Cartilla Zarigueya Vol III Julio
Cartilla Zarigueya Vol III Julio
Cartilla Zarigueya Vol III Julio
DE CRÍAS DE
ZARIGÜEYA EN ESTADO
DE INDEFENSIÓN
Apoya:
PAUTAS PARA EL MANEJO DE
CRÍAS DE ZARIGÜEYA
EN ESTADO DE INDEFENSIÓN
Apoya:
CONTENIDO
Autores:
Carolina Vivas Serna
Francisco Javier Flórez Oliveros Juan
Felipe Castrillón Gallego
ISBN 978-958-46-8137-9
11
INTRODUCCIÓN
12
13
Cuando estos eventos ocurren y las Existen varios factores a considerar con
madres mueren, es factible observar a las el fin de protegerlas. Para comenzar, se
crías aún con vida dentro del marsupio o les deben prestar los primeros auxilios, y
desampa- radas a la intemperie. A esta proceder a su reporte a la Autoridad Am-
situación se le conoce como “estado de biental, para su atención y valoración en
indefensión”, dado que las pequeñas el Centro de Atención y Valoración de
zarigüeyas corren el riesgo de no fauna silvestre - CAV, conforme a los
sobrevivir, especialmente en los estados protocolos establecidos en la
iniciales de su desarrollo. Resolución N° 2064 de 2010 del
Ministerio de Ambiente y Desarrollo
Bajo este panorama hay dos aspectos a Sostenible.
resaltar: primero, las zarigüeyas no son
mascotas sino fauna silvestre; de ninguna aplicar los primeros auxilios a las crías
manera se deben extraer de su hábitat en- contradas previo a su remisión a la
natural. Las pautas que encontrará más Autori- dad Ambiental. Ponemos a su
adelante se dirigen exclusivamente a las servicio este documento. Al finalizar, usted
crías vulnerables cuya madre haya muerto comprenderá características de la
y que necesiten la intervención humana biología, ecología y conservación de las
para sobrevivir. En segundo lugar, es zarigüeyas, y estará en capacidad de
posible que usted encuentre a las crías darle un manejo apro- piado a las crías de
solas porque su madre está buscando Didelphis marsupialis y Didelphis pernigra
alimento o ahu- yentando a un posible que se encuentren en estado de
depredador. En este caso, se recomienda indefensión, a las cuales se les ha
guardar distancia y esperar un poco, para aplicado los primeros auxilios que per-
estar seguro de que la progenitora en mitan garantizar su supervivencia antes
realidad falleció y ahí si proceder a tomar de ser remitidas o entregadas a la
las crías. Autoridad Ambiental respectiva
14
15
¿QUÉ SON LAS ZARIGÜEYAS?
BRASIL
es uno de los
PAÍSES
que realiza más
INVESTIGACIONES
sobre las “gambás”
Figura 2. Cría de Didelphis marsupialis rescatada y rehabilitada. Fuente: fotografía de Francisco Javier Flórez Oliveros.
Las zarigüeyas son mamíferos marsupiales 38 de las cuales han sido registradas
emparentados con los canguros, los para nuestro país (Solari et al., 2013).
koalas y los ualabíes. En términos
taxonómicos, pertenecen al orden Por supuesto, todas las especies
Didelphiomorphia y a la familia Didelphidae requieren igual atención e investigación;
(Gardner, 2008). sin embargo, la presente cartilla se
enfoca en dos de ellas: Didelphis
De acuerdo a Gardner (2008), existe un marsupialis y Didel- phis pernigra.
reporte total de 19 géneros y 95 especies,
16
Biología y ecología de la chucha orejinegra y la chucha orejiblanca
La chucha orejinegra Didelphis sucio. La cabeza es de color amarillo sucio Se ha registrado la presencia de esta (Navarro y Muñoz, 2000; Cuartas-Calle y Mu-
marsupialis (Linnaeus, 1758) especie desde Nicaragua hasta el norte ñoz, 2003; Sergio Solari, Ph.D. Pers.Comm.).
o crema amarillento; tiene una franja
tenue oscura que va desde la frente hasta de Argentina. En Colombia, se distribuye a
la altura de los ojos; puede presentar lo largo de todas las regiones biogeográfi- La chucha orejiblanca Didelphis
cas, desde el nivel del mar hasta los 2500 pernigra (Allen, 1900)
líneas negras desde la nariz hasta los
m.s.n.m. Habita en las grietas de las
orejas; el rostro es alargado y amarillento;
rocas, en los árboles, en el cielo raso de
la nariz es despigmentada o rosada; las las casas y en zonas periurbanas
vibrisas son largas y gruesas; las orejas (Navarro y Muñoz, 2000; Cuartas-Calle y
son grandes, redondeadas, desnudas y Muñoz, 2003).
negras (Navarro y Muñoz, 2000; Cuartas-
Figura 3. Ejemplar de Didelphis Calle y Muñoz, 2003). Es una zarigüeya nocturna,
marsupialis. Fuente: fotografía de Davis
semiarborícola y solitaria. Busca su
Travis.
La cola de D. marsupialis tiene la misma alimento en el suelo, y sube a la copa de
Figura 4. Ejemplar de Didelphis pernigra.
Marsupialis deriva del latín marsupium o los árboles para consumir frutos y néctar;
longitud que el largo de la cabeza y del Fuente: FUNDZAR - Fundación Zarigüeya
del griego marsipion que significa bolsa. su dieta es omnívora e incluye pequeños
cuerpo; es prensil, de color negro en la
Es conocida con el nombre de zarigüeya vertebrados, huevos, insectos, lombrices, Esta especie fue denominada
mitad proximal y blanca en la punta. El néctar, frutos silvestres y cultivos.
común, chucha de orejas negras, zorro antiguamen- te como Didelphis
chucha, zorro mochilero, rabipelao, gambá, vientre es de color similar al dorso aunque También puede alimentarse de aves de albiventris. Pernigra quiere decir
raposa, fara, runcho y comadreja overa más pálido o naranja, y las manos y patas corral (Navarro y Muñoz, 2000; Cuartas- completamente negro; deriva del latín per
(Navarro y Muñoz, 2000; Cuartas-Calle y son de color negro. Las hembras poseen Calle y Muñoz, 2003). que significa a través de y nigra que
Muñoz, 2003). bolsa marsu- pial bien desarrollada y los equivale a negro (Navarro et al., 2005). Es
machos tienen pene bífido. Paren entre Al sentirse bajo amenaza, abre la boca, conocida con el nombre común de zari-
Su dorso es de color negro, gris o gris par- seis y doce crías por camada (Navarro y emite sonidos similares a “siseos” güeya común de orejas blancas, chucha
do, y jaspeado de color amarillo o blanco (hissing en inglés), se balancea hacia de oreja blanca, comadreja overa,
Muñoz, 2000; Cuartas-Calle y Muñoz,
los lados, de- feca y riega orina de olor comadreja
2003).
desagradable
18
19
de bosque de niebla, fara y zorro mochilero (Navarro y Muñoz, 2000; Cuartas-Calle y relativamente común en áreas rurales de 2002; Morales-Jiménez, 2004; Zarza y
(Navarro y Muñoz, 2000; Cuartas-Calle y Muñoz, 2003; Navarro et al., 2005). los Andes (Barrera-Niño y Sánchez, 2014). Medellín, 2005; Krause y Krause, 2006).
Muñoz, 2003).
Las hembras de esta especie tienen una Es nocturna, terrestre, arborícola, trepa-
El pelo del dorso es de color negro o gris y bolsa marsupial bien desarrollada y los dora y solitaria. Su dieta es omnívora, y se
jaspeado de blanco; la cabeza es blanca y machos poseen pene bífido. Pare unas alimenta de frutos, pequeños vertebrados Existen cuentos y canciones para
tiene una franja dorsal negra que se extien- cinco crías por camada (Navarro y como lagartijas y roedores, e invertebrados enseñar a los niños acerca de las
de desde la nuca a lo largo de la coronilla Muñoz, 2000; Cuartas-Calle y Muñoz, como miriápodos e insectos. Si se sien- te características, el comportamiento y
y termina en punta a la altura de los ojos; 2003; Nava- rro et al., 2005). amenazada, produce sonidos graves y la importancia de las zarigüeyas.
posee dos franjas conspicuas de color adopta una posición específica con la
negro desde las orejas hasta la nariz; Esta zarigüeya se ha reportado para boca abierta (Navarro y Muñoz, 2000;
las mejillas son de color blanco, y las Venezuela, Ecuador, Perú, y norte de Bolivia. Cuartas-Calle y Muñoz, 2003; Navarro
orejas son redondeadas, desnudas y En Colombia, se presenta dentro de la et al., 2005).
blancas (Navarro y Muñoz, 2000; región Andina en altitudes entre los 2000
Cuartas-Calle y Muñoz, 2003). y 3600 m.s.n.m. (Alberico et al., 2000; En estas dos especies, la gestación sue-
Sergio Solari, Ph.D. Pers.Comm.). Se le durar de doce a quince días. Luego, las
El vientre es gris, blanco o amarillento; las refugia en cavidades de rocas, huecos, crías nacen en forma embrionaria y
extremidades, patas y manos, son de debajo de arbustos secos y madrigueras. migran hacia el marsupio en donde
color negro, con las plantas Es menos tolerante a los ambien- permane- cen unos sesenta días. Una
despigmentadas o rosadas. La cola de D. tes intervenidos y a las zonas vez dentro, se adhieren a los pezones de
peringra es prensil y es un poco más periurbanas que D. marsupialis (Navarro la madre, cumplen su época de
corta que la longitud de la cabeza y el y Muñoz, 2000; Cuartas-Calle y Muñoz, lactancia, y se desarrollan para salir al
cuerpo; es peluda en la base y desnuda 2003). Sin embargo, es observada en exterior. Para ese entonces, son
en la parte restante, completa- mente de áreas urbanas y suburbanas de la Sabana completamente independientes y empieza su
color negro o con partes blancas de Bogotá y es vida solitaria (Ceballos et al.,
20
21
Nota realizada por EL COLOMBIANO el 21 de noviembre de 2015
UN POCO DE HISTORIAS ACERCA DE LAS ZARIGÜEYAS
“También condujo a
ESPAÑA ANIMALES
SUMAMENTE
RAROS
y entre ellos uno que
tenía el CUERPO y
HOCICO de
ZORRO”
24
ZARIGUEYAS EN COLOMBIA Y SU ESTADO DE CONSERVACIÓN
ZARIGÜEYAs
oportunidad de ver a las crías amaman- estas palabras: “Es del tamaño de un
tándose dentro del marsupio de la madre gato, pía, aunque con la cabeza casi toda
(Fernández de Navarrete, 1829). blanca: tiene el cuerpo cubierto de pelo
largo y suave, boca muy hendida, orejas
En 1829, Fernández de Navarrete describió grandes y desnudas, cincuenta dientes,
el hecho de la siguiente manera, refirién-
lengua erizada, cola prensil o capaz de dose a Yañez 9
idas
a alguna
Pinzón:
asirse
“También cosa, y en 5
condujo
a España
parte
desnuda;
e
animales los pulgares s
sumamente posteriores p
extraños, y entre sin uña y e
ellos uno que
tenía el cuerpo
capaces de
ci
y hocico de
oponerse a
los otros e
zorro, las ancas
y pies traseros
dedos… Se s
c
encuentra
por toda
América; es
fétida
pesada
y o
n
o
c
38 p rtada alim
ento.
e
n
i
ó
uchas
y
para andar…”. Existe un cataloga a Las dos
as i Colo
gaci l c nas
reyes de España,
marcó la
de zarigüeya
para
categoría de
Datos
género
(Gracilianus sp.
es e ón a i que la creación de las Colombia, Insuficientes; y Monodelphis
mbia muri
eron a
t
a
vieron
”.
colecciones de como puede 24 en sp.) y su
de a d de historia natural, observarse presencia
jimia, los n Preocupació
los e haberl en la que los en la Tabla 1 dentro del
delan hijue l d El n Menor; una
teros d os expedicionarios (Alberico et país está por
sem los o o mism en estado
ejant e s dado tomaban al., 2000; confirmar.
es a de s o Casi
los u a luz, animales y Cuartas-Calle
este l Ferná Amenazado;
del t s sacán muestras de y Muñoz, ¿Qué implica
raro R a ndez
hom a do- plantas para dos especies
anim de 2003; Gardner, cada
bre, l h los e en estado
Navar estudiarlos y 2005; Solari
las al; y c categoría?
e i sólo rete catalogarlos et al., 2013; Vulnerable;
oreja g j para pero e u
(1829 como parte de Ramírez- una en Peligro
s de la s r Datos
a u mam ) sus crónicas de Crítico, y cinco
mad , i Chaves y Insuficientes:
lech , e ar expon viaje (Fernández Suárez- no han sido especies de
uza, d l hasta re se o
e su de Navarrete, Castro evaluadas. las cuales no
y de- o o que envi y s
idea 1829). 2014). se tiene
bajo n s por sí ó i sobre información
del d solos desd a d las suficiente
vient e d pueda e l a La Unión
zarig sobre su
re e n Sevil l d üeyas Internacional
otro la a distribución ni
e s nutrir í con para la
exter la cantidad de
s p se y Gran d Conservación
ior individuos en
c u procu ada m e de la
en cada población,
o é rarse para u Naturaleza por lo cual
form n s el pres r m
(UICN), resulta difícil
c n o es
o- c qu
n ( u e
o U p tie
a ne
c I
c n
e C i un
r N ó a
s , n a
u m
ri 2 M pli
e 0 e a
s 1 n di
g 2 o str
o ) r ib
d . : uc
ió
e
e n
e E s y
xt n
p qu
in e e
ci P
c so
ó r i n
e
26
27
abundantes, es decir, que están es decir, en el medio natural en el que habi-
integradas por un alto número de ta (UICN, 2012).
individuos (UICN, 2012).
