El significado De Los Sueños: Para Soñar, #3

Introducción

Sin una mezcla de materia y de energía, sin un cuerpo y su intangible energía vital, la vida terrenal es imposible. Sin embargo, la Historia demuestra que todas las sociedades humanas siempre han preferido de modo exclusivo sea el mundo material o sea el mundo intangible. Hoy en día siguen existiendo dos tipos de sociedades. Unas, llamadas primitivas, han privilegiado la dimensión inmaterial de la existencia y han explorado facultades de la mente necesarias para este objetivo. Las otras han privilegiado el mundo material y excluido lo esencial del mundo invisible. El estudio del sueño, fenómeno universal, no escapó a esta división. Sin embargo, los sueños resultan de un proceso natural que mezcla inextricablemente el mundo material y el mundo inmaterial. De hecho, un sueño es un fenómeno inmaterial que ocurre en un cuerpo (material), lo cual está sumergido en un entorno a la vez concreto (el mundo material) e informativo (el mundo de las ideas, energías, perfumes, etcétera). De todo esto resulta que si queremos entender lo que es un sueño, de qué sirve, y cómo podemos utilizar el fenómeno onírico para mejorar nuestra comprensión de la mente humana, tenemos que considerar los dos aspectos de la vida (material e inmaterial) y sus conexiones. Es lo que hice. Mi investigación sistemática de los enlaces entre los sueños y la realidad (material e inmaterial) de los soñadores me permitió descubrir nuevas perspectivas. Este libro te invita a descubrir los resultados que puedes obtener a través de un estudio más amplio de tu propio proceso onírico. Te da también consejos para que hagas tu propia investigación del proceso onírico. Al leer este libro, vas a tomar conciencia del papel que juega el cuerpo humano en la frontera entre los sueños y la realidad (capítulo 1). Este libro te explica también un método muy eficaz de observar tu propio proceso onírico (capítulo 2) y te muestra los resultados que puedes alcanzar con este método (capítulo 3). Si conduces tu experiencia personal, podrás comprobar, tú mismo, la realidad de ciertos fenómenos que son generalmente considerados como paranormales. Podrás explicarlos de modo racional. El capítulo 4 te explica cómo sacar un mejor partido de los enlaces entre tus sueños y tu realidad, y cómo obtener respuestas a tus preguntas en cualquier campo: salud, trabajo, orientación en tu vida, relaciones con los demás, creatividad artística o científica y desarrollo personal. El último capítulo (capítulo 5) te explica por qué las capacidades que hoy día son consideradas como paranormales son llamadas a desarrollarse de modo natural en toda la humanidad del futuro.

Este libro te invita a hacer tu propia investigación con una mente tan nueva como esto sea posible, es decir, liberada de todas las creencias y de todos los prejuicios sobre los sueños. Todo lo que he escrito en este libro lo puedes comprobar a través de tu propia investigación, utilizando el método que te describo. Este método de observación del proceso onírico permite a todos, incluso a las personas más escépticas, controlar la realidad de facultades inusuales de la mente. Les permite también aprender a desarrollarlas y a abrirse a una nueva filosofía de la mente y de la vida.

Capítulo 1: El cuerpo en la frontera entre el sueño y la realidad

1. Una sabiduría antigua y desconocida sobre el ser humano

Los antiguos sistemas jurídicos son una de las fuentes espirituales (en sentido no religioso) más autenticas y menos explotadas. En las antiguas civilizaciones, la separación moderna entre la economía, el derecho, las ciencias y la religión no existía. Todos estos campos eran integrados en una sabiduría unificada. Es por esto que los antiguos sistemas jurídicos no sólo contienen conocimientos jurídicos sino también conocimientos sobre la naturaleza y sobre el funcionamiento del cuerpo humano. Mientras tenemos tendencia a limitar nuestro horizonte al mundo material, los llamados primitivos que inventaron los sistemas jurídicos arcaicos, además del mundo material, se interesaban también en el mundo inmaterial, y en todo lo que permite conectarlos. Su visión era mucho más global que la nuestra. Hacía aparecer que el cuerpo humano es un enlace fundamental entre el mundo tangible y el mundo intangible. A causa de su visión más integral de la vida, conocían mejor el modo de funcionamiento psíquico del ser humano. Los antiguos romanos, por ejemplo, habían sacado partido de su conocimiento de la mente humana en el campo jurídico. Si el antiguo derecho romano todavía tiene actualidad, es a causa de su filosofía. Esta filosofía constituye su fuerza de atracción. El derecho romano constituye la base de muchos sistemas jurídicos modernos, y todavía se enseña en la facultades de derecho, en los cursos de historia del derecho. Al estudiar el antiguo derecho romano, me vino la idea de estudiar los sueños con una visión del mundo tan larga como la de los llamados primitivos que inventaron un sistema jurídico hasta hoy de gran actualidad y utilidad.

La sabiduría de esta antigua civilización, que se trasluce en sus creaciones jurídicas, me hizo tomar conciencia de que para entender mejor el proceso onírico tenemos que observarlo desde un punto de vista material e inmaterial. Tenemos que considerar el sueño como un fenómeno invisible que ocurre en un cuerpo material. La observación sistemática a través de los sueños, de los enlaces entre el mundo visible e invisible, permite entender mejor el papel esencial que juega el cuerpo humano en el proceso onírico. Permite también sacar un mejor partido de los sueños.

2. El cuerpo: un puente entre lo visible y lo invisible

LOS ANTIGUOS ROMANOS se habían dado cuenta de que el mundo visible y el mundo invisible se compenetran, y esto especialmente en las personas. Habían deducido que podemos actuar directamente sobre las cosas materiales (el cuerpo de las personas incluso), mientras es imposible actuar directamente sobre cosas inmateriales (por ejemplo sobre una promesa o una idea). Para actuar sobre las cosas inmateriales, necesitamos utilizar un medio material, por ejemplo, el cuerpo humano. En otras palabras, los antiguos romanos sabían que necesitamos siempre un instrumento tangible para percibir lo intangible y para influirlo. Esto es una ley fundamental del mundo intangible. Sabían que es posible actuar sobre lo invisible pero no directamente. Por ello, sin entrar en detalles, en el derecho romano existían dos especies de acciones. La actio in Rem era un procedimiento ritual que consistía en pedir al pontífice (juez sacerdotal) actuar sobre las cosas materiales. La actio in Rem era utilizada, por ejemplo, cuando una persona quería recobrar una cosa material que alguien le había robado. La actio in personam era un procedimiento ritual que consistía en pedir al pontífice actuar sobre el cuerpo de las personas a fin de influir a través de estas personas sobre el mundo inmaterial. Por ejemplo, en el caso de una promesa, el juez no tenía ningún poder de acción física y directa sobre la intangible promesa. El único modo de influir sobre el mundo intangible de las promesas era actuar sobre las personas para que ellas cumplan sus promesas, amenazando, por ejemplo, con castigo. En lo que sigue, voy a aplicar esta antigua ley del procedimiento romano al proceso onírico. Como vas a ver, esto permite ampliar considerablemente el campo usual en el que los sueños han siempre sido estudiado. Esto permite alcanzar resultados nuevos. Ahora, voy a explicarte, sacando partido del antiguo derecho romano, el papel fundamental que juega el cuerpo