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Revista Logos, Nmero 15, Ao 4, Agosto - Octubre 1999
DE LA VOZ, LA LETRA Y LOS SIGNOS AUDIOVISUALES EN LA TRADICIN
ORAL CONTEMPORNEA EN AMRICA LATINA: ALGUNAS
CONSIDERACIONES SOBRE LA DIMENSION SIGNIFICANTE DE LA
COMUNICACIN ORAL (1)
Por: Margarita Zires
Universidad Autnoma Metropolitana Unidad Xochimilco
A travs de este texto me gustara reflexionar sobre la comunicacin oral en nuestras
sociedades contemporneas en Amrica Latina y sealar algunos aportes de algunas
tendencias antropolgicas y de las disciplinas del lenguaje para su mejor comprensin.
Me planteo las siguientes interrogantes: Qu se entiende por comunicacin oral? A qu
nos referimos cuando decimos oral? Qu se entiende por tradicin y memoria oral? Qu
se entiende por cultura oral? Existen diferentes tipos de oralidad o culturas orales?
Para tratar la primera interrogante me parece importante sealar por qu hablo de
comunicacin oral y no de transmisin oral.
Comunicacin versus transmisin oral
En este punto me gustara polemizar con aquellas tendencias de la antropologa, de la
lingstica y de la teora de la informacin que han reducido la problemtica de la
comunicacin oral al de la transmisin oral. Un acto de comunicacin no se reduce a un
acto de informacin.
Comunicar no consiste solamente en transmitir unilateralmente determinados
conocimientos a un interlocutor o conjunto de interlocutores que antes no los posean. La
comunicacin es algo ms que incluye mltiples tipos de interrelaciones humanas,
mltiples juegos y mltiples reglas. Dichas reglas configuran los diferentes tipos de
interrelaciones, los diferentes tipos de actos comunicativos, las diferentes instancias
comunicativas, el contenido y la forma de lo comunicado (Malinowsky, 1923, Austin, 1962,
Benveniste, 1966, Jakobson, 1963, -entre otros-).
Al comunicar se participa en el establecimiento, en la reproduccin y cuestionamiento de
las reglas que rigen nuestros intercambios (Goffman, 1974).
Estudiar la comunicacin oral implica analizar no slo el contenido, el mensaje o las
diferentes versiones de los relatos (si acaso estos pueden ser reducidos a una entidad
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discreta, dada su constante transformacin), sino las diferentes reglas que rigen el decir, o
sea las reglas que rigen los diferentes intercambios verbales en diferentes contextos y
grupos sociales. Dichas reglas constituyen un conjunto de saberes que rigen la produccin
narrativa. Son ellas la materia que enlaza el cuerpo social.
# "La tradicin de los relatos es al mismo tiempo la de los criterios que defiende
una triple competencia: saber decir, saber escuchar, saber hacer, donde se ponen en juego
las relaciones de comunidad consigo misma y con su entorno. Lo que se transmite con los
relatos es el grupo de reglas pragmticas que constituye el lazo social" (Lyotard, 1984:48).
Tomemos como ejemplo la situacin comunicativa de este texto escrito y comparmosla
con la situacin comunicativa en la que se ley una primera versin de l como ponencia.
No es lo mismo que se lea un texto solo o acompaado a que se le oiga como ponencia. El
conjunto de relaciones que implica leer o interpretar un texto frente a otras personas,
sabindose ms o menos escuchado, visto, registrando una presencia fsica y diferentes
signos que indican una diferente interpretacin de lo que se va diciendo (aprobacin,
desaprobacin o indiferencia), lleva a argumentar que lo que se dice oralmente no tiene que
ver solamente con el contenido de un texto oral, sino con un acto de comunicacin que est
regido por un conjunto de convenciones que determinan lo que se puede decir verbalmente
en un encuentro particular de investigadores en un auditorio y contexto especfico.
Adems la materialidad de la comunicacin es diferente. Un texto escrito o reescrito para
una revista est compuesto por los signos de la escritura: letras, comas, puntos seguidos y
puntos aparte. Se encuentra regido por un conjunto de reglas que establecen la manera
como se debe escribir y componer un texto escrito, por ejemplo con ciertos mrgenes y
enumeracin de pginas, as como por reglas que determinan la manera como se debe citar
y de esa manera incluir las palabras escritas de otros escritores.
