Gobierno del Perú por la London Pacific Petroleum Co. Allí
edificio para el concejo municipal. Tras el golpe     para el tratamiento de dichos pacientes, y donó
de Estado al gobierno de Guillermo Billinghurst       una considerable suma de dinero para la cons-
fue apresado, debido a que abogó por el recono-       trucción del hospital que hoy lleva su nombre,
cimiento del vicepresidente como presidente           para atender estos casos.
provisorio.                                           Por otro lado, donó dinero para la construcción
En 1918 fue incorporado a la Sociedad de Benefi-      de un or fanato y, en 1919 empezó a comprar
cencia de Lima, donde se encargó de la inspec-        colecciones par ticulares de piezas arqueológicas
ción de los hospitales para enfermos mentales.        para formar un museo. Con este fin, construyó un
También ayudó al doc tor Hermilio Valdizán a          edificio inspirado en la cultura Tiahuanaco, que
desterrar los métodos anticuados e inhumanos          luego vendió al Estado por una suma simbólica.
  El autor del presente libro expresó su opinión sobre el asunto La Brea y Pariñas en el libro Perú: Problema y Posibili-
(1)
[2]
        	Los beneficios para los obreros. En diciembre de 1916, el gobierno peruano emitió varias leyes sobre el trabajo de
         las mujeres, a quienes se benefició primero con la jornada laboral de ocho horas. En esta fotografía, vemos a las
         obreras de la fábrica de tejidos de punto La Bellota (1). El gobierno de Pardo y Barreda se preocupó por impulsar los
         beneficios sociales para las clases trabajadoras del país. Entre sus proyectos estaba el de la construcción de viviendas
         para los obreros del Callao (2), que incluía un plan de facilidades para su compra.
                                                                   12 de enero                           13 de enero
             EL PARO GENERAL                                    Se inicia el movimiento
                                                                huelguista en Lima. El gremio de
                                                                                                         A las cuatro de la mañana, los
                                                                                                         obreros de Lima acuerdan
                      DE 1919                                   panaderos se reúne esa noche             realizar un paro general. El
                                                                para tomar acciones concretas.           tráfico se paraliza en la capital y
           EN ENERO DE 1919, DIvERSOS                           En otra reunión, en la                   las fábricas y talleres dejan de
            GREMIOS ObREROS DE LIMA,                            Federación de Estudiantes, los           funcionar. Luego, ocurren
                                                                panaderos recibieron el apoyo            choques entre la policía y los
                   EL CALLAO y vITARTE                          de los trabajadores textiles, así        huelguistas, quienes levantaron
           INICIARON UNA hUELGA POR                             como de los mozos de                     algunas de las vías de tranvías.
               AUMENTOS SALARIARES y                            restaurantes y cafés de Lima,            Otro grupo de manifestantes
                                                                que les entregaron un óbolo.             vuela las líneas del Ferrocarril
                  bENEFICIOS SOCIALES.                                                                   Central.
TERRITORIO DE LA
     REPúbLICA LA                    laS oBlIGacIoNES SocIalES DE loS EStaBlEcIMIENtoS INDuStRIalES.- Las dos
                                     Cámaras aprobaron por unanimidad en la legislatura ordinaria de 1918 un proyecto de ley del
        vENTA y EL                   senador Ernesto Diez Canseco por el cual obligó a todo establecimiento industrial que ocupara
      CONSUMO DE                     cincuenta obreros y que distase más de un kilómetro de la población más cercana, a construir
           bEbIDAS                   campamentos con habitaciones higiénicas, a sostener una escuela de instrucción primaria diur-
                                     na para los hijos de los obreros y otra nocturna para estos y a poseer un botiquín destinado a las
     ALCOhóLICAS                     curaciones de primera emergencia. En aquellos en que el número de operarios pasara de 300 y
     DURANTE LOS                     si no hubiera dentro del radio de 10 kilómetros población con asistencia médica, debía haber un
                                     médico rentado por la respectiva empresa para el cuidado de la salud de los trabajadores. La
    DíAS SábADO y                    vigilancia para el cumplimiento de las normas antedichas quedó, en los establecimientos mine-
     DOMINGO (...)                   ros, a cargo de los delegados de minería y en los demás, al cuidado de las autoridades políticas.
                                         Fue la ley N° 3019 de 27 de diciembre de 1918. Es posible que, en demasiados casos, no fue-
                                     ra cumplida debidamente.
