Navidad: ¿Celebración Cristiana?
Navidad: ¿Celebración Cristiana?
Las tradiciones navideñas sin duda varían de un lugar a otro. Pero muchos
conocemos la experiencia de decorar un árbol de navidad o de colgar luces de
colores. Reunirse con familiares y amigos e intercambiar regalos son prácticas que
se asocian comúnmente con el espíritu de la navidad.
“existen muchas ideas e imágenes paganas. Del culto al Sol, por ejemplo, vino la
celebración del nacimiento de Cristo el día veinticinco de diciembre, natalicio del
Sol.
Aunque la respuesta parezca difícil, no lo es. El nombre cristiano viene del nombre
del fundador del cristianismo, Jesucristo, el Hijo de Dios. Quienes se llaman
cristianos se dicen seguidores de las enseñanzas y el ejemplo de Jesucristo.
Entonces, si es apropiado, o incluso obligatorio para los cristianos, ese algo tiene
que conformarse a las enseñanzas, afirmaciones, ejemplos y mandatos del
fundador de la fe: Que es ¡Jesucristo!
En Lucas 6:46 a los que dicen que Jesús es su “Señor” pero no viven como Él
manda: “¿Por qué me llamáis, Señor, Señor y no hacéis lo que yo digo?” Igualmente
declara: “Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu
nombre y en tu nombre echamos fuera demonios y en tu nombre hicimos muchos
milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores
de maldad” (Mateo 7:22-23).
Por ejemplo, con referencia a los pueblos paganos y sus tradiciones y costumbres,
Dios dejó instrucciones muy claras para la antigua Israel: “Cuando el Eterno tu Dios
haya destruido delante de ti las naciones adonde tú vas para poseerlas, y las
heredes, y habites su tierra, guárdate que no tropieces yendo en pos de ellas,
después que sean destruidas delante de ti; no preguntes acerca de sus dioses,
diciendo: De la manera que servían aquellas naciones a sus dioses, yo también les
serviré. No harás así al Eterno tu Dios” (Deuteronomio 12:29-31).
¡Esto es crucial! Notemos que Dios no se limita a decir: “No adores a los ídolos” o
“no adores a sus dioses”. Dice: “No harás así al Eterno tu Dios”. La Biblia deja muy
claro que ni siquiera podemos adorar al Dios verdadero empleando prácticas
paganas. Aunque algunos pretenden decir que sí es aceptable emplear tradiciones,
símbolos y días paganos; siempre y cuando se esté adorando al Dios verdadero
con esas cosas, ¡la Biblia dice lo contrario!
“Cuando entres a la tierra que el Eterno tu Dios te da, no aprenderás a hacer según
las abominaciones de aquellas naciones” (Deuteronomio 18:9). En la misma forma,
en Jeremías 10:2 vemos estas instrucciones: “No aprendáis el camino de las
naciones”, refiriéndose a las naciones paganas cercanas a la antigua Israel. No
podía ser más claro: Dios no quiere que su pueblo lo adore con medios paganos.
De hecho, el pasaje en Jeremías 10 va mucho más allá, dando el ejemplo específico
de una práctica pagana que Dios condena. ¡Es una práctica fácil de reconocer! Dios
dice: “Las costumbres de los pueblos son vanidad; porque leño del bosque cortaron,
obra de manos de artífice con buril. Con plata y oro lo adornan; con clavos y martillo
lo afirman para que no se mueva” (vs. 3-4).
¿Cuántos hacen eso precisamente con un árbol o una rama en cada navidad? Lo
meten en su casa, lo fijan y lo decoran con adornos de colores brillantes. El Dios
Todopoderoso dice que el hecho de llamarlo un ídolo no es lo importante. Lo
importante es sencillamente: “No aprendáis el camino de las naciones… No harás
así al Eterno tu Dios”.
Parece que la cristiandad está actuando conforme a esas ideas. Sin embargo, Jesús
amaba las leyes de Dios y las honraba, y ordenó que todos sus seguidores hicieran
lo mismo. Incluso, se refirió específicamente a este punto, en el caso de que sus
seguidores estuvieran dispuestos a desatender los mandamientos divinos para
guardar las tradiciones que deseaban.
¡La Palabra de Dios y las enseñanzas de Jesucristo son claras como el cristal! Para
que un cristiano observe la navidad: El árbol, los regalos, hasta la fecha misma;
tendría que hacer de lado los mandamientos de Dios y aferrarse a esas tradiciones.
Dios ordena que no empleemos costumbres y tradiciones de origen pagano para
adorarlo a Él, y la navidad está, sin lugar a dudas, empapada de tales costumbres
y tradiciones. Para guardar la navidad, tendríamos que rechazar los mandamientos
de Dios. Y esto es algo que Jesucristo, el Hijo de Dios y fundador del cristianismo,
condena apasionadamente y sin ambages(rodeo).
Si nos decimos cristianos pero desatendemos las enseñanzas de Cristo con tal de
guardar la navidad, las palabras de Jesús pronunciadas hace 2.000 años llegan
hasta nosotros para reprendernos: “¿Por qué me llamáis, Señor, Señor y no hacéis
lo que yo digo?”
Quizá sea divertida y alegre. Quizá la disfruten. Puede ser una tradición familiar de
larga data. Quizás estén tratando muy sinceramente de guardarla para Dios con las
mejores intenciones. Pero la navidad no es una celebración cristiana según las
palabras y enseñanzas del propio fundador del cristianismo, Jesucristo.
¿Qué es lo que condena nuestro Señor Jesucristo?
VERSICULO A MEMORIZAR: