[go: up one dir, main page]

100% encontró este documento útil (2 votos)
164 vistas92 páginas

Atencion Aqui y Ahora - Terapia Gestalt - Carachuk, Julia Z PDF

Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
100% encontró este documento útil (2 votos)
164 vistas92 páginas

Atencion Aqui y Ahora - Terapia Gestalt - Carachuk, Julia Z PDF

Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
Está en la página 1/ 92

Este texto pertenece a: Ps. Elard Snchez G.

Al Dr. Guillermo Vidal, que pele a mi lado,


contra mis fantasmas privados.
Y a la Dra. Adriana Shnake, Nana, la Brujta,
que me ense los pases mgicos para exorcizarlos

ABADON EDICIONES,
1996 - Abadon Ediciones
Queda hecho el depsito que marca la Ley 11 723
Impreso en Argentina / Printed in Argentina
Se prohbe su reproduccin total o parcial.
AGRADECIMIENTOS

A mis antiguos compaeros de aquel primer grupo gestltico de


autogestin, Vctor Palmen, Guillermo Vidal, Celia Huberman, Gina Gioia,
Marta Slemenson, Martn de Oro y Ernesto Schraier. A ellos les debo mis
primeras experiencias con estas tcnicas.
A los Doctores Bernardo Ficher, Dickie Grimson y Miguel Vayo junto a
quienes viv largas horas de aventura y descubrimiento, que son los
Laboratorios.
A los jvenes profesionales que se integraron en los distintos grupos de
estudio y formacin, quienes, como dira Winnicott, me pagaron por
ensearme.
A Sonia La Torre, Alejandra Gonzlez y Ral Kersenbaurn, quienes
hicieron posible la primera edicin de este libro. Por su cuidado personal en
la diagramacin y el armado.
A mis amigos de AGBA que criticaron y auspiciaron este libro.
A todos ellos, y sobre todo, a mis pacientes amigos, que se comportan
conmigo como amigos pacientes, mi ms hondo agradecimiento.

PROLOGO

Este libro est dirigido a quienes estn haciendo su primera


aproximacin al mundo de la Terapia Gestltica. Para los jvenes
terapeutas, es un intento de ordenar secuencias de experimentacin, en un
lenguaje que les facilite el reconocer y reconocerse en las distintas
temticas en que se refleja la neurosis de nuestra gente. Para los no
profesionales, mi deseo es producir inquietud y estmulo que puedan
aprovechar para el autodescubrimiento
Esta segunda edicin, incorpora al captulo ya existente de lenguaje
corporal, la descripcin del trabajo con sntomas y la relacin con el
lenguaje popular, como modelos de comprensin del mensaje contenido.
Al captulo de Parejas, incorporo la conceptualizacin terica de la
problemtica de la pareja, y un esbozo, a modo de juego, de un "contrato
de convivencia", conveniente, tal vez, para la profilaxis del fracaso de la
vida en comn.

Julia Z. de Baranchuk
TERAPIA GESTALTICA
No pienses en las cosas
que fueron y pasaron:
Pensar en lo que fue
es aoranza intil.
Pensar en el futuro
es impaciencia vana.
es mejor que de da te sientes
como un saco en la silla;
Que de noche te tiendas
como una piedra en el lecho.
Cuando viene el comer,
abre la boca.
Cierra los ojos
cuando viene el sueo.
Po Chu Yi

La terapia gestltica es un tratamiento basado en la filosofa existencial, que se


ocupa del hombre en tanto fuerza finita que obra por su cuenta y riesgo en relacin
consigo mismo, con los dems y con las cosas.

Aunque Freud revoluciona la psicologa con el concepto de "determinismo" que


alcanza a las manifestaciones psquicas, luego de haberse impuesto en la ciencia
imperante en el mundo, no escapa, sin embargo, al romanticismo del siglo XIX que
ve en el hombre la manifestacin de fuerzas infinitas, Eros y Thanatos, los instintos
que lo trascienden.

En el mbito de la causalidad, la pregunta del cientfico es por que? y la


respuesta, inexorablemente, se abre a una racionalizacin que pretende abarcar el
todo como una realidad perfectamente cognoscible a travs del pensamiento
lgico. Si hasta las ciencias fsicas fueron abandonando este esquema que no
satisface la posibilidad de comprender los fenmenos, es obvio que un lema tan
complejo, como lo es la realidad del hombre estudiada por el hombre, no podra
dejar de suscitar voces: en disonancia con la rigidez de un determinismo que limita
el conocimiento a lo conceptual.

-9-
Dos grandes disidentes post-freudianos son Wilhelm Reich por un lado y Cari Jung Al igual que Reich, Perls identifica el libre fluir de la emocin con la idea misma de
por otro. Reich se conecta con la realidad visible y perceptible corporalmente. salud, considerando al hombre como un organismo inmerso en un ambiente con el
Intenta la lectura corporal de lo que est ocurriendo aqu y ahora. Concibe al cual establece un equilibrio de intercambio constante. El hombre y su ambiente
hombre como un ser capaz de bloquear el libre fluir de la energa vital y csmica, a constituyen, pues, el objeto de estudio de la terapia gestltica, y los modos de
travs de sus procesos neurticos. La unidad de energa sexual que para Reich es bloqueo de la energa, el corazn mismo de las diferentes estructuras neurticas.
sinnimo de energa vital y csmica y que asimila al orgasmo, es el orgn, y el
sistema, a travs del cual la energa se expande o acantona, es el sistema
muscular. Es as como Reich llega a establecer el crculo vicioso de la neurosis
que termina por convertir al hombre en un ser preso de sus contracturas
neurticas, que l llama "coraza muscular".

Por otra parte, Jung atiende a un fenmeno de ndole enteramente diferente. Se


trata del conocimiento sensible, derivado de la experiencia mstico-religiosa afn al
budismo. Este constituye un modo oriental de aproximacin al conocimiento, ajeno
al pensamiento causalstico occidental y referido a la sincronicidad de los
fenmenos. Es a travs de esta sincronicidad que Jung explica la energa csmica
e individual por medio del inconciente colectivo.

La terapia gestltica fue concebida por Perls en la dcada del 60, y se apoya con
importantes modificaciones, en la teora reichiana. De la psicologa de la
percepcin toma el concepto de fondo-figura, que tambin emparenta la teora de
Reich con los aportes del budismo Zen.

A Perls le cupo el privilegio de ser quien instrument para la praxis psiquitrica los
elementos que los existencialistas, incluido Jaspers, tambin psiquiatra, aportaran
al conocimiento filosfico.

Como Jung y el budismo, la terapia gestltica se apoya en la nocin de "aqu y


ahora", y hace hincapi en el reconocimiento de lo obvio (...una rosa es una rosa,
es una rosa, es una rosa...). Del budismo tntrico extrae la nocin de continuum de
conciencia (los yogas de la atencin). Como Reich trabaja con el lenguaje corporal,
y a todo esto se le suma la contribucin fundamental de Perls, que consisti en la
re-creacin, por medio de una tcnica hondamente vivencial, de la posibilidad de
cerrar "hoy" situaciones inconclusas del "ayer", a travs de trabajos cargados de
emocin y motricidad, para los que se emplea un lenguaje cabal en el que lo verbal
tiene una importancia relativa.

Los postulados que sustentan este modo de operar sobre la neurosis constituyen
una filosofa que excede los lmites del tratamiento del hombre enfermo, para
convertirse en un estilo de vida, que queremos reivindicar para el hombre sano.

- 10 -
EL QUE ES QUE EN GESTALT

As como tus p a r t e s saben que son


partes t u y a s , as t debes saber que
somos partes de la humanidad
Theodore Sturgeon

Los principios en los que se apoya la gestalt: el reconocimiento de lo obvio, el libre


fluir en el aqu y ahora y el continuo de conciencia, son explicitados como pautas
para el proceso teraputico. Participan de la paradoja castanedeana de ser al
mismo tiempo herramientas para la lucha y aquello que se quiere conquistar. Son
instrumentos que facilitan el ingreso a un mundo experiencial y conceptualmente
nuevo, nuevo por dos razones; una porque es novedoso para el neurtico acceder
a un mundo carente de neurosis, y sto vale para cualquier tipo de psicoterapia. La
otra, porque se trata de un modo de vida, ms all del concepto de salud o
enfermedad que filosficamente se erige sobre los principios ya enunciados.

Reconocimiento de lo obvio: Es imprescindible insistir en la importancia de


reconocer lo obvio, que es todo aquello que podemos registrar a travs de nuestros
rganos perceptivos o de su prolongacin en el campo de la ciencia fsica o
qumica. Obvio es lo que es. Adjudicarte un significado que trascienda a "lo que
es" es trasladar 'lo que es' al reino de "lo que podra ser". Si, por ejemplo, alguien
se est moviendo, lo obvio es ese movimiento, y no la motivacin o finalidad que,
podramos atribuirle libre fluir en el aqu y ahora; "Aqu y ahora" deja de ser un
concepto cuando se logra no interrumpir lo que se esta sintiendo ni forzar accin
alguna en relacin con ese sentir. Aqu y ahora es la experiencia misma. La
experiencia es tiempo presente, lo que pas ya es recuerdo, y lo que va ha ocurrir
no existe. Experiencia es tiempo y espacio en el reino de lo sensible. Cuando se da

- 11 -
como pauta a los pacientes, les explicamos la importancia de ir registrando lo que psquicos.
van sintiendo a medida que lo van sintiendo, corporal o anmicamente. Estas
sensaciones pueden estar vinculadas a s mismo o alguna otra persona, respecto Capa de los roles: As como no puedo imaginar al distinguido profesor
de la cual se les pide que abandonen ideas previas o historias en comn. As manteniendo la distincin en la intimidad de su cuarto de bao, en la capa de los
tambin, traten a sus recuerdos, sueos, fantasas, no como algo que ya ocurri, roles la mscara que nos ponemos cuenta con nosotros como pblico al que va
sino como algo que est ocurriendo. Esto es actualizacin. Tambin, les alertamos dirigido el espectculo. Yo puedo imaginar que de veras soy generosa y
respecto de sus expectativas, ana o catastrficas, explicndoles que la angustia les magnnima, o impotente como un bebito o severa y lcidamente moral. Adems la
delata cuando se han salido del presente para intentar controlar el futuro. La frecuencia hecho mano a determinadas conductas que forman parte de las
operacin que sienten circula por la brecha abierta entre el presente y el futuro. descripciones de las distintas personalidades y de los tratados de psicopatologa,
me induce a creer que yo soy as o de esta otra forma, que este es mi modo de
Contnuo de conciencia: El contnuo de conciencia herramienta implica un ser o mi patologa personal. Sin embargo, No deja de ser rol y las emociones que
permanente trabajo sobre la atencin a cada pequeo acto cotidiano, a cada acompaan a este juego pertenecen a una capa mas superficial de esta estructura
sensacin y sentimiento que se experimenta e incluso a las distracciones y fugas, acebollada que soy. Porque puedo penetrar mas profundamente en m que esto.
tanto ms frecuentes cuanto mayor es el grado de neurosis. Y si sola o acompaada me arriesgo a aventurarme ms profundamente que sto.
Y si sola o acompaada me arriesgo a aventurarme ms all de mis miedos (punto
El trabajo sobre la atencin es descrito en el punto correspondiente a fbico) caigo de lleno en un nivel mas profundo de mi ser. Capa de la
reaprendizajes en el captulo Herramientas antiexistencia: Cuando renunciamos a jugar roles (yo no soy ni esto ni lo opuesto)
la vivencia se corresponde a la nada existencial, percibida muchas veces como
De todos modos, cuando es usado como pauta, nos remitimos a preguntarle algo,
niebla, oscuridad, vaco. El quedarse detenido al borde de esto constituye el
que para nosotros es evidente en ese momento: Te das cuenta qu ests
impasse. El impasse es vivido como la seguridad ltima ante el miedo a la
haciendo con tus manos? Qu sientes en este momento? Qu tienes ganas de
muerte. Un punto nada ms separa este modo de existir de lo desconocido: el
hacer?. Porque neurosis es interrupcin. Es bloqueo de la energa. El neurtico
punto fbico. Atravesarlo es entrar en una nueva forma de existencia y el impasse
usa distintos modos para lograr sus objetivos. Diferentes maneras de evitar el libre
asegura la posibilidad de quedar adherido a un modo de vivir sin vivir, conocido y
fluir de la emocin y su concrecin en sensaciones y movimientos que tienen
tranquilizador. Cmo se sale del impasse? Del impasse no se sale. Es semejante
precisa localizacin en diversos grupos musculares.
al cristal que nos cierra el paso en el laberinto de los juegos infantiles. Slo se
puede retroceder y tomar por otro camino, que permita esta vez salvar el
El otro aspecto a ser tenido en cuenta est ligado, tambin a la interrupcin, pero
obstculo del punto fbico. Cuando se es atravesado (pequeo gran acto de arrojo
esto hace a la vida toda y no slo a una emocin determinada. Se trata de una
existencial), se cae en la capa que Perls llam implosiva. La vivencia es la del
clara censura existencial y est vinculada a lo que Perls llam capas de la
cierre de todas las puertas. Y la postura parece la de alguien que quisiera meterse
neurosis, Perls describe la estructura neurtica como compuesta de cinco capas o
adentro de si mismo. Permanecer en esta situacin lleva un tiempo variable.
estratos. Capa de los clichs: Esta es la capa de la banalidad cotidiana: Cmo
est usted? Y otras frases armadas. Puede llamarse tambin la capa de los
A veces el pasaje por la misma es tan rpido que pasa casi inadvertido. Otras
lugares comunes. Incluye, ms profundamente, las conductas que adoptamos
veces transcurre un tiempo considerable. La divisin entre capa de antiexistencia y
capa implosiva est al servicio de la claridad expositiva. Es difcil reconocer un
Cuando jugamos nuestros roles sociales. Aunque Perls no se refiere a esto ltimo,
lmite entre la vivencia de la nada y la conducta corporal implosiva. Cuando
se me ocurre visualizarlo como un esfumado entre esta capa y la que podramos
seguimos de cerca un trabajo al que acompaamos hasta con nuestra respiracin,
llamar verdaderamente la capa de los roles. En la capa de los roles sociales,
es difcil poder determinar en qu momento tomamos aire y nos lo guardamos
clichs desarrollamos nuestra peculiar manera de comportarnos de acuerdo al rol
preparados al salto nosotros tambin, al vivo pasaje de la vida a la muerte. Porque
desempeado. El gesto con el que nos vinculamos con el conductor de un taxi, la
lo que ocurre es que de pronto algo crece en este "vaco frtil". Y crece al punto de
majestuosidad con que se pasea un profesor, la gravedad paternalista de un
producir un estallido de todo el ser. La capa explosiva es la salida de todo lo que
mdico la simpata de un vendedor. El lenguaje cotidiano llama a esto roles, de
germin y creci. Es un himno de vida. Perls distingue cuatro modos de "explotar":
ah que es fcil la confusin con la siguiente capa que corresponda a los roles
hacia la ira, la alegra, la pena y el orgasmo. De todos modos, la intensa

- 12 -
motricidad y emotividad de esta explosin deja a quien lo vive de modo similar al La terapia de grupo permite, en mayor medida que el tratamiento individual, el
que acabara de vivir un orgasmo. La explosin equivale al cierre de una gestalt acercamiento del individuo a su ncleo fbico, ya sea a travs de la propia
incompleta. Y el bienestar que lo acompaa, con su cortejo organsmico de experimentacin, o corno resultado de la identificacin con el trabajo de los otros.
respiracin, ritmo cardaco y relajacin muscular, son nada ms que el reposo Tambin, por la mayor facilidad con que en el seno del grupo se realiza el rescate
previo a la formacin de una nueva gestalt. Ms all del problema de salud y de proyecciones. De ah que tanta gente se resista a "hacer grupo". Es ms
enfermedad es la vida misma del hombre la que se expresa a travs del libre fluir violatorio.
de la emocin, de la absoluta conciencia de su existir y de la "total disponibilidad
de la energa para hacer frente al restablecimiento del equilibrio entre lo interno y Las relaciones humanas, basadas en el juego de depositaciones y proyecciones,
el ambiente (homeostasis). de introyecciones e identificaciones, ofrecen un mosaico fascinante, donde los
propios lmites se funden en una marea de semejanzas, aproximaciones y
La terapia gestltica apunta a la integracin de la personalidad, permitiendo rechazos, cuya mera enunciacin basta para dar una idea que engloba, tanto a
rescatar .aquellos aspectos alienados del individuo, puestos afuera, y rechazados las dificultades de la tarea de esclarecimiento, como a la manera de encararlas.
en los dems, proyecciones, que llevan una carga tal de energa que la Encontrarnos con los dems, es hacerlo con nosotros mismos, con nuestras
personalidad toda se empobrece y desvitaliza en el esfuerzo de mantenerlos partes dispersas, con nuestras polarizaciones, para integrarnos. El grupo es el
alejados. continente, es el receptor, es el trasmisor, el sensibilizador de energas
descargadas o reprimidas. Todo lo que ocurre en l es aqu y ahora, y con eso
Estas proyecciones se refieren no slo a aspectos vividos como desagradables trabajamos, con lo que logramos juntar, la energa dispersa. Es con esta energa
para el sujeto, sino tambin a aquellas partes de su cuerpo y de su sensorio, que que nos movemos, nica que nos permite sentir nos cuenta, y rescatar as esa
de algn modo vive como no propios, lo que Perls llam "hoyos de la parte negada y bloqueada que alienamos en nosotros. Cuando los seres humanos
personalidad Es as, que muchos "ponen (proyectan) sus ojos en los dems, en se encuentran en un grupo con el propsito expreso de ser verdaderos consigo
lugar de usarlos para mirarlos, y de ste modo, lo que consiguen es sentirse mismos y con los dems. Cuando disponen de tiempo suficiente para que esta
mirados y hasta perseguidos por los otros. Si lo que "donan son sus miembros, verdad florezca. Cuando estn atentos a su proceso interno y a sus
entonces, se sienten verdaderamente paralticos, pretendiendo que los dems circunstancias, y nada que venga del pasado irrumpe, ni se entregan a ningn tipo
provean a sus necesidades. de especulacin acerca del futuro. Cuando se permiten sumergirse totalmente en
su "aqu y ahora". Entonces, pueden permitirse el gozo siempre renovado de estar
En terapia gestltica tambin nos interesamos en que el individuo se vea libre de vivos, crecer en cada contacto, responsabilizarse por entero de su propia vida y
introyectos. Esto significa que ideas y opiniones que no le son propias y que de !as consecuencias de sus propios actos y palabras. Y sentirse creativos
fueron "tragadas" por l sin digerir (rdenes maternas, modos de vida familiares), individualmente y con los dems.
pasen a ocupar precisamente los huecos; dejados por las proyecciones, y de
Claro que sto implica dos condiciones: Verse libre de los fantasmas del pasado,
este modo, la personalidad se ve afectada por una estructura de seudo
y estar entrenados en el arte de conectarse con sus sentimientos y sensaciones
integracin, inarmnica y desvitalizada.
para saber darles curso sin interrumpirlos y con plena conciencia.
Nos importa tambin, el reaprendizaje de nuevas formas de conducta ms.
Es as, que los ayudarnos o sumergirse en el mundo de la vivencia, a agudizar los
Acordes con su situacin actual. Frecuentemente, observamos que nuestros
sentidos y a hacerse dueos de su imaginacin, a transformar los "como si" en
pacientes echan mano a conductas que antes les fueron tiles, y hasta lograron
"s", a actualizar sueos y recuerdos. Los fantasmas que acosan al neurtico son
mantenerlos con vida, y que hoy no les sirven para nada o les impiden manejarse
sus odios histricos (introyectos de los que no se ha liberado an) y que no per-
con la flexibilidad que las distintas situaciones del vivir requieren,
cibe como tales. Muchas veces revisten la forma de un amor inadecuado, sumiso
Por eso concedemos importancia al entrenamiento motor, sensorial y lingstico y sin fuerzas.
que abren nuevas perspectivas al reaprendizaje de diferentes maneras de ser y
Sus miedos irracionales estn tambin vinculados a sentimientos histricos; y sus
estar en el mundo.
objetos, son los mismos que los de sus odios: las tremendas, sobrecogedoras,
amadsimas y terrorficas figuras de pap y mam.

- 13 -
La frustracin, vivida como destino, pertenece a esa lejana poca, y es trada hasta estn sintiendo (... "vos me das dolor de cabeza", "te siento tan desamparado").
nuestros das a travs de una firme vocacin de fracaso. El desvalimiento, real "all
y entonces", slo es la forma que revisten los hoyos de la personalidad "aqu y En todo caso con lo que nos encontramos es con el bagaje del paciente. Lo que l
ahora". (No tengo brazos, no tengo piernas, dame de comer en la boca que as no nos trae: la queja. Lo que nosotros vemos: su cuerpo. Y siempre lo que acontece:
me muero). A travs de sto, los psicpatas, por ejemplo, desarrollan el encanto su relacin consigo mismo, con el terapeuta y con el grupo.
que creen necesitar para sobrevivir. Siendo el proceso psicoteraputico, un
proceso de darse cuenta,"siendo el objetivo de nuestra terapia, como el de todas, El terapeuta, a su vez, dispone de un repertorio variado, propio de la terapia
la integracin del hombre, esto es la aceptacin de sus aspectos rechazados y la gestltica, de trabajos propiamente dichos (ver "Quejas"), un peculiar modo de
liberacin de aquellos que no le ataen, nosotros nos valemos de recursos que trabajar los sueos, las fantasas dirigidas y los juegos y ejercicios.
facilitan este darse cuenta, a travs de nuevas formas de expresin que no
privilegian la verbal. La diferencia entre paciente y Terapeuta es formal, circunstancial y temporal. Por
debajo de las apariencias, el encuentro de unos y otros produce modificaciones
La terapia gestitica en los grupos ha do enriquecindose desde los primeros profundas en ambos. Las herramientas que Castaneda pone en manos riel
trabajos de Perls hasta nuestros das, Para Perls el grupo slo exista como teln guerrero (hombre que quiere llorar la batalla del conocimiento y conquista de s
de fondo, el campo donde se desarrollaban sus experimentos. Su visin mismo) son las mismas para terapeutas y pacientes. Ambos cuentan con el miedo
consideraba como figura, nicamente a la persona que ocupa "la silla caliente", que es inherente a esta clase de lucha. El respeto por el enemigo (conocimiento de
las propias resistencias), el estado de alerta (los ejercicios para fortalecer la aten-
quien realizaba su trabajo, fuera ste la resolucin de una queja o el trabajo con
cin sirven a este fin) y la confianza en s mismo, que en el terapeuta va creciendo
sueos. El grupo slo tena para Perls cualidades de figura, durante los breves
a la par que la de su paciente, que nace y se fortifica. El alta, pues, es para ambos.
instantes en que lo utilizaba para facilitarle al paciente de turno, e! cierre de sus
gestalts incompletas, a travs de la posibilidad de una creciente discriminacin en
Jams nos permitimos interpretar o explicar, porque el mundo del otro nos est
la ecuacin figura - fondo. Zinker conceptualiza explcitamente su tarea como
vedado: slo podemos inferir algo a travs de nuestras propias vivencias como
terapeuta gestltico, a travs de una dinmica en la cual el grupo slo oca-
personas. Adems, el flujo constante figura-fondo, que es el devenir de nuestra
sionalmente acta como fondo, y la alternancia figura-fondo es rica, variada y
experiencia sensible, no puede ser fijado en el tiempo para ser explicado, sin que
permanente. Nosotros, en nuestra tarea, nos sentimos ms cerca de Zinker. Con
ello detenga el ritmo de la vida. Porque "figura" es lo inmediato, lo que surge del
los sueos, por ejemplo, nos movemos permitiendo que en un primer momento,
interior del ser o de su circunstancia ambiente. Figura es la experiencia, el aqu y
funcionen como propiedad exclusiva del soante, para luego instrumentarlos como
ahora y la necesidad. Es lo que clama por su inmediata satisfaccin, tan slo para
propiedad de todos y creacin colectiva.
volver a integrarse a un fondo del que ya surge una nueva figura. Este ritmo, esta
alternancia figura-fondo, es la vida, y nosotros llamamos gestalt a esta alternancia.
El trabajo de psicoterapia en un grupo, contempla dos aspectos: el de tratamiento
propiamente dicho, que implica el trabajo sobre la neurosis (proyecciones,
Como terapeutas, nuestra tarea es contribuir al cierre de las gestalts que quedaron
introyecciones, confluencia, re-troflexin, deflexin, que son los bloqueos da la
incompletas, es decir ayudar; a acabar con las situaciones inconclusas. Como
energa segn Perls), y el de la reestructuracin de la personalidad a travs del
seres humanos, nuestra tarea es la de todos: volver al fondo lo que nunca debi
aprendizaje de un modo de vida ms pleno, que incluye la posibilidad de una
salir de all, porque no se nutre del aqu y ahora.
utilizacin ms amplia de las propias instancias.

Nuestro rol como terapeutas gestlticos, es el de acompaantes del proceso,


inductores de experiencias, proveedores de pautas elementales y guas de los que
llamarnos "trabajos" (dilogos con los aspectos introyectados o proyectados por el
sujeto). As los ayudamos a distinguir entre sensacin o sentimiento por un lado, y
pensamiento, juicio y fantasa por otro: Les alentamos tambin a asumir
responsabilidad plena f r e n t e a lo que sienten, sin ceder a la tentacin de
atriburselo a los dems, y menos an a imaginar que no son ellos mismos los que

- 14 -
HERRAMIENTAS:
DE LAS QUE USA EL TERAPEUTA

Escucha, puedes hacer sto


por m, tu magia? Me puede
hacer retroceder?

P. Ouspensky

El encuentro entre paciente y terapeuta constituye un acto de amor y crecimiento y


tambin es una lucha que se libra en un campo al cual ambos acuden unidos de
las herramientas que les son propias. El terapeuta dispone del dilogo entre
opuestos que llamamos "trabajo", de la posibilidad de poner en escena, a modo de
personajes, los elementos que integran el sueo, de utilizar las ensoaciones
diurnas en las fantasas dirigidas, de juegos y ejercicios.

Estas herramientas so usan de manera diferente, segn el momento de la terapia y


el objetivo que nos propongamos, el lugar donde estamos y la peculiar manera de
bloquear su energa, que utiliza nuestro paciente. Como no se nos ocurrira salir a
pescar con un matamoscas, no consideramos oportuno usar una fantasa dirigida
en la primer entrevista, o determinados juegos vlidos en la experiencia de
laboratorio, para trabajar en un grupo de terapia.

Disponernos de estas herramientas para accionar de tres modos diferentes, que


son utilizados en forma sucesiva y alternada y a veces simultneamente. Estos

- 15 -
modos de accionar son: la catarsis, el trabajo especfico con los bloqueos de la Grupo: (A coro) Y sta es mi existencia. (Carcajada general)
energa y los reaprendizajes. Terapeuta: Dejan que Nora se arregle sola con su sueo.

El primero responde a lo anecdtico, que tiene que ver con !a angustia de este Nora: Pasa un automvil, y alguien, creo que una mujer, arroja
momento del paciente, y fundamentalmente con e! fina! de un "trabajo" que se una hermosa cartera nueva sobre la basura. No recuerdo ms
resuelve en explosin. Cuando trabajamos con los bloqueos de la energa, lo
hacemos tanto con la ancdota corno con la estructura neurtica. El reaprendizaje Terapeuta: S la cartera
va ms all de la mera neurosis y tiene que ver con los "hoyos de la personalidad", Nora: (Acomodndose como cartera) Soy linda y nueva. No soy nada espectacular.
con los aprendizajes que la vida no ofreci, con nuestra concepcin de modo de Soy ms, por lo que significo que por lo soy. Aqu estoy entre la basura, esperando
vida gestltico. que me vengan a sacar. La que me tira no da la cara, lo hace por detrs.
(Al or sto, Alicia, una chica del grupo, se yergue Sonrojada, los ojos brillantes y la
expresin de mucha rabia, parece que va hablar, pero a una seal del terapeuta,
INDUCCIN A LA CATARSIS vuelve a reclinarse, contra los almohadones mientras las lgrimas le corren por la
cara.
La capacidad de un individuo de expresar sus emociones por va de la catarsis, es Nora: (Sigue) Soy blandita, soy clida, soy de color marrn, chatita y suave. Tengo
un elemento importante para nosotros, que tratamos de detectar en la primera cierre y una tira muy larga. Estoy aqu sobre la basura. Terapeuta: S la basura
entrevista y que nos preanuncia la mayor o menor dificultad con que nos tropeza- Nora: (Arrojndose desmaadamente en el piso) Soy una gran superficie sucia,
remos en el curso de la terapia. soy informe. (Alicia sigue florando) Soy negra, soy oscura. Estoy encerrada. Nadie
me distingue
Obviamente, no siempre est presente, ya que existen personalidades que Terapeuta: Har un dilogo entre cartera y basura
difcilmente puedan acceder a ella, las personalidades obsesivas, por ejemplo. Lo
Nora-basura: Me molesto que te destaques. A vos te miran y a m no. Quiero que
que est presente, desde el comienzo mismo, es el anhelo del terapeuta de que su te vayas, ste no es tu lugar. Si te quedas voy a ensuciarte.
paciente llegue a ser capaz de mostrarse como el ser dolorido que es, y
Nora-cartera: Yo tampoco quiero estar ac. No quiero mezclarme con sto que sos
probablemente tambin lo sea del propio paciente, que intuye que su camino hacia vos. Yo tengo que estar en otro lado. Yo no puedo salir sola. Me tienen que sacar.
s mismo, pasa por la quebradura de su armazn rgida. Quiero que me cuiden y que no me ensucien, que me quieran y que no me tiren.
Nora-basura: Quiero que te vayas. Si no te vas, te ensucio. Te vas a tu lugar o te
La catarsis, pues, est presente en esta primera entrevista como un hecho real o
vens conmigo.
un anhelo. En todo caso, como propuesta teraputica.
Nora-cartera: Yo me quiero ir, pero no me puedo ir sola, no puedo moverme.
Tengo que estar esperando que -me vengan a
La catarsis es tambin, un fin en s misma, cuando, corresponde al momento final
buscar.
de un trabajo. En el captulo correspondiente a "Quejas veremos que el "darse Terapeuta: Te das cuenta de algo?
cuenta" del paciente no es una mera constatacin intelectual, sino una profunda Nora: (llorando) S, me encerr a m misma en un callejn sin salida
reaccin organsmica plena de emocin y movimiento. La posibilidad de una Terapeuta: Decselo a Nora:
reaccin catrtica en grupo, es mucho ms frecuente que en el curso de una Nora: Nora, te metiste en un callejn sin salida. Tens que encontrar
terapia individual, debido al juego mltiple de proyeccin-identificacin. La vuelta
Nora: Aydame! (Llora)
Ejemplo: El sueo de Nora Terapeuta: A quin le peds ayuda?
Nora: A mam! (gritando) Mam! Mam!
Nora es una muchacha que se auto desvaloriza permanentemente, tanto, que el Alicia: (Llorando) No va a venir No oye!
grupo, afectuosamente burln, le hace coro algunas veces. Nora: mam!
Nora: (actualizando su sueo al contarlo) Estoy parada cerca de un montn de
basura.

- 16 -
Terapeuta: Decile a tu mam lo que quers de ella.) (Ponindole en frente un Terapeuta: (Soltando el abrazo) Tenes alguna idea mejor para salir de sta?
almohadn) Nora: (Llorando) No te enojes, por favor! No s qu me pasa.
Nora: Mam, estoy en la basura. Ac me dijiste que deba estar, Pido ayuda y cuando viene, la desvaloriz. Estoy cansada de este juego y no s
estoy sola como vos queras, quers que vuelva a vos? como acabarlo. Alicia: (A la terapeuta y a Nora) Me dejan a m? Terapeuta:
Terapeuta: Transforma tu pregunta en afirmacin. (Retirndose del centro) Te parece bien, Nora? Si, Alicia, pasa.
Nora: Sola estoy bien. No voy a darte el gusto. Puedo estar muy Alicia: Nora, me qued enganchada con una frase que dijiste cuando contacte el
bien sola sin vos. (Llora abrazada al almohadn). sueo: la que me tira no da la cara, lo hace por detrs" (Nora asiente. Alicia
Terapeuta: Ests segura de lo que ests diciendo? acomodndose un almohadn frente a ella) Mam me tirs sin dar la cara. No
Nora: No, pero debe ser as. Tengo que liberarme de una vez por puedo pelear con vos, sos dulce y amable por fuera, pero si confo en vos me de-
todas. cs cosas tan jodidas... Y lo peor es que tardo en darme cuenta de que me hers, y
Terapeuta: Cambia "tengo" por "elijo... no puedo reaccionar nunca.
Nora: Elijo liberarme. Alicia: (Mudndose de sitio, ocupa el lugar de su madre) Hijita, si todo lo que hago
Terapeuta: (Que se fue aproximando lentamente a Nora, a quien mantiene lo hago por tu bien. Yo te elijo la ropa porque vos no tenes buen gusto, y te
suavemente abrazada contra s) Seguro que quers liberarte? (Aumenta la aconsejo sobre tus amigos para que no vayas a tener sorpresas desagradables.
presin del abrazo). Alicia: (Se pone enfrente) i Oh, mam! i Ya basta! Estoy cansada de tus crticas!
Djame en paz! (Con cada frase va dando un golpe sobre el almohadn)
Nora: (Llorando, se acerca a Alicia y la abraza) Ay, Alicia, de cuntas cosas me
doy cuenta ahora! i Yo soy igual que tu mam, igual que la ma! Yo tambin tiro la
piedra y escondo la mano, yo tambin pido ayuda y la desvalorizo. (Ahora mirando
a todos, mientras sostiene an la mano de Alicia) Que bronca me da darme
cuenta de sto, de que soy blandita y encantadora por fuera.

R e t i r n d o s e al rincn del brazo y la rodilla vida de


que la tranquilicen...
Thomas S. Elliot

Nora: (Todava confortablemente apoyada contra l) Si, ya sera hora de que me


moviera por m misma. Terapeuta: Ya veo. (Aumenta la presin).
Pas en realidad todo esto?
Nora: (Riendo) iOh, no! Ya te conozco la artimaa. Vas a apretar hasta que est Carlos Castaneda
molesta, as lucho con vos para salir. No da resultado.

- 17 -
y tan agresiva de modo solapado, me doy cuenta de que debo aprender a tirar mi Este soy yo" a sus recientes insultos: "Cobarde, este soy yo", Insignificante, ste
bronca de frente como vos, Alicia. Creo que hoy aprend muchas cosas. Gracias a soy yo".
todos.
Introyecciones: Incorporar no es lo mismo que introyectar. Cuando incorporo
TRABAJOS SOBRE BLOQUEOS DE LA ENERGA hago mo lo que introduzco en m. Lo convierto en mi propia sustancia. Para
incorporar debo masticar, deshacer, digerir, transformar, retener lo que preciso
Proyecciones: Aunque en el caso que referimos, lo ms visible es la reaccin para mi alquimia personal y excretar lo que no me sirve. Cuando introyecto,
catrtica "en cadena", lo cierto es que ambas muchachas se beneficiaron cada una devoro, trago sin discriminar, sin deshacer y conservo el todo funcionando en m a
con el trabajo de la otra, en varios sentidos. Hasta entonces Alicia haba rechazado manera de quiste o cuerpo extrao. EI cimiento est signado por ambos actos.
en Nora "su agresividad", mucho ms visible para ella en su compaera que en si Mientras devoramos a nuestros padres sutilmente los asimilamos al mismo tiempo
misma. Ambas hallan la forma de reconciliarse consigo mismas cuando consiguen y mientras los asimilamos sutilmente tambin fabricamos espacios en nosotros, a
sentirse receptivas y tolerantes respecto de la otra, y la inversa tambin es verdad, modo de compartimentos estancos para conservar de ellos, ajenos a nuestra
se acercan mejor a la otra al rechazarse menos a s mismas. conciencia crtica, aspectos que ni necesitamos ni nos placen.

El proyector empez su carrera siendo" un introyector. Comenz tragndose a Todos los caminos conducen a Roma. Todas las terapias enfrentan en un
mam y pap, pero fundamentalmente se trag sus crticas a l. El proyector es momento u otro del curso, estos dos formidables introyectos: mam y pap. Lo
hijo de una mam y un pap que no gustaban mucho de su retoo y no cesaban de cual no quiere decir que todos seamos introyectores, como modo habitual de
hacrselo saber. As fue como desde el principio, el futuro proyector fue algo as utilizar nuestra neurosis privada para bloquear nuestra energa.
como la suma do las cualidades negativas. Ms adelante se trag tambin las
rdenes. "Vos no debes ser de manera alguna sto horrible que sos". Y entonces, El introyector es aqul que se deslumbra con personas o ideas, que no discute,
finalmente, la aceptacin: "S, mam. Si, pap. Yo no soy mentiroso, Juancito es prueba ni analiza, y se devora hasta la entonacin con que los "maestros" hablan.
mentiroso; y Mara es mala con sus paps, y vos sos un traidor y mi compaero de Una forma de introyectar, como mecanismo habitual, es el "extroyectar". Esto es,
oficina es taimado A veces tendr razn y a veces cometer grandes errores. De rechazado todo a priori, rebeldemente porque s, sin conocer ni experimentar lo
una manera u otra est renunciando a la parte que le toca en la conduccin de su qu se est rechazando. Es casi un mecanismo normal durante la adolescencia,
propia energa, y el resultado es un sentimiento de impotencia para realizar este; doloroso perodo en que todas las armas son vlidas para luchar contra un
cambios por s mismo. pap y una mam que no viven slo en el reino endopsquico sino que alzan sus
moles en el tangible mundo exterior. Muchos ganamos la batalla contra stos.
El rescate de proyecciones es un hecho que promovemos en los grupos, no slo Aquello los interiores, son ms difciles de vencer.
porque es fcil, y por lo tanto, uno de los primeros pasos en el camino de la
integracin que alienta a los siguientes, sino porque adems contribuye El extroyector acta como si sus fantasmas interiores estuviesen corporizados en
grandemente a la cohesin grupal. todo lo que lo rodea, y rechazando al mundo, cree deshacerse de sus introyectos,
sin percibir quede ese modo seguramente se somete a ellos ms que nunca.
Hay un juego que consideramos "clave" en el inicio de un laboratorio, luego de las
presentaciones, y que llamamos genricamente: "Agresiones y echadas". El Al enemigo hay que conocerlo, como dira Don Juan, y lo primero es saber donde
objetivo inmediato es el de "vaciar la zona intermedia", al decir de Perls, sto signi- est.
fica impedir que en el lmite de contacto entre uno y otro de los integrantes, se
establezca y tome volumen un espacio virtual, ajeno a la experiencia. Corresponde Volviendo al sueo de Nora, vemos tambin como para ambas est presente la
a la zona de fantasa recuerdos y "fantasmas. posibilidad de empezar a poner distancia con, un introyecto temible: el de la
disconformidad materna, que ha sido "tragado" como una exigencia formidable a la
Este juego tiene tres etapas, de las cuales la ltima corresponde al rescate de las que no es posible acceder jams. Nada pueden hacer para conformar a mam y
proyecciones. Est descrito en el captulo "Laboratorio". Es hermoso mirar los nada puede hacer el mundo para conformarlas a ellas,
rostros de los integrantes de un grupo cuando leen la trascripcin de lo que fueran
antes sus expresiones verbales hostiles y reconocerlas como propias al agregar.

- 18 -
Esto significa, no slo que lo que se tragaron puede no resultarles conveniente,
sino tambin, y sto es casi peor, que lo que les resultara conveniente, no pueden
usarlo como propio.

En realidad, fueron quedando tan empequeecidas y arrinconadas que empieza a


serles difcil darse cuenta de quines son. Seguramente, ellas mismas son las que
menos se conocen. Los introyectos, solemos bromear, son "contagiosos". Obvia-
mente, lo contagioso es la emocin. Nuestros grupos pasan as la etapa "mam", la
etapa "pap", con diferentes alternativas: "juguemos en el bosque que papito no
est", "matemos a mam", "nazcamos de nuevo", "mamita, nunca me dijiste que
me queras", etc.

Mientras los terapeutas, que tambin somos hijos, vivimos la experiencia de crecer,
de morir, de abrazamos, de pelear con nuestros pacientes, un algo cada vez ms
verdadero y menos "transferencia!" se juega entre nosotros, y es en el grupo, en su
matriz clida y reaseguradora, donde aprendemos todos a despojarnos de aquello
que no somos nosotros mismos, de nuestros introyectos.

Retroflexin Mientras otro drama se va desarrollando en el centro de la habitacin,


esta vez el dilogo entre Pedro y su padre, pleno de reproches y exigencias, de
reclamos y agresin Ricardo, en el "ruedo", se muerde los labios y se retuerce las
manos. Uno de nosotros ya lo ha visto, y la mirada que nos intercambiamos
significa: "Ocpate de l, cuando termine con Pedro". Pedro ha terminado,
cansado, emocionado, y sus compaeros se acercan para tocarlo, para estar cerca
.
de l. Ricardo est plido y alejado.