                                     [ IX ]
                                     DoMINGo olaVEGoya.- En 1915 Domingo Olavegoya donó a la Beneficencia Pública de Lima
                                     una considerable extensión de terreno en Magdalena del Mar para que se edificase allí el nuevo
                                     manicomio. Al año siguiente legó a la Beneficencia Pública de Lima la suma de 100 mil soles desti-
                                     nada a la construcción de un hospital para tuberculosos en Jauja o en el lugar que dicha Sociedad
                                     designara. Olavegoya había comprado antes en “El Tambo”, cerca de Jauja, un terreno para el hospital.
                                     auGuSto E. pÉREZ aRaNíBaR.- Augusto E. Pérez Araníbar nació en Arequipa en 1863. Hizo
                                     sus estudios profesionales en la Facultad de Medicina de Lima. Formó parte del servicio de sani-
                                     dad militar durante la guerra con Chile, a pesar de que entonces hallábase en la iniciación de su
                                     vida como alumno. Hizo la campaña de Arica, asistió a las batallas de San Juan y Miraflores y
                                     prestó sus servicios en los hospitales de sangre hasta la terminación de la contienda. Su trabajo
                                     para el bachillerato versó sobre “Influencia de las heridas de armas de fuego sobre las diátesis y
                                     viceversa” y fue publicado en Anales Universitarios por acuerdo de la Facultad. Para el doctorado
                                     presentó una tesis sobre las aguas minerales del Perú.
                                         Viajero en Estados Unidos y Europa, visitó hospitales de importancia y llevó a cabo en París
                                     estudios minuciosos sobre enfermedades del aparato digestivo. En su equipaje trajo al regresar
                                     al Perú planos y prospectos, libros e iniciativas.
                                                                                                Inició la formación de
                                                                                                un museo, que vendió
                                                                                                al Estado, en 1924, por
                                                                                                una suma simbólica.
                                                                                                                                      Víctor Larco Herrera
           Fuente: Milla Batres (editor). Diccionario histórico y biográfico del Perú.                                                                                                Infografía: Grafitti
                                     [ XI ]
                                     la oRGaNIZacIÓN SINDIcal y la lucHa poR la JoRNaDa DE ocHo HoRaS.- Del
                                     5 al 10 de enero de 1918 efectuóse el primer Congreso de la Federación Obrera Local.
                                         La lucha por la jornada de ocho horas fue inscrita como lema de una reforma inmediata por
                                     la Federación de Obreros Panaderos “Estrella del Perú” en su declaración de principios el 1° de
[3]
        	 El paro general de 1919. En enero de 1919, varios gremios obreros se levantaron en la ciudad de Lima y el puerto del
          Callao, en busca de mejoras salariales y del establecimiento de la jornada laboral de ocho horas. Para disolver las
          manifestaciones, los gendarmes de Lima y Callao (3), que custodiaban la ciudad, debieron emplear jinetes armados,
          como se aprecia en esta imagen (1). Durante la jornada, se registraron abundantes muestras de apoyo a la medida. En
          esta fotografía vemos a un líder sindical ofreciendo un improvisado discurso en la Plaza de Armas (2).
[ XII ]
RuMI MaQuI.- El sargento mayor de Caballería, Teodomiro Gutiérrez Cuevas, a quien Billing-
hurst enviara en 1913 en una comisión investigadora al departamento de Puno, se sublevó en
1915 con grupos de indígenas de Huancané y Azángaro. Gutiérrez Cuevas había sido subprefec-
to de Chucuito en 1903-1904. “Durante su gestión (escriben Alberto Flores Galindo y Manuel
Burga en el libro Apogeo y Crisis de la República Aristocrática) suprimió los trabajos gratuitos, el
[2]
         CAPÍTULO
                    44
                   [ ]
      L
                                    [I]
                                    oS INStItutoS aRMaDoS. la cREacIÓN DEl SERVIcIo DE aVIacIÓN MIlItaR.- En
                                    su manifiesto de 1919 José Pardo hizo referencia especial al hecho de haber sido objeto de rei-
                                    terados y acerbos ataques de sus enemigos por no “atender al progreso del ejército y no hacer
                                    las adquisiciones de material de guerra indispensables a la eficaz defensa de los derechos de la
                                    nación”. Estas críticas constituyeron uno de los factores favorables a la revolución del 4 de julio
                                    de 1919 y tuvieron una de sus expresiones en el llamado público hecho por el coronel Enrique
                                    Ballesteros para que se armara al país. Ballesteros fue enviado con una comisión al Japón.
