Sol Neptuno y la figura paterna
Un aspecto Sol-Neptuno indica que existen unas determinadas
tendencias o patrones (además de en la formación de una
identidad integral y propia) en la relación con nuestro padre, en la
interacción con la figura paterna.
Esos principales “patrones”, temas o formas de experimentar la
relación con el padre que aparecen en los aspectos Sol Neptuno
son principalmente 4; sacrificio, idealización, victimización y
creatividad.
Sacrificio.
Cuando la experiencia paterna (Sol) está teñida por Neptuno, a
menudo, el tema del sacrificio está muy presente, y también a
menudo ese sacrificio llega a ser literal. El padre se va, se muere,
o no está.
Por x razón sentimos que tenemos que “renunciar” a el, que
tenemos que “sacrificarlo”. Se nos va de las manos sin que
podamos hacer absolutamente nada más que aceptarlo y
resignarnos. El derecho básico a tener un padre se queda en un
anhelo insatisfecho.
Con este aspecto el padre también puede estar presente, pero
resultar inaccesible por estar “entregado” en cuerpo y alma a
alguna “causa”.
Idealización.
Aparte del padre esquivo, escurridizo y sacrificado, Neptuno
también puede simbolizar el padre idealizado, a veces hasta
acabar convertido en un especie de redentor personal.
Sol Neptuno puede generar una idealización de la figura paterna
que tarde o temprano acabará en decepción. Nadie puede estar a
la altura de este Neptuno proyectado.
Esta dinámica idealización-decepción puede convertirse en una de
las principales pautas en relaciones posteriores, sobre todo en
horóscopos femeninos. Primero creemos que se nos acaban de
abrir las puertas del cielo, pero tarde o temprano, acabamos
descubriendo que seguimos en la aburrida realidad y nos sentimos
estafados.
Cuando lo que se activa principalmente en un contacto Sol-
Neptuno es la idealización, podemos pensar que nuestra relación
paterna es maravillosamente rica, profunda, tierna, relajante,
pacífica, emocionalmente satisfactoria; etc, etc, etc... pero lo más
habitual es que, tarde o temprano, a nivel inconsciente acabemos
teniendo la sensación de haber sido traicionados, decepcionados y
engañados.
Lo que se espera de la interacción paterna con este contacto es
una especie de “fusión extática”, y eso jamás será satisfecho ni
por él ni por nadie simplemente porque la fusión neptuniana solo
se experimenta a través del útero, de los estados alterados de
conciencia o de algunas drogas. Es ese hambre de fusión perfecta
lo que contamina la experiencia paterna.
Victimización.
Además del padre sacrificado o del padre idealizado, Neptuno
también puede simbolizar al padre víctima. Con un Sol-Neptuno,
los padres “derrotados” son muy comunes. El padre herido por la
vida, el padre alcohólico y autodestructivo, el padre impotente o
castrado por algo o alguien etc.
Cuando Neptuno funciona bajo este esquema, el desarrollo de una
personalidad autónoma y plenamente funcional es muy difícil ya
que el modelo primigenio y principal, el padre, está dañado.
Relaciones posteriores en la vida adulta pueden también atraer la
proyección de este Neptuno y esto acabar uniéndonos a o
identificándonos con, víctimas en general, personas derrotistas,
depresivas, o escapistas con algún tipo de adicción destructiva.
Muchos astrólogos piensan que la experiencia de la crueldad
proveniente del padre se limita a los aspectos tensos (cuadraturas
u oposiciones) del Sol con Marte, Saturno o Plutón; sin embargo
personalmente creo que Sol Neptuno puede incluirse también en
esta lista de padres violentos o de “instintos descontrolados”.
Creatividad.
Por último, Neptuno simboliza al padre creativo, al artista, al
místico, al hombre con un rico mundo interior. Por supuesto este
nivel del contacto Sol-Neptuno es “demasiado poco habitual”.
Si el aspecto entre los dos símbolos astrológicos es un trígono o
incluso una conjunción todo lo anterior se dará de una manera
más suave y fácil de integrar; si es una cuadratura o una oposición
tenderá a radicalizarse y será necesario cierto esfuerzo para
encauzar de manera positiva la influencia de Neptuno tanto el la
formación como en el carácter ya formado del individuo.
Todo aspecto sobre todo si es tenso, del Sol con los planetas
exteriores o transpersonales (Urano, Neptuno y Plutón) conllevan
unas dificultades especiales que una vez superadas prometen
facultades igualmente especiales.
Alguien con un aspecto Sol Neptuno en su carta necesita de un
fortalecimiento extra de la personalidad, de la voluntad y de la
capacidad de dirigir la propia vida en la madurez; que le permita
utilizar de manera positiva esa tendencia al sacrificio, controlar su
victimismo, y sobre todo dar expresión al profundo potencial
creativo, místico y emocional que este aspecto lleva, consciente o
inconscientemente, implícito.