Ricardo: No s contra quin luch. Ni qu motivos tena. Vos te diste cuenta de que
El ms fornido de nuestro "staff", se le acerca y le ofrece un brazo: "Hacmelo a
yo estaba con bronca, yo no lo haba percibido. Ustedes saben, nunca agredo. No
m, deja de hacrtela a vos mismo"
s si no puedo o no quiero. En realidad me pele con mi jefe, que hoy estuvo est-
Ricardo no se hace rogar, y ya est rodando por el suelo con su terapeuta en un
pidamente injusto, con Marta que hoy me cargose con los chicos, con el
feroz forcejeo que representa un gran esfuerzo, fsico. Todava no sabemos contra
colectivaro, que arranc tan de golpe que casi me mato... No s, me o pele con mi
quien lucha, slo que tiene mucha rabia, que ya no est plido sino rojo, y que no
vida de todos los das, con mi mansedumbre, con mi "Ricardo buenazo"... Me pele
se muerde los labios sino que insulta.
y te gan... Gracias, viejo.
El terapeuta tambin se enardece y uno de nosotros le toca el hombro para que se
calme. Este no es "su" trabajo, sino el de nuestro paciente. Nosotros disponemos El retroflector renuncia a actuar sobre el medio y vuelca sobre si mismo su propia
de otro mbito, nuestras propias reuniones, para nuestros propios conflictos. Le energa, creando un canal de circulacin dentro de s, como un crculo vicioso, sin
lucha termina tan bruscamente como empez, ambos se abrazan, se ren y toman salida hacia el ambiente, levantando barreras de aislamiento entre l y el mundo.
agua. Luego nos preparamos a escuchar Pareciera que su refrn rector fuera "Hacerme a m mismo lo que no me atrevo a
hacerle a los dems

- 19 -
Deflexin: Este trmino es usado por Polster para indicar un modo de utilizar la
energa, sin fuerza para dar en el blanco, en el contacto. Si bien existe un modo no
patolgico de contactar deflexionando (el lenguaje de la diplomacia, por ejemplo),
el deflector patolgico elude el compromiso del contacto enfriando la relacin,
hablando por dems, riendo sin motivo, restando importancia a lo que oye o dice.
El sentimiento es de hasto.

El deflector es un "tontito al tum-tum". Acta sobre el medio, pero carece de la


posibilidad de comprenderlo. No se identifica, o bien, no se reconoce en sus
identificaciones. Proyecta, pero no exactamente aquellas cosas que le molestan de
s mismo, sino a la manera de un vendaval que revolviera sin tino ni concierto,
cualquier tipo de imgenes que puede abrigar de s mismo. A veces, acierta por
casualidad, pero es incapaz de invertir la suficiente capacidad de energa para
obtener una retribucin razonable.

El resultado es el fracaso de la empresa. Trabajar con el deflector, exige pericia e


imaginacin del terapeuta, ms que las que son necesarias para manejar la
neurosis presente en otros bloqueos. A veces, es til invitarlo a orselo sumergirlo
en juegos de gran vaivn figura-fondo con el grupo. En el captulo "Juegos", hay
descritos algunos que son tiles para enfrentar estas dificultades.

Confluencia; As como los ros que son afluentes de otro; asocian su caudal para
marchar por un mismo cauce, las personas confluentes asocian su energa
psquica a la de otra con ms vigor, o a la de su medio. Porque es ms fcil. El
propio cauce exige fuerza, vencer dificultades, abrirse paso, hacerse notar, el
confluente no est dispuesto a pagar a precio de esfuerzo su libertad, y cuando
puede, fuerza a otros a unrsele para sentirse acompaado y darse confianza.

Lo que realmente persigue es todo lo que l no es y hacerse cargo de su propia


emocin le impone el esfuerzo de diferenciarse de les otros. De ah que se muestre
suave y aquiescente con los que l puede visualizar como "ros principales'', sin
ofrecer competencia ni discrepancia. As se cercena a s mismo el ms pequeo
gesto contrare al otro, deshacindose en disculpas y amabilidades. Bsicamente,
es un apaciguador.

Con lOS ms pequeos, en cambio, se pone como ejemplo y los invita a asociarse
a l en pensamientos y sentimientos. La confluencia resulta as "hereditaria" y a
veces "contagiosa". La emocin personal que ms fcilmente surge en el
confluente, es el sobresalto ante la posibilidad de haber 'pecado". Y el no
confluente, que debe permanecer a su lado, por ejemplo en el grupo de terapia, lo
que experimenta es hasto y trivialidad.

- 20 -
Cuando la relacin con el otro se ve perturbada en el confluente, ste experimenta Prctica (ejercitacin) y aprendizaje (experimentacin) son utilizados para trabajar
un sentimiento de culpa que es con el que se presenta a terapia. Cuando le sobre un aspecto o varios de ellos, en forma combinada.
enfrentamos con el resentimiento subyacente a su culpa, con sorpresa advierte que
no lo haba registrado. Y en general admite alivio luego de confeccionar su lista de Reaprendizaje de la atencin
agravios.
Entre los pilares que sustentan nuestro discurrir como personas que somos,
As como el confluente se funde con el otro en el punto de confluencia, siente que habitantes de una gran urbe, en este mundo y en esta poca, la atencin es uno de
tambin confunde y pierde los lmites de sus distintas partes. Mientras traga para nuestros grandes abandnicos. Vivimos de prisa, ajenos al instante que transcurre,
no dejarse llorar y asegura que no '"puede" hacerlo, quizs hasta llegue a decir que corriendo, para que maana no se convierta en pasado maana, y logrando en
no siente tristeza sino dolor de estmago, y muchas veces es cierto. cambio que sea suplantado por ayer. El hoy so esfum sin el recuerdo del sabor
del caf que bebimos, del rostro que se cruz en nuestro camino, de las emociones
El confluente es un buen candidato para las enfermedades psicosomticas. Si que postergamos para cuando "haya tiempo".
confunde bronca (hacia afuera) con la necesidad de mantener una conducta social
adecuada, "tragndose" sus gritos o palabras injuriosas (hacia adentro) es posible
que de esta accin derive un espasmo del tubo digestivo (clico), y an, que se La atencin es el instrumento de la concentracin. La dispersin es otro de los
perturbe la qumica de la digestin, con la consiguiente autofagia (lcera). Se come sinnimos de neurosis. Interrupcin dispersin; neurosis, igual a vida
sus sentimientos, se come la expresin de sus sentimientos, se come la mucosa de desperdigada, no vivida, suspendida o postergada. Cuando centramos nuestra
sus rganos, se "come" a "s mismo". atencin en algo, este algo cobra sentido para nosotros, y dialcticamente,
nosotros: cobramos sentido para nosotros y ese algo. Todos gozamos, casi sin
Es a travs de una paciente confrontacin del individuo con los dems integrantes dificultad de lo no habitual, de lo que escapa a la rutina, como un viaje, un relato
del grupo, y especialmente en la actividad ldica, (que por sus caractersticas de extico, o un hecho inslito. Es que al recorrer una ciudad no conocida, prestamos
intensa participacin colectiva, atempera las ansiedades que la alteridad despierta), atencin, al saborear una comida nueva hasta cerramos los ojos para que ningn
que el individuo confluente va organizando sus lmites, y hacindose capaz de otro estmulo nos distraiga de ste.
trazar sus propios caminos.

Prestar atencin es lo mismo que agregar minutos a !a hora, y horas al da. El


TCNICAS PARA EL REAPRENDIZAJE tiempo tiene otra dimensin cuando vivimos percibiendo y registrando. La
posibilidad de hacernos cargo, de ser responsables, aumenta cuando reconocemos
El grupo psicoteraputico ofrece el mbito ms propicio al reaprendizaje, que sea como propios nuestros sentimientos, pensamientos y actos, por el mero expediente
posible imaginar, adems de la vida. de prestarles atencin. Cuando entrenarnos nuestro lenguaje, lo que hacemos es
prestarle atencin o lo que decimos y a cmo repercute en nosotros. Prestar
Si bien se da en l, en determinadas situaciones, un reaprender espontneo, atencin es e n t r e n a r la atencin. Los budistas hablan de yoga, para referirse a
producto del encuentro de personalidades diferentes, nosotros organizamos el este vivir prestando atencin.
reaprendizaje en distintas reas, como instrumento valioso de que nos provee la
tcnica de la terapia gestltica, en cuya filosofa se apoya. El yoga de la comida es un acto de accin de gracias, a la manera del ritual
cristiano, pero desde el acto de comer. Consiste en llevar a la boca la primer
Este quehacer lo aplicamos fundamentalmente en el grupo, y en mucha menor cucharada del alimento, en total silencio y recogimiento, con los ojos cerrados, y
escala en psicoterapia individual, ya que lo empleamos para capacitar al individuo, conservar este bocado el tiempo suficiente, prestando atencin a los sabores,
en el mejor uso de lo que posee como organismo y como ser humano, en relacin texturas, temperaturas, consistencias, olores, mientras se mastica lentamente.
consigo mismo y con los dems. Consiste, ni ms ni menos, en "ser" el alimento. Cada acto importante de la vida
El reaprendizaje, como recurso teraputico, incluye la prctica y el aprendizaje a tiene su yoga, el yoga del amor, ajeno a la bsqueda del placer instantneo.
travs de la experimentacin.

- 21 -
El yoga de la amistad, entre jvenes que comparten la exaltacin del deporte y el c) Se elige el orden que tendrn como pareja.
riesgo. Hasta el yoga de la muerte, en el que el morir no es un acto de soledad, de d) Cada uno elije el A y B que la constituyen.
terror o de inconciencia farmacolgica, sino un acto de conciencia plena, y de
ayuda en la aceptacin entre personas amantes. e) Los A describen la mayor cantidad de detalles que recuerden de la ropa,
En su libro "La Isla", sitio utpico, donde es posible vivir de acuerdo a claros peinado y accesorios que usa B.
principios de verdad y belleza, Aldous Huxley propone unos pjaros parlantes, los f) Los B describen la cara de A, dando indicaciones sobre mediciones con estas
mirlos 'Mynah", que los habitantes adiestraron para que les recuerden la necesidad caractersticas: Distancia en cm. aproximados, del nacimiento del pelo al puente de
la nariz. Distancia puente base de la nariz. Distancia base de la nariz-mentn. Esto
de prestar atencin a su existencia. "Atencin" gritan los pjaros y tambin
es planos horizontales. En el plano vertical, imaginar uno central que atraviese el
"Atencin a la atencin". Y nosotros, como los pjaros, y tambin con conciencia
rostro longitudinalmente, dividindolo en dos meridianos a derecha e izquierda.
de hombres, nos la pasamos gritando "Atencin" desde las pginas de este libro, y
Medir el ancho sien-meridiano, pmulo-meridiano, comisura labial-meridiano, y el
en nuestro trabajo, y sto quiere decir que nos lo gritamos nosotros mismos, para
ngulo exterior del maxilar inferior-meridiano.
no olvidarnos, en la fcil enajenacin de la tarea, que estamos vivos y que somos
g) Darse vuelta, corregir visualmente, cerrar los ojos, repetir, cambiar A por B.
nosotros.
3) Seguir el dedo.
Reaprendizaje Sensorial
a) Dividirse en parejas.
Ejercitacin visual b) Elegirse A y B.
c) A con su propio ritmo bien neto, traza en el aire una figura geomtrica regular y
lo bastante amplia como que B siga el dedo de A en su recorrido sin dificultad. Es
1) Mirando un cuadro
imprescindible que el ritmo sea siempre igual y sostenido, y no muy complejo. Al
cabo de dos minutos B debe cerrar los ojos, e imaginar, recordando, el dedo de A,
(Muchacho de Circo, de Picasso, obviamente puede ser cualquier otro). que debe seguir su trazado en el aire, Observando el rostro de B, debe ser posible,
a) Mralo atentamente y descrbelo. bajo sus prpados, ver el movimiento de los globos oculares. Al cabo de un minuto,
b) Cmo es esa persona, sexo, edad.
se le pide a B que abra los ojos y constate si pudo seguir o no, sin ver, el dedo de
c) Describ sus ropas: Ropas de acrbata, una toalla sobre los hombros.
A. Se cambia A por B y se repite el ejercicio, hasta conseguir que salga bien.
d) Describ su expresin: Fatigada, ausente, est traspirado, cabello pegado a la Luego de cada intento A y B deben comunicarse lo que han sentido.
rara.
e) Describ alguna caracterstica fsica: Hombre; y brazos anchos, piernas finas, 4) Observar un segmento de la habitacin encuadrado en el espacio que
dejan las manos ubicadas a modo de visor, delante de los ojos.
t) Imagnate su trabajo: l espectculo. Bailarn no puede ser por caracterstica
muscular. (La danza engrosa las piernas}.
g) Qu acaba de pasar? Termin una funcin o ensayo. Ropa, fatiga, a) Mantener las manos siempre en la misma posicin, observar atentamente.
transpiracin y toalla. b) Cerrar los ojos, reproducir mentalmente, del modo ms fiel posible.
h) Caracterstica de la iluminacin. De dnde procede. Observa las sombras. De c) Abrir los ojos. Comparar y volver a cerrar.
acuerdo a eso cmo es la habitacin. Dnde est ubicada?, d) Seguir corrigiendo Hasta que no queden ms detalles.
i) Dnde est Picasso? e) Compartir la experiencia.

Ejercitacin auditiva
2) Observar las personas que forman parte del grupo hoy.
1) Presentarse a los dems: Yo soy mi voz.
a) Dividirse por parejas. Directamente me hago cargo de las cualidades de mi voz.
b) Cada pareja se sienta espalda contra espalda.

- 22 -
Paula sentndose delante de cada uno: Yo soy grave, soy profunda. Tengo amplia
resonancia. Cuando te quiero expresar mi amor, me quiebro. Delante de vos me
agrando. Si te quiero mentir me hago chiquita, hasta casi desaparecer...

Este ejercicio no slo obliga a escuchar la propia voz, implica tambin el rescate
para la persona entera de cualidades atribuidas a un nico aspecto de la misma, y
por lo tanto, alienadas y puestas fuera (mejor dicho, dentro).

2) Ruido de afuera, sensaciones de adentro.

a) Se invita a los integrantes del grupo a ubicarse acostados, con los ojos cerrados
y se les dan algunas indicaciones para facilitarles el relajamiento muscular.
b) Se les indica que presten atencin a los ruidos que oyen, evitando ponerles
nombre: automvil, tren, canto de pjaros. Se les explica que traten de atenerse
slo al sonido, que no se creen imgenes visuales.
c) Ahora deben concentrarse en sus sensaciones fsicas. Deben recorrer su
cuerpo tan exhaustivamente como les sea posible, registrando cuanto hallaren a su
paso.
d) A intervalos regulares (habitualmente dos minutos) se les hace cambiar su
atencin. Fuera-dentro. (Ruidos-sensaciones).
e) Se les pide que comenten entre s la experiencia. Cul les result ms fcil?
Recorrer su cuerpo o escuchar los ruidos de afuera? Cul creen que dur ms?
En cul se distrajeron ms?

3) Orse la voz. Hablar en jitanjfora.

a) Pedir a alguien que repita lo que dijo, sin usar palabras, slo el sonido de la voz
con la boca abierta o cerrada.
b) Pedir a los dems que expresen que sintieron.
c) Ejercitar en parejas un dilogo con este mtodo. 0 con el de decir palabras que
nada significan en idioma alguno (jitanjfora), Cono "Troxplet allinfar, cateli?", y
compartir con el grupo la experiencia.

Ejercitacin tctil

1) El juego de las manos.


a) Pedimos a los participantes, en nmero par (si no hay se incluye a uno de
nosotros) que deambulen por la habitacin con los ojos cerrados, con suavidad, los
brazos cados a los costados* de! cuerpo.
Les pedimos que vayan modificando su rumbo, de modo de ir perdiendo nocin del
lugar en que se encuentran. Previamente les hicimos despojarse de anillos, relojes
y otras alhajas, as como levantar las mangas de sus ropas, con el objeto de no

- 23 -
facilitar la identificacin de las personas. 2) El juego de las cabezas o los hombros, o los codos, o las caderas. Es
b) Les pedimos que avancen con las manos extendidas, para encontrarse con parecido al anterior, slo que mientras deambulan a ci gas, les pedimos que
otras manos. Que traten de hacerlo con el mayor nmero. He manos que puedan, contacten con zonas inslitas de sus cuerpos, como las cabeza o los codos. El
que no traten de averiguar a quienes pertenecen. Les sugerimos que se "sientan" objetivo de este ejercicio est ms vinculado, a "crear clima" de aceptacin y
manos, con exclusin del resto de su ser. Lgicamente este ejercicio se hace en regocijo, que al entrenamiento sensorial propiamente dicho, y lo usamos
silencio, para evitar que puedan reconocerse. A medida que avanzan, les pedimos generalmente en algn laboratorio, como elemento de distensin, posterior a varias
que permanezcan un tiempo ms con cada par de manos que encuentran, tratando horas de "trabajos" individuales con cierta similitud, y denso clima emocional.
de registrar las sensaciones que experimentan. Obviamente, cuando no quedan personas "enganchadas" en trabajos anteriores.

c) Les pedimos que elijan un par de manos (de la misma persona) con el cual Ejercitacin sensorial combinada
quedarse.

1) En la noche de los tiempos.


Generalmente, ste es un momento de ansiedad, (ver relato de Ins en el captulo
"Laboratorio"), por el temor de no ser elegido por nadie, por quedar excluidos. a) Mientras se hace escuchar suavemente, alguna msica preferentemente
Solemos tranquilizarlos con estas palabras: "No te quedes ah. Avanza. En este poco conocida, para que no se sientan arrastrados por alguna meloda fcilmente
mismo momento hay otro par de manos que te est buscando. Segu buscando. reproducirte internamente, se les va dando la primera consigna. (La habitacin
Eso es. Inevitablemente te vas a encontrar con quien te busca. Busca. Date cuenta debe hallarse penumbrosa, y lo ms aislada posible de ruidos exteriores).
de qu ests haciendo en este momento para evitar el encuentro... Fjate si eso es
lo que quers. Si encontraras algn otro modo? "Es la noche de los tiempos... El comienzo de la vida en este planeta. Ustedes,
todava, casi no son nada... Tal vez organismos unicelulares... Carecen ce
sentidos... Slo una oscura sensacin de vida.... (Mientras se les va diciendo sto
d) Cuando se hayan armado todas las "parejas de manos", les pedimos que traten
los participantes buscan corporalmente la posicin que ms se adapte,
de conocer estas manos. Cmo son su tamao. Su fuerza. Su textura. Su
individualmente", a su propia fantasa de cmo es ser un organismo en esas condi-
temperatura. Cada saliencia, cada pocito. "Sigan con estas manos. Qu imaginan
ciones. La mayora elige una posicin fetal. Se les permite permanecer as cinco
que les estn trasmitiendo? Cmo se sienten con ellas?".
minutos. Tal vez ms).

e) "Vamos a hacer algunos experimentos. Prueben trasmitir amistad. Sean tan b) Algo empieza a desarrollarse en ustedes. El olfato y junto con l, la posibilidad
amistosos como puedan con las manos... (Aproximadamente dos minutos por del movimiento. Es un desplazamiento global, sin partes diferenciada guiados por
orden) Sean juguetones... Sean prepotentes. Impnganse, demuestren su ansia de el olfato que los conecta con el mundo y con otros seres como ustedes. (Cada
dominio. Ahora sean sumisos... Sean fros, displicentes... Sean protectores. Fjense inclusin nueva establece la necesidad de permanecer en ella entre tres y cinco
qu les resulta mejor, proteger o ser protegidos? Ahora un ejercicio diferente para minutos, aproximadamente).
cada mano. Con una de ellas, ustedes sern escultores, con la otra, un trozo de
arcilla. Como escultores modelarn una mano, lo ms minuciosamente que c) Ahora disponen del gusto y del tacto labial, adems del olfato... Su
puedan. Como arcilla no tendrn vida ni forma, salvo la que el escultor quiera desplazamiento es menos torpe, pero an no disponen de miembros.
darles... Tmense tiempo... Cuando terminen dganles a las otras manos lo que d) Ahora tienen un tacto global, no diferenciado, en todo el cuerpo, y rudimentos
quieran. Ya saben hablar con. las manos, hganlo, despdanse... Tmense sus de miembros... Se desplazan mejor... Investiguen estas nuevas posibilidades...
propias manos, una con otra. e) Ahora tienen una nueva adquisicin: el odo y junto con l, la capacidad de
omitir algunos sonidos... Adems, sus miembros se van diferenciando, y les sirven
Cmo se sienten? Djenlas caer...Deambulen...Pirdanse en la multitud... para desplazarse mejor y para tocar mejor...
Qudense quietos donde estn... Abran los ojos... Ocupen su lugar en el f) Sus manos son francamente manos, y estn en condiciones de decir palabras
ruedo...Mrense. Compartan su experiencia, contndola a la persona con que se sueltas. Empiecen a buscar la posibilidad de ponerse de pie. Ayuden a otros a
hayan sentido ms confortables al mirarse. pararse...

- 24 -
g) Ya estn de pie... Ahora abran los ojos... (Prendemos la luz) Mrense... Son Reaprendizaje lingstico
hombre y mujeres completos... Disponen; de la palabra... Cuntense esta
experiencia. Por la importancia del tema, consideramos conveniente, desarrollarlo en captulo
aparte. De todos modos, queremos dejar constancia aqu, que consideramos al
A veces, algunas personas se atascan en este ejercicio. Temen el desplazamiento lenguaje verbal, no como un mero vehculo de pensamientos y emociones, es
a ciegas, o el contacto corporal no discriminado. Algunos se angustian. En estos decir, como efecto de una causa, sino tambin como causa, cuyo efecto son
casos, los retiramos del juego y los llevamos aparte, donde puedan permanecer tambin emociones y pensamientos. Obviamente no nos sentimos de la misma
con los ojos abiertos y sin mirar a los compaeros que persisten hasta el final. manera cuando decimos: "Yo no puedo hablar en pblico", que cuando
Luego los invitamos a entrar, a compartir esta experiencia con todos. Si es reconocemos abiertamente: "No quiero hacerlo"
necesario, trabajamos con ellos de modo de cerrar la gestalt incompleta que ha
surgido y que se expresa como angustia. Si tenemos xito, su dificultad Reaprendizaje social
desaparece para experiencias futuras semejantes. Y como en todos los "trabajos",
su bienestar nos indica que han podido volver al "aqu y ahora" del quehacer Usamos este Trmino para referirnos, simplemente, a la relacin del individuo con
grupal. las personas que lo rodean, sus allegados, y algo ms alejado, con los que
constituyen su mbito laboral. Es en este pequeo mundo donde nos inmiscuimos
2) Reconocindose a s mismo. nosotros, con nuestras tcnicas de reaprendizaje de caminos para el encuentro,
Aunque este ejercicio es factible de realizar en la terapia individual, es en grupo donde son ms importantes los sentimientos que los pensamientos.
que muestra sus mayores posibilidades, sensibilizando al individuo y tornndolo
ms receptivo con los dems. Es que a travs del carril abierto por este encuentro Fueron discpulos de Perls quienes llamaron a la terapia gestltica la filosofa de lo
sensible consigo mismo, el sujeto halla la senda abierta al encuentro con los otros. obvio". Esto es la mdula de una concepcin que no separa, al hombre del medio
en que vive, y no aliena, para explicar o analizar ninguna parte de l. As como una
Tcnicamente, conviene realizar este ejercicio con los ojos cerrados, con msica semilla de naranja, no puede sino actualizarse en naranjo, un hombre triste no
suave de fondo, y animar a los participantes a explorarse con sus manos en puede actualizarse a s mismo, sino es en la pena, o su actividad, el llanto, y no en
cuantas posturas imaginen, a fin de hacerse dueos de su propio ser lo ms una serie de conceptos tales como "un hombre no llora", o "slo las mujeres y los
totalmente posible. Promediado el ejercicio, se les puede invitar a que emitan los dbiles lo hacen" o "es mejor rer que llorar" y otras tonteras por el estilo.
sonidos que quieran, si es que quieren, de cualquier manera, como sonidos
inarticulados, palabras, frases, canturreos, siempre que sean propios y no Pese a lo ftil que parece repetir sto tan sabido, lo extrao es observar da a da
canciones ni poemas de otros. Si les hace falta, pueden ensayar gritos, y como las dificultades que tiene la gente para reconocer lo obvio en una situacin dada, o
inevitablemente sto es odo por los dems, se insta a todos a incorporar lo que en otra persona, de lo que imaginan de ello. Obvio es aquello que percibo. Lo que
oyen a su propia experiencia de s mismos. no capto por va sensorial, o sus prolongaciones, las mediciones fsicas y/o
qumicas, pertenece al reino de las ideas y no es obvio.
Reaprendizaje motor
1) Es obvio que. Me imagino que.
El sistema msculo-esqueltico es, a las emociones, lo que la palabra al
pensamiento: su rgano de expresin. Como con la palabra, es posible expresarse a) Se juega por parejas. Primero se eligen A y B. A comienza, observa
o no, tener o no fluidez, disponer de un instrumento de comunicacin, o detenidamente a B y cuando algo le llama la atencin, lo enuncia de la siguiente
bloquearse. La emocin que no fluye por cauces naturales, que no se convierte en manera.
accin, se acantona detrs de las contracturas, hasta que el individuo queda A: Es obvio que me miras sonriente. Me imagino que estars intrigado por lo que
aislado y solo, dentro de lo que Wilhelm Reich llam "coraza muscular", que lo voy a decirte.
separa del mundo. En e! captulo correspondiente a "Lenguaje corporal", varemos B: Es obvio que adelantas el torso para hablarme, que pusiste tus manos en jarra y
como "leemos las "quejas" del paciente, y corno trabajamos con ellas. levantas tus hombros. Me imagino que me ests desafiando.

- 25 -
b) Si uno de los dos da por obvio algo que es imaginario, puede terciar el terapeuta
o posponer esta pareja para un trabajo posterior, si es que se produjo algn
"enganche" con algo no actual. Cuando este juego (su concepto) se maneje con
soltura, propiciamos este otro.

2) Es obvio que. Me imagino que. Siento que. Estoy haciendo. Emilia: Es obvio
que me miras... Imagino que te gusto... Me siento halagada... Estoy arreglando los
pliegues de mi blusa.

En este ejemplo es obvio que Emilia reacciona ms a lo que se imagina que a lo


que es obvio para ella. Darse cuenta de sto no slo provoc en ella una alegre
carcajada, sino que fue revelador para casi todos los miembros del grupo, quienes
reconocieron en s mismos esa caracterstica de dar ms importancia a lo que se
imaginan que a lo que perciben por va de los sentidos.

Esto es vlido an cuando lo que A imagine no se aparte demasiado de la realidad


de B. Tenerlo en cuenta simplifica las relaciones, sobretodo cuando los individuos
se hallan todava presos de sus fantasmas, y el aqu y ahora de sus vidas cede
fugar a figuras que emergen del pasado.

Daniel est fastidiado con Ernesto desde que ste ingres al grupo. Desde su
presentacin slo expres rechazo, y todas las cualidades negativas que le
endos, se neg a admitirlas como propias.

Daniel: Es obvio que te sonres. Me imagino que me ests provocando. Siento


mucha rabia. Estoy frotando mi puo derecho contra mi palma izquierda.
Ernesto: (Retrocediendo) Es obvio que te frotas el puo. Me imagino que quers
pegarme. Me siento... apabullado /asustado. Retrocedo para ponerme fuera de tu
alcance.

El dilogo sigue por carriles no teraputicos: "De qu te res?" "No, no lo hago"


"S lo haces!", en los que no hay tiempo para escuchar y la violencia crece por la
situacin forzada de tener que dar excusas por hechos no obvios. Intervenimos,
quitando a Ernesto del centro y facilitndole a Daniel el trabajo con su Ernesto, (un
almohadn), al que luego de triturar pudo reconocer como a un hermano mayor al
que teme y odia desde nio, y que fuera el favorito de su padre. No obstante estos
descubrimientos, muchos ms hicieron falta para que pudiera hablar con cierta
cordialidad con Ernesto, y no puede decirse que ambos son los mejores amigos del
mundo.
Lo importante, sin embargo, fue que pudo reconocer que su hostilidad no hallaba
razn de ser en las cualidades reales de Ernesto, sino en el mundo de su

- 26 -
imaginacin, que a partir de semejanzas banales (modo de caminar, manera de bien despierto (con los sentidos alerta prestando atencin), con miedo (sto es una
tomar el cigarrillo), construy un edificio de rencor y rechazo sin base alguna. En ubicacin en la realidad del riesgo y pone fin a la omnipotencia), con respeto por el
los' captulos correspondientes a "Juegos" y "Laboratorio", veremos el fundamento enemigo (el riesgo es el enemigo y respetarlo es saberlo evaluar, conocerlo co-
y aplicacin de muchos otros ejercicios, que utilizamos como una manera de nocindose) y con confianza en s mismo.
facilitar, a travs de la vivencia, el reaprendizaje de modos de contacto ms
verdaderos, y que tomen en cuenta los propios sentimientos y los de los dems.

Reaprendizaje del cuidado de la vida

Cuidar la propia vida pareciera que es un don innato de todo ser vivo, pero cuando
hablamos de seres humanos, vale la pena recordar que el hombre es un campo de
batalla, donde libran encarnizados combates, juicios contra prejuicios, "lo que es"
contra los "deberas", los "quiero" contra los "tengo que", y no slo en trminos de
principios de realidad contra principios de placer, ya que muchos principios de
realidad demostraron su inoperancia y poca relacin con la realidad de cada
hombre.
Todos tenemos dentro un "opresor" y un "oprimido", recprocamente vctima y
verdugo en una lucha que acaba con la muerte.

Tambin luchan en nosotros los "aqu y ahora" con los "fantasmas del pasado y del
futuro". A veces parece que vivimos para el placer inmediato, las ganas inmediatas,
sin importarnos para nada nuestro bienestar y felicidad, algo ms mediatos quizs.
Otras veces, pareciera que nos creemos inmortales, que siempre "hay tiempo" para
!a espera y la postergacin.
Los txicos
Lo primero de todo es reconocerlos. Son txicas aquellas sustancias, situaciones, y
personas que impiden nuestro desarrollo Y atentan contra nuestra salud. A ellas
nos adherimos con "pasin de adictos", pese a que su contacto provoca en
nosotros, signos inequvocos de desvitalizacin: sueo, hasto, malestar, desin-
ters, dolencias fsicas. Slo cuando han sido reconocidas como txicos, estamos
en condiciones de luchar contra ellas (Ver "Quejas").

Los riesgos asumidos


El vivir entraa riesgos. El cuidado de la vida es encomendado.
En su mayor parte, a un nivel cortical inferior, para no sucumbir al stress. Ello no
obstante, hay aprendizajes defectuosos en trminos de amor excesivo s riesgo, o
inhibicin exagerada, o in conciencia al "estilo Magoc", el viejito casi ciego de los
dibujitos animados, que atraviesa toda clase de peligros, sin enterarse. Los riesgos
pueden ser de ndole fsica, como el de enfermar o morir. De orden emocional,
como el riesgo de entablar relaciones nuevas, ser rechazado, o amar y tener hijos.
De orden social, como el de exponerse al juicio crtico de otros, trabajar o tener
xito, o presentarse a examen. Carlos Castaneda, en su libro "Las enseanzas de
Don Juan", expresa que el riesgo debe ser enfrentado "a la manera del guerrero":

- 27 -
PAUTAS PARA CONVIVIR EN UN
MUNDO GESTALTICO

Atencin, decan los pjaros!,


Aqu y ahora!, seguan diciendo,
Y tambin, Compasin!
Aldous Huxley

Vamos a enunciar las restantes pautas, tal como lo hacemos al iniciar un


laboratorio o al comienzo de un grupo de terapia. Obviamente, seremos aqu ms
prolijos y abundosos en detalles, que lo que solemos ser en la prctica. Porque
para el paciente es muy fatigoso, y adems, porque las pautas se olvidan con fa-
cilidad, por lo cual resulta ms provechoso darlas sobre la marcha, en especial en
el momento en que alguien incurre en lo que consideramos una trasgresin.

Hablar con, no sobre o de: Vamos a tratar de hacer encuentros permanentes,


sto significa que no nos vamos a permitir hablar "acerca de nada ni de nadie'',
est o no presente aqu. Si lo est nos enfrentaremos directamente a l, si no
tambin lo haremos a travs del truco de imaginarnos que s lo est. (Ya veremos
hasta que punto sto va a ser verdad. Para eso tenemos los almohadones).

Hacerse responsable: Algo muy importante es aceptar que no hago ni digo nada
que no quiero, ni por equivocacin. Que lo que siento, lo siente v no me pongo a
tratar de averiguar por qu es as. Es ms, inclusive puedo afirmar que si no soy
responsable de lo que siento, s lo soy enteramente de lo que digo y hago con lo
que siento, ASI como yo no soy responsable de lo que siento, pues me surge
espontneamente, tampoco lo es persona alguna.

- 28 -
Nadie me hace sentir nada. Soy yo quien lo siente en presencia de tal o cual
situacin o persona. Es importante que pueda reconocer mis deseos de proteger o
incluso de recibir proteccin, sin atriburselos a otra persona. Por ejemplo, no es
vlido que yo te diga "te siento indefenso" ya que o estoy o hablando de mi propia
desproteccin o de mis deseos de sentirme grande protegindote.

Respecto a ser responsable, lo soy tambin, si expreso con toda claridad, un


sentimiento de hostilidad o rechazo y acepto exponerme a la hostilidad de los
otros. Si hago moneras, no estoy hacindome responsable de mi agresividad,
pues disfrazo de humor lo que es bronca, dificultndole al otro el poder devolverme
mi agresin.

Vamos a iniciar juntos un laboratorio o un grupo de terapia, es importante que se


den cuenta de que vamos a proveerles de material, para que ustedes hagan
experiencias, pero la experiencia en s, y an aquello que hagan con la
experiencia, les pertenece como responsabilidad.

Pueden utilizarla para sentirse mejor, para sentirse peor, y estas dos cosas
seguramente les permitirn dar algn paso en el propio crecimiento. Tambin,
pueden utilizar la experiencia, para que no les pase nada y el quedarse tal cual,
tambin es su responsabilidad.

Privilegiar el sentir sobre el pensar: No pretendemos que dejen de pensar. S


que presten atencin a lo que sienten. Lo que sienten puede ser anmico o fsico.
Ambos tienen localizacin en el cuerpo, si no pueden ubicar una emocin en su
cuerpo, no estn sintindola, estn pensando sobre ella.

No juzgar: Traten de quedarse con lo que sientan respecto de alguien. Es No minimizar: Est relacionado con la pauta anterior. No es lo mismo decir: "Me
absolutamente imposible que no sientan nada, pero en todo caso, si no consiguen da rabia lo que decs", que afirmar: "Siento un poquito de rabia". Si es poquito, no
registrarlo, no cambien la situacin por un libre ponerse a juzgar acerca de sus vale la pena mencionarlo, y si es mucho, disfrazarlo slo tiene por objeto impedir la
cualidades buenas o malas. No le sirve a nadie, ni al juzgado ni a ustedes, que rabia ajena.
slo consiguen mantenerse alejados de sus propios sentimientos.
No atemperar golpes: El modo ms Frecuente de atemperar golpes, consiste en
pronunciar un largo discurso lleno de circunloquios, para que lo que quiero decir,
No interpretar: Terminantemente prohibido interpretar. Interpretar significa se deslice subrepticiamente sin que S: note demasiado. Por ejemplo: "A veces,
asegurar que uno conoce las motivaciones del prjimo para hacer o decir lo que cuando te miro, me parece que algunas de tus actitudes no son todo lo lcidas que
hace o dice. La mayor parte de nosotros desconoce la mayor parte de las creo que podran llegar a ser" Traduccin Estpida!
motivaciones de lo que hacemos o decimos. Cul es nuestro mrito, entonces
para asomarnos a vidas ajenas? No interrumpir: Tratemos de registrar qu rodeos damos para no hacer algo. Por
ejemplo, hay quienes tragan reiteradamente para no llorar. Interrumpirse es
No invadir el campo psquico de otro: Primero y fundamental, no consolar, no realizar algn tipo de maniobra para evitar que una emocin siga su curso
abrazar, no decir palabras tiernas, no defender, en una situacin en la que alguien completo, que se resuelve en accin.
precisa estar a solas con su malestar para contactarse consigo mismo. Tambin es
interrumpir, hacer "caritas" al otro para desviar su bronca, impidindole expresar lo No manipular: LA manipulacin consiste en expresar, sin franqueza, una orden.
que siente. Una conduca violatoria del otro, por cuanto le impide ejercer su voluntad con
libertad, y se ve generalmente entrampado haciendo algo, sin darse cuenta si lo
desea o no. El que lo manipula no se est haciendo responsable ni arriesga su
No. disculparse: Est ntimamente relacionado con hacerse responsable. Si te relacin con el otro.
agredo y luego me disculpo, no te dejo en libertad de agredirme. Creo una
situacin falsa.

- 29 -
PAUTAS LINGISTICAS "Cualquiera tiempo pasado fue mejor..." (Lo cual, contradiciendo a Manrique, no es
verdad, ya que la memoria es selectiva, an tratndose del pasado).
Las pautas lingsticas, al igual que las anteriores, no tienen ms objetivo que
inducir una creciente conciencia de responsabilidad sobre las propias vivencias, Exigencias: Tengo que- tendras que- debo- deberas- es necesario- es menester-
facilitando la permanencia en el aqu y ahora de la situacin. es preciso- etc.
Debo ser considerado con los dems (Elijo o no elijo, ser considerado.
El lenguaje verbal ha sido usado, y en sto hay una larga prctica, para mentir y Es preciso que te comportes con correccin (Acepto o rechazo esta regla de
mentirse, concientemente o no tanto. Y lo extrao es el camino de ida y vuelta que acuerdo a lo que significa para m, y siempre que coincida con lo que siento
siguen las palabras, ya que no slo son vehculos de pensamientos o sentimientos, verdadero).
es decir efecto, sino que tambin los inducen. De este modo se comportan como Tengo que escribir sobre mis experiencias (Elijo hacerlo... y sta eleccin me da
causa. Como tal, es que consideramos tan importante un hablar apropiado, es placer, mientras que si la vivo como un "tengo que" slo experimento agobio).
decir, totalmente ajustado a la verdad circunstancial del sujeto, en su aqu y ahora. Si construyo la oracin utilizando los verbos de querer, elegir, etc. ocurre que me
Lo que diga ser tambin condicionante de lo que sienta y haga con lo que sienta. es fcil darme cuenta si realmente elijo o quiero lo que estoy afirmando hacer, o
nada tienen que ver conmigo. "Elijo, quiero hacerlo?. Respuestas posibles: "S,
Lenguaje impersonal: Se- un- una- el- la- uno- nosotros- t- ustedes- hace- etc. quiero'. En este caso, decrmelo de esta manera, no slo me ayuda a darme cuenta
"Uno busca lleno de esperanzas..." (Yo busco lleno de esperanzas... Sin entrar a de lo que quiero, sino que hasta me impulsa a la accin, por el moro hecho de
enjuiciar mis esperanzas anastrficas, que nada tienen que ver con mi aqu y obligarme a ser coherente; "No, no quiero" y me hago responsable de esta accin
ahora, y por lo tanto, mucho menos con "todo el mundo" que incluyo cuando digo suspendida. Esto es bastante distinto del fastidioso "tengo que".
"uno" Seor Discpolo, por favor no me incluya).
No puedo: Me es imposible- Soy incapaz.
Evita la responsabilidad de la negativa. "No quiero" me expone a los ojos de mi
interlocutor. Le da la oportunidad de accionar de modo tal que tal vez no me guste.
Nosotros estamos de acuerdo con esa decisin (Siempre que el que hable no sea
Soy yo la nica persona responsable de mi negativa, ni mi debilidad u otra
un monarca: Yo estoy de acuerdo). T eres cruel conmigo (Yo me siento mal
caracterstica ajena a mi voluntad, ni tampoco el destino.
contigo y eso no califica tu conducta).
T eres demasiado dominante (Yo me someto a ti... y me hago cargo de mi S, pero: Este es el juego que describi Eric Beme, en su libro "Los juegos que
conducta). todos jugamos", que desenmascara este tipo de situaciones. Sirve como muestra
de cmo las propias fuerzas destructivas son superiores en podero a las mejores
Se ven mejor delgadas que gordas (Yo las prefiero delgadas). Se dice que Marta "intenciones" de los dems. Suele jugarse en grupo, y no precisamente a
tiene una conducta ligera (Yo enjuicio a Marta). instancias de los coordinadores, razn por la cual no figura en el captulo
Hay malestar en el ambiente (Yo me siento mal aqu). correspondiente.
Tengo la espalda tensa (Yo tenso mi espalda).
Jorge S-Pero: ... y como ven ste es mi problema.
Ricardo: Sera bueno que lo enfocaras as...
Generalizaciones: Todos- jams- nunca- siempre- cualquier- etc.
Jorge S-Pero: Tens razn, pero sucede que...
Todos hemos pasado por una experiencia similar (Ni siquiera la de nacer es similar Laura: Y qu opinaras de darle esta solucin?
para todos). Jorge Si-Pero: S. pero creo que a la larga...
Mara: Jorge S-Pero, vos sabes que a m me pas algo parecido
Blanca concurre a la consulta familiar con Jorge, su marido, y Claudio, su hijito de
y lo que hice fue...
cuatro aos. Mientras Blanca y Jorge conversan con el terapeuta, Claudio ha
Jorge S-Pero: S, pero yo no soy como vos...etc. etc.
estado husmeando por el consultorio y puso en el suelo algunos libros de la
biblioteca. Blanca ve eso y grita: " Has tirado todos los libros al piso!" Claudio le
contest:" Mam, slo ests mirando los que estn en el piso, por qu no miras lo Preguntas: La pregunta es vlida cuando busca obtener informacin esencial a !a
que quedan en los estantes?" Consideramos que esta ancdota no requiere situacin aqu y ahora. No siempre se formulan preguntas con estas
explicacin. caractersticas.

Qu penss de m actuacin? Esta pregunta slo busca una re-confirmacin de lo


Siempre te amar (Sin comentarios). que yo ya estoy pensando de mi actuacin.

