Sabor y tradición tienen su momento de auge durante el invierno y aunque este 2023 está siendo atípico en cuanto a clima, apenas baja un poco la temperatura las ollas se vuelven protagonistas nuevamente.
Hoy nos sumergiremos en el maravilloso mundo de la cazuela, el guiso, la buseca y otros tesoros culinarios que conforman la comida de olla uruguaya. Acompañanos en este viaje gastronómico mientras descubrimos los ingredientes más tradicionales, las formas de cocción y los secretos para obtener un resultado exquisito.
La clave, sin ninguna duda, es el tiempo, cuanto más tiempo de fuego tenga, mejor resultado obtendremos, sobre todo si incluimos carnes y legumbres. El corte de carne más económico se transforma en un manjar luego de horas en ebullición.
Cazuela:
La cazuela, un clásico de la cocina uruguaya, es una deliciosa combinación de carne, verduras y un caldo lleno de sabor. Para lograr su característica textura y gusto, se cocina lentamente en una olla grande. Los ingredientes más utilizados son carne de res, pollo o cerdo, papas, zanahorias, zapallo, y condimentos como laurel y orégano. La cocción lenta permite que los sabores se fusionen y que la carne se vuelva tierna y jugosa.
Guisos:
Los guisos uruguayos son platos reconfortantes y sabrosos que destacan por su versatilidad. Pueden prepararse con carne de res, pollo, cerdo o una combinación de ellas, y se complementan con una variedad de legumbres y hortalizas. Un ingrediente esencial en muchos guisos uruguayos es el "sofrito," una mezcla de cebolla, ajo, pimiento y tomate que aporta un sabor único. Los guisos se cocinan a fuego lento durante horas, permitiendo que los sabores se concentren y que la carne se vuelva tierna.
Busecas:
Las buseca representa uno de los platos más tradicionales del país. El ingrediente estrella de las busecas es el mondongo. Este ingrediente es cocido a fuego lento junto con garbanzos, verduras y hierbas, resultando en un caldo espeso y sabroso. Las busecas se consideran un plato reconfortante y se sirven principalmente en los días más fríos del año.
Sin duda son mucho mas sabrosos cuando se hacen al fuego de leña durante muchas horas.
Puchero:
Es una opción popular para las reuniones familiares o las celebraciones. Se trata de un plato generoso que incluye carne y verduras, todo cocido en un caldo reconfortante. El tiempo de cocción prolongado es esencial para que todos los sabores se mezclen y den como resultado un puchero sabroso y lleno de nutrientes.
Tiene la particularidad de comerse en 2 tiempo, caldo o sopa por un lado, muchas veces incorporando pequeños fideos y la verdura con la carne por otro, acá hay fundamentalistas del puré mixto que incorpore todas las verduras del puchero.
¿Cuál se consume primero? a gusto de cada familia.
Consejos para lograr los mejores resultados:
- Elegí cortes de carne con un contenido moderado de grasa, ya que esto aportará un sabor más intenso.
- Remojá las legumbres (por ejemplo porotos, lentejas o garbanzos) durante la noche antes de cocinar el guiso para acortar el tiempo de cocción y favorecerá la digestión.
- Añadí las hortalizas más delicadas hacia el final de la cocción para que no se deshagan y conserven su textura.
- No escatimes en tiempo de cocción. La comida de olla mejora con el paso de las horas, ya que los sabores se intensifican y la carne se vuelve más tierna.
- Utilizá ingredientes de temporada porque eso los vuelve mas frescos y de alta calidad para garantizar un sabor auténtico.
- Animate a probar distintos tipos de carnes y verduras para variar tus preparaciones y descubrir nuevas combinaciones de sabores.
- Experimentá con distintas especias y hierbas para realzar el sabor de tus platos.
- Aprovechá la cocción lenta para obtener la textura y la ternura perfecta en tus platos.
- Al otro día recalentá lo que quedó en una olla, no uses el microondas, esto realzará los sabores.