El texto de una ponencia al ser ledo frente a otras personas se ve entretejido con los signos
verbales y corporales de los oyentes en el momento de su lectura, lo cual no sucede cuando
se est leyendo.
Ahora bien, conviene aclarar que aunque el acto comunicativo de leer una ponencia es un
acto oral, est configurado tambin por la lgica de la escritura y establece con ella una
simbiosis, an en el caso que la ponencia no se haya escrito de antemano. Las formas
discursivas de una ponencia remiten por una parte a ciertas tcnicas de la escritura, a cierto
tipo de argumentacin, mientras que otras tienen que ver ms bien con su contexto de
enunciacin. A ello se debe el uso del pronombre en segunda persona, as como otras
formas gestuales a travs de las cuales se trata de involucrar al oyente o interlocutor de la
comunicacin oral.
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A manera de ejemplo se puede decir tambin que desde la primera formulacin escrita de
este texto, con una pluma en la mano en un escritorio y despus frente a una computadora
en su segunda versin, se tuvo presente el momento de la lectura y con ello un conjunto de
ideas preconcebidas con respecto a un auditorio imaginario.
Todo esto lleva a replantear la pregunta inicial: qu se entiende por lo oral cuando se habla
de comunicacin oral? Cules son las formas de la comunicacin oral?
La dimensin material de la comunicacin oral
Antes de abordar esta interrogante quisiera invitar a tomar cierta distancia de la lgica de la
escritura que ha configurado la perspectiva de anlisis de todos los fenmenos orales
dejando de lado su forma material y reducindolos a textos escritos, por lo cual la labor del
estudioso de la comunicacin oral se ha visto limitada a transcribir el contenido de lo que se
dice va oral.
Para ello, me parece importante mencionar aqu los estudios del antroplogo
norteamericano Clifford Geertz (1989) sobre la escritura en la antropologa, as como los
trabajos de Michel de Certeau (1978) sobre la etnografa y la historia que permiten entender
como los procedimientos de la escritura de las disciplinas sociales imponen cierta
percepcin al investigador y no contribuyen a comprender la dimensin significante o
material de los fenmenos culturales que se analizan.
Michel de Certeau habla de un proceso de circunscripcin por el cual el investigador parte
de un conjunto de textos escritos antes de analizar el discurso oral para terminar su
investigacin en la elaboracin de un texto escrito. En ese proceso se pierde la materialidad
de la comunicacin oral: su dimensin corporal e intersubjetiva.
La mayora de trabajos sobre la comunicacin oral se han contentado con coleccionar
relatos orales transcribindolos. En algunos casos despus de transcribirlos se les analiza
como cualquier texto escrito de acuerdo con ciertos esquemas disciplinarios lingsticos,
psicolgicos o sociolgicos -entre otros- .
El proceso de transcripcin implica un proceso de adaptacin a las lgicas de la escritura y
de la lectura. La palabra hablada, gesticulada, inserta en un cuerpo en movimiento y en
interaccin con otros cuerpos se convierte en una palabra escrita gracias a un proceso de
transcripcin, en el que se elimina la voz que remite a una gestualidad y a un lenguaje
corporal. En cuanto al contenido del relato oral ste sufre un proceso de uniformacin. Son
raros los textos sobre relatos orales que reproducen sus mltiples decires, o sea diferentes
transcripciones. En el mejor de los casos se busca una versin que recoja los elementos
comunes de diferentes versiones del relato. Se eliminan las repeticiones caractersticas de
toda narracin oral, as como tonos y pausas. Se incorporan comas, puntos seguidos, puntos
finales, etc. que estructuran lo dicho bajo un ritmo que est relacionado con las diferentes
convenciones de la lectura, aunque stas no reproduzcan la comunicacin oral. Se altera
consecuentemente la dimensin espacio -temporal del fenmeno.
