UNIVERSIDAD TÉCNICA DE MANABÍ
FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD
ESCUELA DE MEDICINA
ASIGNATURA:
Epidemiologia Clinica
DOCENTE:
Dra. Mayra Monserrate Parraga
TEMA:
Reportes de Seguridad: Acido Valproico
ESTUDIANTE:
LOOR MOREIRA GEMA CLARIBEL
PERIODO ACADÉMICO:
Mayo 2020 – octubre 2020
Reportes de Seguridad: Acido Valproico.
La farmacovigilancia es el conjunto de métodos, observaciones y disciplinas que permiten,
durante la etapa de comercialización o uso extendido de un medicamento, detectar
reacciones adversas y efectos farmacológicos o terapéuticos no previstos en las etapas
previas de control y evaluación de los productos. Esta herramienta nos permite detectar
nuevos problemas asociados a los medicamentos o conocer su frecuencia en la población,
con la finalidad de mejorar el uso e indicaciones de los medicamentos por parte de los
profesionales tratantes. En síntesis, este proceso lo podemos resumir con una sola palabra
que es “seguridad”.
Siendo de gran importancia la farmacovigilancia si analizamos las etapas de la
producción de una nueva droga rápidamente entenderemos el porqué de esta vigilancia, la
etapa de estudio de la droga y/o principio activo se clasifican en estudios preclínicos, y
estudios clínicos; los estudios preclínicos se denominan FASE 0 y se realizan, in vitro y/o
en animales de experimentación, son diseñados con la finalidad de obtener la información
necesaria para decidir si se justifican estudios más amplios en seres humanos sin exponerlos
a riesgos injustificados; la etapa clínica se inicia en la FASE 1 que corresponde a la primera
fase desarrollada en seres humanos, voluntarios sanos siendo estos estudios conducidos
generalmente por farmacólogos para determinar el metabolismo de la droga en el ser
humano, los rangos entre la dosis terapéutica y las que producen las reacciones tóxicas más
comunes, posteriormente, se pasa a su uso en un pequeño número de pacientes que
padezcan la enfermedad blanco a la cual está destinada la acción de la droga en estudio, esta
fase, también conducida por farmacólogos clínicos, se denomina FASE II; es la primera
etapa en la cual la droga es administrada a pacientes, en ella se obtienen los datos de su
posible eficacia, la etapa siguiente implica los estudios clínicos en un mayor número de
pacientes evaluados rigurosamente con relación a su eficacia y toxicidad, estos estudios son
randomizados y requieren habitualmente una población entre 500 a 3.000 pacientes,
también aquí se detectan los efectos adversos de la droga en estudio. En esta etapa sólo se
detectarán efectos adversos frecuentes y no aquellos infrecuentes, es por este motivo que
solamente en la fase de comercialización se podrá observar efectos adversos infrecuentes;
su estudio después de la comercialización de la droga se denomina estudios FASE IV y su
importancia es la de detectar estos efectos adversos infrecuentes, además es importante
considerar que la población expuesta a la droga en estudio (FASE III) por razones éticas, es
una población preseleccionada que no incluye a ancianos, niños, mujeres embarazadas, uso
de determinadas drogas concomitantes o enfermedades asociadas.
Entre otros, a diferencia de la población expuesta en la etapa de comercialización de la
droga (FASE IV). A manera de ejemplo, la experiencia con el uso de la preparación
oftálmica de timolol; luego de su comercialización, produjo más de 10 muertes por
bloqueos cardíacos o asma, cuando se utilizó en pacientes con enfermedad cardiovascular y
/o respiratoria previa, que habían sido excluidos en los estudios previos a su aprobación,
ahora, si consideramos que un EA ocurre en uno de cada 10.000 pacientes expuestos a una
droga determinada, la posibilidad de que el mismo se presente en un estudio de 1.000
pacientes es solo del 9.5%, y si el mismo no es observado en 1.000 pacientes nos brinda un
intervalo de confianza del 95% y su verdadero rango de ocurrencia es de 3 cada 1.000
pacientes.