                                        Anota Pardo que “imperiosas exigencias de orden financiero que no sería justo olvidar en esta
                                    hora, me determinaron a reducir los efectivos del ejército al comienzo de mi administración”,
                                    cosa, a su juicio, justificada por la situación económica del país y el estado de las relaciones inter-
                                    nacionales. Agrega que, pasado el momento de crisis, se acrecentaron dichos efectivos a partir
                                    de 1917, con lo que “ha sido posible crear nuevas unidades como son: el regimiento de la infan-
                                    tería número 13; las compañías de ametralladoras divisionarias; el batallón de gendarmes de
                                    Lima número 2; y el escuadrón de caballería Guardias de Lima”. Afirma que “nunca tuvo la Repú-
                                    blica en tiempo de paz mayores efectivos militares”.
                                        Explica la imposibilidad de adquirir elementos bélicos hasta concluida la guerra por estar
                                    absolutamente prohibido su comercio y agrega que solo entonces “dentro de los recursos de
                                    que podía disponer el Estado”, se pudieron adquirir: municiones de infantería, un lote importan-
                                    te de ametralladoras, aeroplanos, de los cuales el Perú carecía por completo, y material de avia-
                                    ción, tubos para los calderos y los condensadores de los cruceros Grau y Bolognesi. Parte de estos
                                    elementos bélicos llegó después de la caída del gobierno de Pardo.
                                        Revela que su deseo de proveer fondos para la adquisición de material de guerra se cristalizó
                                    en dos proyectos de leyes que se proponía someter al Congreso. El primero relativo a la creación
                                    de rentas especiales para formar el fondo de guerra; y el segundo a la organización de un Con-
                                    sejo de Defensa Nacional.
                                        Agrega que el interés de su Gobierno por los institutos armados se reveló por la nueva con-
                                    tratación de servicios de la misión militar francesa; la fundación de la Escuela de Aviación, y el
                                    esfuerzo de buscar, para dirigirla, personal competente y experto(1), la formación de pilotos
                                    peruanos en la escuela argentina del Palomar; la regularidad del servicio militar; la organización
                                    de las maniobras de guarnición y otras medidas, así como por las mejoras del hospital de San
                                    Bartolomé y la construcción de cuarteles en diversos lugares del país.
                                        Aquí debe ser mencionado por su importancia el decreto de 28 de enero de 1919 que creó
                                    el servicio de aviación militar.
                                        Especial interés ofrece también la venida al país de buenos caballos para organizar los servi-
                                    cios de un haras militar que permitiera al ejército disponer de ganado caballar propio sin nece-
                                    sidad de tener que depender de Chile para esas adquisiciones.
                                     [ II ]
                                     El RaMo DE FoMENto. aSpEctoS GENERalES.- Como una de sus notas distintivas el
                                     período 1915-1919, como ya se ha visto, se caracterizó por el gran desarrollo de la minería y de
                                     la agricultura de exportación. El Congreso de la Industria Minera de 1917 representó una expre-
                                     sión de los progresos alcanzados y una afirmación de las perspectivas futuras en esta rama de la
                                     actividad nacional.
                                         En los valles de Piura, Lambayeque, La Libertad, Lima, Ica, Arequipa y Áncash fueron organi-
     El político pisqueño            zadas comisiones técnicas para la administración de las aguas de regadío.
  encabezó el Ministerio
de Fomento entre 1917 y
          1918. Durante su           caRREtERaS y FERRocaRRIlES.- La ley N° 2323 de 3 de noviembre de 1916, emanada de
      gestión, inició una            una iniciativa del Poder Ejecutivo, tuvo carácter reglamentario para la clasificación, construcción
  intensa actividad para             y conservación de las vías de comunicación en el territorio de la República. De conformidad con
 la ampliación de la red             ella, la ley N° 2747 de 20 de mayo de 1918 mandó consignar en el Presupuesto nacional varias
 ferroviaria del país. En            partidas destinadas al Cuerpo de Ingenieros de Minas y a la obra en diferentes caminos.