La transcripcin implica domesticar el ritmo, conquistar y detener el tiempo de esa palabra
fluida, en permanente movimiento y transformacin. Se introduce cierta permanencia, as
como se produce un espacio relativamente fijo para analizar ese texto efmero y fludo que
es el texto oral. En este sentido la transcripcin significa tambin traslado. En el proceso de
transcripcin la palabra hablada y gesticulada, transcrita se ve trasladada a un libro, se
convierte tambin en una letra o palabra firmada que lleva el nombre, el sello, o identidad
del recopilador o del analista y de la editorial. La voz annima, colectiva, considerada sin
legitimidad en sociedades en donde el texto escrito goza de mayor prestigio, adquiere otra
identidad. Se introduce en el campo de los decires autorizados, oficiales, dentro de las
instituciones acadmicas. Se convierte en un corpus legtimo que lleva la marca de un
sujeto dado, que pertenece a un gremio de especialistas, lo cual lo convierte en "un material
analizable", "legible" en el campo de las disciplinas cientficas. Evidentemente no toda
palabra firmada goza del mismo prestigio. Esto depende del recopilador o del que le haya
puesto su nombre. No es lo mismo que algn mito oral aparezca en un libro de Lvi-Strauss
o de un recopilador desconocido en el ambiente acadmico, pero reconocido por la gente de
la comunidad a la que pertenece el mito recolectado.
Del texto a la interaccin -comunicacin cara a caraCon el fin de recrear las formas de la comunicacin oral, su dimensin significante (que
toma en cuenta la dimensin material o rasgos especficos de los signos, as como las
convenciones sociales y lgicas de los lenguajes que participan en su funcionamiento) se
considera relevante retomar algunos de los aportes de la etnologa del habla, de la
microsociologa de Goffman, as como de Paul Zumthor sobre la cultura oral en el
medioevo. Se escribe "recrear" porque se considera que slo se poseen indicios de esta
dimensin, hasta ahora no trabajada y adems muy difcil de asir.
En un intento por alejarse de una perspectiva centrada en la escritura en este trabajo se
subraya que escribir acerca de la oralidad no significa sealar solamente la ausencia de una
escritura y pensar en trminos abstractos sus caractersticas, sino reflexionar en trminos
concretos sus materias significantes y su compleja interaccin.
La comunicacin oral no se reduce a un contenido de informacin, ni a un conjunto de
palabras o signos verbales. Se nutre de otros signos paralingsticos como los tonos de las
voces, su volumen, las pausas. El lenguaje verbal siempre est ligado al lenguaje corporal.
Los signos vocales no se pueden ver aislados de otro conjunto de signos y materias
heterogneas de significacin, de los gestos, miradas, gesticulaciones, los cuales interactan
y participan en la comunicacin oral. Esto lleva a tomar en cuenta la dimensin espacio
-temporal de dicha comunicacin y particularmente la presencia fsica de los interlocutores
como caracterstica de la comunicacin verbal.
Mientras que el texto escrito implica un tiempo de produccin y un tiempo de lectura, o sea
se caracteriza por un tiempo diferido entre la produccin y la lectura, el texto oral lleva
consigo la simultaneidad de la presencia de los sujetos que intervienen en la comunicacin.
Mientras que el texto escrito exige ser ledo linealmente o secuencialmente, el texto oral
implica muchos niveles de percepcin simultneos.
Mientras que el texto escrito se caracteriza por la ausencia fsica del lector en el momento
de su produccin y la ausencia fsica del escritor en el momento de su lectura, la
comunicacin oral es comunicacin "en presencia fsica". El trmino de "comunicacin
cara a cara" alude precisamente a esta modalidad de la comunicacin y la compara con
otras formas comunicativas que no implican esa presencia fsica como son no slo la
escrita, sino aquellas en las que intervienen las tecnologas modernas de la comunicacin
(radio, televisin, cine).
Mientras que el trmino oral remite solamente a la boca y deriva del trmino latn "oris"
que significa boca y se usa normalmente para calificar un tipo de transmisin, el trmino
cara a cara remite a una interaccin cuerpo a cuerpo y a una accin entre los cuerpos:
juegos de miradas, movimientos, gestos, gesticulaciones. Por lo tanto una interaccin que
involucra todos los sentidos.