Tablas 1-13 (Secuencia de trece tablas; una por cada género). Especies de zarigüeya en Colombia y su distribución
según Alberico et al., (2000); Cuartas-Calle y Muñoz, (2003); Gardner, (2005); Solari et al., (2013) y Ramírez-Chaves y
Suárez-Castro (2014). Estado de conservación con base en las categorías de la UICN.
NOMBRE CIENTÍFICO NOMBRE COMÚN REGIONES QUE HABITA CATEGORÍA UICN
28 29
La zarigÜeya lanuda
de hombros La chucha de agua
negros
Género Caluromysiops
Género Chironectes
30 31
Las marmosas
Las zarigÜeyas gráciles
Género Gracilianus
comunes
Género Didelphis
NOMBRE CIENTÍFICO NOMBRE COMÚN REGIONES QUE HABITA CATEGORÍA UICN
32 33
La La
zarigÜeya “comadreja
cola deGlironia
Género
colorada”
pincel Género Lutreolina
NOMBRE CIENTÍFICO NOMBRE COMÚN REGIONES QUE HABITA CATEGORÍA UICN NOMBRE CIENTÍFICO NOMBRE COMÚNREGIONES QUE HABITA CATEGORÍA UICN
36 37
Las marmosas
lanudas
La zarigÜeya Género Micoureus
marrón de
cuatro ojos
Género Metachirus
Metachirus nudicaudatus
Zarigüeya marrón de cuatro ojos Micoureus regina
Todo el país Preocupación Menor Marmosa ratón lanuda pequeña
Andina y Pacífico Vulnerable
38 39
Las zarigÜeyas
colicortas
Género Monodelphis
Los filandros
Género Philander
NOMBRE CIENTÍFICO NOMBRE COMÚN REGIONES QUE HABITA CATEGORÍA UICN
40 41
NOTAS:
¿PUEDEN LAS ZARIGÜEYAS ESTAR EN RIESGO DE EXTINCIÓN?
Actividades humanas que afectan la Los científicos han acordado la existencia
vida de las zarigüeyas de cinco problemas globales que afectan
a la biodiversidad: la fragmentación y
La pérdida de hábitat contribuye
pérdida de hábitat, la sobreexplotación,
a aumentar el riesgo de
la introducción de especies, la contamina-
extinción de algunas especies
ción y el cambio climático. Por supuesto,
de zarigüeya.
las zarigüeyas sufren sus efectos, puesto
que en su estado natural se enfrentan a
las actividades humanas que ponen en
pe- ligro su vida y pueden llevarlas a la
extinción.
44
productivos agrícolas y ganaderos, como utilizadas como recurso alimenticio y para controlar serpientes venenosas en Especies como D. marsupialis son resis-
es el caso de D. marsupialis; pero en la medicinal dentro de algunas cultivos de caña), e incluso gatos, que tentes, flexibles, pueden adaptarse con
mayor parte de fauna silvestre hay una comunidades indígenas americanas. Hoy, una vez libres atacan a la fauna nativa, facilidad y en esto radica su éxito
marcada tendencia a habitar ecosistemas sin embargo, ciertas poblaciones de como las zarigüeyas (Sergio Solari, Ph.D. (Cruz-Salazar etal., 2013; Sergio Solari,
poco intervenidos, como sucede con las Colombia y de otros países las cazan por Pers. Comm.). Ph.D. Pers.Comm.). Sin embargo, la
demás especies de zarigüeya que habitan su piel, por su carne, porque las mayoría de especies de zarigüeya son
en Colombia. confunden con ratas, y debido a que las El desconocimiento sobre la biología y más vulne- rables; la contaminación y
consideran una amenaza para sus aves ecología de muchas especies de estos
Lo anterior sugiere que cada vez que se degradación de su hábitat y sus recursos,
de granja y sus cultivos. marsupiales, incrementa el riesgo de
interviene un ecosistema en el que son un factor de presión para sus
potenciales efectos negativos sobre ellos
ocurren estos marsupiales de forma poblaciones.
La introducción de especies y los ecosistemas.
natural, lo más probable es que se vean
obligados a migrar ante los cambios en el El cambio climático
Introducir una especie es llevarla de su La contaminación
microclima del fragmento, por la hábitat original a un lugar en el cual no se
vulnerabilidad frente a sus depredadores encuentra naturalmente, y liberarla allí. Una La emisión de Gases Efecto Invernadero
La atmósfera, el agua y el suelo se con-
cada vez que se tras- ladan de un parche de las consecuencias es que la especie (GEI) y su permanencia en la atmósfera
taminan cuando las actividades humanas
boscoso a otro, por la extinción local de in- troducida no encuentra enemigos va elevando poco a poco la temperatura
sus presas, por reducción de lugares para les incorporan elementos capaces de
naturales por lo que puede desempeñarse de nuestro planeta. Entre sus muchas
refugiarse, entre otros. cambiar sus condiciones originales y consecuencias, cabe resaltar que algunas
como una excelente competidora, depredar
y extinguir a la fauna y flora nativas e, adecuadas. Ejemplos de esto son la dis- especies de fauna ya están migrando
La sobreexplotación inclusive, convertirse en plaga. posición de residuos sólidos en los ríos, hacia sitios más fríos porque el
la emisión de dióxido de carbono de los incremento de calor en sus hábitat
La sobreexplotación consiste en la tala de Cuando se traen animales como martas automóviles, y el uso de fertilizantes naturales les está alterando sus ciclos
árboles o en la caza de fauna de forma (parientes mayores de las comadrejas), químicos en los cultivos. de vida y está agotando los recursos
indiscriminada. Las zarigüeyas fueron mangostas (se introdujeron en que necesitan para sobrevivir.
Sudamérica
46
47
IMPORTANCIA SOCIAL Y ECOLOGÍA DE LAS ZARIGÜEYAS
A la fecha, no existen investigaciones que
¿Qué aspectos de su vida se Cultura y conocimiento tradicional
evalúen los efectos del cambio climático deben resaltar?
sobre las poblaciones de las diversas Las zarigüeyas han formado parte de la
especies de zarigüeya en Colombia u Las zarigüeyas también son protagonistas mitología, religión, alimentación y medici-
otros países. Debido a esto, es posible del arte urbano en la ciudad de na de algunas comunidades indígenas del
que actualmente se estén ignorando Medellín, Colombia continente americano.