- 30 -
No me alcanzaras una taza de caf? En este caso la pregunta es manipulatoria, Tengo miedo de.
y yo realmente quiero ocultar el hecho de que estoy dando una orden.
Afirmaciones solapadas en las preguntas que comienzan con "Por qu". Cuando Sin que sto sea una regla absoluta, cuando usamos el "tengo miedo a" hablamos
yo pregunto cmo? o qu? pido informacin. Cuando expreso un sentimiento de un temor real.
hostil con la pregunta por qu, finjo pedir informacin, y en realidad la estoy dando
yo, aunque disfrazada. Cuando usamos el "tengo miedo de" solemos hacer referencia a alguna situacin
Por qu llegaste tarde? significa realmente darte la informacin de que a m me que percibimos dentro de nosotros mismos, no muy claramente. Con frecuencia,
molesta tu tardanza, y mientras te dificulto el responder a mi hostilidad forzndote "tengo miedo de" puede traducirse por un "me gustara". " Tengo miedo de hablar
a dar excusas. en pblico", "tengo miedo de expresarle mi amor', pueden reemplazarse por: "Me
gustara hablar en pblico", " me gustara expresarle mi amor".
En el mejor de los casos, "por qu" encierra una explicacin causalstica de los
fenmenos, que no implica ms que una cierta manera de comprenderlos. Por Entre el "tengo miedo de" y la accin, hay pasos intermedios. En primer lugar, el
qu? es una pregunta que obliga a buscar causas, excusas, explicaciones. anhelo divido como algo lejano. Luego, la expresin rotunda de ese deseo, que en
Mientras busco el por qu que te responda, ya me fui para atrs de este ahora en la verbalizacin implica el cambio del potencial al indicativo. (Me gustara, me
el que soy. Mi "as" no importa, y siento que de algn modo me estoy disculpando gusta). Finalmente !a accin: Quiero.
por "ser" ante vos.
Por qu sos as? Culpa - Resentimiento
Oh, perdname! Alicia: (Con los ojos cerrados, dirigindose a su mam, un almohadn). Me siento
Por qu sos as? culpable con vos. Siento mucha pena de verte tan vieja \ desvalida, (llora, amasa el
Por mi mam, por mi historia. No tengo la culpa. Aclaracin: Cmo es qu? almohadn), me siento culpable de que te sientas tan mal por mi culpa. Tengo
reemplaza a por qu? con las mismas caractersticas. miedo de que te enfermes...
Terapeuta: Alicia, contale a tu mam lo resentida que ests con ella.
Preguntas vlidas: Cmo? Qu? Alicia: (Asiente y enrojece. Con cada frase que dice a continuacin, va dando un
Cmo? As. Como es. "Como" describe, muestra, enriquece. Cuando responds golpe suave con la mano sobre el almohadn) Mam estoy resentida con vos
a mi cmo? aprendo, me enriquezco. Cuando debo responder a tu como? siento porque te apoyas tanto en m. Estoy resentida con vos porque me asfixias. Estoy
que te importa de m, que no me juzgas, que a tu lado puedo bucearen m, para resentida con vos porque te la pasas juzgndome. Estoy sper resentida con vos
mostrrtelo, para darme a vos. porque me haces sentir mal (Va golpeando con el puo cerrado), me revienta que
Cmo sos? me hables mal re de todos los hombres, slo porque vos no fuiste feliz en pareja.
Soy as, de esta manera. Estoy resentida con vos porque siempre hablas mal de cuanto muchacho te hago
conocer. (Ahora grita y golpea sobre el almohadn) Me revienta que te la pases
Qu? Junto al cmo?, sirve para mirar el mundo de un modo
manejndome! Quiero que te mueras pronto y me dejes en paz! (Se arroja
distinto que preguntando por qu.
llorando sobre el almohadn y lo abraza). Es muy jodido sto, Julia, me siento
Por que me miras?
terriblemente culpable.
Cmo me ves?
Qu te gusta y qu no te gusta de m? Terapeuta: No terminaste de expresar tu resentimiento. Alicia: (Otra vez a mam).
Lo que ms rabia me da es no tenerte, que seas tan sorda a mi necesidad de vos!
Si hacen el ejercicio con otra persona, prueben a ver como se sienten al responder
No me siento querida. Me siento usada, como si te apoyaras en m para no sentirte
estas preguntas, y otras que empiecen de la misma manera, sobre algo que est
sola. Siento que no te importa nada de m. (Vuelve a llorar sobre el almohadn, sus
sucediendo ahora. Hagan series de por qu? y porque, y otras que respondan a
manos lo acarician). Y sin embargo, no quiero que te mueras. No quiero perder la
qu? y cmo?
esperanza de que algn da vos y yo podamos entendernos, no quiero seguir espe-
Pero: (Independientemente del ejemplo anterior del S-Pero). "Me gusta tu rostro, rando que te mueras para vivir yo. (Ahora llora suavemente, con la cara apoyada
pero no tu mirada". En este caso hay dos posibilidades. O bien, valen las dos sobre el almohadn. Se balancea mientras se va calmando).
oraciones separadas por "pero", en cuyo caso para qu si va mejor "y"? 0 bien, La crisis de "culpa" ya pas, y el resentimiento expresado, permite el afloramiento
borro la primera y me quedo slo, aqu y ahora, con la segunda. Tengo miedo a- de sentimientos ms tiernos.

- 31 -
QUEJAS:
HERRAMIENTAS DEL PACIENTE

"Te muestro la pena" dijo Buda, realista. Pero tambin


mostr el final de la pena: el conocimiento de s
mismo, la aceptacin total, la bendita experi encia
del No-Dos., Aldous Huxley

La gente puede expresar su sufrimiento de viva voz, quejarse, o hablar con su


cuerpo, gesticular, moverse, lo que a los ojos alertas es an ms comprensible y
verdadero que las palabras. Las quejas que el ser humano es capaz de formular
no son tantas, slo hay un pequeo puado de ellas. El .diccionario slo llama
quejas a las que se expresan con palabras o sonidos. Al respecto, el Diccionario
de la lengua Espaola de la Real Academia, da como definicin de queja:
"Expresin de dolor, pena o sentimiento. Resentimiento, desazn o querella".

Mara Moliner en su Diccionario del Uso Espaol (Ed. Credos de Madrid, 1967)
dice: "Queja: Sonidos o palabras con que se muestran dolor, pena o descontento".
De este modo es posible quejarse contra terceros. .Tambin es posible hacerlo
contra uno mismo, adoptando, o bien la actitud intransigente con

(*) Este captulo, con e! nombre de "Terapia G e s t l t i c a de las Q u e j a s " y f i r m a d a por Julia Z. de
B a r a n c h u k , A l b e r t o Dayan" A n g e l a G m e z , S i l v i a Grimaldi y A l b e r t o M o r r a ,
a p a r e c i , con a l g u n a s modificaciones no sustanciales, como a r t c u l o original de la
p u b l i c a c i n ACTA P S I Q U I T R I C A P S I C O L G I C A de A m r i c a L a t i n a , de Marzo de
1980. Vol. XXVI, N1

- 32 -
que un padre puede enjuiciar a un hijo, que no cumple sus expectativas, o bien La queja, habitualmente, est concierne o no el sujeto, est vinculada a alguna de
como un hijo que se resiente contra las exigencias paternas a las que siente que las modalidades de bloqueo de la energa. De ah la posibilidad que tenemos, a
no puede acceder. travs de los trabajos, de trasponer todas las capas de la neurosis, hasta la explo-
sin final que constituye el cierre de la situacin inconclusa. Obviamente, sto no
Otro orden de quejas incluye sntomas corporales aislados (cefaleas, disnea, es as en forma absoluta, ya que muchas de las quejas, las referidas contra
urticarias), o constituyendo sndromes o enfermedades. terceros, por ejemplo, entran en el terreno de las proyecciones, y por otra parte, no
todos los trabajos concluyen en forma explosiva, habiendo atravesado todas las
Las prdidas sufridas son otra fuente de quejas, cualquiera sea el objeto perdido capas.
(personas, situacin, objeto material, o partes de uno mismo). Se puede lamentarlo
en su ausencia, o bien sentirse culpable del dao real o fantaseado que se le Algunos pertenecen al orden del "darse cuenta", y generalmente operan en la capa
infligi, con el inevitable cortejo de hostilidad y resentimiento, o bien sentirse de los roles. Por otra parte, otras tcnicas que tambin usamos en terapia
indisolublemente ligado a l en un vnculo fantasma. gestltica, adems de los trabajos, los juegos, por ejemplo, pueden facilitar la
irrupcin de figuras que espontneamente "trasladen la situacin a la culminacin
Otro tipo de queja lo constituye el sentimiento de dependencia hacia algo de la experiencia, en un verdadero trabajo de final explosivo. Aunque se no fuese
oprimente, ya sea una sustancia, como el cigarrillo, La droga, el exceso de comida, su objetivo principal, sino tan slo el de actuar sobre determinadas formas de
o bien puede tratarse de una persona o situacin. Dado el carcter de adhesin bloqueo de la energa.
compulsiva con que el sujeto vive esta dependencia y el sentimiento de opresin y
de dao, es posible asimilarlo a la ligazn con un txico.
ABORDAJE DE LAS QUEJAS VERBALES
Hay un grupo de quejas a las que podemos llamar no verbales o preverbales, y que
son expresadas a travs del cuerpo de una manera inconciente. Escapan al control Abordamos cada una de las quejas, a travs del dilogo que sugerimos al pacienta
voluntario de la persona, No estn sujetas a ningn tipo de censura. No obstante realizar entre ambos polos del conflicto, donde asume alternadamente uno y otro
no expresarse a travs de la palabra, conservamos para ellas el nombre de quejas, polo. "El otro" es un almohadn colocado frente a l, al alcance de sus manos, so-
ya que cuando apelamos, en el curso de la terapia, al artificio de pedirle al sujeto bre el que le pedimos que, con los ojos cerrados, trate de "ver" a quin o a qu le
que se identifique totalmente con una parte de l, y le preste su capacidad de est hablando. La respuesta a sto la da trasladndose sobre l mismo y
expresin verbal, inevitablemente el discurso resultante deviene en una de las convirtindose en aquel o aquello con lo que habla.
quejas ya mencionadas.

A este grupo de quejas podramos llamarlas organsrnicas, ya que representan la


voz del organismo ajena al intelecto. Para rescatarlas es importante observar la
postura corporal total del sujeto, el contacto con una parte del cuerpo con la otra,
movimientos, expresiones faciales, y sonidos que no llegan a ser palabras.

Cualquiera fuese la queja que el sujeto expreso, cualquiera el modo del que se vale
para hacerlo, nos est informando que hay algo en l que no acepta, que no quiere
ver, y por lo tanto, aliena de s, o al menos de su totalidad, proyectndolo fuera de
s, en otra persona, o en el "destino", o en la mala suerte, o en este "horrible
trabajo", o situacin, o bien en una parte de s mismo a la que no ve como siendo l No puedo imaginar cosa alguna
mismo (tengo la vista cansada, o siento una tensin aqu) como si l no fuera quin que m e n o s me gustara ser.
experimenta fatiga o tensa sus propios msculos. Wystan Hugh Auden

- 33 -
El pasaje de uno a otro lo determina el agotamiento de la argumentacin que el La terapeuta domina un respingo de sorpresa, ya que no recuerda haberse
paciente halla en cada uno de ellos, y el desenlace es diferente segn el tipo de impacientado con l, y le invita a ocupar el centro del ruedo, (el centro de la
conflicto en juego. Llamamos "trabajo" a este modo de enfrentarse el sujeto con su habitacin, rodeado por el resto del grupo), a dialogar con Julia. (Esto implica un
queja. Es siempre individual y las ms de las veces se realizan en el seno de un dilogo con su Julia, es decir con sus proyecciones sobre ella).
grupo. La eleccin del par de opuestos del conflicto, est en relacin directa con el Sebastin: Me da rabia que tengas tan poca paciencia conmigo, siempre me ests
tipo de queja, y en el curso del trabajo, puede modificarse si el paciente incluye o juzgando. (Esto lo dice con los ojos cerrados segn tcnica y durante el resto del
hace referencia a otra situacin, dado que est vedado "hablar de" sino que debe trabajo permanece as. Se cambia de lugar, sentndose enfrente).
"hablar con".
Sebastin - Julia: No mereces estar entre nosotros, ocupar mi tiempo. Mejor
sentte debajo de la mesa, se es un buen sitio para alguien como vos.
Quejas contra terceros
El abordaje se realiza coordinando un dilogo entre el paciente y el otro, o tercero. Sebastin: (Llorando) No tens un poco de compasin, yo no puedo, no quiero
Si el imputado es el terapeuta, se hace siguiendo la tcnica indicada, como si el crecer tan rpido como vos me exigs. Es demasiado para m.
terapeuta no estuviera presente.
Sebastin - Julia: Y encima de todo, llora ahora, me disgusta verte sumido en la
El objetivo es la recuperacin de partes del sujeto proyectadas en el otro, ya se autocompasin. (Es de hacer notar que su concentracin es extrema, su conducta
trate de una situacin, una persona o un objeto del ambiente. totalmente diferente en ambos polos. Pequeo, lloroso cuando representa el aspeo
que ms odia en l, que supone el Sebastin total Arrogante, fro, displicente y
enrgico cuando representa el otro aspecto que l adscribe a su terapeuta).

Sebastin: (Reflexionando en alta voz) Es notable. Ahora me doy cuenta de que no


sos vos quien me persigue... (Mirando a su terapeuta). Es que yo quisiera que vos
me estimases (Se acerca y la besa). En realidad quisiera aprender a estimarme.
No creo ser muy buen amigo de m mismo.

Quejas por sntomas


Su abordaje no tiene slo por objeto un rescate de proyecciones, sino que el
sntoma es considerado como un mensaje existencial. La persona se expresa a s
misma a travs del sntoma.

CELIA Y LAS URTICARIAS

Celia tiene 21 anos, Desde muy chica, padece unas urticarias gigantes,
Sebastin es un paciente que reconoce sus dificultades y se empea en hacerles
qu lo cubren literalmente el cuerpo, especialmente el rostro y las manos. Sus
frente con honestidad, lo cual crea un clima afectivo, clido y positivo, en el cual
padres, de muy buena posicin econmica, han recorrido los consultorios del
transcurre la mayor parte del tiempo teraputico. No obstante, en ocasiones, los
mundo. No hay tratamiento desensibilizante, antialrgico, homeoptico, psico-
sentimientos que alberga hacia la terapeuta estn teidos del desprecio que, a
lgico, al que no hubieran recurrido. A veces, Celia estaba libre de urticarias por
veces, experimenta hacia s mismo, cuando incurre en lo que supone "una falta
un perodo de semanas. Nunca ms all de dos meses. Para Celia y sus padres,
contra s" o contra su aspiracin a crecer. Ese da llega tarde al grupo" y ya desde
las urticarias se constituyeron en el enemigo.
la puerta, saluda a todos al mismo tiempo que dice a su terapeuta: "A vos no te
saludo porque cuando sepas lo que hice no querrs saber nada conmigo".

- 34 -
Para la fecha en que Celia ingres al grupo, esta familia iba perdiendo todas las transcurrido un ao y medio y todava no he vuelto a tener urticarias.
batallas. Celia traa con frecuencia su preocupacin al grupo, pero nunca traa sus
urticarias. Era cuestin de esperar que "se dignaran" a hacer su presentacin.
Celia era dulce, amable, de un carcter muy manso, y sus compaeros la queran.
En realidad, nadie la haba visto enojarse nunca. Hasta que un da, Celia lleg
tarde. Como de costumbre, traa un montn de excusas. Esta vez, como si hubiera
acuerdo previo, sus compaeros decidieron no aceptarle ninguno. Celia empez a
desesperarse y ante nuestros ojos atnitos, empez a enrojecer y a hincharse. Sus
agradables facciones se volvieron monstruosas, sus labios enormes y hacia afuera,
parecan la boca dibujada de un payaso. Su nariz casi desapareca entre sus
abultadas mejillas y sus ojitos eran apenas dos ranuras. La coordinadora vi
llegado el momento adecuado.

Julia: - Vas a hacer un dilogo entre vos y las urticarias. Mira le dice poniendo un
almohadn frente a ella. Quiero que aqu imagines a tus urticarias como una
sola cosa. Con la forma que consigas verle.
Celia: (con los ojos cerrados): Vos llegas siempre en el peor momento. Siempre
vens a molestarme, no me dejas vivir, siempre ests encima mo.
J: Cmbiate de lugar. Se vos esta cosa y habla con Celia. (Siempre con los
ojos cerrados, Celia se sienta en al almohadn que tiene enfrente y habla
con el que dej vaco instantes antes).
Celia - urticarias: No s de qu te quejas, siempre aparezco para protegerte. Yo
te cuido para que no pierdas el control sobre vos misma. Para que
recuerdes que debes ser siempre bien educada y conecta (se pone a llorar).
J: Cmbiate, volv a ser Celia (Celia sigue llorando) Qu te pasa?
Celia: Esto me lo dice siempre mam, por lo menos me lo deca cuando era
chica.
J: Segu hablando con ella entonces. Concntrate bien. Trata de verla sentada
en este almohadn frente a vos.
Celia: Si supieras cunto me hinchas! Me pudre tenerte encima continuamente.
Me pudre ser buenita, Estoy harta de ser buenita! Quejas por prdidas
J: Abr los ojos y decselo al grupo. Su abordaje consiste en enfrentar al paciente en un dilogo con su objeto perdido.
Celia: (abarcndolos con su mirada) - Estoy harta de ser la buenita idiota de todos Se trabaja la posibilidad de la despedida, el duelo, El objetivo eS !a ruptura del
ustedes. Si no me quieren porque los mando a la mierda, me importa un vnculo fantasma con el objeto perdido. El paciente recurre al vnculo fantaseado
pepino. como una manera de protegerse del dolor, de la soledad. Pero mientras el dolor no
J: Mndalos a la mierda. Uno por uno, sea aceptado, mientras no quiera aceptar la real prdida del objeto, el esfuerzo
Celia: Marta, me tenes podrido. Jorge, ndate a la mierda. Lus vos tambin te vas para mantener tal engao, insume una cantidad de energa que no puede utilizar
a la mierda. Laura, todos, vyanse a la misma mierda. en la reconexin con el aqu y ahora. La tcnica consiste en hacerle entablar al
paciente dicho, dilogo, a los efectos de que pueda reconocer al objeto como algo
Mientras grita y llora se va deshinchando y palideciendo ante nuestra mirada
fuera de l, que pueda descargar sus sentimientos a travs de una despedida,
maravillada. El almohadn, que no dej de retorcer mientras les gritaba a sus
situacin que hace que este trabajo termine, con frecuencia en una explosin hacia
compaeros, termin por romperse y la espuma de goma los cubri a todos. Celia
la pena.
empieza a rer y sus compaeros se acercan y la abrazan. Desde este episodio ha

- 35 -
Como ya dijimos, el objeto perdido puede ser una persona, una situacin, un objeto Quejas por exigencia
material o partes o funciones de uno mismo.
Cualquiera fuese la vertiente desde la que el paciente nos trae sus quejas por sus
propias exigencias hacia S mismo, lo invitamos al dilogo entre las instancias
La parlisis de Patricia, Patricia se haba quedado paraltica de sus piernas a los "opresor" y "oprimido". El paciente siente que le es ms fcil identificarse
ocho aos. Desde entonces, se dedic a jugar a la mujer fuerte, monumento, totalmente con una de ellas, no. obstante lo cual, al asumir la otra, frecuentemente,
admirada por todos por su capacidad de hacerle frente a cualquier dificultad. Si encuentra la argumentacin adecuada.
bien Patricia nunca se permiti a s misma llorar su enfermedad, no era raro orla
quejarse de su parlisis en otros campos, como el profesional en l cual no Alberto, el bueno y el malo. Alberto se queja de su dificultad para enfrentarse con
progresaba, segn ella, en la medida de sus posibilidades. Tambin en lo afectivo, situaciones en las que debiera enojarse. (Siempre tengo que ser bueno, no s por
ella se senta "paralizada", ligada a una relacin en la cual ni ganaba el vnculo en qu no puedo agredir nunca). Se le invita a un encuentro entre Alberto bueno y
hondura ni consegua romperlo. En el curso del laboratorio, y en relacin con los aqul que le prohbe expresarle con libertad. Alberto-Bueno: (Oprimido) Realmente
elogios recibidos de los otros integrantes del mismo, (Sos grande, te admiro, no me puedo enojar cuando algo o alguien me molesta. Me siento incmodo, no
quisiera parecerme a vos), comenz a deprimirse. Obviamente, ella no era feliz de puedo expresar mi bronca.
parecerse a s misma. Se le sugiere como trabajo un dilogo con sus piernas.
Alberto-Malo: (Opresor) Eso es lo que tenes que hacer, no est bien enojarse, uno
Patricia: (A sus piernas) Si supieran cuanto las odio, ustedes no me dejan hacer las no piensa, y no sabe lo que dice cuando se enoja.
cosas que yo quiero, ustedes me fallaron. Y por culpa de ustedes no puedo ser
feliz. Alberto-Bueno: S, pero si no expreso mi bronca me siento inferior, como si los
La coordinadora le pide que le preste voz a las piernas, y le conteste a Patricia dems me pasaran por arriba. Alberto-Malo: Tenes que guardar la imagen, la gente
desde ellas. que se descontrola no es bien vista en ningn lado.
Alberto-Bueno: Tengo la sensacin de estar hablando con mi padre.
Patricia-Piernas: Lo nico que nosotras no te permitimos hacer es caminar. Nos Coordinadora: Habla con tu padre.
ests acusando de cosas que no tienen que ver con nosotras.
Patricia: Me doy cuenta de que yo me valgo de ustedes para no reconocer todo lo Alberto: Pap, es por tu culpa que no puedo expresarme como quiero. Siempre
que yo no hago. Me doy cuenta de que siempre las utilic para justificarme. (Llora. respond a tu imagen de bueno, correcto y sometido. Esto de ser siempre bueno,
Dirigindose al grupo) Me da miedo darme cuanta de estas cosas. Siento como si de mostrarme siempre comprensivo, me tiene harto (arroja suavemente el
me viera obligada a asumir la responsabilidad sobre mis actos sin la excusa de mi almohadn lejos de s). Quiero ser como soy. No puedo forzarme a tener rabia.
parlisis. Me doy cuenta tambin de que la parlisis que ms dao me hace no es Espero poder sentirme libre. (Llora). Este llanto implica un compromiso afectivo
la de mis piernas. Ahora me siento mejor. que le abre la perspectiva de nuevos enfrenamientos de este tipo.

Patricia se enfrenta, por primera vez, a lo definitivo de la prdida de movilidad de Quejas por vinculacin con elementos txicos
sus piernas. Esto le permite reencontrarse con sus posibilidades de realizacin en El objetivo obvie es la separacin del sujeto respecto del objeto que lo daa como
otros aspectos. Aproximadamente un ao despus de este trabajo, nos enteramos organismo biolgico, psicolgico y/o social; ms sto slo es posible cuando el
(Patricia vive en una pequea ciudad de un pas vecino) que no solamente pudo sujeto consigue rescatar para s lo depositado en el txico, que de otro modo, al
terminar la relacin con su novio sino que se puso a organizar una asociacin para convertirse en una parle de l mismo, le impide prescindir de l.
personas impedidas (por fin lo acept) con fines sociales, culturales y de estudio. Y El trabajo consiste en un dilogo entre el sujeto y el txico, y consta de dos
en cuanto a sus logros profesionales no podemos dar cuenta de ellos por razones momentos cruciales: aqul en que reconoce sus elementos positivos, alienados de
de discrecin, pero son lo suficientemente importantes como para damos por s mismo, para recuperarlos para s, y otro, en que puede desprenderse del
enterados de que Patricia ya no es una paraltica... ms que de sus piernas. mismo, renunciando a un dao que ya no le produce placer.

- 36 -
Matilde y la comida.
Matilde: Yo te necesito a vos para darme placer en ciertos momentos, aunque
inmediatamente despus de incorporarte me odio profundamente, (te odio
profundamente?).

Matilde-Comida: Yo estoy aqu para hacerte compaa, para que no te sientas sola, SUEOS
adems estoy siempre. Podes disponer de m en cualquier momento.

Coordinadora: S Matilde ahora, y repet eso que acabas de decir como comida.

Matilde: Dispones de m en cualquier momento.(Repite eso varias veces en voz


baja para s misma. Luego, en voz ms alta) Me doy cuenta de que yo me tengo a
m misma cada vez que me necesito. (A la coordinadora) Deseo continuar este Si quieres encontrar !o que
trabajo. (A la comida) Creo que te necesito menos, en todo caso no me servs-para buscas, manda a buscarlo a tu
hacerme sentir segura de m misma, Me doy cuenta de que necesito amor, y como no - buscar.
eso me da miedo he llegado a convencerme de que te necesito a vos, aunque no Proverbio Zen
sea verdad.

ABORDAJE DE LAS QUEJAS NO VERBALES O PREVERBALES

El abordar, a travs de un dialogo, lo depositado en una parte o partes del cuerpo, Los sueos son la llave que nos abre la puerta de otra realidad: la de nuestro
es rescatar lo que el sujeto aliena de su s mismo total para proyectarlo en ellas, de mundo interior, de tan difcil acceso a nuestra vigilia consciente.
este modo puede asumirse como individuo y hacerse responsable de cuanto ex-
presa. Al alzar nuestra vista hacia un cielo estrellado, podemos atisbar, con la mirada
indirecta, la luz diminuta de estrellas muy lejanas, a las que, si intentarnos mirar de
El brazo y el vientre. Silvia sujeta su vientre fuertemente con su brazo, mientras frente, dejamos de ver, para recuperaras ni bien volvemos a soslayar el foco de
sigue atentamente lo que se est desarrollando dentro del grupo. Se le invita a nuestro inters.
prestarle voz al brazo para que comunique verbalmente a su vientre lo que est
haciendo. Del mismo modo, nuestra conciencia en reposo permite que otro nivel nuestro
Brazo: Me vens bien porque ests gordo y as me puedo apoyar. asuma el comando de captar las circunstancias de nuestra existencia y las del
Vientre: Ya lo s, pero yo estoy molesto, deseo bajar de alguna manera, me siento mundo que nos rodea, pudiendo evaluar a ambos en su totalidad, Nosotros
mal estando gordo. Brazo: Te dejas estar inflado y segus comiendo. Vientre: sabemos, aunque no nos demos cuenta de todo lo que nos pasa, cules son
Tengo que dejar de comer, pero no me puedo contener, no me quiero contener. En nuestras necesidades y posibilidades de satisfacerlas, y cules las limitaciones que
realidad s quiero contenerme, no, no quiero contenerme. (Silvia repite eso varias nos ponemos y naturalmente tenemos. Sabemos cul es nuestra situacin con
veces Quiero contenerme de comer, quiero controlarme. No quiero controlarme, nosotros mismos y con el mundo que nos rodea. Darse cuenta del punto en que
porque me gusta estar lleno. (Aqu Silvia comienza a rerse dndose cuenta de su estamos en nuestra vida, debiera ser muy fcil, pero decididamente no es as, ya
deseo de maternidad). Silvia: (Como persona total) No quiero tener mi vientre lleno que estamos permanentemente interfirindonos, bloquendonos, falsendonos,
de comida. (Su enrojecimiento da cuenta de que se trata de una comprensin imaginando lo que no somos, en virtud de deseos que nada tienen que ver con
organismica. As pudo ella rescatar para s lo proyectado en el vientre). nuestra existencia y nuestras necesidades verdaderas.

- 37 -
Nuestro cuerpo, ms sabio, recurre a sntomas como llamadas de atencin, Comenzamos por hacrselo contar, al que trajo el sueo, si es posible
mensajes dirigidos tanto a nosotros mismos, como a los que nos rodean. Igual dramatizndolo, tal como si lo estuviera soando en ese momento, y desde e!
sentido tienen algunas de nuestras conductas respecto de las cuales no nos "personaje" que lo representa, Veremos luego, que en la modalidad que llamamos
sentimos inclinados a hacernos responsables. ("No s por qu hice sto o aquello, "Rashomon' este relato lo hacen tambin las distintas partes, "fracciones" que
no entiendo cmo pude hacerlo"). Nuestros sueos son mensajes, que a diferencia constituyen el sueo.)
de los anteriores, dirigimos desde nuestras ms profundas vivencias, a algo en Intentamos as rescatar la emocin que estuvo presente durante el sueno y que las
nosotros, capaz de entender concientemente, evaluar y actuar. elaboraciones posteriores amortiguaron o hicieron desaparecer. A veces basta con
pedir al soante despus de enunciada la primera frase, habitualmente descriptiva
Soamos, y de este modo estamos envindonos a nosotros mismos un mensaje de la escenografa, que aada a ella las palabras:: "Y sta es mi existencia", para
existencial, preado de sentido, y que apunta no slo a la esencia del conflicto, que la emocin surja, y el mensaje existencial sea percibido en un "darse cuenta"
sino tambin al modo de enfrentarlo y de darle solucin. Durante el sueo, noso- cabal.
tros somos los nicos destinatarios de nuestro propio mensaje. Esto nos posibilita
el cierre de nuestras gestalts incompletas, sin restarnos fuerzas y energas que ("Estoy al borde de una pileta y sta es mi existencia"). Le pedimos luego que
precisamos, en vigilia, para salirle al paso a cuantas figuras la vida nos propone. ''represente", que se "convierta" en las distintas partes del sueo. Todava no es el
Tampoco, en la mayora de los casos, es causa de angustia como para hacernos momento de hacerlas interactuar. En esta etapa, la descripcin de la situacin
interrumpir nuestro descanso reparador. existencial desde lo representado, basta para desencadenar la comprensin total,
claro que a travs del truco de prestarle palabra y msculo a cada parte, y
Los sueos son el "trabajo sin trabajar", el "esfuerzo sin esforzarse", la "bsqueda" posiblemente debido a posturas corporales no habituales.
que manda al "no-buscar" de la filosofa Zen, a buscar lo que se necesita
encontrar. Los sueos son ms an: son la manera mltiple, variada e ingeniosa De todos modos, trabajamos con el rescate de proyecciones, que, cuando se
que encontramos para retratarnos a nosotros mismos, en este punto particular de realizan sobre objetos muy desvitalizados, o bien muy desagradables para la
nuestra existencia. conciencia del soante, no es fcil de hacer. A veces, an en el trabajo de todo el
grupo en colaboracin no se acepta plenamente. Es obvio, que al que se haya
As cada personaje de mi sueo soy yo, cada animal, cada objeto, cada situacin,
aterrorizado soando con una araa, o haya experimentado repulsin con una
cada parte ma soy yo. Esa nariz, esa sonrisa, esa sombra, ese miedo, ese rbol.
babosa, debe costarle asumir que l mismo es la araa o la babosa. (Ver "El sueo
Yo soy todo eso, y me basta apelar al truco de prestarle mi voz y mi palabra a cada
de Ada").
elemento de mi sueo, para ir armando este rompecabezas que es mi vida,
integrando a mi personalidad cada vez ms, los aspectos ms alienados y Por otra parte, es interesante observar el alivio que experimenta un paciente,
desvitalizados de mi ser. cuando a travs de la asuncin del rol opuesto al que le es habitual (el victimario,
por ejemplo y no la vctima, o el fuerte en lugar del dbil), puede reincorporar
La terapia gestltica ha incorporado al conocimiento de la psicologa de los sueos, aspectos de los que no se saba poseedor, debido al largo hbito de proyectarlos
enriquecindolo, esta visin dramtica, en la que la escenografa, personajes y en los dems.
director, todo eso, somos nosotros, y sa es nuestra existencia. Para elaborar el
material onrico en un grupo de terapia gestltica, utilizamos el de alguno de sus Durante todo este trabajo, y tambin despus, durante la representacin
integrantes. propiamente dicha, es imprescindible estar atento a su cuerpo, a la manera de
relacionarse dos partes del mismo entre s, y hacrselo notar al paciente. (Te das
Disponemos para ello de una serie de alternativas, entre las cuales elegir la ms cuenta qu le est haciendo tu mano derecha a tu mano izquierda? Qu crees
eficaz en ese memento, dependiendo la eleccin de las caractersticas del que le est diciendo?). Tambin es importante ocuparse de sus emociones
paciente, de las habilidades particulares de cada terapeuta, y tambin del estado cuando parecen bloqueadas. (Qu sents? Qu quers hacer?
anmico del grupo en su totalidad.

- 38 -
Te das cuenta de lo que ests haciendo para no hacerlo? A veces basta sto Todava algo ms EN relacin con las posibilidades teraputicas del trabajo con
para desencadenar una crisis de llanto, si el paciente estuvo movilizando con su sueos. Esto se refiere a la toma de contacto que el paciente debe realizar con
lengua su garganta para no llorar, o bien puede ser que se deje ir en un arrebato cada una de sus partes entre s, con l y su terapeuta, y finalmente con l y los
de clera, si se le facilita el darse cuenta de la misma, llamndole la atencin otros integrantes del grupo
sobre sus puos, quiz.
Podemos as llevarlo, ida y vuelta, del sueo a la realidad, hacindole dialogar
Si a esta altura sentimos el ambiente lo bastante caldeado como para ello, algunos aspectos con el grupo o con nosotros.
proponemos, por supuesto que en primer lugar al soante, el comenzar la
representacin. Una posibilidad es invitarlo a que monte su espectculo. La En un sueo de Federico, joven extremadamente tmido y susceptible, excelente
habitacin es el escenario donde l distribuye cada personaje (por ahora l est caricaturista, se encontraba l apedreando los focos de luz de una calle. Se
solo), describiendo su ubicacin verbalmente o poniendo un almohadn en su estableci el siguiente dilogo entre l y el foco.
lugar. Luego ir ocupando los distintos lugares y cambindose de lugar segn lo Foco: No me apagues. Yo estoy aqu para iluminarte, para hacerte ms visible.
requiera la accin. Nosotros intervenimos; pidindole que explore ms a fondo el Federico: No te permitir hacerlo. Yo quiero permanecer en la sombra.
dilogo entre las dos instancias, entre las cuales aparece un conflicto que puede
ser resuelto. Al conflicto lo detectamos por el cambio de expresin, tono de voz o Terapeuta: Dile al grupo: "Dejen de mrame. Yo quiero permanecer en la sombra.
postura corporal, que denota la presencia de una emocin que pugna por
expresarse. Habitualmente, preferimos dos elementos del sueo que estn lo Federico: (Al grupo, uno por uno) Deja de mirarme, no me gusta que me miren. Me
suficientemente relacionados entre s, y sean lo bastante opuestos, como para pone nervioso que me mires. Deja de ponerme en evidencia. (A medida que va
permitir la expresin del conflicto. A partir de ah, colaboramos apenas con el girando para enfrentar a cada miembro del grupo, aumenta su nerviosismo y
paciente en forma verbal: Cmbiate, y totalmente aten tos a su cuerpo y comienza a tartamudear).
emotividad, lo acompaamos hasta la resolucin final. A veces debemos hacer
intervenir a algn otro personaje, cuando surge. Terapeuta: Vuelve al dilogo con el foco. S el foco. Foco: Yo estoy aqu para
iluminarte. (Repite lo que dijo al iniciar el dilogo') Yo quiero hacerte ms visible.
Me importa que se vea cada uno de tus rasgos. Terapeuta: Dile eso al grupo,
Cada dramatizacin, terminada con descarga emotiva y motriz, permite a! soante, Federico.
casi sin nuestra intervencin, un darse cuenta cabal de su situacin en ese Federico: Ya soy un mirn. Deseo grabarme tus rasgos. Me gusta tu cara. Me
momento, y la resolucin parcial del conflicto existencial expresado en el sueo. gustan tus ojos.
Resolucin parcial, porque el conflicto est cargado de energa no movilizada, y al
decir de Perls, una explosin no basta, se precisa una serie de explosiones para Federico va aflojndose, recuperando no slo su momentneamente olvidada
poner el motor de la vida en marcha. capacidad de dibujante, sino tambin la agudeza de sus ojos. En la situacin
grupal) los "don" al grupo y de ese modo se sinti mirado en vez da mirar. En su
Pero pudiera ocurrir que an no registremos la "temperatura" necesaria para dar vida, ste es el significado de su dificultad de acercamiento a los dems, a los que
comienzo a la dramatizacin. Nos queda todava el recurso "Rashomn" que, al teme.
igual que en la obra japonesa, consiste en narrar el sueo siempre en primera
persona y tiempo presente, desde cada uno de los elementos. Se utiliza as no slo Este trabajo implica tambin para Federico la posibilidad de rellenar un "hoyo" de
la ptica del personaje que representa el soante, sino la que imagina que su personalidad, dejado por la ausencia de una caracterstica que, en vez de
sustentan los objetos que aparecen en el sueo. Es evidente que una misma aceptar como propia, atribuye a los dems, para luego angustiarse por la misma al
situacin no puede ser "vista" de igual manera por un nio que cae a una pileta, sentirse vctima de los otros. Se trata de su capacidad crtica, tan til en su trabajo,
que por una pileta en cuyo interior se precipita un nio. y de la que se avergenza por utilizarla para poner distancia.

- 39 -
Hasta aqu tenemos al grupo como testigo pasivo (ronda de espectadores), del
trabajo de cada uno de sus miembros. El grupo puede tambin colaborar
activamente.

Esto puede hacerse de varias maneras. El paciente puede distribuir roles entre
sus compaeros, a los que hace blanco de sus proyecciones.

El terapeuta puede dar a elegir al grupo el rol preferido por cada integrante. En
este caso el grupo trabaja con la identificacin directa que realiza cada miembro,
jugndose tantas escenas como actores haya para cada papel. Cada escena
resulta as diferente, segn el matiz y la cualidad personal que uno confiere a lo
que est presentando.

A medida que se sigue experimentando en grupo con el sueo, ste pasa a ser
propiedad colectiva, ya que cada integrante lo utiliza no slo para vivenciarlo a
travs de la identificacin directa, (eleccin del rol), sino para enriquecer su
vivencia a travs del trabajo de los dems (identificacin indirecta). Adems fa-
cilitamos la reidentificacin de los aspectos alienados, alentando a los participantes
a rotar los roles. Esto, que slo puede hacerse en grupo, facilita y aumenta la
capacidad de aceptar lo antes rechazado.

Obviamente, para el soante supone la creacin y recreacin continua a travs de


su propio trabajo y el de los dems. Para los otros es una actividad tambin muy
movilizadora, que sirve con frecuencia como detonador para enfrentar cosas
propias.

Trabajar el material onrico de un paciente con todo el grupo, contribuye a la mejor


integracin grupal, y es capaz, por si solo de crear ese clima de clida aceptacin
en e! cual se propicia, facilita y alienta la riesgosa aventura individual que significa
la psicoterapia.

Sueo de Mim
Narracin del sueo: Voy a visitar a una amiga que vive en Lomas de Zamora, no
tengo ningn inconveniente en llegar. Al volver estoy parada, espirando el
colectivo y veo que hay dos caminos. Tomo el colectivo y puedo leer
perfectamente los carteles de la calle y ver las casas muy juntas, pero me doy
cuenta de que ste no es el camino de mi casa. Estoy perdida, desorientada,
me bajo del colectivo y estoy parada en la interseccin de dos calles, no s para
dnde ir, s que la calle Chacabuco est cerca, pero no s como llegar.