El texto de la comunicacin oral, de la comunicacin en presencia fsica de varios
interlocutores es el resultado del interjuego de lo dicho y lo entre-lo-dicho (del juego que se
construyen entre las caras, entre los cuerpos en el momento de hablar). En este sentido el
trmino texto no remite al discurso escrito, sino a un tejido, a una red, de mltiples signos
de diferente naturaleza, a una red de mltiples significantes que interactan, a un interjuego
de sentidos que cada significante invoca.
Paul Zumthor, al analizar la literatura medieval, subraya el carcter sensorial de la cultura
oral y la "omnipresencia del cuerpo". Por ello introduce los trminos de vocalidad y
comunicacin vocal en lugar de oralidad y comunicacin oral, trminos que le parecen
sumamente abstractos. La vocalidad permite -segn el- subrayar la historicidad de una voz:
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"La vocalidad es la historicidad de una voz: su empleo. Una larga tradicin de
pensamiento considera y valora la voz en cuanto a que produce el lenguaje, en cuanto a que
en ella y por ella se articulan las sonoridades significantes. Sin embargo lo que ms nos
debe ocupar es la amplia funcin de la voz, cuya palabra constituye la manifestacin ms
evidente, pero no es ni la nica, ni la ms vital, quiero decir, el ejercicio de un poder
psicolgico, su capacidad de producir la fona y de organizar su sustancia" (Zumthor,
1987:21).
De la accin vocal, evento comunicativo y proceso de negociacin en la produccin oral
La voz de la que habla Zumthor, es una voz en acto, en actuacin, que proyecta al cuerpo
en movimiento y que siempre est ntimamente ligada al gesto. Por eso habla del acto
vocal, concepto a travs del cual recoge los aportes de la pragmtica, especialmente a
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Austin (1962) al referirse a los actos de habla. Adems el trmino "acto vocal" y el de
"accin oral-auditiva compleja" le permite subrayar la produccin sonora que implica
hablar.
La etnologa del habla destaca igualmente la accin, o sea el momento de la produccin del
texto oral. Dentro de esta perspectiva se persigue pasar del anlisis de la lengua, de los
estudios gramaticales al estudio de las reglas sociales que rigen el habla y de la distinta
manera de hablar en diferentes contextos culturales. Es de inters "mover el punto de
atencin del contenido de lo narrado, del texto al evento comunicativo" (Hymes, 1971:46).
Frente a otras tendencias semiolgicas o antropolgicas que se contentan con analizar el
contenido o el evento narrado, la etnologa del habla destaca el acontecimiento de narrar.
"El contar es el cuento; de ah que el narrador, su historia y su audiencia estn todos
interrelacionados como componentes de un mismo proceso continuo que es el evento
comunicativo" (Ben Amos, 1971:10)
A travs del trmino "evento" se subraya el acontecimiento singular en el tiempo y espacio
que constituye el acto de la narrar, por lo cual se afirma que el evento narrado est
entretejido por el mismo evento de narrar, lo cual significa que existe una interpenetracin
compleja entre las estructuras discursivas y las estructuras del evento de narrar (Bauman,
1986).
Esto lleva a tomar en cuenta en toda produccin oral mltiples factores situacionales. Entre
stos se mencionan las identidades y roles de los participantes en la comunidad estudiada,
as como las reglas y normas bsicas de su interaccin social.
Desde esta perspectiva, es necesario estudiar cada evento comunicativo verbal dentro del
conjunto de eventos verbales de una comunidad y tomar siempre en cuenta las categoras
particulares de definicin y clasificacin de los sujetos estudiados.
Le confieren importancia al registro de los elementos paralingsticos en la transcripcin de
los textos orales (tono, volumen, pausas, cadencias, ritmos) (Tedlock, 1971).
En esta corriente se utiliza tambin el trmino de actuacin, "performance" y "performance
oriented approach" con el fin de destacar la dimensin teatral y artstica de la produccin
verbal sobre todo en contextos que se caracterizan por poseer una cultura de la escritura con
poco arraigo.
Si bien esta categora es acertada cuando se trata de describir una produccin oral que
implica una dramatizacin (un intrprete y una audiencia), no me parece muy acertada para
describir la comunicacin oral cotidiana.