    ese sentido, inició la               Entre las carreteras en construcción, en julio de 1919, estuvieron las de Magdalena a Cajamarca,
          construcción de            Tarma a La Oroya, Mejorada a Huancavelica, Cerro de Pasco a Huánuco y Abancay a Izcuchaca.
         diversas vías que               El paso de Héctor Escardó por el Ministerio de Fomento entre julio de 1917 y abril de 1918 se
              conectarían,           caracterizó por las iniciativas y actividades que tuvo este funcionario en el afán de construir ferro-
     principalmente, los             carriles. “Ferrocarriles y rieles y adentro, adentro” fue su divisa. En especial, se ocupó de llevar
    departamentos de la              adelante las vías de Chimbote a Recuay y de Huancayo a Ayacucho, de impulsar la de La Con-
       sierra con puertos            vención y terminar la de Lurín. Al cesar en el cargo, Escardó se incorporó nuevamente a la Cáma-
        costeños. En 1918,           ra de Diputados en la que ejercía la representación por Cerro de Pasco y allí defendió la política
  Escardó se reintegró a             de vías de comunicación que había desarrollado.
         sus labores en la               La ley N° 2769 de 3 de setiembre de 1918, debatida ardorosamente en ambas Cámaras, con-
   cámara de diputados,              signó en el Presupuesto nacional para 1918 una partida de Lp. 200.000 para la construcción de
donde representaba a la              ferrocarriles de Huancayo al Cuzco, de Chimbote a Recuay y de Chilete a Cajamarca. También
      provincia de pasco             dedicó una partida de Lp. 20.000 para los estudios preliminares y simultáneos de las líneas ferro-
                desde 1913.          viarias de Ayacucho al Cuzco, de Urcos u otro punto de la línea del Cuzco a un lugar navegable
                                     del río Madre de Dios y para completar los estudios de las líneas de Paita al Marañon y de Ninaca-
                                     ca a un punto navegable del Ucayali, así como para los estudios complementarios de la zona
                                     comprendida entre un punto del ferrocarril central y el yacimiento carbonífero de Jatunhuasi. El
                                     superávit que resultara al discutirse el Presupuesto General de la República para 1919, de Lp.
                                     280.000 fue dedicado a la intensificación de las tres líneas primeramente indicadas y a la construc-
                                     ción de los ferrocarriles de Sayán a Oyón y Cerro de Pasco, de Chuquicara a Jaén, de Puno al Desa-
                                     guadero y de Menochuco a Quiruvilca y al ferrocarril de Jatunhuasi. Asimismo, asignó definitiva-
                                     mente, a partir de 1919, para la construcción de ferrocarriles, la renta de tabaco con deducción del
                                     10% que estaba afecto a las amortizaciones del préstamo de los bancos, y cualquiera otra renta de
                                     libre disposición hasta la concurrencia de Lp. 500.000 que debían distribuirse en la forma indicada.
                                         La ley N° 2886 de 29 de noviembre de 1918 dispuso que en la ejecución de las obras ferro-
                                     viarias mandadas construir y estudiar conforme a las leyes vigentes se invirtiera el producto
[2]
                                      [ IV ]
                                      El DESaRRollo DE lIMa. El DEStINo DE loS FoNDoS cREaDoS paRa El tEatRo
                                      NacIoNal.- La ley N° 2039 de 21 de noviembre de 1914 había señalado el monto y la forma
                                      con que propietarios debían contribuir a la pavimentación de Lima. La ley de 30 de setiembre de
luIS MIRÓ QuESaDa, alcalDE DE lIMa.- Uno de los alcaldes de Lima más destacados
en el siglo XX, es Luis Miró Quesada que ocupó ese cargo entre 1916 y 1918. A Miró Quesada
estuvieron unidos los estudios de pavimentación, agua potable y canalización encomendados al
ingeniero norteamericano Spaulding; la colocación del asfalto en el jirón de la Unión (1918); la
modernización de los servicios de agua potable de la capital con implementos y sistemas para
su decantación, purificación y filtración con el empleo de aparatos de cloro líquido; el estableci-
miento del Patronato de Educación Pública (bajo cuyos auspicios se iniciaron la inspección médi-
ca de los alumnos y la mutualidad escolar organizada para la asistencia domiciliaria y el suminis-
tro de medicinas a cambio de una módica contribución); la organización e instalación del primer
refectorio escolar en el plantel de la calle Malambo donde el desayuno era suministrado al costo
de 4 centavos; la apertura de otros refectorios en los barrios de Malambito, Mercedarias y La Vic-
toria, y algunas iniciativas más.