aspectos del clima que puedan estar
influyendo sobre aspectos biológicos o Historia y representatividad
ecológicos de estos marsupiales. en América
49
Identidad nacional y educación Investigación y ciencia son importantes para diversas áreas del porque, por un lado, se alimentan de flora
ambiental conocimiento. y son las consumidoras de una fauna que
Las chuchas son uno de los primeros incluye insectos y vertebrados pequeños;
La educación ambiental toma como base Restauración de áreas disturbadas por el otro, ellas son las presas de los
grupos de mamíferos que se originaron
los aspectos clave relacionados con la en la tierra. Su registro fósil del Cretácico prin- cipales carnívoros depredadores
diversidad biológica, el uso y manejo de sugiere que alcanzaron a vivir en el Las frutas forman parte de la dieta de (Emmons y Feer, 1990; Facure y Giaretta,
los recursos naturales, la legislación, y las mismo tiempo geológico de los algunas zarigüeyas. Esto les otorga un 1996; Oli- veira y Santori, 1999; Aragona y
políticas pertinentes a nivel local, regional, dinosaurios. Esta antigüedad da pistas a papel clave como dispersoras de semillas Setz, 2001; Aranda, 2012).
nacional e internacional. Exaltar a los científicos acerca de las relaciones en el ecosistema (Atramentowicz, 1988;
las zarigüeyas como los marsupiales ame- de parentesco entre las especies y su Cáceres, 2002; Cáceres, 2004). Esta Control de plagas
ricanos, e impulsar el conocimiento de evolución. función es muy importante porque si uno
especies endémicas de Colombia como de estos marsupiales se traslada de un Los roedores e insectos son parte de la
Marmosops caucae y Marmosops handleyi, Investigaciones recientes sugieren que fragmento de bosque hacia otro, y die- ta de algunas especies de zarigüeya,
avivará un sentido de identidad hacia son resistentes a la mordida de algunas deposita sus heces en la matriz que ha lo que les confiere un rol clave en el
ellas. serpientes; son reservorios de algunos sido disturbada por las actividades control de de- terminadas plagas que
parásitos que resultarían letales para humanas, las semillas poco a poco darán pueden afectar tan- to a los humanos
otras especies incluyendo al hombre y lugar al restablecimiento de la vegetación como a los ecosistemas.
Esto permitirá que las zarigüeyas en
sobrevi- vieron a las últimas restaurando el lugar.
general sean incluidas dentro de Cambio climático: una razón adicional
glaciaciones. Adicio- nalmente, se sabe
estrategias educativas, y que se realice Balance de la red trófica para conservar a las zarigüeyas
que son dispersores de semillas, jugando
un trabajo colaborativo con las un papel importante en la reforestación.
comunidades locales con el objetivo de Las zarigüeyas se caracterizan por tener Idealmente, la restauración de los
aprender a identificarlas, manejarlas y Todo lo anterior convierte a las una dieta generalista y un hábito bosques restablece la dinámica entre la
proceder de la forma correcta cuando zarigüeyas en mamíferos que deben ser oportunis- ta (Santori et al., 1995, Martins produc- ción de oxígeno y la captación de
se les encuentra en estado de investigados, pues se les han descubierto y Bonato, 2004). Ayudan a balancear la dióxido de carbono. Esta actividad forma
abandono. atributos que red trófica parte de
50
51
las políticas y estrategias para uno de los
aspectos más importantes de las
agendas del desarrollo a nivel mundial
actualmente: la mitigación del cambio
climático.
52 53
¿CÓMO ESTABILIZAR A UNA ZARIGÜEYA?
Primeros auxilios para las crías de la zarigüeya orejinegra
(Didelphis marsupialis) y la zarigüeya orejiblanca (Didelphis pernigra)
HIDRATACIÓN Y
TEMPERATURA
EDAD DE LAS CRÍAS
IMPRONTACIÓN CON LOS HUMANOS
DIETA Y ALIMENTACIÓN
ALBERGUE Y
CONTROL DE PARÁSITOS
Son algunos de los factores más importantes que se deben tener
en cuenta para aplicar los primeros auxilios a las crías de
zarigüeya
54
55
Esto podría constituir una función adicio-
Recuerde: una cría en estado de abandono por Rosenfeld (2007) para evaluar la pér-
nal a la de ofrecer un espacio aislado Administrar el suero es vital para
es aquella que ha perdido a su madre en dida de elasticidad en la piel al observar el
para el desarrollo y protección del las crías deshidratadas
una etapa temprana de su desarrollo, lo tiempo que ésta demora en regresar a su
neonato en las primeras etapas, de ¿Cómo saber si las crías están
cual la hace vulnerable y necesitada de estado original. Si después del “pellizco”
acuerdo a los in- vestigadores.
intervención para contribuir a su supervi- la piel regresa de inmediato, la cría está
vencia. Bajo ninguna circunstancia usted
Cabe resaltar que la lactancia se constitu- sana; pero si tarda algunos segundos, la
debe extraer a las crías de su hábitat natu-
ye en la principal estrategia reproductiva de ral para tenerlas en casa. No olvide que cría está deshidratada. El tiempo que
estos marsupiales (Krause y Krause, se trata de fauna silvestre y su tenencia demore la piel en retornar a su posición
2006) debido a su desarrollo temprano es sancionada por la normativa ambiental original, depende del grado de
(Sergio Solari, Ph.D. Pers.Comm.). y penal colombiana deshidratación del individuo.
57
y una pizca de sal en un litro de agua. calor rápidamente. Para contrarrestarlo, re- Autoridad Ambiental respectiva, entregan- o leche deslactosada con azúcar; en
Adminístrelo con una jeringa exclusiva llene una caja de cartón con tiras de papel do informe del tratamiento suministrado promedio, media cucharada sopera de
para cada individuo, y lávela después de periódico y ponga adentro a las crías. En a la cría. azúcar por cada pocillo de alimento.
cada uso (Arcangeli, 2014). lo posible, ubique cerca un bombillo de
luz cálida, botellas y bolsas de agua tibia Puede que los niveles de glicemia (azúcar
Temperatura y/o un calentador de ambiente, para en la sangre) se encuentren muy bajos La marmosa de Handleyi fue
mantener una temperatura aproximada debido a que los individuos han estado descrita en 1981 con base en dos
Las cajas de cartón son de 36°C (Arcangeli, 2014). privados del alimento por un tiempo in- ejemplares colectados en 1950.
cruciales porque les brinda determinado. Dependiendo de la edad, es (Díaz-N, et al., 2011)
calor Es importante que introduzca su propia fundamental elaborar una papilla de
Cuando la madre muere, las crías pierden mano desnuda en el espacio que queda frutas
entre el bombillo y las crías, para
asegurarse de que el medio es COMO ESTABLECER LA EDAD DE UNA ZARIGÜEYA
confortable.
De lo contrario, las zarigüeyas pueden
deshidratarse. Edad de las crías supialis o Didelphis pernigra. Sin embargo,
Arcangeli (2014) expone una tabla sobre
La edad de las crías de zarigüeya es un
Si la temperatura es menor de 36°C, es el tiempo en días y la descripción morfo-
fac- tor determinante para su manejo,
po- sible que las crías se enfermen y exhib lógica para Didelphis virginiana con base en
dado que dependen del marsupio para
an síntomas propios de un resfriado Petrides (1949) y Reynolds (1952), y que
sobrevivir. Co- nocer la etapa en la que se
común: tos, estornudos, ojos llorosos y puede servir de guía para estimar la edad
encuentran, permite que se les brinden
moco abundante. En caso de que esto lle- aproximada de las crías de zarigüeya
los recursos que necesitan para
gue a ocurrir, administre a cada individuo trabajadas en la presente cartilla.
completar su desarrollo y poder ser
una gota de vitamina C (ácido ascórbico) liberadas en su hábitat natural.