Vale la pena mencionar en este punto la perspectiva microsociolgica de Erwing Goffman,
estudioso de los rituales de interaccin que rigen los intercambios comunicativos. Este
autor no slo toma en cuenta el lenguaje verbal y el lenguaje no verbal o corporal, sino
adems la dimensin teatral de todo ritual de comunicacin oral.
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Ahora bien, hay dos aspectos que vale la pena distinguir en la concepcin de Goffman: por
un lado, la puesta en escena que implica toda conversacin, en donde los interlocutores
estn jugando un rol social frente a los otros y por otro, la dramatizacin de un texto en el
momento de narrarlo.
Con respecto al primer aspecto, Goffman seala que la comunicacin verbal es un proceso
de negociacin en el que los participantes estn permanentemente definiendo y
redefiniendo la situacin comunicativa (el marco o encuadre de la interaccin, el
"framing"). Para ello establecen conjuntamente de una manera explcita o implcita lo que
est sucediendo, el significado del encuentro. Marcan cuales son los lmites del
comportamiento apropiado. Se otorgan diferentes roles o papeles sociales y definen, por lo
tanto, la estructura de interaccin y las expresiones adecuadas para ese momento.
De acuerdo con Goffman el conflicto es parte constitutiva de este proceso en el que los
participantes luchan por imponer su propia definicin o redefinicin de las situaciones. Por
ello, desarrollan movimientos estratgicos que Goffman define como movidas o jugadas
(moves) tomando la concepcin de Wittgenstein de juegos de lenguaje, con el fin de
destacar las relaciones de fuerza y la dimensin del poder que est implcita en todos los
intercambios comunicativos.
En este sentido consideramos que cada relato oral es el resultado no slo de la suma de
informaciones o relatos que cada interlocutor puede traer en una conversacin, sino del
proceso de negociacin de los roles o papeles sociales a jugar entre los diferentes
interlocutores.
En el otro sentido, lo teatral significa la recreacin de un relato ya vivido por el hablante o
por el sujeto del que habla el hablante para involucrar al interlocutor. En este sentido
Goffman afirma;
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"Parece como si emplesemos nuestro tiempo no tanto en proveer informacin sino
hacer espectculos. Y se observa que esta teatralidad no est basada en la simple
demostracin de sentimientos o exhibiciones fingidas de espontaneidad o cualquier otra
cosa... El paralelismo entre el escenario y la conversacin es mucho ms profundo que esto.
El meollo es que normalmente cuando un individuo dice algo, l no est dicindolo como
una aseveracin de un hecho... el est recontando. Est recorriendo una secuencia de
eventos ya determinados para implicar a la gente que lo escucha". (Goffman, 1974: 508).
Si se aplica esta acepcin de lo teatral para entender la comunicacin oral, se podra decir
que en la construccin de las narraciones orales los distintos interlocutores narran, viven y
reviven, crean y recrean, construyen y reconstruyen dramticamente algn suceso. De la
misma manera se podra aadir que sin necesidad de un escenario el hablante crea una
atmsfera especfica de suspenso a travs de los tonos de la voz, las pausas, miradas, gestos
as como movimientos corporales.
Ahora bien, consideramos que si bien cada situacin de produccin oral implica una puesta
en escena o negociacin de los roles sociales que asumen los distintos interlocutores, no
lleva consigo necesariamente una dramatizacin de lo narrado. Esto ltimo ya es un
producto del proceso de negociacin que juegan los distintos intelocutores y del tipo de
identificacin que se permite asumir en determinado contexto grupal. En este sentido, la
dramatizacin o no dramatizacin es parte de la negociacin, ya que sta implica la
definicin y redefinicin no slo de los signos verbales, las palabras, lo dicho, sino de los
tonos, los gestos, as como su carcter dramtico especfico.
Vale la pena resumir el deslizamiento de unas categoras analticas en otras en el intento de
comprender la dinmica de produccin y transformacin del texto oral (acto, accin,
evento, acontecimiento, negociacin, actuacin, representacin) que permiten contemplar
distintos aspectos de dicha produccin.