[2]
Los editores agradecen a los            85 Vista de Madre de Dios             206 José Carlos Mariátegui           75 [1] Recuerdo de misa de mes de
propietarios de los derechos de         90 Juan Bielovucic en los Alpes       209 Movimiento subversivo de             Nicolás de Piérola
autor por su colaboración con esta      91 Charles W. Sutton                     Ancón                             141 Vapor Urubamba
publicación. Asimismo declaran          95 Ramón Montero                      210 Óscar Mavila                     185 José Pardo y Barreda
que se ha hecho todo lo posible         100 José Corbacho                     221 Celebración fin de la Primera
para identificar y contactar a los      104 Alfredo Piedra                       Guerra Mundial / José García      corbis
propietarios de los derechos de las     107 Entrenamientos de tiro               Calderón / Barca Lorton           219 Thomas Woodrow Wilson
imágenes que se reproducen en           108 José Urdanivia                    223 Arturo García Salazar
este libro; cualquier omisión es        111 Javier Prado / Manuel Prado y     233 José Ignacio Chopitea            El comercio
involuntaria. Toda información que          amigos / Comité Directivo del     235 Manuel Vicente Villarán          55 [2] Aviso de la candidatura de
permita a los editores rectificar           Partido Liberal                   238 Algodón Tangüis                      Aspíllaga
cualquier crédito para futuras          113 Jorge Valdizán                    239 Carlos Olavegoya                 59 [1] Aviso de la candidatura de
ediciones será bienvenido.              114 Guillermo Billinghurst en la      241 Camiones recogedores de              Billinghurst
                                            Escuela Militar                      basura / Fernando Ortiz de
carátula                                119 Diario La Prensa                     Zevallos en auto                  Instituto de Estudios Históricos
Colección Amelia Weiss                  120 Alberto Secada                    242 Trapiche de la Hacienda          Marítimos del perú
                                        122 Francisco José Eguiguren             Laredo                            31 [1] Bazar en la Hacienda Roma
archivo peisa                           128 Roberto Leguía                    249 Vapor Ucayali                    37 Jorge Chávez
76 Delfín Lévano                        133 Diario La Lucha                   250 Vista del puerto Mollendo        87 Trabajadores sección descarga y
89 Lauro Ángel Curletti                 134 Juan Manuel Torres Balcázar       253 José Antonio Lavalle García          almacen, Aduana del Callao
109 Manuel Químper                      135 Orestes Ferro Pinto               254 Manuel Montero y Tirado          129 Óscar R. Benavides
138 Gerardo Balbuena                    143 Carlos I. Abrill                  259 Emilio Lisson y Chávez           231 Hacienda Laredo
213 Luis Fernán Cisneros                145 Prácticas de tiro                 260 Belisario Sosa, Víctor Larco     293 Tripulación y sumergible Ferré
                                        147 José Antonio de Lavalle y            Herrera
Biblioteca Nacional del perú                Pardo                             261 Aurelio Arnao                    Martín chambi
13 Código de prodecimientos             150 Baldomero Maldonado               262 Ernesto Sousa                    31 [3] Hacienda Angostura, Cuzco
    civiles                             155 Francisco Tudela y Varela         263 Los trece patriotas del Senado
15 Obreros textiles / Fábrica de        157 [1] Debate sobre crisis           265 Felipe Barreda y Laos            Museo Banco central de
    Tejidos Vitarte                         financiera                        266 Casas para obreros / Obreras     Reserva del perú
16 Rafael Grau Cabero                   158 Luis Villarán Godoy                  de la fábrica La Bellota          157 [2] Cheque circular de 5 libras
17 Delfín Vidalón                       159 Anselmo Barreto                   268 Diómedes Arias Soto              163 Moneda de 1/5 de sol de plata
18 Huelga de conductores de             160 Aurelio García y Lastres          271 Ernesto Diez Canseco
    tranvías                            161 Vapor Krooland / Canal de         273 Accidente de trabajo             Museo de arte de lima