Figura 9. Crías de Didelphis marsupialis en cajas de car- diaria durante cinco días (Arcangeli, 2014) Tabla 14. Cálculo de la edad de una cría de zarigüeya en
tón, como parte de su proceso de manejo y sus primeros 90 días de vida con base en su
readaptación. Fuente: fotografía de Francisco Javier o hasta su entrega y recepción por la No existen estudios que permitan calcular descripción morfológica (Petrides, 1949; Reynolds,
Flórez Oliveros. 1952).
la edad de los neonatos de Didelphis mar-
58
59
TIEMPO EN DÍAS DESCRIPCIÓN MORFOLÓGICA
60 61
PRIMEROS AUXILIOS DE LAS CRÍAS DE DIDELPHIS MARSUPIALIS
Y DIDELPHIS PERNIGRA
La manipulación de las crías no debe
llevar a que estás sean improntadas
Y la impronta,
con los humanos. Si se llegaran a ¿por qué es tan importante?
improntar, su liberación podría verse
Se dice que un animal ha sido improntado
afectada.
con los humanos cuando se acostumbra
a su presencia, deja de temer e, inclusive,
aprende o imita algunos patrones. En este
proceso, es posible que el individuo
pierda los comportamientos propios
de su especie, haciendo imposible su
liberación.
62
63
Dieta y alimentación Si las crías miden menos de 10 cm desde Jansen (2002) recomienda emplear reci- dos en el sistema digestivo, causándoles
la cabeza hasta la punta de la cola, se les pientes que puedan insertarse en la jaula distención abdominal y dolor. La molestia
Leche deslactosada y papillas de debe suministrar leche deslactosada para y que puedan limpiarse a diario, pues es se alivia con una solución hecha con una
fruta forman parte de las dieta de
bebés con ayuda de un gotero o una común que las zarigüeyas defequen en pizca de bicarbonato de sodio en 10 ml
las crías en sus primera estapas.
jeringa. Si las crías miden más de 10 cm los contenedores de agua cuando viven de agua. Debe proporcionarle 1 ml con
desde la cabeza hasta la punta de la cola, bajo estas condiciones específicamente. una je- ringa vía oral para que la zarigüeya
pueden consumir papillas de frutas eructe y elimine los gases (Arcangeli,
naturales ade- más de la leche Es importante recordar que los alimentos 2014).
deslactosada. Ambos ali- mentos se les deben estar a una temperatura similar a
deben administrar con un gotero, una la corporal y que es necesario lavar con Una dieta adecuada traerá como resulta-
jeringa o con una cuchara de plástico agua y jabón todos los utensilios antes de do una ganancia progresiva de peso. En el
para evitar daños en sus encías. su uso. Las crías tienen un metabolismo caso contrario, las crías podrán des-
muy rápido; por esta razón, deben nutrirse y desarrollar una condición muy
Si las crías ya tienen dientes y sus ojos alimentarse cada hora y media o cada común de las zarigüeyas en cautiverio: la
están abiertos, están listas para consumir dos horas. Esta frecuencia disminuirá en osteomalacia o “parálisis de jaula”. Esta
frutas enteras como manzana, uva, papa- la medida en que las crías crezcan enfermedad les reblandece y deforma los
Figura 11. Cría de D. marsupialis consumiendo leche ya, pera, banano o mango; se les puede (Arcangeli, 2014). huesos, principalmente en las extremida-
des- lactosada. Fuente: fotografía de Davis Travis.
cortar su alimento en trozos pequeños, des. Como consecuencia, el animal pierde
pero sin hacer una papilla. Ya se puede Si las crías ya comen solas, el alimento se la capacidad de caminar y de alimentarse,
La dieta debe ser variada, ya que se trata
adi- cionar a la dieta alimento balanceado les puede dejar en el albergue. Es necesa- llevándolo a la muerte (Potkay, 1977).
de animales omnívoros. Arcangeli (2014)
para gatos, huevo, lombrices de tierra y rio cuidar la cantidad que se les ofrece, Para evitar que aparezca esta
recomienda dar los alimentos acorde a la
edad de las crías, como se indica a grillos. Se sugiere utilizar un plato, tapa o con el fin de evitar problemas digestivos. enfermedad en las crías, se debe agregar
continuación: recipien- te poco profundo en esta fase Por ejemplo, la yema de huevo en gran cáscara de hue- vo a la dieta como
(Arcangeli, 2014). Con respecto a su canti- dad les produce gases que quedan suplemento de calcio (Arcangeli, 2014).
hidratación, atrapa-
64
65
66
67
Jansen (2002) acerca de utilizar el fondo de la vida en libertad. Aquí están incluidas cia exclusiva de la Autoridad Ambiental, pendientes del lugar que las zarigüeyas
de una botella plástica de un galón como las formas de locomoción, el forrajeo, la conforme a lo establecido en la escojan, para ubicar ahí la letrina. Esto les
abrigo, ya que es grueso y se lava construcción de refugios, entre otros. Resolución N° 2064 de 2010, emanada crea el hábito de excretar en un solo lugar
fácilmen- te; además, las zarigüeyas del Ministerio de Ambiente y Desarrollo (Arcangeli, 2014), lo cual es importante
destruyen muy rápido las cajas de cartón. Teniendo en cuenta los hábitos de estas Sostenible. mientras estén bajo el proceso de manejo
zarigüeyas, se recomienda poner travesa- antes de la : entrega a la Autoridad
Recuerde que al principio las crías deben ños de madera en su albergue para que Limpieza Ambien- tal competente, quien será la
permanecer juntas, pero según vayan cre- de- sarrolle sus comportamientos responsable de la atención, valoración y
ciendo es necesario separarlas hasta que arborícolas, en donde están implicadas las La caja de cartón se debe cambiar una readaptación previa a su reinserción al
vivan en albergues individuales; las hem- patas y su cola prensil. Debe haber vez a la semana y el papel periódico cada entorno natural sea este rural o urbano.
bras pueden mantenerse unidas por un sombra durante el día, pues son especies segundo día. Se debe evitar que las crías
tiempo, pero los machos deben aislarse nocturnas y deben mantener la tengan contacto con sus heces para que En caso de presentar diarrea, Arcangeli
costumbre de forrajear luego de cierta no se enfermen (Hunsaker y Shupe, (2014) aconseja administrarles suero
para evitar agresiones entre ellos.
