Crnicas de la oculta Charcas
Por bolivia - Enviado el Junio 2nd, 2008
Mxico, 01 junio (Por Coco Manto, a William Ernesto Centellas, en su exilio mental / ABI).
Uj.- El presidente Antonio Jos de Sucre y Alcal ha decidido renunciar a su cargo y
marcharse de Bolivia. Ya no quiere vivir un da ms en la capital que lleva su nombre,
donde es agredido a balazos, pedradas e insultos.
"Este es Sucre, carajo! A este Sucre no se respeta, carajo!", le seala la turbamulta
callejera cuando el Gran Mariscal camina ese 18 de abril de 1828 hacia el cuartel para
dialogar con los que se amotinaron en su contra.
En el trayecto, calle real de la amargura, un balazo le parte el antebrazo izquierdo. Jos
Antonio ve manar la sangre a borbotones y bendice la herida porque sabe que esa bala
iba apuntada al corazn. Ha de irse del gobierno y as se consumar el primer Golpe de
Estado en Bolivia.
"Fuera de aqu, carajo, esto no es su campo!", chilla la gente azuzada por el cvico
Olaeta, master en hipocresa, envidioso enemigo de Sucre.
Casimiro Olaeta, el doble cara: Hola! de frente y eta! por detrs.
Desolado, traicionado, el soldado poeta que asumiera la Presidencia a pedido de su jefe
Bolvar, envuelve sus utopas en la petaca de su dignidad y antes de irse escribe en mayo
su testamento patrio que hoy nadie lee y menos acata.
El hroe de cien batallas libertarias se va al amanecer escoltado por su soledad y dos
oficiales. El populacho lo mira desde las sombras con miserable gozo.
En sus odos retumban los insultos conminatorios de esos ltimos 19 das: "Fuera de
aqu, zambo maldito! Esto es Sucre, carajo, y Sucre se respeta!".
Antonio Jos sonre irnicamente por la paradoja interinstitucional: Sucre sale de Sucre y
su nombre se queda en Sucre
Ya morir luego a balazos, en una encrucijada colombiana, y unos arrieros hallarn su
cuerpo 3 das despus avisados por los buitres y alckamaris separatistas, que separan las
vsceras para darse un atracn.
Iscay.- A la que le va a ir requetemal en Sucre es a Juana Azurduy, la guerrillera. Le
ordenaron callar y la escupieron el sbado 6 de agosto, cuando Bolvar y Sucre estaban
fundando la Repblica y ella se puso a gritar pestes desde la calle contra Olaeta y otros
solemnes pasa-pasas colonialistas que ya eran el Congreso siendo que apenas una
semana antes estaban combatiendo contra ella y su ejrcito de indios libertarios.
Y cmo no iba a protestar si los que ya vestan tongos y levitas de honorables diputados
de Podemos eran puros doctorcitos altoperuanos y ex tablacasacas serviles de
Goyeneche y el maldito "aguilucho" Aguilera, que mat a su marido Manuel Ascencio.
La naciente Bolivia no se acord ms de la Azurduy ni de sus proezas independentistas.
Nadie musit ni medio padrenuestro por la muerte de sus cuatro hijos en la guerra de
guerrillas, incluida la pequea Julia, a la que cuidaba el poeta indio Juan Huallparrimachi,
lugarteniente de aquella luminosa seora viuda de Padilla, nuestra verdadera madre
patria.
Huallparrimachi muri combatiendo en el cerro de Carretas a los 21 aos. Lindo destino
del indio, porque si llegaba vivo a La Plata tal vez le habran quitado la camisa y obligado
a hincarse y pedir perdn ante cualquier cachafaz revestido de cvico.
Pobre doa Juana. La Colonia le quit juventud, familia y hacienda y la Repblica le quit
el saludo y la palabra.
La herona sobrevivi al desdn parroquial con una mezquina pensin cuyo pago le
escatimaban cada mes y muri en una msera casa del extramuro a los 84 aos de edad,
casualmente el 25 de mayo de 1863, a la hora en que en la Catedral se oficiaba el Te
Deum previo al desfile interinstitucional por el aniversario del Grito.
Un cura y dos indios jalkas, que eran todo el cortejo fnebre, dejaron el cuerpo de la
guerrillera en la fosa comn de un panten cenizal de la periferia. Cuando los cvicos nos
digan qu hicieron con doa Juana (y con Sucre) tal vez tenga sentido eso de la
capitalidad plena.