19 Manuel Bernardino Pérez                  Panamá                            275 Augusto Pérez Araníbar           75 [2] Funerales de Nicolás de
24 Julio César Arana                    165 Francisca Benavides               278 Ezequiel Muñoz                       Piérola
28 Dora Mayer                           169 Fernando Fuchs                    279 Protesta de operarios / Pozo
39 Carlos Tenaud / Juan Bielovucic      170 Alejandro Deustua, José Pardo        Negritos                          Museo Nacional de
    en vuelo                                y Barreda                         282 Paro general, 1919               arqueología, antropología e
42 Juan Bielovucic                      173 Rafael Grau / Discurso de         284 Teodomiro Gutiérrez Cuevas       Historia del perú
43 Carlos Tenaud                            Pedro Muñiz                       285 Efectos del paro general, 1919   27 Pedro S. Zulen
49 Enrique Barreda y Osma               174 Ricardo Bentín                    286 Luis Felipe Luna
54 Nicolás de Piérola                   176 Convención de partidos            292 Héctor Escardó Salazar           Infografías
55 [1] Variedades, [3] Partidarios de       politicos / Mesa Directiva        296 Carro Nº 79 del tranvía / Juan   40, 41 Los pioneros de la aviación
    Aspíllaga                           179 Manuel Rivero y Hurtado              O´Connor en el Ponnier                en el Perú
56 Miguel Echenique                     183 Diario El Tiempo                  297 Tranvía eléctrico                Biblioteca Nacional del Perú, Getty
59 [2] Partidarios Billinghurst, [3]    189 Miguel Grau                       298 Juan O'Connor                        Images, Instituto de Estudios
    Manifestación                       190 Militares y autoridades en                                                 Históricos Marítimos del Perú,
60 Francisco Moreyra y Riglos               Huaraz / Cuerpo de Juan           colección E. Jahnsen                     Museo Aeronaútico del Perú
65 Aurelio Sousa                            Ferreccio                         31 [2] Vale de la Hacienda Laredo    78 La creación de Madre de Dios
66 Enrique Varela                       191 Óscar Grau                                                             Biblioteca Nacional del Perú, Walter
67 Diario La Crónica                    195 Vista de Palcaro / Cadáveres de   colección Humberto currarino             Wust
72 Ramón Barros Luco                        R. Grau y M. Díaz                 23 Barcaza Preciada /Fiesta en       276 Las donaciones benéficas
75 [3] Funerales Nicolás de Piérola     198 Funeral de Rafael Grau /              Punchana                         Biblioteca Nacional del Perú
77 Diario La Protesta                       Arresto de Adrián Moreno          71 Guillermo Billinghurst
83 Caricatura                           205 Revista Nuestra Época
 Tomo 1  La época fundacional de la República [1822-1842]
 Tomo 2  La época fundacional de la República [1822-1842]
 Tomo 3  La época fundacional de la República [1822-1842]
         La falaz prosperidad del guano [1842-1866]
 Tomo 4 La falaz prosperidad del guano [1842-1866]
 Tomo 5 La falaz prosperidad del guano [1842-1866]
 Tomo 6 La falaz prosperidad del guano [1842-1866]
         La crisis económica y hacendaria anterior a la guerra con Chile [1864-1878]
 Tomo 7 La crisis económica y hacendaria anterior a la guerra con Chile [1864-1878]
 Tomo 8 La crisis económica y hacendaria anterior a la guerra con Chile [1864-1878]
         La guerra con Chile [1879-1883]
 Tomo 9 La guerra con Chile [1879-1883]
 Tomo 10 El comienzo de la reconstrucción [1884-1895]
 Tomo 11 El comienzo de la reconstrucción [1884-1895]
         La República Aristocrática [1895-1919]
 Tomo 12 La República Aristocrática [1895-1919]
 Tomo 13 La República Aristocrática [1895-1919]
 Tomo 14 El Oncenio [1919-1930]
 Tomo 15 El comienzo de la irrupción de las masas organizadas en la política [1930-1933]
 Tomo 16 El comienzo de la irrupción de las masas organizadas en la política [1930-1933]
         Breves notas relacionadas con la educación, la ciencia y la cultura entre 1895-1933
 Tomo 17 Breves notas relacionadas con la educación, la ciencia y la cultura entre 1895-1933
         Los resultados de la experiencia histórica peruana y las perspectivas abiertas en el siglo XX
ADENDA
 Tomo 18 Historia de la República del Perú [1933-2000]