1977). Por eso, también es necesario para evitar la deshidratación. Para
hora en la noche y/o madruga- da.
recordar las recomendaciones que hace combatir la infección, se les puede
Además, las zarigüeyas son nómadas y Paulatinamente, se deben incorporar
Jansen (2002) con respecto al recipiente tratar con Metronidazol; la dosis inicial
so- litarias (Jansen, 2002; Arcangeli, insectos, anfibios y vertebrados pequeños
para el agua. debe ser de 15 unidades de una jeringa de
2014). vivos que formen parte de su dieta, con el
insulina, dosis subsecuentes de 10
objetivo de que se vayan ejercitando para
Para evitar que las crías eliminen sus unidades; durante el primer día se harán
Es imprescindible incluir al enriquecimien- cazar sus presas. desechos dentro de la caja de cartón, se cada 4 horas y en los días siguientes cada
to ambiental como parte de la estrategia puede elaborar una letrina cubriendo un 8 horas, hasta que el tratamiento
de manejo y conservación de estas crías. Todo esto permitirá que el manejo que contenedor plástico con papel periódico. complete los 5 días o hasta su entrega a
Esta técnica consiste en incorporar usted le de a las crías de zarigüeya sea el
la Autoridad Ambiental compe- tente, con
elementos que simulan el hábitat de una adecuado, pues las estará preparando Cada vez que se alimenten, se ponen allí
el respectivo reporte del trata- miento
especie y que le permiten desarrollar para una liberación exitosa en su las zarigüeyas. Apenas eliminen su orina
suministrado a la cría.
hábitat natural, procedimiento que es y sus excrementos, se sacan y se cambia
actividades propias
competen- el papel periódico. Es necesario estar
68
69
70
71
EN SÍNTESIS…
tor de riesgo sanitario, etológico y anterioridad. Para ello, es necesario que A
ABC para el manejo de las crías
genético para las poblaciones silvestres contacte a las autoridades ambientales de zarigüeya La hidratación y la temperatura son los
de la zona de influencia directa e indirecta competentes en el tema para que ellos pri- meros factores que usted debe
del área en donde se va a liberar. mismos la realicen. Mantenga saludables a las crías evaluar al encontrar a las crías de
zarigüeya en esta- do de abandono.
Algunos factores esenciales que los expertos Una vez la autoridad ambiental competente Dependiendo de cómo se encuentren con
tienen en cuenta dentro de este proceso, haya liberado a las crías, usted podrá es- respecto a estos aspectos, se deben
incluyen evitar poner a las crías en bordes prestar los primeros auxilios para
tar seguro de que sus acciones han con-
de carreteras, en la entrada de los rehidratar, mantener el flujo sanguíneo, evi-
tribuido de forma positiva a la
bosques, en zonas periurbanas, en áreas tar la hipotermia y mejorar el estado
conservación, no sólo de estas zarigüeyas,
contamina- das o cerca de fincas. Todos anímico de los individuos.
sino de la biodi- versidad en general.
esos lugares representan peligros
potenciales para la sobrevivencia. El B
ATENCIÓN: La liberación no consiste En lo posible, acuda a la Autoridad Ambiental
lugar más favorable podría ser un simplemente en dejar a una especie en un quien evaluará si se presentan fracturas,
bosque poco intervenido y con presencia “lugar ideal”. Por el contrario, existen varios traumas, contusiones o mutilaciones.
de cuerpos de agua como ríos, factores de riesgo que se deben También se debe considerar el estado de
riachuelos o lagos; también pra- deras considerar para que el proceso sea conciencia del individuo acorde a su
o inclusive desiertos, dependiendo de la exitoso. Por favor, no lo haga por su edad.
especie. propia cuenta. Su deci- sión más
responsable debe ser contactar a la C
La liberación se debe realizar por parte de autoridad ambiental competentes para Estime la edad aproximada de las crías.
la Autoridad Ambiental competente, debe que ellas mismas liberen a las crías. Construya el albergue y proporcióneles
hacerse en el área geográfica correcta. agua y alimento.
Figura 14. Crías de Didelphis marsupialis en su hábitat
No hacerlo, podría provocar el problema
natural, en el departamento del Valle del Cauca, Colom-
de introducción de especies descrito con bia. Fuente: fotografía de Davis Travis. Sea cuidadoso con la limpieza y los signos
que indiquen la presencia de parásitos
internos y externos. Incluya técnicas de
72
73
74
75
Y FINALMENTE, ¿POR QUÉ DEBEN CONSERVARLAS?
Cinco razones por las cuales proteger ración de bosques y otras áreas naturales
a una zarigüeya que han sido disturbadas, lo que lleva a la
prestación de servicios ecosistémicos cla-
1. Son los marsupiales representativos de ve como son la producción de oxígeno, la
todo el continente americano. Su conoci- captación de dióxido de carbono, la regu-
miento tuvo origen en el descubrimiento lación del ciclo hídrico, la belleza escénica
de América. En Colombia se han y la conservación de especies de fauna
reportado dos especies endémicas que y flora.
deben cons- tituirse como componentes
de la identidad nacional. 5. Controlan la proliferación de plagas de
algunos roedores e insectos, porque for-
2. Formaron parte de la cultura y del man parte de su dieta. Esto contribuye,
cono- cimiento tradicional de algunas entre otros aspectos, a proteger a los
comunida- des indígenas. siste- mas de producción agrícola
localizados en zonas aledañas a los
3. Su alta resistencia a la mordedura de ecosistemas donde habitan. De otro lado,
algunas serpientes, su sobrevivencia en el son presa de anima- les carnívoros. Es
tiempo de extinción de los dinosaurios y decir, si las zarigüeyas no están, podría
su paso a través de las últimas haber un desequilibrio en la dieta de otras
glaciaciones, les confiere una gran especies.
importancia dentro del avance de la
ciencia.
76
77
GLOSARIO
Arborícola: Organismo adaptado a vivir cas en común, y que pueden reproducirse
en entre ellos.
los árboles. Perteneciente o relativo al
árbol. Especie carismática: Especie cuyas ca-
racterísticas resultan atractivas para las
Área disturbada: Área que ha sufrido un personas.
disturbio, es decir, un evento capaz de al-
terar las funciones ecológicas de las Especie endémica: Especie con presencia
espe- cies que allí se presentan. Como y distribución geográfica limitadas a un
ejemplos están la tala de árboles, los único lugar en el planeta.
incendios fo- restales y la contaminación.
Especie generalista: Especie altamente
Biodiversidad: “La variabilidad entre los or- adaptable, y que por ello es capaz de
ganismos vivos, incluyendo ecosistemas habi- tar en diferentes lugares, tener
terrestres, marinos y otros ecosistemas variedad de dietas, soportar diversas
acuáticos, y los complejos ecológicos de condiciones am- bientales, entre otros.
los cuales forman parte; esto incluye la di-
versidad dentro de las especies, entre las Especie oportunista: Especie capaz de
especies y de ecosistemas” (Convenio de aprovechar los recursos según su
Diversidad Biológica en 1992). disponi- bilidad, tanto en ecosistemas no
interveni- dos como en áreas degradadas.