Encontrando que el objetivo directo de la farmacovigilancia es la detección temprana de las
reacciones adversas e interacciones desconocidas hasta ese momento, detectar el aumento
de la frecuencia de una reacción adversa ya conocida, identificar factores de riesgo y
difundir la información para lograr una mejor regulación en la prescripción de los
medicamentos, de esta manera anhelamos tener un uso más racional de los medicamentos,
evaluar y comunicar los riesgos y beneficios de los mismos y difundir esta información a la
comunidad científica y a la población general, además, tenemos que considerar que los
efectos adversos de las drogas causan un importante número de internaciones o una
prolongación de la estadía hospitalaria en las internaciones previas, o la necesidad de
estudios y otros tratamientos que ocasionan un gasto adicional a los sistemas de salud.
Las actividades de farmacovigilancia se impulsaron a partir de importantes
reacciones adversas graves a medicamentos que fueron señales para advertir que, si bien
éstos tienen como propósito mejorar el estado de salud, también tienen potencialidad de ser
perjudiciales de manera importante, incluso fatal. Las actividades de farmacovigilancia
como esfuerzo mundial procuran la mejora de la seguridad de los medicamentos mediante
la monitorización de las reacciones adversas que se presentan postcomercialización en
población abierta. Con el devenir histórico de la ciencia médica, también se ha hecho
evidente la necesidad de implementar mecanismos para disminuir el potencial error
humano, así como identificar y gestionar los riesgos y problemas relacionados con los
medicamentos; ha sido importante, también, impulsar la cultura del reporte a fin de percibir
la problemática y analizar su causalidad, y con el esfuerzo de todos, establecer mecanismos
que influyan en la mejora del perfil de seguridad del sistema de medicación de las naciones.
Con respecto a la farmacovigilancia del Ácido Valproico, encontramos que es un
anticonvulsivante con un amplio espectro de actividad antiepiléptica, cuyo mecanismo de
acción principal se relaciona con el aumento de la acción inhibitoria del neurotransmisor
GABA, está indicado para el tratamiento de las epilepsias generalizadas o parciales y los
episodios maníacos asociados al trastorno bipolar, es conocido el riesgo de desarrollar
malformaciones congénitas, asociado a ácido valproico, sin embargo, nuevos trabajos
publicados en los últimos años indicativos de la asociación de ácido valproico con
alteraciones en el desarrollo en niños expuestos intraútero, han motivado que el Comité para
la Evaluación de Riesgos en Farmacovigilancia europeo (PRAC) realice una nueva
evaluación del balance beneficio-riesgo de este medicamento cuando se administra a niñas,
a mujeres con capacidad de gestación y a mujeres embarazadas, durante la evaluación se ha
consultado con un panel de expertos y se ha recabado información de profesionales
sanitarios así como de padres y cuidadores de niños afectados.
Encontrando a manera de conclusión que el riesgo ya conocido de que aparezcan
malformaciones congénitas en niños nacidos de madres que tomaron ácido valproico en
monoterapia durante el embarazo es del 10,73% frente al 2-3% de la población general, las
malformaciones más comunes son: defectos del tubo neural, dismorfia facial, paladar
hendido y labio leporino, craneosinostosis, defectos cardíacos, renales y urogenitales,
defectos en las extremidades (incluyendo aplasia bilateral del radio) y anomalías múltiples
con afectación de varios órganos y sistemas; ademas indicando los datos de la
farmacovigilancia que el ácido valproico puede provocar trastornos en el desarrollo físico o
en el neurodesarrollo de los niños que han sido expuestos intraútero, no se puede determinar
con exactitud cuál es el período gestacional de riesgo y no puede descartarse que dicho
riesgo exista durante todo el embarazo. Estudios realizados en preescolares con exposición
intrauterina a este medicamento han mostrado que hasta un 30-40% de los niños
presentaban algún trastorno en el desarrollo temprano como retraso al caminar y hablar,
problemas de memoria, dificultad en el habla y el lenguaje y menor cociente intelectual,
tanto el riesgo de desarrollar malformaciones congénitas como el de presentar trastornos del
desarrollo, son dependientes de la dosis, si bien no ha podido llegar a establecerse un
umbral de dosis por debajo del cual dichos riesgos sean inexistentes, los datos disponibles
también han mostrado que puede existir un incremento del riesgo de presentar autismo
infantil y otros trastornos del espectro autista en comparación con la población general,
datos limitados sugieren que estos niños podrían tener un mayor riesgo de desarrollar
síntomas de trastorno por déficit de atención e hiperactividad.