Quinsa.- Por haberse aplazado en el examen de derechos humanos y democracia el
sbado 24 de mayo, la ciudad cuna de mis padres ya se gan otro apodo: Capital del Ku
Klux Klan.
No es para tanto. No es clan, sino clon. Clon de cucus, cucusclon. La dignidad vecinal de
la mayora sucresa no puede sufrir mella por los excesos de unos badulaques (ms
laques que badus) monitoreados por los cvicos de Anta Cru y Choqueysaca.
Hay hechos de fresco recuerdo. Para impedir las reuniones de la Asamblea Constituyente,
durante todo el 2007 los fascistas sucreos se valieron del boicot y la trampa.
Insultos, escupitajos, apedreaduras, persecuciones callejeras, pateaduras, quema o
allanamiento de hotelitos y casas en que se alojaban los constituyentes. "Fuera de Sucre,
carajo!" "Aqu no queremos a estos indios de mierda!"
Unos sucretinos (que no sucrenses) se ponan polleras y enaguas para ridiculizar a Silvia
Lazarte y las cholas e indgenas del magno encargo republicano.
"Somos sucrenses, carajo, y nadies no nos derrota", segn se oye chillar a un vstago de
chola, sin duda, en uno de los 15 videos grabados ese da de la vergenza y que el
mundo est mirando ahora en you tube.
En la hora ms crtica, los constituyentes se trasladaron a la Glorieta para culminar su
trabajo democrtico. All se alz de nuevo el cerco cvico con su caudal de amagos de
muerte y cantaletas xenofbicas: "Aqu no queremos indios. Esta es la culta Charcas,
carajo. Fuera los ttaras!".
Los sedicentes universitarios no saben, no van a saber, que la primera facultad
acadmica que se habilit en esa ciudad fue la de quechua.
En 1580 la Audiencia de Charcas pidi al Rey de Espaa la creacin de un centro de
estudios superiores y, en 1591, la Corona encarg a los jesuitas instituir la Ctedra de
Quechua.
La fundacin de la Universidad de Chuquisaca ocurri en 1624, o sea 33 aos despus
de aquella epopeya cultural que nadie recuerda y menos celebra.
Ahora, frente a la indignacin de toda Bolivia y la condena internacional contra la
humillacin infligida a los mrtires quechuas de Mojocoya, los capitostes cvicos reculan.
El dizque rector pide perdn y propone "Barrn y cuenta nueva". La alcaldesa Ayde Nava
se mea culpea (ay de Nava). Fidel Herrera dice que errar es de humanos (errare Herrera
humanun est). John Cava y cava su tumba moral. Pero todos ellos tienen agarrada del
cullar a doa Sabina para convertirla en su clon de prefecta.
Tawa.- Termino este recuento de vainas racistas con la mencin de un artculo del
sucrense Germn Gutirrez Gantier (GGG) aparecido en "La Razn" el 26 de mayo.
El ex socialista dice al iniciar su lamentable escrito: "Este 25 de mayo nuevamente se
conmemora un nuevo aniversario del Primer Grito libertario que se dio en Sucre en 1809
para toda Amrica Latina".
"Nuevamente un nuevo"? En 1809 esa ciudad ya se llamaba Sucre? El grito fue para
toda Amrica Latina o en Amrica Latina? Jejej?
Esa nota publicada por el peridico del consorcio Prisa (y corre) no dice una palabra del
escarnio sufrido dos das antes por los indios, pero termina con esta sandez: "Y lo que
siga haciendo Morales Ayma en contra de Chuquisaca, no tendr perdn ni olvido."
Gutirrez Gantier es un jerarca chuquisaquez del MNR y en su condicin de gonimientista
tendra que no olvidar los crmenes de lesa patria cometidos por su jefe Goni Snchez de
Escapada, ese homicida s, sin perdn ni olvido.
Pizcka.- Ay, William Ernesto Centellas, hermanito del alma, karapanza de los ms dignos,
disclpame por justificar tu fuga hacia ninguna parte, tu exilio mental, porque no ests
entendiendo ni sufriendo este despapaye moral de la oculta Charcas.
Mejor me pondr a escuchar tu disco Sonata para una Golondrina, pica glosa de tu
ternura en charango. A ver si as trago esta bola de bronca antirracista que bloquea mi
garganta.