Distribución: Área geográfica en la cual
ha- bita una especie. Estado silvestre: Dícese de la condición
de las especies que se encuentran dentro
Especie: Conjunto de organismos que tie- de
nen características genotípicas y fenotípi-
78
su hábitat natural. Es lo contrario al servable es la presencia de un marsupio o Población: En biología, es el grupo de especie puede encontrarse en una
estado bolsa ventral hacia la cual migran las indi- viduos de la misma especie que catego- ría que implica un menor o mayor
en cautiverio. crías luego de la gestación; allí lactan y habita en un área geográfica riesgo o peligro de extinción.
terminan de desarrollarse hasta ser determinada.
Extinto: Especie que ya no existe o cuyas independientes. Sinónimo: En Taxonomía, un sinónimo es
características poblacionales indican que Nicho: Es el rol que desempeña cada es- uno de los varios nombres científicos
está próxima a extinguirse. Por ejemplo, Microclima: Clima determinado para un pecie. Está definido por factores bióticos bajo los que se encuentra registrada una
una especie de mamífero de la cual sola- área o espacio geográfico en particular. y abióticos. Por ejemplo, el nicho de Didel- mis- ma especie.
mente existe un macho y que ya no tiene phis marsipualis es el rol que ella cumple
hembras para reproducirse. Parásito: Organismo que vive de otro sin en el ecosistema; incluye su función Taxonomía: Ciencia responsable de clasifi-
causarle ningún beneficio y afectando su como presa y depredador, la dispersión de car y organizar a los organismos vivos en
Gases efecto invernadero: Grupo de condición corporal; puede provocarle la semi- llas, en qué rango de temperaturas diferentes categorías de acuerdo a sus
gases que existen naturalmente en la muerte. Si vive dentro de su hospedero, vive, entre otros. ca- racterísticas.
atmósfera terrestre y cuya concentración se le denomina endoparásito o parásito
regula la temperatura permitiendo la vida inter- no. Si vive en el exterior, como las Red trófica: Conjunto complejo de interac- Vibrisas: Pelos o “bigotes” cuya función
en nues- tro planeta. Sin embargo, al ser pulgas y las garrapatas, se le llama ciones de consumo al interior de una co- es sensorial.
también emitidos en grandes cantidades ectoparásito o parásito externo. munidad biológica. Involucra los roles de
por las actividades humanas, atrapan la productor, consumidor, herbívoro, frugívo- Vientre: Área del cuerpo de un animal
energía infrarroja del sol y la devuelven a Parche: Fragmento o porción de ecosiste- ro, omnívoro, carnívoro, presa y depreda- opuesta al dorso; suele referirse al tórax y
la super- ficie de la Tierra, causando el ma cuya continuidad se ha interrumpido dor, entre otros. al abdomen.
denominado Efecto Invernadero. por actividades humanas o por
fenómenos naturales. Por ejemplo, una Riesgo o peligro de extinción: Tendencia
Marsupiales: Grupo de mamíferos que selva tropical queda dividida en varios que tiene una especie a extinguirse. De
incluye a los canguros, koalas, ualabí y parches o frag- mentos debido al acuerdo a los impactos que la afectan y a
zarigüeyas. Su principal característica ob- establecimiento de siste- mas agrícolas y las características de sus poblaciones,
ganaderos. una
80
81
BIBLIOGRAFÍA
Alberico, M., A. Cadena, J. Hernández-Cama- Atramentowicz, M. 1988. La frugivorie opportu- Ceballos, G., P. Ortega y S. Sühring. 2002. Ma- Emmons, L.H. and F. Feer. 1990. Neotropical
cho y Y. Muñoz-Saba. 2000. Mamíferos (Sy- niste de trios marsupiaux didelphidés de míferos de Venezuela. En: Ceballos, G. y J.A. Rainforest Mammal: a Field Guide. The
napsida: Theria) de Colombia. Biota Colombia- Simonetti. (ed.). Diversidad y conservación de Univer- sity of Chicago Press. USA. 295 pp.
Guya- ne. Rev. Ecol. (Terre Vie) 43(1):47-57.
na. 1(1): 43-75. los mamíferos neotropicales. Conabio- UNAM.
Barrera-Niño, V. y Sánchez, F. 2014. Forrajeo México D.F. 585 pp. Facure, K.G. and A.A. Giaretta. 1996. Food ha-
Aragona, M. and E.Z.F. Setz. 2001. Diet of the bits of carnivores in a coastal Atlantic Forest
de Didelphis pernigra (Mammalia: Didelphidae)
maned wolf, Chrysocyon brachyurus (Mam- Cruz-Salazar, B., L. Ruiz-Montoya, D. Nava- of southeastern Brazil. Mammalia 60(3):499-
en un área suburbana de la Sabana de
malia: Canidae), during wet and dry seasons rrete-Gutiérrez, E. Espinosa-Medinilla, E. Vás- 502.
Bogotá, Colombia. Therya 5(1): 289-302.
at Ibitipoca State Park, Brazil. J. Zool. 254(1):131- quez-Domíguez y L. Vásquez. 2013. Diversidad
136. genética y abundancia relativa de Didelphis Fernández de Navarrete, M. 1829. Colección de
Cáceres, N.C. 2002. Food habits and seed marsupialis y Didelphis virginiana en Chiapas, los viajes y descubrimientos que hicieron por
dis- persal by the White-eared opossum, México. Rev. Mex. Biodiv. 85 (1): 251-261.
Aranda, J. M. 2012. Manual para el rastreo de mar los españoles desde fines del siglo XV,
Didelphis albiventris, in southern Brazil. Stud.
mamíferos silvestres de México. Editorial Im- con varios documentos inéditos
Neotropic. Fauna and Environm. 37:97-104. Cuartas-Calle, C. y J. Muñoz. 2003. Marsupia-
presora Apolo, S.A. de C.V. México. 255 pp. concernientes a la historia de la marina
les, cenoléstidos e insectívoros de Colombia. castellana y de los es- tablecimientos
Cáceres, N.C. 2004. Diet of three didelphid mar- Editorial Universidad de Antioquia. Colección españoles en Indias. Tomo III. Madrid en la
Arcangeli, J. 2014. Manejo de crías de
supials (Mammalia, Didelphimorphia) in sou- Ciencia y Tecnología. Colombia. 227 pp. Imprenta Real. España. 642 pp.
zarigüe- ya (Didelphis virginiana) en cautiverio
– Care for opossum (Didelphis virginiana) thern Brazil. Mamm. Biol. 69(6):430-433.
Delgado-V, C.A., A. Arias-Alzate, S. Aristizpa- bal-
joeys in captivity. Rev. Electrón.Vet. 15(9): 1- Figueroa, C., C. Brieva, M. Trujillo y O. Moreno.