De acuerdo a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios
AEMPS, en un estudio de la fármaco vigilancia del ácido valproico se pudo encontrar
dentro de los resultados que las medidas adoptadas no son lo suficientemente efectivas,
concluyéndose que es necesario intensificar las restricciones de uso establecidas
anteriormente e introducir nuevas medidas para mejorar la información y el asesoramiento
de las mujeres, recomendándose modificar las condiciones de autorización con nuevas
contraindicaciones de uso y la puesta en marcha de un plan de prevención de embarazos.
Las recomendaciones del PRAC han sido las siguientes: (a) En relación con las
modificaciones de las condiciones de uso autorizadas: en el tratamiento de epilepsia: no
debe utilizarse ácido valproico en mujeres con capacidad de gestación, a menos que no se
pueda utilizar otra alternativa terapéutica, estas mujeres deberán cumplir las condiciones del
plan de prevención de embarazo, su uso en el embarazo está contraindicado salvo que no se
pueda utilizar otra alternativa terapéutica; (b) En el tratamiento de episodios maníacos del
trastorno bipolar: no debe utilizarse en mujeres con capacidad de gestación salvo que no se
pueda utilizar otra alternativa terapéutica y además se cumplan las condiciones del plan de
prevención de embarazos, su uso en el embarazo está contraindicado; (c) El plan de
prevención de embarazos incluye las siguientes condiciones: evaluar capacidad de
embarazo en todas las mujeres; (d) Informar y asesorar a la mujer sobre los riesgos del uso
de ácido valproico durante el embarazo, según su edad y sus circunstancias personales, las
mujeres con capacidad de gestación o sus cuidadores deben entender los riesgos y estar de
acuerdo con las condiciones del tratamiento que incluyen: realización de la prueba de
embarazo antes de iniciar el tratamiento y regularmente durante el mismo, y el uso de
métodos anticonceptivos durante el tratamiento
De acuerdo a la información recopilada, se concluye que la farmacovigilancia y los casos de
seguridad son de gran importancia debido a que estoy permiten garantizas la efectividad,
del fármaco estudiado ademas de evitar posibles efectos adversos que puedan ocasionarse
debido a la composición química de los mismos, estos ocasionándonos más daño que
beneficios como es el caso del ácido valproico que si bien posee grandes efectos
disminuyendo las crisis epilépticas, este puede desencadenar diversas malformaciones si se
lo es consumido durante el periodo de gestación, siendo gracias a la farmacovigilancia, el
garantizar el no uso de los mismos, en cierta etapa, de esta manera logrando disminuir los
efectos que este ocasiona.
Referencias Bibliograficas.
1. Taufiq Rohman, S.Pd.I MP. Ácido valproico: alerta y restricciones de uso en niñas y
mujeres en edad gestacional. Psikol Perkemb. 2019;(October 2013):1–224.
2. Agencia española de Medicamentos y Productos Sanitarios. Nota informativa: Ácido
Valproico: Nuevas medidas para evitar la exposición durante el embarazo. 2018;1–3.
Available from:
https://www.aemps.gob.es/informa/notasInformativas/medicamentosUsoHumano/seguri
dad/2018/NI-MUH_FV_3-acido-valproico.htm
3. Sistema Nacional de Farmacovigilancia. Ministerio de Salud Pública [Internet].
Available from: https://www.salud.gob.ec/sistema-nacional-de-farmacovigilancia/