Fundamentación teórica
1- Fundamento del diseño: Generar formas y figuras multidimensionales a
partir de los fundamentos del Diseño 1. Para el desarrollo de un producto
cerámico con características constructivas funcionales y estéticas, basados
en los entornos socios culturales que definen el tema del proyecto.
2- Técnicas y Estrategias de la Comunicación: Realizar una investigación
documental para la obtención de recursos que se serán la base para el
desarrollo de un producto cerámico enfocado en sitios históricos y culturales
de Nicaragua.
3- Taller de cerámica: Desarrollar las habilidades para trabajar con la
cerámica en la fabricación de objetos artesanales y seriados de baja
complejidad.
4- Dibujo Natural: Representar a través del dibujo los bocetos con las
propuestas de diseño para el producto cerámico.
5- Expresión: Aportar en el proceso de creatividad en la expresión de ideas
como medio de comunicación para la presentación y promoción de los
productos.
6- Matemática introductoria: Enlazar el orden lógico de los procesos de
investigación, redacción, proyección y creatividad que se integran en el
proceso de diseño.
Procedimiento metodológico:
Primeramente agarramos el barro para amasarlo bien que quedara como
plastilina, luego lo pusimos en un plástico y le pasamos un rodillo para estirarlo y
que quedara bien estirado para poder hacer el molde de los platos. Lo q costaba
era esperar a que el barro secara, cuando ya teníamos los platos hechos teníamos
que componerlos por que se rajaban y había que pegarlos o volverlos hacer.
Y finalmente cuando los platos ya estaban hechos era la hora de pintarlos para
que quedaran presentables en lo que es la creatividad de la pareja del proyecto.
Marco Teórico:
El Güegüense
En el siglo XVII, en las calles de una pequeña ciudad colonial nicaragüense
gobernada por autoridades españolas y habitada por indígenas y mestizos,
comenzó a interpretarse una comedia bailete de gran valor cultural que expresaba
un rechazo a la dominación hispana de manera burlesca, ingeniosa y creativa. Con
el tiempo la obra pasó a ser un símbolo de identidad para el pueblo de Nicaragua
por su carácter de protesta, y tres siglos después de su origen llegó a ser declarada
“Patrimonio Vivo, Oral e Intangible de la Humanidad” por la UNESCO.
Esa histórica obra de autor anónimo es “El Güegüense o Macho Ratón”, primera
pieza literaria nicaragüense, perteneciente al teatro náhuatl. Conozca a
continuación detalles sobre la historia y contenido de esta comedia maestra.
La Historia
El Güegüense nace en la ciudad de Diriamba, en el actual departamento de Carazo.
Existen varias teorías sobre la fecha de su surgimiento, pero sí se sabe con certeza
que su lengua primigenia de representación era el náhuatl local. La obra se
presentaba como teatro callejero, en las narices de las autoridades coloniales
españolas civiles y militares.
El pueblo de la zona había demostrado su fuerte carácter con un directo rechazo y
rebeldía contra el dominio español desde la llegada de los primeros conquistadores.
En 1522, aproximadamente, el capitán de conquista Fernández Dávila se topó en la
región con la tribu local encabezada por el cacique Diriangén. Los indígenas
recibieron cortésmente a los extranjeros y escucharon sus demandas que incluían
el sometimiento a la autoridad de la colonia española y la conversión al cristianismo;
pidieron un breve tiempo para considerarlas y al volver arremetieron con furia contra
el invasor.
Ese episodio de la historia es hoy considerado como la primera guerra anti-
intervensionista nacional. Los españoles se impusieron gracias a su tecnología
militar, y el pueblo de Diriangén se vio diezmado y sometido ante el invasor. Sus
descendientes, un siglo después, fueron los posibles creadores y primeros
espectadores de una obra cuyo contenido expresaba una resistencia pacífica ante
la autoridad extranjera.
El Güegüense continuó presentándose en las calles y era transmitido de forma oral
de una generación a la otra. No fue sino hasta 1942 que sus parlamentos fueron
recopilados e impresos por primera vez en un libro, y ocho años después su música
es grabada, también por vez primera.
En tiempos modernos los bailes de El Güegüense y su presentación completa pasó
a formar parte de la expresión cultural durante las fiestas en honor al santo patrono
de Diriamba, San Sebastián, en la tercera semana de Enero. Aunque hoy en día
sus bailes forman también parte del repertorio de diversos Ballets Folclóricos
profesionales y la obra completa es eventualmente interpretada de forma
profesional o aficionada en teatros y colegios por todo el país, es durante estas
fiestas diriambinas que se puede observar a El Güegüense y sus bailes
interpretados por sus herederos naturales: los habitantes de la comunidad de
Diriamba.
El 25 de Noviembre del año 2005, la Organización de las Naciones Unidas para la
Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) otorgó un reconocimiento mundial a
“El Güegüense o Macho Ratón”, al declararlo Patrimonio de la Humanidad.
La Obra
El Güegüense es una obra atractiva y muy
interesante por los componentes que la conforman como comedia bailete:
parlamentos, música y danzas, así como por la indumentaria teatral de los actores,
la cual se asemeja a las utilizadas en sus orígenes, con algunas modificaciones y
enriquecimientos que se han venido dando a lo largo del tiempo.
El nombre proviene de su personaje principal, el Güegüense, el que a su vez se
deriva de la palabra náhuatl “huehue”, que significa viejo, sabio.
La obra consta de 14 personajes. Son tres mestizos: el Güegüense, su hijo Don
Forsico y su hijo Don Ambrosio; cuatro autoridades españolas: el Gobernador
Tastuanes, el Capitán Alguacil Mayor, el Escribano Real y el Regidor Real; tres
mujeres: Doña Suche Malinche y sus dos damas de compañía; y cuatro “machos”
(bestias de carga): el Macho-moto, el Macho-viejo, el Macho-mohíno y el Macho-
guajaqueño (otros le llaman Macho-boaqueño).
La indumentaria de los diferentes personajes es muy llamativa. Los españoles visten
3trajes y sobreros coloniales elegantes con lentejuelas y altas medias, además de
máscaras pintadas con bigotes y pelo rubio o castaño, y ojos azules o claros. Los
mestizos usan máscaras con bigotes oscuros, sombreros de paja, ropas menos
ostentosas, calzan sandalias o van descalzos y portan un chischil (o sonaja)
puntiagudo de metal. Los machos van descalzos y usan chalecos con lentejuelas y
máscaras de caballos, una crin de mecate y también portan chischil metálico. Las
damas no están enmascaradas y usan vestidos largos, collares y aretes.
El Güegüense se describe a sí mismo como un comerciante que viaja por los
diferentes territorios coloniales de México y Centroamérica con finas mercancías.
Sus hijos son sus ayudantes: Don Forsico es su mano derecha y respaldo, Don
Ambrosio es su detractor. Los cuatro machos son sus animales de carga y trabajo.
El Gobernador Tastuanes es la autoridad máxima y el Capitán Alguacil Mayor su
fuerza policial. El Escribano Real y el Regidor Real son funcionarios
gubernamentales locales. Doña Suche Malinche es hija del Gobernador Tastuanes
y las dos damas son sus sirvientas.
La trama tiene 314 parlamentos (según la
primera versión escrita) y se desarrolla así: el Güegüense es visitado por el Capitán
Alguacil Mayor, quien lo convoca al Cabildo Real para arreglar el pago de sus
impuestos. Una vez ante el Gobernador Tastuanes, el habilidoso Güegüense usa
su ingenio para convencerlo de unir en matrimonio a Doña Suche Malinche y su hijo
leal Don Forsico, evitando así tener que pagar nada a esas autoridades que él
desprecia. En los parlamentos, el Güegüense despliega con picardía frases de
doble sentido y simula frecuentemente una sordera para burlarse y engañar a las
autoridades del Cabildo Real; hace también gala de sus maravillosas mercancías,
las que enumera en repetidas ocasiones. Esas mercancías son reales según su hijo
Don Forsico, pero su hijo Don Ambrosio expresa con enojo que son falsas,
acusando a su padre de charlatán y embustero. Finalmente el Güegüense cierra su
trato con una fiesta en el Cabildo Real.
Alternado con los parlamentos se desarrollan los bailes, en los que intervenían
originalmente sólo los machos, según algunos estudiosos, pero que hoy en día
participan igualmente los personajes españoles. En algunas presentaciones no
tradicionales si no profesionales, los bailes se ejecutan con creativas coreografías
innovadoras.
La obra tiene 14 sones, aunque en la actualidad se usan sólo seis en las
presentaciones tradicionales y en otras. La música se interpreta con sus
instrumentos originales, muestra del sincretismo cultural que expresa toda esta
obra: un pito (flauta) y un tambor indígena, y un violín y una guitarra europea. Las
canciones son totalmente instrumentales y tienen una evidente influencia tanto
indígena como española en sus melodías lentas o rápidas.
El autor de la obra es desconocido y sobre él existen también otras tantas hipótesis,
como que fue un culto mestizo cansado de los impuestos, o un sacerdote que tenía
buen dominio del náhuatl y el español.
La construcción literaria de El Güegüense permite una variedad de interpretaciones.
Para unos, el Güegüense es un muy trabajador, astuto y próspero comerciante que
no quiere pagar impuestos al gobierno impuesto por la corona española. Para otros,
el Güegüense es un pequeño comerciante habilidoso, pícaro y estafador, que hace
uso de sus mil mañas para embaucar a las autoridades españolas de las que no
sólo consigue evitar el pago de impuestos, sino también casar a uno de sus hijos
con la propia hija del gobernador.
Sea como fuere, esta excelente y pintoresca obra expresa la resistencia de un
pueblo ante las autoridades invasoras, y constituye una de las más importantes
herencias culturales de los nicaragüenses, para quienes el Güegüense constituye
un digno representante de su carácter: pícaro, astuto y rebelde.
Conclusiones:
La literatura como tal establece todas las realidades vividas, por tanto cada
nación debe apropiarse de lo suyo.
La obra literaria El Güegüense, forma parte de nuestra historia, al hecho que
instituciones como la UNESCO le han dado el valor literario que se merece,
pero en el campo educativo nacional falta mucho por enseñar literatura, y se
denota la escasez de conocimientos sobre la importancia de la obra
El Güegüense, siendo necesario encontrar respuesta a dicha debilidad, esto
lo demostramos con el resultado de nuestra investigación:
RECOMENDACIONES
1- Siendo que nombres de obras nacionales como “El Güegüense” son
inexistentes en estándares educativos las autoridades del MINED deben
insertar la enseñanza de la misma para que vayan inmersos en planes
de estudios.
2- Editar series de documentos como revistas ilustradas, libros adaptados
al nivel primario para motivar el interés del docente en la transmisión de
la obra en los diferentes niveles de la escuela primaria.
3- El MINED como institución debe elaborar logros de aprendizaje donde
exija el estudio de obras literarias nicaragüenses señalando el nombre
de ellas, donde vaya inmersa “El Güegüense” como obra única del teatro
mestizo popular.
Referencias Bibliográficas:
www//el nuevo diario.com.ni Historia “El Güegüense”
www//google.com.ni Literatura Nacional “El Güegüense”.
Cartilla de Cultura Turística No. 3 La Ronda de “El Güegüense”. Instituto
Nicaragüense de Turismo (INTUR)
www//google. Tema Importancia de la Obra del Güense.doc