Un total de veinticuatro selecciones nacionales afiliadas a FIBA Europa compitieron por el título de campeón europeo, cuyo defensor era la selección de España, campeona de la última edición: Lituania 2011.
El campeonato consta de tres fases: dos fases de grupos y una última de eliminación directa a partir de cuartos de final.
En la primera fase de grupos las 24 selecciones se dividieron en cuatro grupos de 6 selecciones cada una en la que jugaron todos contra todos a una ronda (5 partidos disputados por cada selección. Se clasificaron las 3 primeras selecciones.
En la segunda fase, en el grupo-E, los 3 equipos clasificados del grupo-A se enfrentaron a los 3 clasificados del grupo-B. A estos resultados se les agregaron los obtenidos en los partidos entre dichos equipos clasificados en la primera fase. De idéntica forma se configuró el grupo-F con los 3 equipos clasificados en cada uno de los grupos C y D. Se clasificaron los cuatro primeros equipos de cada uno de estos dos grupos (E y F) para cuartos de final.
Por último, en la tercera fase estos 8 equipos clasificados (4 por cada uno de los dos grupos) se enfrentarán a un solo partido, quedando eliminado el perdedor, según el cuadro que puede verse en dicha sección.
Al acabar cada fase de grupos, en caso de igualdad de puntos entre dos o más selecciones, la FIBA aplicará los siguientes criterios de desempate:
1- Resultados de los partidos disputados entre las selecciones que resulten empatadas.
2- Diferencia entre puntos obtenidos y encajados en dichos partidos.
3- Diferencia entre puntos obtenidos y encajados en la totalidad de los partidos disputados en dicho grupo (incluyendo los resultados de la primera fase que se incorporen a la segunda) entre las selecciones que resulten empatadas.
Los 6 primeros clasificados obtienen las plazas europeas directas para el Mundial 2014, así como España, que es el país anfitrión. Al quedar España entre las seis primeras, el 7º clasificado también obtiene plaza para el Mundial.