Las categoras de "acto de habla" y de "accin" sealan la importancia de estudiar el
contexto de enunciacin de cualquier enunciado, las reglas de interaccin social que
intervienen en su produccin; la categora de "vocal", y "accin oral-auditiva compleja"
subrayan la dimensin material de los mltiples signos y sentidos involucrados; las
categoras de "evento" o "acontecimiento" narrativos permiten poner nfasis en la
interrelacin del evento narrado y los mltiples factores sociales que intervienen en la
produccin narrativa oral, en el evento comunicativo, en el evento de narrar; la categora de
"negociacin" destaca el proceso permanente de redefinicin de los roles y encuadre de la
interaccin oral, su dimensin del poder; y las categoras de actuacin y performance
permiten tomar en cuenta los elementos teatrales en la produccin narrativa oral.
Otro tipo de desplazamiento terico se produce cuando se pasa del estudio de enunciados
aislados en los actos de habla (en la pragmtica) al anlisis de todo un texto y conjunto de
textos narrativos en los estudios de la etnologa del habla (Hymes, 1962, 1964).
Pasemos a la siguiente interrogante: qu es la tradicin y memoria oral?
Tradicin y memoria oral
Me gustara tratar brevemente este tema e invitar a tomar distancia de la mirada nostlgica
que ha impregnado a los estudios de la tradicin oral.
De acuerdo con dicha mirada en la tradicin oral se encuentra la verdadera cultura, la
autntica, el pasado puro de nuestros antepasados que se est perdiendo. Desde esa
concepcin ahistrica el pasado se concibe como hecho acabado, concluido.
La tradicin oral no es un pasado estancado, a la espera de que el folklorista la rescate. Ella
vive y se transforma permanentemente.
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Paul Zumthor, estudioso de la cultura oral en la Edad Media y que realiz un trabajo
sumamente sugerente sobre la interrelacin entre la voz y la letra plantea que la tradicin es
"la serie abierta, indefinidamente extensa en el espacio y en el tiempo de las
manifestaciones variables de un arquetipo". El arquetipo a su vez no es concebido como un
modelo esttico, dado que "designa un conjunto de las virtualidades preexistentes a toda
produccin textual" (Zumthor, 1987: 174).
La tradicin combina la reproduccin y la mutacin. La variabilidad de la tradicin oral es
actualizacin y creacin continua mnmica. La memoria tanto colectiva como individual a
la que se refiere es una memoria tambin activa que revela un funcionamiento cambiante y
creador. En ese sentido el pasado no es esttico, est siempre en permanente reelaboracin.
En el momento de produccin y transformacin de las narraciones orales se ve actualizada
la tradicin y la memoria colectiva en un evento irrepetible que est configurado por el
entorno fsico, por la situacin discursiva y por unas circunstancias que sitan el texto oral
en el espacio y el tiempo. El relato oral y sus diferentes versiones existen en el tiempo y en
el espacio. El tiempo de una versin de un relato oral implica tanto la duracin de un evento
de produccin del relato como el tiempo social o contexto histrico en el que se integra.
La tradicin oral est en permanente transformacin. Es ms aunque a veces esa tradicin
posea formas escritas, no cesa de existir oralmente. Cada actualizacin de la tradicin por el
hecho de ocurrir en un da especial, en una hora y en un lugar especfico estando
participando ciertos sujetos, le incorpora a la tradicin una nueva pertinencia, le adjudica
una capacidad de movilizacin en discursos nuevos.
Ahora bien, falta ver cmo la tradicin oral adquiere caractersticas especficas y funciona
de diferentes maneras de acuerdo con su diferente vnculo con distintas tecnologas
comunicativas.
Diferentes culturas orales en Amrica Latina
Se entiende por culturas orales por un lado los rituales de interaccin verbal y por otro, los
textos que circulan va oral en un contexto histrico determinado.
Considero que todo intercambio social, toda comunicacin y por lo tanto toda oralidad,
incluso aquella que algunos autores conciben como primaria (Ong, 1982) est estructurada
por pautas culturales especficas y por formas particulares de produccin y transmisin del
saber.
En este sentido, no creo que pueda haber una oralidad no configurada por convenciones
sociales. La lengua ya es un producto de la cultura, un "medium", en el sentido de una
forma que estructura los intercambios verbales.
Parto de la idea de que hay diferentes oralidades o diferentes culturas orales segn las
pautas culturales que rigen los procesos de comunicacin verbales en los contextos en los
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que se producen y de acuerdo con la manera como dichos procesos estn marcados por los
diferentes lenguajes y tecnologas. Esto ltimo lleva a hablar de una oralidad ms o menos
configurada por la escritura, la radio, la televisin -entre otros-, as como por la interaccin
de las mltiples convenciones que rigen a estos lenguajes.
Las sociedades latinoamericanas estn sufriendo un creciente proceso de urbanizacin. El
papel de las modernas tecnologas comunicativas y de la escritura es cada vez mayor, lo
cual interviene en la transformacin de las culturas orales en nuestros pases.
Dentro de estas tecnologas se ven incluidas todas aquellas que han transformado las
condiciones de obtencin, produccin, conservacin, circulacin, reproduccin y
transformacin del saber. Entre stas se tienen en mente sobre todo a las computadoras y a
aquellas que se emplean para la produccin de mensajes (radio, televisin, cine), para su
circulacin masiva (satlites, cable, antena parablica) y para su reproduccin
(fotocopiadoras, videocaseteras, videojuegos).
Actualmente el antroplogo, el lingista, el comuniclogo que pretende estudiar la
tradicin oral debe preguntarse si es solamente oral o si no es el producto de una simbiosis
con formas escritas, radiofnicas o audiovisuales. Un ejemplo de ello es la leyenda de La
Llorona en Mxico que se supone que tiene races prehispnicas en el mito de la Cihuacatl
y que en el tiempo de la Colonia cobra una versin ms parecida a las formas actuales, la
cual queda plasmada en forma escrita. Actualmente se asiste a la reproduccin y
transformacin de esta leyenda en mltiples formas escritas, en historieta, como obra de
teatro, en versin cinematogrfica y no por ello ha dejado de circular oralmente. Lo que s
se puede afirmar es que debido a su diferente naturaleza material y a que participa de otro
mundo significante debe de estar sujeta a otras interpretaciones. No por ello se ha
convertido en un tema poco interesante para el estudioso de la comunicacin oral, ni mucho
menos.
En este contexto hay que aadir que estudiar las narraciones orales de los sujetos hablantes
permite abordar los procesos de elaboracin de las diferentes tradiciones orales, as como
los procesos de interpretacin de los discursos provenientes de las tecnologas modernas
comunicativas. Estos ltimos no terminan en el momento de la recepcin, en casa. Los
itinerarios, tiempos, resignificaciones de los mensajes que ponen en circulacin las
tecnologas comunicativas son mltiples e impredecibles. La elaboracin que los grupos y
colectividades hacen de ellos estimulan frecuentemente procesos de comunicacin orales y
locales, en donde la interpretacin de dichos mensajes ponen en juego y a funcionar otro
conjunto de narraciones y esquemas hermenuticos de culturas locales que merecen
atencin.
Al final de este recorrido se invita a hablar ms que de la oralidad que es una categora
abstracta, de la voz y la palabra hablada, gesticulada, dramatizada. Se invita a indagar el
cuerpo actual de la tradicin actual, en donde la voz se interrelaciona con la letra, la letra
con la voz y ambos con los signos audiovisuales provenientes de las nuevas tecnologas, los
cuales, a su vez, son resignificados nuevamente por los sujetos sociales en las interacciones
vocales.
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Se invita a dejar de pensar nostlgicamente en los relatos de los abuelos que se pierden para
reflexionar sobre la manera como los sujetos latinoamericanos continan reelaborando
oralmente las tradiciones orales de antes con las tradiciones escritas y los discursos
audiovisuales contemporneos a partir de los conflictos polticos y culturales del presente.
Nota
1Una primera versin de este texto fue presentado como ponencia en el I Taller
Internacional de Comunicacin y Oralidad en la Universidad Central de las Villas, Santa
Clara, Cuba, julio de 1992.
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Regreso al ndice de esta edicin