- 40 -
Terapeuta: Decle sto ltimo a la calle Chacabuco. Mim: Yo s, calle Chacabuco, Terapeuta: Qu sents en este momento? Mim: No me estoy sintiendo tan fea, ni
que ests cerca, pero no s cmo llegar. tan lgubre. Me siento como en mi casa de la calle Chacabuco. Me siento corno si
Terapeuta: Ahora transfrmate en calle Chacabuco y contstale, Mim: No puedo, hubiera encontrado el camino. Adems, en este momento recuerdo cmo llegar
me cuesta ser una calle. (Est de pie) Terapeuta: Seguro que te cuesta. Busca con all! (Con aire de sorpresa) Estoy muy cerca.... Adis casa de la calle Defensa. No
tu cuerpo. Esta no es la posicin en que estn las calles. te tengo ms miedo. (Abre los ojos y mira al grupo) Me siento bien.
Mim: (Ahora se sienta) Me sigue costando, no me siento una calle. La casa de la calle Defensa es aquella donde Mim viva con su madre y hermanos,
mientras que en Chacabuco se encuentra en su casa actual, donde vive sola. Nada
Terapeuta: Alguna vez viste una calle sentada? Mim: (Se acuesta boca arriba) de sto fue conciente para ella hasta el fin de su trabajo.
Sigo sin sentirme calle. Terapeuta: (Pasa su mano como si fuera gente caminando
Lo extrao es que tampoco repar en la cercana geogrfica de ambas casas, que
y autos rodando a lo largo del cuerpo de Mim) Mim: (Con los ojos cerrados) Me
inclua la anmica, hasta que pudo, a raz de este trabajo, comenzar a ocuparse de
gusta que la gente vaya y venga, que los autos transiten y los nios jueguen sobre
su dependencia familiar, tan claramente expresada en su mensaje existencial de su
m. Me pone contenta...
sueo.
Terapeuta: Qu pasa?
Mim: No s, me parece que no soy la calle Chacabuco...
Terapeuta: Vuelve a ser Mim. El sueo de Ada
Mim: (Silencio prolongado) Estoy parada frente a m vieja casa de la calle
Defensa, me siento paralizada, no puedo entrar, tengo miedo. Ada: Voy viajando en un coche, voy manejando. A mi lado va mi marido. En el
asiento de atrs aparece una babosa muy grande. Mi marido empieza a gritar. En
Terapeuta: Decle eso mismo a la casa. el momento en que clavo los frenos, aparecen dos araas que caminan hacia la
babosa. Las dos araas van acercndose ms y ms a la babosa, hasta
Mim: Casa de la calle Defensa, estoy paralizada. No puedo entrar en vos, no que la matan. Mi marido se desmaya. Abro las puertas y con papeles y madera
quiero entrar, te tengo mucho miedo. Sos una casa horrible, fea. Terapeuta: S la saco las araas y la babosa, que estaban muertas. (Los integrantes del grupo
casa. hacen muecas y gestos y manifiestan que sienten miedo y asco).
Terapeuta: (Arbitrariamente a Ada) S la babosa.
Mim: Soy horrible, fea... por fuera y ms horrible y fea por dentro. (Llora) Mara: (Una integrante del grupo, visiblemente emocionada, dirigindose a Ada y
Terapeuta: Cmo sos por dentro? a la terapeuta) Por favor, djenme a m ser la babosa!
Mim: Soy lgubre, casi deshabitada, no estoy deshabitada del todo. (Como casa Terapeuta: (Mirando a Ada) Ests de acuerdo?
dirigindose a Mim, su interlocutora) Si entras en m, vas a quejarte dentro de m Ada: (Visiblemente aliviada) Oh, si!
para siempre, con tu madre y tu hermana.
Terapeuta: Cambate. S Mim. Terapeuta: (A Mara) Bien, s vos la babosa. Mara: (Comienza a reptar por el
Mim: Voy a entrar en vos. Voy a ver qu me pasa. (Empuja con la mano como si suelo) Soy una babosa pegajosa, repto por todas partes, camino despacio. Recorro
abriera una puerta). Aqu hay una escalera. Me cuesta mucho subirla. (Hace muchos lugares. Mi cuerpo es brillante, transparente. Me quedo mucho tiempo
movimientos de ascenso, pisando almohadones que el grupo coloc a modo de pegada en los rboles. La gente me mira y se espanta. Se alejan si me acerco.
escalera. Al mismo tiempo se aferra a la mano de la terapeuta como si fuera un (Realmente, la gente del grupo se aparta cuando Mara se aproxima reptando)
pasamano. Estoy) pegada al piso (Suspira, se queda en silencio y comienza a Terapeuta: And diciendo qu haces en este lugar en Que te encontrs ahora.
llorar, mientras hace esfuerzos para dominarse) Mara: (Como con sorpresa), estoy ac, no estoy haciendo nada. Me acerco un
Terapeuta: No te interrumpas, llora... Ahora s la casa otra vez. poco a la gente y se apartan. Me resulta gracioso y luego me da bronca. Yo no
Mim Soy toda del mismo color, fea. Mis habitaciones son grandes, en sta... les voy a hacer nada, pero tengo un aspecto feo. (Mientras halda contina con su
(Tocndose el pecho)... (Se vuelve a los terapeutas) Quiero ser Mim. movimiento reptante y a veces pasa por encima de alguno)

- 41 -
Terapeuta: Te ests acercando a alguien en especial? Mara: Slo trato de ver
qu es lo que hay alrededor de m. En este momento estoy en un rbol. Abajo hay
chicos que me quieren agarrar. Yo quisiera jugar con ellos. (Lo dice lloriqueando)
Terapeuta: Decselo a ellos.

Mara: Quiero jugar con ustedes, pero tengo miedo de que me aplasten. Tampoco
quiero que me pisen. Terapeuta: S los chicos.
Mara: Yo soy uno de los chicos. Nosotros nos vamos a divertir con vos. Vos sos
una babosa y tenes que callarte y quedarte quieta. Sos fea. Terapeuta: Cambiare
Mara: De cualquier forma no los voy a dejar que me toquen. Me voy a escalar la
punta del rbol, desde donde los voy a mirar. Ah no me van a molestar.
Terapeuta: Cmo te sents ah arriba? Mara: Triste. Sola y mirando lo que hacen
los dems (Llora).

Terapeuta: Cmbiate. S el chico. Mara: (Silencio). Terapeuta: Te pasa algo?


Mara: No s quin soy. Terapeuta: Qu sents? Mara: Soy la babosa?
Terapeuta: No s. Qu sents? Mara: Soy Mara. Siento que me parezco a la
babosa. Terapeuta: Hace un dilogo con la babosa. Mara: Babosa, como vos, me
siento sola y rechazada. Siento que sto me lo busco yo sola. Me voy para arriba y
me encuentro mirando lo que hacen los dems, desde lejos. Me arrastro y despus
me asusto, esperando que los dems me hagan algo malo (Silencio).

Terapeuta: Hay algo que quieras decirle al grupo? Mara: (Con los ojos abiertos)
S, siento que no es mi aspecto fsico el que produce rechazo, pero s algunas
cosas mas. Soy agresiva, y me doy cuenta cmo a veces paso por encima de
otros. (A Ada) Pas por encima de vos, Ada, te rob tu prioridad en este sueo.
(Se abraza un rato con Ada, que la acaricia un poco y lloran ambas. Al rato, riendo
y mirando al grupo) Sin embargo, no estoy obligada a ser una babosa, verdad que
no? Terapeuta: Ada, quers trabajar?

Ada: S, quiero ser la babosa. (Se ubica en el suelo y adopta una posicin
enroscada con su cuerpo. Permanece quieta y en silencio).
Terapeuta: Permanece as un rato. Sintete bien, la babosa. Anda describiendo tu
existencia.
Ada: Soy pegajosa. Pesada. Lenta. Voy dejando un brillo por donde voy. No me
Ser es estar en relacin, gusta como soy. No me gustan los de mi especie. Estoy junto a otros. Nos
Y sin relacin no hay existencia pegoteamos. S me gusta estar con otros. Es lindo. Es tibio. No, no me gusta
J. Krishnamurti estar con ustedes! Estoy ac forzada, todo lo tengo que compartir con ustedes la
comida, todo. Me canso, me asfixio.

- 42 -
Terapeuta: (A medida que Ada habla, hace seas a los dems para que se
acerquen y se vayan enrodando corporalmente con ella).
FANTASAS DIRIGIDAS
Ada: Me gusta, pero por un rato, mientras yo quiero. (Forcejea, pero es enredada
una y otra vez por la gente del grupo) No quiero estar siempre con todos ustedes
juntos. Somos iguales, no quiero saber nada ms de ustedes. (Aumenta el forcejeo
y Ada va pasando del fastidio al enojo cada vez ms franco) Bueno, iYa basta,
termnenla!.
Terapeuta: Creo que no logras hacerte or.
Ada: (Gritando) iBasta! Quiero tomar aire! Los quiero, no voy a irme para
siempre! Volver! Pero ahora, Djenme ya! Sultenme! (Se zafa y llora un rato. Si supiese q u i n soy en r e a l i d a d
Siempre con los ojos cerrados, vuelve hacia donde estn los dems, y d e j a r a de comportarme
cubrindolos con sus brazos, llora acaricindolos) Caramba, ustedes saben cunto como lo que creo que soy.
los quiero. Slo que quiero estar un rato conmigo misma tambin. (Abre los ojos, y si d e j a s e de comportarme como lo que creo
mira a todos) Imagino que no necesitan que les diga que estuve trabajando con mis que soy, s a b r a quin soy.
hijos, con mi familia, verdad? Aldous H u x l e y

Este sueo, tan rico en posibilidades, sera apropiado para trabajar durante
mucho tiempo, examinando otros personajes y situaciones, y haciendo a los
dems participar de diferentes maneras. Ocurre que las sesiones psicoteraputicas
tienen una duracin de tres o cuatro horas y en el curso de ellas es imposible
agotar el tema. Arrastrarlo de sesin en sesin, va contra nuestra filosofa, de
trabajar de a una la figura que surge, y muy pocas veces es la misma la que El ser humano rescata para su vida en vigilia, algo de la cualidad mgica del reino
aparece una semana ms tarde. Es as que a veces proponemos una prolongada de lo onrico, cuando se entrega a la actividad artstica.
(algn fin de semana, durante 12 horas), a fin de complementar alguna situacin El arte conoce de este peculiar modo de buscar, que escapa al control de lo
que, como la del sueo referido, tienta a continuar investigndola ms a fondo. racional, cuando se interna de modo ingenuo en el corazn de un conflicto y
emerge con la solucin en forma de obra de arte.

Esta manera de actuar propia del soante y del artista, es posible de provocar de
manera experimental, en el grupo de psicoterapia e inducir en el curso de un
laboratorio.

Nosotros proveemos, en condiciones especiales tramas determinadas sobre las


que los participantes tejen sus fantasas, verdaderas "materias primas" para la
creacin. Esta fantasa inducida, semejante a sueos en vigilia, es la que llamarnos
"fantasa dirigida".
Es semejante a los sueos y a la obra del artista, porque "el soador en vigilia"
trabaja sin estar prevenido por el conocimiento de lo que se propone, y va creando
situaciones que no se pueden relacionar con la propia existencia de manera
concierne an cuando se enfrente a una fantasa dirigida, despus de la primera
vez.

- 43 -
Claro que esta primera vez, su ingenuidad es mayor y el estado anmico que persona que se ha dormido escucha al despertar el relato que de su "viaje" hacen
corresponde a la situacin existencia! surge con mayor libertad. Pero es posible sus compaeros, y entre conciente y no, va reconstruyendo la trama con su propia
repetir la experiencia con la misma o diferente trama, ya que su control no fantasa, como si la hubiera elaborado durante el ejercicio. Esta artimaa infantil, y
alcanzar, seguramente, a toda su persona, y gestos y actitudes pueden sernos tan flagrante para nosotros que lo hemos visto dormir y hasta roncar, es respetada,
tan valiosos o ms que el relato mejor elaborado. sin embargo, ya que de todos modos est creando su propia fantasa, y de modo
bien ingenuo por cierto. Y hasta dndose, a veces, la posibilidad de conocer algo
Para trabajar con, fantasas dirigidas, contamos con un buen nmero de tramas, que le incumbe, en cuanto a viejas conductas a las que todava no permiti caer
que tomamos de autores como John Stevens o Zinker. Otras muchas, que en desuso.
recordamos con gratitud por haberlas conocido a travs del contacto con colegas
que fueron maestros y guas al comienzo de nuestra labor, algunas que surgen Tcnicas
como combinaciones de dos o ms, y otras que inventamos en el momento, si la
situacin lo requiere. Comenzamos por invitar al grupo a ubicarse en posicin horizontal, lo ms cmodo
que pueda, aunque los prevenimos contra un relajamiento muscular excesivo que
A veces, basta, corno en las viejas novelas de Delly o de Corn Tellado, modificar pueda facilitarles el quedarse dormidos. Tratamos de que la luz y la temperatura
muy pocas situaciones para que la cosa parezca diferente (envases nuevos para les resulten confortables, para evitar que las molestias los induzcan a moverse o
viejos asuntos). los distraigan de la tarea.

Viaje por mi cuerpo


Estas formas diferentes y la induccin de un estado de agudizacin de la
sensibilidad corporal, a travs de tcnicas apropiadas, facilitan un debilitamiento
Recin ahora les referimos lo que vamos a hacer. Primero un viaje por nuestro
del exclusivo control de lo racional y una conciencia aumentada de las sensaciones
cuerpo, donde los gua uno de nosotros, luego un viaje fantstica habitualmente
y sentimientos, que favorecen el libre fluir de la fantasa. Se puede, as, postergar,
guiado por otro. Elegimos la fantasa previamente en concilibulo entre
generalmente, el natural deseo de conocer el "significado" de lo que se est
nosotros.
creando.
El "mi" es enfatizado, por el terapeuta que lo dirige, no porque ya fue aclarado al
Un aspecto interesante vinculado a sto, es que la relajacin muscular, que no grupo que el viaje lo realizarn juntos, sino como ayuda - memoria del propio
proponemos pero que aparece casi siempre cuando comenzamos la sensibilizacin terapeuta que dispone as del metrnomo de su propio cuerpo y sus sensaciones
corporal previa al "viaje" fantstico, y curiosamente semejante a la relajacin para regular el ritmo y la velocidad de lo que va diciendo. Por rutina comenzamos
durante el sueo, determina que algunas personas "sigan de largo" y terminen por por los pies, para ir ascendiendo por todo el cuerpo.
quedarse dormidas. El hecho es que algunas de ellas, incluso suean y a veces
alrededor de la trama proporcionada, la que por supuesto es utilizado para Como ya dijimos, no se trata de relajar sino de sensibilizar, tornar conciente, lo ms
"trabajar" la fantasa. Pero la mayora de los que se quedan dormidos olvidan el agudamente posible, cada parte y la totalidad del cuerpo. Decimos as, por
haber soado. ejemplo: "Siento mi mano derecha. Siento el dorso,..', para finalizar
diciendo: mi cuerpo. Este es mi cuerpo. Este soy yo."

Creemos que el dormirse durante una fantasa dirigida, y mxime si no se suea o Supuestamente sensibilizados y concientes de su existir aqu y ahora, comienza el
no se recuerda el sueo, es una forma de rehuir el conocimiento del mensaje viaje fantstico a travs de la fantasa dirigida. El lector puede hallar la descripcin
existencial, de la misma magnitud y el mismo valor, que el no recordar el sueo. de variar, de ellas, usamos solas o combinadas, segn la situacin por la que atra-
viesa el grupo.
Inclusive se puede trabajar "el no haber participado" de un sujeto que se queda
dormido, y es la posibilidad de hacerlo con la "fantasa ausente". Muchas veces la

- 44 -
Luego describiremos algunos de los modos de trabajarlas, casi siempre en forma Reconocer la tienda porque a su entrada est sentada una persona muy anciana y
individual, y de acuerdo a ciertas pautas que comentaremos. sabia... Aqu est... Me acerco a ella... y le pido permiso para entrar.., La persona
me indica que si adentro encuentro lo que busco... para poder llevrmelo deber
El encuentro con el nio que fui entregarle a cambio de algo mo, que sea valioso para m y no por razones
Voy caminando por un camino...Voy prestando atencin a lo que me rodea...Voy econmicas... Si hago trueque, vuelvo con lo qu consegu al grupo que me espera.
mirando a derecha, a izquierda, registrando cuanto veo, oigo y siento...A veces, me
detengo y miro hacia atrs... Delante de m, a lo lejos, veo que alguien se La subida a la montaa para encontrar al hombre sabio
aproxima, que no logro distinguir...Ahora veo que es una criatura...A medida que se Me encuentro en un sitio montaoso... a punto de iniciar una ascensin... Antes
aproxima, me doy cuenta de que es la criatura que yo fui... Ya est cerca de observo todo a mi alrededor... Registro cuanto puedo: la temperatura que hace, la
m...Veo su cara con toda claridad, su figura, su ropa... Tomo su manita en los poca del ao, la hora del da... el clima de este momento... Miro y registro con todo
mas...Permanezco as un rato... Luego me despido y contino mi camino a solas... detalle... Tomo cuenta de mis ropas... inicio mi ascensin... No es mgica... percibo
sin la criatura. mi esfuerzo... Tomo nota de cuanto encuentro en mi camino... Me gua un
propsito... El tener un encuentro con el hombre sabio que vive en la cumbre...
La tienda de juguetes Finalmente llego... All veo su vivienda... Observo cmo es... Entro...Veo el interior
Esta es una fantasa, que muy frecuentemente combinamos con la anterior. Antes de la vivienda... Registro cuanto veo... Me encuentro con el hombre sabio, lo miro,
de separarme de la criatura que fui, entro con ella a una tienda de juguetes...donde observo cmo es, su aspecto, su edad, su ropa, su rostro... Observndolo me doy
busco, no un juguete cualquiera... sino precisamente "aqul"... (No aclaramos si cuenta en qu consiste su sabidura... Le formulo la pregunta que me llev hasta
aqul representa al ms amado que nunca se logr poseer, o cualquiera otra in- all.
terpretacin que los receptores de este ejercicio prefieran hacer para satisfacer las Aqu me da respuestas diferentes...,
necesidades de sus propias fantasas). a) Me responde algo que me disgusta.
b) Me la remite a m.
La tienda de antigedades c) Me da un objeto inslito cuyo significado es la respuesta buscada y que puedo
Luego de un recorrido por un camino habitualmente descrito como en el ejercicio desentraar en grupo.
anterior, me encuentro de improviso... ante una tienda que atrapa mi atencin... d) Me pide algn tipo de trueque.
e) Me da bondadosamente la respuesta buscada
Sus vidrieras estn empaadas y no puedo ver desde afuera qu cosas hay en f) Cualquier otra.
ellas... Entro... y veo que est llena de antigedades... Observo todo a mi Regreso al grupo, el camino de vuelta es observado por m, con tanto detalle como
alrededor... hasta que me fijo en un objeto...Y desde donde estoy... observo a mi el que realic al subir.
manera, mi nueva relacin con lo que me rodea... y con rni propio ser... Recin La subida a la montaa para el encuentro con las distintas edades mas
cuando ya no me queda ms que observar... consigo volver a mi forma humana Esta fantasa es una variante de la anterior. En sta el nfasis est puesto en
para retornar al grupo. distintos sucesos que ocurren durante mi ascensin. A poco de iniciada, encuentro
a la criatura que fui en una situacin penosa... (No doy informacin, puede ser
La tienda mgica donde estn todos los objetos del mundo, concretos y entendida como riesgo, desvalimiento, abandono, por los integrantes segn el libre
abstractos fluir de sus fantasas y sus experiencias vitales,)

Voy caminando por una ciudad que no conozco en absoluto... Creo que se trata de Yo acto... de modo que tengo completa tranquilidad respecto de la criatura y
una ciudad mgica porque todo me es extrao... Adems s que es mgica... contino mi ascensin... Do pronto alguien obstruye mi paso... se trata de mi
Porque voy en busca de una tienda en la que me dijeron que poda encontrar... propia persona, tal cual soy ahora... y Para poder continuar el viaje debo convencer
cualquier cosa que me haga falta... a mi oponente de alguna forma... Finalmente llego a la cumbre y la persona anciana
soy yo, con ms aos y naturalmente ms sabia...

- 45 -
El Museo llama mi atencin y lo observo. Es un objeto inslito, de un color, textura y forma
que no he visto jams. Lo toco con mis manos de diferentes maneras para ver si
Estoy en una ciudad mgica, deambulando por sus calles... tropiezo con un edificio descubro qu es lo que tengo, cuando de pronto, y a causa tal vez de haber
que me llama mucho la atencin porque en su frente est escrito "Museo" y accionado algo sin darme cuenta, me siento transportado al peor momento de mi
a continuacin mi nombre. Entro... Me encuentro con un pasillo al cual dan nume- vida... Salgo de esa situacin y vuelvo al grupo.
rosas puertas, en este momento cerradas.
La caverna
Un pequeo cartel en cada una de ellas indica lo que puedo hallar en el interior de
cada habitacin si las abro... Los nombres se refieren a momentos determinados de Me sumerjo en el agua a gran profundidad, voy tomando nota de cuanto observo
mi vida, que yo recuerdo muy bien. durante mi descenso, veo una caverna y entro all, encuentro cosas que no me
sorprende encontrar y otras inslitas que no puedo creer que veo. Tomo uno slo
Primero leo todos los carteles, finalmente opto por uno de ellos y abro la puerta... de los objetos que veo y vuelvo a la superficie para regresar al grupo.
Dentro de la habitacin, encuentro realizados en cera, los personajes y objetos
correspondientes a esa situacin de mi vicia. Slo falto yo... Me ubico en el sitio que
me corresponde, y todos vuelven a vivir... y yo estoy de nuevo en la misma
situacin que atraves, slo que ahora, s las cosas que me permiten modificar la Las estatuas
escena en cuestin. Lo hago y vuelvo al grupo.
Entro en una casa que no conozco, hay una penumbra suave en la que no consigo
Los disfraces distinguir con claridad... Parece tratarse de algo as, como una sala de exposicin.
Un grupo de personas rodea algo, y hablan entre s... En el centro de ellas, hay
Entro a una casa que no conozco, dentro todo est oscuro. Me gua un propsito: una estatua muy iluminada. Me doy cuenta de que me representa. Ahora oigo los
El de encontrar una habitacin donde se encuentran disfraces.... Tanteando voy comentarios de toda la gente con claridad... Se refieren todos a la estatua que
recorriendo la casa hasta llegar a ella. estn observando...Yo tambin observo la estatua, me fijo en su tamao, en el
material de que est hecha, en la postura que tiene, luego me retiro de la casa y
Aunque acciono el interruptor de luz, no logro iluminar la habitacin. En un armario vuelvo al grupo.
encuentro los disfraces, especficamente estoy buscando uno que me importa
mucho... Lo busco al tacto y lo encuentro.
El ro
Sbitamente me encuentro dentro de un disfraz que no es el que buscaba. Trato de
quitrmelo y no lo consigo... Me resigno a permanecer en l y sigo buscando el que Imagnense sentados, apoyados contra un rbol a orillas de un ro... Permanezcan
quiero... En este momento lo encuentro, entonces se me cae el que tengo puesto... en esta situacin... Registren todo lo que vean, oigan y sientan... Convirtanse en
el tronco... Sean el tronco... Registren lo que sienten desde esta nueva situacin...
dialoguen con el ro... Convirtanse en el ro... Esta vez sean su corriente... Traten
Se ilumina la estancia y comienzo a ponerme el disfraz que quiero frente al espejo, de darse cuenta de qu clase de ro son... como son sus mrgenes... Qu
tambin voy agregndole accesorios que requiere... Contemplo mi imagen en el diferencias, si es que las hay, existen entre una y otra,.. Cmo son los paisajes que
espejo, desde todos los ngulos, recojo el disfraz del que consegu despojarme y atraviesan... en su curso aparece un obstculo... fjense cmo es y de que modo
con uno puesto y con el otro en la mano, regreso al grupo. afecta su marcha... convirtanse en el obstculo,.. Fjense qu estn haciendo
para obstaculizar el ro... dganselo al ro.. "Yo estoy aqu para...... Vuelvan a ser
El objeto mgico ro... fjense en el obstculo que tienen adelante es insalvable... si no lo es de qu
Voy caminado por un sitio, en el que me siento extraordinariamente bien... Observo medios se estn valiendo para salvarlo... convirtanse en pez, elijan uno de los
lo que me rodea... y lo registro y puedo disfrutar de todo... de pronto veo algo que que suelen nadar remontando la corriente cmo se sienten siendo un pez que nada

- 46 -
contra la corriente... retornen al punto de partida... Convirtanse en personas del grupo, Ral. Por sus caractersticas fsicas y la situacin que se haba dado
nuevamente... Sintense otra vez de espaldas con la espalda apoyada contra el durante el curso de ese mismo laboratorio, Lus podra identificarlo fcilmente como
mismo rbol donde estuvieron... Cmo se sienten en este momento?... qu el "otro yo" de la fantasa que se opona a la realizacin de sus deseos.
ven?... qu oyen?... Vuelvan al grupo. Concretamente, si Lus quera reanudar su vnculo con nosotros, deba superar,
por s mismo, el sentimiento de abandono y frustracin que podra llegar a significar
En general, esta fantasa regocija a aquellas personas que por su situacin para l, el que no lo llamramos, y venir por su cuenta. Y luego, verse obligado a
existencial, se sienten poco obstaculizadas, por sus gestalts incompletas, en luchar con Ral para poder ingresar al lugar donde estbamos los dems.
cambio el bloqueo del curso del ro llega a producir verdadera angustia a aquellas
que suelen interrumpir sus propios procesos. Esta fantasa tiene casi un valor Esta fue una prueba muy dura y difcil para todos. Para Lus que se demor ms
diagnstico, en cuanto al tipo de bloqueo de energa que es utilizado, tiempo que el previsto por nosotros, en darse cuenta de que nadie ira a buscarlo.
preponderantemente, por cada persona, de acuerdo a su tipo de neurosis. Para los dems integrantes del grupo y terapeutas que nos encontrbamos
divididos entre el deseo de seguir adelante con la experiencia, forzando, de alguna
Relatos de fantasas manera, el crecimiento de Lus y,.por otra parte, la comprensin de que sto es
Lus es un joven psiclogo que recin comienza a trabajar con tcnicas gestlticas, utpico, ya que no es posible forzar el crecimiento de nadie. Desebamos Ir a
y manifiesta una admiracin sin lmites por Perls. La siguiente, es una sntesis del buscarlo y explicarle todo, y dar por concluida la experiencia. Lus volvi por s
relato que hace de su viaje por la montaa a travs de las distintas edades. mismo muy angustiado y llorando, y se neg a luchar con Ral. Ms calmado
expres que haba llegado a darse cuenta de muchas cosas. Que realmente no
"De pronto, en una curva del camino, oigo un llanto de nio, me acerco y veo que haba acabado con su niito abandnco, (sto lo lograra ms adelante con otros
soy yo, a los 4 o 5 aos. Pregunto al nio que fui qu es lo que le pasa y me trabajos). Que el principal! enemigo de su vida en este momento, era su
contesta que se ha perdido. Le indico por donde debe seguir, me aseguro que no omnipotencia que lo arrastraba fcilmente a buscar soluciones mgicas a sus
corra peligro y sigo. De pronto, un hombre en el que me reconozco tal como soy conflictos, va imaginar que ya los tenia resueltos (Ya soy Perls).
ahora, salta sobre m y me ataca. Me trabo en lucha con l, lo mato, lo arrojo al
abismo y sigo mi camino. Llego a la cumbre de la montaa y me encuentro con Esta fantasa fue til pan Lus, en el sentido de que le permiti continuar una
Perls, a quin le pregunto cmo es el camino que debo seguir para ser como l. terapia que ya daba por finalizada, y le facilit adems, un comportamiento mas
Y el viejo me contesta: "A ver, convirtete en Perls y habla con Luis". Yo asumo humilde en el grupo de laboratorio., logrando as un encuentro ms verdadero y por
que soy Perls, y me digo a m mismo: "No tienes que seguir ningn camino en lo tanto ms satisfactorio con los dems.
especial, ya ests en l".
Y volvindose hacia nosotros, agreg: "Y aqu estoy". Nada nos haca sospechar
que l se sintiera tan bien como expresaba, ni sus gestos, ni el tono de voz, ni su
conducta hasta ese momento. Algo sabamos, por otro lado, de su historia La tienda mgica
personal, referida durante su presentacin, de abandono en su tierna infancia,
como para aceptar como cierta su manifestacin de haber vencido las dificultades Alicia es una estudiante de medicina, asmtica y bastante excedida de peso.
de ese camino, de manera tan absoluta. Pensamos, entonces, someterle a una Describe su "visita" a la tienda mgica de la siguiente manera...entonces la vi. La
prueba vivencial. Le sugerimos que saliera de la habitacin, donde estaba el grupo ms bella y grande mquina de picar carne del mundo. La cargu a mis espaldas, y
reunido, y se fuera a un lugar cualquiera de la casa, desde el cual no pudiera or lo aqu estoy, con ella.
que conversbamos en grupo. Terapeuta: S la mquina de picar carne y descrbenos su existencia.
Alicia: (Se arrodilla en el centro do la habitacin y se envuelve los hombros con los
Una vez sin l, expusimos al grupo nuestra inquietud. Entre todos, imaginarnos que ojos cerrados. De pronto los abre y mirando a la terapeuta, dice) -No puedo, me
llevarle a l, a una situacin de recreacin del abandono infantil, podra darle la voy asfixiar. Terapeuta: Ensaya asfixiarte. Investiga a ver qu te pasa. Alicia:
oportunidad de verificar actualizndola, su propia capacidad de cuidar de s mismo, Tenes Decadrn inyectable?
" de ser Perls". Decidimos no llamar/o, y dejar en la puerta como guardia a un joven

- 47 -
Terapeuta: Tengo, echar mano a eso si es imprescindible, pero antes fjate si es Terapeuta: Cmbiate.
algo que puedas vos investigar de qu se trata. Alicia: (Se para. Llora) Moverme as sola no tiene gracia. Es siempre lo mismo.
Alicia: Bien (Vuelve a cerrar los ojos) Soy una gran mquina de picar carne. Soy Giro y giro y siempre estoy en el mismo lugar.
de hierro pintado de rojo, por fuera, y de esmalte blanco por dentro. Terapeuta: Cmbiate.
Terapeuta: Haz un dialogo entre las dos partes. Alicia: (Como parte de afuera) Pues entonces asfxiate y mor. (Presiona con sus
Alicia: (Se para en el centro de la habitacin y con los brazos juntos por encima de brazos y comienza a tener dificultades respiratorias. Uno de nosotros sale a buscar
su cabeza, realiza un movimiento detorsin con todo el cuerpo, espiralado, con Decadrn. Obviamente nuestro susto fue infundado) Esto es lo que va a ser para
bastante gracia, y hasta por un momento permite olvidar lo gorda que est) Soy la siempre tu vida, y yo estoy aqu para que no lo olvides: Sers gorda y quieta
parte interna de la mquina. Soy una espiral. Cuando me muevo as (lo hace) porque as lo quiero, porque no me gusta como vivs, porque no quiero tu libertad
muelo la carne. La liquido. (Sonre. El grupo entero suelta una risita. Sigue sexual, porque te prefiero muerta (aprieta ms) a prostituta. (Suelta el abrazo y
movindose. Se detiene) llora. Cuando se calma, se vuelve hacia el grupo y les comenta) Saben? Hace
poco fui a un dietlogo para comenzar una dieta. Como el rgimen inclua carne
picada absolutamente carente de grasa visible, y yo recordaba una mquina igual
en casa de mi mam, pero ms chica que la que les mostr, se la ped. Mam me
dijo que se la dio a Graciela, mi hermana, que senta mucho no poder drmela.
Seguramente, ella confiaba en que yo no llamara a Graciela, ya que nunca fuimos
amigas, pero lo hice. Graciela me dijo que no saba ni de la existencia de la
mquina. (Rompe a llorar nuevamente)
Terapeuta: Ven, hac un encuentro con tu mam. (Poniendo frente a Alicia un
No tienes experiencia
En pasar hambre dijo. almohadn).
Me sent humillada. Alicia: (Con los ojos cerrados, y muy tiesa) Mam, te odio.
Y que experiencia Terapeuta: Pone tus manos sobre ella. (Lleva las manos de Alicia sobre el
Tienes t, Seor de Dominio?
Ursula K. Le Guin
almohadn) Sintela con tus manos a tu mam.
Alicia: Mam, te odio. Nunca me quisiste. Slo Graciela existe para vos. Ni
siquiera Mnica tan chiquita. (Sus manos se deslizan convulsivamente arriba y
abajo del almohadn).
Terapeuta: Cmbiate. S tu mam.
Alicia: (Se sienta enfrente, sobre el almohadn) Alicia, sos ridcula. Yo las quiero a
las tres por igual. Pasa que con vos me entiendo menos, no entiendo tu modo de
ver las cosas.
Terapeuta: Cmbiate-Alicia: (Gritando) Mam, ests mintiendo! Siempre me
ments! (Comienza a pegar con los puos sobre el almohadn) Estoy cansada de
tus consejos! Djame vivir! Estoy podrida de ser gorda y asmtica! (Mientras
grita, llora y golpea con los puos sobre el almohadn, hasta que no puede ms
por fatiga, y cae sobre l. Es obvio que no se siente bien. Todava llora bajito y
Terapeuta: Cmbiate. S la parte de afuera. acaricia el almohadn con la mano. La terapeuta se acerca para orla.) Sin
Alicia- (Adopta nuevamente la postura que tena cuando describa la mquina, slo embargo, te quiero tanto, si tan siquiera alguna vez me hubieras demostrado que
que ahora hace ms fuerza con los brazos) Soy la parte de afuera. Soy rgida. me queras. (Llora v sigue acariciando el almohadn)
Quieta. Estoy aqu (a la parte de adentro) para que no puedas moverte. Para que Terapeuta: (La toma en brazos y la acuna) Mi nena chiquita... Mi nena preciosa...
no te salgas de m. Para que no hagas ms de lo que debes hacer. Claro que la quiero mucho... (Sigue balancendola y la abraza. Alicia llora y re

- 48 -
abrazada a la terapeuta. Finalmente se calma y vuelve a su sitio cansada y con el de mi padre. Grande, fuerte, censor, y con una mueca contrada. Lo que me hace
rostro feliz. sentir pequea e insegura. Le vuelvo la espalda y voy
Alicia: Ahora Para qu quiero mi gordura y mi asma? (Re. hasta, el ropero donde busco hasta encontrar el traje de bailarina. En la habitacin
El grupo re con ella). hay luz y me doy cuenta de que ya no tengo puesto el traje de pirata, que est
cado a mis pies. Me pongo el de bailarina y me veo en el espejo. Me gusta como
estoy, y oigo la voz de mi padre que me dice: Bali para la gente, nena!.
El terapeuta se ubica del lado donde Patricia sealaba el espejo y asumiendo al
padre le dice: Eso es lo que tens que hacer. S una linda nena y olvdate de esas
tonteras tuyas, de tu independencia. Qu es eso de querer resolver sola tu vida,
si no tens capacidad para saber lo que deseas?
Patricia: (Llorosa) i Crtala!! quers? Nunca me vas a entender, as que pens
lo que quieras. (Hace ademn de retirarse del centro, pero permanece con la
cabeza inclinada)
Terapeuta: Qu sents en este momento?
Patricia: (Llorando) Me siento desvalida y paralizada frente a los argumentos de
pap.
Terapeuta: Decselo a tu pap.
Patricia: Pap, no me dejas mover.
Patricia (Como pap): Es eso exactamente lo que quiero.
Patricia: (Todo lo que ocurre a continuacin es puramente corporal y sin palabras.
Primero se tiende en el piso, permaneciendo un largo tiempo sin moverse. Luego,
comienza a desplazarse por el piso muy lentamente y con los ojos cerrados. De
pronto, se detiene frente a una ventana donde permanece esttica).
Terapeuta: Qu ves?
Patricia: No estoy segura, est borrosa, sigo viendo a mi padre y me veo vestida
Incl us o las p e q u e a s c o s a s r e s u l t a n ser gr a n d e s de bailarina bailando.
c o s a s y se hac en i n t e n s a m e n t e i n t e r e s a n t e s . Terapeuta: Pnete el traje de pirata. Patricia: (Lentamente hace el gesto, de
Fritz Lber colocarse el disfraz con las diferentes prendas que lo componen, con los ojos
cerrados. Seguidamente se abrocha la casaca, se coloca el sombrero sobre la
cabeza y empua la espada. Ahora se coloca frente al espejo y se queda inmvil.
Los disfraces
Terapeuta: Qu ests viendo?
Patricia tiene 30 aos y es linda, pero su comportamiento con los dems tiene poco
Patricia: Sigo viendo a mi padre.
que ver con su edad y sus posibilidades de atraer sexualmente o intelectualmente,
Terapeuta: Qu quers hacer con eso?
a pesar de su capacitacin. Est llena de mohines y gestos graciosos con los que
Patricia: (No responde, lentamente alza la espada apuntando hacia arriba, besa la
se granjea una simpata inmediata al estilo de la que se dedicara a una nia o
cruz de la empuadura solemnemente, con los ojos cerrados, en una a
adolescente muy joven. Ms bien despierta una ternura sonriente que respeto por
concentracin extrema. Su rostro se curva hacia atrs y con ambas manos asesta
la mujer que es. Este es el relato de su fantasa: ...entro a una habitacin sin luz,
un golpe imaginario al imaginario espejo, con tanta fuerza que instintivamente, los
en la que hay un gran espejo y un ropero, los reconozco al tacto. Estoy buscando
vecinos nos corremos para librarnos de las astillas del espejo. Patricia cae hacia
un disfraz de bailarina clsica que tuve cuando era nia... Pero se me impone un
atrs sentada, todava con las manos en el gesto de empuar la espada que deja a
disfraz de pirata y me veo ataviada con l sin desearlo. Me molesta. Trato de
su lado. Luego abre los ojos, sonriente y gozosa).
quitrmelo a los tirones. Desde el espejo me observa, no mi propia imagen, sino la

- 49 -
Terapeuta: Qu pasa?
Patricia: (Riendo) Qu linda la luz que entra por la ventana!
Qu lindos son todos ustedes!
Es en este laboratorio, que Patricia termin su bsqueda de s misma. Si bien no
es a partir de este momento que se observan cambios muy llamativos en su
conducta. Sus movimientos se lentifican, su hablar se vuelve ms pausado y puede
renuncia a sus risitas inmotivadas. La "mariposilla" cede paso a la mujer, y no me
parece casual que sea en este laboratorio que ella se encuentre con quien es hoy
su esposo.

El encuentro con el sabio en la cima de la montaa

Mirta describe minuciosamente las distintas vicisitudes para llegar a la cima de la


montaa, y encontrarse con la persona sabia all arriba.
Mina es una muchacha de aire abierto y franco, de modales agradables.
Aparentemente una mujer libre y sin trabas, busca, no obstante, la terapia, por no
encontrarse satisfecha de sus realizaciones hasta el momento, que atribuye a
impedimentos que no logra explicarse. Se siente como si en algn punto del
recorrido se le "acabara la cuerda", y en vez de seguir adelante con sus proyectos
vitales, regresara al "status quo" confortable y poco estimulante. Es hija nica de
padres muy ricos, con quienes vive. Arrastra desde hace algunos aos una
relacin de noviazgo poco gratificante con un hombre apocado e irresoluto, con el
que no consigue progresar ni cortar.
Mirta: Llego a la cima de la montaa ya de noche, y encuentro sentada a una
anciana en quien reconozco a la que voy a ser yo. Le pregunto: "Voy a llegar?" y
me responde mostrndome una cantidad de objetos que pasan a tal velocidad que
consigo ver muy pocos. Recuerdo un reloj pulsera, un cofrecito muy chiquito
cerrado, un libro, y por ltimo me entrega un par de zapatos de mi medida, con los
cuales comienzo mi descenso, que es muy suave y bastante rpido, muchsimo
ms que el ascenso, y llego al grupo con mis zapatos en la mano. Antes de que
alguno del equipo teraputico le de una indicacin, Mirta comienza rpidamente a
auto interpretarse.
Mirta: Este ejercicio me huele a bsqueda de cules son mis obstculos para
crecer y poder llegar a ser yo. La enorme cascada de agua que cruc, me hace
pensar en mi madre, primer obstculo, fro, que una vez sorteado me permite
seguir mi camino hacia m misma. Los zapatos que me traigo, que me dio la vieja
que voy a ser, son demasiado concretos como para que no se me ocurra que mi
"yo vieja" quiere que camine y siga mi camino a pesar de todo. Tambin Javier se
me aparece como una enorme cascada que no me deja crecer, pasar...
Terapeuta: (Esta eleccin es enteramente arbitraria y obedece a la curiosidad
despertada por la mencin de que el cofrecito estaba cerrado S el cofrecito.
Mirta: (Buscando la posicin en la cual se sienta cofrecito) Soy un cofrecito muy
chiquitito. Soy de cobre y de color verde. Mi tapa es redondita, es sta. (Se toca la
cabeza) Estoy cerrado. Estoy forrado con pana roja. Adentro tengo unas
medallitas, son poquitas.

- 50 -
No s cuntas son. Me cuesta contarlas, son tres rnedallitas las que tengo adentro. Terapeuta: (Al grupo) La medallita est en su cajita. Pongamos la cajita en el
Dos son de oro y estn sobre la pana. Y una es redondita, plateada y con cofrecito y a ste en el placard. (El grupo arma una nueva cobertura de
inscripciones, y est adentro de m en una cajita de cartn. Yo estoy guardada almohadones por encima de la que hay, y a una sea de la terapeuta se acuestan
dentro de un placard que est cerrado con llave. todos sobre la pila)
Terapeuta: S la medallita. Mirta: (Su voz se oye apenas) Me siento cmoda y tengo una sensacin de paz.
Mirta: (Busca con el cuerpo ser medallita y se extiende boca arriba)
Terapeuta: As quiero que te quedes. Encerradita. As ests segura, sin miedo. As
Terapeuta: Me parece difcil ver una medallita redondita tan alargada.
no te pasar nada. Qudate as conmigo.
Mirta: (Sigue buscando posiciones con su cuerpo basta ubicarse en una posicin
Mirta: Quiero salir, hace calor y me siento aburrida... Basta no soy ms medallita!
en la cual es posible verla redondita y achatada). Soy una medallita. Me aburre
Soy Mirta! IMaml (Llora y comienza a forcejear. El grupo aumenta la presin
muchsimo estar ac adentro. Me gustara, cajita de cartn, que te abrieras, y vos
sobre ella y Mirta forcejea vigorosamente) djenme salir! Me asfixian, cretinos!
tambin cofrecito, y me dejaran salir ms seguido. Ac adentro me siento aburrida
Salgan!
y achatada.
Terapeuta: S la cajita de cartn que contiene la medallita. Terapeuta: Lucha Mirta, es hora de que te esfuerces en luchar por vos, por tu vida.
Mirta: (Fcilmente encuentra la postura corporal para representar la cajita de Mirta: (Lucha desesperadamente hasta que logra salir agotada por el esfuerzo y se
cartn). Me gusta mucho guardarte. Yo tambin quisiera salir de este encierro. (Sin deja caer sobre los almohadones. Est sonriente). Pucha que fue difcil sacarse a
indicacin del terapeuta, Mirta cambia de postura corporal, se coloca como al mam de encima, pero es posible. (Jadea largo rato) Me siento muy bien. Me
comenzar el trabajo, evidentemente es el cofrecito) Vos, cajita, no me importas siento mejor todava con mis compaeros de grupo. No s por qu pero siento que
porque sos fea. No me importa que ests encerrada. En cambio, vos medallita, sos mi trabajo les sirvi a todos. Estoy rota pero vali la pena.
tan linda y brillante, que me gustara que pudieras salir de tu encierro, me gustara
abrirme para que pudieras salir. (En esta postura, Mirta permanece esttica. Se
halla en un impasse).
Terapeuta: S el placard.
Mirta: (Se incorpora y extiende los brazos y separa las piernas. Dice con voz grave)
Soy el placard. Soy grande. Estoy cerrado con llave para guardarlos y protegerlos,
para que ningn intruso pueda robarlos. Dentro de m estn seguros y bien
cuidados de los peligros exteriores. Terapeuta: S el peligro exterior.
Mirta: (Se ubica enfrente y comienza a temblar, no dice nada y no responde a los
requerimientos de la terapeuta acerca de lo que siente y le pasa).
Terapeuta: Volv a ser la medallita.
Mirta: (Nuevamente adopta con su cuerpo la posicin de medallita) Estoy
calmndome. Me siento ms tranquila, otra vez soy la medallita, aburridita y
achatadita en mi cajita. Se me pas el pnico.
Terapeuta: Eso es, medallita, qudate ah dentro protegida y encerrada. No salgas
de ah porque afuera estn los peligros del mundo. Encerradita te quiero, como
debe ser. (A medida que va diciendo sto, va encerrando a Mirta entre
almohadones sin hacer presin.
Mirta permanece quieta y su respiracin se va acompasando, el grupo teme que se
asfixie y la terapeuta que se quede dormida).
Mirta: No me gusta estar encerrada. Quiero salir. (Pero sigue en su cmoda
situacin) No me gusta aburrirme.

- 51 -
JUEGOS

Ser yo m i s m o i n c l u y e
arriesgarme,
intentar n u e v a s f o r m a s de ser,
a c e p t a r los ries gos de nuev as
maneras de "ser yo mi s mo ".
Hugh Prather

El juego induce a travs del "como si" que le es propio, la experimentacin con
nuevas maneras de ser y de hacer, consigo mismo y los otros. Por su contenido
hondamente vivencial, los contactos se tornan ms verdaderos. Adems, se hace
posible indagar comportamientos diferentes a los habituales, debido a que lo
ldico, generalmente, no inspira temor. Es ms fcil, por ejemplo, mostrar deseo de
poder desde un len, que desde !a persona que se es cotidianamente.

Por otra parte, algunas personalidades muy rgidas, y por ende, con un repertorio
de conductas muy escaso (lo paradjico es que suelen ser consideradas como
"todo un carcter", ya que no suelen desdecirse ni dar marcha atrs), pueden, a
travs del juego, ensayar, y disfrutar, y aprender mayor nmero de conductas.

Si es cierto que en cada uno de nosotros habita una multitud, la realidad es que
permitimos la emergencia de muy pocos de estos personajes.

El juego, al accionar en el "como si", permite conductas que logran zafarse de


algunos controles "morales", ya que lo "no digno" es adscrito al personaje y no a la
persona.

- 52 -
Hay dos clases de juegos: los de regla fija (games) y los de creacin libre (plays). Este captulo trata nicamente de aquellos que jugarnos concientemente, con
Nosotros trabajamos nicamente con stos ltimos, utilizando estructuras que objetivos teraputicos. Estos son, primero, la desestructuracin de roles fijos.
actan, como en las fantasas dirigidas, a la manera de armazn (fondo). Sobre l Segundo, la experimentacin de roles vividos como no propios, o al menos no
despliegan su imaginacin (figuras) los participantes. Los "games" tienen un habita "la prctica y el soador", "la nena buena y la nena mala", el imaginativo, el
reglamento al que es imposible eludir, los nuestros, en cambio, tienen slo algunas prepotente, el genio, pueden investigar e intercambiar sus roles. La confrontacin
pautas. o corroboracin de las propias aptitudes (y fantasas de aptitudes, que no es lo
Al igual que en las fantasas dirigidas, disponemos de un repertorio que utilizamos mismo), permiten comprobar que a travs de lo a r t i f i c i o s o del juego, es posible
segn las situaciones. Algunos juegos los hemos descrito en otros captulos ahondar en Falencias, sin que las heridas narcissticas hagan doler demasiado.
(agresiones y echadas, por ejemplo, en "Laboratorio). De otros daremos algn
listado. Otros los creamos en el momento, de acuerdo a alguna particular Todos los bloqueos de energa, pueden ser abordados va juegos. Es posible
circunstancia por la que atraviese el grupo. Ejemplo: Al final de una sesin de usarlos a la manera de los espejos deformantes de los parques de diversiones,
grupo, en la cual tuvimos la sensacin de que existan situaciones inconclusas, para poner de relieve y ridiculizar caractersticas personales no aceptadas por la
entre los participantes y con nosotros, posiblemente de proyecciones que no propia conciencia (volvindolas de ste modo ms digeribles).
terminaron de rescatar, propusimos jugar al "laboratorio". Ellos deban sintetizar los
momentos ms sobresalientes del laboratorio. Hay juegos que responden a la consigna gestltica de no oponerse a lo que surge,
La condicin era que nadie se representase a s mismo. Incluso algunos tenan que sino de dejars e e s t a r en ello, an exagerndolo.
hacer de nosotros. Les dimos tiempo para que lo prepararan, (slo pocos
minutos). A este orden de cosas adscribira el juego de la incomunicacin (ver
descripcin). Desde este punto de vista, el juego es un instrumento paradojal,
El resultado fue, no solamente una desopilante representacin, sino que se dado que en un comienzo se constit uye en una alianza con aquello que se
consigui algo ms importante: algunas personas completaron trabajos incon- quiere evitar, y termina por convertirse en la herramienta mediante la cual se
clusos. Otras, a travs de la identificacin, se atrevieron a situaciones personales trasciende la dificultad.
nunca abordadas.
Finalmente, otras pudieron abandonar la solemnidad, en funcin del tratamiento, de Tambin f acil it a el l i9br e f luir de vivencias afectivas interrumpidas en su
situaciones angustiosas. Esto les permiti rerse con frescura de s mismos. curso. Permite y forma parte de un "darse cuente." del momento existencial que
Para los terapeutas fue un verdadero y regocijante muestreo de nuestras atraviesa el grupo, y del de aquellos que lo integran.
dificultades y carencias.
Juego de la incomunicacin. (Para que deflectores y confluentes registren su
Cuando aceptamos jugar roles con los que no nos identificamos de entrada, vamos peculiar modo de cercenar emociones).
integrando aspectos vividos como no propios, o lo que es lo mismo, sintiendo
"nosotros" lo que hasta hace poco vivimos como "no nosotros". As facilitamos la Este juego tiene dos vertientes: A) la incomunicacin, que crea "maneras de ser
fluidez en la alternancia figura-fondo, con lo que nuestra vida gana en riqueza y determinadas", B) Distorsiones del lenguaje.
movimiento.
A) Para jugar a los incomunicados, elegimos tantos roles como personas vayan a
participar del juego: el Apaciguador, el Pontificador, el Distrado, el Agresivo sin
En otro orden de cosas, podemos visualizar a los juegos como divididos en dos
motivo, el Bromista, el Que no Entiende, o No Oye, el Inoportuno (habla a
grupos, "los juegos que todos jugamos" (y que no representan tan slo el ttulo del
destiempo), el Autorreferido, el Manipulador, etc.
libro de Erich Berne), son aquellos que todos jugarnos sin darnos cuenta, (y que
El juego se inicia repartiendo stos u otros roles, que dificultan la comunicacin, y
por lo tanto no incluimos en este captulo). Nos limitamos a mencionar algunos de
que corno tales van a ser rotativos, aproximadamente cada cinco minutos.
ellos: "el beb llorn", "la maestra ciruela", "la mamaza grandaza", etc... ( V e r
Capas en el captulo "El qu es qu...")

- 53 -
Otros roles a repartir, pero stos van a ser fijos durante todo el juego, son los sobre las personas sino slo sobre los animales que esas personas les recordaron.
miembros de una familia. El tema a discutir puede ser cualquiera y se elige en el
momento. La accin la inicia cualquiera atenindose al rol que le corresponde en c) Se les invita a hacer su presentacin desde el animal elegido, adoptando
esta vuelta, y todos interactan de acuerdo a su caracterstica. Despus de cinco gestos, mmica y actitud corporal que adscriben a ese animal.
minutos, los roles de temperamento se cambian rotndolos en el sentido
de las agujas del reloj., El juego contina hasta que todos hayan jugado todos Rogelio y el Hipoptamo. Rogelio es director de un grupo de teatro en una
los roles. Una vez hecho sto, el grupo comenta la experiencia. Qu roles pequea ciudad. Es el primero en presentarse, (sto fue una suerte, por lo que
fueron ms fciles y divertidos de jugar? Con cules se identifican aspectos despus ocurri, ya que marc una tnica al resto de los integrantes, que
propios? Cules fueron los ms difciles? Es conveniente atender pudieron, gracias a l, "meterse" ms en sus respectivos personajes'). Es que des-
especficamente a stos ltimos, ya que con frecuencia, es en stos donde la pus del trabajo de una persona sin caractersticas fbicas, desaparecen buena
gente suele ocultarse sus dificultades. parte de las inhibiciones habituales. Se consigue "permiso" para mostrar facetas
que la vergenza generalmente oculta.
B) Consideramos que una manera ms fcil de aprender un lenguaje que
realmente trasmita lo que se piensa y se siente, es jugar hablando de las Ya desde los primeros movimientos pesado (recordemos que el hipoptamo se lo
distintas maneras que recomendamos evitar en el captulo "Pautas...". As, por vi a otro, no a s mismo) empieza a angustiarse, y cuando comienza a hablar, ya
ejemplo, invitamos al grupo a expresarse con frases impersonales, o bien slo est llorando.
est permitido usar la segunda persona del singular o plural (sto resulta
bastante divertido pues muy frecuentemente se arma una batahola Rogelio: Soy un hipoptamo pesado y torpe. Me qued en este charco de barro y
infernal, ya que la segunda persona origina sentimientos francamente hostiles). como soy tan pesado, no puedo salir. Entonces doy vueltas y vueltas (lo hace) y lo
La utilidad de estos juegos estriba en el hecho de que las dificultades se hacen tan nico que hago es embarrarme ms y ms. Coordinador: Decle eso al charco.
patentes, que la gente se da cuenta por s misma y no es necesario explicar nada. Rogelio - Hipoptamo: Charco, no puedo salir de vos. Doy vueltas y vueltas, pero
siempre me quedo aqu.
Los animales Coordinador: S el charco.
Transformarse en animales es algo que ofrece pocas resistencias, y suele ser Rogelio - Charco: Para qu te quers ir Hipoptamo? Dnde vas a estar mejor
vivido de manera grata. Como la intencin, bsicamente, est dada en relacin con que aqu? No sabes que un hipoptamo se seca fuera del agua? Coordinador:
la posibilidad de rescatar proyecciones, y de aprender nuevas maneras de Cmbiate
contactar y comportarse, el modo en que se juega sto, ofrece variantes segn las Rogelio - Hipoptamo: S, pero este lugar es muy chico para m. Cierto que aqu
situaciones en que se quiere aplicar. La siguiente es una de las posibilidades. estoy seguro, pero me aburro. Quiero salir y conocer el mundo. (Llora otra vez).
Coordinador: Cmbiate.
a) Se invita a la gente a mirarse detenidamente, sin hacer ningn tipo de Rogelio - Charco: No tenes seguridad de sobrevivir afuera. Qu garanta tenes de
encontrar otros charcos? Qudate conmigo que vas a estar ms seguro. (Se
comentario, tratando de ver a los dems como animales. Es importante que se
queda pensativo un rato y empieza a rer).
respete la consigna que desde el principio al fin de este juego, nadie va a confesar
Coordinador: S Rogelio.
a nadie qu animal le vio.
Rogelio: Es muy gracioso, pero durante un largo rato, me angusti bastante. No
me imagin que iba a salir por este lado. Ya me doy cuenta de qu se trata.
Se espera hasta que .odas .as personas confirmen haber terminado de ubicar los Hace tiempo que estoy acariciando la idea de salir de esta pequea ciudad e
animales. intentar nuevas posibilidades en otras partes. Lo que pasa es que aqu me siento
muy confortable, algo as como la cabeza del ratn. Fuera no tengo garantas de
b) Se les pide que repasen mentalmente los "animales" que vieron, y que elijan ser ni siquiera cola de len. Y pensar que el hipoptamo pesado y torpe yo se lo
el que ms les desagrad. Se insiste en que esta eleccin no lo hagan recaer vea a...

- 54 -
Coordinador: Ni se te ocurra decir el nombre! lo otro que surge, es tambin consecuencia de lo anterior: Quin sabe cul
es la ltima semana de su vida?
Adems del rescate de proyecciones (vimos como Rogelio rescat su propia
pesadez vivirla como temor al cambio), los juegos sirven tambin para el ensayo d) Se les pide que compartan sus vivencias de ese momento, qu sienten?,
de conductas no habituales. Es as, como luego de todas las presentaciones, se qu desean hacer?, cundo piensan hacerlo?.
les invita a interactuar. As el que se espant viendo en el otro a un lobo, puede
llegar a sentirse muy confortable siendo l mismo el lobo que persigue al tierno e) Se les sugiere que empleen esta semana prxima en cumplir en la "realidad" lo
corderito. De todos modos, siempre es bueno volver a recordar lo saludable que es que ya hicieron en la fantasa., llamar a un amigo, escribir la carta esa, sincerarse
salirse, aunque sea por un rato, y mediante el juego, del rol de "pobre vctima " y con alguna persona especial. De hecho, lo que verdaderamente importa est
arriesgarse al de "villano". fundamentalmente en el plano de los sentimientos y sensaciones. Algunas veces,
pocas, algn placer intelectual, leer un libro, ver una pelcula. Lo superfluo se hace
Los personajes muy evidente, y un fino sentido de vicia que importa comienza a surgir.
Las indicaciones son aproximadamente las mismas que en el anterior. Una
posibilidad diferente es la de que cada cual elija el propio personaje, desde el cual
El manicomio
hace su presentacin. Los personajes pueden ser elegidos dentro de la realidad
actual, o ser histricos o de ficcin. La nica condicin exigida es la de ser lo Este es un juego que facilita el abandono de pautas de control rgidas. Por eso es
bastante famoso, como para ser conocido por los dems. vivido como amenazador, por lo que no se recomienda para grupos que recin se
inician. El clima ideal para desarrollarlo, es el de un grupo en el que los vnculos de
La ltima semana de vida solidaridad y confiarla mutua, as como de permisibilidad, tengan la suficiente
a) Comenzamos con un recorrido por el cuerpo, a los fines de. sensibilzalo, y solidez, como para no ofrecer dudas. La consigna es la siguiente: Van a imaginar
forzar as la conciencia de s mismos de los participantes. Luego se les sugiere que se encuentran solos, en una sala cerrada, de un hospital psiquitrico.
imaginar que sta es la ltima semana de vida. Que imaginen la situacin que
quieran, pero que eviten ubicarse en una enfermedad invalidante. Se les da tiempo Primero, mtanse cada uno de ustedes, con lo que sienten que sera su particular
para que se interioricen de esta situacin. manera de volverse locos. Despus interacten. No habr mdicos ni
enfermeras con ustedes. Tendrn que bastarse a s mismos. Si se presenta
b) Se les pide que recorran da a da, incluso hora a hora, el tiempo que les queda alguna situacin difcil, tendrn que resolverla por su cuenta.
por vivir, y que imaginen como van cubriendo esas horas, que quieren hacer, a
quienes quieren ver, qu cosas tienen que decir. Se les recomienda que sean Llamen slo en c-aso de situacin lmite. (Naturalmente todo sto ocurre en el
absolutamente realistas, esto es, que no planeen un viaje si carecen de pasaporte "como si", ya que nosotros s permanecemos en el recinto mientras dura la
o de dinero para hacerlo. Que recuerden que tienen esa sola semana, y que por lo experiencia). Reservamos un tiempo, una media hora antes de terminar el
general, sto es poco tiempo para pensar en "vender propiedades". encuentro de ese da, para dar por concluido el juego, en cualquier punto que
ste, volver a las "normalidades" y compartir las vivencias.
c) Cuando todos los participantes hubieren terminado, se les invita a que
compartan con los dems sus planes. La barra de caf
Este juego es la "antigestalt". Es un recurso del que nos valemos, a menudo, para
Entonces, luego de orles, se les hace reflexionar acerca de lo que estn que ciertos postulados gestlticos puedan surgir, por contraste, del seno mismo del
postergando para la ltima semana de vida. La pregunta es: Hay algo de lo grupo.
que se den cuenta? La respuesta inmediata est vinculada al hecho de sus Por turno, cada integrante se vuelve "fantasma". Es decir, existe, pero no es visto
postergaciones. Obviamente si se trat a de hechos tan importantes como para ni odo por los dems. Estos aprovechan su "ausencia", para hablar todo lo mal
tenerlos presentes en la ltima semana de vida, por qu esperar entonces?. Y que pueden. Sus defectos son desmenuzados sin piedad. Naturalmente, se

- 55 -
interrumpen, cuando el coordinador, hacindole una sea al "fantasma", lo invita a La fotografa familiar
sentarse a la "barra". En ese momento, algn otro de los participantes se vuelve
"fantasma" y as sucesivamente. a) Se les pide que traigan una fotografa personal, de cualquier edad, en la que se
encuentren juntos los miembros ms importantes de su familia.
Adems de su objetivo principal, que es patentizar la honestidad de todo
encuentro, este juego sirve tambin para despejar el ambiente de algunas b) Se les pide que designen a los miembros del grupo, que van a representar a sus
molestias que pueden ir acumulndose, a lo largo de las sesiones. Los familias, y que los ubiquen corno aparecen en la fotografa, colocndose a s
coordinadores solemos integrarnos a la barra, tanto en calidad de "fantasma" como mismos en el lugar que tienen en ella.
de "chismoso".

La mquina desfencilicador de incofler goldes c) Desde el lugar en que estn, deben tratar de registrar sus sensaciones ahora.
Como se sienten en ese sitio, donde o cerca de quien o lejos de quien les gustara
Este juego conviene proponerlo a grupos que tengan un tiempo suficiente de
estar.
funcionamiento, ya que tambin es til para todos, ver que capacidad tienen, como
grupo, para la tarea en comn. El nombre en "jitanjfora" puede ser cualquiera que
se le ocurra al coordinador. Describiremos sus pasos sucesivos. d) Deben ahora, llamar a un sustituto que los reemplace, en el sitio en que se
encuentran. Ahora estn enfrente de una fotografa y pueden modificarla a su
a) Se comienza proponindole al grupo construir esa mquina. No se responden antojo. Pueden cambiar, no slo su propio lugar, sino el de cualquiera de sus
preguntas de ningn tipo, ni en el sentido de qu quiere decir, ni en el de la familiares.
metodologa que conviene.
b) Se les entrega, sobre una mesa imaginaria, materiales tambin imaginarios, e) Uno por uno, van tomando el lugar de cada miembro de la familla. Como mam
dentro de una gran caja inexistente. Se les recomienda que cuiden de esos cmo se sienten en el lugar original? Cmo se sienten en el nuevo sitio? (si es
materiales y que no se lleven por delante la mesa. que hubo cambio). Y as con cada miembro.

c) Toda metodologa que empleen es aceptada. Discutir o no que mquina van a f) Volver a la foto original. Cada familiar deber decir cmo se siente y dnde le
hacer, quienes, o directamente y sin hablar, se ponen a hacerlo. gustara estar. Tambin deber informar acerca del modo en que vivo su relacin
Se les da tiempo suficiente hasta que terminen. con el dueo de la Fotografa

d) Se les pide que cada uno de ellos, con su cuerpo, represente la parte que hizo, g) Como se ha procedido hasta ahora con uno slo de los, integrantes, se procede
y ensamblen. Si se trata de una mquina que "funciona", que la hagan funcionar. con todos los dems. Por razones de tiempo y fatiga, es conveniente no trabajar
Se les da tiempo suficiente para que perciban su propia situacin y su relacin con ms de una fotografa por sesin.
los dems.
Dilogo con viejos
e) Se les pide que se separen, y que cada uno haga su presentacin desde la
parte que represent. (Ejemplo: Yo soy un tornillo no tengo vida por m mismo. Cada participante elige ser su pap o su mam, no importando para esto que el
Y mi existencia es mantener unidos a dos que no tienen nada que ver conmigo). padre viva o no, o que el paciente no lo haya conocido. A partir de una situacin
arbitraria, por ejemplo, un encuentro de jubilados en un parque o una cita especial
f) Cuando todos han hecho su presentacin, se les hace globalmente las por parte del terapeuta, o cualquier otra, los viejos comienzan a hablar de sus hijos.
preguntas: Algo que ver con su vida? Algo de lo que se den cuenta? Se les Se les deja hasta agotar el tema.
invita a compartir sto con los dems.

- 56 -
b) Se les invita a que vuelvan a ser ellos mismos. Una frase cualquiera, por
ejemplo: Escucharon lo que sus padres dijeron de ustedes?, puede ser elegida.

c) Si una persona qued adherida a alguna situacin, se le propone que haga un


encuentro con su padre o su madre, con el almohadn naturalmente, a los fines de
esclarecer la situacin que provoca malestar.

Nacimiento

La situacin de nacimiento surge muchas veces de manera imprevista para el


coordinador. En circunstancias de lo ms dismiles, por ejemplo, trabajando un
sntoma, un estado de nimo o una queja contra terceros. Es as, como de pronto,
nos encontramos en una situacin corporal comprometida e intensa, mientras
oficiamos de partenaires, ignorantes del meollo de la historia que desarrolla el
paciente. Sin darnos cuenta, nos vemos asistiendo a un "parto" con todas las de la
ley. El trabajo, el esfuerzo, y la salida que implica un encuentro tierno con un
paciente lloroso y sudado, que sbitamente est en brazos de alguno de nosotros,
que lo acuna. Pero a veces, las cosas se desarrollan de otra manera. Alguien es
invitado a entrar al "tero" calentito de un grupo que lo recibe y lo cra hasta el
momento en que, un sexto sentido grupal, indica que ha llegado el momento de
"parirlo".

Entonces, la presin del grupo va forzando la salida del paciente que a veces se
abre camino entre almohadones y piernas de gente acuclillada, que forma un canal
de parto.

A veces es suficiente que alguien reciba al "beb" entre sus brazos, para que el
bienestar y placidez del paciente indique que el trabajo ha terminado. Otras es
preciso, que el grupo vaya ms lejos an, y que entre todos le construyan su
"cunita". Cunita que sirve para mecer y cantar a este beb crecido, que es nuestro
paciente, y que como los bebs verdaderos, slo sabe expresar su necesidad de
amor y caricias, llorando.

- 57 -
El juego de la muerte y la resurreccin

Primera consigna: La desintegracin.

Deambulen lentamente por la habitacin, con los ojos cerrados. Vayan tomando
conciencia de sus cuerpos. Sientan sus cuerpos. Sientan cada parte de su cuerpo.
Sean cada parte de su cuerpo. Registren su respiracin y si pueden tambin el latir
de su corazn. Sientan sus msculos. Registren el roce con los otros cuerpos.
Registren la sensacin del roce y de los eventuales golpes que puedan llegar a
darse. Registren la sensacin de deambular. Contraigan por zonas grupos
musculares diferentes. Traten de sentir todos los msculos de su cuerpo. Ahora
prense. Mantengan un espacio alrededor de ustedes. No se contacten con los
otros cuerpos. Contraigan todos los msculos a !a vez. Aumenten la contraccin.
Aumntenla hasta que se vuelva dolorosa. Cuando yo les diga ya! y d una
palmada, se desintegran sbitamente. Conserven slo la audicin, para registrar
las nuevas consignas que voy a darles. Mientras tanto contraigan ms y ms...
Ya! {El grupo en su mayora se deja caer sbitamente... Algunos permanecen de
pi) Los se sientan desintegrados permanezcan en ese estado, los que no vuelvan
a contracturarse, concntrense, estructrense, cuando yo les diga ya! se
desestructuran. (En ese momento el grupo entero ha cado al piso. El que haba
quedado de pi, contina as pero en un estado de relajamiento tal que hasta
babea, Se le acepta esta modalidad de desintegracin}.

Segunda consigna: Muerte y resurreccin.

Voy a decirles ahora todo lo que van a hacer a lo largo de este ejercicio.
Pondremos msica. Algunos discos se repetirn ms de una vez, o bien; se
variarn, y quizs volvamos a los primeros. El ejercicio terminar sin aviso previo.
Slo dejar de orse msica. El fin del trabajo los sorprender a cada uno en una
situacin diferente, en la cual deben persistir, hasta que les confirmemos que
realmente ha finalizado. En este instante estn desintegrados. Permanezcan
as, el tiempo que quieran, basta que la msica les sugiera. En el momento en
que lo sientan, imaginen que ha surgido en ustedes, un germen de vida animal,
vegetal o humana. No se propongan nada; No piensen en ningn desarrollo
determinado. Dejen que surja. Cuando el ser que sean se haya desarrollado lo
suficiente comiencen, si lo necesitan por el tipo de vida al que han accedido, a
investigar cmo es el mundo en que les toc vivir. Esto significa que pueden abrir
los ojos, si les es necesario.

- 58 -
Investiguen, desarrllense y permitan que se cumpla el ciclo total de su existencia,
hasta que les sobrevenga la muerte. Y cuando mueran, permanezcan en esta
nueva desintegracin todo el tiempo que necesiten, hasta sentir nuevamente que
surge en ustedes, un germen de vida. Esta vida nueva puede ser la misma u otra
cualquiera. Repitan el ciclo cuantas veces lo deseen. Habr, obviamente,
momentos en que mientras unos estn vivos, otros estarn muertos. Esto se ver
claramente cuando investiguen el mundo que les toc vivir. Ahora quedan a solas
con la msica y sus propias vivencias.

Este ejercicio fue planteado en el cuarto da de un laboratorio de caractersticas


poco habituales, en trminos de que el grupo extremadamente heterogneo en su
composicin, contaba entre sus integrantes una mayora de personas que acceda
por primera vez a este tipo de terapia.

(Algunas de estas personas "venan" de tratamientos anteriores de corte


psicoanaltico y otros, y haban odo hablar de la "gestalt" como de algo diferente,
por lo que se encontraban fcilmente dispuestos a aceptar situaciones inslitas,
que sin duda habran sorprendido a nuestros pacientes habituales, como por
ejemplo, el hecho inusitado de que nosotros participramos como pacientes en
muchas de las experiencias grupales. Tampoco haba ninguna expectativa en torno
a la bondad de los trabajos individuales, que son en cambio el objetivo mximo de
nuestros pacientes). En tanto para otros representaba el fin de la misma o una
experiencia aislada despus de ms de dos aos de terminado su tratamiento.

Este grupo, desde el primer momento, se cohesion no solamente entre los


pacientes sino incluso con los terapeutas mismos. Por otra parte, el tipo de vnculo
entre el staff y los participantes, result ms cercano, con menor diferenciacin de
roles. Tal vez debido a que surgieron pocas necesidades individuales de cerrar
gestalts incompletas a travs de trabajos, sino que preponder lo grupal, e incluso
la realizacin de muchos "trabajos''' grupales, coordinados por alguno de los
terapeutas, mientras los otros te incorporaban al grupo como participantes.

En este ejercicio que pasamos a describir, no se incorpor ningn terapeuta.


Tampoco ninguno se distrajo o descans, cosa que ocurre con frecuencia en
algunos trabajos grupales, dado que la belleza y magia de lo que se desarrollaba,
atrap al equipo teraputico al punto de que transcurrieron cuatro horas sin
notarse.

- 59 -
Durante un tiempo inquietantemente largo, no sucedi nada. Tanto, que llegamos a inicia un nuevo ciclo de vida, se desarrolla y se aleja sin reconocerla, ni echar un
temer que la fatiga de los das anteriores hubiera determinado que todos se vistazo hacia atrs. Luego de un tiempo, ella "resucita" tambin. Evidentemente,
quedaran dormidos, incluso el que se hallaba de pie. Luego, empezaron a surgir sta es otra vida, y aunque a lo largo del ejercicio se cruzan varias veces, no se
algunos movimientos tenues, al principio, ms intensos a medida que transcurra el reconocen ms.
tiempo.
Mientras los monos saltan, algunas vboras se arrastran, un rbol permanece
No todo lo que estbamos viendo era comprensible para nuestros ojos Era ms quieto desde hace largo rato. De pronto alguien "muere" cerca de l, y al caer te
fcil visualizar a quienes se desarrollaban como plantas, quienes caminaban en golpea los pies. El rbol debe haber sentido sto corno un hachazo, Lo cierto es
cuatro patas, nos parecan animales o bien bebs gateando. Algunos se que cae sbitamente sobre alguien que estaba gozando mucho siendo ranita y que
arrastraban, pasando por encima de cualquier obstculo que se les interpusiera, queda aplastada, en una muerte Inesperada pero no por eso rechazada.
por ejemplo, cuerpos de los que an permanecan "muertos". Aparentemente, sto
no alteraba la concentracin de los dems. Cada cual insista en lo suyo. En Episodios como los narrados, se repitieron a lo largo de las horas regocijndonos a
extremos opuestos de la habitacin, simtricamente ubicados, un hombre y una veces, conmovindonos otras y algunas llegando a producirnos angustia. Al fin y al
mujer alcanzan casi al mismo tiempo un nivel de desarrollo similar. cabo, estbamos jugando con la vida, si amor, el dolor y la muerte. Estas son
cosas a las que como seres humanos no podemos permanecer ajenos.
Ambos recorren este mundo catico, en el que les toc nacer, con la misma
expresin de asombro infantil, mirando, tocando, oliendo, y degustando todo lo que La consigna final fue diferente a las que dbamos en otras ocasiones, en las que
se encontraba a su paso. Hasta que se acercan, de pronto, el uno al otro, y se Instbamos al grupo entero a compartir las experiencias de cada uno. Se les pidi
toman de las manos. Los que mirbamos la escena no pudimos dejar de comentar que cada cual permaneciera en lo posible, reviviendo para s lo que haba
que parecan Adn y Eva en el paraso. Largo rato caminaron tomados de la mano. experimentado. Que si deseaba compartirlo con una o a lo sumo dos personas, lo
Obviamente, interpretando lo que vean a su antojo. Instantes antes una muchacha hiciera a solas en algn lugar de la casa o paseando por el jardn. Finalmente, que
haba "parido" un nio, y ahora estaba de pi, con sus brazos enlazados por los slo en el caso de sentirse atascados en algo, y creer necesaria /a ayuda
codos, acunndolo, mientras permaneca con los ojos cerrados. De pi, y formando teraputica, recurrieran a alguno de los miembros del equipo coordinador.
un crculo con los brazos delante de ella, fue tomada por una flor, por la pareja. O
tal vez por una fruta, ya que la olieron y hasta le pasaron la lengua por los brazos, Saltos y gritos
sin que ella saliere de su amoroso encuentro.
Generalmente, hacia el tercer da de un laboratorio, y a pesar de que los nimos ya
En algn momento la pareja tuvo un nio, al que prodigaron solcitos cuidados, sufrieron un caldeamiento ms que regular, nos es menester, echar mano a
pasndoselo uno al otro. Un nio de aire, pero ni bien una muchacha cerca de ellos algunos juegos que facilitan el quebrar resistencias. La fatiga fsica demostr ser
"naci" y comenz a jugar con sus manos y pies, fue adoptada y criada rpidamen- un buen vehculo para esos fines. Aparte, estos mismos ejercicios, que sirven para
te. Hasta que la nia empez a deambular primero ayudada por ellos, luego por s fatigar, funcionan a modo de excelente dnamo para energizar al grupo.
misma. En ese momento, los enfrent como mujer, los bes a ambos en las Procedemos as: Los invitamos a saltar, lo ms alto que puedan, junto con
mejillas, los salud con la mano y se fue. nosotros. As, durante un par de minutos. Como habitualmente lo hacemos dentro
de una habitacin, mantenernos bien abiertas las ventanas. Entonces los hacemos
La pareja se mir, se estrecharon fuertemente, empezaron a caminar algo respirar hondamente, frente a ellas. Medio minuto y ha continuar saltando.
encorvados. Estaban envejeciendo. De pronto, l se lleva una mano al corazn.
Evidentemente, acababa de sufrir un "infarto".
Y muri. Ella se desespera, intenta hacerle respiracin artificial, mientras llora a
gritos, con verdadero desconsuelo. Aqu no parece existir el "como si". Poco a
poco cesan sus sollozos, se acurruca cerca de l y "muere" tambin. En tanto, l

- 60 -
Vamos recorriendo el grupo y parndonos detrs de cada participante, mientras le
decimos "OM" al odo, hasta que lo repiten. Mientras el "om" es un sonido largo e
ininterrumpido, lo dejamos. Cuando se empieza a fraccionar por la respiracin, que
se va haciendo pareja en todo el grupo, sabemos que estamos prximos al final.
Entonces, los vamos empujando, suavemente, hasta que quedan en ronda y les
ayudamos a que se enlacen por los hombros. Permanecen as hasta que un leve
balanceo se insina espontneamente. Por lo comn solos van acelerando voz y
movimiento.

En este momento, parecen actuar como una horda primitiva, en algn ritual tribal.
No es slo una apreciacin nuestra. Ellos tambin lo expresar as, cuando despus
de sto, comentan la experiencia entre s.

El Tam Tam
Para lograr un resultado similar, a veces, partimos de puntos levemente diferentes.
En esto juego, por ejemplo, en vez de saltos, hacemos deambular a ciegas un rato,
y luego sentarse.
Entonces, les pedimos que se concentren bien y traten de registrar, en su interior,
un ritmo, que por la razn que fuere, experimentan como propio. Luego, que lo
reproduzcan sobre el piso con las manos, tratando de no prestar atencin a los
ritmos de los dems. Luego, se les indica Que, lo acenten ms y ms, con todo el
cuerpo, que lo griten tambin.

Corazn Pulmn
Un comienzo por competo diferente, es hacer deambular como siempre a ciegas,
con una mano apoyada sobre el pecho para tomar conciencia del ritmo respiratorio.
Cada movimiento inspiratorio o espiratorio corresponde a un paso, hasta que el rit-
Repetimos sto unas cuantas veces. El grupo se fatiga, y nosotros tambin, porque mo se hace lento y entonces es posible dejar de controlarlo con la mano. As, por
lo hacemos con ellos. As nos resulta ms fcil evaluar el grado de fatiga. Ahora tres o cuatro minutos. Luego se les pide, que sin abandonar el paso, ''toquen" su
cerramos las ventanas. Primero les sugerimos exhalar el aire con fuerza. Ms corazn, su cartida o su pulso, el que les resulta ms fcil. Cuando lo consigan,
fuerza. Fuerte y con sonido. Ms fuerza. Con toda la fuerza posible. A esta altura que adecuen su paso, al latir de su corazn. Tambin con este paso, otros tres o
ya no damos rdenes, porque no nos oiran. cuatro minutos. Vamos alternando las rdenes, ahora pulmn, ahora corazn,
El batifondo es terrible. Se les permite continuar en l, cuanto tiempo lo deseen. La cuatro o cinco alternancias. Ahora se les pide que lo alternen voluntariamente. Se
mayora de las veces, la gente se conmueve. Algunos lloran. Es extrao, pero los advierte que los dems lo harn con otro ritmo. En la habitacin algunas
cuntos de nosotros tenemos la oportunidad de echar fuera todo el grito que personas caminan muy lento, otras van trotando. En un momento dado, se les pide
tenemos contenido? Algunos no lo han hecho nunca. que se mantengan en el ritmo preferido. Luego se les sugiere que se agrupen de
corazones por un lado y los plumones por otro. Como todava permanecen con los
Les dejamos mientras dure. Generalmente, entre 45 y 60 minutos. Algunos grupos ojos cerrados es el odo el que los gua. Hay en este momento dos rondas que
han legado a completar casi dos horas. Depende del ritmo emocional del grupo y giran con ritmos diferentes.
de nosotros mismos algunas terminaciones son un poco diferentes.

- 61 -
Se les pide que incluyan la voz. Se les deja continuar sin darles ms indicaciones. En la segunda, aquellas que nadie le dirigi jams, la tercera queda tal cual.
No es infrecuente que se establezca al principio una lucha competitiva entre ambos
grupos. Finalmente, las veces que propusimos este juego, notamos que termin Se constituyen las tres listas, con las siguientes caractersticas: La primera
cuando "los grupos" parecan aceptar que el corazn y el pulmn son rganos que contiene los "defectos" que l demuestra a los dems, y no a s mismo. La
se complementan y sirven a un mismo fin que es la vida. El final suele segunda tiene aquellos que l se muestra a s mismo y no a los dems. La tercera
sorprenderlos asombrados, cansados y felices. por fin, incluye los "peores", ya que los oculta de s mismo y de los dems, sin
dejar de tenerlos presente, ya que los puso en la lista.

No-No. Yo-Yo. Ahora comienza el dibujo del rbol. Se le pide que elija de cada una de las tres
Tambin el comienzo de este juego es diferente de los anteriores. Acostados los listas resultantes, el "defecto" por el que siente ms rechazo. A cada uno de ellos
participantes de espaldas, en rueda, para verlos mejor, se les pide primero que numerar segn la lista a la que corresponda.
muevan la cabeza, hacia un lado y el otro, con la velocidad y la fuerza que lo
deseen. Luego, se les propone que pronuncien "no" con cada golpe de cabeza. Ejemplo: De la lista, uno extrajo insensible, que lleva el nmero uno. De la
Aunque no se les indique nada ms, irn incrementando la fuerza del golpe, y el siguiente, egosta que lleva el nmero dos, y de la ltima cruel que lleva el nmero
grito espontneamente. tres. Ahora se trata de hallar las seis formas de combinar estos nmeros,
Cuando el caldeamiento aumenta, se les pide que adems, ratifiquen cada "no" procediendo as: uno y dos por tres, uno y tres por dos, dos y tres por uno, etc. Se
con golpes de puo, primero, y finalmente con todo el cuerpo. En este punto procede a reemplazar cada nmero por la palabra que corresponda. Ejemplo:
muchos lloran a gritos, enronquecen y enrojecen. Es ahora cuando, agachndonos Cruel y egosta por insensible, o bien cruel e insensible por egosta. As las seis
sobre ellos, les decimos "yo". Este cambio mejora el tono emocional, sin disminuir combinaciones posibles.
la algaraba que crece en intensidad.
Se le pide al sujeto que las lea con suma atencin, y elija la frase que ms sentido
Frecuentemente, terminan este ejercicio en calma y adormecidos, cuando no
tiene para l. Supongamos que la frase elegida fuera cruel e insensible por
francamente dormidos. De todos modos, se les deja reposar antes de inducirlos a
egosta. Tendramos as una cualidad madre, egosta, de la cual se desprenden
que compartan su experiencia.
otras dos. En relacin a las dos pequeas ramas, egosta es un tronco. Dibujarlos
como tales. Ahora bien, con el listado de las crticas a la vista, egosta es tronco?,
El rbol de las crticas
O a su vez depende de alguna otra cualidad?, y qu otras cualidades dependen
Este, ms que un juego, es un descanso a mitad de camino. Es un trabajo solitario
tambin de egosta? , Y de cruel e insensible?, y de cada una de las que se van
y una puesta a punto existencial. Por ms que sto se haga en grupo, siempre ser
anotando? El dibujo terminado (recomendamos hacerlo con un color bien definido)
una tarea individual Comenzamos por proponer al paciente que escriba un listado
tiene la forma de un rbol. Una cualidad bsica sostiene otra, que a su vez
de cuanta crtica recuerde a lo largo de toda su vida. Puede tomarse todo el tiempo
sostiene otras, y as sucesivamente.
que quiera, das o semanas.
Es importante que no omita ninguna que pueda recordar. Cuando haya terminado
Ahora hacer lo mismo con las as llamadas "cualidades positivas". Es posible que a
con ste, y sin tenerlo a la vista, le pedimos que confeccione un segundo listado.
esta altura, la gente ya se d cuenta por s misma, de lo que de otro modo
Esta vez de las crticas que l se dirige a s mismo. Por ltimo, una tercera y
requerira un sealamiento nuestro. Si el segundo rbol se hizo con un color
extravagante lista, la de crticas, que nunca le hicieron, ni tampoco l. No obstante,
contrastante, resulta ms fcil superponer, en cuanto a troncos y ramas se refiere,
en distintas situaciones, se comporta como si tuviera que mostrar muy claramente
la extraa correspondencia de las cualidades positivas y negativas. Es posible as
que l no es nada de eso.
que a cobarde corresponda un "prudente", que a inconciente se le superponga
"audaz" o "curioso" o "investigador". Lo cierto es que en el centro mismo de
Una vez confeccionadas las tres listas, se le indica que subraye en la primera nuestro "peor defecto" nace nuestra "mayor virtud", y sto es un ments definitivo al
aquellas crticas con las que no est de acuerdo. maniquesmo.

- 62 -
Y qu te falta para lograrlo? 6) Vayan haciendo una presentacin de a uno por vez, prestndoles palabras a
En realidad, aqu debiera terminar la explicacin de este juego. Pero nos eso que fueron. Vayan describiendo su existencia, dnde estn, cmo se sienten,
extenderemos ms. Supongamos que un paciente nos hable de un anhelo. siendo lo que son, cules son sus cualidades.
Nosotros le contestamos: Y qu te falta para lograrlo? Y as tantas veces como 7) Cuando todos hayan hecho su presentacin, con los ojos abiertos, vuelvan a
sea necesario. No debe asustarse el lector. Nunca se ha dado quien quiera representar lo que hicieron. Interacten.
asesinarnos. Por el contrario, hay un momento de revitalizacin en el que de pronto 8). Permanezcan donde estn. Sin cambiar de posicin, vuelvan a ser humanos.
ocurre un "darse cuenta" emotivo, casi siempre muy alegre. Y entre risas, dan por Interacten, como humanos del mismo modo que lo hicieron artes,
terminado el interrogatorio. A veces, para "lograrlo" slo hace falta humor. 9) Vuelvan a sus lugares.
10) Compartan con los dems sus experiencias.
El tribunal
Este juego, solemos proponerlo en situaciones grupales determinadas. A veces Cuando se le pregunt a Marta cul era el sentimiento que prevaleca en ese
ocurre que alguien consigue suscitar en el grupo, fuertes crticas y enjuiciamientos. momento, respondi impotencia. Al pedirle que le d forma a ese sentimiento, se
Las tcnicas habituales, como el intento de rescate de proyecciones, son rechaza- acost de espaldas con sus piernas y sus brazos estirados y apretados. Desde
das. El grupo est empecinado en tener su "chivo emisario" y no est dispuesto a esta postura expres sentirse una regla.
perderlo. Marta - Regla: Soy muy til para los dems. Hago rayas y mido, pero no puedo
hacerlo sola. Ni siquiera puedo mirar quin me usa. Soy de madera y el filo se me
Entonces, y para facilitar una ms rpida movilizacin de roles, planteamos el rompe a cada rato. (Sonre).
tribunal. El "reo" se sienta en el banquillo de los acusados. El terapeuta, Coordinador: Qu le pasa?
generalmente juez, designa "de facto" un defensor y un fiscal. No siempre es Marta: (Rindose) Me ro de que no hay filo que me dure. (Vuelve a quedar seria.
posible, pero s es deseable, que stos se elijan contrariando sus preferencias. Obviamente ha vuelto a su trabajo). Estoy dentro de un cajn del escritorio.
Coordinador: Habla con el cajn.
El resto acta como testigo de cargo y defensa, a requerimiento de los abogados. Marta - Regla: Aqu estoy dentro tuyo. Me pusieron aqu, hace tiempo, junto con
Estos deben esmerarse, lo ms posible, en que su empresa resulte exitosa. otras cosas que son como yo, tiles, cuando las usa otra persona.
Despus del alegato final de ambos, todos los testigos y ahora "jury", se retiran a Coordinador: Repet eso.
deliberar. La pena, si es que la hay, la determina el "jury". El "jury" vale ms que el Marta: (Gritando) Yo soy til slo cuando me usa otra persona! Coordinador:
juez. El rol del juez, terapeuta, no va ms all de imponer orden, y hacer, o no, Cmbiate, s el cajn.
lugar a las protestas. La importancia de este juego radica en lo mucho que moviliza
la capacidad de los pacientes para "darse cuenta" de s mismos, y rescatar Marta - Cajn: No es muy divertido, Me meten y sacan sus cosas, y no me
proyecciones. preguntan qu quiero tener adentro. (Ahora dirigindose a Marta- Regla) Vos y yo
tendramos que irnos a pasear, pero para poder hacerlo habra que dejar de ser lo
Los sentimientos corporizados que somos.

1) Qu sienten en este momento? Cul es el sentimiento que prepondera? (Se Marta - Regla: El hecho es que no quiero dejar de ser lo que soy. (Llora). Slo
recomienda mantenerse con los ojos cerrados durante todo el ejercicio). quisiera que los que me necesitan, me usen ms.
2) Hagan con su cuerpo, una escultura que represente el sentimiento que han Marta: (Como Marta, incorporndose). Me doy cuenta de que me convierto en
registrado. Permanezcan en esta posicin. Traten de darse cuenta de cada regla (rindose) en un montn de reglas! pretendiendo ser til a los dems. Lo que
postura, cada gesto de su cuerpo. pasa es que no tengo en cuenta cuando ellos lo quieren o lo necesitan. En el
3) Imaginen el objeto, animal o planta, que esta postura les sugiere. trabajo de interaccin grupal, fue fcil observar como, debido a la actitud corporal
4) Intensifiquen la sensacin de ser eso que se han imaginado. de Marta, los dems slo se acercaron a ella para husmearla, y eso slo los
5) Vuelvan a sus lugares tratando de conservar las sensaciones registradas. "animales". La rigidez de Marta y su "regla" provoc que nadie encontrara cmo

- 63 -
interactuar con ella. cadenita que nosotros le conocamos desde haca mucho tiempo. Joaqun se la
pidi y Lalo le dijo que esa cadenita no se la haba sacado desde haca siete aos,
Los consejos pero se la daba con una condicin: que los siguientes pedidos que hiciera, no
Este juego tambin sirve para facilitar a quien se sienta presa de una gestalt tuvieran el carcter concreto que tenan hasta ahora. Joaqun accedi, pero a partir
incompleta, en una situacin de impasse, la fluidificacin del vaivn figura-fondo. de ah, perdi la soltura con la que se venia manejando. Se puso rgido, y aunque
La tcnica consiste en proponerle al sujeto, que plantee al grupo su dificultad. A cumpla con mi pedido, lo haca de un modo insincero y poco natural. Cuando lleg
los dems se les pide que permanezcan en silencio, pero que le miren tratando de a m y me pidi afecto yo me estaba sintiendo mal e internamente culpaba a Lalo
que en su gesto sea posible "leer" la respuesta. Luego, se le invita a que se siente de lo que ocurra. Le contest a Joaqun: Mi afecto lo tenes, y no est condicionado
frente a cada uno y le mire atentamente, intentando imaginarse el "consejo" que el a lo que quiero pedirte. Pero antes quiero preguntarle a Lalo si te prest o te regal
otro desea trasmitirle. Despus, se le indica que inviertan sus lugares, y que desde esa cadenita. Como Lalo me asegur que se trataba de un regalo, yo tom la
el recin asumido le diga a "l mismo" (representado por el otro) qu cree que cadenita y se la puse a Joaqun en la mueca, dicindole: Alguien le dio esta
debe hacer. Del mismo modo, con cada miembro del grupo. Posteriormente, vuelve cadenita a Lalo, hace tiempo como smbolo de amor. Como Lalo encontr el amor,
a hacer la ronda, pero esta vez, sin cambio de lugares. Tiene, as, la posibilidad de ya no le hace ms falta, y te la pasa a vos. Cuando vos, encontrs el amor, y fjate
cotejar con la realidad, sus propias fantasas. Los dems ahora emiten su opinin que no lo califico en bueno o malo como vos lo vens haciendo, porque el amor es
personal. el amor y punto, no vas a precisar esta cadenita. Entonces, psasela a otra
persona. Pero hasta ese momento no te la quites. La otra cosa que quiero pedirte
es que no le des bolilla a Lalo. Los pedidos son tambin como el amor No hay
Juegos para incrementar el vaivn figura-fondo buenos o malos. Segu pidiendo lo que quieras, (La sonrisa que me hizo Joaqun,
en ese instante, me permiti segundos ms tarde y a sus espaldas, sacarle la len-
Te compro -te pago o Me llevo-te dejo. gua a Lalo).
La explicacin de este juego puede obviarse contando un episodio vivido en un Lstima que la historia no termine aqu. Joaqun sigui haciendo pedidos y
laboratorio, y que voy a relatar en primera persona por la intensidad del recibiendo propuestas. Era evidente que haba recuperado la confianza en s
compromiso emocional en esa situacin. mismo. Hasta que se sent frente a Bernardo, un compaero de estudios. Joaqun:
A vos te quiero pedir tu tiempo.
Joaqun es un muchacho homosexual, de unos 19 aos. A lo largo de todo el Bernardo: Lo tenes.
laboratorio, se mostr resentido y hosco, participando muy poco de las Joaqun: iNo! Ese es el tiempo de la facultad, de los estudios, Yo me refiero a tu
experiencias grupales. Mientras un trabajo se desarrollaba en el centro, le pregunt tiempo personal.
a Joaqun que estaba a mi lado, si poda hacer algo por l. Su respuesta fue que l Estoy segura de que Bernardo se hallaba en la ''luna de Valencia'' y que estaba
dudaba que alguien pudiera ayudarlo. Entonces, se me ocurri preguntarle si se lejos de l, el abrigar fantasas homosexuales con respecto a Joaqun. Sin
animara a firmarme un cheque en blanco. El chico me ech un rpido vistazo, embargo, su respuesta me asust, previendo la reaccin de Joaqun
entendiendo mi propuesta, y accedi a ella. Entonces le dije que al terminar lo que Bernardo: Entonces ven ha dormir a casa esta noche. La invitacin no habra sido
estaba ocurriendo, informara l al grupo que, de acuerdo conmigo, iba a hacer algo descabellada de tratarse de una persona diferente a Joaqun, ya que Bernardo no
con todos ellos ignoraba lo distante que su compaero viva de donde nos encontrbamos. Pero
sto pudo ser esclarecido despus, ya que en el momento todos quedamos
Lo que propuse, fue que se sentara enfrente de cada uno y le hiciera un pedido. paralizados por la reaccin de Joaqun.
Los otros tendran derecho de drselo "gratuitamente" o no, segn quisieran. A su El se volvi hacia m gritando: "Te confabulaste con l! Sos una puta! Todas las
vez, podran pedirle lo que quisieran, que l podra aceptar o rehusar. mujeres son unas putas!" Mientras gritaba, se golpeaba la cabeza contra las
paredes e intentaba arrojarse por las escaleras. El grupo trataba de contenerlo y
Joaqun fue haciendo "su ronda", pidiendo cosas simples y concretas, un cigarrillo, alguno tmidamente preguntaba: por qu?, pero qu tiene que ver?
un pauelo. Los otros, a su vez, le pedan abrazos, sonrisas, un beso. Joaqun iba El odio explosivo de Joaqun me estaba particularmente dedicado, y durante un
ponindose mejor, luego de cada encuentro, hasta que lleg a Lalo. Lalo tena una largo rato yo me sent paralizada. De pronto, reaccion y pude decirle: "Tenes ra-

- 64 -
zn, soy puta porque te vendo mi amor, y bastante caro por cierto. Pero creme,
Joaqun, te vendo amor de muy buena calidad". Al or sto, Joaqun se ech en
mis brazos llamndome mam, mientras lloraba a gritos.

Muchos en el grupo tambin lloraban. Disfrutamos un largo rato de este llanto en


compaa. Despus del recreo que pedimos, para metabolizar lo ocurrido,
retomamos felices el trabajo de laboratorio. Joaqun resucitado, pareca otro y pudo
unirse alegremente a sus compaeros, en el disparatado y jocoso final de la
"juguetera". Me sent enternecida, cuando lo vea deambular a toda carrera,
gateando detrs de otros siendo el furgn de cola de un trencito.

La silueta en collage
Preparamos tantos trozos de papel de escenografa como participantes haya,
cuidando que el tamao resulte suficiente. Les proporcionamos crayones, tijeras,
plasticola, y revistas en gran cantidad.
Recostados en el papel, dibujamos sus siluetas (los participantes tambin
colaboran, marcndosela uno al otro). Les pedimos que "completen" su silueta con
los materiales que les hemos proporcionado. En este momento, es til que no
demos explicaciones, para que cada cual se sienta libre de entender lo que le
plazca. Tampoco indicamos si pueden manejarse afuera o dentro de la figura.
Cuando todos terminan, les pedimos que utilicen su collage para hacer la
presentacin.

Juego de la muerte
Este juego se propone, en situaciones especiales, como una elaboracin de la
propia muerte o para facilitar la conclusin de un duelo interminable.
Cuando Alfonso entr en terapia, una de las situaciones inconclusas de su vida
ms evidente, fue la de la imposibilidad de cerrar la gestalt que la muerte de su
padre haba dejado abierta, cuando tena diez aos.

Durante el curso de un laboratorio, y a raz de una seguidilla de trabajos con


"papas", que se hicieron en la tarde del sbado, Alfonso expres a su terapeuta
que imaginaba que esa noche iba a estar de velorio. Y que, si poda, al da
siguiente se iba a encargar de enterrar a su pap. La terapeuta coment sto con
los otros coordinadores y el resto del grupo. Y a espaldas de Alfonso se plane
darle el gusto. Cuando el domingo, lleg Alfonso, la gente preparada, lo saludaba
gravemente, mientras le murmuraban algunas palabras de psame. En el saln
donde se trabaja, alguien estaba "muerto" y era velado. Unas tablas de la
estantera estaban ubicadas de modo de simular la tapa del atad de
almohadones, todava abierto.

- 65 -
Cuando Alfonso entr en la sala, ya preparado emocionalmente, se sinti Show con invitados especiales
francamente impresionado. La terapeuta le sugiri que se despidiese de su pap. Y Se maneja a la manera de ciertos shows televisivos. Consiste en un espectculo
fue necesaria bastante persuasin para que Alfonso, llorando, se decidiese a que la mitad del grupo ofrece a la otra mitad. Pueden ser las mujeres a los
hacerlo. Un montn de papelitos que se le ofrecieron hacan las veces del puado hombres, o de cualquier otro modo. Los que lo realizan, imitan a los que son su
de tierra arrojado sobre la tumba, pblico. Pueden hacerlo desde una mesa redonda o cualquier otra Situacin
similar. Est claro que mientras este grupo prepar su nmero, los otros hicieron
Alfonso llor lgrimas acumuladas durante aos y el verdadero esfuerzo que hizo otro tanto.
para despedirse de su padre, fue tan real como el alivio que sinti luego. Rea y
lloraba a la vez, y se abrazaba a sus compaeros, como si ms que un entierro,
sto hubiese significado para l un verdadero nacimiento.

Juegos - Juegos

El circo
Pertenece al grupo de los juegos - juegos. Es decir que no tienen ms funcin que
la de divertir y facilitar un contacto ingenuo consigo mismo y con los dems. Es til
para distender despus de una dura tarea de laboratorio. Carece de reglas. Los
participantes se autodesignan o son designados por un maestro de ceremonias,
para realizar las diversas suertes de un circo. Algunas veces un grupo ha utilizado
esta posibilidad para rerse de s mismo como cuando Patricia, paraltica de sus
miembros inferiores, imit a una foca que reciba las pelotas almohadones con la
boca, mientras se desplazaba torpemente con sus manos convertidas en aletas.

La juguetera
Este juego pertenece al mismo estilo que el anterior. Mientras la mitad del grupo,
se convierte en un ruidoso jardn de infantes para niitos menores de cuatro aos,
y sale con la "seorita" de la habitacin, la otra parte llena los estantes de una
juguetera transformndose en juguetes que cada participante elige a su gusto. A
veces se les propone que se conviertan en el juguete que ms hayan querido. Una
vez aquietado el bullicio lgico que provoca esta indicacin, se invita a ingresar a
los chicos que acompaaron a la "seorita" (que mientras tanto se ha arreglado
como ha podido con su terrible contingente). Los nios pueden elegir jugar con su
juguete favorito, y es difcil llegar a descubrir cada una de las situaciones que se
da, porque la simultaneidad las vuelve muy difciles de registrar. Nuestra risa no
nos facilita la tarea. Generalmente "los niitos" no cesan hasta haber triturado el
ltimo juguete. Entonces, se les da la consigna de invertir los roles. Esta nueva
carnada de niitos, es mucho ms terrible que la anterior porque se venga estrepi-
tosamente, y slo la ternura acumulada durante esos das de trabajo impide que se
convierta en una verdadera batalla campal.

- 66 -
EL LENGUAJE DEL CUERPO

"No d e b e r a s s enti r
de esa manera", me digo,
pero mis e m o c i o n e s
no siguen las leyes de la lgica.
Mi i n t e l e c t o no puede saber
lo que mi cuerpo
debera e s t a r s i n t i e n d o .
Hugh Prather

Cuerpos y almas

"Mens sana in Corpore sano", decan los griegos, vaya uno a saber qu queran
decir con so! Lo que s es posible conocer, es lo que la "modernidad" entendi:
que es preciso cuidar el ''cuerpo", para que la "mente" funcione bien. Como si se
tratara de dos entidades separadas, aunque "algo" interdependientes. Tal vez no
fuera eso lo que los griegos quisieron significar. La imagen de la unidad pareciera
difcil de aprehender. Algunas veces, alguna persona ingenua pregunta: "Pero es
posible que esta enfermedad sea producida por la mente?" Y no hablemos de la
situacin al revs. De cmo una comida copiosa, por ejemplo, "puede" producir
pesadillas, O una disfuncin heptica, melancola.
Pichn Rivire, cuando se refiere a las conductas del ser humano, define como
conducta la respuesta que un organismo produce ante un estmulo, y describe tres
reas productoras de conductas en el hombre: el rea mente, el rea cuerpo y el
rea mundo exterior. Estamos acostumbrados a llamar conducta slo a esta ltima,
pero lo que pasa en el interior del aparato psquico de una persona, o en su
cuerpo, son tambin respuestas a los sucesos de su existencia. Esto significa que
ante un hecho determinado, el ser humano reacciona en forma integral, es decir
con su cuerpo, con su mente y con alguna conducta en el mundo exterior.

- 67 -
Ser de acuerdo a la ndole del suceso y a cierta caracterstica personal, por la "Jinetes del Apocalipsis", que son: nuestros odios histricos, nuestros miedos
cual alguien preferentemente "elije", para responder, una conducta en una de las irracionales, nuestro desvalimiento y nuestra frustracin. Estas son las cadenas
reas. Esto es importante de tener en cuenta, ya que el equilibrio est vinculado a que cargamos, los aprendizajes que no hicimos, las viejas conductas que alguna
la capacidad de dar respuesta en las tres. En algunos casos sto es muy evidente. vez salvaron nuestras vidas y hoy nos impiden el goce de vivir. Son fuerzas
Si a cualquiera de nosotros nos acercaran de improviso una brasa encendida a destructivas, y tanto ms terrorficas, cuanto ms inconscientes. Este potencial
nuestra piel, experimentaramos temor, dolor o desagrado (rea mente), se nos en- real, cuando es desconocido, es experimentado como fatiga, desinters, o un "no
rojecera o ampollara la zona de contacto (rea cuerpo) y nos apartaramos de la ser capaz de gozar, o vivir, o crear". Cuando est presente, puede abarcar, segn
fuente de calor, vivamente, y an podra ocurrir que agredisemos a quien nos la intensidad de su presencia, desde sntomas orgnicos leves, hasta la ms loca
quem (rea mundo exterior). explosin psictica. Ni ms ni menos que si a un niito le dieran, para jugar, uno de
esos botoncitos que pueden hacer saltar al mundo en una conflagracin atmica. Y
esto no es exageracin. Somos capaces de darnos muerte a nosotros mismos, y
Es mucho lo que se habla sobre la "unidad del ser humano", y sin embargo, a
no como mecanismo consciente, sino a travs de sntomas o su agrupacin en
veces parece difcil comprender que un rea no enferma a otra rea, como si se
sndromes o enfermedades.
tratara de entidades diferentes. La idea de que existe una situacin emocional que
provoca una enfermedad fsica, es tan errnea como la conviccin de que estados
Hay lceras que matan, como hay crisis asmticas que matan, y en definitiva, no
anmicos desapacibles obedecen a una disfuncin orgnica. Unos y otros son
es demasiado arriesgado aventurar que no existe enfermedad que no signifique un
respuestas a conflictos del ser total. Y a veces, los sntomas orgnicos actan
desesperado mensaje existencial que nos enviamos a nosotros mismos.
como primera "seal de alarma" ante un conflicto insuficientemente
En el captulo "Quejas, herramientas del paciente", vimos cmo la decodificacin
"concientizado", esto es, con poca expresin en el rea mente.
del sntoma signific para Celia, la posibilidad de enfrentar la situacin que la
Cuando hablamos de "enfermedad psicosomtica", ya estamos haciendo una di-
inquietaba en ese momento, aunque careciera de recursos ya aprendidos y
sociacin entre psique y soma... con una sutil preponderancia "psicologista".
ensayados para hacerlo directamente. Su hostilidad con el grupo, no era ms que
El cambiar este nombre por el de "enfermedad somatopsquica", no modifica la
la repeticin de antiguas situaciones, donde lo ms "conveniente" era reprimirla.
cosa. Carecemos de una denominacin, y por eso, casi es preferible la primera, por
Seguramente vivi como "peligroso", y quiz lo fuera realmente, manifestar con
primera, por hbito y por bien intencionada.
claridad su enojo, all y entonces, con sus padres. Las urticarias conseguan los
mismos resultados y seguramente sus padres, en lugar de enfadarse, corran
Sntomas y lenguaje popular.
presurosos a auxiliarla y testimoniarle su afecto.
El cuerpo ignora el "como si", como nosotros ignoramos nuestro "todo". La imagen
Ahora Celia estaba grande, y aunque todo el grupo la agrediera, sto no poda
ms adecuada de lo que abarcarnos con nuestra conciencia, la ofrece un iceberg,
modificar para nada su vida, ni impedir su crecimiento. Las urticarias, pues,
brillante montaa de hielo que asoma de las aguas... y que apenas es una nfima
estaban de ms, aunque tan tiles fueron como va de acceso a su potencial
parte de la gran masa sumergida. As como lo no visible del iceberg es el
interior.
verdadero peligro de la navegacin, en nuestra gran masa sumergida, donde lo
La cuestin es: cmo accedemos a este potencial nuestro? En el captulo de
guardamos todo, se encuentra en potencia nuestra mayor fuerza y tambin,
"Sueos", vimos cmo stos son mensajes que cotidianamente nos enviamos a
nuestro mayor potencial destructivo.
nosotros mismos, para hablarnos de nuestra situacin existencial y tambin de
nuestros conflictos. Y de los medios que disponemos para solucionarlos.
Nuestro inconsciente encierra nuestra historia y la de nuestra especie, y ah Nuestros sntomas son mensajes en clave, como vimos. Lo curioso es que ni
acumulamos la sabidura del hombre desde que existe. La posibilidad del acceso siquiera es preciso llegar al sntoma propiamente dicho para comprender que
con conciencia a este tremendo potencial, nos permite utilizarlo para nuestro tenemos reserves corporales de conocimiento, que a veces mantenemos ajenas a
crecimiento y para nuestra libertad. nuestra conciencia.
Neurosis significa vivir presa de los fantasmas del pasado, los cuatro temibles Pues... "el saber popular que encierra todo el saber..."

- 68 -
Como dice Manuel Machado, el poeta andaluz, ha creado un lenguaje que La bronca que no se expresa, a veces se convierte en "bronquitis", y el espasmo
vividamente relaciona nuestras manifestaciones corporales con la totalidad de de los bronquios se parece al espasmo de los puos y al de las mandbulas.
nosotros mismos. La gente dice: ''Hacerse mala sangre". Mala sangre es la sangre espesa, oscura. Y
Para el sentimiento de opresin que experimentamos ante una situacin que se melancola quiere decir precisamente eso, sangre espesa y oscura, El decir
nos repite, y cuando nos sentimos imposibilitados por diferentes causas, de popular comparte, con la poesa, el lenguaje metafrico. "Mala sangre", como
reaccionar adecuadamente, el lenguaje popular dice algo tan simple como "sto metfora, describe el sentir del melanclico y su accionar en el mundo, lento y
me hincha", o "estoy hinchado", o "no hinches". Y las urticarias estn de ms. Del "pegajoso" como la sangre espesada.
mismo modo hay situaciones "asfixiantes", como las que viven algunos nios, hijos
de padres sobreprotectores, que protestan de sto con asma, o "falso crup". Hay situaciones que son un verdadero "quebradero de cabeza"... para quienes
quieren "pensar' en ellas. Y para los que no, siempre est el recurso de la cefalea.
Mauricio, un psiquiatra infantil amigo mo, haba sido consultado porque Luisito, de Aparte, una cefalea es una excelente ayuda para no pensar en lo que nos provoca
ocho aos, "haca" espasmos larngeos (falso crup), a repeticin. Luisito lleg a la dolor de cabeza, ya que si el dolor es lo bastante intenso, realmente no permite
consulta impecablemente vestido, con el pelito peinado con fijador y las blan- pensar en nada.
qusimas medias "tres cuarto" prolijamente estiradas hasta sus rodillas. Mauricio
trabaj con l, ayudndole a ser "malo" y "desprolijo". En la primera sesin, Luisito "Me pesa", o, "Me siento terriblemente cargado", tiene su equivalente en dolores
dibuj una escuelita con su bandera, utilizando la regla para hacerlo. A las pocas musculares, dorsales, o en la base del cuello. Y se refieren, no al trabajo muscular
semanas prefera pintar con acuarela, porque el enchastre que haca con el agua de alguien que por la ndole de su oficio deba acarrear grandes pesos, sino a la
le resultaba muy gratificante. Mauricio trabajaba con "ropa de fajina" y la mam de "sobrecarga" con que se asumen responsabilidades que exceden la propia
Luisito empez a acostumbrarse a que Luisito perdiera su elegancia, con un capacidad.
espanto cada vez menor, a medida que las crisis se iban espaciando. Cuando La pena se expresa ''llorando, llorando "de los ojos" como dice el cantor:
Luisito consigui "abrir un agujero" con el pincel, en la hoja que dibujaba, grit: "Adelita, por Dios te lo pido,
qu placer! estirando la 'e' como si fuera una 'a', pas (el pincel, el aire) del otro de tus ojos no vayas a llorar".
lado. Y Luisito no se asfixi ms.
o el juglar de la gesta del "Mi Cid":
Hace algunos aos, en un grupo de pberes que coordin en el Hospital Pinero, "De los suos olhos tan fuertemente llorando tornaba la cabeza y estavalas
Virginia, una muchachita de doce arios, dirigindose a Ral, un chico de catorce, catando".
tmido y reconcentrado, le dijo: Y a vos, qu te pasa? Tenes que hablar, si te lo
guardas todo, al final se te va a salir todo para afuera, te vas a brotar como una Solo que... no es slo de los ojos que se llora, que todos se suenan la nariz
papa. cuando lo hacen. Y a veces slo eso, solo el sonarse de la nariz y ni siquiera el
registro de la situacin que apena. A sto se le llama "rinitis".
Y lo gracioso es que Ral estaba todo "brotado": tena la cara, como es tpico en Todos sabemos que "cagarse de miedo" no es una mera expresin, un tanto
algunos chicos al comienzo de su adolescencia, literalmente cubierta de granitos. grosera, para describir esa emocin. Muchas veces el "cagazo" es real. Si lo
Hay ms. Ser incapaz de expresar la bronca, suele ser comentado como: Me la sabrn tantos estudiantes que acompaan sus exmenes con diarrea!
com (a la bronca) o Me la tragu. No es extrao or decir a alguien: Se lo Ejemplos hay a montones. Lo extrao es nuestra inmensa capacidad para cerrar
traga todo. O si no: Dale, vomita, larga lo que tenes adentro! -Y lo curioso es los ojos y no verlos y para anular nuestros odos desoyendo el lenguaje corporal -
que estos "comemierdas", con frecuencia son personas que padecen de gastritis y popular, que encuentra, para la conflictiva emocional, la ms adecuada y expresiva
an de lceras de estmago. denominacin. Si tan solo nos permitiramos estar abiertos a estas dos vertientes
Y es que de tanto "tragarlo", hasta se perforan. ("No te la comas, pibe"), dice el de conocimiento, podramos acrecentar la conciencia que tenemos respecto de
poeta de la calle. Y todos saben a qu se est refiriendo). nuestra insercin en el mundo.

- 69 -
reconocer como propio todo aquello que pone y rechaza en el otro.
EL GESTO COMO LENGUAJE PARA
Todos los estmulos (cargas energticas) que recibimos en nuestra vida, los
EL TRABAJO GESTALTICO
incluimos en nuestro cuerpo y los transformamos en trabajo fsico. Cuando nos los
impedimos, bloqueando la accin, esa energa que no desgastamos, la dirigimos
hacia nosotros mismos, la usamos para nuestra destruccin (ver bloqueos; de la
energa). El repeso puede significar una descarga de energa. De todos modos,
glndulas de secrecin interna y aparato osteo-msculo-articular, se asocian para
que esa emocin que es respuesta a un estmulo, y "es" la energa de un ser vivo,
encuentre su modo de expresin. El movimiento como descarga de energa,
generalmente es bien especfico y localizado para cada emocin. (Bronca es
contraccin de los maseteros. Bronca es puntos que se cierran y bceps que se
abultan. Bronca es respiracin que se acelera, rostro que se enrojece).

En el trabajo con el cuerpo, usamos la msica como situacin desencadenante de


las acciones necesarias para recuperar el equilibrio. Esas acciones no son ms
que las conductas que conectan al paciente con sus necesidades. La msica
actualiza efectos diferentes para cada uno, permitiendo un darse cuenta ms claro
de lo que se est sintiendo. Cuando nos permitimos movernos, dejamos de
depositar en la msica la causalidad de lo que sentimos. No es ella la que nos
Todo lenguaje implica la existencia de un mensaje. La necesidad de comunicar provoca angustia, sino que es nuestra angustia la que aflora ante ese estmulo.
algo a alguien. El mensaje existencial no es conceptual. El cuerpo " sabe" de cosas
distintas al intelecto. Nuestro cuerpo gesticula, se expresa. El gesto es breve o prolongado, es
El gesto es ms elocuente, para el que sabe leerlo, que el discurso ms espontneo, delator. A menudo lo desconocernos en nosotros mismos. Algunos
sofisticado. gestos estereotipados pueden llegar a dar a un rostro la expresin de una mscara.
De alguna manera; los gestos breves, que son reacciones anmicas espontneas,
El principio fundamental, que debemos considerar en todo trabajo corporal, es que se van transformando en actitudes permanentes a medida que se van fijando e
la nica realidad que tenemos aqu y ahora, es la de nuestras sensaciones y invadiendo todas las actitudes del individuo.
sentimientos, y la de su manifestacin en nuestro cuerpo.
El trabajo con el cuerpo abre nuevos canales a la expresin. Las conductas se
La emocin "es" cuerpo. Cuando no la registramos corporalmente es que slo la vuelven menos rgidas en todas las reas,
estamos pensando. La conceptuaiizacin evita la accin y bloquea la energa a partir de que el cuerpo va abandonando sus contracturas.
corporal, transfirindola a la mente. Todo lo que sentimos se transforma en
impulsos a la accin mucho antes de entender para qu. Para aprender a Los gestos y la postura permiten una lectura corporal, y revelan muchas veces
sensibilizarse, a desarrollar la capacidad de sentir, es necesario evitar los frenos a actitudes contradictorias con lo expresado verbalmente. Alguien puede decir, por
la accin que genera ese sentir. La idea de estar vivo es estar en movimiento, ejemplo: "Sal de aqu, no quiero verte", y su cuerpo mostrar como retiene en vez
satisfaciendo esos impulsos, que tienen su zona corporal correspondiente. La de empujar. Si el terapeuta se ofrece corno objeto que provoca un movimiento de
neurosis consiste en bloquearlos y entonces se transforman en una amputacin. oposicin (empujar para ser empujado, tratar de salirse para ser retenido) la
El neurtico es un amputado, tiene aspectos muertos, factibles de ser persona puede ensayar sus actitudes de repudio o aferramiento, y a travs de ellas
resucitados, pero para ello es preciso que se sincere consigo mismo y llegue a llegar a darse cuenta de qu "es" lo suyo en ese momento.

- 70 -
El trabajo con el cuerpo cumple diversos fines. La mayor parte de las veces lo Para la tarea gestltica es fundamental saber desentraar o decodificar el
usamos para inducir experiencias, a la manera de las fantasas dirigidas, y en lenguaje corporal.
algunos momentos, para canalizar las emociones. Tambin, nos sirve para
provocarlas con el objeto de entrenarnos en "el arte de no interrumpirnos". En todo La terapia apunta e que el individuo, en primera instancia, discrimine los mensajes
caso es un modo de vivenciar el "aqu y ahora" del grupo como cierre de gestalt. no conceptuales, es decir, que aprenda a decodificar sus sentimientos y
sensaciones. A medida que los percibe con claridad se lo pone ante la situacin de
resolver qu es lo que hace con lo percibido. De sto se deriva el segundo
objetivo: desarrollar la creatividad o capacidad resolutiva. El tercer aspecto es
convertir todo en lenguaje, a los fines de la comunicacin, de intercambio con el
medio.

El dolor de todos.

Antes de darles consignas especficas, les recordamos brevemente las generales


del laboratorio. Les insistimos en la necesidad de dejarse fluir libremente sin
interrumpir gritos, llantos o golpe. Les advertimos sobre la participacin fsica del
coordinador a travs de acciones y contactos que pueden rechazar o aceptar. El
tema propuesto para este ejercicio es investigar dolencias fsicas, crnicas o
circunstanciales de los participantes. Esto lo hacemos a los fines de incluirlos
como material trabajable. En esta oportunidad ninguno de los participantes
manifest dolencias.

"Les voy a hacer escuchar un disco (es un blues, cantado por Otis Redding).
Quiero que lo escuchen atentamente, mientras caminan por la sala y se observan
entre ustedes".

Es fcil percibir en ellos distintas actitudes de incomodidad, como sonrisas


inmotivadas, cambios bruscos en la direccin de la marcha, intentos de disculpas.
Tambin algunas agrupaciones entre los integrantes que se conocan de antes. El
disco termina y el coordinador permanece en silencio unos minutos. Es una
invitacin a un "darse cuenta" de lo que les sucedi.

"Vamos a escuchar nuevamente el disco, pero acostados en el piso, con los ojos
cerrados".

Algunas personas suelen "engancharse"- en estos momentos en alguna fantasa,


que emerger en el trabajo posterior.

"No abran los ojos. Les voy a dar ahora la tercera consigna Quiero que vuelvan a

- 71 -
escuchar el disco en la misma posicin, y que adems presten atencin a la serie posterior se observa un notorio cambio de actitud: ahora est ms suelta, asume
de pequeos movimientos y gestos que estn haciendo o han hecho mientras por mementos su erotismo en forma decidida y plcida. Juan no hace tampoco
escuchaban, como por ejemplo, ese temblor que vi en la columna de uno de ningn comentario. Observamos, al continuar su trabajo, su capacidad para "jugar"
ustedes, o ese movimiento reiterado de sacarse los pelos de la frente. Cuando se y "experimentar" con el temblor de la columna vertebral, que le haba sobrevenido
descubran produciendo algn movimiento, reitrenlo tantas veces como puedan, en el principio de la experiencia.
hasta que se les torne sin sentido".
Siempre queda abierta la posibilidad de continuar investigando, mediante ejercicios
A esta altura, Juan descubre su temblor en la columna y comienza a moverse en individuales y/o grupales, provocndolos o cortndolos a voluntad.
forma espasmdica y continua. Alicia se fricciona el lado derecho de su cabeza.
Ins se masajea ambas caderas.
"Permanezcan con los ojos cerrados. Mientras escuchan el disco nuevamente
intensifiquen los movimientos que estuvieron haciendo e intenten ponerse de pi,
sin dejar de hacerlos".
Lo curioso, en este momento del grupo, es la expresin de dolor localizable en
alguna parte del cuerpo, que manifiestan todos los integrantes. Por efecto de la
intensificacin y localizacin, se los percibe como "vctimas" de esa dolencia, como
si fueran invlidos.
"Abran los ojos y permanezcan quietos unos instantes, Cuando recomience el
disco desplcense, reiterando el movimiento que descubrieron y despus
comiencen, sin dejar de hacerlo, a prestar atencin a los dems".

La caravana de invlidos es impresionante.

"Observen a sus compaeros. Ahora reproduzcan en sus cuerpos las dolencias de


los dems".

La situacin se torna por momentos confusa, ya que algunos reproducen


"dolencias" de otros, que a su vez las copiaron de terceros, y hasta se da el caso
de que hay quienes vuelven a sus propias dolencias a travs de las de sus
compaeros.

"Ahora escuchamos nuevamente el disco. Cada uno corporiza nicamente su


propia dolencia, sin prestarle atencin a los dems".
Al terminar la experiencia, se produce un largo periodo de silencio, luego del cual
algunos narran lo que sintieron. Por ejemplo, Alicia comenta que no tiene ya el
dolor de cabeza.

Hasta ahora, Ins fue una muchacha reservada y tmida, que no se permite
demostraciones de feminidad y mucho menos entrar en juegos de seduccin
ertica. Al finalizar el trabajo, manifiesta alegra, pero a lo largo del desarrollo

- 72 -
LABORATORIO

El pjaro rompe el cascarn.


El c a s c a r n es el mundo.
Quien quiera nacer,
tiene que d e s t r u i r UN mundo.
Merman Hesse

Se le llama tambin maratn, grupo de encuentro, grupo prolongado, taller, grupo de


vivencias. Se trata de una reunin de duracin variable. Nosotros empleamos
cincuenta horas de trabajo neto, condensadas en cuatro noches y dos das de un
fin de semana. El objetivo es la experiencia, sto es, la posibilidad de vivir
sensiblemente e! aqu y ahora, ya que experiencia es slo presente, (al pasado se
lo recuerda y el futuro no existe). Nosotros ofrecemos la materia prima para las
experiencias, y acompaamos a los integrantes durante el desarrollo de las mismas,
sin interferidos.

En cuanto a ellos, les alertarnos para que no se interfieran a s mismos ni a los


dems Estas experiencias llevan implcita una carga muy grande de afecto y
motricidad, y la meta es el contacto crecientemente verdadero de cada uno
consigo mismo y con los otros

Pese a la gran cantidad de trminos, todos vlidos, con que se designa esta
actividad, nosotros optamos por el de "Laboratorio'', por dos razones. La primera,
porque sugiere investigacin y experimentacin, y sin ellas no hay conocimiento
posible.

- 73 -
La segunda porque nos remite emocionalmente al encuentro que tuvimos en Cuando stos son escasos, en cambio, el clima emocional del laboratorio es ms
Asuncin del Paraguay con un viejo cacique de la tribu "Lengua", que nos intenso. As es como en algunos casos los laboratorios pueden ser definidos por
pregunt qu era lo que estbamos haciendo. Uno de los participantes intent sus participantes como "mgicos", por la intensidad y belleza de las situaciones
traducir "laboratorio" al guaran', y el viejo, en su rudimentario espaol, nos dijo: grupales.
Trabajadero?, pero eso lo hacemos nosotros tambin, trabajar con nosotros
Las psicoterapias (todas ellas) y los laboratorios, constituyen un intento de
mismos."
individuacin creciente, donde se aprende a percibir claramente los propios limites
y a apreciar y disfrutar de las diferencias con el otro.
Nosotros proponemos participar en un laboratorio a los que se inician en la terapia
gestltica, porque ello facilita la actividad teraputica posterior. Nos interesa
Esta es una situacin imprescindible para el crecimiento y la autointegracin. Sin
tambin que lo hagan como cierre del proceso teraputico, porque el bienestar que
embargo., los momentos de mayor plenitud y an de xtasis que el ser humano es
ya lograron les permite disfrutarlo en plenitud. Finalmente, lo sugerimos al sujeto
capaz de lograr, se dan cuando pierde los lmites de su "yo". Generalmente sto
que se halla en una situacin de "impasse" existencial.
ocurre

Las experiencias proporcionadas son las mismas para todos los participantes, a
en el seno del grupo y el sentimiento vivido es que no slo se es parte del todo,
pesar del diferente nivel de integracin. Esto enriquece la experiencia, ya que
sino que se "es" el todo. El laboratorio proporciona muchas veces la posibilidad de
debido a los vnculos solidarios que se crean, colaboran unos con otros en el experimentar este sentimiento. Sus momentos finales, por eso, estn destinados a
proceso de crecimiento. ayudar al individuo a recuperar sus lmites, para poder volver al mundo de todos
los das.
En el laboratorio, los ejercicios grupales tienden a crear situaciones que potencian
estados de nimo definidos. Durante el transcurso de los trabajos, al mismo tiempo El laboratorio es como el ajedrez: tiene aperturas clsicas y cierres tpicos. Las
que se van aprendiendo las pautas, se van quebrando estructuras defensivas, por variaciones se producen en el transcurso.
razones de fatiga y tambin de "contagio".
Apertura: Comenzamos por proporcionar al grupo una explicacin somera del por
De todos modos, suele ocurrir que alguno de los integrantes se encuentre qu de esta reunin. Luego les proporcionamos las pautas, con las que
sbitamente marginado del sentimiento general imperante en el momento. Puede intentaremos manejarnos a lo largo del tiempo que permaneceremos juntos.
ser que de pronto no consiga participar en un ejercicio de sensibilizacin corporal,
o bien, que en una fantasa dirigida quede detenido en algn punto, Ahora ponemos msica. Mientras la escuchamos respondemos a la consigna de
experimentando angustia. Lo que sucede, es que en ese instante, entre esta "mirarse y dejarse mirar". Algunas veces, nuestros ojos se "enganchan" en alguna
persona y su posibilidad de vivir el aqu y ahora del grupo, se interpone con fuerza mirada; otras, la sensacin que experimentamos es la de una rpida carrera en pos
de figura central, una que surge del pasado o que est vinculada al futuro. Este es de ojos que se "escurren" y huyen de los nuestros. (Claro, que los que nos miran
el momento del "trabajo", para lograr el cierre de las gestalts incompletas. quiz imaginen lo mismo de nosotros).

A todo sto, se produce un fenmeno grupal en el que por identificacin, muchos Ahora, a presentarse, Los terapeutas tambin. Cada uno se sienta por turno en el
participantes generan una situacin de angustia similar, vinculada al mismo medio de! grupo, acercndose a la persona elegida, (aquella o aquellas con
quienes pudimos compartir la mirada). Con algunas palabras se define la situacin
personaje.
vital. Mientras, el resto del grupo escucha y mira en silencio. Pese a la obvia dificul-
tad de quien se est presentando, este ejercicio est destinado a los observadores.
Entonces tenernos los laboratorios de "mam" o "pap", en los que, ms que poder
Previamente se les dio como pauta que privilegiasen al sentir sobre el pensar. Una
seguir una tnica creciente de tarea grupal, se produce una verdadera sucesin de
vez que el individuo que se ha presentado vuelve a su lugar en la ronda, los otros
"trabajos" individuales.
integrantes del grupo, en la medida que as lo desean, van comunicndole sus
sentimientos.

- 74 -
Este es un ejercicio difcil, pese a la aparente simplicidad de su estructura. La los participantes e imaginar que otro podra haberlo echado y por qu.
tendencia es a emitir juicios, opiniones. Pareciera que lo que sienten, es producto
de algo que les hizo la persona que se present. Lo ms comn de todo es El grupo tiene orden de no asentir ni negar nada, dejndole al "echado" hacerse
expresar lo que piensan como si fuera un sentimiento. "Siento que vos ests cargo de sus ansiedades persecutorias. Cuando todo el grupo pas por el mismo
pasando por una situacin difcil" o " Siento que ests dbil y afligida", sin percibir trance, se propone un recreo para distenderse, tomando caf o fumando. Durante
realmente qu les est pasando a ellos mismos con sto. Habitualmente en esta ste, en total secreto la gente se rene de a pares con cada uno de los
etapa se silencian los sentimientos hostiles. integrantes, para contarse si fueron echados y por qu causas.

Agresiones: (No participan los terapeutas) Al comienzo de este ejercicio y para Este es el momento de la confesin. La propuesta de que sea secreta obedece al
alentarlos a realizarlo, se explica brevemente la nocin de lmite de contacto y la hecho de que as se protege la posibilidad de mentir y atenuar el golpe. De este
necesidad de vaciar la zona intermedia. Se inicia con la agresin directa, frente a modo se empieza a cuidar y proteger al otro de la propia hostilidad, en tanto sta
frente, a la manera de la presentacin, hacia la o las personas contra las que se va disminuyendo. Es el esbozo de la creacin de los primeros vnculos solidarios.
experimenta hostilidad. Previamente, tambin como consigna, se los induce a
conectarse con su propia capacidad de agresin. El recreo termin. A cada uno se le entrega la hoja donde se registraron todas las
agresiones emitidas en presencia o a espaldas de los dems. Se les incita a leerla
Lo primero que se les pide es que se vuelquen hacia adentro, que busquen su con el agregado de las palabras "ste soy yo". Algunas personas no resisten a
bronca Otras vez deben hacer una ronda de miradas, esta vez malvolas, sin aceptar identificarse con algn juicio particularmente cruel. En el momento no se
amor. Sean hostiles, no se sonran, mrense con rabia. Critquense. Traten de les insiste, sino que se les pide que subrayen aquello con lo que no se sienten
darse cuenta de todo aquello que no les gusta del prjimo. Rescaten lo que ayer identificados y conserven la hoja, La mayor parte de las veces, la aceptacin suele
callaron, durante la presentacin". ser un trabajo nocturno v solitario, pleno de emocin, que devuelven a! grupo a la
maana Siguiente, Cuando sto no ocurre, se contina trabajando en terapia. El
A medida que el ejercicio avanza, el clima se va "caldeando", y muchos rescate de proyecciones facilita an ms la unin de los integrantes. La siguiente
integrantes, no habiendo participado antes, se levantan para increpar a algn jornada, la primera de las prolongadas, encuentra al grupo dispuesto al trabajo
compaero. Entretanto el equipo teraputico se ha repartido hojas con el nombre solidario.
de cada integrante, en las que se registra cada palabra utilizada como agresin. (Y En los das de jornada completa se trabaja con juegos, fantasas dirigidas y
no a quien va dirigida, cosa que carece de importancia). ejercicios de expresin corporal, cuya eleccin est de acuerdo con el momento y
la situacin existencial del grupo,
Esta parte, podra decirse que es la ms gestltica del ejercicio, ya que los
participantes hablan "con" y no "acerca de". Sin embargo, nos consta que muchas Muy frecuentemente, entes del cierre, proponemos al grupo juegos con
personas permanecen silenciosas, no expresando su pensamiento. Quiz sea por caractersticas diferentes a las de aquellos que utilizamos anteriormente. En
temor a la ley del Talin. Tal vez no estn habituadas a expresar su hostilidad. general son juegos alegres e inocentes, propios de la infancia, que permiten a un
grupo ya entrenado por las experiencias anteriores, rescatar la espontaneidad
El ejercicio contina con las "echadas". Cada integrante debe echar a aquella de entonces.
persona que ms le incomoda. Esta se retira hacia algn lugar, desde el cual no
pueda escuchar lo que se habla. Previamente se aclara al grupo que todos van a Otras veces, el clima de especial recogimiento vuelve esta actividad casi imposible.
echar a alguien y sern echados, y nadie vivir sto ms de una vez. El cierre propiamente dicho permite revivir intensamente los acontecimientos y
Cuando el "echado" se retira, el que lo ech explica al grupo las razones que tuvo sensaciones ms importantes vivenciados durante el laboratorio y rescatar
para hacerlo. A su vez, los participantes que tambin lo tenan "en la lista", explican aquellas experiencias que posiblemente lleguen a formar parte del bagaje de toda
a los dems sus razones. Cuando el "echado" vuelve, debe dirigirse al que lo la vida.
expuls y explicarle los motivos que supone tuvo. Tambin debe mirar al resto de

- 75 -
Esto se expresa con los ojos cerrados, el cuerpo en reposo, con palabras que
significan la posibilidad de dirigirse a algunas personas, para decirles qu se llevan
consigo de ellas.

Finalmente el grupo es invitado a deambular, para un encuentro con cada uno de


los integrantes.

Esta es la visin del laboratorio desde la ptica de los que coordinamos estas
experiencias, y los objetivos y tcnicas con que nos manejamos. Sin embargo, la
riqueza vivencial de un laboratorio puede ser trasmitida con mayor vigor y belleza
por el relato que de ella hace una participante.

Hoy es jueves. Hoy es el laboratorio. Del trabajo voy a ir para all. Me miro en el
espejo y suena una voz interior que me dice:
No, no voy!, pero esa otra voz que tantas veces me habla, me dice: Vas a ir!, no
te vas a borrar, quisiste el baile, baila que te va a hacer muy bien.
Voy. Como tantas veces, me fuerzo a seguir adelante. Viajo hasta all. Llego,
Entro en esta antesala, y me veo frente a m, como si fuera un espejo, cada una de
las personas que estn charlando, riendo, o solos y serios, soy yo desmembrada,
agrupada y aislada a la vez. Estoy sintiendo miedo, busco refugio, encuentro a
Claudia y busco su compaa. No saludo a nadie, digo un buenas noches dbil,
inaudible quizs. Claudia me dice que tengo que presentarme a cada uno de ellos,
lo hago totalmente inhibida. Vuelvo a hablar con ella y con Adriana, les digo el
miedo que tengo, esta mezcla de expectativas, emocin, ansiedad y no s cuantas
cosas ms, que se embarullan en m interior. Estoy confundida.

Quiero que todo empiece ya, que termine esta especie de agona, esta necesidad
de integrarme y sentir todos mis frenos que me tienen sujeta y amordazada. Se da
la voz de subir. Comienza el laboratorio. Dejo mis cosas, entro en esa habitacin,
siento una gran opresin en el pecho. Me atrae el rincn. No me ubico en ese lugar
porque s que quiero esconderme. Al lado mo se sent Adriana, nos ubicamos en
crculo, dejando el centro como escenario de nosotros mismos. Se da la primera
consigna. Mirarnos. Me siento mal, se me nubla la vista, no los puedo mirar, no los
quiero mirar. Con dos miradas siento algo en especial, a Elseo le pido socorro
desesperadamente, y con Carlos siento que mi mirada puede descansar, reflejarse
en la de l.
Nace en m una sonrisa que se comunica con la de l, encuentro paz, hay una
comunicacin especial, como una comunin.

- 76 -
Me quedo con esta sensacin, mientras que lo elijo para comenzar mi sigo diciendo, voy a vivir sola para saber qu es lo que quiero hacer de mi vida,
presentacin. Se establece que cada presentacin no puede superar los tres si estar sola o compartir mi vida con otra perrona. Qu es lo que deseo, quiero y
minutos. (*) necesito, todo eso interno se me est haciendo fuego que me calienta y es una
vitalidad que quiere salir por cada uno de mis poros. Est saliendo, me siento
Nos numeramos para que se haga en forma ordenada. Elijo el nmero 10. El diez plena, llena, feliz. Contino hablando con Hugo, que est a su lado, lo imagino
me trae el recuerdo de la escuela, del muy bien diez! solo, aislado del grupo, triste, y quiero integrarlo, le hablo de mis frenos, de los
lmites que me pongo, de mis miedos para comunicar mis sentimientos, y para
Comienzan a presentarse. Es el momento de Carlos, viene hacia m, qu bien!, l comprometer mi cuerpo en cualquier tipo de relacin (comprometer cuerpo y alma
sinti lo mismo que yo con nuestras miradas. Me siento reconocida, me siento en una relacin).
bien. Me est diciendo que est nervioso por tener que hacer su presentacin, yo
quiero trasmitirle calma, para que pueda seguir hablndome, fuerza para que siga Por dentro sigo sintiendo todo sto que me va susurrando que tengo la fuerza para
adelante. Sent, Carlos, todo lo que quiero brindarte en este momento. Te brindo lograrlo, estoy por explotar de emocin, pero claro, son slo tres minutos, me tengo
mi apoyo y podes contar conmigo, aqu est mi mano. Ya volviste a tu lugar. Te que apurar, voy rapidsimo ante Claudia, le digo: Te quiero mucho, me siento feliz
digo que me sent muy bien cuando viniste a hablarme, porque cuando nos de que ests conmigo en este grupo, sigo muy veloz hacia Eduardo, con la plenitud
miramos sent como una comunin, una conexin especial que no s explicar del de felicidad que tengo le cuento. Te quiero mucho, cuando te presentiste y te
todo, me siento feliz de que me hayas elegido para tu presentacin. acertaste a m, sent una emocin enorme, quiero y les digo a todos: Me siento
totalmente feliz de estar con ustedes, quisiera abrazarlos a iodos, los amo a cada
Ya est terminado el nmero 9 y escucho mi pelea, qu voy a decir?, como uno, poro me repudren estos tres minutos de porquera que estn controlndome,
queriendo pensar un libreto y no se me ocurre nada, voy a pasar yo, qu digo? tambin est Tito, corro a su encuentro, y a vos qu te puedo decir, adems de
Internamente escucho otra vez esa voz que me dice: Ins, no jodas, pasa y dec lo quererte muchsimo? Tengo ganas de darte un beso, te lo doy, cada vez me
que sents en ese momento, tu presentacin puede no ser la mejor, puede no ser siento ms en mi interior como que hay un saltimbanqui que est bailando de
la ms genial, puede ser una ms, no por eso vas a ser menos, no por eso van a felicidad. Tambin quiero contarle a Elseo, voy a su encuentro y... me decs,
dejar de quererte. Eliseo, que ya no me queda ms tiempo, y me da bronca, porque te iba a decir
algo muy importante, pero ya tendr tiempo para decrtelo en otra oportunidad.

Estoy ms tranquila. Paso yo, voy directamente a Carlos, me siento en cuclillas Vuelvo a mi lugar, los miro a todos, los veo y escucho sus risas, y estoy agitada,
ante l, medio encorvada, digo que mi nombre es Ins, que tengo 27 aos, que me estn diciendo todos a la vez, o yo los siento que me estn hablando todos a la
estoy separada desde hace un mes, siento que estoy sentndome ms derecha, vez, me sorprendiste Ins, y yo que me siento ms sorprendida que ellos, me ro y
estoy viviendo un proceso muy positivo, ahora estoy erguida, por dentro siento un no quiero que dejen de contarme qu sintieron y escucho las risas de todos, es un
calor, algo que se enciende, algo que late con fuerza, estoy sintindome feliz, clima brillante, feliz, Hugo confirma lo que me imaginaba, me dice: sos una flaca
genial, otra voz me dice: quisiera compartir con vos ese camino que comenzs, me
sent feliz, me sent con fuerzas y Gustavo: durante tu presentacin me pareciste
las burbujas del champagne cuando recin los sirven en la copa, as me sent yo.
Tito me dice: te quiero, me siento orgulloso de vos. Qu feliz que soy, que paz
brillante que siento, qu calma plena, que Ins que soy.
Nota: Esta limitacin de tiempo la propusimos nicamente en este laboratorio a modo de prueba, en parte Viernes.- Voy en el tren. Segundo da de laboratorio, a partir de este momento
debido a que el nmero de participantes fue algo mayor que en los otros, y en parte al deseo de
hasta el domingo a la madrugada me quedar en esta casona. Traigo una bolsa de
experimentar la posibilidad de abreviar esta etapa habitualmente fatigosa para todos. En laboratorios
posteriores experimentamos con ms xito la consigna de dirigirse para hacer su presentacin nicamente dormir y una bolsa de expectativas. Me siento feliz, recuerdo mi presentacin del
a aquella o a aquellas personas con las cuales hubieran experimentado sensaciones especiales durante al da de ayer me emociona pensar en ella.
ejercicio inicial, que consiste en mirar y dejarse mirar, mientras escuchan msica.

- 77 -
Llego, ya esta antesala no me asusta, me ro, me integro. Idiota, as soy yo.
Aprende a escuchar, as soy yo.
Subimos, me siento en una punta del semicrculo. La consigna es hacer una ronda Brrate esa mscara de buena que te queda boluda, as soy yo.
de agresiones, en el momento en que lo sintamos, ante quien queremos, decir (Impacto total, se me mueve todo).
todas las agresiones que en ese instante surjan. No tengo ganas de agredir. Se Boluda, as soy yo (S, con bronca y angustia). Castradora, as soy yo (Miedo).
levanta Carlos, viene hacia m, me enfrenta y me dice: Mina fcil. Por qu?, tengo Falsa, as soy yo (Angustia).
una mezcla de bronca y. pena, me levanto inmediatamente, y voy hacia l y le Insensible, as soy yo (Crece la angustia).
contesto: Prejuicioso. A partir de ahora no tengo ms dificultad en agredir. No me comprometo, as soy yo (Pelea interna, bronca, lo acepto).
As va pasando el tiempo, por momentos tengo mucha bronca y la largo, hay otras Fra, en pose, nena bonita, as soy yo (Confirmacin, dolor).
agresiones que me resultan indiferentes. Agresiva, as soy yo.
Insensible, as soy yo (Parte de la mscara, me siento muy mal).
Terminamos con las agresiones. Ahora cada uno tiene que echar al integrante del No me juego, as soy yo.
grupo que quiera, ste sale de la habitacin, y cuando no est, el que lo ech tiene Cobarde, as soy yo.
que decir por qu lo hizo, posteriormente cada uno de nosotros debe decir si Vendo imagen, as soy yo.
tambin lo sacara y por qu. Mosquita muerta, escondida, as soy yo.

A m no me echaron, cuando quedaba la ltima persona del grupo que deba Me reconozco, me siento desorientada, no entiendo lo de mscara, quiero llorar,
echar, me raj a m porque no haba nadie ms. mezcla de desconcierto y miedo, no cre que as fuera yo. Hoy empiezo a
conocerme.
Terminamos por ahora, bajamos a descansar y luego vendr la segunda parte. Me
estoy preparando un caf, lo veo a Carlos y siento bronca, desafiante voy hacia l, Terminamos por hoy, ya es tarde, la mayora se van a sus casas, yo prefiero
le digo: Me dio muchsima bronca lo que me dijiste, me doli. Me contesta: Te quedarme a dormir ac, hace fro y no quiero estar sola.
imaginas por qu te lo dije. Nos abrazamos, nos rernos, chau bronca. Sbado: Comenzamos otro da, con nuevas experiencias. Desde que me levant
quise volver a leer mi lista de agresiones y no puedo, siento un temor que me lo
Subimos, comienza la segunda parte de esta experiencia. Me siento al lado de impide. No me siento del todo bien; no entiendo como mi presentacin fue tan
Carlos. Me alcanzan el papel donde fueron anotando las agresiones que hice, brillante, y despus sali todo sto de m con lo que me conecto por primera vez.
porque en realidad, si yo no tuviera estas cosas que proyect en otros, no me
joderan. La consigna que debemos seguir para este nuevo ejercicio es caminar con los ojos
cerrados, evitando tocar a los dems, me mezclo, rozo a alguien, se me produce
Comenz leyendo Carlos, Despus yo. Esta es mi lista, sta soy yo. un gran rechazo, camino y me siento muy mal, cada roce me repulsa e
instintivamente me corro, siento asco. Me siento entre una multitud que me aplasta,
Prejuiciosa, as soy yo. (Pequeo temblor).
me choca, no me ven, siempre voy en sentido contrario al resto de la gente.
Charlatana al pedo, as soy yo (Respiracin que se agita).
Dbil de mierda, as soy yo. (Respiro con ms dificultad).
Mscara, as soy yo (Me extraa). Se da una nueva consigna: Reconozcamos al resto con la cadera izquierda. Me
En pose, as soy yo (Me extraa ms). resulta divertido, busco, encuentro, una cadera que me responde, luego otra y me
Vencida, as soy yo (Golpe interno). siento en una vorgine de caderas, hombros, codos, brazos. Encuentro hermosos
No vivo, lloro noms, as soy yo (No lo reconozco). estos contactos, me siento viva, reconocida, ahora con las mejillas, encuentro unas
Mosquita muerta, as soy yo (Dudo). que me trasmiten paz, es una suave caricia que me envuelve, y va ms all de mi
Hipcrita, as soy yo (Me extraa otra vez). rostro, me siento muy bien. Ahora nos reconocemos con las manos y los pies, todo
No me juego, as soy yo (Golpe). se convierte en un laberinto de manos que se entremezclan con pies que se

- 78 -
buscan, se forma como una alianza general, alegre, divertida y simple, se enlazan ahora, y sigo aunque mi garganta no comprende qu pasa. Me voy sintiendo
las ganas mas de dar y recibir caricias, reconocimiento, con las de todos. aliviada, ya no tengo ms necesidad de gritar. Se mezclan los ritmos de cada uno
y yo sigo con el mo, me produce placer, se forma una especie de msica general,
Encuentro unas manos y jugamos, bailamos en el aire, vuelan, se acarician en armonizo con ella, mis manos comienzan a descubrir mi ritmo, me siento feliz.
cada movimiento, juegan los dedos a escabullirse y a ser encontrados, as corno Todo mi cuerpo se conecta, es la primera vez que mis manos pueden seguir un
bailan mis manos, me siento bailar por dentro. ritmo como yo lo imagino, sigo en este goce, es un descubrimiento maravilloso
para m, llevar con mis manos el ritmo que quiero. Golpeo en el piso, juego, mi
Escucho la voz de Julia que dice: Sigan buscando, hay otras manos que los creacin musical es genial, me duelen las manos pero siento necesidad de seguir,
esperan. Me despido sin querer hacerlo, siento pena, no quiero dejarlas, me siento estoy cansadsima, pero quiero gozar al mango este descubrimiento, este
desorientada. Vuelvo a escuchar una voz que me dice: Busquen unas manos con desbloqueo.
las que se sientan cmodos. Quiero reencontrarme con esas manos, no las
encuentro, tengo miedo de no encontrarlas, ser rechazada y quedarme sola. Estoy agotada, mantengo los ojos cerrados, pero descanso inmvil escucho toda
Encuentro otras, s que no son las que quiero, pero las tomo como sustitutos, lo que pasa a m alrededor. As permanezco largo rato.
como siempre, me conformo con lo que encuentro, o est en el camino, no con lo
que quiero. A mi derecha escucho una voz, un ritmo que me atrae, giro la cabeza hasta
localizarlo, me conecto totalmente con l, empiezo a cantar, y a golpear con mis
No me gustan estas manos, cuando hay que pedir o dar afecto, proteccin, me manos en el piso, Siento que hay una comunicacin, yo intuyo lo que va a hacer y
aplastan, me asfixian. Doy, no recibo, estoy pensando en lo hermoso que hubiera lo sigo gozando, sonriendo. Todos los que quedamos somos un conjunto armni-
sido con esas manos que perd en el camino, y sto tambin es un hecho co, formamos msica, de la misma forma que si hubiera una banda que hubiese
repetitivo, como que siempre hago lo mismo. En este momento escucho: Demos- ensayado. Lentamente se va apagando, hasta que se hace silencio, me siento
trar sensualidad con las manos. Me bloqueo, me siento muy mal. Cunto ms vibrar en paz. Este ejercicio dur una hora y cincuenta minutos.
quiero demostrar sensualidad, ms reconozco que es proteccin, tengo ganas de Despus de este coro se da una consigna, acostarnos en el formando un circulo en
llorar, lloro. (La sensualidad es proteccin, sa fue siempre mi realidad, no s que el cual nuestros pies estn juntos, una msica y la voz de Silvia que nos va
es la sensualidad, la desconozco). Me siento muy angustiada, como si se me guiando, hacemos un reconocimiento del cuerpo, no s por qu todo va muy rpido
viniera un peso encima, tengo que moldear esas manos que estn conmigo como para m, como si todo sucediera en cmara ligera me cuesta seguirla. Ahora Julia
si fueran arcilla, lo hago mientras sigo pensando en mi bloqueo, en mi nos propone hacer un viaje imaginario, a medida que nos va guiando, yo siento
desconocimiento de mi sensualidad. Ahora nuestras manos tiene que hacer lo que que estamos en distintas dimensiones de velocidad, todo pasa tan rpidamente
sienten, no s por qu instintivamente busqu apretar esas manos, fue mutuo. que apenas logro ver pantallazos, tan ligeros que no puedo detenerlos.
Lleg la despedida, me quiero ir, dejar esas manos, ellas no quieren, yo me Termina la experiencia y no logr conectarme y hacerla me raj, tuve miedo. Al
acomodo a su despedida, aunque lo que quiero es despedirme ya, sin vueltas. comentar qu sent, explico que todo sucedi muy rpido, A medida que cada uno
Qued mal, comento lo que sent, lo que ms me qued fijado y que le digo al va contando lo que le pas, voy sintiendo bronca por no haberlo hecho, fue muy
grupo, es mi angustia cuando comprob que no pude demostrar sensualidad. movilizante para la mayora. Me noto hipersensible, ante el ejercicio de cada uno lo
vivo muy intensamente, mis ojos se llenan de lgrimas con gran facilidad.
Vamos a hacer un nuevo ejercicio, nos sentamos en el piso cmodamente, Graciela comienza su trabajo, lo hace con su madre, me siento angustiada,
hacemos silencio y escuchamos el ritmo de nuestro corazn. Lo siento pausado y escucho atentamente todo lo que va sucediendo, siento que la situacin va
fuerte, ese ritmo lo traduzco con golpes de mis manos en el piso, es tranquilo pero desgarrndome algo por dentro, tengo muchas ganas de llorar. Graciela pelea con
fuerte, lo voy exagerando cada vez ms, junto con este ritmo de mi corazn, grito su madre y dice: Yo nunca tuve madre, nunca te tuve como madre. Estas palabras
con todas mis fuerzas, es la primera vez que lo hago. Cuanto ms grito ms voy son un detonador de algo en m, no aguanto ms la situacin, me asfixio ac
largando de mi interior. Todos los gritos que acumul en mi vida siento que se van adentro, tengo que salir, me voy a la habitacin contigua, prendo un cigarrillo, y
con mucho miedo saco la lista de agresiones que no pude leer en todo el da.

- 79 -
Recorro cada una con atencin y lloro, es como si descubriera algo que no Domingo: Me levanto a la maana con un sentimiento especial, el de acurrucarme
alcanzo a darme cuenta de qu es, pero s que ac est la clave de este en un rincn, sola alejarme de todos, me siento una nena abandonada.
momento. Vuelvo, Carlos est llorando y hablando.
Hacemos la introduccin a un ejercicio, como no alcanza el lugar nos dividimos en
Lloro, siento que todo mi cuerpo llora, una mano se me acerca, la saco dos grupos. Yo me quedo para hacerlo en el segundo lugar. Me siento a ver a los
violentamente, no quiero que nadie me invada en este momento, lloro y no quiero que estn trabajando, acurrucada contra el marco de la puerta, aislndome del
dejar de hacerlo. resto, sola.

Una voz me dice: Ins, quers decir algo? Me acerco ms al medio para que El ejercicio para el primer grupo llev toda la maana, as que vamos a almorzar y
todos puedan escuchar, le digo al grupo: Cuando Graciela dijo que nunca tuvo despus lo haremos nosotros.
madre, yo me acord de un trabajo que hice con Tito, en el cual llegu a la misma
conclusin, y cuando escuch a Graciela decirlo, sent una gran necesidad de Bajo las escaleras, me siento una nena triste, se me acerca Hugo, me lleva a una
llorar, una angustia asfixiante. Le la lista y me di cuenta, al ver como soy yo, que habitacin donde no haba nadie, me da un regalo, no lo Quiero, insiste, miro este
tengo tanto miedo a no ser querida qu me pongo la mscara de buena, me paquete entre mis manos, me asusta, siento necesidad de desaparecer, que este
postergo y eso me jode, tengo terror a no ser querida. Julia me dice que cierre los momento no estuviera pasando. Me quedo sola en la habitacin, lo abro, es El
ojos y describa qu es lo que siento, al hacerlo me veo a m misma como un Principito, como de costumbre cuando tengo este libro busco la parte del zorro
cascarn vaco, sin nada adentro, slo un contorno, estoy confundida. Julia me domesticado, lo leo desganadamente y pienso: ndate a la mierda, lobo boludo!
est diciendo que me meta en ese vaco. Me estoy cayendo dentro de l, estoy (El regalo se lo dieron a la mujer que en este momento no existe, soy una nia y
dentro de l, sta se asusta).
siento miedo. Mi cuerpo se acurruca, se achica, siento una opresin en todos
lados. Julia me est diciendo que les muestre los lmites de este vaco, tengo Salgo de este lugar, oculto el libro entre mis cosas, bajo las escaleras, por todos
mucho miedo, tiemblo. Mis manos llegan al lmite de sto, est muy cerca. Me lados estn charlando, riendo, y yo siento ganas de llorar sola, sin qu nadie me
desespero. Gimo, jadeo, no soporto esta presin, mis manos van girando a mi vea, salgo al jardn del fondo. Veo a Tito sentado al sol en un silln hablando con
alrededor. Voy hacia arriba, qu miedo!, el techo se baja, me est aplastando, me Silvia, quiero ir a pedirle ayuda.
va a matar, iS, me voy a morir!, dentro de este encierro, de este vaco, quiero
empujar hacia arriba, hago mucha fuerza, pero sigue bajando, estoy sola, sola Me voy acercando lentamente, con una mezcla de miedo y soledad, necesidad y
tengo que vencerlo. Julia me dice que no lo sostenga, que deje que baje, lo dejo llanto, bsqueda. Llego al lado de l y le digo: Tito, me siento mal, tengo miedo y
bajar, me aplasta contra el piso, tengo mucho miedo. No puedo ni llorar. Me siento me siento sola, me empieza a acariciar y siento toda la proteccin y el afecto que
con todo el cuerpo que est a punto de explotar con la presin, me voy a morir, hace tanto ando buscando tengo los ojos cerrados, estoy viendo el hall de la casa
eso pasa, me voy a morir y no quiero, abro los ojos, estoy encerrada en la de mis padres cuando yo tena entre ocho y doce aos. Ellos se iban a trabajar. Yo
realidad. Pateo, arao, destrozo, siento un pnico animal, un terror de fiera. Nada me quedaba sola todas las maanas. Me doy cuenta que el momento que estoy
me va a matar!. Destrozo todo eso que sent a mi alrededor, rompo las paredes, viviendo es se, tengo todo el miedo y la soledad que no me permit en ese
me arrastro desesperada hasta donde est Julia, me abrazo fuertemente a ella, momento, y a medida que se lo estoy diciendo, voy sintiendo proteccin y amor, y
me da proteccin, me reconoce al nacer. Busco y tengo toda la proteccin de esta imagen se va borrando, como si existiera una goma para borrar malos
mam, me siento tranquila, ella me quiere, mam me quiere, siento placer, estoy recuerdos. Ya no me siento mal.
contenta, soy un beb feliz acurrucado contra su mam.
Viene Julia. Ayer nac y Julia fue mi mam, ahora crec y Tito es mi pap. Todos
Se termin por hoy la actividad, me voy a dormir, se me aparece continuamente la vienen y nos ponemos a cantar, nos remos, me siento feliz, sigo abrazada a mi
imagen del momento en el cual me decid a nacer, revivo el sentimiento de terror pap, soy esa chica de ocho o doce aos que ahora se siente protegida y querida,
animal, se me repite la escena varias veces hasta que me quedo dormida. me quedo con esta imagen. Vamos a almorzar y como todos estos das, despus

- 80 -
de comer empiezan a volar primero las miguitas, que se prolonga hasta que nos plsticamente, con fuerza, armoniosamente, a medida que lo voy haciendo voy
cansamos de jugar. sintiendo que voy creciendo, mi cuerpo se va haciendo ms largo, ms ancho,
aumenta mi volumen, es como si realmente estuviera creciendo, todo es calma,
Retomamos el ejercicio. Elseo pone msica brasilera, nos da la consigna: En el armona, placer, la sensacin de plenitud es total. Giro, subo, doy vueltas, me
momento en que lo sintamos, golpeemos el piso con las manos con toda la bronca. arqueo, me estiro formo curvas completas con todo mi cuerpo, me acurruco, me
Yo me siento con mucha paz, no quiero perder esta sensacin, soy una nena con- extiendo, siento, gozo, me quiero, me acaricio con cada movimiento. Termina esta
tenta, no quiero conectarme con la bronca (esta negacin es no querer crecer). msica y empieza otra, quedo extendida a lo largo, de frente hacia arriba. Unas
manos me recorren el cuerpo a lo largo, me acarician, surge la mujer Ins de
Escucho la msica y no golpeo el piso, termina la cancin y Elseo nos dice: Los adentro, soy toda sexo, sensualidad, gozo, acaricio la alfombra que toma formas y
que no se permitieron tener, bronca, fjense qu bronca estn deteniendo, no me siento excitada, la sensualidad me desborda, todo mi ser es placer, me
dejando salir. Estas palabras producen en m el efecto de un timbre que me hace acaricio, cada movimiento es un llamado a mi sexo, lo acepto, lo reconozco, lo
saltar, vuelve la msica y esta vez casi al final golpeo el piso dos o tres veces con quiero, lo necesito, me siento mujer sensual y ardiente. Termina esa msica, otra
bronca, pero no mucha. La consigna que nos est dando Elseo en este momento comienza, y siento la necesidad de reconocerme desde la mujer que est en m y
es: Ahora, esos golpes que dieron con las manos, denlos con todo el cuerpo. acabo de aceptar, de conocer. Recorro mi cuerpo muy, despaciosamente, gozando
Escucho nuevamente la msica y es como si me enchufaran, me conecto de cada una de mis partes, toco mis cabellos, me resultan muy sensuales y
totalmente con esa bronca que es gigante, demoledora , todo mi cuerpo golpea atractivos, estoy excitada, mis cabellos sobre el rostro me seducen, as voy re-
con violencia, con una violencia que no cre tener, todo mi ser es como un ltigo corriendo todo mi cuerpo, mi cara, mi cuello, mis brazos, mis manos, mi espalda,
que se sacude, que castiga, mis piernas, mis brazos, mis codos, mis pies, mi mi pecho, mi busto, mis pies, mis piernas, mi sexo, todo mi ser est abierto,
cabeza, mi espalda, mi cola, mis manos, todo es un arma que est destrozando receptivo, deseoso, expectante, asombrado. Elseo nos dice que sigamos haciendo
algo que est debajo, me doy cuenta de que cada golpe de esta arma que es mi lo mismo con los ojos abiertos, lo hago y sigo exactamente con el mismo
cuerpo corresponde a sentimientos: por la soledad de m niez, por la falta de sentimiento, con la misma sensacin. Creo que en este momento soy por primera
afecto, por el miedo masticado, por las limitaciones de mis viejos, por sus vez Ins, la mujer de 27 aos. He crecido.
falencias, por sus miedos. Son castigos mortales, as los voy matando uno a uno,
asesinato violento, sanguinario, sin piedad, veo cmo salpican pedazos a mi En este laboratorio: He nacido y encontrado a mi madre, he crecido hasta mi niez-
alrededor y cunto ms golpeo, ms fuerte me voy haciendo y ms violentamente adolescencia y recuperado a mi padre, cambiado la imagen de tristeza y
castigo. Tengo un acceso de tos, y creo haber terminado, escucho la voz de Elseo desproteccin, he peleado y me he reconocido en mi totalidad como mujer.
que dice. Agoten! Agoten!. Y reanudo la lucha, ya no me alcanza golpear da
espaldas, lo sigo haciendo de costado, todo mi cuerpo salta con la violencia Adems, he descubierto que pedir afecto es hermoso y recibir caricias de un amigo
irracional de las faltas, las ausencias, finalmente me pongo de frente, miro hacia el es una de las sensaciones que ms me gustan, que pedir es importante y no
piso y veo los restos que quedaron diseminados en el piso y con toda la fuerza que hacerlo significa perder momentos hermosos de la vida por frustraciones. Me he
hay en m, bajo los puos y destrozo en un nico y certero golpe el poco resto que conectado con el ritmo de mi cuerpo con mis manos. He cantado y creo que estoy
hubiera quedado. perdiendo el bloqueo que siempre me puse. Y muchas cosas ms que voy
descubriendo lentamente.

Eliseo dice quo dejemos que nuestro cuerpo adopte la postura que le sea ms
cmoda. Quedo de costado entre estirada y acurrucada, satisfecha, como si
hubiera cumplido una misin importante.

Pero tambin siento qu soy muy chica. Sigue la msica y mi cuerpo empieza a
desperezarse, me voy estirando y movindome con una gran suavidad,

- 81 -
PAREJAS
Recargado con el peso
de la fuerza del amor la
energa de mi amor
parece decrecer...
Oh! Aprende a leer lo
que ha escrito
un amor en silencio, que
entender con los ojos es
un atributo
de la fina sutileza del amor
W. Shakespeare
Qu es una pareja?

El diccionario da como definicin de pareja, "el conjunto de dos personas o cosas".


Dice: "Pareja: en las fiestas, unin de dos caballeros de un mismo traje, etc., que
corren juntos y unidos. El primor consiste en ir iguales. Parejas, en el juego de
dados: los dos nmeros o puntos iguales que salen en una tirada, dem en los
naipes. En equitacin: Carreras que dan dos jinetes juntos sin adelantarse
ninguno".
Para el Diccionario Enciclopdico Hispanoamericano, pareja, con el sentido que le
darnos hoy, no existe, pero curiosamente, s, su concepto.
Pareja, como sustantivo, viene de parejo/a, como adjetivo, y se lo define como
igual o semejante. Cundo dos personas constituyen una pareja? Qu es
preciso para que una pareja exista? El amor no puede ser, porque tambin existe
entre padres e hijos, entre amigos. Intereses comunes, tampoco, ya que socios de
cualquier empresa puede tenerlos. La mera atraccin sexual, no basta, puesto que
amantes ocasionales pueden experimentarla y bien intensamente. Cundo hay
pareja y qu la constituye? Para que lo que paso a enunciar no se refiera a
cualquier relacin humana comprometida, parto de la base de que existe una atrac-
cin sexual, lo bastante prolongada e intensa como para que los dos hayan hecho
planes de convivencia. La pareja, lo sepa o no, hace contrato con su cuerpo y su
alma. Cuando se cumple, pueden ser felices, sin ningn tipo de evaluacin, pero
cuando se sienten desdichados, es casi seguro que no se atuvieron a las normas
del contrato.
Los que se atraen como para desear vivir juntos, tienen, como es lgico, un
proyecto de vida en comn, lo cual no significa exactamente que tengan un
PROYECTO COMN DE VIDA.

- 82 -
CONTRATO DE CONVIVENCIA la naturaleza de las cosas, a partir de la convivencia se va dando una acomodacin
y no estado de "paciencia amistosa", que permite superar las necesidades a veces
La expresin "Contrato de Convivencia" puede parecer incongruente a simple vista. desparejas, de contacto y retraimiento. Cuando este adentro y afuera, en cambio,
Cmo es posible hablar tan framente del amor? Dice Gurdjieff que los seres responde ms bien a la tipologa jungana de intro o extroversin, la incomodidad
humanos somos vasallos de los dos grandes reinos interiores: el reino del
puede llegar a hacerse tan penosa, que puede llegar o dar por tierra con las
pensamiento y el reino del sentimiento, Dijo tambin, y la prctica psiquitrica lo
posibilidades de convivencia de una pareja, bien avenida en otros puntos. Suele
demuestra a diario, que con nuestras acciones solemos demostrar que muchas
presentarse a la consulta como una queja rencorosa, la mayor parte de las veces
veces rendimos pleitesa a un seor en el campo del otro. Y as andamos por el
referida al ritmo sexual.
mundo. Permitimos que nuestra "cabeza" gobierne lo que no puede ser sino
sensorial o afectivo, como la eleccin de pareja, por ejemplo. Del mismo modo,
tomamos decisiones con la "cabeza caliente", esto es, bajo el imperio de la
emocin, en situaciones tales donde ser pensantes nos permitira mayores logros. d) Nivel de neurosis
Tal, la decisin de convivir. Por eso resulta vlido hablar de contrato cuando de
convivencia se t r a t a . Aunque aparentemente este punto convoca a todos prefiero ponerle como rubro
aparte, fundamentalmente por el poco peso que tiene si en los otros, puntos hay
COSAS A TEMER EN CUENTA acuerdo. Claro que de no existir, este punto reviste la mayor la mayor parte de las
importancias, ya que en grado de sufrimiento que representa puede llegar a
a) Proyecto comn de vida empastar la posibilidad de ser luz, tanto en el contacto previo, como en la
reparacin del dao ya producido. Por ejemplo: no es lo mismo la dificultad sexual
Esta es la primera y la ms importante de "esas cosas" esenciales a revisar entre en una pareja cuyos miembros tienen un grado aceptable de madurez y aun no
los dos, antes de concluir que la convivencia es posible y no slo deseable. Un han conseguido acomodar su ritmo biolgico, que la dificultad sexual de una pareja
proyecto comn de vida, implica un acuerdo profundo, que va mucho ms all de la donde la neurosis de uno o de los dos miembros, determina que el acto sexual
buena voluntad. As como el amante de la Naturaleza, difcilmente acceda a
acudan, en calidad de fantasma no invitados, los padres, las madres, otras parejas,
disfrutar eventos sociales, el que cifra expectativas en el ascenso social o
profesional, puede llegar a sentirse exasperado si se ve forzado a compartir horas y el acto de amor se convierte en una orga o la parlisis.
de quietud y contemplacin. Un koan zen dice: "Un pjaro y un pez pueden
enamorarse, pero, dnde van a vivir?".
e) Lucha por el poder

b) Decodificacin del lenguaje


Es un clsico de la literatura de todos los tiempos. En sit ua ciones normales se
resuelve con la divisin del poder en reas. De todos modos, la competencia o
Entre dos adultos "parejos" (una pareja que, libre de sus fantasmas del pasado,
rivalidad asoma siempre, y el poderla detectar y aceptar como un ingrediente ms
vive en el aqu y ahora), el lenguaje expresa la intencin. Cuando esto no es as, lo
corriente es que cada uno de ellos perciba al otro como el adulto encargado de en la convivencia, facilita que. sta perdure, sin que "la sangre llegue al ro".
satisfacer sus necesidades infantiles. Esto da origen a penosos malentendidos en
los que cada frase es decodificada, no como un pedido (de un nio), sino como
una exigencia (para el padre). f) Licitud de los medios

Aunque tambin puede ser, en general este punto no se refiere a cuestiones ticas
c) Afuera y adentro ni morales Puede tratarse de algo bastante ms inocente, aunque, de no tenerse
en cuenta, puede ser tambin causa de sufrimiento intil. Por ejemplo: una pareja
Se refiere al ritmo natural que es propio de los seres vivos y tambin de la armona reconoce en su proyecto de vida el deseo de disponer de lo que podra llamarse un
del cosmos. Cuando el ritmo es natural, es decir, cuando responde, en esencia, a ao sabtico, para lo cual, uno de los dos est dispuesto incrementar su ritmo

- 83 -
actual de trabajo en lo que sea necesario, para lograr dicho objetivo. Para el otro, ABORDAJE TERAPUTICO
este proceder puede no ser vlido, y llegar a preferir renunciar al placer de ese ao
de viaje y holganza, si debe ser pagado a ese costo.

Es tanta la frecuencia con que personas que se unieron enamoradsimas llegan a


la desdicha de vivir juntas, que ms de uno ha expresado su escepticismo respecto
de la posibilidad de convivir. No es extrao or llamar al matrimonio la tumba del
amor. Otros fueron ms lejos, llegaron a negar el amor y a aceptar el
enamoramiento, slo como una revolucin de hormonas. Es posible la pareja?
Y, s. Tan posible es, que en general la gente suele pelear duro para no perderla...,
Con resultados imposibles de prever. Porque todava no se invent la terapia
capaz de enmendar "la obra de Dios".

Y AHORA AL ABORDAJE PROPIAMENTE DICHO...


CUANDO ES POSIBLE

Como vimos en el captulo Quejas, cuando alguien consulta lo hace


desde uno de los polos del par de opuestos cuya expresin es el conflicto que nos
plantea. Vimos cmo, para su resolucin sugerimos que la persona asuma
alternativamente uno y otro polo. En cambio cuando quien consulta es una pareja,
JUEGO DEL CONTRATO DE CONVIVENCIA
cada uno de ellos es el polo opuesto del otro, que asume, y ve en el otro, aquel
aspecto que rechaza de s o cree no tener, y por lo tanto, envidia. Una pareja
discutiendo, puede tomar la clsica forma de opresor-oprimido, pero de modo tal
que cada miembro se hace cargo de uno slo de los roles. A veces, uno de ellos
Este es un juego para ser jugado "antes" de tomar la decisin de convivir. Ni
expresa algn sntoma corporal, por ejemplo, cefalea. Lo curioso es que si se le
siquiera es necesario que haya una pareja, alcanza con un montn de gente
hace dialogar con su cefalea, tal como lo abordaramos en terapia individual,
dispuesta a jugar. Hay dos que se sientan frente a frente, y basta que pasen por
podemos observar que este dilogo prcticamente no se diferencia del que podra
alto la atraccin sexual, si es que no son una pareja, ni se atraen, para que el juego
mantener con su pareja. En este caso uno de ellos o bien se constituye en la
tenga validez. En ese caso el juego podra llamarse: "Ud. vivira conmigo? Y a
cefalea del otro, o bien acusa al otro de "ser su cefalea.
continuacin repasan cuidadosamente, sin temor de pecar de exceso de prolijidad,
los puntos que hemos visto. Por ejemplo, en el punto referido a "lucha por el
poder", conviene que describan minuciosamente las reas de mando de cada uno, Todas las variadas formas de quejas, que hemos aplicado en el captulo
el cmo de la limpieza, el orden, el dinero, la decoracin, las salidas y cuantas correspondiente, pueden tomarse como modelo de las que la pareja lleva a
cosas su imaginacin les haga ver como convenientes. El punto clave, tipo "sine consulta. Nuestro objetivo y las herramientas que utilizaremos, son las mismas que
qua non" es el primero. Respecto de la decodificacin del lenguaje, es poco pro- cuando trabajamos con un paciente en forma individual.
bable que lo puedan determinar por s mismos. Ms que formar parte de un
contrato, corresponde al psicoterapeuta sacar las papas del fuego cuando la pareja
se est quemando.

- 84 -
Trabajos: Trastornos de la comunicacin verbal

Cuando llega la pareja, por primera vez a consulta, esperamos que tomen asiento. En el captulo "Pautas... hemos v i s t o aquellos modos de lenguaje que sirven a
En el momento en que uno de los dos va a tomar la palabra, para hacer explcita la los fines de la comunicacin. Los juegos, a travs de los cuales sto se vuelve
queja que los trae detenemos por un instante la accin y les pedimos que ms visible y aparente, constituyen un reaprendizaje, que gracias al humor, rescata
observen donde se hallan ubicados, de qu modo estn sentados y la especial para la pareja, otra posibilidad.
entonacin de aqul que iba a empezar a hablar.
Juegos
Les sealamos que as como se encuentran en este momento, "as" son ellos. Este
es el asiento de Jorge y ste el de Luisa. Aqu se sienta l y aqu se sienta ella, y Juegos de la confianza
sta es la postura que ambos tienen, y ste es el gesto de quien iba a hablar. Les
1) El lazarillo
pedimos que presten atencin a todo ello y lo recuerden, ya que por el da de hoy
sto va a ser as, aqu, y as est Jorge aqu y as est Luisa, no importa qu
Enfrentados se toman de las manos, manteniendo los pies cerca el uno del otro.
persona ocupe ese lugar.
Mientras uno est de pie, el otro se mantiene acuclillado. Invierten su posicin, y
Entonces les pedimos que cambien de ubicacin y les indicamos con un gesto a la ste cambio lo hacen varias veces, con una velocidad regulada por ellos mismos.
persona que ocupa el lugar de aqul que iba a empezar a hablar, que lo haga, En este juego va a participar la mitad de las parejas reunidas.
recordndole que en este momento "es" el otro. La mitad de esta mitad, segn propia eleccin, sern "ciegos". Se les atar un
pauelo alrededor de la cabeza. La otra mitad sern sus lazarillos. Cada pareja
Este "gambito" tcnico, pocas veces deja de cumplir su objetivo, que es el de de ciego y lazarillo se corresponder con una pareja de la vida real. Los que no
c r e a r un clima de informalidad, la conciencia inicial de un tipo de terapia. participan activamente como observadores sern "obstculos". Los ciegos mar-
Responde profundamente a una necesidad de contemplar las cosas "mudando" charn detrs de los lazarillos colocando una mano sobre su hombro. Los
puntos de vista, no slo desde lo intelectual sino con todo el cuerpo. Adems la lazarillos se encargarn de que sus compaeros "conozcan" su camino. Se
posibilidad de "ser" el otro, facilita la comprensin de que la "batalla" que se libra, encargarn no slo de "hacerles ver" sus maravillas, sino tambin de cuidarlos
no ocurre solamente en el campo de la vida en comn, sino que responde a un y protegerlos de las dificultades de los obstculos en su camino. Luego de un
"duelo" personal, privado e histrico. tiempo invertirn los roles. Cuando ambos miembros de la pareja hubieren jugado
los dos roles, las parejas se cambian con las que todava no jugaron. Finalizado el
juego, compartirn con los dems su experiencia. Contarn corno se sintieron
siendo ciegos, si tuvieron miedo o no, qu tipo de experiencias les hicieron vivir
Obvio - imaginario sus lazarillos.. El grado de confianza depositado en ellos, algo que no slo los
lazarillos registran sino tambin que hacen de obstculos observan.
Fue descrito en el capitulo "Herramientas...'', y es uno de los primeros juegos que
enseamos a la pareja, con el expreso pedido de que lo practiquen en casa. Les 2) Mueca de trapo
explicamos la importancia que tiene para ambos el que puedan dirigirse al otro, Este juego lo puede hacer todo el grupo a la vez. Como en el otro, cada pareja
s l o a travs de lo obvio de su percepcin y que puedan hacerse cargo con "niito-mueca de trapo" representa una pareja de la vida real.
entera responsabilidad, de todo lo que imaginan sobre el otro. El mueco de trapo es el que debe jugar con su confianza, relajando su
musculatura de modo tal que al "niito" le sea posible darle la forma que quiere.
Es importante que perciban, adems, cundo sus sentimientos y las acciones que Obviamente, sto es posible slo si confa en que su compaero no habr de
devienen de ellos, guardan relacin con lo que perciben o slo son coherentes con perder los lmites del "como si"
lo que imaginan.

- 85 -
3) Mueco de goma 3) Las palomas
Este es un juego grupal que no es imprescindible jugar slo en parejas, ya que Pasa una pareja al centro del ruedo. Ambos se colocan, enfrentados, pero de
participa una sola persona por vez, en el centro de una rueda en cuyos costado. (Los hombros derechos de ambos estn prximos) Lo que sigue son las
participantes, se supone, debe confiar. La persona es un mueco rgido de goma indicaciones que les damos. Inclinen el torso hacia adelante.
que sus compaeros empujan de uno a otro con distintos grados de violencia, Levanten el rostro como si fuera un mascarn de proa. Flexionen las piernas.
hacindolo "rebotar", sin que se doble ninguna de sus articulaciones. Eleven la pierna izquierda, con la planta del pi hacia arriba, paralela al techo.
Extiendan y avancen los orazos. Tmense del brazo del compaero. Ahora,
Los juegos de la competencia vuelen!
Estos juegos no requieren ms de una pareja, aunque es posible que participen
varias a la vez. Algunas personas, con dificultad para lograr su propio equilibrio, suelen tomarse
casi desde el "vamos" del brazo de su pareja. Lo hacen desesperadamente, para
1) Los pulgares no caer. El colega (*) a quin vimos dirigir este ejercicio, les deca unas palabras
Consiste en un juego de habilidad en que con las manos entrelazadas, ambos muy bellas, que no pudimos evitar la tentacin de citar: "Una pareja no es la unin
tratan de sujetar el pulgar de sus compaeros. de dos desequilibrados que se prenden uno al otro para no caer. Una pareja se
constituye con dos que manejan muy bien su propio centro y que se dan la mano
Pese a la simplicidad infantil de este juego, y quiz debido a eso mismo, los para volar".
participantes pueden maniobrar con fuerza o astucia. Corno se trata de una
situacin jocosa, pero nada irritante, quizs se atrevan a rever, a travs del mismo, Juego para la bsqueda: El ajedrez
conductas que en su vida de pareja, tienen que ver con la competencia.

2) Sube y baja Los participantes, una pareja, disponen de toda la habitacin, convertida en
damero. Ambos se ubican como los reyes del ajedrez. Mutuamente se eligen
Enfrentados se toman de las manos, manteniendo los pies cerca el uno del otro. blanco y negro. Se movern como las piezas que son, alternndose uno y otro. El
Mientras uno est de pie, el otro se mantiene acuclillado. Invierten su posicin, y damero vara segn su antojo, se agranda o se achica en cada paso. El jaque, y su
ste cambio lo hacen varas veces, con una velocidad regulada por ellos mismos. posibilidad, lo determinan ellos. Interesa el final del juego, el observar cmo se
Es conveniente que al trmino de estos juegos, comenten entre s, qu mueven, quin persigue a quin, qu utilizacin hacen de la franqueza, o si se
experimentan al estar arriba o abajo, y qu cuando el que gana es el otro. manejan con estrategias. Cuando, finalmente, se encuentran cara a cara, qu
hacen?, cmo terminan el juego?, prefieren continuarlo? Cambiando la
El logro del equilibrio terminologa propia de este ejercicio, y usando un lenguaje que sea afn a su
cotidianeidad qu tiene que ver con su propia vida? de qu se dan cuenta?.
1) Punta contra punta
Las parejas se enfrentan tan prximas que las puntas de ambos pies de uno se
apoyan sobre las del otro. Luego, ambos se toman por ambas muecas, y (*) Dr. R. W. G r i m s o n
suavemente se echan hacia atrs, extendiendo los brazos.
Naturalmente deben tener en cuenta el diferente peso de ambos, para lograr una Juego diagnstico: La fotografa
posicin desde la cual sto sea posible. Cuando se logra, pueden jugar con la
postura flexionando las piernas una si, otra no, las dos a la vez, o cualquier cosa Las parejas se ubican en un arco de dos tercios de crculo, ms o menos. El tercio
que deseen. restante es para que all se ubiquen los "fotografiados".

Es un juego muy placentero, y lo mejor es que va dndoles conciencia de restaurar Cada pareja, sin retirarse del lugar en que estn, presenta ella o l, su
un equilibrio cuando lo desean. problemtica principal. Discuten con el resto del grupo, el nombre que proponen

- 86 -
para designar esta particular forma de enfrentar sus dificultades. (Ejemplo: "Pareja
en cortocircuito", "Compitiendo las olimpiadas", "La liebre y la tortuga").
LA PSICOPATA
Una de las parejas ya nominadas, se ubica en el espacio reservado para su
A TRAVS DE LA LENTE
fotografa. Ahora deben adoptar una actitud corporal que corresponda al nombre
elegido. (Ejemplo: La "Pareja en cortocircuito" luego de ensayar varias posturas
DE LA TERAPIA GESTALTICA
"elctricas", terminaron ubicndose uno frente al otro, muy contorsionados, y
mesndose recprocamente los cabellos).

Las otras parejas tienen derecho a la enmienda. Cada pareja puede, en sus
compaeros, dar la versin que consideran ms .apropiada para representar el Soy cauteloso para saltar
nombre que los otros han elegido. Si los nimos llegaran a caldearse, es oportuno Del sentir al querer,
que los coordinadores les alerten acerca de su propia problemtica. para transformar
el sentimiento de una carencia
en la decisin
de calmarla de algn modo.
Hugh Prather

En el comienzo de su libro "Sueos y Existencia", figura la siguiente "oracin


gestltica" que compuso Perls, y dice as:

Yo soy yo y T eres t.
Yo hago lo mo y t haces lo tuyo.
Yo no estoy en este mundo
para satisfacer tus expectativas,
ni t ests para satisfacer las mas.
Si por casualidad nos encontramos, es hermoso.
Si no, no tiene remedio.

La belleza de su contenido potico no es suficiente, sin embargo, para evitar


inducir a error a quienes ven en ella un desaprensivo modo de eludir compromisos
con el otro.

Obviamente, sto no es as. Y el mismo Perls, se encarga de aclarar su significado


a lo largo de su obra.

Muchas veces, asistimos desconcertados a expresiones que parecen invitar a la


psicopata, a una suerte de egosmo esencial que nada tiene que ver con lo que
entendemos, ya no por hombre sano, sino simplemente por hombre.

- 87 -
En este asunto convendra referirnos a qu es lo que entendemos por hombre En "La Isla", el libro de Huxley, hay unos pjaros, los mirlos a quienes se haba
sano: Es aqul, que viviendo el aqu y ahora, no lo confunde con lo ya vivido. Es el adiestrado para que recordaran a la gente que deban prestar atencin.
que est atento a sus necesidades y tiene un buen intercambio con el medio que lo Atencin!" decan los mirlos, y tambin "Atencin a la atencin!". Es sta una
rodea. Puede atender al devenir de lo que ocurre dentro y fuera de s y sentirse buena reflexin, pero tambin decan otra palabra, muy poco tenida en cuenta. Los
capaz de responder. Puede evitar someterse al otro, sin dejar de tenerlo en cuenta. mirlos decan " Compasin!". Y sto es tan importante como prestarse atencin a
Puede sentirse libre de crear, vivir, sentir y dar curso a lo que siente, sabiendo s mismo, saberse capaz de padecer con otro, de tener compasin. No es slo lo
respetar sus lmites y los del otro. Sabe ser l mismo, lo que significa estar que yo necesito, lo que yo quiero y lo que me hace falta. Es tambin lo que vos
desprendido de fantasmas del pasado, de odios irracionales y miedos histricos necesitas y lo que a vos te hace falta. Yo no estoy en este mundo para satisfacer
que nada tienen que ver con su situacin actual. Supo desprenderse del tus expectativas, pero si estoy en este mundo para darme cuenta de que si puedo
desvalimiento que pertenece a otra etapa de su historia y de la consiguiente frus- satisfacerlas, tambin es hermoso, aunque no haya un encuentro entre vos y yo.
tracin. Se sabe capaz de dar y de amar. Todo sto permite la inmediatez de vivir
el aqu y ahora de acuerdo a sus necesidades. El psicpata no puede darse cuenta del otro, porque no sabe quin es l. Si no
reconoce lo propio, cmo reconocer lo ajeno.
Si el psicpata rezara cmo dira la oracin gestltica?
El es la necesidad, no es un individuo que padece necesidad.
Yo soy yo y t no existes,
ms que para satisfacer mis expectativas.
El psicpata no puede hacer una escala de valores entre necesidad, deseo y un
Si yo satisfago las tuyas,
mero capricho. Acta como si todo tuviera el mismo valor, la misma importancia.
es slo para que me encuentres encantador
Para el psicpata, todo es una necesidad. De todo depende su vida, por eso no
y te ocupes de m.
hay ningn tiempo para la espera.
Realmente no creo que te deba nada,
y por lo tanto, nada debes esperar de m, En terapia gestltica, consideramos importante que el paciente aprenda a
en ninguna situacin. reconocer una necesidad y cmo satisfacerla inmediatamente, a travs de un
El psicpata est en la inmediatez, ya que no se permite un comps de espera darse cuenta en la accin, ya que de sto s depende su propia existencia. No es
entre la percepcin de la necesidad, con el consiguiente impulso a la accin, y la un "yo trato de respirar", es un respirar, y sta es la accin, la necesidad y su satis-
accin misma. Su realidad lo mueve a instancias del capricho circunstancial, o del faccin. Obviamente, de lo que se trata, no es de ensear a respirar, a comer o a
deseo, como si se tratase de verdaderas necesidades. An su movimiento vivir, sino impedir que vivencien como necesidades, urgencias que slo responden
constante representa, fundamentalmente, una huida frente a su propio odio y al deseo, y an al capricho.
miedo, manipulando el medio impulsado por su desvalimiento imaginario. El
psicpata huye de la frustracin, que no soporta, porque vive bajo el peso de su La frustracin de un deseo puede llegar a ser dolorosa, la de un mero capricho tal
permanente sentimiento de frustracin. Su copa est rebosante, no aguanta una vez no despierte ni siquiera escozor. El ser humano tiene necesidades, como los
gota ms. dems seres vivos que corresponden al individuo y a la especie. Como individuo
necesita sobrevivir, como miembro de su especie necesita amar. Amar a una
El hombre sano tolera la frustracin, sin experimentarla ms que como pena persona determinada, es slo deseo. Como tal puede ser frustrado.
pasajera, porque se ha liberado de las antiguas. Como se siente capaz de darse
satisfacciones, no se siente desvalido. (Si yo no soy capaz de despertar tu amor, El ser humano, adems, tiene una necesidad que otros organismos no tienen, y es
sigo, en cambio, siendo capaz de vivir y de amar. Si no puede ser con vos, con otra la de reconocimiento o aprobacin social, a travs de sus acciones. En sto, se
persona podr.) El hombre sano puede postergar sus cosas sin dejar de tenerlas fundan los cdigos ticos y morales. Quien olvide sto, podr llegar a creer que no
en cuenta. El psicpata no las tiene en cuenta, se mueve por la urgencia ele la es imprescindible al hombre la compasin que pregonan los mirlos de Huxley.
desesperacin.
Desde el punto de vista teraputico, lo primero que habra que hacer con el

- 88 -
psicpata sera ensearle a diferenciar un deseo de una necesidad, para ayudarle un estilo de vida convertido en teora psico-teraputica. No nos cejemos, tampoco,
a tolerar la frustracin. Por otra parte, cul sera el comportamiento apropiado deslizar por el tobogn del "slo vale la pena mi capricho", ya que Perls jams
respecto de los viejos fantasmas, sus introyectos? Cmo facilitarle el recono- imagin que este tobogn sera algn da propuesto como sustituto de las buenas
cimiento y rescate de sus proyecciones? A priori, se podra decir que, en este piernas que precisamos en este mundo para caminar por nosotros mismos.
aspecto, sera exactamente lo mismo que con cualquier otro neurtico, en cuanto a
trabajar con sus bloqueos.

Adems, debe realizarse una tarea adicional: ayudarle a discernir sus urgencias y
hacer el aprendizaje de tolerar frustraciones, aptitudes que, desgraciadamente, los
obsesivos y los histricos, en el otro extremo, poseen en demasa. La paradoja
consiste en que, al mismo tiempo que se le entrena para la tolerancia de la
frustracin, debe ayudrsele a vaciar su copa. Debe aprender a vaciarla l mismo,
nico modo de que aprenda a confiar en l. Los trabajos en situaciones regresivas
deben ser permanentes.

El historial del psicpata , en cuanto a frustracin y desvalimiento, es tan grande,


que hara falta instalarse dentro del paciente en forma permanente, mucho ms
intensamente que en cualquier otra neurosis, de modo de poder trabajar en su
salsa, a sus fantasmas. Los fantasmas, para el psicpata, no son tales, no los vive
corno si surgieran del pasado, sino que son su aqu y ahora permanente. Est en
constante regresin. Quiz sea sto lo que vuelva tan difcil trabajar con l, ya que
la evaluacin de lo hecho, tambin lo ser desde la regresin, como si no hubiera
ninguna parte adulta con la que comunicarse. Porque en las dems neurosis, son
ciertos puntos los que dificultan el crecimiento, debido a situaciones a las que se
est enganchado, pero como el psicpata est casi permanentemente regresivo,
carece de la habilidad de darse cuenta de que ahora, y con nosotros, no precisa
recurrir a los viejos ardides. Nosotros trabajamos con la culpa como un introyecto,
y entonces cmo trabajar con un psicpata, en apariencia, carente de culpa?,
cul es ese introyecto?. Si resentimiento es culpa y el psicpata es un resentido
que lo est de todo y con todo, para l esa es su realidad. El psicpata es culpa
todo l, aunque como tal no la experimente. Sentirla se refiere al hecho conocido
por todo neurtico, de percibir dolor o molestia en una parte de su ser. En l, en
cambio, culpa es todo su ser. Si la culpa busca un castigo, l es un castigo
permanente. Estar dentro de un bosque, no permite abarcarlo, ni reconocerlo, ni
saber cmo es. Cada rbol se parece a otro, y es fcil perder la orientacin...
Ayudemos, pues, a transformar al psicpata en el ser lleno de bronca que su
resentimiento exige, facilitmosle el despojarse de ese encanto ficticio que cree
precisar para mantenerse con vida, y permanezcamos junto a su rabia gigantesca.

Eso s: no fabriquemos psicpatas en homenaje a una interpretacin delirante de

- 89 -
GLOSARIO

Angustia: Es la brecha entre el ahora y el despus. Es la excitacin que llevamos


en nosotros, y que se estanca si estamos inseguros del rol que tenemos que
representar. Si no sabemos si nuestra conducta ser aprobada o rechazada,
sentimos que nuestra excitacin no puede desembocar en actividad. Somos presas
del "pnico de escena". Permanecer en el aqu y ahora es evitar la angustia, ya
que la excitacin fluye hacia la actividad.

Aqu y ahora: El ahora es aquello de lo que me doy cuenta, es el presente y an


nuestros recuerdos o nuestras expectaciones los estamos haciendo ahora. "Ahora"
abarca todo lo que existe, el pasado ya no es, el futuro an no es, "ahora" incluye
el estar "aqu", el vivenciar, el compromiso, los fenmenos, el awareness.

Atencin: (Y atencin a la atencin) Atender es un modo de responsabilizarse, de


hacerse cargo. Atendemos nuestra persona. Atendemos lo que nos rodea.
Atendemos lo que ocurre entre nuestra persona y lo que nos rodea. Atender es un
estilo de vida. Estar alerta es una manera de "sentir" la vida, de discriminar y de
"darse cuenta". Castaneda habla de la atencin como una de las cuatro armas
imprescindibles en el camino del "guerrero". (El camino de los "hombres de
conocimiento", los Cristos y los Budas que marcaron derroteros a la humanidad).
De ah que Huxley, en "La isla", haga decir entre otras cosas a sus mirlos:
"Atencin a la atencin!". Esto significa atencin al estilo de vida que elegiste,
atencin a tu compromiso de hacerte responsable.

Autosoporte: Aunque el trmino es lo suficientemente claro para no dejar dudas


en el nimo de nadie, siguiendo a Perls, hablamos de autosoporte para referirnos a
la capacidad que tiene el individuo de hacerse cargo de s-mismo, satisfacer sus
propias necesidades, darse cuenta de la figura urgente en su aqu y ahora, y ser
capaz de cerrar sus propias gestalts incompletas.
Solemos hacer referencia al uso que de sus piernas (soporte del organismo) puede
hacer el individuo que quiere y puede bastarse a s mismo. En contraposicin a
sto estara el sujeto que busca apoyo en el ambiente. (Ver soporte ambiental).

- 90 -
Bloqueos de la energa: El introyector se "traga" a su ambiente enterito sin Contacto: Es la relacin entre individuo y mundo. El lmite que los separa es
digerir. El proyector aliena de s lo que no le gusta, lo pone en los otros, y luego lo lineal, si la relacin es armnica y se mantiene en el aqu y ahora, a medida que
critica y lo rechaza. El retroflector, impotente para expresar su ira al medio, la van cumplindose los procesos de la homeostasis. Si el individuo est preso del
vuelve contra s mismo. Suele ser un enfermo psico-somtico. El deflector, ayer o pendiente del futuro, entre l y el mundo la lnea se convierte en un espacio.
achatador de emociones, usa la broma, el chiste, la risa, o el chisme para trivializar Esta zona intermedia preada de fantasas, pensamientos, acciones, figuras se
el momento. Evita el compromiso afectivo. El fracaso lo caracteriza. El confluente interpone entre nosotros y nuestra realidad interna y externa. Un modo de vaciar
est siempre de "acuerdo" con lo que los dems determinan y an se "engancha" esta zona lo llevamos a cabo en un juego constante en nuestros laboratorios: el de
con las emociones de los otros. Incapaz de marchar por su propio camino, utiliza el las "agresiones y echadas".
de los dems. Contnuo de conciencia: Estarlo de alerta sensorial, congruente con el propio
percibir y sentir. Conciencia constante del mundo, cambiante de 5S sensaciones y
Carcter: Igual a conducta rgida, previsible. "Hombre de carcter" es aquel que sentimientos.
dispone de un muy escaso repertorio de conductas posibles para estmulos
diferentes, por lo cual cualquiera puede saber lo que va a hacer o decir. Culpa: Es el disfraz elegante del resentimiento.

Darse cuenta: El darse cuenta, el awareness, es siempre una experiencia


Capas de la neurosis: Visin de Perls respecto de la estratificacin de las
subjetiva que incluye algo ms que una comprensin intelectual acerca de algo
conductas del neurtico, ir atravesndolas de afuera hacia dentro, hasta llegar a
interior. Es total, organsmico, compromete toda respuesta que podamos dar en
aquellas ms verdaderas que se expresan con un estallido emocional.
todas las reas de nuestras conductas posibles. Es darse cuenta de s mismo,
darse cuenta del mundo y darse cuenta de lo que est en el medio (zona
Como: Propiciamos su empleo, al igual que el de la palabra "que", porque facilita
intermedia de la fantasa). El proceso de darse cuenta es siempre cabal,
una mejor relacin entre la gente. Recaba verdadera informacin.
diferente del insight en cuanto incluye no slo conductas psquicas sino tambin
fsicas. Vincula el interior de un organismo con su capacidad de entender y
Concentracin: Es la atencin limitada en extensin y aumentada en intensidad.
resolver en el ambiente. (Tengo sed, mi modo de darme cuenta de que preciso
Concentrarse es poner la casi totalidad de la vida en un rea pequea del propio
agua. Huyo de un incendio, mi modo de darme cuenta de que reconozco el peligro.
ser o del mundo exterior. Es posible hasta casi llegar a la suspensin de los
Siento deseos de tomarte entre mis brazos, mi modo de darme cuenta de tu
fenmenos vitales para "ser" slo olfato. Tambin es posible anular casi toda
pedido de ayuda y mis ganas de drtela.
sensacin o sentimiento para ser puro pensamiento, tras la ms abstracta de las
ecuaciones. Toda vez que me concentro plenamente en lo que es mi tarea de este
Encuentro: Decimos que hay encuentro entre dos o ms personas, entre una
momento sea para beber caf, amar o dictar una clase, siento plenamente mi vida
persona y el medio que la rodea, entre partes de una persona, si del contacto
fluyendo en el aqu y ahora.
surge una modificacin, el cambio de la estructura de aquellos que contactan.
Encuentro es algo ms que una circunstancia fort uit a. No hay manera de
Confusin: La vida es una sucesin de gestalts que se abren y cierran, en un
provocarlo. Se da o no se da y sto es irremediable. S puedo, eso s, abrir las
orden prioritario de necesidades. Tan pronto satisfago una de ellas, para que la
compuertas a dichas posibilidades, vaciando la zona intermedia, aquella de la
figura que la representa pase a integrar el fondo del que surge la nueva figura.
fantasa, los juicios y los pre-juicios y permanecer alerta y abierto.
Cuando se pierde la capacidad de percibir las figuras en sucesin, y la percepcin
es la de que en escena han surgido dos o ms figuras, simultneamente, el sujeto
Experiencia: Dice el diccionario: "Conjunto de conocimientos que se adquiere con
se halla en confusin. Lo que ocurre en realidad, es que a una necesidad surgida
la prctica". Nosotros usamos esta palabra para definir aquellos conocimientos que
en el aqu y ahora del sujeto, se superpone la imagen de una figura perteneciente
adquirimos sobre nosotros mismos, a travs de la participacin voluntaria de
a una gestalt incompleta que viene del all y entonces. El sujeto se siente
nuestra persona en forma cabal. No slo interviene nuestro pensamiento sino
paralizado, no sabe elegir, y el trmino confusin es enunciado por l para
tambin nuestros sentidos, emociones y sensaciones. Experiencia, como
describir fu impotencia.
concepto, est contenido en el encuadre tmporo-espacial del aqu y ahora.

- 91 -
Experimentar: Dice el diccionario: "Probar y examinar prcticamente una cosa. En Integracin: Es aceptar como propia una proyeccin. Es aceptar salimos de uno
ciencias, hacer operaciones destinadas a demostrar, comprobar, y descubrir slo de los polos del par de opuestos. Es recuperar un aspecto nuestro alienado,
determinados fenmenos." Se trata de evitar la huida de las situaciones penosas. proyectado y desvitalizado.
Quien se atreve a permanecer en ellas, emerge fortalecido y ms dispuesto a
continuar con la investigacin. Es atrevernos a llegar al fondo mismo de una sensacin o sentimiento. Es
responsabilizarnos de lo que sentimos, pensamos, decimos o hacemos. Integrarse
Figura-fondo: De la psicologa de la percepcin tom Perls el concepto de figura- es volverse crecientemente ms y ms uno mismo. Los budistas llaman a sto la
fondo, que alude al hecho de que cuando nuestra atencin se centra sobre algo, bendita experiencia del no-dos.
todo lo dems retrocede, constituyndose en fondo. Figura, para la terapia
gestltica, es la necesidad, la percepcin de una carencia, la imagen de lo que se Interrupcin: Casi podramos decir que interrupcin y neurosis son sinnimos. La
precisa para satisfacerla y la accin para lograrlo. Satisfecha la carencia, la gestalt neurosis se caracteriza por la interrupcin del flujo de la energa en cualquier
se cierra y la figura retrocede al fondo, del cual emerge una nueva figura. Esta punto, desde la percepcin del desequilibrio homeosttico hasta la accin para
alternancia figura-fondo es la vida misma. restablecer ese equilibrio.

Gestalt: Es una palabra alemana que significa totalidad, configuracin y alude a Laboratorio: El objetivo es el experienciar, sto es, vivir sensiblemente el aqu y
los planos ya descriptos en "figura-fondo". ahora. Su meta es el contacto verdadero de cada uno consigo mismo y con los
dems.
Est vinculada al concepto de homeostasis, por el cual la vida es un equilibrio
inestable permanentemente recrendose a s mismo. Gestalt es, pues, la totalidad Necesidad: "Impulso irresistible en cuya virtud obran las causas precisas, e
del proceso que incluye las acciones, emociones y pensamientos que se infaliblemente, en determinado sentido. Aquello a que es imposible sustraerse,
escalonan desde la aparicin de una necesidad hasta su satisfaccin. faltar o resistirse. Falta o carencia de las cosas indispensables para subsistir.
Riesgo o peligro que exige pronto auxilio.". Tal la definicin que da el Diccionario
Homeostasis: El proceso homeosttico es aqul mediante el cual el organismo Enciclopdico Ramn Sopea, a la cual no consideramos "necesario" agregar
mantiene su equilibrio y por lo tanto su salud, en medio de condiciones que varan. nada.
Es el que garantiza al organismo la satisfaccin de sus necesidades. Para lograr
sto, para crear, para completar gestalts, o para pasar a otro asunto, el individuo Nutriente: Todo aquello con lo cual es posible mantener un buen intercambio que
tiene que ser capaz de sentir lo que necesita y debe saber como manejarse a s facilita el vivir, que es utilizable como "recargador" de energa, que da fuerza,
mismo y a su ambiente. bienestar, alegra. Nutriente puede ser una persona con la que se da un encuentro
enriquecedor, una situacin, un trabajo, un alimento. El nutriente y el nutrido, a
Hoyos de la personalidad: Son los "huecos" dejados por las proyecciones.
menudo, intercambian entre s estos roles (vos me das, yo te doy). El hombre y la
naturaleza, de la que se nutre, y a la que favorece en su desarrollo, un trabajo que
Imaginario: Lo que no tiene existencia fuera de m, y por lo tanto es una "creatura"
me apasiona y del cual vivo. Soy mi propio nutriente si tengo claro que no vivo al
ma.
servicio de mis caprichos y que soy responsable de mi bienestar y felicidad y
Impasse: El impasse es la seguridad ltima ante el miedo a la muerte. Cuando en puedo compartir sto con los otros y sentirme feliz. Soy mi propio nutriente si
el transcurso de un trabajo, vemos que el paciente se va acercando a su punto puedo usar mi pensamiento para construir y construirme, y no para llevar la larga
fbico, se suele volver reiterativo, cae en crculos viciosos y se niega a seguir. Del cuenta intil de mis padecimientos reales o ficticios. Soy mi propio nutriente si
impasse no se sale reiterando caminos, slo hay un modo de terminar con l, y tengo claro que puedo usar mi fantasa para viajar cuando quiero y no sentirme
ste es abordando un camino nuevo tal como el del laberinto de los juegos arrastrado por ella. En definitiva, soy mi propio nutriente, tanto ms nutritivo,
infantiles. (Ver capas de la neurosis). cuanto que esta nutricin me enriquece a m mismo como individuo y al ambiente
del que formo parte.

- 92 -
Obvio: Es aquello que puede ser captado por los sentidos y por la prolongacin "carcter" (ver). La posibilidad de ubicarnos en el centro mismo de esta batalla,
de stos, las ciencias. nos permite visualizar ambos polos de nuestro conflicto existencial, "reconciliar el
si y el no", vivir en total aceptacin.
Opresor y oprimido: Son los personajes del drama de las exigencias. "Tienes
que..." dice el opresor. Y abunda en discursos, palabras, razonamientos, castigos. Pnico de escena: Se refiere a la agitacin, palpitaciones, sudoracin y otras
"No puedo" se excusa el oprimido y llora, se queja, argumenta, se niega. El molestias que suelen aquejar a personas que, por diferentes razones, deban
opresor es fuerte, inteligente, lleno de verdades y buenas intenciones. El oprimido exhibirse (discursos, exmenes). Nuestros pacientes lo experimentan al "tirarse al
es dbil, astuto y mal intencionado. A veces gana uno, a veces el otro. Las batallas ruedo". Es el sentimiento que discurre por la brecha entro el ahora y el despus.
se suceden, con resultados dispares. La guerra acaba slo con el fin de la vida. Es la angustia que urge cuando llega el momento de actuar el rol.

Por qu: Es una acusacin solapada, que disfraza una crtica o un juicio.
No obstante el conflicto no acaba nunca, porque luchan por la vida. Las
modalidades de ambos contendores, a veces se estereotipan, dando origen a una
Responsabilidad: Responsa-habilidad, o sea habilidad o capacidad de dar
conducta rgida y poco flexible, que curiosamente adjudicamos a personas de
respuesta, de hacerse cargo. Esto se aplica a aquellas cualidades, afectos o
"carcter" (ver). La posibilidad de ubicarnos en el centro mismo de esta batalla, nos
emociones que tienen que ver con el "no" de cada par de opuestos.
permite visualizar ambos polos de nuestro conflicto existencial, "reconciliar el si y el
Responsabilizarse de un afecto, de una emocin no significa un "mea culpa" sino
no", vivir en total aceptacin.
tan slo un "darse cuenta" de la propia existencia. Yo no soy responsable de lo
que siento, ya que es algo que surge en m. S soy responsable de darme cuenta
de lo que siento y sobre todo de lo que hago con lo que siento.

Salud: Consideramos que el hombre est sano, si, habindose desembarazado de


sus fantasmas del pasado (necesidades que no puede satisfacer por s mismo,
miedos irracionales, odios histricos, frustraciones), puede vivir totalmente alerta
aqu y ahora. Est sano si es libre para sentir, sin rechazar sus sentimientos, si es
responsable de ellos y de sus acciones, y si no especula con el futuro para
controlarlo a travs de la ansiedad o la expectativa gozosa.

Soporte ambiental: Es el sucedneo del autosoporte. Suele conseguirse


mediante artimaas: "Soy un pobre invlido", "Vos que sos tan genial...", "Yo que
te necesito tanto...", "repetidme que no entiendo , "te lo digo para tu bien", y
otros.

Las tcnicas de manipulacin varan desde las ms claras y directas a las ms


sutiles. En todos los casos se trata de conductas arcaicas, con las que el nio
intentaba manejar a sus padres para conseguir objetos materiales, cuidados,
atencin, afecto o seguridad.

Txico: Reservamos este trmino, en gestalt, para aquellas sustancias,


No obstante el conflicto no acaba nunca, porque luchan por la vida. Las situaciones, personas, lugares, climas, trabajos, conductas, pensamientos, que
modalidades de ambos contendores, a veces se estereotipan, dando origen a una actan como un medio (ambiente) en el cual el organismo persona no puede
conducta rgida y poco flexible, que curiosamente adjudicamos a personas de desarrollarse. Dificultan el libre fluir de la energa al servicio de la vida.

- 93 -
LECTURAS RECOMENDADAS

Autores

Baranchuk J. Z. y otros.
Tratamiento de las quejas. Buenos Aires. Acta Psiquitrica.
Vol. XXVI N 1. 1980.

Baumgardner P.
Terapia gestltica. Mxico. Editorial Pax. 1978.

Bradford L y otros.
El laboratorio psicoteraputico. Buenos Aires. Paids. 1975.

Cooper D.
La muerte de la familia. Buenos Aires. Paids. 1972.

Egan C.
El laboratorio de relaciones interpersonales. Buenos Aires
Paids. 1976.

Guenon R.
El reino de la cantidad y los signos de los tiempos. Madrid.
Ayuso. 1976.

Gurdjieff
Relatos de Be/ceb a su nieto. Tomos 1, 2 y 3. Buenos Aires Hachette. 1978.
Encuentros con hombres notables. Buenos Aires Hachette 1978.

- 94 -
Arquetipos e inconciente colectivo. Buenos Aires. Paids. 1977. Tipos Stevens Barry
psicolgicos. Barcelona. Edhasa. 1971. No empujes el ro. Santiago de Chile. Cuatro Vientos. 1979.

Krishnamurti J. Stevens John.


La libertad primera y ltima. Buenos Aires. Sudamericana. Esto es gestalt. Santiago de Chile. Cuatro Vientos. 1977.
1971. Sheperd M.
Laing y otros. Fritz Perls. La terapia gestltica. Buenos Aires. Paids. 1977.
Hacia la locura. Madrid. Ayuso. 1975.
Suzuki O.
Conversaciones con mis hijos. Barcelona. Grijalbo. 1979.
Introduccin al budismo Zen. Buenos Aires. Kier. 1979.
Latner J. El libro de la terapia gestalt. Mxico. Diana. 1978. Tart Charles
Psicologas transpersonales. Buenos Aires. Paids. 1979.
O'Donnell P.
El juego. Barcelona. Gedisa. 1978. Vidal G.
Hacia una terapia ms vivencial. Buenos Aires. Acta Psiquitrica psicolgica
Perls F. para Amrica Latina. 1978.
Sueos y existencia. Santiago de Chile. Cuatro Vientos. 1974. Dentro y fuera del
tarro de la basura. Santiago de Chile. Cuatro Vientos. 1975. Waikes K.
El enfoque gestltico. Testimonios de terapia. Santiago de Chile. Cuatro Vientos. Enseanza y sistema de Gurdjieff, Buenos Aires. Ddalo. 1976.
1976. Yo, hambre y agresin. Mxico. Fondo de Cultura Econmico. Winnicott D.
Realidad y juego. Buenos Aires. Granice. 1972.

Zinker J.
Pichn R viere. E. El proceso creativo en la terapia gestltica. Buenos Aires. Pidos. 1979.
El proceso grupal (del psicoanlisis a la psicologa social). Buenos Poetas
Aires. Nueva Visin. 1980.

Querol M.
Psicoterapia integrativa dialctica. Buenos Aires. Acta Psiquitrica psicolgica Auden Wystan Hugh.
para Amrica Latina. 1978. Antologa de la poesa inglesa. Buenos Aires. 1976.

Bradbury R.
Reich W. La feria de las tinieblas, buenos Aires. 1975.
La funcin del orgasmo. Buenos Aires. Paids. 1977.
Escucha hombrecito. Barcelona. Bruguera. 1978. Carneiro E.
Candombls de Baha. De Ouro.
Rogers C.
El proceso de convertirse en persona. Buenos Aires. Paids. Carroll L.
1980. Aventuras de Alicia en el Pas de tas Maravillas. Buenos Aires. Brjula. 1968.

Sannella L.. Castaneda C.


Psychosis or trascendence? San Francisco. Dakin Company. Las enseanzas de Don Juan. Una realidad aparte. Viaje a Ixtln. Relatos de
Poder. El segundo anillo del poder. Barcelona. Editorial Pomaios. 7575.
Soifer Raquel.
Cmo juego con mi hijo? Buenos Aires. Kargieman. 1976.

- 95 -
Sturgeon T.
Chang J. Ms que humano. Buenos Aires. Minotauro. 1975.
El Tao del amor y del sexo. Barcelona. Plaza Janes. 1962.
Shakespare W.
De Juan M. Obras completas. Madrid. Aguilar. 1961.
Segunda Antologa de Poesa china. Madrid. Revista de Occidente. 1962.

Faulkner W.
Mientras yo agonizo. Buenos Aires. Santiago Rueda. 1952.

Hesse H.
Demin. Madrid. Alianza Editorial. 1980.

Lao Tse
Tao Te King. Mxico. Premio Editora. 1978.

Lawrence D. R.
El amante de lady Chatterley. Barcelona. 1978.

Leboyer Frdrick.
Shantala. Buenos Aires. Hachette. 1978.

Le Guin rsula.
La mano izquierda de la oscuridad. Buenos Aires. Minotauro.
1973.

Leiber F.
Las canciones secretas. Barcelona. 1972.

Machado A.
Antologa. Buenos Aires. 1958.

Ouspensky P.
La extraa vida de Irn Osokim. Mxico. Aresa. 1978.
Un nuevo modelo del universo. Buenos Aires. Kier. 1977.

Revol E.
Poesa inglesa contempornea. Buenos Aires. Librera Fausto.
1974.

Sallinger J.
El cazador oculto. Buenos Aires. Fabril. 1971.
Levantad carpinteros la viga maestra. Buenos Aires. Sudamericana. 1973.
Nuevos Cuentos. Buenos Aires. Sudamericana. 1975.

- 96 -
NDICE

Terapia gestltica.. 09

El "qu es qu'' en gestalt ........................................................................... 11

Herramientas: De las que usa el terapeuta.......................................... 15

Pautas para convivir en un mundo gestltico.................................. .. 28

Quejas: Herramientas del paciente. ................................................ 32

Sueos................................................................................................. 37

Fantasas dirigidas ............................ ................................................. 43

Juegos ................................ 52

El lenguaje del cuerpo.................. . ..................................................... 67

Laboratorio................... ...................... ............ 73

Parejas. ................................................................................................ 82

La psicopata a travs de la lente de la terapia gestltica .................. . 87

Glosario............. 90

Lecturas recomendadas...................................................................................... 94

- 97 -

También podría gustarte