Arango y J.D. Sánchez-Londoño. 2014. Uso de
13. Cantor, M., L. Andrade Ferreira, W. Rodrigues 2009. Experiencias sobre el manejo y crianza
la cola y el marsupio en Didelphis marsu-
Silva y E.Z. Freire Setz. 2010. Potential seed de zarigüeyas (Didelphis albiventris). Mem.
pialis y Metachirus nudicaudatus (Didelphio-
Arencibia D.F., L.A. Rosario, J.F. Infante, M. dispersal by Didelphis albiventris (Marsupialia, Conf. Interna Med. Aprovech. Fauna Silv.
morphia: Didelphidae) para transportar mate-
Fa- riñas, Y. López y D. Díaz. 2009. Algunas Didelphidae) in highly disturbed environment. Exót. Conv. 5:1.
rial de anidación. Mastozoología Neotropical,
consi- deraciones sobre la deshidratación en Biota Neotrop. 10(2):45-51. 21(1):129-134.
perros Beagle antes de su uso en Gardner, A. 2005. Order Didelphimorphia. In:
investigaciones bio- médicas. Rev. Electrón. Wilson, D.E. and D.A.M. Reeder (eds.). Mammal
Vet. 10(11): 1-12.
82
83
species of the world: a taxonomic and Krause, W.J. y W.A. Krause. 2006. The opos- Morales-Jiménez, A.L. Mamíferos terrestres y (estado y conservación). Corporación Autóno-
geogra- phic reference. 3rd edition. The sum: its amazing story. Department of Patho- voladores de Colombia: Guía de campo. Co- ma Regional Rionegro-Nare CORNARE – Uni-
Johns Hopkins University Press. United logy and Anatomical Sciences, School of lombia. pp. 36-199. versidad Católica de Oriente. Colombia. 376 pp.
States. 2142 pp. Medi- cine, University of Missouri. USA. 80 pp.
Müller, G., T. Cheuiche Pesenti, M.A. Afonso Oliveira, M.E. and R.T. Santori. 1999. Predatory
Gardner, A. L. (ed.). 2008. Mammals of South Labruna, M.B., S.L.P. Souza, A.C. Menezes, Coimbra, S. Nunes Gomes, D. Silva da Silva, behavior of the opossum Didelphis albiventris
America. Volume 1. Marsupials, Xenarthrans, M.C. Horta, A. Pinter and S.M. Gennari. 2002. M. de Moura Mendes y C. Silveira on the pitviper Bothrops jararaca. Stud. Neo-
Shrews and Bats. Chicago: University of Life-cycle and host specificity of Amblyomma Mascarenhas. 2011. Animais silvestres como trop. Fauna Environ. 34(2):72-75.
Chica- go Press. USA. 690 pp. tigrinum (Acari: Ixodidae) under laboratory reservatorios de parasitos com potencial Petrides, G.A. 1949. Sex and age determination
in the opossum. J. Mammal. 30(4):364-378.
conditions. Experimental and Applied Acarolo- zoonótico no Sul do Brasil. Biomédica
Guimaraes, L. and F.N. da Costa. 2010. Diet gy 24:115-125. 31(3):209-421.
and seed dispersal by five marsupials (Didel- Potkay, S. 1977. Diseases of marsupials. Pp.
phimorphia:Didelphidae) in a Brazilian cerrado 415-519. In: Hunsaker, D. II. (ed.). The Biology
Martins, E.G. and V. Bonato. 2004. On the diet Nava, S., J.M. Venzal, M.B. Labruna, M. Mas-
reserve. Mamm. biol. 75:10-16. of marsupials. Academic Press. USA.
of Gracilinanus microtarsus (Marsupialia: Di- tropaolo, E.M. González, A.J. Mangold y A.A.
delphidae) in an Atlantic Rainforest fragment in Guglielmone. 2010. Hosts, distribution and ge-
Hunsaker, D. y D. Shupe. 1977. Behavior of Ramírez-Chaves, H.E. y A.F. Suárez-Castro.
southeastern Brazil. Mamm. Biol. 69(1):58-60. netic divergence (16S rDNA) of Amblyomma
New World marsupials. Pp. 279-437. In: 2014. Adiciones y cambios a la lista de mamí-
dubitatum (Acari: Ixodidae). Exp Appl Acarol feros de Colombia: 500 especies registradas
Hunsaker, D. Miziara, S.R., F. Paiva, R. Andreotti, W.W. 51:335–351 para el territorio nacional. Mammalogy No-
II. (ed.). The Biology of marsupials. Academic Koller, tes. Sociedad Colombiana de Mastozoología
Press. USA. V.A. Lopes, N.T. Pontes y K. Bitencourt. 2008. Navarro, J.F. y J. Muñoz. 2000. Manual de 1(2):31-34.
Ocorrência de Ixodes loricatus Neumann, hue- llas de algunos mamíferos terrestres de
Jansen, A.M. 2002. Marsupiais Didelfídeos: 1899 (Acari: Ixodidae) parasitando Didelphis Co- lombia. Colombia. 136 pp. Reynolds, H.C. 1952. Studies of reproduction in
gambás e cuícas. Pp. 167- 173. Em: Andrade, albiven- tris (Lund, 1841), (Didelphimorphia: the opossum (Didelphis virginiana virginiana).
A., Pinto, S.C. and R.S. Oliveira. 2002. orgs. Didelphi- dae), em Campo Grande, MS. Rev. Navarro, J.F., S.P. Hincapié, L.M. Silva. 2005. Univ. California Publ. Zool. USA. 223-284.
Animais de Laboratório: criação e experimen- Bras. Para- sitol. Vet. 17(3):158-160. Catálogo de mamíferos del oriente
tação. Editora FIOCRUZ, Brasil. 388 pp. antioqueño
84
85
Rosenfeld, A.J. 2007. The veterinary medical míferos silvestres de México. CONABIO y FCE.
team handbook: the team approach to vete- México. Pp. 108-110.
rinary medicine. 1st edition. Blackwell Publi-
shing. 552 pp. Recursos electrónicos.
Santori, R.T., D. Astúa de Moraes and R. Cer- Parque Explora Medellín ®. 2015 (Fecha de
queira. 1995. Diet composition of Metachirus consulta). Chuchas.
nudicaudatus and Didelphis aurita (Marsupia-
lia: Didelphidaae) in southeastern Brazil. Mam- [En línea]:
malia 59(4):511-516. http://www.parqueexplora.org/micrositios/
chuchas/indice.html
Solari, S., Y. Muñoz-Saba, J. V. Rodríguez-Mahe-
cha, T.R. Defler, H.E. Ramírez-Chaves y F. Truji- Unión Internacional para la Conservación de
llo. 2013. Riqueza, endemismo y la Naturaleza UICN. 2012. Categorías y
conservación de los mamíferos de Colombia. criterios de la Lista Roja de la UICN. Versión
Mastozoología Neotropical, 20(2):301-365. 3.1. Segun- da edición. Gland, Suiza y
Cambridge, Reino Unido. vi +34 pp.
Tyndale-Biscoe, H. and M. Renfree, 1987. Mo-
nographs on marsupial biology. Reproductive [En línea]:
Physiology of Marsupials. Cambridge Universi- http://www.iucnredlist.org/documents/redlist_
ty Press. USA. 492 pp. cats_crit_sp.pdf
86
87
www.medellin.gov.co/biodiversidad
Apoya: